El COVID-19 continúa obteniendo terreno en Suiza. La peligrosa marea se mantiene con fuerza, reconoció el ministro de Salud, Alain Berset y descartó que la crisis sanitaria concluya en mayo. 15 475 personas han dado positivo al coronavirus y se registran 327 decesos.
Alain Berset, ministro de Salud, estima que será necesaria una vacuna para poner fin a la crisis sanitaria por el coronavirus, y advirtió que esta no terminará a mediados de mayo.
Berset
“Sería un error creer que esta ola epidémica nos golpeará, luego pasará y desaparecerá”, dijo en una entrevista publicada el sábado práximo pasado por el diario de Friburgo La Liberté y sus periódicos asociados.
El ministro enfatizó que tomará tiempo y reiteró su llamado a respetar las medidas recomendadas (quedarse en casa, mantener distancia social, lavarse continuamente las manos).
Las autoridades han subrayado que si bien las personas de mayor edad son más vulnerables, el coronavirus es potencialmente peligroso también para los más jóvenes.
Debido a la propagación del coronavirus, el Gobierno ha categorizado la situación en el país como “extraordinaria”, lo que permite a las autoridades federales imponer medidas a escala nacional. Es la primera vez en Suiza que se aplican tales disposiciones legales.
En respuesta al creciente número de contagios, el Gobierno ha impuesto restricciones en diversas áreas, incluidas las concentraciones en sitios públicos. Actualmente están prohibidas las reuniones de más de cinco personas y los infractores reciben multas de 100 francos.
Sommaruga
Escuela, bares, restaurantes, instalaciones deportivas y espacios culturales están cerrados y solamente las empresas que proporcionan bienes esenciales a la población, como supermercados, panaderías y farmacias, permanecen abiertas, así como los bancos y las oficinas de correos. Las disposiciones están vigentes hasta el 19 de abril.
También se instó a los suizos que viajaron al extranjero a regresar a casa.
“No lo dejaremos solo”, dijo la presidenta suiza Simonetta Sommaruga. “Cuidaremos de ti.”
Suiza había cancelado previamente una sesión de su parlamento nacional, mientras que el cantón de Ginebra prohibió temporalmente la prostitución para ayudar a frenar la expansión del nuevo coronavirus.
El cantón del Tesino sigue siendo la región más afectada, pero en el área de Vaud la progresión se ha acelerado en los últimos dos días.
En Suiza, se realizan entre 6 000 y 8 000 pruebas por día, es decir, 11 500 pruebas por millón de habitantes. “Hacemos muchas pruebas”, dijo Alain Berset.
“Confiamos y nos complace el apoyo de la población a las recomendaciones”, señaló y advirtió que, según los datos actuales, todavía no es posible predecir cuándo se revertirá la tendencia en los contagios.
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El COVID-19 continúa obteniendo terreno en Suiza. La peligrosa marea se mantiene con fuerza, reconoció el ministro de Salud, Alain Berset y descartó que la crisis sanitaria concluya en mayo. 15 475 personas han dado positivo al coronavirus y se registran 327 decesos.
Alain Berset, ministro de Salud, estima que será necesaria una vacuna para poner fin a la crisis sanitaria por el coronavirus, y advirtió que esta no terminará a mediados de mayo.
“Sería un error creer que esta ola epidémica nos golpeará, luego pasará y desaparecerá”, dijo en una entrevista publicada el sábado práximo pasado por el diario de Friburgo La Liberté y sus periódicos asociados.
El ministro enfatizó que tomará tiempo y reiteró su llamado a respetar las medidas recomendadas (quedarse en casa, mantener distancia social, lavarse continuamente las manos).
Las autoridades han subrayado que si bien las personas de mayor edad son más vulnerables, el coronavirus es potencialmente peligroso también para los más jóvenes.
Debido a la propagación del coronavirus, el Gobierno ha categorizado la situación en el país como “extraordinaria”, lo que permite a las autoridades federales imponer medidas a escala nacional. Es la primera vez en Suiza que se aplican tales disposiciones legales.
En respuesta al creciente número de contagios, el Gobierno ha impuesto restricciones en diversas áreas, incluidas las concentraciones en sitios públicos. Actualmente están prohibidas las reuniones de más de cinco personas y los infractores reciben multas de 100 francos.
Escuela, bares, restaurantes, instalaciones deportivas y espacios culturales están cerrados y solamente las empresas que proporcionan bienes esenciales a la población, como supermercados, panaderías y farmacias, permanecen abiertas, así como los bancos y las oficinas de correos. Las disposiciones están vigentes hasta el 19 de abril.
También se instó a los suizos que viajaron al extranjero a regresar a casa.
“No lo dejaremos solo”, dijo la presidenta suiza Simonetta Sommaruga. “Cuidaremos de ti.”
Suiza había cancelado previamente una sesión de su parlamento nacional, mientras que el cantón de Ginebra prohibió temporalmente la prostitución para ayudar a frenar la expansión del nuevo coronavirus.
El cantón del Tesino sigue siendo la región más afectada, pero en el área de Vaud la progresión se ha acelerado en los últimos dos días.
En Suiza, se realizan entre 6 000 y 8 000 pruebas por día, es decir, 11 500 pruebas por millón de habitantes. “Hacemos muchas pruebas”, dijo Alain Berset.
“Confiamos y nos complace el apoyo de la población a las recomendaciones”, señaló y advirtió que, según los datos actuales, todavía no es posible predecir cuándo se revertirá la tendencia en los contagios.
PrisioneroEnArgentina.com
Marzo 30, 2020