En el año 2004 recibí el Bautismo en la Catedral de San Andrés como Católica Apostólica Anglicana y comencé mis estudios teológicos con el obispo Ellison durante tres años.
En 2006 fui a trabajar en el colegio de un colega del Seminario y también estuve un año, que terminó de manera totalmente aciaga porque el 10 de setiembre de ese año, uno de mis alumnitos de tercer grado y alumno de mi Escuela de música murió electrocutado. Tan enorme fue el dolor que no pude continuar trabajando allí y me despedí de todo el maravilloso grupo de compañeros de trabajo que realmente fueron de bendición en mi vida. Ese mismo año nos pidieron la casa donde vivíamos con mamá o podíamos comprarla, cosa que de ninguna forma podíamos hacer por falta de dinero. Nos pusimos a buscar casa. Vimos al menos cincuenta, pero ninguna nos colmaba las expectativas, hasta que ya cansadas aceptamos una en el Barrio Jara de Asunción y nos cambiamos en julio del 2006. En esa casa vivimos 12 años.
Mi Escuela de Música creció exponencialmente, además era nombrada como Examinadora de música en diferentes Conservatorios de todo el país, seguía dando actuaciones y mi vida espiritual florecía siendo parte de la Iglesia CFA (Centro Familiar de Adoración), a la cual pertenezco todavía.
En 2010 fui llamada para formar parte del plantel de profesores de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Arte de la Universidad Nacional de Asunción, Licenciatura en Música. Ahí sigo como Investigadora ahora.
En 2011, mamá tuvo dos ACV en Paraná, después de tenerla internada por un mes en el Hospital San Martin con una muy buena atención, la traje hacia Asunción. Diez días después mamá tuvo un tercer ACV y ya quedó recluida en cama. Nunca pude ponerla en mi servicio de salud porque ella nunca quiso ser residente en Paraguay y siendo turista, era imposible colocarla en el sistema. De esta forma, todos sus gastos médicos tenían que ser pagados en efectivo…
En junio de 1989 un mes después que mi amado esposo muriera y lanzara sus cenizas al mar en Chapadmalal como él me lo pidiera volví a casa de mis padres en Paraná. Pasé tres días en cama con fiebre y al cuarto día al levantarme, me senté para almorzar con ambos. Fue en ese momento que mamá me dijo:
“Escuchame bien algo que tengo que decirte, no quiero, NO quiero que vuelvas a hablar del finado, ¿me entendés? Estoy avergonzada de tu manera de actuar hacia tu padre y hacia mí. Te educamos con mucho sacrificio, estudiaste en las mejores escuelas y lograste muchos conocimientos avalados por diplomas que hoy cuelgan de la pared en esta casa. Esperaba yo que formaras un buen hogar, como Dios manda, con un buen muchacho, de buena familia y trajeras hijos al mundo y vos qué hiciste? Te fuiste a revolcar con un viejo de mierda que ni siquiera fue capaz de darte un hijo”
“Mamá, él era enfermo, no podía tener hijos, acordate que el médico en la Clinique Valmont le hizo todos los estudios y le explicó la razón”
“No me importa, un viejo estúpido que ni siquiera fue capaz de robar un poco de dinero para dejarte en buena posición..”
¡Mamá!
“¿Te dejó alguna propiedad acaso, algunas joyas valiosas, dinero en algún banco, eh?”
“Mamá, yo lo amaba, no fui a su lado por dinero o joyas o propiedad, me fui porque lo amaba y lo voy a amar siempre…”
”¡Idiota! ¡Siempre fuiste la misma idiota, de chica encontrabas gatos y perros sarnosos y los traías para curarlos y con este viejo mugriento hiciste lo mismo, encontraste un perro viejo, enfermo, apaleado y sarnoso y tuviste que quemar tu juventud cuidándolo, por nada! ¡Han dicho de vos cualquier barbaridad, la familia nos dejó de lado, las amistades ya no se acercan, hasta los curas nos miran con lástima, todo por tu culpa, estúpida”!
“Mamá”
”Es verdad, te dejó acaso la pensión de porquería de policía, eh? NO, la estúpida no quiso casarse legalmente en el país para que la vieja arrastrada de la mujer no pierda la jubilación, ¿qué sos vos, la reina de las idiotas? ¿Por qué no quisiste casarte en el país cuando te lo pidió?”
“Mamá, esa señora es mayor, no tiene preparación académica, de qué querías que viviera la pobre, además fue muy amable conmigo y..”-
”Claro que fue amable, estúpida, si vos pagabas todo, ni un centavo pagaron ni ella ni la sinvergüenza de la hija…”
“Mamá, para mí y para él, es su hija y punto. Nosotras no somos quienes para poner en duda la vida de las personas, yo voy a trabajar y salir adelante como lo hice durante todos estos años…-“
“Claro! Yo te hice estudiar piano para que vos te presentaras todos los fines de semana, bajo lluvia, nieve, viento, frio o calor a tocar para los viejos ricos encerrados en asilos finos y el viejo te esperaba tranquilo despatarrado en el sofá en pantuflas esperando la bandeja de comida que traías y el dinerito en el bolsillo”.
“Mamá. Me gusta mi trabajo y ganaba bien y ustedes con papá también tuvieron su ganancia porque podían viajar y estar con nosotros..-“
“Y vos que crees, que a mí me gustaba estar ahí con ustedes, limpiando y trabajando porque ni una sirvienta podía pagar el muerto de hambre y tengo que aguantar que los hediondos de los periodistas de mierda digan que vivíamos en la opulencia como magnates y vos estúpida hasta tus discos te pagaste pero hiciste creer que él te regalaba, como que yo no me daba cuenta…un viejo sinvergüenza viviendo a costa de la mujer joven..-“
“Claro que no, mamá, yo aprendí mucho junto a él y era tan feliz porque yo lo amaba y él aprendió a quererme“
”No le quedaba más remedio, tenía todo gratis, mientras le mandaba dinero a la mujer y a la hija y a la otra vieja flaca que no sabía ni hablar y vos mantenías todo idiota, y hasta te permitiste de usar el nombre de tu padre para conseguirle residencia, vos crees que a mí me gustó eso? ¿Eh?
“Mamá, yo quería que estuviera viviendo en paz y tranquilo porque él verdaderamente trabajó para el pueblo…“
“Si, para la negrada que nunca le agradeció nada de lo que hizo, ni cuando fue a Libia fue capaz de aceptar una buena coima o alguna joya, estúpido. Y encima lo hacen pasar como que si fuera tan inteligente como para crear la triple A…jajajaja no me hagan reír ni para hacer un hijo servía, mucho menos para organizar y mandar a una banda de matones que le hubieran roto la cabeza sin que se enterara, porque era tan boludo que le pasaban al lado y ni se enteraba. Trabajando como desquiciado para mejorar la vida del pueblo, vaya, que honor, unos negros de mierda cobardes que jamás le agradecieron las bolsadas de comida que repartía. Todo esto tenía que decirte porque lo tenía atragantado en la garganta, verte en los diarios y revistas y que cualquier basura dijera barbaridades y cualquier puta se permitiera hacer chistes sobre vos, ¿vos crees que como madre me gustaba acaso?”
Yo lloraba silenciosamente con la cabeza gacha, estaba devastada por la muerte de mi amado pero comprendí que mamá también tenía razón. Solo asentí con la cabeza mientras mis lágrimas corrían y caían sobre mis manos descansaban sobre la falda. Yo tenía 38 años.
”Entonces, No volvés a hablar del finado ni hoy ni nuca mientras yo viva o te olvidas que soy tu madre, está claro, ENTENDISTE”?
“Si, mamá, entendí “
Papá solamente me tenía de los hombros y lloraba en silencio conmigo, porque también él lo había querido mucho a mi esposo. Un año después el 4 de junio de 1990 papá falleció. Literalmente se le partió el corazón de dolor por mi dolor y por la muerte de mi marido. Mamá me avisó una semana después de que partiera. Nunca pude ver a mi papá muerto por eso me digo que está de gira con su orquesta derramando melodías por algún lado.
El 21 de marzo de 2017 mamá partió de este mundo tranquila, en su cama, rodeada de amor y respeto. Esa noche, junto a su féretro le hablé y le dije:
”Mamá, he cumplido con tu pedido, no he vuelto a hablar más de mi tan amado, mi deuda contigo está saldada, pero de ahora en más voy a salir con la espada de la verdad a luchar para que la gente conozca que fue un buen y honesto hombre y que solo trabajó por y para el pueblo y que jamás ni creó ni ideó nada que pudiera perjudicar a nadie porque era un hombre muy evolucionado pero muy incomprendido. Gracias por todo mamá”
Al otro día traje sus cenizas conmigo y me acompañan desde entonces.
El lunes 16 de marzo de 2020 cumplí 69 años en soledad- Ni siquiera tuve tiempo de comprarme una cup cake pero me cociné una rica pizza y tenía una sidra que guardé desde Navidad. Me deseé a mí misma el mejor de los cumpleaños y me dije que en unos días todo terminaría.
Estaba total y absolutamente equivocada.
Para el miércoles 18 de marzo un millón quinientos mil alumnos estaban sin clase en Paraguay. 800 millones en todo el mundo. 102 países cerraron sus escuelas. En Paraguay se prepararon 60 aulas virtuales para realizar educación a distancia. Hasta ahora se continúa de esta manera, aunque algunos colegios ofrecen clases presenciales durante tres días de la semana.
Las cifras que comenzaron a salir sobre las víctimas fatales y los contaminados eran escalofriantes. Europa estaba infectada por todos lados. Alemania, Francia, Italia, España. Todos arrasados…
21 de marzo se conoce la primera víctima fatal en Paraguay. Había 18 infectados, 5 casos nuevos. La cuarentena se extendió hasta el 12 de Abril.
Las personas mayores estábamos prohibidos de salir. Me olvido que soy mayor. Me voy igual al mercado y no me dejan entrar. Quiero llorar me siento horrible. Decido que la próxima vez voy a camuflarme para que no se vean mis canas. Nunca pensé que me avergonzaría de ser una persona mayor.
Las escenas que veo en los noticieros me dejan sin habla. Me cuesta dormir. Ayuno y oro mucho. También lloro por tanta gente que sufre, veo las imágenes que muestran lugares tan conocidos por mí, ahora desolados, pero algo nuevo y bueno surge, los animales comienzas a proliferar y a adentrarse en las ciudades. Eso me regocija
28 de marzo: 56 casos en Paraguay, 5 muertos. Pero algo bueno sucede porque se declara finalizada la epidemia de dengue que fuera terrible ese año…
Se termina el mes con cifras impensables en el mundo y entre nosotros.
Pero nada de lo que pensamos que sucedería, sucedió. Paraguay terminó teniendo tantos casos que colapsaron todos los hospitales. Dejaron de atenderse todas las patologías salvo Covid-19.
Mis alumnos particulares dejaron de venir, el hueco en la economía fue terrible para todos. Aún no podemos recuperarnos. Pasé de ser una buena compradora a una compradora morosa. Dejé de pagar recibos que se acumulaban, dejé de comer todo lo que fuera superfluo, mis días hasta ahora se cuentas por el día en que cobro y cuántos días faltan para cobrar otra vez. A mediados de 2020, algunos alumnitos tímidamente comenzaron a retornar y eso alegró mis momentos. Por supuesto que no todos volvieron, pero pudimos hacer un pequeño recital de Fin de Año y aplaudir sus logros. Todos con tapabocas, con medidas sanitarias, con distanciamiento social, pero pasamos una preciosa velada. En octubre comencé a subir un audio libro sobre la consigna de # retro# influencer, donde desplegué toda la vida de mi marido desde sus orígenes gallegos hasta el final de sus días. Recibí todo tipo de insultos, amenazas, ataques, violencia de género, expresiones destructivas, faltas de respeto y acoso. Seguí adelante hasta el último capítulo. Una campaña de silencio se cerró sobre lo hecho, pero tuve buenas repercusiones de todas maneras. El 9 de diciembre defendí mi Tesis de Musicoterapia y logré la Maestría con la mejor nota del grupo.
Mis vecinos me invitaron a compartir con ellos la cena de Navidad y Año Nuevo y todos nos preparamos para ser finalmente libre en el nuevo año 2021…
El 16 de marzo de 2021 cumplí 70 años en soledad, pero con muestras de cariño de mucha gente.
Estamos viviendo la segunda mitad del año 2021, casi nada ha cambiado por aquí. Seguimos con las medidas sanitarias, el distanciamiento social, el tapabocas, las medidas higiénicas. El virus ha mutado varias veces volviéndose mucho más letal e infeccioso. Las vacunas se crearon con la rapidez del rayo. La gran mayoría de las poblaciones del mundo estamos vacunados. En unos días debo recibir mi segunda dosis. Mis vecinos y yo recibimos la primera dosis el mismo día en el mismo lugar, por lo tanto, estamos planeando de ir otra vez todos juntos a vacunarnos. No puedo ir a trabajar por la edad, trabajo mucho preparando material que deberá ser publicado en cuanto volvamos a la normalidad. La única cátedra que conservo y continúo es la de francés. Muchos alumnitos han vuelto a mi Escuela de Música. Ya tuvimos dos exámenes evaluativos en lo que va del año y todos pasaron de curso.
Las cifras del Covid-19 en Paraguay hasta hoy son:
1.964.651 dosis de vacunas aplicadas
453.794 casos confirmados
15.172 muertos
423.964 recuperados
Nada está terminado, no sabemos aún como todo va a continuar. Nos seguimos cuidando pero es difícil la disciplina para la gente.
Tratamos todos de pensar que nada pasa, que podemos llevar a cabo muchas de las actividades que hacíamos antes de la pandemia, pero vemos un aumento exponencial de la agresividad en la gente, la falta de disciplina en la juventud, los agravios gratuitos vertidos sin sentido los unos hacia los otros. Pensábamos que esta pandemia nos hermanaría, pero resulta que todo nos separa, desde todo punto de vista, desde las actuaciones, desde las expresiones difundidas, desde las difamaciones perpetradas, desde la falta total de empatía con el prójimo.
Seguimos en cuarentena. En cuarentena mental, emocional, física y social. El virus nos ataca de otra manera. Nos carcome y nos destruye como sociedad lentamente. La cuarentena nos persigue, nos derriba, nos envuelve, nos ahoga, nos asfixia inexorablemente porque ha logrado sacar de cada uno de nosotros lo más nefasto que el ser humano, llamado el rey de la creación, pueda albergar: el egoísmo brutal de los seres sin conciencia, sin alma y sin mañana.
Solo nos resta decir: ¡SEÑOR, TEN PIEDAD DE NOSOTROS!
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LOS MUY DUROS REPROCHES DE MI MADRE
Por PROF.MGTR. MARIA ELENA CISNEROS RUEDA
En el año 2004 recibí el Bautismo en la Catedral de San Andrés como Católica Apostólica Anglicana y comencé mis estudios teológicos con el obispo Ellison durante tres años.
En 2006 fui a trabajar en el colegio de un colega del Seminario y también estuve un año, que terminó de manera totalmente aciaga porque el 10 de setiembre de ese año, uno de mis alumnitos de tercer grado y alumno de mi Escuela de música murió electrocutado. Tan enorme fue el dolor que no pude continuar trabajando allí y me despedí de todo el maravilloso grupo de compañeros de trabajo que realmente fueron de bendición en mi vida. Ese mismo año nos pidieron la casa donde vivíamos con mamá o podíamos comprarla, cosa que de ninguna forma podíamos hacer por falta de dinero. Nos pusimos a buscar casa. Vimos al menos cincuenta, pero ninguna nos colmaba las expectativas, hasta que ya cansadas aceptamos una en el Barrio Jara de Asunción y nos cambiamos en julio del 2006. En esa casa vivimos 12 años.
Mi Escuela de Música creció exponencialmente, además era nombrada como Examinadora de música en diferentes Conservatorios de todo el país, seguía dando actuaciones y mi vida espiritual florecía siendo parte de la Iglesia CFA (Centro Familiar de Adoración), a la cual pertenezco todavía.
En 2010 fui llamada para formar parte del plantel de profesores de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Arte de la Universidad Nacional de Asunción, Licenciatura en Música. Ahí sigo como Investigadora ahora.
En 2011, mamá tuvo dos ACV en Paraná, después de tenerla internada por un mes en el Hospital San Martin con una muy buena atención, la traje hacia Asunción. Diez días después mamá tuvo un tercer ACV y ya quedó recluida en cama. Nunca pude ponerla en mi servicio de salud porque ella nunca quiso ser residente en Paraguay y siendo turista, era imposible colocarla en el sistema. De esta forma, todos sus gastos médicos tenían que ser pagados en efectivo…
En junio de 1989 un mes después que mi amado esposo muriera y lanzara sus cenizas al mar en Chapadmalal como él me lo pidiera volví a casa de mis padres en Paraná. Pasé tres días en cama con fiebre y al cuarto día al levantarme, me senté para almorzar con ambos. Fue en ese momento que mamá me dijo:
“Escuchame bien algo que tengo que decirte, no quiero, NO quiero que vuelvas a hablar del finado, ¿me entendés? Estoy avergonzada de tu manera de actuar hacia tu padre y hacia mí. Te educamos con mucho sacrificio, estudiaste en las mejores escuelas y lograste muchos conocimientos avalados por diplomas que hoy cuelgan de la pared en esta casa. Esperaba yo que formaras un buen hogar, como Dios manda, con un buen muchacho, de buena familia y trajeras hijos al mundo y vos qué hiciste? Te fuiste a revolcar con un viejo de mierda que ni siquiera fue capaz de darte un hijo”
“Mamá, él era enfermo, no podía tener hijos, acordate que el médico en la Clinique Valmont le hizo todos los estudios y le explicó la razón”
“No me importa, un viejo estúpido que ni siquiera fue capaz de robar un poco de dinero para dejarte en buena posición..”
¡Mamá!
“¿Te dejó alguna propiedad acaso, algunas joyas valiosas, dinero en algún banco, eh?”
“Mamá, yo lo amaba, no fui a su lado por dinero o joyas o propiedad, me fui porque lo amaba y lo voy a amar siempre…”
”¡Idiota! ¡Siempre fuiste la misma idiota, de chica encontrabas gatos y perros sarnosos y los traías para curarlos y con este viejo mugriento hiciste lo mismo, encontraste un perro viejo, enfermo, apaleado y sarnoso y tuviste que quemar tu juventud cuidándolo, por nada! ¡Han dicho de vos cualquier barbaridad, la familia nos dejó de lado, las amistades ya no se acercan, hasta los curas nos miran con lástima, todo por tu culpa, estúpida”!
“Mamá”
”Es verdad, te dejó acaso la pensión de porquería de policía, eh? NO, la estúpida no quiso casarse legalmente en el país para que la vieja arrastrada de la mujer no pierda la jubilación, ¿qué sos vos, la reina de las idiotas? ¿Por qué no quisiste casarte en el país cuando te lo pidió?”
“Mamá, esa señora es mayor, no tiene preparación académica, de qué querías que viviera la pobre, además fue muy amable conmigo y..”-
”Claro que fue amable, estúpida, si vos pagabas todo, ni un centavo pagaron ni ella ni la sinvergüenza de la hija…”
“Mamá, para mí y para él, es su hija y punto. Nosotras no somos quienes para poner en duda la vida de las personas, yo voy a trabajar y salir adelante como lo hice durante todos estos años…-“
“Claro! Yo te hice estudiar piano para que vos te presentaras todos los fines de semana, bajo lluvia, nieve, viento, frio o calor a tocar para los viejos ricos encerrados en asilos finos y el viejo te esperaba tranquilo despatarrado en el sofá en pantuflas esperando la bandeja de comida que traías y el dinerito en el bolsillo”.
“Mamá. Me gusta mi trabajo y ganaba bien y ustedes con papá también tuvieron su ganancia porque podían viajar y estar con nosotros..-“
“Y vos que crees, que a mí me gustaba estar ahí con ustedes, limpiando y trabajando porque ni una sirvienta podía pagar el muerto de hambre y tengo que aguantar que los hediondos de los periodistas de mierda digan que vivíamos en la opulencia como magnates y vos estúpida hasta tus discos te pagaste pero hiciste creer que él te regalaba, como que yo no me daba cuenta…un viejo sinvergüenza viviendo a costa de la mujer joven..-“
“Claro que no, mamá, yo aprendí mucho junto a él y era tan feliz porque yo lo amaba y él aprendió a quererme“
”No le quedaba más remedio, tenía todo gratis, mientras le mandaba dinero a la mujer y a la hija y a la otra vieja flaca que no sabía ni hablar y vos mantenías todo idiota, y hasta te permitiste de usar el nombre de tu padre para conseguirle residencia, vos crees que a mí me gustó eso? ¿Eh?
“Mamá, yo quería que estuviera viviendo en paz y tranquilo porque él verdaderamente trabajó para el pueblo…“
“Si, para la negrada que nunca le agradeció nada de lo que hizo, ni cuando fue a Libia fue capaz de aceptar una buena coima o alguna joya, estúpido. Y encima lo hacen pasar como que si fuera tan inteligente como para crear la triple A…jajajaja no me hagan reír ni para hacer un hijo servía, mucho menos para organizar y mandar a una banda de matones que le hubieran roto la cabeza sin que se enterara, porque era tan boludo que le pasaban al lado y ni se enteraba. Trabajando como desquiciado para mejorar la vida del pueblo, vaya, que honor, unos negros de mierda cobardes que jamás le agradecieron las bolsadas de comida que repartía. Todo esto tenía que decirte porque lo tenía atragantado en la garganta, verte en los diarios y revistas y que cualquier basura dijera barbaridades y cualquier puta se permitiera hacer chistes sobre vos, ¿vos crees que como madre me gustaba acaso?”
Yo lloraba silenciosamente con la cabeza gacha, estaba devastada por la muerte de mi amado pero comprendí que mamá también tenía razón. Solo asentí con la cabeza mientras mis lágrimas corrían y caían sobre mis manos descansaban sobre la falda. Yo tenía 38 años.
”Entonces, No volvés a hablar del finado ni hoy ni nuca mientras yo viva o te olvidas que soy tu madre, está claro, ENTENDISTE”?
“Si, mamá, entendí “
Papá solamente me tenía de los hombros y lloraba en silencio conmigo, porque también él lo había querido mucho a mi esposo. Un año después el 4 de junio de 1990 papá falleció. Literalmente se le partió el corazón de dolor por mi dolor y por la muerte de mi marido. Mamá me avisó una semana después de que partiera. Nunca pude ver a mi papá muerto por eso me digo que está de gira con su orquesta derramando melodías por algún lado.
El 21 de marzo de 2017 mamá partió de este mundo tranquila, en su cama, rodeada de amor y respeto. Esa noche, junto a su féretro le hablé y le dije:
”Mamá, he cumplido con tu pedido, no he vuelto a hablar más de mi tan amado, mi deuda contigo está saldada, pero de ahora en más voy a salir con la espada de la verdad a luchar para que la gente conozca que fue un buen y honesto hombre y que solo trabajó por y para el pueblo y que jamás ni creó ni ideó nada que pudiera perjudicar a nadie porque era un hombre muy evolucionado pero muy incomprendido. Gracias por todo mamá”
Al otro día traje sus cenizas conmigo y me acompañan desde entonces.
El lunes 16 de marzo de 2020 cumplí 69 años en soledad- Ni siquiera tuve tiempo de comprarme una cup cake pero me cociné una rica pizza y tenía una sidra que guardé desde Navidad. Me deseé a mí misma el mejor de los cumpleaños y me dije que en unos días todo terminaría.
Estaba total y absolutamente equivocada.
Para el miércoles 18 de marzo un millón quinientos mil alumnos estaban sin clase en Paraguay. 800 millones en todo el mundo. 102 países cerraron sus escuelas. En Paraguay se prepararon 60 aulas virtuales para realizar educación a distancia. Hasta ahora se continúa de esta manera, aunque algunos colegios ofrecen clases presenciales durante tres días de la semana.
Las cifras que comenzaron a salir sobre las víctimas fatales y los contaminados eran escalofriantes. Europa estaba infectada por todos lados. Alemania, Francia, Italia, España. Todos arrasados…
21 de marzo se conoce la primera víctima fatal en Paraguay. Había 18 infectados, 5 casos nuevos. La cuarentena se extendió hasta el 12 de Abril.
Las personas mayores estábamos prohibidos de salir. Me olvido que soy mayor. Me voy igual al mercado y no me dejan entrar. Quiero llorar me siento horrible. Decido que la próxima vez voy a camuflarme para que no se vean mis canas. Nunca pensé que me avergonzaría de ser una persona mayor.
Las escenas que veo en los noticieros me dejan sin habla. Me cuesta dormir. Ayuno y oro mucho. También lloro por tanta gente que sufre, veo las imágenes que muestran lugares tan conocidos por mí, ahora desolados, pero algo nuevo y bueno surge, los animales comienzas a proliferar y a adentrarse en las ciudades. Eso me regocija
28 de marzo: 56 casos en Paraguay, 5 muertos. Pero algo bueno sucede porque se declara finalizada la epidemia de dengue que fuera terrible ese año…
Se termina el mes con cifras impensables en el mundo y entre nosotros.
Pero nada de lo que pensamos que sucedería, sucedió. Paraguay terminó teniendo tantos casos que colapsaron todos los hospitales. Dejaron de atenderse todas las patologías salvo Covid-19.
Mis alumnos particulares dejaron de venir, el hueco en la economía fue terrible para todos. Aún no podemos recuperarnos. Pasé de ser una buena compradora a una compradora morosa. Dejé de pagar recibos que se acumulaban, dejé de comer todo lo que fuera superfluo, mis días hasta ahora se cuentas por el día en que cobro y cuántos días faltan para cobrar otra vez. A mediados de 2020, algunos alumnitos tímidamente comenzaron a retornar y eso alegró mis momentos. Por supuesto que no todos volvieron, pero pudimos hacer un pequeño recital de Fin de Año y aplaudir sus logros. Todos con tapabocas, con medidas sanitarias, con distanciamiento social, pero pasamos una preciosa velada. En octubre comencé a subir un audio libro sobre la consigna de # retro# influencer, donde desplegué toda la vida de mi marido desde sus orígenes gallegos hasta el final de sus días. Recibí todo tipo de insultos, amenazas, ataques, violencia de género, expresiones destructivas, faltas de respeto y acoso. Seguí adelante hasta el último capítulo. Una campaña de silencio se cerró sobre lo hecho, pero tuve buenas repercusiones de todas maneras. El 9 de diciembre defendí mi Tesis de Musicoterapia y logré la Maestría con la mejor nota del grupo.
Mis vecinos me invitaron a compartir con ellos la cena de Navidad y Año Nuevo y todos nos preparamos para ser finalmente libre en el nuevo año 2021…
El 16 de marzo de 2021 cumplí 70 años en soledad, pero con muestras de cariño de mucha gente.
Estamos viviendo la segunda mitad del año 2021, casi nada ha cambiado por aquí. Seguimos con las medidas sanitarias, el distanciamiento social, el tapabocas, las medidas higiénicas. El virus ha mutado varias veces volviéndose mucho más letal e infeccioso. Las vacunas se crearon con la rapidez del rayo. La gran mayoría de las poblaciones del mundo estamos vacunados. En unos días debo recibir mi segunda dosis. Mis vecinos y yo recibimos la primera dosis el mismo día en el mismo lugar, por lo tanto, estamos planeando de ir otra vez todos juntos a vacunarnos. No puedo ir a trabajar por la edad, trabajo mucho preparando material que deberá ser publicado en cuanto volvamos a la normalidad. La única cátedra que conservo y continúo es la de francés. Muchos alumnitos han vuelto a mi Escuela de Música. Ya tuvimos dos exámenes evaluativos en lo que va del año y todos pasaron de curso.
Las cifras del Covid-19 en Paraguay hasta hoy son:
1.964.651 dosis de vacunas aplicadas
453.794 casos confirmados
15.172 muertos
423.964 recuperados
Nada está terminado, no sabemos aún como todo va a continuar. Nos seguimos cuidando pero es difícil la disciplina para la gente.
Tratamos todos de pensar que nada pasa, que podemos llevar a cabo muchas de las actividades que hacíamos antes de la pandemia, pero vemos un aumento exponencial de la agresividad en la gente, la falta de disciplina en la juventud, los agravios gratuitos vertidos sin sentido los unos hacia los otros. Pensábamos que esta pandemia nos hermanaría, pero resulta que todo nos separa, desde todo punto de vista, desde las actuaciones, desde las expresiones difundidas, desde las difamaciones perpetradas, desde la falta total de empatía con el prójimo.
Seguimos en cuarentena. En cuarentena mental, emocional, física y social. El virus nos ataca de otra manera. Nos carcome y nos destruye como sociedad lentamente. La cuarentena nos persigue, nos derriba, nos envuelve, nos ahoga, nos asfixia inexorablemente porque ha logrado sacar de cada uno de nosotros lo más nefasto que el ser humano, llamado el rey de la creación, pueda albergar: el egoísmo brutal de los seres sin conciencia, sin alma y sin mañana.
Solo nos resta decir: ¡SEÑOR, TEN PIEDAD DE NOSOTROS!
¡QUE ASÍ SEA!
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 11, 2021