¡Qué tremendas y decisivas alternativas se presentan en estos momentos ante la opinión pública, para decidir e imponer un futuro superador en nuestro derrumbado país!
Aparece de pronto en el panorama eleccionario, un personaje pintoresco con antecedentes personales, familiares y políticos confusos, sin estructura definida de apoyo, arreando con sus gritos a veces destemplados y sus propuestas y promesas solo teóricas y hasta voluntaristas, a una enorme cantidad de argentinos desencantados y desorientados.
Ciudadanos que buscan tener una salida coherente y superadora de la crisis en que nos ha sumido la mafia política que hemos sabido construir, tolerar y hasta apoyar, la cual se ha mantenido en ejercicio ininterrumpido del poder desde hace cuarenta años, con una agudización siniestra y hasta existencial, en los últimos veinte.
Es una reedición de aquella consigna que movilizó a millones de ciudadanos al grito ¡”QUE SE VAYAN TODOS! en el 2001.
En esa oportunidad el Dr Frankenstein, el padre del monstruo por jugosos dividendos, logró encauzar el descontento al vendernos ese proyecto mefistofélico KK y afirmar “QUE LOS ARGENTINOS ESTAMOS CONDENADOS AL ÉXITO”.
En realidad se trató de una real condena al fracaso más estrepitoso y una traición descarada a la confianza de ciudadanos esperanzados en el resurgir de la Patria..
Aquí y ahora ante el cercano acto eleccionario, nuestras alternativas son realmente estremecedoras; una esperanza confusa promovida por un declamador de circunstancias que ha logrado captar, quizás por ausencia de contraparte más convincente, a toda esa legión de argentinos desencantados, especialmente jóvenes que buscan afanosamente un cambio virtuoso.
A su alrededor se agolpan personas bien intencionadas y capaces y multitud de oportunistas que cambian sin problema su ropaje de circunstancias, buscando seguir siendo parásitos del Estado sin interesar sus reales creencias, intereses y convicciones, procedentes inclusive del nefasto desgobierno en retirada.
En la otra parte una niña voluntariosa, con capacidades discutibles para asumir la enorme responsabilidad de conducir una Nación que necesita una lucha sin cuartel contra privilegios largamente instalados y presenta una tendencia manifiesta a la anarquía institucional y social.
Conduce circunstancialmente una bolsa de gatos que por ahora han sincronizado sus maullidos y cuenta “con el apoyo y orientación estratégica” de un dirigente político fracasado y parlanchín, amante del hedonismo y la alfombra roja.
No obstante, impresiona como persona honesta, decidida, realista y convencida de los ideales que proclama.
Y en tercer término, un experimento político especialista a través de largos años, en “sakeos” sistemáticos de los recursos de todos bajo argumentos falaces y comportamientos públicos teatrales, ausente absolutamente de valores materiales, morales y espirituales. Experimento increíble en el ámbito de naciones civilizadas, que ha sumido al país en la crisis mas siniestra de su historia, con tendencia a agudizarse hacia límites imprevisibles.
Están así convencidos de que van a perder, pese a las proclamaciones en contrario del inestable comediante todo terreno que los representa, quien hasta ha aprendido a gritar desaforadamente para impresionar a giles comprados y vendidos, que aplauden y festejan cualquier cosa.
Entre otras estrategias apropiadas, están concentrados en cómo implementar acciones de fraude a través de diversos artilugios creativos sustentados en su poder político, que les permita algún argumento de apoyo popular falso en las contiendas futuras.
Y si pese a todos sus esfuerzos “makiavélikos” pierden el poder, elaboran cursos de acción para intentar recuperarlo a partir de la mentira, violencia y coacción general e individual de todo tipo, que siempre han sido sus instrumentos de combate.
Sus capitanejos potentados y privilegiados, ya están elaborando planes, adoctrinando a sus pobres borregos y ejecutando gimnasia aplicativa.
Es decir, estamos ante una alternativa crucial e histórica. Debemos elegir en esta particular democracia que hemos sabido construir, al menos malo entre los peores.
Para ello no nos dejemos confundir por gritos y o declaraciones altisonantes sin fundamento o amedrentar por amenazas efectivas o sutiles.
Analicemos profundamente los antecedentes, circunstancias y detalles comprobables que encuadran a cada candidato y la profundidad, conveniencia y factibilidad de sus anuncios electorales.
Proyectemos su capacidad intelectual, moral y agallas para controlar los sucesos probables por venir a fin de imponer finalmente una verdadera justicia imparcial, eficaz y ejecutiva, efectiva y solidaria justicia social, autoridad para asegurar la vigencia de la paz y erradicar a los traidores que venden constantemente su conciencia y deberes al mejor postor.
Personajes nefastos normalmente disfrazados bajo diversas falacias y pretextos, quienes han succionado durante cuarenta años para sus propios beneficios, la propiedad de todos los argentinos y condenado a casi la mitad de nuestra población a la miseria y la muerte.
Debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para evitar la caída final. Debemos esclarecer a nuestros próximos, mostrándoles con paciencia LA VERDAD.
Pero fundamentalmente recemos a DIOS y NUESTRA SANTA MADRE, para que nos salven del suicidio colectivo que parece conformarse y podamos retomar la senda del progreso, unión del pueblo y bien común.
Por lo menos, así, lo veo yo.
Francisco Cervo.
RECORTE DE UNA NOTA DEL DIARIO CLARÍN DEL 11.09.2023
MIDIERON LA PELEA DE BULLRICH, MILEI Y MASSA EN INSTAGRAM Y TIKTOK: QUIÉN GANA POR ESCÁNDALO CON CASI 20 MILLONES DE VISITAS
El estudio tomó las últimas seis publicaciones hasta el 31 de agosto de los reels de Massa, Bullrich y Milei. En Instagram, el ministro de Economía acumuló 437 mil visitas; Bullrich un millón; Milei el impresionante 10.3 millones de usuarios.
Mientras que en Tik-Tok, la diferencia fue aún más sorprendente: Massa,162 mil; Bullrich,169 mil y Milei,19.9 millones. Es decir que por cada visita que tienen los candidatos de Unión por la Patria y de Juntos por el Cambio, el libertario reúne 117 veces más.
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¡Qué tremendas y decisivas alternativas se presentan en estos momentos ante la opinión pública, para decidir e imponer un futuro superador en nuestro derrumbado país!
Aparece de pronto en el panorama eleccionario, un personaje pintoresco con antecedentes personales, familiares y políticos
confusos, sin estructura definida de apoyo, arreando con sus gritos a veces destemplados y sus propuestas y promesas solo teóricas y hasta voluntaristas, a una enorme cantidad de argentinos desencantados y desorientados.
Ciudadanos que buscan tener una salida coherente y superadora de la crisis en que nos ha sumido la mafia política que hemos sabido construir, tolerar y hasta apoyar, la cual se ha mantenido en ejercicio ininterrumpido del poder desde hace cuarenta años, con una agudización siniestra y hasta existencial, en los últimos veinte.
Es una reedición de aquella consigna que movilizó a millones de ciudadanos al grito ¡”QUE SE VAYAN TODOS! en el 2001.
En esa oportunidad el Dr Frankenstein, el padre del monstruo por jugosos dividendos, logró encauzar el descontento al vendernos ese proyecto mefistofélico KK y afirmar “QUE LOS ARGENTINOS ESTAMOS CONDENADOS AL ÉXITO”.
En realidad se trató de una real condena al fracaso más estrepitoso y una traición descarada a la confianza de ciudadanos esperanzados en el resurgir de la Patria..
Aquí y ahora ante el cercano acto eleccionario, nuestras alternativas son realmente estremecedoras; una esperanza confusa promovida por un declamador de circunstancias que ha logrado captar, quizás por ausencia de contraparte más convincente, a toda esa legión de argentinos desencantados, especialmente jóvenes que buscan afanosamente un cambio virtuoso.
A su alrededor se agolpan personas bien intencionadas y capaces y multitud de oportunistas que cambian sin problema su ropaje de circunstancias, buscando seguir siendo parásitos del Estado sin interesar sus reales creencias, intereses y convicciones, procedentes inclusive del nefasto desgobierno en retirada.
En la otra parte una niña voluntariosa, con capacidades discutibles para asumir la enorme responsabilidad de conducir una Nación que necesita una lucha sin cuartel contra privilegios largamente instalados y presenta una tendencia manifiesta a la anarquía institucional y social.
Conduce circunstancialmente una bolsa de gatos que por ahora han sincronizado sus maullidos y cuenta “con el apoyo y orientación estratégica” de un dirigente político fracasado y parlanchín, amante del hedonismo y la alfombra roja.
No obstante, impresiona como persona honesta, decidida, realista y convencida de los ideales que proclama.
Y en tercer término, un experimento político especialista a través de largos años, en “sakeos” sistemáticos de los recursos de
todos bajo argumentos falaces y comportamientos públicos teatrales, ausente absolutamente de valores materiales, morales y espirituales. Experimento increíble en el ámbito de naciones civilizadas, que ha sumido al país en la crisis mas siniestra de su historia, con tendencia a agudizarse hacia límites imprevisibles.
Están así convencidos de que van a perder, pese a las proclamaciones en contrario del inestable comediante todo terreno que los representa, quien hasta ha aprendido a gritar desaforadamente para impresionar a giles comprados y vendidos, que aplauden y festejan cualquier cosa.
Entre otras estrategias apropiadas, están concentrados en cómo implementar acciones de fraude a través de diversos artilugios creativos sustentados en su poder político, que les permita algún argumento de apoyo popular falso en las contiendas futuras.
Y si pese a todos sus esfuerzos “makiavélikos” pierden el poder, elaboran cursos de acción para intentar recuperarlo a partir de la mentira, violencia y coacción general e individual de todo tipo, que siempre han sido sus instrumentos de combate.
Sus capitanejos potentados y privilegiados, ya están elaborando planes, adoctrinando a sus pobres borregos y ejecutando gimnasia aplicativa.
Es decir, estamos ante una alternativa crucial e histórica. Debemos elegir en esta particular democracia que hemos sabido construir, al menos malo entre los peores.
Para ello no nos dejemos confundir por gritos y o declaraciones altisonantes sin fundamento o amedrentar por amenazas efectivas o sutiles.
Analicemos profundamente los antecedentes, circunstancias y detalles comprobables que encuadran a cada candidato y la profundidad, conveniencia y factibilidad de sus anuncios electorales.
Proyectemos su capacidad intelectual, moral y agallas para controlar los sucesos probables por venir a fin de imponer finalmente una verdadera justicia imparcial, eficaz y ejecutiva, efectiva y solidaria justicia social, autoridad para asegurar la vigencia de la paz y erradicar a los traidores que venden constantemente su conciencia y deberes al mejor postor.
Personajes nefastos normalmente disfrazados bajo diversas falacias y pretextos, quienes han succionado durante cuarenta años para sus propios beneficios, la propiedad de todos los argentinos y condenado a casi la mitad de nuestra población a la miseria y la muerte.
Debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para evitar la caída final. Debemos esclarecer a nuestros próximos, mostrándoles con paciencia LA VERDAD.
Pero fundamentalmente recemos a DIOS y NUESTRA SANTA MADRE, para que nos salven del suicidio colectivo que parece conformarse y podamos retomar la senda del progreso, unión del pueblo y bien común.
Por lo menos, así, lo veo yo.
Francisco Cervo.
PrisioneroEnArgentina.com
Setiembre 13, 2023