El sacerdote colombiano Pedro Basilio no actúa en consecuencia ya que ha sido multado tras hacerse viral un vídeo en el que aparecía desatando su violenta ira contra dos clientes de un mercado que le preguntaron por qué no llevaba mascarilla. El sacerdote se lió a palos en modo Cobra-Kai.
Los hechos se dieron el 25 de diciembre en un supermercado de Choachí, municipio colombiano de la provincia de Cundinamarca. El cura estaba haciendo la compra sin ningún tipo de mascarilla, lo cual provocó que le pidieran que respetara las medidas sanitarias establecidas. Pues, reaccionó de forma violenta contra el hombre que le habló y comenzó a pegarle patadas y a forcejear con él.
Una mujer grabó lo sucedido y el párroco se acercó a ella para arrebatarle el teléfono. En ese momento, arrojó el móvil de otra persona al suelo. “Solo porque le pedimos que nos dijera porque no llevaba mascarilla… Este señor es un agresor, es un violento”, indicó la víctima. Minuto después llegó la Policía que notificó lo sucedido y se procedió a multar al párroco. Le impusieron una multa de 936.000 pesos colombianos (unos 250 dólares, 220 euros) por violar las medidas sanitarias y actitud violenta.
Según uno de los testigos argumentó que el hombre decía que no llevaba mascarilla por una enfermedad respiratoria, pero su reacción fue violenta con los presentes solo por preguntarle.
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El sacerdote colombiano Pedro Basilio no actúa en consecuencia ya que ha sido multado tras hacerse viral un vídeo en el que aparecía desatando su violenta ira contra dos clientes de un mercado que le preguntaron por qué no llevaba mascarilla. El sacerdote se lió a palos en modo Cobra-Kai.
Los hechos se dieron el 25 de diciembre en un supermercado de Choachí, municipio colombiano de la provincia de Cundinamarca. El cura estaba haciendo la compra sin ningún tipo de mascarilla, lo cual provocó que le pidieran que respetara las medidas sanitarias establecidas. Pues, reaccionó de forma violenta contra el hombre que le habló y comenzó a pegarle patadas y a forcejear con él.
Una mujer grabó lo sucedido y el párroco se acercó a ella para arrebatarle el teléfono. En ese momento, arrojó el móvil de otra persona al suelo. “Solo porque le pedimos que nos dijera porque no llevaba mascarilla… Este señor es un agresor, es un violento”, indicó la víctima. Minuto después llegó la Policía que notificó lo sucedido y se procedió a multar al párroco. Le impusieron una multa de 936.000 pesos colombianos (unos 250 dólares, 220 euros) por violar las medidas sanitarias y actitud violenta.
Según uno de los testigos argumentó que el hombre decía que no llevaba mascarilla por una enfermedad respiratoria, pero su reacción fue violenta con los presentes solo por preguntarle.
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 30, 2020