El presidente de la República convoca a Mario Draghi, expresidente del Banco Central Europeo, a mediodía de este miércoles, para encargarle la formación de gobierno. Sergio Mattarella, ha hecho un dramático llamamiento a las fuerzas políticas apoyen a “un gobierno de alto perfil” para superar los graves retos que tiene el país, la pandemia y la crisis económica. Tras el fracaso del mandato exploratorio al presidente del Congreso de los diputados, para ver si había una mayoría parlamentario, Mattarella dijo en la noche del martes que descartaba las elecciones anticipadas, porque “con el voto anticipado se corre el riesgo de que aumenten los contagios del Covid”, En consecuencia, Mattarella destacó que “en la emergencia sirve un gobierno en plenas funciones, no político”.
El presidente de la República, Sergio Mattarella, dio el pasado viernes al presidente del Congreso, Roberto Fico, del Movimiento 5 Estrellas, un mandato exploratorio para que consultara extensivaente con las fuerzas de la mayoría (M5E, Partido Democrático y Libres e Iguales), además de Italia Viva.
DraghiMattarellaRenzi
Desde entonces se ha negociado sobre un programa para establecer un pacto de legislatura, como pidió Matteo Renzi. Pero Roberto Fico, tras su mandato exploratorio, se ha presentado en la noche del martes al Quirinal con las manos vacías. Su exploración fracasó. Así lo ha referido el presidente de la República en reunión que continuaba al cierre de esta edición. Todo queda en manos de Sergio Mattarella.
Se consumó, por tanto, la ruptura entre Italia Viva de Renzi y los partidos de la mayoría. Las consultas acabaron de la peor forma posible, con ataques políticos y acusaciones mutuas, en medio de un caos y confusión total de las fuerzas de la actual mayoría gubernamental. No ha sido ejemplarizante el espectáculo que está dando la clase política ante un país que no entiende la crisis y que sus prioridades son la pandemia y la crisis económica, según todas las encuestas.
Italia Viva pidió al inicio de las consultas que se discutiera sobre el programa para escribir un documento con un pacto de legislatura. Se acabó en guerrilla política. Italia Viva ni siquiera ha firmado el acta final. La discusión sobre un programa ha ocultado otro tema clave de las consultas: el reparto de ministerios y otros puestos importantes de la administración. En este terreno ha sido muy dura la batalla entre los partidos. El M5E se ha negado en rotundo a ceder a las presiones de Renzi que deseaba una discontinuidad con la etapa anterior del gobierno, en programa y nombres, y en consecuencia pedía la destitución de los ministros de Educación y de Justicia, miembros del M5E, y de Arcuri como comisario contra el Covid.
Duras han sido las críticas de los tres partidos de la mayoría hacia la intransigencia y obstruccionismo de Matteo Renzi. En el anterior gobierno tenía dos ministerios (Agricultura y Familia); en las negociaciones pretendía obtener más poder y relevancia. Italia Viva, con sus 30 diputados y 18 senadores –estos últimos son decisivos en la Cámara baja-, juega un papel parlamentario muy superior al apoyo con que cuenta entre el electorado (las encuestas le dan un 3 % si hoy se celebraran elecciones).
El espectáculo que han dado los partidos de centro izquierda, en particular Renzi, comentan los analistas, es un claro reflejo de la fragilidad y crisis del sistema político italiano, que debilita la democracia, porque aleja más a los ciudadanos de su clase política en medio de una pandemia y una angustiosa crisis económica.
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El presidente de la República convoca a Mario Draghi, expresidente del Banco Central Europeo, a mediodía de este miércoles, para encargarle la formación de gobierno. Sergio Mattarella, ha hecho un dramático llamamiento a las fuerzas políticas apoyen a “un gobierno de alto perfil” para superar los graves retos que tiene el país, la pandemia y la crisis económica. Tras el fracaso del mandato exploratorio al presidente del Congreso de los diputados, para ver si había una mayoría parlamentario, Mattarella dijo en la noche del martes que descartaba las elecciones anticipadas, porque “con el voto anticipado se corre el riesgo de que aumenten los contagios del Covid”, En consecuencia, Mattarella destacó que “en la emergencia sirve un gobierno en plenas funciones, no político”.
El presidente de la República, Sergio Mattarella, dio el pasado viernes al presidente del Congreso, Roberto Fico, del Movimiento 5 Estrellas, un mandato exploratorio para que consultara extensivaente con las fuerzas de la mayoría (M5E, Partido Democrático y Libres e Iguales), además de Italia Viva.
Desde entonces se ha negociado sobre un programa para establecer un pacto de legislatura, como pidió Matteo Renzi. Pero Roberto Fico, tras su mandato exploratorio, se ha presentado en la noche del martes al Quirinal con las manos vacías. Su exploración fracasó. Así lo ha referido el presidente de la República en reunión que continuaba al cierre de esta edición. Todo queda en manos de Sergio Mattarella.
Se consumó, por tanto, la ruptura entre Italia Viva de Renzi y los partidos de la mayoría. Las consultas acabaron de la peor forma posible, con ataques políticos y acusaciones mutuas, en medio de un caos y confusión total de las fuerzas de la actual mayoría gubernamental. No ha sido ejemplarizante el espectáculo que está dando la clase política ante un país que no entiende la crisis y que sus prioridades son la pandemia y la crisis económica, según todas las encuestas.
Italia Viva pidió al inicio de las consultas que se discutiera sobre el programa para escribir un documento con un pacto de legislatura. Se acabó en guerrilla política. Italia Viva ni siquiera ha firmado el acta final. La discusión sobre un programa ha ocultado otro tema clave de las consultas: el reparto de ministerios y otros puestos importantes de la administración. En este terreno ha sido muy dura la batalla entre los partidos. El M5E se ha negado en rotundo a ceder a las presiones de Renzi que deseaba una discontinuidad con la etapa anterior del gobierno, en programa y nombres, y en consecuencia pedía la destitución de los ministros de Educación y de Justicia, miembros del M5E, y de Arcuri como comisario contra el Covid.
Duras han sido las críticas de los tres partidos de la mayoría hacia la intransigencia y obstruccionismo de Matteo Renzi. En el anterior gobierno tenía dos ministerios (Agricultura y Familia); en las negociaciones pretendía obtener más poder y relevancia. Italia Viva, con sus 30 diputados y 18 senadores –estos últimos son decisivos en la Cámara baja-, juega un papel parlamentario muy superior al apoyo con que cuenta entre el electorado (las encuestas le dan un 3 % si hoy se celebraran elecciones).
El espectáculo que han dado los partidos de centro izquierda, en particular Renzi, comentan los analistas, es un claro reflejo de la fragilidad y crisis del sistema político italiano, que debilita la democracia, porque aleja más a los ciudadanos de su clase política en medio de una pandemia y una angustiosa crisis económica.
PrisioneroEnArgentina.com
Febrero 3, 2021