La nueva cepa del coronavirus detectada en Inglaterra y ya presente en otros países como Australia, Italia, Dinamarca o Países Bajos, centra la atención de investigadores, médicos y autoridades. La investigación sobre la nueva variante se encuentra en una etapa inicial pero la incertidumbre sobre los efectos que pueda tener en el desarrollo de la pandemia es palpable.
La nueva cepa está remplazando de manera rápido a otras versiones del virus. Tiene mutaciones que ya demostraron en laboratorio que aumentan su capacidad de infectar células. Se calcula que acelera hasta en un 70% la transmisión del virus.
José Antonio López Guerrero, director del Grupo Neurovirología de la Universidad Autónoma de Madrid, fue contundente en ‘Más Vale Tarde’, de LaSexta: “Si esta variante del virus se consolida, va a ser imparable”.
Para López Guerrero, el peligro de esta mutación reside en que se ha alojado en dos sitios nuevos del organismo respecto al patógeno original.
De acuerdo a los estudios del profesor Ravi Gupta, de la Universidad de Cambridge, es posible que esta mutación aumente la capacidad de infección en los experimentos de laboratorio.
Sus estudios sugieren que la mutación hace que los anticuerpos de la sangre de los sobrevivientes a la enfermedad sean menos efectivos para atacar el virus.
En el caso de la nueva cepa del SARS-CoV-2 de Reino Unido, la viróloga Wendy Barclay, del Imperial College London, afirma que se han identificado dos decenas de mutaciones en su código genético, en palabras recogidas por la BBC: “Normalmente vemos que los virus se diferencian entre sí por uno o dos cambios, pero este tiene un total de 22 al mismo tiempo, y eso al conocerse de inmediato genera una especie de alarma”
Las primeras investigaciones reseñan que esas mutaciones se ven en la proteína S, la conocida ‘llave’ del virus con el que se conectan a las células humanas. “Hay varias de esas mutaciones de la punta que creemos que son muy importantes para ayudar al virus a ingresar a las células muy rápidamente, por lo que estamos tratando de obtener evidencia que respalde eso. Pero biológicamente, es factible que el virus haya cambiado la forma en que se comporta debido a esas mutaciones”, explica Barclay.
Los expertos consideran que, en un principio, la efectividad de la vacuna se va a mantener a pesar de estas mutaciones.
La nueva cepa se detectó por primera vez en Gran Bretaña en septiembre. En noviembre, una cuarta parte de los casos en Londres eran de esta nueva variante. En diciembre ya llegaba a dos tercios de los casos.
Estos datos llevaron al ministro de Sanidad británico, Matt Hancock, ha reconocer que la nueva cepa de coronavirus estaba “fuera de control”. Se impuso un confinamiento extremo en Londres y el sureste del país. Tras esta manifestación, varios países europeos,incluida España, cancelaron sus vuelos desde Gran Bretaña.
♠
La nueva cepa del coronavirus detectada en Inglaterra y ya presente en otros países como Australia, Italia, Dinamarca o Países Bajos, centra la atención de investigadores, médicos y autoridades. La investigación sobre la nueva variante se encuentra en una etapa inicial pero la incertidumbre sobre los efectos que pueda tener en el desarrollo de la pandemia es palpable.
La nueva cepa está remplazando de manera rápido a otras versiones del virus. Tiene mutaciones que ya demostraron en laboratorio que aumentan su capacidad de infectar células. Se calcula que acelera hasta en un 70% la transmisión del virus.
José Antonio López Guerrero, director del Grupo Neurovirología de la Universidad Autónoma de Madrid, fue contundente en ‘Más Vale Tarde’, de LaSexta: “Si esta variante del virus se consolida, va a ser imparable”.
Para López Guerrero, el peligro de esta mutación reside en que se ha alojado en dos sitios nuevos del organismo respecto al patógeno original.
De acuerdo a los estudios del profesor Ravi Gupta, de la Universidad de Cambridge, es posible que esta mutación aumente la capacidad de infección en los experimentos de laboratorio.
Sus estudios sugieren que la mutación hace que los anticuerpos de la sangre de los sobrevivientes a la enfermedad sean menos efectivos para atacar el virus.
En el caso de la nueva cepa del SARS-CoV-2 de Reino Unido, la viróloga Wendy Barclay, del Imperial College London, afirma que se han identificado dos decenas de mutaciones en su código genético, en palabras recogidas por la BBC: “Normalmente vemos que los virus se diferencian entre sí por uno o dos cambios, pero este tiene un total de 22 al mismo tiempo, y eso al conocerse de inmediato genera una especie de alarma”
Las primeras investigaciones reseñan que esas mutaciones se ven en la proteína S, la conocida ‘llave’ del virus con el que se conectan a las células humanas. “Hay varias de esas mutaciones de la punta que creemos que son muy importantes para ayudar al virus a ingresar a las células muy rápidamente, por lo que estamos tratando de obtener evidencia que respalde eso. Pero biológicamente, es factible que el virus haya cambiado la forma en que se comporta debido a esas mutaciones”, explica Barclay.
Los expertos consideran que, en un principio, la efectividad de la vacuna se va a mantener a pesar de estas mutaciones.
La nueva cepa se detectó por primera vez en Gran Bretaña en septiembre. En noviembre, una cuarta parte de los casos en Londres eran de esta nueva variante. En diciembre ya llegaba a dos tercios de los casos.
Estos datos llevaron al ministro de Sanidad británico, Matt Hancock, ha reconocer que la nueva cepa de coronavirus estaba “fuera de control”. Se impuso un confinamiento extremo en Londres y el sureste del país. Tras esta manifestación, varios países europeos,incluida España, cancelaron sus vuelos desde Gran Bretaña.
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 27, 2020