•

El expresidente Donald Trump habló el viernes en un salón del hotel Marriott en Anaheim, sede de la Convención Republicana de California, rodeado de partidarios que ondeaban banderas de Trump y pancartas que decían “nunca te rindas”, muchos de ellos con camisetas con la fotografía policial del expresidente.

Prometiendo ganar California en las elecciones de 2024, un estado que no se ha vuelto republicano desde 1988, Donald Trump afirmó que resolverá la crisis fronteriza dentro de las 24 horas posteriores a asumir el cargo y resolverá la guerra rusa en Ucrania “muy rápido” si gana la postulación republicana en las elecciones primarias y es reelegido presidente.

Trump se quejó de que los ricos de Beverly Hills huelen mal porque se les niega el agua, reiteró mentiras habituales sobre un fraude electoral generalizado y pidió a la policía que dispare a quienes roban tiendas.

Si bien muchos de sus comentarios en la convención del Partido Republicano de California en Anaheim fueron familiares repeticiones de los ataques y agravios de Trump, su estímulo a la represalia violenta contra los delincuentes marcó una escalada de su habitual mensaje de mano dura contra el crimen. El expresidente mantuvo una diatriba de casi dos horas con insultos al presidente Joe Biden, a quien llamó el “peor presidente” y “el más corrupto” que ha tenido el país, y a su rival Ron DeSantis, el siguiente candidato republicano en las encuestas de popularidad.

“Fui yo quien tiñó de rojo Florida”, deslizó el exmandatario al referirse al apoyo que le dio a DeSantis en la elección estatal de 2018.

Trump también hizo un énfasis especial en el cierre de la frontera con México, acusando en múltiples ocasiones al gobierno de Biden y al de los demócratas de “mantenerla abierta”.

“Vamos a tener la operación más grande de deportaciones”, prometió.

El expresidente se burló del gobernador de California, Gavin Newsom, y abordó problemáticas específicas del estado como la sequía, el precio de la gasolina, así como el aumento de las personas sin hogar.

La convención republicana se realiza unos días después del segundo debate republicano en Simi Valley, California, en el que no estuvo presente Trump, quien ha dicho que no participará en los debates por la nominación presidencial.

El miércoles, mientras sus contrincantes debatían cara a cara, Trump prefirió acudir a Detroit para dar un discurso sobre la huelga del sector automovilístico, en el cual de paso atacó a sus adversarios republicanos.

La convención del Partido Republicano en California espera recibir alrededor de 1,000 personas entre votantes y donantes, a los que los candidatos presentarán los planes que tienen para el país.

Otros aspirantes a la Presidencia como el gobernador de Florida Ron DeSantis, el senador de Carolina del Sur Tim Scott y el empresario Vivek Ramaswamy, también participan en el evento. 

California desempeñará un papel fundamental en la lista de estados que votarán el 5 de marzo en las llamadas primarias del Súper Martes.