El dolor y el recuerdo. Eva Sivanto, titular de la Asociación de Grupo de Viudas y Familiares de Policías Federales Caídos en Cumplimiento del Deber, dialoga con PrisioneroEnArgentina.com acerca del agravio al Monumento que evoca la memoria de aquellos que brindaron su vida en servicio de la seguridad del ciudadano. La remembranza de Carlos Alberto, su esposo, está allí, en esa escultura. Esa ofensa no es tal para quienes pretenden desconocer la importancia, el significado del sacrificio de estos hombres, entre ellos el mismo Jefe de Policía Néstor Roncaglia, quién debería haber sido el primero en asistir a personas como Eva. Sin embargo, eligió la comodidad de situarse al lado de los agresores. Políticas de Estado…
El señor Roncaglia un azul, hoy en forma transitoria Jefe de la Policía Federal…lo es hoy, no para siempre. Los muertos que dejaron la vida en pos de una sociedad que olvida prontamente, tenían familia y esas familias unidas no pueden ser dejadas de lado. esas familias son la voz de los azules asesinados.
Liliana Gorno
6 years ago
Nuestras generaciones fallaron en la educción y por eso la jueventud hy lo esta pagando al ser poco menos que salvajes.
He mirado con mucha atención los noticieros y las expresiones de los periodistas cuando relataban este hecho. Noté con gran disgusto de mi parte que ninguno fue capaz de decir “en este monumento se honra la memoria de quienes dieron su vida por la seguridad del prójimo”. Mi pregunta fue ¿por qué no dicen esta afimación indubitable? Mi respuesta fue “porque no pueden”. Por más que expliquen y expliquen el hecho, tienen la cultura tan deteriorada que no son capaces de expresar con simples palabras la profundidad del agravio efectuado por adolescentes tan culturalmente deterriorados como ellos y por supuesto sus padres que no les supieron inculcar conductas ajustadas al respeto por el prójimo.
Este hecho es tan ignominioso como colgarse y bailar en la tumba del General San Martín en la Catedrán, o bailar en el monumento que recuerda a lo muertos de Malvinas en la Plaza San Martín, o festejar en el Valle de los Caidos en España o hacer algo similar en proximidad de las tumbas de la Plaza Roja en Moscú.
No me da verguenza ajena porque ya estoy acostumbrado a la irrespetuosidad argentina, debo decir que este es un síntoma más de la descomposición cultural argentina. En lo personal, me produce repugnancia, rechazo y una profunda tristeza por el solo hecho de saber que no voy a vivir en una argentina mejor sino en una argentina peor. Consciente de ello, sugiero a mis hijos, nietos y otras personas, que busquen un país con futuro para vivir. No me agrada, pero yo amo a mi familia y quiero para ello lo mejor.
DOMINGA PUERTAS ¡Excelente! y totalmente razonable y veraz en sus apreciaciones. Concuerdo plenamente y de allí que nuestro hijo y nieta residan en EEUU. Acá solo es mi prisión y en consecuencia la de mi esposa a quien insisto para que también emigre. Así la estoy arrastrando a la profundidad de la grieta. A la señora EVA SIVANTO y a tantas otras esposas y seres queridos de quienes dieron su vida por servir y proteger a una sociedad que quizás no lo merezca, mi acompañamiento y el de mi familia en el dolor. En especial a MARIEL una hija de otro hombre de azul asesinado en los años de plomo. Se perfectamente por haberlo visto demasiadas veces, que ese dolor no se borra nunca, porque finalizado el sepelio con honores del caído, viene la soledad y hasta el abandono de esas personas cuya vida cambió para siempre. Así se dan casos como el que trata la nota y que en diferente medida se repiten, a pesar de que no tendría que ser así. Con afecto y respeto CLAUDIO KUSSMAN
Miguel A. Inschausti
6 years ago
El (Señor?) Roncaglia debría honrar su uniforme y no salir con la cola entre las piernas como perrito faldero del gobierno.
El dolor y el recuerdo. Eva Sivanto, titular de la Asociación de Grupo de Viudas y Familiares de Policías Federales Caídos en Cumplimiento del Deber, dialoga con PrisioneroEnArgentina.com acerca del agravio al Monumento que evoca la memoria de aquellos que brindaron su vida en servicio de la seguridad del ciudadano. La remembranza de Carlos Alberto, su esposo, está allí, en esa escultura. Esa ofensa no es tal para quienes pretenden desconocer la importancia, el significado del sacrificio de estos hombres, entre ellos el mismo Jefe de Policía Néstor Roncaglia, quién debería haber sido el primero en asistir a personas como Eva. Sin embargo, eligió la comodidad de situarse al lado de los agresores. Políticas de Estado…
PrisioneroEnArgentina.com
Octubre 2, 2018
Tags: Comisario Fabián Perrone, Eva Sivanto, Mariel Fernández SiguenzaRelated Posts
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Y siguen muriendo policias que es lo peor.
Sigan luchando Eva, tienen todo el derecho del mundo.
El señor Roncaglia un azul, hoy en forma transitoria Jefe de la Policía Federal…lo es hoy, no para siempre. Los muertos que dejaron la vida en pos de una sociedad que olvida prontamente, tenían familia y esas familias unidas no pueden ser dejadas de lado. esas familias son la voz de los azules asesinados.
Nuestras generaciones fallaron en la educción y por eso la jueventud hy lo esta pagando al ser poco menos que salvajes.
Ni la minima verguenza, nuestra juventud… caso aislado, ruego
He mirado con mucha atención los noticieros y las expresiones de los periodistas cuando relataban este hecho. Noté con gran disgusto de mi parte que ninguno fue capaz de decir “en este monumento se honra la memoria de quienes dieron su vida por la seguridad del prójimo”. Mi pregunta fue ¿por qué no dicen esta afimación indubitable? Mi respuesta fue “porque no pueden”. Por más que expliquen y expliquen el hecho, tienen la cultura tan deteriorada que no son capaces de expresar con simples palabras la profundidad del agravio efectuado por adolescentes tan culturalmente deterriorados como ellos y por supuesto sus padres que no les supieron inculcar conductas ajustadas al respeto por el prójimo.
Este hecho es tan ignominioso como colgarse y bailar en la tumba del General San Martín en la Catedrán, o bailar en el monumento que recuerda a lo muertos de Malvinas en la Plaza San Martín, o festejar en el Valle de los Caidos en España o hacer algo similar en proximidad de las tumbas de la Plaza Roja en Moscú.
No me da verguenza ajena porque ya estoy acostumbrado a la irrespetuosidad argentina, debo decir que este es un síntoma más de la descomposición cultural argentina. En lo personal, me produce repugnancia, rechazo y una profunda tristeza por el solo hecho de saber que no voy a vivir en una argentina mejor sino en una argentina peor. Consciente de ello, sugiero a mis hijos, nietos y otras personas, que busquen un país con futuro para vivir. No me agrada, pero yo amo a mi familia y quiero para ello lo mejor.
DOMINGA PUERTAS ¡Excelente! y totalmente razonable y veraz en sus apreciaciones. Concuerdo plenamente y de allí que nuestro hijo y nieta residan en EEUU. Acá solo es mi prisión y en consecuencia la de mi esposa a quien insisto para que también emigre. Así la estoy arrastrando a la profundidad de la grieta. A la señora EVA SIVANTO y a tantas otras esposas y seres queridos de quienes dieron su vida por servir y proteger a una sociedad que quizás no lo merezca, mi acompañamiento y el de mi familia en el dolor. En especial a MARIEL una hija de otro hombre de azul asesinado en los años de plomo. Se perfectamente por haberlo visto demasiadas veces, que ese dolor no se borra nunca, porque finalizado el sepelio con honores del caído, viene la soledad y hasta el abandono de esas personas cuya vida cambió para siempre. Así se dan casos como el que trata la nota y que en diferente medida se repiten, a pesar de que no tendría que ser así. Con afecto y respeto CLAUDIO KUSSMAN
El (Señor?) Roncaglia debría honrar su uniforme y no salir con la cola entre las piernas como perrito faldero del gobierno.
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Más ninguneados
Donde interviene la política perdimos.
Que en paz descansen.