Especialistas plantean que estos sistemas de IA serían capaces de realizar análisis “multimodales” que probablemente están en concordancia con las necesidades de la traducción de la comunicación animal.
Una nueva tecnología impulsada por inteligencia artificial (IA) está preparada para ayudarnos a entender el lenguaje en el que los animales se comunican, señala un artículo publicado recientemente en Scientific American. Con los recientes avances en IA, “la gente se da cuenta de que estamos al borde de avances bastante importantes en lo que respecta a la comprensión del comportamiento comunicativo de los animales”, comentó Christian Rutz, ecólogo conductual de la Universidad de St Andrews en Escocia.
A medida que los métodos para obtener información se desarrollan y se vuelven más baratos, la cantidad de datos se ha disparado. Esta situación hace prácticamente imposible que los científicos puedan examinarlos manualmente de manera eficiente. Sin embargo, debido a que los grandes modelos de lenguaje con IA generativa se nutren de grandes cantidades de información, estos podrían ser una herramienta eficaz para alcanzar estos objetivos.
“Se ha abierto la puerta al uso del aprendizaje automático para decodificar lenguajes que aún no sabemos cómo decodificar”, puntualiza Aza Raskin, uno de los fundadores de la organización Earth Species Project, dedicada a recopilar una amplia gama de datos de una variedad de especies y construir modelos de aprendizaje automático para analizarlos.
Los especialistas plantean que estos sistemas de IA serían capaces de realizar análisis “multimodales” que probablemente están en concordancia con las necesidades de la traducción de la comunicación animal. Este enfoque “multimodal” se basa en que, al igual que nosotros utilizamos el lenguaje corporal y los gestos mientras hablamos, muchos animales utilizan diferentes modos de comunicación simultáneamente. En este sentido, un sonido emitido debe analizarse en relación con la conducta que el animal manifiesta (etograma), pues resulta relevante para comprender lo que intenta transmitir.
El experto en conducta animal, Con Slobodchikoff, plantea que nuestras mascotas suelen utilizar señales multimodales, como un ladrido combinado con una postura corporal. Sin embargo, “estamos tan obsesionados con que el sonido sea el único elemento válido de comunicación, que nos perdemos muchas de las otras señales”, afirma.
Merlin es una aplicación gratuita impulsada por IA desarrollada por el Laboratorio de Ornitología de Cornell (EE.UU.) que identifica especies de aves a partir de la grabación proporcionada por un usuario. Con notable precisión Merlin puede identificar los trinos de más de 1.000 especies de aves. Por su parte, Slobodchikoff está desarrollando un modelo de IA destinado a traducir las expresiones faciales y los ladridos de un perro. “Los animales tienen pensamientos, esperanzas y tal vez sueños propios”, señala este experto.
Shane Gero, de la Universidad de Carleton (Canadá), es el biólogo principal del Proyecto Iniciativa de Traducción de Cetáceos (CETI, por sus siglas en inglés) que intenta comprender el lenguaje del cachalote mediante el registro de las vocalizaciones de las ballenas por medio de micrófonos submarinos acoplados a una boya. En colaboración con Daniela Rus, especialista en robótica y programación en el Instituto Tecnológico de Massachusetts, está analizando estos registros mediante sistemas de IA con el interés de diseñar un ‘chatbot ballena’.
Debido a la capacidad de la IA de imitar el habla humana con solo tomar una breve muestra, Raskin predice que, en los próximos 2 años, “podremos construir esto para la comunicación animal”. Plantea que, el Earth Species Project ya está desarrollando modelos de IA que emulan una variedad de especies, con el objetivo de tener “conversaciones” con animales.
Una nueva tecnología impulsada por inteligencia artificial (IA) está preparada para ayudarnos a entender el lenguaje en el que los animales se comunican, señala un artículo publicado recientemente en Scientific American. Con los recientes avances en IA, “la gente se da cuenta de que estamos al borde de avances bastante importantes en lo que respecta a la comprensión del comportamiento comunicativo de los animales”, comentó Christian Rutz, ecólogo conductual de la Universidad de St Andrews en Escocia.
A medida que los métodos para obtener información se desarrollan y se vuelven más baratos, la cantidad de datos se ha disparado. Esta situación hace prácticamente imposible que los científicos puedan examinarlos manualmente de manera eficiente. Sin embargo, debido a que los grandes modelos de lenguaje con IA generativa se nutren de grandes cantidades de información, estos podrían ser una herramienta eficaz para alcanzar estos objetivos.
“Se ha abierto la puerta al uso del aprendizaje automático para decodificar lenguajes que aún no sabemos cómo decodificar”, puntualiza Aza Raskin, uno de los fundadores de la organización Earth Species Project, dedicada a recopilar una amplia gama de datos de una variedad de especies y construir modelos de aprendizaje automático para analizarlos.
Los especialistas plantean que estos sistemas de IA serían capaces de realizar análisis “multimodales” que probablemente están en concordancia con las necesidades de la traducción de la comunicación animal. Este enfoque “multimodal” se basa en que, al igual que nosotros utilizamos el lenguaje corporal y los gestos mientras hablamos, muchos animales utilizan diferentes modos de comunicación simultáneamente. En este sentido, un sonido emitido debe analizarse en relación con la conducta que el animal manifiesta (etograma), pues resulta relevante para comprender lo que intenta transmitir.
El experto en conducta animal, Con Slobodchikoff, plantea que nuestras mascotas suelen utilizar señales multimodales, como un ladrido combinado con una postura corporal. Sin embargo, “estamos tan obsesionados con que el sonido sea el único elemento válido de comunicación, que nos perdemos muchas de las otras señales”, afirma.
Merlin es una aplicación gratuita impulsada por IA desarrollada por el Laboratorio de Ornitología de Cornell (EE.UU.) que identifica especies de aves a partir de la grabación proporcionada por un usuario. Con notable precisión Merlin puede identificar los trinos de más de 1.000 especies de aves. Por su parte, Slobodchikoff está desarrollando un modelo de IA destinado a traducir las expresiones faciales y los ladridos de un perro. “Los animales tienen pensamientos, esperanzas y tal vez sueños propios”, señala este experto.
Shane Gero, de la Universidad de Carleton (Canadá), es el biólogo principal del Proyecto Iniciativa de Traducción de Cetáceos (CETI, por sus siglas en inglés) que intenta comprender el lenguaje del cachalote mediante el registro de las vocalizaciones de las ballenas por medio de micrófonos submarinos acoplados a una boya. En colaboración con Daniela Rus, especialista en robótica y programación en el Instituto Tecnológico de Massachusetts, está analizando estos registros mediante sistemas de IA con el interés de diseñar un ‘chatbot ballena’.
Debido a la capacidad de la IA de imitar el habla humana con solo tomar una breve muestra, Raskin predice que, en los próximos 2 años, “podremos construir esto para la comunicación animal”. Plantea que, el Earth Species Project ya está desarrollando modelos de IA que emulan una variedad de especies, con el objetivo de tener “conversaciones” con animales.
PrisioneroEnArgentina.com
Setiembre 27, 2023