Se advirtió a los australianos que se enfrentan a la “crisis más grave” en la pandemia de COVID desde febrero / marzo pasado mientras los funcionarios de salud luchan por contener nuevos brotes del virus.
El comité COVID-19 de Australia debe celebrar una reunión de emergencia el lunes sobre el aumento del número de casos y los brotes de la variante Delta en todo el país.
Las autoridades de Nueva Gales del Sur advierten que las infecciones por coronavirus aumentarán “considerablemente” después de que el estado registrara 18 nuevos casos de virus transmitidos localmente.
Se impuso un bloqueo de dos semanas en la capital del estado, Sydney, después de que un grupo de casos de la variante Delta aumentara a tres cifras.
“Tenemos que estar preparados para que los números reboten y también tenemos que estar preparados para que los números suban considerablemente”, dijo la premier de Nueva Gales del Sur, Gladys Berejiklian.
El asesor de políticas de salud Bill Bowtell advirtió: “Realmente enfrentamos la crisis más grave en la pandemia de COVID desde los primeros días de febrero-marzo del año pasado”.
La ciudad norteña de Darwin entró en un cierre de dos días después de que un trabajador de una mina de oro dio positivo por la variante, identificada por primera vez en India.
Se sospecha que se infectaron mientras estaban en cuarentena en un hotel en Brisbane, en el estado de Queensland, antes de volar a una mina de oro en el Territorio del Norte.
Las autoridades ahora están tratando de localizar a 900 trabajadores mineros en todo el país que podrían haber sido infectados por el caso inicial.
Alrededor de 18 millones de australianos, o alrededor del 70% de la población, se encuentran ahora bajo algún tipo de bloqueo o restricciones mientras los funcionarios lidian con el aumento de las infecciones por COVID-19 en casi todos los estados o territorios.
“Creo que estamos entrando en una nueva fase de esta pandemia, con la cepa Delta más contagiosa”, dijo el tesorero federal Josh Frydenberg a Australian Broadcasting Corp.
Dijo que el país se enfrenta a un “momento crítico” en su lucha contra el COVID-19.
Las máscaras faciales obligatorias se han reintroducido en Queensland y se han impuesto restricciones a las reuniones en el hogar en áreas como la capital del estado, Brisbane.
Esto sigue a una acción similar de los funcionarios de Australia Occidental para la capital del estado, Perth, después de que un residente dio positivo luego de un viaje a Sydney hace más de una semana.
Las restricciones también permanecen en la capital del país, Canberra, así como en la capital del estado de Victoria, Melbourne.
El estado de Australia Meridional ha anunciado nuevas restricciones estatales a partir del martes, como el uso de máscaras, límites a las reuniones privadas, incluidas bodas y funerales, y nuevas reglas de distanciamiento social en pubs y clubes.
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Se advirtió a los australianos que se enfrentan a la “crisis más grave” en la pandemia de COVID desde febrero / marzo pasado mientras los funcionarios de salud luchan por contener nuevos brotes del virus.
El comité COVID-19 de Australia debe celebrar una reunión de emergencia el lunes sobre el aumento del número de casos y los brotes de la variante Delta en todo el país.
Se impuso un bloqueo de dos semanas en la capital del estado, Sydney, después de que un grupo de casos de la variante Delta aumentara a tres cifras.
“Tenemos que estar preparados para que los números reboten y también tenemos que estar preparados para que los números suban considerablemente”, dijo la premier de Nueva Gales del Sur, Gladys Berejiklian.
El asesor de políticas de salud Bill Bowtell advirtió: “Realmente enfrentamos la crisis más grave en la pandemia de COVID desde los primeros días de febrero-marzo del año pasado”.
La ciudad norteña de Darwin entró en un cierre de dos días después de que un trabajador de una mina de oro dio positivo por la variante, identificada por primera vez en India.
Se sospecha que se infectaron mientras estaban en cuarentena en un hotel en Brisbane, en el estado de Queensland, antes de volar a una mina de oro en el Territorio del Norte.
Las autoridades ahora están tratando de localizar a 900 trabajadores mineros en todo el país que podrían haber sido infectados por el caso inicial.
Alrededor de 18 millones de australianos, o alrededor del 70% de la población, se encuentran ahora bajo algún tipo de bloqueo o restricciones mientras los
funcionarios lidian con el aumento de las infecciones por COVID-19 en casi todos los estados o territorios.
“Creo que estamos entrando en una nueva fase de esta pandemia, con la cepa Delta más contagiosa”, dijo el tesorero federal Josh Frydenberg a Australian Broadcasting Corp.
Dijo que el país se enfrenta a un “momento crítico” en su lucha contra el COVID-19.
Las máscaras faciales obligatorias se han reintroducido en Queensland y se han impuesto restricciones a las reuniones en el hogar en áreas como la capital del estado, Brisbane.
Esto sigue a una acción similar de los funcionarios de Australia Occidental para la capital del estado, Perth, después de que un residente dio positivo luego de un viaje a Sydney hace más de una semana.
Las restricciones también permanecen en la capital del país, Canberra, así como en la capital del estado de Victoria, Melbourne.
El estado de Australia Meridional ha anunciado nuevas restricciones estatales a partir del martes, como el uso de máscaras, límites a las reuniones privadas, incluidas bodas y funerales, y nuevas reglas de distanciamiento social en pubs y clubes.
PrisioneroEnArgentina.com
Junio 29, 2021