Luego del incidente y las falacias tanto de ADRIANA TABOADA como de MONICA GRACIELA FERNANDEZ AVELLO, miembros del atemorizante Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación (para unos sí para otros no) la amenaza del Fiscal Federal PABLO VICENTE FERMENTO de revocar mi excarcelación, no se hizo esperar.
En su escrito del 13 de octubre pasado, contradiciéndose, sostiene que “si bien tengo derecho a expresarme libremente” mi comportamiento se orienta hacia el entorpecimiento de la investigación. Es decir que tengo derecho a expresarme, pero no tengo derecho a hacerlo. Debo preguntarme ¿cómo voy a entorpecer una investigación, si la causa fue elevada a juicio hace más de tres años? ¿Si yo en el año 2011 al tomar conocimiento a través de la publicidad que en los medios de difusión me hacia el militante fiscal ABEL CÓRDOBA involucrándome en una causa de “lesa”, me puse a disposición de la justicia y esperé 3 años a que me vinieran a detener? ¿Cómo da por hecho la denuncia de ADRIANA TABOADA si ella 7 días antes fue una de los CINCO firmantes del informe en donde textualmente consta: “No se detectan signos y/o síntomas de agresividad en el momento del exámen. Su capacidad judicativa se muestra conservada”, refiriéndose a mi persona? Muy sorprendente resulta que el Cuerpo Forense de la Nación, no lleve registros audiovisuales de las entrevistas periciales realizadas, según respondieran a mi abogado defensor GONZALO MIÑO, con fecha 18 de octubre pasado. Debo destacar que, en Argentina, el poder judicial del cual es parte el fiscal FERMENTO, tiene graves problemas “de orden institucional, funcional y cultural– han provocado una grave crisis de legitimidad del Poder Judicial. Según diversos estudios, alrededor del setenta por ciento de los argentinos descree del Poder Judicial. Estos números son más preocupantes respecto de la Corte Suprema, que exhibe un nivel de insatisfacción que ronda el ochenta por ciento, según un estudio de la Universidad de San Andrés. Lo cierto es que el desprestigio de una parte del Poder Judicial se derrama sobre el resto de los magistrados que cumplen adecuadamente sus funciones” Sobre el desprestigio de estos funcionarios, el cual he sufrido en carne propia desde el mismo momento en que 10 años atrás me “engarronaron” (1) con hechos de lesa humanidad, no se limita a lo que yo digo. Lo antedicho en negrita, es un párrafo del artículo “LA CRISIS EN EL PODER JUDICIAL Y LA NECESIDAD DE SU REFORMA” de fecha 27 de julio de 2020, del diario Página12. Solo es uno de los tantos publicados sobre el desprestigio de ese poder, por este matutino que no pertenece a los “medios hegemónicos”.
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El fiscal federal argentino, Pablo Fermento haciendo magia. Esta llamativa foto publicada por el mismo funcionario en Internet, es imposible de obtener de algún par suyo americano. Lógicamente me pareció que la misma no corresponde con su investidura, lo cual me llevó a considerarlo un verdadero “Mago FanFan”.
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Adriana Taboada, licenciada querellante de la Secretaria de Derechos Humanos (para unos sí para otros no).
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Por el contrario, es portavoz de ideologías radicalizadas, tan comunes dentro de los miembros del poder judicial, que los hace grandes enemigos de todo aquel que haya vestido o vista un uniforme. Este fiscal es tan parcial en sus apreciaciones que en sus amenazas dice: “recordar al imputado KUSSMAN las reglas mínimas de conducta y de respeto hacia los auxiliares de la Justicia y todas las partes intervinientes en el proceso. ¿Quiere decir que yo no soy parte del proceso? Debemos recordar, que él y otros como él, no respetaron mis derechos, se pasaron la Constitución, Leyes y Códigos por el trasero y así me hicieron parte de ese proceso. Si su pretensión es callarme no lo va a lograr JAMÁS, mientras la verdad esté de mi lado y quienes mienten y vulneran las leyes sean los miembros del poder judicial o del poder que sea.
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Este es el hoy fiscal macrista, compañero de Fermento, Ulpiano Martínez, ex juez subrogante que me hiciera detener en el año 2014, removido posteriormente de su cargo por irregularidades en su función. Estas y otras fotos fueron subidas a Internet por él mismo. ¿Esta es la “Justicia” que hay que respetar en Argentina?
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Abogada Monica Graciela Fernández Avello, querellante de la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación (para unos sí, para otros no)
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Quizás FERMENTO, dolosamente tome esto como una amenaza o una inconducta que merece la cárcel, pero en realidad solo son manifestaciones de impotencia ante tanta iniquidad y pretendida censura. Por otra parte, sostiene que lo mío son manifestaciones descalificativas en mi blog personal de Internet. Debo aclarar que a lo que él le dice “manifestaciones descalificativas”, en realidad son hechos delictuales, de acción pública que yo señalo puntualmente, y que, si él actuara en forma imparcial cumpliendo con la ley, tendría que investigar. Remarco también que no tengo ningún blog personal, soy el director del Portal de Noticias www.PrisioneroEnArgentina.com (1.200.000 visitas diarias) con asiento en el estado de la Florida y todo lo que allí se publica cumple con las leyes, requisitos y regulaciones establecidas por la Justicia Federal de los Estados Unidos, bajo cuya jurisdicción se encuentra el mismo. Desde ya, yo estoy prisionero en el territorio de los semidioses y semidiosas de la “memoria, verdad y justicia” y entonces todo es posible ya que, en Argentina, NUNCA SERÁ JUSTICIA.
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Luego del incidente y las falacias tanto de ADRIANA TABOADA como de MONICA GRACIELA FERNANDEZ AVELLO, miembros del atemorizante Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación (para unos sí para otros no) la amenaza del Fiscal Federal PABLO VICENTE FERMENTO de revocar mi excarcelación, no se hizo esperar.
En su escrito del 13 de octubre pasado, contradiciéndose, sostiene que “si bien tengo derecho a expresarme libremente” mi comportamiento se orienta hacia el entorpecimiento de la investigación. Es decir que tengo derecho a expresarme, pero no tengo derecho a hacerlo. Debo preguntarme ¿cómo voy a entorpecer una investigación, si la causa fue elevada a juicio hace más de tres años? ¿Si yo en el año 2011 al tomar conocimiento a través de la publicidad que en los medios de difusión me hacia el militante fiscal ABEL CÓRDOBA involucrándome en una causa de “lesa”, me puse a disposición de la justicia y esperé 3 años a que me vinieran a detener? ¿Cómo da por hecho la denuncia de ADRIANA TABOADA si ella 7 días antes fue una de los CINCO firmantes del informe en donde textualmente consta: “No se detectan signos y/o síntomas de agresividad en el momento del exámen. Su capacidad judicativa se muestra conservada”, refiriéndose a mi persona? Muy sorprendente resulta que el Cuerpo Forense de la Nación, no lleve registros audiovisuales de las entrevistas periciales realizadas, según respondieran a mi abogado defensor GONZALO MIÑO, con fecha 18 de octubre pasado. Debo destacar que, en Argentina, el poder judicial del cual es parte el fiscal FERMENTO, tiene graves problemas “de orden institucional, funcional y cultural– han provocado una grave crisis de legitimidad del Poder Judicial. Según diversos estudios, alrededor del setenta por ciento de los argentinos descree del Poder Judicial. Estos números son más preocupantes respecto de la Corte Suprema, que exhibe un nivel de insatisfacción que ronda el ochenta por ciento, según un estudio de la Universidad de San Andrés. Lo cierto es que el desprestigio de una parte del Poder Judicial se derrama sobre el resto de los magistrados que cumplen adecuadamente sus funciones” Sobre el desprestigio de estos funcionarios, el cual he sufrido en carne propia desde el mismo momento en que 10 años atrás me “engarronaron” (1) con hechos de lesa humanidad, no se limita a lo que yo digo. Lo antedicho en negrita, es un párrafo del artículo “LA CRISIS EN EL PODER JUDICIAL Y LA NECESIDAD DE SU REFORMA” de fecha 27 de julio de 2020, del diario Página12. Solo es uno de los tantos publicados sobre el desprestigio de ese poder, por este matutino que no pertenece a los “medios hegemónicos”.
[ezcol_1half]Por el contrario, es portavoz de ideologías radicalizadas, tan comunes dentro de los miembros del poder judicial, que los hace grandes enemigos de todo aquel que haya vestido o vista un uniforme. Este fiscal es tan parcial en sus apreciaciones que en sus amenazas dice: “recordar al imputado KUSSMAN las reglas mínimas de conducta y de respeto hacia los auxiliares de la Justicia y todas las partes intervinientes en el proceso. ¿Quiere decir que yo no soy parte del proceso? Debemos recordar, que él y otros como él, no respetaron mis derechos, se pasaron la Constitución, Leyes y Códigos por el trasero y así me hicieron parte de ese proceso. Si su pretensión es callarme no lo va a lograr JAMÁS, mientras la verdad esté de mi lado y quienes mienten y vulneran las leyes sean los miembros del poder judicial o del poder que sea.
[ezcol_1half]Quizás FERMENTO, dolosamente tome esto como una amenaza o una inconducta que merece la cárcel, pero en realidad solo son manifestaciones de impotencia ante tanta iniquidad y pretendida censura. Por otra parte, sostiene que lo mío son manifestaciones descalificativas en mi blog personal de Internet. Debo aclarar que a lo que él le dice “manifestaciones descalificativas”, en realidad son hechos delictuales, de acción pública que yo señalo puntualmente, y que, si él actuara en forma imparcial cumpliendo con la ley, tendría que investigar. Remarco también que no tengo ningún blog personal, soy el director del Portal de Noticias www.PrisioneroEnArgentina.com (1.200.000 visitas diarias) con asiento en el estado de la Florida y todo lo que allí se publica cumple con las leyes, requisitos y regulaciones establecidas por la Justicia Federal de los Estados Unidos, bajo cuya jurisdicción se encuentra el mismo. Desde ya, yo estoy prisionero en el territorio de los semidioses y semidiosas de la “memoria, verdad y justicia” y entonces todo es posible ya que, en Argentina, NUNCA SERÁ JUSTICIA.
Claudio Kussman
Comisario Mayor (R)
Policía Pcia. Buenos Aires
claudio@PrisioneroEnArgentina.com
www.PrisioneroEnArgentina.com
(1) ENGARRONAR: en la jerga carcelaria, adjudicar falsamente un hecho delictivo a un individuo.
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“Dadme dos líneas escritas de su puño y letra por el hombre más honrado y encontraré en ellas motivo suficiente para hacerlo encarcelar”
Cardenal Richelieu (1585-1642)
PrisioneroEnArgentina.com
Octubre 27, 2021