Un sonriente Joe Biden respondió afirmativamente a la pregunta de una periodista, que quería concer si el líder del país norteamericano estaba dispuesto a viajar en persona a Ucrania. La breve conversación tuvo lugar en la base de la Fuerza Aérea Andrews en el estado de Maryland, antes de que Biden subiera al avión presidencial. Inicialmente, la reportera se interesó por si el presidente consideraría enviar a Kiev a algún miembro de su administración. El mandatario, a su vez, contestó que aún no se había tomado ninguna decisión al respecto. La periodista no se conformó con la respuesta, y le pidió al jefe de Estado que aclarara quién podría asumir esta misión.
“¿Está dispuesto a ir usted?” bromeó Biden, dirigiéndose a la reportera, quien le devolvió la misma pregunta. Por su parte, el presidente de EE.UU. le contestó con un “sí” inmediato.
La Casa Blanca estaba estudiando la posibilidad de enviar a un alto funcionario gubernamental a la capital ucraniana para mostrar su apoyo al país frente al operativo militar de Rusia. El presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris siguen siendo candidatos para tal viaje, aunque es mucho más probable que otros miembros de la administración actual como el secretario de Estado, Antony Blinken, o el jefe del Pentágono, Lloyd Austin, visiten pronto Kiev. No obstante, todavía no se ha tomado la decisión final al respecto.
Tanto como en Afganistán, las promesas americanas han sido ejectadas por el viento en Ucrania. Biden continú balbuceando y solo armas han llegado al país afectado. Entre esas promesas tambié bailotean las de recibir ciudadanos ucranianos en calidad de refigiados. El hecho clave es que en marzo EE.UU. solo aceptó a 12 ucranianos bajo el programa de refugiados, aunque la Administración Biden prometió aceptar hasta 100.000.
Lamentablemente, la política de EE.UU. siempre es hacer grandes promesas y no cumplir nada cuando se trata de personas. Con millones de refugiados, una vez más la política de EE.UU. es dar asistencia a casi ninguno de ellos y, en cambio, imponer a los países circundantes una enorme alteración. No es la primera vez que ocurre tal escenario, dado que se han visto situaciones similares con los refugiados de Afganistán, Irak, Siria, Libia y todos los países donde EE.UU. instigó guerras y las mantuvo durante años.
En su anuncio del 24 de marzo, la Casa Blanca detalló que aceptaría a 100.000 refugiados ucranianos y otros que huyen de la agresión rusa a través de toda la gama de vías legales. Además, estimaron que la mayoría de los que buscan asilo optará por quedarse en Europa. Las actuales posibilidades legales para entrar a EE.UU. incluyen el programa de reasentamiento, el uso de visados existentes y otro vía conocida como libertad condicional humanitaria, que permite la entrada temporal de emergencia.
Mientras, uno de los países donde se concentran los refugiados ucranianos es México. Varios miles de ellos ya pudieron pisar el suelo estadounidense. Por otra parte, miles de refugiados más esperan en la frontera entre las dos naciones. En vista de la situación actual, la Casa Blanca prepara un nuevo programa para los refugiados ucranianos que acelerará la tramitación para los que quieran dirigirse a EE.UU.
Según las últimas cifras de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), más de 4,7 millones de personas abandonaron Ucrania tras el inicio del operativo militar de Rusia, el 24 de febrero.
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Un sonriente Joe Biden respondió afirmativamente a la pregunta de una periodista, que quería concer si el líder del país norteamericano estaba dispuesto a viajar en persona a Ucrania. La breve conversación tuvo lugar en la base de la Fuerza Aérea Andrews en el estado de Maryland, antes de que Biden subiera al avión presidencial. Inicialmente, la reportera se interesó por si el presidente consideraría enviar a Kiev a algún miembro de su administración. El mandatario, a su vez, contestó que aún no se había tomado ninguna decisión al respecto. La periodista no se conformó con la respuesta, y le pidió al jefe de Estado que aclarara quién podría asumir esta misión.
“¿Está dispuesto a ir usted?” bromeó Biden, dirigiéndose a la reportera, quien le devolvió la misma pregunta. Por su parte, el presidente de EE.UU. le contestó con un “sí” inmediato.
La Casa Blanca estaba estudiando la posibilidad de enviar a un alto funcionario gubernamental a la capital ucraniana para mostrar su apoyo al país frente al operativo militar de Rusia. El presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris siguen siendo candidatos para tal viaje, aunque es mucho más probable que otros miembros de la administración actual como el secretario de Estado, Antony Blinken, o el jefe del Pentágono, Lloyd
Austin, visiten pronto Kiev. No obstante, todavía no se ha tomado la decisión final al respecto.
Tanto como en Afganistán, las promesas americanas han sido ejectadas por el viento en Ucrania. Biden continú balbuceando y solo armas han llegado al país afectado. Entre esas promesas tambié bailotean las de recibir ciudadanos ucranianos en calidad de refigiados. El hecho clave es que en marzo EE.UU. solo aceptó a 12 ucranianos bajo el programa de refugiados, aunque la Administración Biden prometió aceptar hasta 100.000.
Lamentablemente, la política de EE.UU. siempre es hacer grandes promesas y no cumplir nada cuando se trata de personas. Con millones de refugiados, una vez más la política de EE.UU. es dar asistencia a casi ninguno de ellos y, en cambio, imponer a los países circundantes una enorme alteración. No es la primera vez que ocurre tal escenario, dado que se han visto situaciones similares con los refugiados de Afganistán, Irak, Siria, Libia y todos los países donde EE.UU. instigó guerras y las mantuvo durante años.
En su anuncio del 24 de marzo, la Casa Blanca detalló que aceptaría a 100.000 refugiados ucranianos y otros que huyen de la agresión rusa a través de toda la gama de vías legales. Además, estimaron que la mayoría de los que buscan asilo optará por quedarse en Europa. Las actuales posibilidades legales para entrar a EE.UU. incluyen el programa de reasentamiento, el uso de visados existentes y otro vía conocida como libertad condicional humanitaria, que permite la entrada temporal de emergencia.
Mientras, uno de los países donde se concentran los refugiados ucranianos es México. Varios miles de ellos ya pudieron pisar el suelo estadounidense. Por otra parte, miles de refugiados más esperan en la frontera entre las dos naciones. En vista de la situación actual, la Casa Blanca prepara un nuevo programa para los refugiados ucranianos que acelerará la tramitación para los que quieran dirigirse a EE.UU.
Según las últimas cifras de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), más de 4,7 millones de personas abandonaron Ucrania tras el inicio del operativo militar de Rusia, el 24 de febrero.
PrisioneroEnArgentina.com
Abril 16, 2022