La poliomielitis, la viruela, la hepatitis A y B son virus graves que la humanidad aprendió a dominar con soluciones eficaces. Incluso la gripe, que puede cambiar y mutar cada año, tiene una vacuna. Y, sin embargo, no hay remedio para el humilde resfriado.
Sin embargo, eso no es por falta de intentos. La búsqueda de una cura para el resfriado común comenzó en la década de 1950, poco después de que los científicos descubrieran el principal grupo de patógenos, conocidos como rinovirus, detrás de los resfriados. En conjunto, representa hasta el 75 por ciento de los resfriados en adultos. Pero los científicos se toparon rápidamente con un problema que todavía obstaculiza a los investigadores en la actualidad. El principal desafío con el rinovirus es el número de cepas circulantes.
Hay al menos 160 cepas o serotipos diferentes de rinovirus. Eso significa que romper el frío no es tanto buscar una solución a un problema como tratar de diseñar una llave maestra para abrir cientos de cerraduras diferentes a la vez. Es increíblemente difícil crear una vacuna o un fármaco que apunte a todas esas 160 [cepas].
El descubrimiento de estas cepas, realizado durante la década de 1990, supuso un duro golpe para el desarrollo de vacunas. Tenemos esta gran cantidad de serotipos que circulan todo el tiempo y eso realmente desanimó a muchas personas a trabajar seriamente en vacunas. Los primeros trabajos realizados a mediados del siglo XX mostraron que las vacunas simples podían inmunizar a las personas contra una cepa, pero la idea de desarrollar docenas o incluso cientos de vacunas para una enfermedad, y mucho menos para un solo individuo que requiere tantas inyecciones, es poco práctica y costosa.
Aún así, los investigadores están trabajando en algunas soluciones ingeniosas. Una forma, que un grupo del Imperial College London está investigando actualmente, es descubrir alguna parte de la estructura viral que comparten los 160 serotipos. Si pueden apuntar con éxito a una respuesta inmune contra esa estructura común, entonces podrían diseñar una vacuna única que ofrezca protección contra todas las cepas de rinovirus.
Las vacunas se pueden hacer para inocular contra una cepa, pero las cepas también se pueden mezclar en una especie de cóctel de vacunas. La vacuna contra la polio constaba de los tres serotipos virales de la polio, y la vacuna creada contra la neumonía tiene componentes de 23 cepas bacterianas diferentes. Las personas han aumentado constantemente la cantidad de componentes en las vacunas a lo largo de los años. Es solo agregar más cosas. Estamos tomando el enfoque menos emocionante pero un método probado y verdadero.
El objetivo de los científicos es crear una combinación de vacunas de al menos 80 cepas, que cubran el grupo de serotipos de rinovirus que son los más comunes y virulentos. A diferencia del virus de la gripe, no es probable que el rinovirus mute a nuevas formas: los sueros creados hace décadas todavía son efectivos contra sus cepas específicas de rinovirus en la actualidad. Una vez que la vacuna esté completa, no debería necesitar mucha actualización. Recientemente fue capaz de crear una inoculación efectiva con 50 serotipos de rinovirus, pero no se espera que los 30 restantes lleguen fácilmente. Cada nuevo serotipo agregado a la mezcla cuesta una cantidad significativa de dinero y agrega complejidad a la fórmula.
Otros investigadores están buscando compuestos para curar el resfriado después de una infección. Para esto, los investigadores buscan inspiración en las propias defensas del cuerpo humano. Los científicos están interesados en una familia de moléculas muy pequeñas que se encuentran en los sistemas inmunológicos [humanos] conocidas como péptidos de defensa del huésped. Nuestro sistema inmunológico libera estos compuestos después de una infección y cree que pueden atacar al virus o evitar que se replique. Por el momento, estos péptidos se degradan con bastante rapidez, por lo que está tratando de encontrar una manera de estabilizarlos para que puedan tomarse como medicamento.
Aún así, algunos de los desafíos no radican en la biología variada del rinovirus. Hay muchos desafíos sociales. Incluso si encontramos una cura para el resfriado, probablemente no estará disponible para las personas sanas que se encogen de hombros por el resfriado en tres o cuatro días. Es posible que una cura ni siquiera sea tan útil, porque la mayoría de las personas ya se están recuperando cuando pueden ver a un médico. Además, necesitaría realizar una prueba para ver si incluso tenía rinovirus en lugar de algún virus no relacionado que causa síntomas idénticos, como el coronavirus humano o el adenovirus. En particular, ha habido un apetito por desarrollar un medicamento que actúe en las primeras etapas de un resfriado.
Pero todavía vale la pena encontrar una cura. El resfriado común puede ser una molestia que hace que la mayoría de las personas permanezcan en reposo durante unos días, pero puede exacerbar gravemente las afecciones respiratorias crónicas, como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) o la fibrosis quística. Si alguien ya está en el hospital y tiene una exacerbación de una enfermedad existente [por rinovirus], el medicamento se puede administrar rápidamente. En este caso, tal cura podría salvar vidas.
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Por Dr. Larry Canner.
La poliomielitis, la viruela, la hepatitis A y B son virus graves que la humanidad aprendió a dominar con soluciones eficaces. Incluso la gripe, que puede cambiar y mutar cada año, tiene una vacuna. Y, sin embargo, no hay remedio para el humilde resfriado.
Sin embargo, eso no es por falta de intentos. La búsqueda de una cura para el resfriado común comenzó en la década de 1950, poco después de que los científicos descubrieran el principal grupo de patógenos, conocidos como rinovirus, detrás de los resfriados. En conjunto, representa hasta el 75 por ciento de los resfriados en adultos. Pero los científicos se toparon rápidamente con un problema que todavía obstaculiza a los investigadores en la actualidad. El principal desafío con el rinovirus es el número de cepas circulantes.
Hay al menos 160 cepas o serotipos diferentes de rinovirus. Eso significa que romper el frío no es tanto buscar una solución a un problema como tratar de diseñar una llave maestra para abrir cientos de cerraduras diferentes a la vez. Es increíblemente difícil crear una vacuna o un fármaco que apunte a todas esas 160 [cepas].
El descubrimiento de estas cepas, realizado durante la década de 1990, supuso un duro golpe para el desarrollo de vacunas. Tenemos esta gran cantidad de serotipos que circulan todo el tiempo y eso realmente desanimó a muchas personas a trabajar seriamente en vacunas. Los primeros trabajos realizados a mediados del siglo XX mostraron que las vacunas simples podían inmunizar a las personas contra una cepa, pero la idea de desarrollar docenas o incluso cientos de vacunas para una enfermedad, y mucho menos para un solo individuo que requiere tantas inyecciones, es poco práctica y costosa.
Aún así, los investigadores están trabajando en algunas soluciones ingeniosas. Una forma, que un grupo del Imperial College London está investigando actualmente, es descubrir alguna parte de la estructura viral que comparten los 160 serotipos. Si pueden apuntar con éxito a una respuesta inmune contra esa estructura común, entonces podrían diseñar una vacuna única que ofrezca protección contra todas las cepas de rinovirus.
Las vacunas se pueden hacer para inocular contra una cepa, pero las cepas también se pueden mezclar en una especie de cóctel de vacunas. La vacuna contra la polio constaba de los tres serotipos virales de la polio, y la vacuna creada contra la neumonía tiene componentes de 23 cepas bacterianas diferentes. Las personas han aumentado constantemente la cantidad de componentes en las vacunas a lo largo de los años. Es solo agregar más cosas. Estamos tomando el enfoque menos emocionante pero un método probado y verdadero.
El objetivo de los científicos es crear una combinación de vacunas de al menos 80 cepas, que cubran el grupo de serotipos de rinovirus que son los más comunes y virulentos. A diferencia del virus de la gripe, no es probable que el rinovirus mute a nuevas formas: los sueros creados hace décadas todavía son efectivos contra sus cepas específicas de rinovirus en la actualidad. Una vez que la vacuna esté completa, no debería necesitar mucha actualización. Recientemente fue capaz de crear una inoculación efectiva con 50 serotipos de rinovirus, pero no se espera que los 30 restantes lleguen fácilmente. Cada nuevo serotipo agregado a la mezcla cuesta una cantidad significativa de dinero y agrega complejidad a la fórmula.
Otros investigadores están buscando compuestos para curar el resfriado después de una infección. Para esto, los investigadores buscan inspiración en las propias defensas del cuerpo humano. Los científicos están interesados en una familia de moléculas muy pequeñas que se encuentran en los sistemas inmunológicos [humanos] conocidas como péptidos de defensa del huésped. Nuestro sistema inmunológico libera estos compuestos después de una infección y cree que pueden atacar al virus o evitar que se replique. Por el momento, estos péptidos se degradan con bastante rapidez, por lo que está tratando de encontrar una manera de estabilizarlos para que puedan tomarse como medicamento.
Aún así, algunos de los desafíos no radican en la biología variada del rinovirus. Hay muchos desafíos sociales. Incluso si encontramos una cura para el resfriado, probablemente no estará disponible para las personas sanas que se encogen de hombros por el resfriado en tres o cuatro días. Es posible que una cura ni siquiera sea tan útil, porque la mayoría de las personas ya se están recuperando cuando pueden ver a un médico. Además, necesitaría realizar una prueba para ver si incluso tenía rinovirus en lugar de algún virus no relacionado que causa síntomas idénticos, como el coronavirus humano o el adenovirus. En particular, ha habido un apetito por desarrollar un medicamento que actúe en las primeras etapas de un resfriado.
Pero todavía vale la pena encontrar una cura. El resfriado común puede ser una molestia que hace que la mayoría de las personas permanezcan en reposo durante unos días, pero puede exacerbar gravemente las afecciones respiratorias crónicas, como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) o la fibrosis quística. Si alguien ya está en el hospital y tiene una exacerbación de una enfermedad existente [por rinovirus], el medicamento se puede administrar rápidamente. En este caso, tal cura podría salvar vidas.
PrisioneroEnArgentina.com
Abril 6, 2023