Las miserias humanas no son cuestiones nuevas, existieron de siempre y lastiman el corazón y el sentimiento de las buenas personas. No es sencillo y no es fácil aceptarlas porque hacen sufrir a las personas sensibles. ¿Como poder explicarle a un hijo de buenos sentimientos que hay que aceptarlas y volar por encima de ellas para no sentir dolor alguno? Sus autores en el fondo son seres desgraciados, que han sufrido en forma dramática y que guardan así rencores y envidias, siendo incapaces de actuar con grandeza, con hidalguía, y amor al prójimo.
Hay víctimas de las miserias humanas y estas son generalmente personas muy sensibles, tiernas y de muy buenos sentimientos, no deben estos sentirse afectados sino todo lo contrario deberían pensar que las verdaderas víctimas son esos seres que no guardan amor al prójimo. Que les falta grandeza humana, que se aprovechan de otros, que se sienten superiores. No son seres sencillos, humildes, sensibles, y tienen un alto grado de pedantería. El egoísmo, el sentirse superior al otro.
La existencia de la grandeza, no admite y rechaza la pedantería de sentirse superior a los otros, lo importante de un ser humano no es el dinero que tiene, ni el poder que tienen en la sociedad, sino que está definida por la escala de valores que tienen. Generalmente generosos, y un profundo amor y respeto al prójimo, las personas valen no por los bienes que tienen sino por los valores que los caracterizan.
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Hay víctimas de las miserias humanas y estas son generalmente personas muy sensibles, tiernas y de muy buenos sentimientos, no deben estos sentirse afectados sino todo lo contrario deberían pensar que las verdaderas víctimas son esos seres que no guardan amor al prójimo. Que les falta grandeza humana, que se aprovechan de otros, que se sienten superiores. No son seres sencillos, humildes, sensibles, y tienen un alto grado de pedantería. El egoísmo, el sentirse superior al otro.
La existencia de la grandeza, no admite y rechaza la pedantería de sentirse superior a los otros, lo importante de un ser humano no es el dinero que tiene, ni el poder que tienen en la sociedad, sino que está definida por la escala de valores que tienen. Generalmente generosos, y un profundo amor y respeto al prójimo, las personas valen no por los bienes que tienen sino por los valores que los caracterizan.
Francisco Benard
Abogado