Cuando éramos chicos y corríamos carreras. Al más chico lo poníamos varios pasos adelante. Le dábamos cancha. Tantos más pasos cuando más chico era el corredor.Así es la vida del minusválido, necesita, tienen derecho a varios o muchos pasos adelante de los otros para correr en igualdad de condiciones.No le concedemos nada, reconocemos en ellos un derecho elemental de los más elementales de los derechos humanos.Para poder ganarse la vida, el ciego, el amputado, el débil mental por cualquier causa, el sordo, el mudo, requieren muchos pasos de ventaja.Puede un sordo, un mudo, un ciego manejar una computadora? Pues enseñémosle y que lo hagan como el mejor, con orgullo, pero enseñémosle.No quieren limosna, no quieren favores, quieren ejercer el derecho elemental a trabajar. Quieren ser capaces de sostenerse a si mismos y sostener una familia.Digo computadora como podría decir mil cosas distintas. Desde traducir Braile a estudiar una carrera independiente.Desde música a artesanías pasando por distintos profesorados. Cuando tenemos el problema en casa recién reaccionamos. Cuánto cuesta una operación de ojos o de oído o de cerebro, cuanto cuesta una pierna ortopédica o una silla de rueda especial?Conocemos a genios que se levantaron sobre sus disminuciones físicas o mentales por que tuvieron los medios para hacerlo.A cuanto de ellos perdemos, desperdiciamos?De cuantos cerebros nos privamos?Nos es caridad, es obligación la de velar por ellos, como por los niños y las madres necesitadas y los ancianos. No creo que Dios justifique a un pueblo que olvida a los débiles.
Excelentísimo Señor Presidente de la Nación Argentina Ingeniero Mauricio Macri
La Pobreza cero es posible y si la coordinamos con la Doble Escolaridad obligatoria es garantía de tener una sociedad más segura y Justa.
Soy educadora; operé como Productora de televisión en el país y el extranjero y a los 65 años solo ambiciono como usted ver esta República en el podio de las grandes naciones.
Sabemos que quien delinque por hambre carece de sus necesidades mínimas satisfechas: la comida es la principal. Pensemos en re-direccionar la inversión social.
Cada ciudadano argentino mayor de 18 años y hasta su edad jubilatoria, podría recibir un fondo económico fijo. Mientras produzca formará parte de su salario y lo financiará el empleador, pero cuando por algún motivo deje de hacerlo, el mismo podría ser aportado por el Estado. Hablamos de un ingreso fijo al que denominaremos “Cuota alimentaria”. Los demás bienes que se requiera para vivir siempre deberán ser fruto de un trabajo.
Aquella persona que decidiese transgredir el sistema, sabrá que al ser detenida y juzgada perderá ese derecho a la alimentación básica, y deberá trabajar gratis para retribuir al Estado “las molestias ocasionadas”. Cuando hayan cumplido su pena, retornarán a la sociedad capacitados con un oficio y podrían volverá a cobrar su “cuota alimentaria“ si su conducta así lo demostrase.
Con un Sistema Educativo en el que se cumpla la doble jornada que incluya los días sábados con otras actividades, se garantizarían 313 días hábiles de actividades cognitivas, culturales y deportivas. Niños y adolecentes entre los cuatro y 17 años, no solo se capacitarán para el futuro, si no que tendrán cubierta y supervisada, su salud y alimentación. Al igual que en Estados Unidos, la presencia de alguno de ellos en la calle será motivo de la intervención del Estado a través de los órganos que se determine para ello. Se le sacaría al Narcotráfico los niños y adolescentes.
¿No hay tiempo, ni recursos para hacer rápidamente edificios? Al igual que en Japón, los niños pueden tomar su desayuno, almuerzo y merienda en sus propios escritorios escolares (en forma de viandas) Solo necesitamos la creación de campos deportivos, ya que en verano la Escuela se convierte en Colonia de vacaciones obligatoria.
Las inversiones, sin Justicia van a tardar en llegar. Espero que no le incomode mi franqueza.
Agradezco la lectura de esta inquietud . Solo deseo para usted y nuestra Patria, lo mejor.
UNOS PASOS ADELANTE…
Por Jorge Lobo Aragón.
REFLEXIÓN
Cuando éramos chicos y corríamos carreras. Al más chico lo poníamos varios pasos adelante. Le dábamos cancha. Tantos más pasos cuando más chico era el corredor. Así es la vida del minusválido, necesita, tienen derecho a varios o muchos pasos adelante de los otros para correr en igualdad de condiciones. No le concedemos nada, reconocemos en ellos un derecho elemental de los más elementales de los derechos humanos. Para poder ganarse la vida, el ciego, el amputado, el débil mental por cualquier causa, el sordo, el mudo, requieren muchos pasos de ventaja. Puede un sordo, un mudo, un ciego manejar una computadora? Pues enseñémosle y que lo hagan como el mejor, con orgullo, pero enseñémosle. No quieren limosna, no quieren favores, quieren ejercer el derecho elemental a trabajar. Quieren ser capaces de sostenerse a si mismos y sostener una familia. Digo computadora como podría decir mil cosas distintas. Desde traducir Braile a estudiar una carrera independiente. Desde música a artesanías pasando por distintos profesorados. Cuando tenemos el problema en casa recién reaccionamos. Cuánto cuesta una operación de ojos o de oído o de cerebro, cuanto cuesta una pierna ortopédica o una silla de rueda especial? Conocemos a genios que se levantaron sobre sus disminuciones físicas o mentales por que tuvieron los medios para hacerlo. A cuanto de ellos perdemos, desperdiciamos? De cuantos cerebros nos privamos? Nos es caridad, es obligación la de velar por ellos, como por los niños y las madres necesitadas y los ancianos. No creo que Dios justifique a un pueblo que olvida a los débiles.
Dr. Jorge B. Lobo Aragón.
PROPUESTA DE UNA CIUDADANA POR UN MAÑANA MEJOR
Por Teresa Figari
Excelentísimo Señor Presidente de la Nación Argentina Ingeniero Mauricio Macri
La Pobreza cero es posible y si la coordinamos con la Doble Escolaridad obligatoria es garantía de tener una sociedad más segura y Justa.
Soy educadora; operé como Productora de televisión en el país y el extranjero y a los 65 años solo ambiciono como usted ver esta República en el podio de las grandes naciones.
Sabemos que quien delinque por hambre carece de sus necesidades mínimas satisfechas: la comida es la principal. Pensemos en re-direccionar la inversión social.
Cada ciudadano argentino mayor de 18 años y hasta su edad jubilatoria, podría recibir un fondo económico fijo. Mientras produzca formará parte de su salario y lo financiará el empleador, pero cuando por algún motivo deje de hacerlo, el mismo podría ser aportado por el Estado. Hablamos de un ingreso fijo al que denominaremos “Cuota alimentaria”. Los demás bienes que se requiera para vivir siempre deberán ser fruto de un trabajo.
Aquella persona que decidiese transgredir el sistema, sabrá que al ser detenida y juzgada perderá ese derecho a la alimentación básica, y deberá trabajar gratis para retribuir al Estado “las molestias ocasionadas”. Cuando hayan cumplido su pena, retornarán a la sociedad capacitados con un oficio y podrían volverá a cobrar su “cuota alimentaria“ si su conducta así lo demostrase.
Con un Sistema Educativo en el que se cumpla la doble jornada que incluya los días sábados con otras actividades, se garantizarían 313 días hábiles de actividades cognitivas, culturales y deportivas. Niños y adolecentes entre los cuatro y 17 años, no solo se capacitarán para el futuro, si no que tendrán cubierta y supervisada, su salud y alimentación. Al igual que en Estados Unidos, la presencia de alguno de ellos en la calle será motivo de la intervención del Estado a través de los órganos que se determine para ello. Se le sacaría al Narcotráfico los niños y adolescentes.
¿No hay tiempo, ni recursos para hacer rápidamente edificios? Al igual que en Japón, los niños pueden tomar su desayuno, almuerzo y merienda en sus propios escritorios escolares (en forma de viandas) Solo necesitamos la creación de campos deportivos, ya que en verano la Escuela se convierte en Colonia de vacaciones obligatoria.
Las inversiones, sin Justicia van a tardar en llegar. Espero que no le incomode mi franqueza.
Agradezco la lectura de esta inquietud . Solo deseo para usted y nuestra Patria, lo mejor.
Teresa Figari