En el año 2011 al enterarme que me involucraban en una causa por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad, me presenté ante la “justicia”, hice saber que no había muerto como creían, me puse a disposición y aporté mis teléfonos y domicilio. No me fugué ni entorpecí la investigación, y jamás lo haría. Detenido 3 años después, y cumplidos los plazos legales de la prisión preventiva, jueces y fiscales cada vez que mi abogado solicitaba mi excarcelación, mediante un falaz “copie y pegue” la negaban por “peligro de fuga y entorpecimiento de la investigación” (que por otra parte, había terminado años antes). Cuando a comienzos de 2022 se inició el juicio oral, en las primeras audiencias me presenté en persona a declarar. No especulé en que primero lo hicieran los “testigos-víctimas”, como aconsejan siempre los abogados defensores. En uno de los hechos que me imputan por “inferencias”, la víctima NÉSTOR OSCAR BERTINAT, sobre quién había citado sus antecedentes penales y su presunto interés resarcitorio, cuando compareció a declarar dijo: “a Kussman no lo conozco ni me conoce”, pese a que días antes,miembros del poder judicial le habían entregado copia de mi declaración desacreditándolo, para predisponerlo en mi contra.
BERTINAT demostró tener muchísimos más códigos y hombría de bien que estos funcionarios de la “justicia” federal que juran sobre la Biblia que cumplirán con la ley. Él había acusado como autor de su detención, en los años 70 a JESÚS SALINAS, excelente y honesto suboficial de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y a 2 personas más que no identificaba. Bien podría haber agregado que se enteró que yo era uno de ellos. Pero él no se prestó al juego sucio de los “funcionarios” judiciales. Sus miembros habían “inferido” que si el declarante mencionaba SALINAS, yo también había participado en el hecho y me involucraron en el mismo. En una palabra, el abuso de poder y el hijoputismo (1) judicial en su máxima expresión se manifiestan una vez más en estos juicios de la “memoria, verdad y justicia”. Contra eso es imposible luchar y salir airoso. Por ello, verdaderamente no creo y me molesta de sobremanera, cuando los leguleyos citan mis derechos constitucionales de “defensa en juicio”. ¿Cuáles, el de los 11 años que trascurrieron desde que me “engarronaran” (2), involucrándome en hechos de “lesa”? ¿El de las decenas de abusos e ilegalidades cometidas impunemente en todo ese tiempo? Les regalo mis derechos, ya no me interesan, pese a lo cual no cambiaré en mi conducta de toda la vida. Por eso mientras viva y tenga uso de razón, seguiré presentándome a declarar cara a cara, para mirarlos a los ojos expresándoles mis verdades y también… SUS SUCIAS MENTIRAS
LOS JUICIOS DE LESA HUMANIDAD SON UN GENOCIDIO RENTADO Y REITERADO
Los juicios de lesa humanidad son negocios como las obras públicas. La gran diferencia es que en la obra pública, por lo menos roban nada más que plata por sobreprecios. En el caso de los juicios de lesa humanidad roban vidas y están “todos” prendidos y lucran con el sufrimiento humano de los imputados y sus familias y amigos.
Los jueces del tribunal, los fiscales, las querellas, la defensa oficial, las defensas particulares, las víctimas, los testigos, funcionarios y empleados de la justicia federal hasta el cafetero, los estudios jurídicos que gerencian las acciones resarcitorias luego de que declaran los testigos y víctimas, a través de las leyes de reparación que usan fondos de los impuestos que pagamos los argentinos que trabajamos, TODOS, ABSOLUTAMENTE TODOS, le chupan la plata al trabajador indiscriminadamente, sin el más mínimo remordimiento de conciencia.
Mientras este negocio repugnante se lleva a cabo, hay familias enteras que padecen, sufren, y son marginadas por la sociedad, para que el monigote infaltable del “imputado” ponga la cara y esté presente en el escenario del circo, No importa lo que haga, mientras esté, ya es todo lícito porque se cumplen las formas y se justifica el pago. Mientras tanto al imputado y su familia, se los asesina en cómodas cuotas mensuales que no terminan ni con la muerte..
EN TODOS LOS JUICIOS POR LH ES LO MISMO, CAMBIAN LAS CARAS DE LOS DELINCUENTES Y DE LOS QUE SERÁN EJECUTADOS.
La plata, se reparte entre todos los coautores y participes necesarios de este, que si es un LITERAL GENOCIDIO DE ESTADO.
La plata para los jueces, fiscales, querellas, defensores oficiales, funcionarios y empleados de la justicia federal, proviene de las cajas del estado, alimentadas de los impuestos compulsivos que le aplican a todos los habitantes. De todos, el cobro más hipócrita es el de los defensores oficiales que son socios del mismo club de los fiscales, y oficina vecina mediante, negocian los años que pedirán a cada imputado como unvil regateo en una feria donde se venden verduras. Estas lacras de las defensas oficiales no defienden a sus defendidos. Son la peor basura del circo.
La plata de los testigos y víctimas que juran decir verdad y no tienen ningún problema en mentir asquerosamente, la fija, previo acordar la coima, la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, y sale de los impuestos que pagan los contribuyentes, usted señor lector.
La plata de las defensas particulares, proviene de los ahorros de estos viejos e indefensos imputados, la que juntaron durante toda su vida para tener un buen pasar en la vejez, y se la sacan sin dilema moral alguno, bajo falsas e hipócritas promesas de libertad y absolución que jamás se cumplirán, porque los abogados, todos, saben que en Argentina la justicia no existe y en los juicios de LH, los imputados están condenados antes de que empiecen.
Señor, impecable lo suyo, pero se olvidó de los peores. Se pregunta ¿quienes son? Los compañeros de trabajo a los que los uniformados llaman graciosamente “camaradas” y que negocian en silencio la impunidad de ellos a cambio de algo.
Hay quienes brindan información del caso en calidad de colaboradores con justicia, arrepentidos que le dicen. Otros simplemente pagan una cuota mensual y si los alacranes de la justicia federal se deciden a picar, dejan de pagar. Otros brindan favores económicos de otras naturalezas y los hay que brindan favores sexuales porque entre los fiscales hay una gran comunidad gay, los jueces también pican en este ansuelo fijesé el casodel famoso juez Ferro de Mar del Plata que protegía un prostíbulo VIP.
En fin estas son las “supuestas” lakras inmundas que se venden por 30 monedas y a mi juicio, los “camaradas” entreguistas son los peores.
Le mando un abrazo grande y lo felicito, por su excelente síntesis de una radiografía hipócrita del país defensor de los derechos humans.
De siempre, sostenemos que nuestros peores enemigos son los uniformados, por acción u omisión. Lo peor de esto es que al mismo tiempo se menciona a Dios, la Patria, el heroísmo, la valentía y mil lindezas más que no existieron ni existen. ¿Por algo estamos presos, no? Gracias por su participación. Atentamente CLAUDIO KUSSMAN
⚖️
En el año 2011 al enterarme que me involucraban en una causa por los bien o mal llamados delitos de lesa humanidad, me presenté ante la “justicia”, hice saber que no había muerto como creían, me puse a disposición y aporté mis teléfonos y domicilio. No me fugué ni entorpecí la investigación, y jamás lo haría. Detenido 3 años después, y cumplidos los plazos legales de la prisión preventiva, jueces y fiscales cada vez que mi abogado solicitaba mi excarcelación, mediante un falaz “copie y pegue” la negaban por “peligro de fuga y entorpecimiento de la investigación” (que por otra parte, había terminado años antes). Cuando a comienzos de 2022 se inició el juicio oral, en las primeras audiencias me presenté en persona a declarar. No especulé en que primero lo hicieran los “testigos-víctimas”, como aconsejan siempre los abogados defensores. En uno de los hechos que me imputan por “inferencias”, la víctima NÉSTOR OSCAR BERTINAT, sobre quién había citado sus antecedentes penales y su presunto interés resarcitorio, cuando compareció a declarar dijo: “a Kussman no lo conozco ni me conoce”, pese a que días antes, miembros del poder judicial le habían entregado copia de mi declaración desacreditándolo, para predisponerlo en mi contra.
BERTINAT demostró tener muchísimos más códigos y hombría de bien que estos funcionarios de la “justicia” federal que juran sobre la Biblia que cumplirán con la ley. Él había acusado como autor de su detención, en los años 70 a JESÚS SALINAS, excelente y honesto suboficial de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y a 2 personas más que no identificaba. Bien podría haber agregado que se enteró que yo era uno de ellos. Pero él no se prestó al juego sucio de los “funcionarios” judiciales. Sus miembros habían “inferido” que si el declarante mencionaba SALINAS, yo también había participado en el hecho y me involucraron en el mismo. En una palabra, el abuso de poder y el hijoputismo (1) judicial en su máxima expresión se manifiestan una vez más en estos juicios de la “memoria, verdad y justicia”. Contra eso es imposible luchar y salir airoso. Por ello, verdaderamente no creo y me molesta de sobremanera, cuando los leguleyos citan mis derechos constitucionales de “defensa en juicio”. ¿Cuáles, el de los 11 años que trascurrieron desde que me “engarronaran” (2), involucrándome en hechos de “lesa”? ¿El de las decenas de abusos e ilegalidades cometidas impunemente en todo ese tiempo? Les regalo mis derechos, ya no me interesan, pese a lo cual no cambiaré en mi conducta de toda la vida. Por eso mientras viva y tenga uso de razón, seguiré presentándome a declarar cara a cara, para mirarlos a los ojos expresándoles mis verdades y también… SUS SUCIAS MENTIRAS
Claudio Kussman
Comisario Mayor (R)
Policía Prov. Buenos Aires
claudio@PrisioneroEnArgentina.com
www.PrisioneroEnArgentina.com
“Es evidente que detrás de muchas actitudes puritanas hay mucha suciedad escondida”
Maurice Sendak (1928-2012)
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 21, 2022
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12 thoughts on “EN LA MEGA CAUSA ZONA 5, EL HIJOPUTISMO (1) JUDICIAL EN SU MÁXIMA EXPRESIÓN (Con video de 5 minutos)”
Hay que hacer un país nuevo
What the heck is “Querella”????
Mrs. Lee,
Querellas represents victims usually not present at the trial. In this case, I have no clue what they do
Thank you for your question
En este pais no se puede ir por derecha.
Ya les va a llegar el dia
LOS JUICIOS DE LESA HUMANIDAD SON UN GENOCIDIO RENTADO Y REITERADO
Los juicios de lesa humanidad son negocios como las obras públicas. La gran diferencia es que en la obra pública, por lo menos roban nada más que plata por sobreprecios. En el caso de los juicios de lesa humanidad roban vidas y están “todos” prendidos y lucran con el sufrimiento humano de los imputados y sus familias y amigos.
Los jueces del tribunal, los fiscales, las querellas, la defensa oficial, las defensas particulares, las víctimas, los testigos, funcionarios y empleados de la justicia federal hasta el cafetero, los estudios jurídicos que gerencian las acciones resarcitorias luego de que declaran los testigos y víctimas, a través de las leyes de reparación que usan fondos de los impuestos que pagamos los argentinos que trabajamos, TODOS, ABSOLUTAMENTE TODOS, le chupan la plata al trabajador indiscriminadamente, sin el más mínimo remordimiento de conciencia.
Mientras este negocio repugnante se lleva a cabo, hay familias enteras que padecen, sufren, y son marginadas por la sociedad, para que el monigote infaltable del “imputado” ponga la cara y esté presente en el escenario del circo, No importa lo que haga, mientras esté, ya es todo lícito porque se cumplen las formas y se justifica el pago. Mientras tanto al imputado y su familia, se los asesina en cómodas cuotas mensuales que no terminan ni con la muerte..
EN TODOS LOS JUICIOS POR LH ES LO MISMO, CAMBIAN LAS CARAS DE LOS DELINCUENTES Y DE LOS QUE SERÁN EJECUTADOS.
La plata, se reparte entre todos los coautores y participes necesarios de este, que si es un LITERAL GENOCIDIO DE ESTADO.
La plata para los jueces, fiscales, querellas, defensores oficiales, funcionarios y empleados de la justicia federal, proviene de las cajas del estado, alimentadas de los impuestos compulsivos que le aplican a todos los habitantes. De todos, el cobro más hipócrita es el de los defensores oficiales que son socios del mismo club de los fiscales, y oficina vecina mediante, negocian los años que pedirán a cada imputado como unvil regateo en una feria donde se venden verduras. Estas lacras de las defensas oficiales no defienden a sus defendidos. Son la peor basura del circo.
La plata de los testigos y víctimas que juran decir verdad y no tienen ningún problema en mentir asquerosamente, la fija, previo acordar la coima, la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, y sale de los impuestos que pagan los contribuyentes, usted señor lector.
La plata de las defensas particulares, proviene de los ahorros de estos viejos e indefensos imputados, la que juntaron durante toda su vida para tener un buen pasar en la vejez, y se la sacan sin dilema moral alguno, bajo falsas e hipócritas promesas de libertad y absolución que jamás se cumplirán, porque los abogados, todos, saben que en Argentina la justicia no existe y en los juicios de LH, los imputados están condenados antes de que empiecen.
ESTA ES LA CLASE HUMANA QUE HABITA EN ARGENTINA
Señor, impecable lo suyo, pero se olvidó de los peores. Se pregunta ¿quienes son? Los compañeros de trabajo a los que los uniformados llaman graciosamente “camaradas” y que negocian en silencio la impunidad de ellos a cambio de algo.
Hay quienes brindan información del caso en calidad de colaboradores con justicia, arrepentidos que le dicen. Otros simplemente pagan una cuota mensual y si los alacranes de la justicia federal se deciden a picar, dejan de pagar. Otros brindan favores económicos de otras naturalezas y los hay que brindan favores sexuales porque entre los fiscales hay una gran comunidad gay, los jueces también pican en este ansuelo fijesé el casodel famoso juez Ferro de Mar del Plata que protegía un prostíbulo VIP.
En fin estas son las “supuestas” lakras inmundas que se venden por 30 monedas y a mi juicio, los “camaradas” entreguistas son los peores.
Le mando un abrazo grande y lo felicito, por su excelente síntesis de una radiografía hipócrita del país defensor de los derechos humans.
De siempre, sostenemos que nuestros peores enemigos son los uniformados, por acción u omisión. Lo peor de esto es que al mismo tiempo se menciona a Dios, la Patria, el heroísmo, la valentía y mil lindezas más que no existieron ni existen. ¿Por algo estamos presos, no? Gracias por su participación. Atentamente CLAUDIO KUSSMAN
Argentina es el único país del mundo que tiene connacionales prisioneros de guerra en su propio país y no va a rescatarlos.
INCREIBLE
Hay dos millones de “la familia militar” y no se hace nada.
Dos millones es una masa de gente y no es utilizada.
Si los jueces y fiscales violan la ley… ya no queda mas nada
Sí, claro que la violan, y con acceso carnal triplemente agravada por ser funcionarios públicos, porla perversión y la alevosía.