“Queda claro el cura Bergoglio calza las botas de Satanás”
Dr. Carlos del Señor Hidalgo Garzón*
Tal como expresa el Profesor Sandoval, muy claro por cierto, no repetiremos lo que “nihil obstant”. Se puede decir hasta Juan Pablo II, un Papa, que “calzo las sandalias del pescador” y desde haber empuñado un fusil contra el comunismo, devolvió la Fe y la Esperanzas a su amada Polonia. Pero no se quedó ahí, fue el artífice de la caída del Muro de Berlín y el renacer de la Santa Madrecita Rusia. Fue un cura-hombre, que no cejó en su lucha contra el dominio de satanás, de eso estamos convencidos millones de Cristianos. Que hoy penamos entre la Fe (Hebr. 11 -1) y la lógica reactividad y repulsa contra el cura Bergoglio.
Bergoglio, nunca ocultó su izquierdo peronismo, inclusive actuando pragmáticamente en conseguir salvoconductos a terroristas y religiosos comprometidos dentro de la Teología de la Liberación, abiertamente consolidados con la Subversión y el Terrorismo de los setenta. Ahora va a entronizar a otro cura convalidado de la muerte por asesinato, el accidentado cura Angelelli. Y siempre en la capacidad de comprometer mentes enfermas – hacerlo Santo y que la feligresía, según los ritos Católicos eleven preces y le “pidan” como si fuera el “gauchito Gil”.
La Biblia, dice taxativamente que no se den adorar “ídolos ni imágenes”, pero los únicos que entendieron estas palabras del Libro de Dios son lo que a partir de Martín Lutero (1517), rompieron las reglas de la sumisión a los altares de la codicia y las fuentes de acumulación de riquezas, desde la pobreza de la limosna.
Como Católico – bautizado sin razón – o sea como un incapaz bebé, acepto el sacramento, pero nada me impide declamar, por un vuelta de la Iglesia a lo esencia, y rompa con la acumulación de poderes financieros y reparta a los que dice comprender – los pobres.
La esencia de la acumulación financiera, está en todos los cultos, como las vestimentas lujosas y lujuriantes, que resplandecen en los atuendos católicos, ortodoxos y en las empresas evangélicas, protestantes.
Una cosa es la Fe y otra cosa el panegírico, asqueroso del Poder de los Cardenales, colegio que implica el poder económico financiero terrenal. Si uno lee concienzudamente la Biblia, no tiene menos que sentir asco por dicho Colegio Cardenalicio. Por ejemplo en África, los Cardenales junto con los poderes políticos controlan los activos de las mayores explotaciones de minerales, piedras preciosas e hidrocarburos, aceptando la esclavitud y las batallas de las etnias. Reiteramos no solo la Iglesia Católica mete mano, también están las corporaciones protestantes, que adhieren feligresías pero en nada cambia la pobreza.
En síntesis, no estoy de acuerdo con el timo eclesial, si estoy en desacuerdo con la mezquindad de la política religiosa, mentirosa y perversa y el uso que de los “pobres” se hace con esclavitud, prostitución, pederastia y abuso salvaje de niños. Todo esto es hábilmente ocultado por todos los cultos por temor al escándalo. Pero ya no pueden más. Hay medios que no temen a dar sentido público a estas crueles y salvajes realidades, en el Santo Nombre de Dios.
Francisco, el cura Bergoglio, es culpable de desidia y connubio con el terrorismo, la pauta está que no ha tenido acciones del terrorismo islámico, con el cuál “por sus actos los conoceréis” tiene pacto. Pues “poderoso caballero don dinero”.
Bergoglio alias Francisco, si no “pactó con el diablo”, es el que lo asume y calza no las sandalias del pescador sino las miserables botas del usurpador del Trono de Jesucristo y por ende no merece ni el más mínimo respeto.
Como hombre, no solo sigue fiel a a la Teología de la Liberación, sino que su mayor pecado es la COBARDIA Y LA TRAICION, ya no a todos los católicos, tanto como a su tierra natal. Algo que en la historia del mundo nunca se ha perdonado en cualquier civilización.
Es muy probable que en algún momento venga y que la estupidez humana lo reciba sin mediar tino. Pero bien es sabido que los argentinos siempre equivocamos el camino. Quizás haya gente que tenga el sublime corazón y lo perdone. Yo no. Nadie puede creer en pactos con Satanás, y menos en tanto tiempo y la vigencia de la MENTIRA.
“Queda claro el cura Bergoglio calza las botas de Satanás”
Dr. Carlos del Señor Hidalgo Garzón*
Tal como expresa el Profesor Sandoval, muy claro por cierto, no repetiremos lo que “nihil obstant”. Se puede decir hasta Juan Pablo II, un Papa, que “calzo las sandalias del pescador” y desde haber empuñado un fusil contra el comunismo, devolvió la Fe y la Esperanzas a su amada Polonia. Pero no se quedó ahí, fue el artífice de la caída del Muro de Berlín y el renacer de la Santa Madrecita Rusia. Fue un cura-hombre, que no cejó en su lucha contra el dominio de satanás, de eso estamos convencidos millones de Cristianos. Que hoy penamos entre la Fe (Hebr. 11 -1) y la lógica reactividad y repulsa contra el cura Bergoglio.
Bergoglio, nunca ocultó su izquierdo peronismo, inclusive actuando pragmáticamente en conseguir salvoconductos a terroristas y religiosos comprometidos dentro de la Teología de la Liberación, abiertamente consolidados con la Subversión y el Terrorismo de los setenta. Ahora va a entronizar a otro cura convalidado de la muerte por asesinato, el accidentado cura Angelelli. Y siempre en la
capacidad de comprometer mentes enfermas – hacerlo Santo y que la feligresía, según los ritos Católicos eleven preces y le “pidan” como si fuera el “gauchito Gil”.
La Biblia, dice taxativamente que no se den adorar “ídolos ni imágenes”, pero los únicos que entendieron estas palabras del Libro de Dios son lo que a partir de Martín Lutero (1517), rompieron las reglas de la sumisión a los altares de la codicia y las fuentes de acumulación de riquezas, desde la pobreza de la limosna.
Como Católico – bautizado sin razón – o sea como un incapaz bebé, acepto el sacramento, pero nada me impide declamar, por un vuelta de la Iglesia a lo esencia, y rompa con la acumulación de poderes financieros y reparta a los que dice comprender – los pobres.
La esencia de la acumulación financiera, está en todos los cultos, como las vestimentas lujosas y lujuriantes, que resplandecen en los atuendos católicos, ortodoxos y en las
empresas evangélicas, protestantes.
Una cosa es la Fe y otra cosa el panegírico, asqueroso del Poder de los Cardenales, colegio que implica el poder económico financiero terrenal. Si uno lee concienzudamente la Biblia, no tiene menos que sentir asco por dicho Colegio Cardenalicio. Por ejemplo en África, los Cardenales junto con los poderes políticos controlan los activos de las mayores explotaciones de minerales, piedras preciosas e hidrocarburos, aceptando la esclavitud y las batallas de las etnias. Reiteramos no solo la Iglesia Católica mete mano, también están las corporaciones protestantes, que adhieren feligresías pero en nada cambia la pobreza.
En síntesis, no estoy de acuerdo con el timo eclesial, si estoy en desacuerdo con la mezquindad de la política religiosa, mentirosa y perversa y el uso que de los “pobres” se hace con esclavitud, prostitución, pederastia y abuso salvaje de niños. Todo esto es hábilmente ocultado por todos los cultos por temor al escándalo. Pero ya no pueden más. Hay medios que no temen a dar sentido público a estas crueles y salvajes realidades, en el Santo Nombre de Dios.
Francisco, el cura Bergoglio, es culpable de desidia y connubio con el terrorismo, la pauta está que no ha tenido acciones del terrorismo islámico, con el cuál “por sus actos los conoceréis” tiene pacto. Pues “poderoso caballero don dinero”.
Bergoglio alias Francisco, si no “pactó con el diablo”, es el que lo asume y calza no las sandalias del pescador sino las miserables botas del usurpador del Trono de Jesucristo y por ende no merece ni el más mínimo respeto.
Como hombre, no solo sigue fiel a a la Teología de la Liberación, sino que su mayor pecado es la COBARDIA Y LA TRAICION, ya no a todos los católicos, tanto como a su tierra natal. Algo que en la historia del mundo nunca se ha perdonado en cualquier civilización.
Es muy probable que en algún momento venga y que la estupidez humana lo reciba sin mediar tino. Pero bien es sabido que los argentinos siempre equivocamos el camino. Quizás haya gente que tenga el sublime corazón y lo perdone. Yo no. Nadie puede creer en pactos con Satanás, y menos en tanto tiempo y la vigencia de la MENTIRA.
PrisioneroEnArgentina.com
Mayo 6, 2019
Tags: Jorge Mario Bergoglio, PoloniaRelated Posts
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