Un exlíder de la milicia y niño soldado de Uganda fue declarado culpable de crímenes de guerra en la corte penal internacional en una sentencia histórica.
Dominic Ongwen fue condenado el jueves por 61 cargos individuales de asesinato, violación, esclavitud sexual, secuestro y tortura cometidos como comandante en el Ejército de Resistencia del Señor (LRA), un culto violento que libró una sangrienta campaña de violencia en Uganda y países vecinos desde mediados de los 80 hasta hace unos años.
BertramOngwenKony
El tribunal rechazó los argumentos de la defensa de que debido a que Ongwen, de 41 años, fue secuestrado por el LRA a la edad de 10 años, había cometido algún delito bajo coacción.
En su primera aparición en diciembre de 2016, Ongwen dijo que se declararía inocente y dijo al tribunal que era “una de las personas contra las que el LRA cometió atrocidades” y que no debería ser juzgado.
Los abogados de Ongwen también argumentaron que había estado profundamente traumatizado durante su tiempo con el grupo y, por lo tanto, no era responsable de sus acciones.
El juez presidente, Bertram Schmitt, dijo que una gran cantidad de testigos habían proporcionado pruebas abrumadoras que pintaban la imagen de una persona en plena posesión de sus habilidades.
Ongwen fue descrito como un combatiente y comandante extremadamente capaz que planificó los ataques con cuidado y evaluó los riesgos, fue elogiado repetidamente por otros comandantes, que no se enfrentó a amenazas de muerte o daños graves si desobedecía las órdenes y que no aprovechó muchas oportunidades para abandonar el LRA sino que subió de rango y posición.
Liderado por Joseph Kony, quien afirmó tener inspiración religiosa, el LRA libró la guerra en cinco países del este y centro de África. El grupo se basó en el secuestro de aldeanos y refugiados en gran parte indefensos, incluidos niños, para proporcionar mano de obra y combatientes.
Las niñas fueron obligadas a la esclavitud sexual y doméstica, mientras que los niños fueron obligados a tomar las armas.
La mayoría de los cargos contra Ongwen se centran en ataques a campamentos de refugiados entre 2002 y 2005, aunque nno de los peores fue una redada de cuatro días del LRA en campamentos de la República Democrática del Congo en diciembre de 2009, en la que murieron unos 350 civiles. y otros 250, incluidos al menos 80 niños, fueron secuestrados.
El tribunal determinó que Ongwen no estaba “subordinado a Kony, y actuó de forma independiente e incluso impugnó las órdenes”.
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Un exlíder de la milicia y niño soldado de Uganda fue declarado culpable de crímenes de guerra en la corte penal internacional en una sentencia histórica.
Dominic Ongwen fue condenado el jueves por 61 cargos individuales de asesinato, violación, esclavitud sexual, secuestro y tortura cometidos como comandante en el Ejército de Resistencia del Señor (LRA), un culto violento que libró una sangrienta campaña de violencia en Uganda y países vecinos desde mediados de los 80 hasta hace unos años.
El tribunal rechazó los argumentos de la defensa de que debido a que Ongwen, de 41 años, fue secuestrado por el LRA a la edad de 10 años, había cometido algún delito bajo coacción.
En su primera aparición en diciembre de 2016, Ongwen dijo que se declararía inocente y dijo al tribunal que era “una de las personas contra las que el LRA cometió atrocidades” y que no debería ser juzgado.
Los abogados de Ongwen también argumentaron que había estado profundamente traumatizado durante su tiempo con el grupo y, por lo tanto, no era responsable de sus acciones.
El juez presidente, Bertram Schmitt, dijo que una gran cantidad de testigos habían proporcionado pruebas abrumadoras que pintaban la imagen de una persona en plena posesión de sus habilidades.
Ongwen fue descrito como un combatiente y comandante extremadamente capaz que planificó los ataques con cuidado y evaluó los riesgos, fue elogiado repetidamente por otros comandantes, que no se enfrentó a amenazas de muerte o daños graves si desobedecía las órdenes y que no aprovechó muchas oportunidades para abandonar el LRA sino que subió de rango y posición.
Liderado por Joseph Kony, quien afirmó tener inspiración religiosa, el LRA libró la guerra en cinco países del este y centro de África. El grupo se basó en el secuestro de aldeanos y refugiados en gran parte indefensos, incluidos niños, para proporcionar mano de obra y combatientes.
Las niñas fueron obligadas a la esclavitud sexual y doméstica, mientras que los niños fueron obligados a tomar las armas.
La mayoría de los cargos contra Ongwen se centran en ataques a campamentos de refugiados entre 2002 y 2005, aunque nno de los peores fue una redada de cuatro días del LRA en campamentos de la República Democrática del Congo en diciembre de 2009, en la que murieron unos 350 civiles. y otros 250, incluidos al menos 80 niños, fueron secuestrados.
El tribunal determinó que Ongwen no estaba “subordinado a Kony, y actuó de forma independiente e incluso impugnó las órdenes”.
PrisioneroEnArgentina.com
Febrero 4, 2021