El sistema judicial de Estados Unidos está siendo erosionado por la influencia del magnate estadounidense George Soros, lo que se traduce en el aumento sin precedentes de los crímenes violentos en el país, opina el periodista estadounidense Tucker Carlson.

El financiero de origen húngaro “se ha hecho tan rico que los Gobiernos occidentales raras veces son capaces de defenderse cuando Soros interfiere en sus asuntos internos más importantes”.

Así, dijo, el inversor decidió en 2015 que Europa debía dar acogida a millones de refugiados de África y Oriente Medio. No tantos europeos lo querían, pero lo quería Soros, quien gastó casi 500.000 millones de dólares en organizaciones no gubernamentales que compelieron a los Gobiernos europeos aceptar lo que sería una oleada masiva de migración.

Como consecuencia, la crisis humanitaria continúa y la vida en Europa se ha vuelto más difícil. En París, por ejemplo, “se ha disparado la cantidad de crímenes violentos, particularmente violaciones”.

“Sin embargo, los políticos europeos, muchos de ellos financiados por Soros, se niegan a reconocerlo. ‘No mire allí, dicen, esto no tiene lugar, usted es un loco o un criminal si le presta atención'”, subrayó Carlson.

Algo semejante también ha estado sucediendo en EE.UU., remarca el periodista.

“George Soros decidió destruir el sistema judicial estadounidense y lo está haciendo con ayuda de los fiscales: por el momento, uno de cada cinco estadounidenses —más de 70 millones de personas— vive bajo la jurisdicción de los fiscales apoyados por Soros”, afirmó.

Estos desempeñan funciones en grandes ciudades como Nueva York, Chicago, San Louis, Nueva Orleans, Filadelfia, Los Ángeles, así como en diversos condados de Texas, Misisipi, Virginia, y Georgia.

“Soros ejerce su influencia mediante la financiación de campañas electorales, los fondos proceden de Open Society Foundations en comités afiliados de acción política y empresas pantalla”, detalló.

Carlson cita un reciente análisis por el fondo de protección legal de agencias de orden público LELDF, que situó en más de 75 el número de fiscales patrocinados por Soros, quien habría gastado más de 40.000 millones de dólares para que estas personas obtuvieran sus cargos.

Mencionó como ejemplo la ciudad de Filadelfia, donde los fiscales de Soros rechazan aplicar la ley a los grupos protegidos, que es su “calidad distintiva, el corazón de su ideología”. El resultado de todo esto ha sido “más víctimas de asesinato”.

El año pasado, la ciudad registró el máximo de homicidios en su historia, mientras que a escala nacional, el número de asesinatos, según el FBI, saltó un 30 % en 2020, el mayor incremento de un solo año en la historia estadounidense, indicó Carlson.

“Todo porque un multimillonario decidió que las leyes por las que votaron los ciudadanos estadounidenses son racistas. ¿Es de verdad una democracia en la opinión de ustedes? Claro que no”, concluyó.

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Agosto