Después de la regular Kingsman: El Servicio Secreto y la insoportable Kingsman: El Círculo Dorado, uno podría suponer razonablemente que el director Matthew Vaughn no tenía a dónde ir con el problema del agente secreto. Esta precuela es de todo menos el bodrio de las anteriores ediciones donde uno se desinfla tal pesimismo de una manera desagradablemente agradable.
La nueva película está involucrada en la genealogía de género ficticio, avanzando en el árbol genealógico desde James Bond hasta los juegos de principios del siglo XX de John Buchan y H Rider Haggard. Vaughn y Karl Gajdusek, su coautor, se aseguran de socavar el imperialismo, pero la política del asunto sigue siendo casi tan loca como su relación con la verdad histórica.
El hombre del rey
Director: Matthew Vaughn
Protagonizada por: Ralph Fiennes, Harris Dickson, Rhys Ifans, Djimon Hounsou, Gemma Arterton, Matthew Goode, Tom Hollander, Charles Dance, Daniel Brühl, Stanley Tucci.
Comoenza en Sudáfrica, terreno de pisoteo tanto de Haggard como de Buchan, con Lord Orlando Oxford (Ralph Fiennes) viendo a su esposa asesinada a tiros en el fuego cruzado durante la guerra de los bóers. Promete que mantendrá a su hijo Conrad (Harris Dickinson) fuera de todo conflicto, pero esa determinación se pone a prueba cuando, una década y un poco más tarde, una siniestra camarilla maniobra el planeta hacia la guerra mundial. La película realmente se pone en marcha con la frase: “¡Es hora de que matemos a Grigori Rasputin! “(Buena suerte con eso). Resulta que Su Alteza es ahora una especie de agente secreto cuasi independiente que, trabajando con su sirvienta (Gemma Arterton) y un factotum africano (Djimon Hounsou), está ansioso por salvar a Europa de la inmolación.
Tenemos espacio para sólo un esbozo de las corrientes políticas de los borrachos. Lord Oxford se retiró de su participación formal en el proyecto imperial cuando se dio cuenta de que se trataba de un ejercicio de hurto épico.
Las ilustraciones de la represión británica no siempre son del mejor gusto: “Estos campos de concentración son la razón por la que estamos ganando la guerra”, dice alguien mientras pasamos por delante de los boers demacrados, pero es encomiable que hayan hecho el esfuerzo.
En otros lugares, sin embargo, la película convierte a George V en un valiente héroe y presenta al villano clave como una especie de nacionalista escocés demente. Los leninistas estarán aún menos contentos con El hombre del rey que los imperialistas reaccionarios. El sirviente negro todavía recibe una bala por su jefe blanco.
Piense demasiado en ello y se dará un dolor de cabeza. Felizmente, la acción es tan hábil y el elenco tan comprometido que es fácil dejar todo eso a un lado y sumergirse en el absurdo imaginativo. Fiennes es encantador. Arterton es un puntazo. ¿Quién no podría entregarse a una escena en la que, como Rasputin, Rhys Ifans, el arma secreta letal de la película, se batirá en duelo con los héroes de forma clásica al son de la obertura de 1812? Quizás sea hora de decir “lo hemos visto todo” y cerrar un año extraño. El mejor Kingsman hasta ahora.
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Después de la regular Kingsman: El Servicio Secreto y la insoportable Kingsman: El Círculo Dorado, uno podría suponer razonablemente que el director Matthew Vaughn no tenía a dónde ir con el problema del agente secreto. Esta precuela es de todo menos el bodrio de las anteriores ediciones donde uno se desinfla tal pesimismo de una manera desagradablemente agradable.
[ezcol_1third]La nueva película está involucrada en la genealogía de género ficticio, avanzando en el árbol genealógico desde James Bond hasta los juegos de principios del siglo XX de John Buchan y H Rider Haggard. Vaughn y Karl Gajdusek, su coautor, se aseguran de socavar el imperialismo, pero la política del asunto sigue siendo casi tan loca como su relación con la verdad histórica.
El hombre del rey
Director: Matthew Vaughn
Protagonizada por: Ralph Fiennes, Harris Dickson, Rhys Ifans, Djimon Hounsou, Gemma Arterton, Matthew Goode, Tom Hollander, Charles Dance, Daniel Brühl, Stanley Tucci.
Comoenza en Sudáfrica, terreno de pisoteo tanto de Haggard como de Buchan, con Lord Orlando Oxford (Ralph Fiennes) viendo a su esposa asesinada a tiros en el fuego cruzado durante la guerra de los bóers. Promete que mantendrá a su hijo Conrad (Harris Dickinson) fuera de todo conflicto, pero esa determinación se pone a prueba cuando, una década y un poco más tarde, una siniestra camarilla maniobra el planeta hacia la guerra mundial. La película realmente se pone en marcha con la frase: “¡Es hora de que matemos a Grigori Rasputin! “(Buena suerte con eso).
Resulta que Su Alteza es ahora una especie de agente secreto cuasi independiente que, trabajando con su sirvienta (Gemma Arterton) y un factotum africano (Djimon Hounsou), está ansioso por salvar a Europa de la inmolación.
Tenemos espacio para sólo un esbozo de las corrientes políticas de los borrachos. Lord Oxford se retiró de su participación formal en el proyecto imperial cuando se dio cuenta de que se trataba de un ejercicio de hurto épico.
Las ilustraciones de la represión británica no siempre son del mejor gusto: “Estos campos de concentración son la razón por la que estamos ganando la guerra”, dice alguien mientras pasamos por delante de los boers demacrados, pero es encomiable que hayan hecho el esfuerzo.
En otros lugares, sin embargo, la película convierte a George V en un valiente héroe y presenta al villano clave como una especie de nacionalista escocés demente. Los leninistas estarán aún menos contentos con El hombre del rey que los imperialistas reaccionarios. El sirviente negro todavía recibe una bala por su jefe blanco.
Piense demasiado en ello y se dará un dolor de cabeza. Felizmente, la acción es tan hábil y el elenco tan comprometido que es fácil dejar todo eso a un lado y sumergirse en el absurdo imaginativo. Fiennes es encantador. Arterton es un puntazo. ¿Quién no podría entregarse a una escena en la que, como Rasputin, Rhys Ifans, el arma secreta letal de la película, se batirá en duelo con los héroes de forma clásica al son de la obertura de 1812? Quizás sea hora de decir “lo hemos visto todo” y cerrar un año extraño. El mejor Kingsman hasta ahora.
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 5, 2022