Hagamos una proyección benevolente, supongamos que se ganan las elecciones de medio término, supongamos que también se ganan las presidenciales del 2023. Un fulano parecido a Macri- porque no hay nadie en la oposición que salga del molde de mediocridad, buena voluntad, estupidez y cobardía al que Cambiemos nos acostumbró en el cuatrienio 2015- 2019- se hace cargo del gobierno y pretende comenzar a gobernar.
No nos engañemos como se engañaron en el 2015; estamos tan en el fondo, no solo económico y social sino también moral, que para sacar a flote la república se debería hacer un ajuste total e impiadoso. Es imposible que Argentina siga con un sistema político que, por inepcia y corrupción, ha devaluado el peso argentino en un 97,6% en treinta años.
Este ajuste total no debería quedar solo encasillado en lo económico, de la misma manera que hay que ajustar la economía, es menester, también, encarar una reforma institucional completa, dela misma manera que se debe reformar la educación que se ha convertido en un aguantadero ideológico donde se pretende “educar”, en la protesta revolucionaria a los hijos de los argentinos.
Pero tan importante como esto, es la necesidad de ajustar la mentalidad de los argentinos, mentalidad infectada por la convicción que no es necesario trabajar para sobrevivir ya que “papa estado” se encargará porque los han convencidos que la leche y la carne la produce un supermercado, porque creen que afirmar la nacionalidad es comprar caro aparatos electrónicos de dudosa calidad, porque se han tomado en serio el cuento de: “… y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino”, teoría que nadie en el mundo practica, pero que ha servido para que los argentinos paguemos los estudios, los tratamientos e inclusive jubilaciones de una multitud de “hermanos de la patria grande” que han sabido aprovechar la gratuidad de estudios o de tratamientos médicos que, pese a estar quebrada, aun ofrece la república Argentina.
Bien, José Cambio ha ganado las elecciones del 2023, y quiere poner en práctica todos los cambios que es necesario hacer en la república. No hay que tener una bola de cristal para saber que la ciudad de Buenos Aires será asolada mañana, tarde y noche por manifestaciones y piquetes, que cuando se quiera hacer una reforma laboral el congreso terminará tapado bajo una montaña de piedras, que si se quiere mejorar la educación Baradel decretará un paro eterno y que los movimiento sociales del “pobrismo” vaticano se encargarán de subvertir toda idea de orden en la república.
Realmente, ¿hay alguien que crea posible la reforma de todos aquellos problemas de la república en democracia?, ¿aún creen que el tener un 45, 48, 53% en las urnas les garantizará el éxito de lo que quieren hacer?, ¿son tan ciegos que siquiera piensan que, con Moyano, Baradel, Grabois, Daer- solo por nombrar a unos pocos- se puede dialogar?
No, imposible, si no vemos esto es porque el fracaso nos seduce, porque el miedo a ser políticamente incorrectos nos abruma, porque hacerle caso a aquello de: “tomar el toro por las astas” es demasiado para nuestra pavura.
Los antes mencionados, que no son solo esos cuatro, podríamos hablar de cien como ellos, no van a permitir ninguna solución para la Argentina. Esa Argentina soñada significa para ellos el fin de sus negociados. Los que queremos un país en serio, no ya para nosotros- no lo veremos por una cuestión etaria- sino para nuestros hijos y nietos, no podemos ser tan estúpidos de creernos el cuento que cualquier problema se soluciona con más democracia. Que el verso mal rimado que escuchamos desde 1983 no nos siga doliendo en los oídos. Para conseguir la república que anhelamos, la democracia es un lastre, porque no son las urnas la que eliminan a parásitos y ladrones…, esto se consigue de otra manera.
Quisiera hermanarme hoy con aquellos a los que la desazón les ha puesto cuatro clavos en su corazón. Pero no con todos, porque hoy vengo a hacer de la grieta la base desde la que la Patria puede ser recuperada, recuperarla solo con aquellos para los que nuestra tierra es mucho más que un perorata banal y de efemérides.
No me interesa, ni respeto, al aluvión corrupto que hoy vuelve por sus fueros de mangantes y ladrones, pero tampoco me interesan los tilingos que creían que repitiendo machaconamente, pero vaciados de fe, “¡si, se puede!”,una victoria vana le caería del cielo y hoy se apenan por el derrumbe un mundillo de fantasía al que sus propios dirigentes, con estupidez y cobardía supina, se dedicaron a demoler.
Hoy estamos frente a una derrota, que nos atañe porque se da en nuestra tierra y vuelve a postergar, con trapisondas electorales, lo que esta tierra se merece. Si debemos tener muy en claro, que como derrota en si, esta no nos pertenece porque los que decían dirigir el combate lo hacían aferrados a un fuero de progresía que nos resbala, más aún, que nos repugna porque creen ellos que dejando de lado a nuestra Fe adquieren carta de ciudadanía de un mundo decadente y progresista.
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Esta derrota sería grave si careciéramos de ejemplos, pero, Dios Nuestro Señor ha hecho que estos sobren en esta tierra y no hay que remontarse a muchos años atrás para revivirlos porque aún los tenemos frescos, porque esos paradigmas aún están vivos en nuestro corazón.
En la tarde heroica de Manchalá y ante la demora de los refuerzos y la falta de municiones los soldaditos salteños no se lamentaron, simplemente afilaron sus bayonetas; en la noche sacrificial del 13 de junio de 1982 el BIM 5 y fracciones del Ejército borraron la palabra derrota de sus corazones y siguieron atacando.
Esos son nuestros ejemplos y no la estúpida alegría de creer que somos algo por tener un congreso equilibrado.
José Luis Milia
Non nobis, Domine, non nobis. Sed Nomini tuo da gloriam.
Hace diez días fueron las PASO. Juguetón desatino electoral, si los hay, obra de la imaginación del difunto, pero aún no superado, máximo ladrón que tuvo el país. Que a la fecha solo haya servido para que las consultoras se suiciden cortándose las venas con una lata de coca cola oxidada, no importa, son las PASO que vinieron para quedarse y basta.
No vamos a hablar de esta debacle, la de las consultoras, porque sería hacer astillas de la leña ya hecha del árbol caído; más allá de que entre otras pocas cosas, las consultoras sólo cumplían un fin social importante, servían más como lavadoras de dinero “groncho” que como encuestadoras ya que sus resultados nos eximen de comentarios ulteriores.
No, sería mejor hablar de un portento porteño y por supuesto investigar quien lo hizo para premiarlo, ya que alguien debe ser el responsable de esta maravilla. Lo que ha sucedido luego de las PASO en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires es un acto de magia digno de David Copperfield; de la noche a la mañana ya no hay más gente durmiendo en la calle y, aunque a la noche el frío siga rondando los 5 ó 6 grados, y muchos crean que iguala al de la semana anterior a las PASO ya no parece ser lo que era por lo que el “monto” Donofrio en yunta con Juan Carr ya no necesitan abrir el gallinero mayor de Buenos Aires para que los cuerpos entumecidos que- antes de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias- llamaban a la solidaridad, a la lástima y a la puteada contra Macri se calienten con una sopa y un colchón blando.
En realidad un proceso difícil de catalogar- acompañando al frío- ha sucedido en Buenos Aires, el dólar se devaluó un 24,3%, lo que según la teoría económica de cualquier almacenero significa que, antes de las PASO, si comprabas un chango de supermercado (sin mercaderías, obvio) hoy solo podés comprar un 75,7% de ese carrito- algo así como el carrito sin tres ruedas- pero, pese al incremente de la pobreza que esto significa, salvo que se manifiesten en la dolorosa madrugada invernal no se ve a la perrada del otro lado del Riachuelo marchando con el alcahuete papal a la cabeza y reclamando contra la pobreza que el neoliberalismo ha traído nuevamente. Tampoco, el “movimiento Evita” ha vuelto a montar una cadena de ollas populares al estilo McDonald para los hambrientos del país.
Comparado con los últimos tres años y medio, un manto de tranquilidad ha caído sobre Buenos Aires. Parece que no hay más hambre y que no nos importa el dólar subiendo en ascensor, las carnicerías que se habían sacado de encima, gracias a las ollas populares, los excedentes de osobuco, hoy ven como aumenta de nuevo su stock y, aunque el tráfico de la ciudad sigue siendo infernal, no hay algaradas ni hombres morteros metiendo miedo a la infame burguesía. Solo han perdido- siempre hay alguien que pierde cuando otros ganan- aquellos que tres o cuatro veces a la semanas ligaban 500$ más un chori y un tetra por venir a manifestarse y, por supuesto las cocineras de las ollas populares. El resto, feliz.
El mismo día que la dupla Carr – Donofrio salieron a salvar friolentos en la ciudad de Buenos Aires, dos tipos murieron de frío debajo de un puente en Laferrere. Quizás no pudieron llegar hasta River para salvarse, quizás en La Matanza no hay almas generosas como la de estos solidarios calculadores, quizás la Intendente Magario no llegó a tiempo al cajero para sacar algunas monedas de los 10.000 millones de pesos que tiene encanutado en plazo fijo y comprarle algún abrigo y sopa caliente, quizás en La Matanza el Papa no ha delegado su poder en nadie; en fin, son muchos quizás y dos muertos de frío.
Pero, pasare lo que haya pasado en esa tragedia, cualquiera sabe que La Matanza es un Estado Libre Asociado Peronista y allí no entra esa aberración neoliberal que llaman SAME.
Me siento en la obligación, no exenta de una profunda tristeza, de escribir lo que sigue; pero, siendo sincero, no puedo guardarlo solo para mí, dado lo que se juega como futuro el de la República.
Creo, al hacer un repaso de mi vida, que me sobran defectos, y que las pocas virtudes que tengo no equilibran el fiel de la balanza. Si de esas pocas virtudes tuviera que vivir solo con una, elegiría el coraje, porque es la que me ha permitido pararme frente a un espejo sin sonrojarme y porque es lo que siempre me ha dado una medida de mi carácter. Gracias a él siempre pude vencer al miedo, en especial cuando recibía insultos y amenazas, por escribir cosas políticamente incorrectas. Soy un ser humano común y corriente, y el miedo, aunque he podido vencerlo siempre que se me plantó delante, me ha acompañado siempre.
Hoy debo reconocer con tristeza y frente a la actual situación de la nación que además de tener miedo de lo que pueda suceder, no tiene sentido ejercitar la bravura de decir “seguiré mis principios, aunque todo se vaya a la mierda” sin importarme que esa marea de heces nos tape. Estoy en una etapa en que más me interesa el país en el que puedan vivir con tranquilidad mis hijos y mis nietos que aquel que yo he soñado desde chico.
Escribo esto porque sé que hay personas – pocas, espero- que se han hecho muchas veces eco de mis palabras. Lamentablemente, una vez más los argentinos estamos obligados a elegir nuestro futuro de aquello que podemos extraer de un tarro de basura. Sigo pensando que quienes componen la pandilla de “Juntos por el Cambio” es una bazofia chabacana y mentirosa, pero tengo la convicción que, si tuviéramos un instrumento que pudiera medir la intensidad de la mierda moral que tienen en el alma y en el cerebro los Fernández y sus seguidores, podríamos considerar a los primeros como unos simples ganapanes de la política.
A los hechos me remito, o solo a un par de ellos que han sido llevados a cabo en los últimos días por elementos que responden a la horda que durante doce años saqueó el país. Si sin siquiera estar en el gobierno un juez, mafioso y prevaricador, puede procesar a Daniel Santoro – periodista con el que nada me une pero del que nada me permite dudar de su honestidad – por “coacción y extorsión en grado de tentativa” cuando solo cumplía con su deber de informar; cuando una maestra utiliza a sus alumnos para adoctrinarlos políticamente es ahí cuando podemos tener una dimensión de lo que nos espera, vemos que el “vamos por todo” sigue vigente.
Hoy tengo la seguridad- frente a estas elecciones- de que en el futuro a “Cambiemos”, “Juntos por el Cambio” o como sea que se autodenominen, si se hacen con el gobierno, los podremos obligar a que no mientan más, o a que de una vez por todas dejen de ser “progres” estúpidos – en esta materia ya se han recibido con honores – o a sacarlos, simplemente; pero tengo también el absoluto convencimiento que a los otros, a la siniestra murga de los Fernández, no habrá nada ni nadie que los pueda sacar si se hacen con el poder, y sé que solo dolor y lágrimas traerán a los argentinos.
Escribo esto porque desde hace un tiempo no hay día que no vuelva a mi memoria el magnífico poema de John Donne: “For Whom the Bell Tolls”, en especial el verso que dice: “…y por tanto, nunca preguntes por quién doblan las campanas, porque están doblando por ti”.
Hace tiempo que me ha dejado de preocupar que las campanas doblen por mí, lo que no estoy dispuesto a aceptar que doblen por mis hijos y por mis nietos.
El domingo 7 de Julio, Mirta L. Rivero escribió a Clarín una carta sobre Juan Manuel Otero, esta empieza así:
“Voy a escribir sobre un amigo que la vida cruzó a través de este correo de Lectores, en el año 2010. Era un orgulloso esposo, padre y abuelo de sus nietos, Brisa, Selene y Jorge…”
La publicación de la misma generó un recuerdo de “El Huevo” por parte del diario que pueden verlo aquí:
Estela Carlotto(a) “La Abuela” ha informado la recuperación del “nieto 130” hijo de los desaparecidos pero nunca denunciados como tales Juan Manuel Darroux y Elena Mijalchuk, que no figuran en ningún listado de “desaparecidos”. No obstante, Juan Manuel Darroux sí figura en un listado, concretamente el del Personal Civil de Inteligencia de la Armada de la República Argentina, denunciado como represores por organismos de DD.HH.
Estela viene cantando
Con su voz desafinada
Ha recuperado otro nieto
Sacado de una baraja.
Llena de vidrios su boca
Y alibur en la garganta
Contenta porque su cuenta
Pronto se verá engrosada.
Fríos denarios de plata
Guarda la vieja en su caja
A costa de mil calvarios
A costa de mil infamias.
¡Ya lo tengo en el coleto
Junto a fetos de apuradas!
Que nunca fueron gestados
Pero sirven de carnada
Para enternecer idiotas
Que creen cualquier pavada.
¡Que hoy ni siquiera importa
Ni el padre ni la montada!
Pues me aceptan cualquier cosa
Siempre que sepa contarla….
Que hoy nos importa nada
Que el ciento treinta carezca
del duelo y de la prosapia
Que solíamos inventar
Para otros de su laya
Y no aparezcan sus padres
En la historia de la farra,
¡Se han reproducido los necios
Que creen en mi palabra!,
Que hoy me siento capaz
Si es que la cosa cuadra
¡De hasta encajarle a Massera
La próxima “recuperada”!
José Luis Milia
Non nobis, Domine, non nobis. Sed Nomini tuo da gloriam.
Cuarenta y tres hombres y una mujer se hicieron un día a la mar un. No estoy haciendo la crónica de un crucero de placer ni estoy contando un chiste procaz. Se hicieron a la mar porque era su trabajo. Un trabajo que solo se sustenta si uno tiene para ello una vocación de hierro. Un trabajo por demás peligroso que ninguna aseguradora de riesgo bancaría sin una prima multimillonaria. Un trabajo por el que recibían menos, mucho menos, que lo que una puta de televisión cobra por contar su última encamada; pero eran marinos y era su obligación vigilar un mar que está en manos de depredadores y ladrones, un mar que los argentinos no le interesa y hacia el que solo una tragedia le hace volver sus ojos hacia él.
Eran submarinistas y como todos los hombres de armas de la Argentina, hacía años que estaban acostumbrados a usar materiales obsoletos, remendados y vencidos en su vida útil. Acostumbrados a ser menospreciados por el poder político, a recibir el constante descrédito que les hacía saber que para una parte importante de la Argentina ellos sobraban- esa Argentina de mierda llorona, mentirosa y cobarde- y que su destino solo les importaba a familiares y a muy poca gente más.
No obstante, en esta situación política y social de desprecio al uniforme y a la vida militar que venimos viviendo desde hace más de treinta y cinco años, ha habido, y los hay, miles de chicos, capaces, inteligentes y, fundamentalmente, buenas personas- por los cuales no se moverá jamás ningún canal de televisión- que han despreciado un futuro cómodo, sin traslados agobiantes y económicamente satisfactorio, para hacer la carrera de las armas. Muchas veces nos preocupamos por ver una juventud mediocre y hedonista que se emborracha o droga cada fin de semana y nos hemos olvidado, de manera infame, de aquellos que eligen su destino por encima de las satisfacciones materiales.
Es que lo políticamente correcto- esa savia “intelectual y progre” que envenena los cerebros cagones de políticos y periodistas- ha decidido que todo hombre de armas debe empezar su vida activa cargando con el pecado original de una guerra librada en una época en que ellos eran niños, y de la que estos paniaguados que borronean diarios, hablan en el congreso o son clientes vergonzantes de cualquier canal televisivo olvidan que no fueron la Instituciones Armadas de la República las que la iniciaron.
No hace falta ser muy despierto para darse cuenta que este odio, amasado por los que perdieron la guerra, tuvo su paroxismo bajo un gobierno de iletrados y ladrones que usaron a quienes odiaban a las FF.AA. porque ello les daba los fueros “progres” necesarios que les permitió robar a destajo. A partir de esto cualquiera puede pensar si no se retacearon recursos en las reparaciones de media vida del submarino A.R.A. “San Juan”- ¿recuerdan el infame “¡al agua pato!” gritado en el astillero?- y que si estas se llevaron a cabo de la mejor manera fue gracias a la capacidad técnica de los obreros del astillero y nada más. Aún flota en los mentideros navales la leyenda que cuenta que en lugar de cabillas de acero o madera dura, a la fragata A.R.A. “Libertad” le habían repuesto cabillas de plástico.
Que hoy la desaparición del submarino A.R.A. “San Juan” nos concentre en los problemas de la Armada Argentina no significa que las otras Fuerzas lo estén pasando bien. Deberíamos, los argentinos, hacernos varias preguntas: ¿Cuántos pilotos de combate de la F.A.A. han muerto en entrenamiento?, pero peor aún, ¿Cuántos pilotos de la F.A.A. han abandonado la carrera, no solo por los bajos sueldos sino también por la falta de medios para entrenarse?; ¿Cuántos helicopteristas y otros especialistas de Ejército han seguido el camino de los de la F.A.A. por las mismas razones?.
La respuesta es una, a los políticos argentinos les pesan las Fuerzas Armadas, ellos serían felices si el país fuera una Costa Rica desarmada y siguen creyendo, en su ignorancia, que el haber decidido que la República no tenga hipótesis de conflicto nos convierte automáticamente en inatacables.
Cuarenta y tres hombres y una mujer se hicieron a la mar un día y hoy sabemos que el mar se los llevó. Hoy la palabra más repetida en radio, diarios y televisión es ¡Héroes!, dichas por tipos que hasta ayer no se privaban de críticas o ninguneos o exaltaban la figura de un roñoso dedicado al corte de rutas decidiendo sin pruebas que la Gendarmería se lo había cargado. Que esa chusma de lameculos los llame héroes a los tripulantes del A.R.A. “San Juan” es una banalización infame del heroísmo; ¡que callen de una vez y que se limiten a mostrar las lágrimas de esposas, madres, padres e hijos de los que se llevó el mar porque eso vende y eso, y no otra cosa, es lo que les interesa!.
Algún canalla de los que sobran en las “orgas” de derechos humanos podría decir que la desaparición de Santiago Maldonado fue ejecutada por los “residuales” del proceso enquistados en el gobierno de Mauricio Macri como festejo de los once años de la desaparición de Julio Jorge López. No olvidemos ese slogan que sirve para todo y que ahora le tocó a Macri: “¡Macri, basura, vos sos la dictadura!” Otro chusco podría decir que no fue para festejar una pretérita desaparición que lo esfumaron a Maldonado, sino que lo han hecho para que no olviden a López.
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En verdad que una desaparición sirve de mucho en la medida que esté teñida de política. Pero sirve, especialmente, para que los argentinos, siempre ahogados en su estupidez e hipocresía, repitan por enésima vez su camino de contrición a la Plaza de Mayo y que un montón de idiotas, funcionales a la izquierda, se apretujen allí creyendo que la tumba de Videla ha sido abierta desde adentro.
Hoy con Maldonado tenemos el mismo ruido que once años atrás con López, con el agravante que la oposición kirchnerista y piquetera necesita con urgencia un “fiambre” y han llevado la farsa al extremo de tratar de meterle a chicos de 8 a 10 años en la cabeza que la desaparición “forzada” es moneda común en Argentina cuando no hay un gobierno nac & pop; total, Rodríguez Larreta ahogado en su debilidad ideológica optará por no sancionar a nadie y todos felices.
Pero hay algo que es mucho más infame, y es que en la Argentina democrática no son López y Maldonado los únicos desaparecidos; hay otros desaparecidos a los que nadie tiene en cuenta, por los que nunca se juntan multitudes para llorarlos ni nadie tira flores en el río.
El número de estos, los desaparecidos en democracia, se ha aproximado, desde 1990, al número de los presuntos desaparecidos durante el proceso, pero de esto no se habla, porque una desaparición es grave, no por si misma, por lo que significa que una persona desaparezca del mundo tangible
sino que para que sea tenida en cuenta debe tener un justificativo político para lamentarla.
Como no es así nadie dice que es un escándalo que desde ese año hayan desaparecido en la Argentina- sin siquiera una guerra mediante- 6.040 personas y que sean sólo eso, desaparecidos solo recordados por sus familias, que no preocupan de ninguna manera al resto de los argentinos.
Esto, y es justo decirlo, no lo dicen ni Clarín o La Nación; lo afirmó Página/12 al hacerse eco del documento “Desaparición en democracia. Informe acerca de la búsqueda de personas entre 1990 y 2013” elaborado por la ONG Acciones Coordinadas Contra la Trata (ACCT) en conjunto con la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex).
En ese lapso de tiempo “democrático” los “desaparecidos parias” -porque oficialmente a nadie le importa su destino- son niñas, niños, adolescentes y adultos que suman esa cantidad, de los cuales el 62% corresponde a mujeres generalmente secuestradas por las redes de prostitución; pero como las circunstancias de su desaparición no están ligadas a los circos judiciales de “lesa humanidad”, ni tienen relación o actividad que pueda ser utilizada políticamente, carecen de valor y tienen el mismo tratamiento que los muertos del setenta que no pertenecieron a la subversión; ya que no hay, ni creo que alguna vez escuchemos un lamento oficial por el asesinato de Cristina Viola o de Paula Lambruschini o el reconocimiento por la muerte en combate de los soldaditos formoseños como se hace con los muertos de la guerrilla.
Mañana, 2 de julio, bajo la administración de Marta Cascales -esposa de Guillermo Moreno- se iniciarán en todo el país la Jornada de Caridad del Papa. El Sumo Pontífice elegió a esta dama, figura controversial, por cierto, lo que acarrea una seie de miradas sospechosas. ¿Quién es Marta Amelia Cascales?
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JORNADA DE CARIDAD DEL PAPA
El día 2 de julio se llevará a cabo en todas las parroquias del país la JORNADA DE CARIDAD del PAPA. El SUMO PONTÍFICE utiliza los medios que llegan de parte de los hermanos del mundo para ayudar a otros hermanos más necesitados.
La persona que el Papa nombró para administrar estos fondos en Argentina es MARTA CASCALES, mujer de GUILLERMO MORENO (a) “patota”. Por esto, considero que ha llegado el momento de protestar por la ADHESIÓN POLITICA que FRANCISCO ha demostrado tener para con los corruptos de Argentina a lo largo de su papado.
Dada esta situación y teniendo en cuenta que estos fondos serán administrado por MARTA CASCALES, CREO NECESARIO, NEGARNOS A CONTRIBUIR EN ESTA COLECTA y, si es posible, haciéndoselo saber al que hace la colecta o al cura que celebre la misa del domingo.
“Marta Cascales fue la extraña escribana que conformó Meldorek a dos ancianas jubiladas prestanombres en el 2003 antes de Schoklender”
Luis Gasulla
Inmaculada Concepción Fazio y Noemí Raquel Averza contaban, en el año 2003 con 63 y 76 años de edad, respectivamente. El 4 de junio de ese mismo año, constituyeron Meldorek S.A. bajo la presencia y firma de la escribana Marta Amelia Cascales, esposa del funcionario K Guillermo Moreno. Meldorek S.A., rubro de casas móviles y módulos fue creada con un capital inicial de doce mil pesos pasaría a tener un valor de capital acumulado de dos millones de pesos treinta meses después, cuando las mencionadas socias fundadoras -que llegaron a tener 46 empresas- vendieron la firma.
Fuente: El Negocio de los Derechos Humanos, de Luis Gasulla. Editorial Sudamericana. Página 214.
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ALERTA, ALERTA! DIOS LOS CRIA Y ELLOS SE JUNTAN
MUÑECA BRAVA
Debemos resaltar que la persona a la que se refiere el señor Milia, MARTA CASCALES, realmente es la esposa del barrabrava K, GUILLERMO MORENO a quien le lleva quince años de edad y al que siempre apoyó y cobijó, casi como a un hijo. Tal es así que muchos todavía recuerdan cuando en el año 2008, en el interior del restaurante Laurak-Bat, del barrio de Montserrat donde cenaban, le aplicó una sonora cachetada a la señora María Fátima White. Esto por ser la esposa de un comensal ruralista que discutía de palabra con don Guillermo. Debió intervenir la Comisaría 4ta de la por entonces Policía Federal y posteriormente “la justicia independiente”.
BUENOS MUCHACHOS
Más atrás en el tiempo, en el año 2003 en su calidad de escribana, actuó en la conformación de Meldorek S.A la célebre constructora de Sergio Schoklender y las Madres de Plaza de Mayo. Todo desembocó en turbios manejos de fondos públicos, nuestros, a través de “Sueños Compartidos” (solo entre ellos). Procesados recientemente Sergio y Hebe, “se salvaron por falta de mérito” los ex gobernadores de Chaco, Jorge Capitanich; Santiago del Estero, Gerardo Zamora, Misiones, Maurice Closs y el actual de Santa Fe, Miguel Lifschitz; los ex ministros de Trabajo, Carlos Tomada y Planificación, Julio De Vido, y de la ex presidenta Cristina Kirchner, entre otros.
Julio casi rezando Hebe y Sergio Shocklender El Papa Francisco y Hebe de Bonafini
MÁS VIDAS QUE UN GATO
También fue directora suplente de la petrolera estatal Energía Argentina SA (Enarsa). Igual responsabilidad le tocó asumir entre junio de 2006 y julio de 2007, pero esta vez en la Empresa Argentina de Soluciones Satelitales Argentinas (AR-SAT), ambas controladas políticamente por Julio De Vido, quien para la “justicia independiente”, tiene más vidas que un gato.
ARGENTINA, PAIS GENEROSO…PARA ALGUNOS Y ALGUNAS
En 2009, fue protagonista directa de un confuso episodio en el que Moreno se salvó de justificar unos 400.000 pesos que había omitido declarar. Según explicaron las autoridades del banco HSBC a la Justicia, la sorpresiva aparición de ese dinero en la cuenta bancaria de él se debió a un error en una operación financiera celebrada por la propia Cascales. Su nombre aparece en los casos Boudou-Ciccone, tarjeta SUBE, subsidios al trigo, transporte, combustibles, etc.
Por último, en abril de 2015 el Papa Francisco, la nombró administradora de las donaciones de la iglesia católica, en Argentina, país por demás generoso…para algunos y algunas. Por ello, si puede, canalice su donación por otra vía.
“Lo malo es que la generosidad también puede ser un buen negocio”.
“El ejecutor de una empresa atroz debe imaginar que ya la ha cumplido, debe imponerse un porvenir que sea irrevocable como el pasado”
Jorge Luis Borges.- El Jardín de Senderos que se Bifurcan.
Es fácil definir a Pérez Esquivel. Es su gusto y su fetiche, manejarse con sepulturas anónimas a las que les pueda sacar un provecho e imaginar cementerios olvidados. Idolo indecente de grupos que han hecho de la inmoralidad su culto cotidiano, maneja sus obsesiones con la febrilidad del poseso y es su trajín tratar que el mundo sea, cada día, un mejor estercolero.
Grotesco maestro del desatino, pero ahíto de maldad, venía ocupando su tiempo en tratar de conseguir que a un asesino, Marwan Barghouti, se le otorgue, junto con la libertad, el Nobel de la paz, “premio” devaluado si lo hay, desde que sujetos como Desmond Tutú y el propio Adolfo lo utilizaron como herramienta para promocionar asesinos, sean estos etarras, palestinos o irlandeses.
No menos cierto es que en su prontuario se destaca con luz propia la cerrada defensa que este sujeto hizo de cuanto facineroso andaba asesinando gente a bombazos y tiros por estos lares; pretérito precursor de Zaffaroni en momentos que éste se dedicaba a negar habeas corpus a los tirabombas que Adolfo que defendía o a escribir un tratado sobre derecho penal militar más adecuado para los tercios de Alejandro Farnesio que para un ejército moderno, ambos sostenían con pasión mercenaria, pero en tiempos diferentes, la perversa creencia que los derramamientos de sangre que tanto le han costado a la Argentina- en los setenta pero también en democracia- justificaban la teoría de que en el fondo es la sociedad la culpable de todo.
Experto en escribir a diario el evangelio de la canallada, Adolfo tuvo momentos de gloria amañando medias verdades como cuando en un reportaje de la revista Gente (*), juró y perjuró que él y sus secuaces habían condenado el asesinato del Capitán Viola y de su hija de tres años, la singular crueldad con que los capitostes del ERP intentaron- sin siquiera acercarse a ello- destruir moral, aunque si físicamente, al Coronel Larrabure o el burdo y cruel asesinato de Paula Lambruschini. Aunque uno recorra exhaustivamente, hemerotecas y bibliografía tratando de encontrar una prueba de que estas condenas existieron, jamás encontrará nada pues jamás dijeron una palabra de consuelo hacia los deudos de esas víctimas, aunque esto no signifique que quizás Adolfo las haya “pensado” en lo más profundo de su cerebro, ¿o debemos pensar que un cristiano como él puede mentir cuando de criaturas humanas, pero de otro palo, se trata?
Hoy Adolfo es testigo presencial del derrumbe de las tramoyas más falaces que se han urdido en la historia de nuestro país y como perverso telonero de estas, busca con desesperación una alquimia que le permita evadirse de su tramposa vida y forjarse un nuevo relato. Ha elegido tergiversar algo que para los argentinos tiene el valor y la fuerza de un sagrario, se ha metido con lo mejor que tuvo La Argentina en un siglo que en general fue para el olvido. Quiere, de manera descarada y grosera robarse la memoria de los SOLDADOS ARGENTINOS SOLOS CONOCIDOS POR DIOS, e inventarles un pasado de desaparecidos sin importarle que ellos están registrados como héroes con sus nombres, más que en un cementerio, en el corazón de los argentinos. ¡Tamaña estupidez que nos muestra que Al “Adolfo”, ya en su senilidad, solo le queda talento para convertir sus canalladas en bufonadas grotescas.
(*).- Revista Gente, entrevista de Renée Salas y Osvaldo Leboso. Entrevista a Adolfo Pérez Esquivel.
Hay veces que la vida, impiadosa, nos pone en situaciones paradojales. Hoy está preso el general Milani. No nos equivoquemos, no lo han puesto preso por las escuchas, ni por la SI paralela, ni por las amenazas hechas- nunca denunciadas pero si recibidas- a muchas personas importantes del quehacer político, económico o social de la República, porque
Milani, con la autoridad que la “señora” le delegaba, sabía perfectamente y hora a hora que senador, diputado, obispo, empresario, colchonero o rey de bastos, se drogaba, tenía pasión por los menores de doce años, daba vueltas de noche por el rosedal o le pegaba a la mujer o a la amante. Milani ha caído preso por algo que
-como subteniente de veintiún años en el primer año de carrera- se supone que hizo como resultado de una orden, en una época en que el Ejército Argentino estaba en guerra por mandato de un gobierno constitucional.
Hoy debemos aceptar que si bien Milani hizo en los últimos años de la República y como Jefe del Estado Mayor General del Ejército cosas que no honran a nadie, tanto en lo institucional como en lo personal, hoy comparte barrotes con Señores dignísimos que por la Patria estaban dispuestos a entregar la vida y a los que una infame venganza les ha quitado la libertad.
No nos equivoquemos en la apreciación. Hoy Milani está preso, no por sus errores y trapisondas sino por haber creído, en su juventud- lo habían formado para eso- en ideales que se escriben con mayúscula. Milani, nos guste o no, es hoy un Preso Político.
El Padre Christian Federico von Wernich, acusado de delitos de “lesa humanidad”, lleva trece años preso. Condenado por un tribunal en el cual la prevaricación y la mentira fue la norma – ardides utilizados por los jueces con el concurso de una importante cantidad de testigos falsos- aceptó la condena con la misma resignación con que años antes aceptó ser Capellán de la policía de la provincia de Buenos Aires ante el requerimiento del Nuncio Apostólico, Monseñor Pío Laghi y del Obispo de La Plata, Monseñor Antonio Plaza.
En estos trece años que el Padre von Wernich lleva prisionero, ha sido para ustedes, Eminencias, el leproso del Levítico: “El leproso llevará los vestidos rasgados y desgreñada la cabeza, se cubrirá hasta el bigote e irá gritando: ¡Impuro, impuro! […..]. Es impuro y habitará solo; fuera del campamento tendrá su morada” (Lv 13,45-46). Salvo honrosas y muy contadas excepciones, Eminencias, pocos de ustedes han querido saber de él ni, menos aún, estar con él; de muy pocos de ustedes podría el Padre von Wernich decir: “…estuve enfermo, y me atendisteis; estuve en la cárcel, y me visitasteis.” (Mt 25: 35-36) y sin embargo quienes comparten con él la prisión jamás le han escuchado una palabra hiriente sobre este abandono.
El Padre von Wernich va a cumplir setenta y nueve años. Estuvo enfermo de cáncer y pese a las requisitorias de los médicos del Servicio Penal Federal que debía ser intervenido de manera urgente, las “dilaciones” de su juez de ejecución, el Dr. Rozanski, hicieron que recién después de once meses se le extirpara un tumor de la pierna que pesaba 4,5 kgs en una operación que duró siete horas.
Más allá de lo injusto de su condena, hace nueve años que el Padre von Wernich tiene derecho a la prisión domiciliaria y sin embargo la Jerarquía Católica no se ha preocupado de buscarle un lugar donde pueda cumplirla sino que todo indica que es éste un tema en el cual la Conferencia Episcopal Argentina prefiere lavarse las manos.
Creo que ha llegado la hora en que ustedes, Eminencias, tengan el coraje de ayudar a un hermano a quien- quizás por miedo, quizás por oportunismo político- tiempo atrás abandonaron y pongan en práctica aquello que Jesucristo nos enseñó: Amar al prójimo como a ti mismo.
Por José Luis Milia. Carta de lectores del periódico La Nación.
Odio y sangre
Quizá con la sola excepción de Donald Trump, un coro hipócrita y doliente de dirigentes de naciones que sufrieron el terrorismo castrista ha manifestado que lamenta la muerte de Fidel Castro. Bien decía Borges en su sabiduría sin tiempo: “No hay cosa como la muerte para mejorar a la gente”.
La muerte -vista desde la doblez con que acostumbramos a manejarnos- le ha provisto un impúdico baño de decencia a aquel que hizo del martirio de su pueblo la razón de su soberbia y que desde su cómodo sitial en La Habana, lejos de las balas y de las bombas que ordenaba a sus sicarios disparar, inundó en odio y sangre a toda América latina. No importan ya ni sus ideas ni sus acciones, él ya fue. Quizás a partir de ahora el mundo sea un poco mejor.
¿ALGUIEN CREE REALMENTE QUE DE ESTO SE PUEDE SALIR EN DEMOCRACIA?
◙
Por JOSÉ LUIS MILIA.
Hagamos una proyección benevolente, supongamos que se ganan las elecciones de medio término, supongamos que también se ganan las presidenciales del 2023. Un fulano parecido a Macri- porque no hay nadie en la oposición que salga del molde de mediocridad, buena voluntad, estupidez y cobardía al que Cambiemos nos acostumbró en el cuatrienio 2015- 2019- se hace cargo del gobierno y pretende comenzar a gobernar.
No nos engañemos como se engañaron en el 2015; estamos tan en el fondo, no solo económico y social sino también moral, que para sacar a flote la república se debería hacer un ajuste total e impiadoso. Es imposible que Argentina siga con un sistema político que, por inepcia y corrupción, ha devaluado el peso argentino en un 97,6% en treinta años.
[ezcol_1half] [/ezcol_1half] [ezcol_1half_end] [/ezcol_1half_end]Este ajuste total no debería quedar solo encasillado en lo económico, de la misma manera que hay que ajustar la economía, es menester, también, encarar una reforma institucional completa, dela misma manera que se debe reformar la educación que se ha convertido en un aguantadero ideológico donde se pretende “educar”, en la protesta revolucionaria a los hijos de los argentinos.
Pero tan importante como esto, es la necesidad de ajustar la mentalidad de los argentinos, mentalidad infectada por la convicción que no es necesario trabajar para sobrevivir ya que “papa estado” se encargará porque los han convencidos que la leche y la carne la produce un supermercado, porque creen que afirmar la nacionalidad es comprar caro aparatos electrónicos de dudosa calidad, porque se han tomado en serio el cuento de: “… y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino”, teoría que nadie en el mundo practica, pero que ha servido para que los argentinos paguemos los estudios, los tratamientos e inclusive jubilaciones de una multitud de “hermanos de la patria grande” que han sabido aprovechar la gratuidad de estudios o de tratamientos médicos que, pese a estar quebrada, aun ofrece la república Argentina.
Bien, José Cambio ha ganado las elecciones del 2023, y quiere poner en práctica todos los cambios que es necesario hacer en la república. No hay que tener una bola de cristal para saber que la ciudad de Buenos Aires será asolada mañana, tarde y noche por manifestaciones y piquetes, que cuando se quiera hacer una reforma laboral el congreso terminará tapado bajo una montaña de piedras, que si se quiere mejorar la educación Baradel decretará un paro eterno y que los movimiento sociales del “pobrismo” vaticano se encargarán de subvertir toda idea de orden en la república.
[ezcol_1half] [/ezcol_1half] [ezcol_1half_end] [/ezcol_1half_end]Realmente, ¿hay alguien que crea posible la reforma de todos aquellos problemas de la república en democracia?, ¿aún creen que el tener un 45, 48, 53% en las urnas les garantizará el éxito de lo que quieren hacer?, ¿son tan ciegos que siquiera piensan que, con Moyano, Baradel, Grabois, Daer- solo por nombrar a unos pocos- se puede dialogar?
No, imposible, si no vemos esto es porque el fracaso nos seduce, porque el miedo a ser políticamente incorrectos nos abruma, porque hacerle caso a aquello de: “tomar el toro por las astas” es demasiado para nuestra pavura.
Los antes mencionados, que no son solo esos cuatro, podríamos hablar de cien como ellos, no van a permitir ninguna solución para la Argentina. Esa Argentina soñada significa para ellos el fin de sus negociados. Los que queremos un país en serio, no ya para nosotros- no lo veremos por una cuestión etaria- sino para nuestros hijos y nietos, no podemos ser tan estúpidos de creernos el cuento que cualquier problema se soluciona con más democracia. Que el verso mal rimado que escuchamos desde 1983 no nos siga doliendo en los oídos. Para conseguir la república que anhelamos, la democracia es un lastre, porque no son las urnas la que eliminan a parásitos y ladrones…, esto se consigue de otra manera.
JOSE LUIS MILIA
josemilia_686@hotmail.com
Non nobis, Domine, non nobis. Sed Nomini tuo da gloriam.
PrisioneroEnArgentina.com
Junio 22, 2021
DE DERROTAS Y DERROTAS
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Quisiera hermanarme hoy con aquellos a los que la desazón les ha puesto cuatro clavos en su corazón. Pero no con todos, porque hoy vengo a hacer de la grieta la base desde la que la Patria puede ser recuperada, recuperarla solo con aquellos para los que nuestra tierra es mucho más que un perorata banal y de efemérides.
No me interesa, ni respeto, al aluvión corrupto que hoy vuelve por sus fueros de mangantes y ladrones, pero tampoco me interesan los tilingos que creían que repitiendo machaconamente, pero vaciados de fe, “¡si, se puede!”, una victoria vana le caería del cielo y hoy se apenan por el derrumbe un mundillo de fantasía al que sus propios dirigentes, con estupidez y cobardía supina, se dedicaron a demoler.
Hoy estamos frente a una derrota, que nos atañe porque se da en nuestra tierra y vuelve a postergar, con trapisondas electorales, lo que esta tierra se merece. Si debemos tener muy en claro, que como derrota en si, esta no nos pertenece porque los que decían dirigir el combate lo hacían aferrados a un fuero de progresía que nos resbala, más aún, que nos repugna porque creen ellos que dejando de lado a nuestra Fe adquieren carta de ciudadanía de un mundo decadente y progresista.
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Esta derrota sería grave si careciéramos de ejemplos, pero, Dios Nuestro Señor ha hecho que estos sobren en esta tierra y no hay que remontarse a muchos años atrás para revivirlos porque aún los tenemos frescos, porque esos paradigmas aún están vivos en nuestro corazón.
En la tarde heroica de Manchalá y ante la demora de los refuerzos y la falta de municiones los soldaditos salteños no se lamentaron, simplemente afilaron sus bayonetas; en la noche sacrificial del 13 de junio de 1982 el BIM 5 y fracciones del Ejército borraron la palabra derrota de sus corazones y siguieron atacando.
Esos son nuestros ejemplos y no la estúpida alegría de creer que somos algo por tener un congreso equilibrado.
José Luis Milia
PrisioneroEnArgentina.com
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PASARON LAS PASO
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Hace diez días fueron las PASO. Juguetón desatino electoral, si los hay, obra de la imaginación del difunto, pero aún no superado, máximo ladrón que tuvo el país. Que a la fecha solo haya servido para que las consultoras se suiciden cortándose las venas con una lata de coca cola oxidada, no importa, son las PASO que vinieron para quedarse y basta.
No vamos a hablar de esta debacle, la de las consultoras, porque sería hacer astillas de la leña ya hecha del árbol caído; más allá de que entre otras pocas cosas, las consultoras sólo cumplían un fin social importante, servían más como lavadoras de dinero “groncho” que como encuestadoras ya que sus resultados nos eximen de comentarios ulteriores.
No, sería mejor hablar de un portento porteño y por supuesto investigar quien lo hizo para premiarlo, ya que alguien debe ser el responsable de esta maravilla. Lo que ha sucedido luego de las PASO en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires es un acto de magia digno de David Copperfield; de la noche a la mañana ya no hay más gente durmiendo en la calle y, aunque a la noche el frío siga rondando los 5 ó 6 grados, y muchos crean que iguala al de la semana anterior a las PASO ya no parece ser lo que era por lo que el “monto” Donofrio en yunta con Juan Carr ya no necesitan abrir el gallinero mayor de Buenos Aires para que los cuerpos entumecidos que- antes de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias- llamaban a la solidaridad, a la lástima y a la puteada contra Macri se calienten con una sopa y un colchón blando.
En realidad un proceso difícil de catalogar- acompañando al frío- ha sucedido en Buenos Aires, el dólar se devaluó un 24,3%, lo que según la teoría económica de cualquier almacenero significa que, antes de las PASO, si comprabas un chango de supermercado (sin mercaderías, obvio) hoy solo podés comprar un 75,7% de ese carrito- algo así como el carrito sin tres ruedas- pero, pese al incremente de la pobreza que esto significa, salvo que se manifiesten en la dolorosa madrugada invernal no se ve a la perrada del otro lado del Riachuelo marchando con el alcahuete papal a la cabeza y reclamando contra la pobreza que el neoliberalismo ha traído nuevamente. Tampoco, el “movimiento Evita” ha vuelto a montar una cadena de ollas populares al estilo McDonald para los hambrientos del país.
Comparado con los últimos tres años y medio, un manto de tranquilidad ha caído sobre Buenos Aires. Parece que no hay más hambre y que no nos importa el dólar subiendo en ascensor, las carnicerías que se habían sacado de encima, gracias a las ollas populares, los excedentes de osobuco, hoy ven como aumenta de nuevo su stock y, aunque el tráfico de la ciudad sigue siendo infernal, no hay algaradas ni hombres morteros metiendo miedo a la infame burguesía. Solo han perdido- siempre hay alguien que pierde cuando otros ganan- aquellos que tres o cuatro veces a la semanas ligaban 500$ más un chori y un tetra por venir a manifestarse y, por supuesto las cocineras de las ollas populares. El resto, feliz.
El mismo día que la dupla Carr – Donofrio salieron a salvar friolentos en la ciudad de Buenos Aires, dos tipos murieron de frío debajo de un puente en Laferrere. Quizás no pudieron llegar hasta River para salvarse, quizás en La Matanza no hay almas generosas como la de estos solidarios calculadores, quizás la Intendente Magario no llegó a tiempo al cajero para sacar algunas monedas de los 10.000 millones de pesos que tiene encanutado en plazo fijo y comprarle algún abrigo y sopa caliente, quizás en La Matanza el Papa no ha delegado su poder en nadie; en fin, son muchos quizás y dos muertos de frío.
Pero, pasare lo que haya pasado en esa tragedia, cualquiera sabe que La Matanza es un Estado Libre Asociado Peronista y allí no entra esa aberración neoliberal que llaman SAME.
JOSE LUIS MILIA
josemilia_686@hotmail.com
EL MIEDO AL FUTURO DE LA REPÚBLICA
Me siento en la obligación, no exenta de una profunda tristeza, de escribir lo que sigue; pero, siendo sincero, no puedo guardarlo solo para mí, dado lo que se juega como futuro el de la República.
Creo, al hacer un repaso de mi vida, que me sobran defectos, y que las pocas virtudes que tengo no equilibran el fiel de la balanza. Si de esas pocas virtudes tuviera que vivir solo con una, elegiría el coraje, porque es la que me ha permitido pararme frente a un espejo sin sonrojarme y porque es lo que siempre me ha dado una medida de mi carácter. Gracias a él siempre pude vencer al miedo, en especial cuando recibía insultos y amenazas, por escribir cosas políticamente incorrectas. Soy un ser humano común y corriente, y el miedo, aunque he podido vencerlo siempre que se me plantó delante, me ha acompañado siempre.
Hoy debo reconocer con tristeza y frente a la actual situación de la nación que además de tener miedo de lo que pueda suceder, no tiene sentido ejercitar la bravura de decir “seguiré mis principios, aunque todo se vaya a la mierda” sin importarme que esa marea de heces nos tape. Estoy en una etapa en que más me interesa el país en el que puedan vivir con tranquilidad mis hijos y mis nietos que aquel que yo he soñado desde chico.
Escribo esto porque sé que hay personas – pocas, espero- que se han hecho muchas veces eco de mis palabras. Lamentablemente, una vez más los argentinos estamos obligados a elegir nuestro futuro de aquello que podemos extraer de un tarro de basura. Sigo pensando que quienes componen la pandilla de “Juntos por el Cambio” es una bazofia chabacana y mentirosa, pero tengo la convicción que, si tuviéramos un instrumento que pudiera medir la intensidad de la mierda moral que tienen en el alma y en el cerebro los Fernández y sus seguidores, podríamos considerar a los primeros como unos simples ganapanes de la política.
A los hechos me remito, o solo a un par de ellos que han sido llevados a cabo en los últimos días por elementos que responden a la horda que durante doce años saqueó el país. Si sin siquiera estar en el gobierno un juez, mafioso y prevaricador, puede procesar a Daniel Santoro – periodista con el que nada me une pero del que nada me permite dudar de su honestidad – por “coacción y extorsión en grado de tentativa” cuando solo cumplía con su deber de informar; cuando una maestra utiliza a sus alumnos para adoctrinarlos políticamente es ahí cuando podemos tener una dimensión de lo que nos espera, vemos que el “vamos por todo” sigue vigente.
Hoy tengo la seguridad- frente a estas elecciones- de que en el futuro a “Cambiemos”, “Juntos por el Cambio” o como sea que se autodenominen, si se hacen con el gobierno, los podremos obligar a que no mientan más, o a que de una vez por todas dejen de ser “progres” estúpidos – en esta materia ya se han recibido con honores – o a sacarlos, simplemente; pero tengo también el absoluto convencimiento que a los otros, a la siniestra murga de los Fernández, no habrá nada ni nadie que los pueda sacar si se hacen con el poder, y sé que solo dolor y lágrimas traerán a los argentinos.
Escribo esto porque desde hace un tiempo no hay día que no vuelva a mi memoria el magnífico poema de John Donne: “For Whom the Bell Tolls”, en especial el verso que dice: “…y por tanto, nunca preguntes por quién doblan las campanas, porque están doblando por ti”.
Hace tiempo que me ha dejado de preocupar que las campanas doblen por mí, lo que no estoy dispuesto a aceptar que doblen por mis hijos y por mis nietos.
JOSE LUIS MILIA
josemilia_686@hotmail.com
Non nobis, Domine, non nobis. Sed Nomini tuo da gloriam.
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 9, 2019
OTERO
PrisioneroEnArgentina.com
Julio 11, 2019
SON 130, ¿O NO?
Estela Carlotto(a) “La Abuela” ha informado la recuperación del “nieto 130” hijo de los desaparecidos pero nunca denunciados como tales Juan Manuel Darroux y Elena Mijalchuk, que no figuran en ningún listado de “desaparecidos”. No obstante, Juan Manuel Darroux sí figura en un listado, concretamente el del Personal Civil de Inteligencia de la Armada de la República Argentina, denunciado como represores por organismos de DD.HH.
Estela viene cantando
Con su voz desafinada
Ha recuperado otro nieto
Sacado de una baraja.
Llena de vidrios su boca
Y alibur en la garganta
Contenta porque su cuenta
Pronto se verá engrosada.
Fríos denarios de plata
Guarda la vieja en su caja
A costa de mil calvarios
A costa de mil infamias.
¡Ya lo tengo en el coleto
Junto a fetos de apuradas!
Que nunca fueron gestados
Pero sirven de carnada
Para enternecer idiotas
Que creen cualquier pavada.
¡Que hoy ni siquiera importa
Ni el padre ni la montada!
Pues me aceptan cualquier cosa
Siempre que sepa contarla….
Que hoy nos importa nada
Que el ciento treinta carezca
del duelo y de la prosapia
Que solíamos inventar
Para otros de su laya
Y no aparezcan sus padres
En la historia de la farra,
¡Se han reproducido los necios
Que creen en mi palabra!,
Que hoy me siento capaz
Si es que la cosa cuadra
¡De hasta encajarle a Massera
La próxima “recuperada”!
José Luis Milia
PrisioneroEnArgentina.com
LA BANALIZACIÓN DEL HEROÍSMO
Soy marino de mi Patria
Yo resguardo su heredad
Mi destino está en las olas
En las olas de la mar.
Anónimo.- Canción del marino.
Cuarenta y tres hombres y una mujer se hicieron un día a la mar un. No estoy haciendo la crónica de un crucero de placer ni estoy contando un chiste procaz. Se hicieron a la mar porque era su trabajo. Un trabajo que solo se sustenta si uno tiene para ello una vocación de hierro. Un trabajo por demás peligroso que ninguna aseguradora de riesgo bancaría sin una prima multimillonaria. Un trabajo por el que recibían menos, mucho menos, que lo que una puta de televisión cobra por contar su última encamada; pero eran marinos y era su obligación vigilar un mar que está en manos de depredadores y ladrones, un mar que los argentinos no le interesa y hacia el que solo una tragedia le hace volver sus ojos hacia él.
Eran submarinistas y como todos los hombres de armas de la Argentina, hacía años que estaban acostumbrados a usar materiales obsoletos, remendados y vencidos en su vida útil. Acostumbrados a ser menospreciados por el poder político, a recibir el constante descrédito que les hacía saber que para una parte importante de la Argentina ellos sobraban- esa Argentina de mierda llorona, mentirosa y cobarde- y que su destino solo les importaba a familiares y a muy poca gente más.
No obstante, en esta situación política y social de desprecio al uniforme y a la vida militar que venimos viviendo desde hace más de treinta y cinco años, ha habido, y los hay, miles de chicos, capaces, inteligentes y, fundamentalmente, buenas personas- por los cuales no se moverá jamás ningún canal de televisión- que han despreciado un futuro cómodo, sin traslados agobiantes y económicamente satisfactorio, para hacer la carrera de las armas. Muchas veces nos preocupamos por ver una juventud mediocre y hedonista que se emborracha o droga cada fin de semana y nos hemos olvidado, de manera infame, de aquellos que eligen su destino por encima de las satisfacciones materiales.
Es que lo políticamente correcto- esa savia “intelectual y progre” que envenena los cerebros cagones de políticos y periodistas- ha decidido que todo hombre de armas debe empezar su vida activa cargando con el pecado original de una guerra librada en una época en que ellos eran niños, y de la que estos paniaguados que borronean diarios, hablan en el congreso o son clientes vergonzantes de cualquier canal televisivo olvidan que no fueron la Instituciones Armadas de la República las que la iniciaron.
No hace falta ser muy despierto para darse cuenta que este odio, amasado por los que perdieron la guerra, tuvo su paroxismo bajo un gobierno de iletrados y ladrones que usaron a quienes odiaban a las FF.AA. porque ello les daba los fueros “progres” necesarios que les permitió robar a destajo. A partir de esto cualquiera puede pensar si no se retacearon recursos en las reparaciones de media vida del submarino A.R.A. “San Juan”- ¿recuerdan el infame “¡al agua pato!” gritado en el astillero?- y que si estas se llevaron a cabo de la mejor manera fue gracias a la capacidad técnica de los obreros del astillero y nada más. Aún flota en los mentideros navales la leyenda que cuenta que en lugar de cabillas de acero o madera dura, a la fragata A.R.A. “Libertad” le habían repuesto cabillas de plástico.
Que hoy la desaparición del submarino A.R.A. “San Juan” nos concentre en los problemas de la Armada Argentina no significa que las otras Fuerzas lo estén pasando bien. Deberíamos, los argentinos, hacernos varias preguntas: ¿Cuántos pilotos de combate de la F.A.A. han muerto en entrenamiento?, pero peor aún, ¿Cuántos pilotos de la F.A.A. han abandonado la carrera, no solo por los bajos sueldos sino también por la falta de medios para entrenarse?; ¿Cuántos helicopteristas y otros especialistas de Ejército han seguido el camino de los de la F.A.A. por las mismas razones?.
La respuesta es una, a los políticos argentinos les pesan las Fuerzas Armadas, ellos serían felices si el país fuera una Costa Rica desarmada y siguen creyendo, en su ignorancia, que el haber decidido que la República no tenga hipótesis de conflicto nos convierte automáticamente en inatacables.
Cuarenta y tres hombres y una mujer se hicieron a la mar un día y hoy sabemos que el mar se los llevó. Hoy la palabra más repetida en radio, diarios y televisión es ¡Héroes!, dichas por tipos que hasta ayer no se privaban de críticas o ninguneos o exaltaban la figura de un roñoso dedicado al corte de rutas decidiendo sin pruebas que la Gendarmería se lo había cargado. Que esa chusma de lameculos los llame héroes a los tripulantes del A.R.A. “San Juan” es una banalización infame del heroísmo; ¡que callen de una vez y que se limiten a mostrar las lágrimas de esposas, madres, padres e hijos de los que se llevó el mar porque eso vende y eso, y no otra cosa, es lo que les interesa!.
Juan Jose Paso, 23 de noviembre de 2017
Josemilia_686@hotmail.com
PrisioneroEnArgentina.com
Noviembre 26, 2017
DESAPARECIDOS EN DEMOCRACIA, ¿2 Ó 6.040?
Algún canalla de los que sobran en las “orgas” de derechos humanos podría decir que la desaparición de Santiago Maldonado fue ejecutada por los “residuales” del proceso enquistados en el gobierno de Mauricio Macri como festejo de los once años de la desaparición de Julio Jorge López. No olvidemos ese slogan que sirve para todo y que ahora le tocó a Macri: “¡Macri, basura, vos sos la dictadura!” Otro chusco podría decir que no fue para festejar una pretérita desaparición que lo esfumaron a Maldonado, sino que lo han hecho para que no olviden a López.
[ezcol_1fifth][/ezcol_1fifth] [ezcol_4fifth_end]
En verdad que una desaparición sirve de mucho en la medida que esté teñida de política. Pero sirve, especialmente, para que los argentinos, siempre ahogados en su estupidez e hipocresía, repitan por enésima vez su camino de contrición a la Plaza de Mayo y que un montón de idiotas, funcionales a la izquierda, se apretujen allí creyendo que la tumba de Videla ha sido abierta desde adentro.
Hoy con Maldonado tenemos el mismo ruido que once años atrás con López, con el agravante que la oposición kirchnerista y piquetera necesita con urgencia un “fiambre” y han llevado la farsa al extremo de tratar de meterle a chicos de 8 a 10 años en la cabeza que la desaparición “forzada” es moneda común en Argentina cuando no hay un gobierno nac & pop; total, Rodríguez Larreta ahogado en su debilidad ideológica optará por no sancionar a nadie y todos felices.
Pero hay algo que es mucho más infame, y es que en la Argentina democrática no son López y Maldonado los únicos desaparecidos; hay otros desaparecidos a los que nadie tiene en cuenta, por los que nunca se juntan multitudes para llorarlos ni nadie tira flores en el río.
El número de estos, los desaparecidos en democracia, se ha aproximado, desde 1990, al número de los presuntos desaparecidos durante el proceso, pero de esto no se habla, porque una desaparición es grave, no por si misma, por lo que significa que una persona desaparezca del mundo tangible
sino que para que sea tenida en cuenta debe tener un justificativo político para lamentarla.
Como no es así nadie dice que es un escándalo que desde ese año hayan desaparecido en la Argentina- sin siquiera una guerra mediante- 6.040 personas y que sean sólo eso, desaparecidos solo recordados por sus familias, que no preocupan de ninguna manera al resto de los argentinos.
Esto, y es justo decirlo, no lo dicen ni Clarín o La Nación; lo afirmó Página/12 al hacerse eco del documento “Desaparición en democracia. Informe acerca de la búsqueda de personas entre 1990 y 2013” elaborado por la ONG Acciones Coordinadas Contra la Trata (ACCT) en conjunto con la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (Protex).
En ese lapso de tiempo “democrático” los “desaparecidos parias” -porque oficialmente a nadie le importa su destino- son niñas, niños, adolescentes y adultos que suman esa cantidad, de los cuales el 62% corresponde a mujeres generalmente secuestradas por las redes de prostitución; pero como las circunstancias de su desaparición no están ligadas a los circos judiciales de “lesa humanidad”, ni tienen relación o actividad que pueda ser utilizada políticamente, carecen de valor y tienen el mismo tratamiento que los muertos del setenta que no pertenecieron a la subversión; ya que no hay, ni creo que alguna vez escuchemos un lamento oficial por el asesinato de Cristina Viola o de Paula Lambruschini o el reconocimiento por la muerte en combate de los soldaditos formoseños como se hace con los muertos de la guerrilla.
[/ezcol_4fifth_end]Pehuajó, 31/08/2017
JOSE LUIS MILIA
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 31, 2017
Jornada de caridad del Papa… DIOS LOS CRIA Y ELLOS SE JUNTAN
Mañana, 2 de julio, bajo la administración de Marta Cascales -esposa de Guillermo Moreno- se iniciarán en todo el país la Jornada de Caridad del Papa. El Sumo Pontífice elegió a esta dama, figura controversial, por cierto, lo que acarrea una seie de miradas sospechosas. ¿Quién es Marta Amelia Cascales?
JORNADA DE CARIDAD DEL PAPA
El día 2 de julio se llevará a cabo en todas las parroquias del país la JORNADA DE CARIDAD del PAPA. El SUMO PONTÍFICE utiliza los medios que llegan de parte de los hermanos del mundo para ayudar a otros hermanos más necesitados.
La persona que el Papa nombró para administrar estos fondos en Argentina es MARTA CASCALES, mujer de GUILLERMO MORENO (a) “patota”. Por esto, considero que ha llegado el momento de protestar por la ADHESIÓN POLITICA que FRANCISCO ha demostrado tener para con los corruptos de Argentina a lo largo de su papado.
Dada esta situación y teniendo en cuenta que estos fondos serán administrado por MARTA CASCALES, CREO NECESARIO, NEGARNOS A CONTRIBUIR EN ESTA COLECTA y, si es posible, haciéndoselo saber al que hace la colecta o al cura que celebre la misa del domingo.
JOSE LUIS MILIA
josemilia_686@hotmail.com
[/ezcol_1third] [ezcol_2third_end]MARTA AMELIA CASCALES
“Marta Cascales fue la extraña escribana que conformó Meldorek a dos ancianas jubiladas prestanombres en el 2003 antes de Schoklender”
Luis Gasulla
Inmaculada Concepción Fazio y Noemí Raquel Averza contaban, en el año 2003 con 63 y 76 años de edad, respectivamente. El 4 de junio de ese mismo año, constituyeron Meldorek S.A. bajo la presencia y firma de la escribana Marta Amelia Cascales, esposa del funcionario K Guillermo Moreno. Meldorek S.A., rubro de casas móviles y módulos fue creada con un capital inicial de doce mil pesos pasaría a tener un valor de capital acumulado de dos millones de pesos treinta meses después, cuando las mencionadas socias fundadoras -que llegaron a tener 46 empresas- vendieron la firma.
Fuente: El Negocio de los Derechos Humanos, de Luis Gasulla. Editorial Sudamericana. Página 214.
[/ezcol_2third_end]
ALERTA, ALERTA! DIOS LOS CRIA Y ELLOS SE JUNTAN
MUÑECA BRAVA
Debemos resaltar que la persona a la que se refiere el señor Milia, MARTA CASCALES, realmente es la esposa del barrabrava K, GUILLERMO MORENO a quien le lleva quince años de edad y al que siempre apoyó y cobijó, casi como a un hijo. Tal es así que muchos todavía recuerdan cuando en el año 2008, en el interior del restaurante Laurak-Bat, del barrio de Montserrat donde cenaban, le aplicó una sonora cachetada a la señora María Fátima White. Esto por ser la esposa de un comensal ruralista que discutía de palabra con don Guillermo. Debió intervenir la Comisaría 4ta de la por entonces Policía Federal y posteriormente “la justicia independiente”.
BUENOS MUCHACHOS
Más atrás en el tiempo, en el año 2003 en su calidad de escribana, actuó en la conformación de Meldorek S.A la célebre constructora de Sergio Schoklender y las Madres de Plaza de Mayo. Todo desembocó en turbios manejos de fondos públicos, nuestros, a través de “Sueños Compartidos” (solo entre ellos). Procesados recientemente Sergio y Hebe, “se salvaron por falta de mérito” los ex gobernadores de Chaco, Jorge Capitanich; Santiago del Estero, Gerardo Zamora, Misiones, Maurice Closs y el actual de Santa Fe, Miguel Lifschitz; los ex ministros de Trabajo, Carlos Tomada y Planificación, Julio De Vido, y de la ex presidenta Cristina Kirchner, entre otros.
Julio casi rezando Hebe y Sergio Shocklender El Papa Francisco y Hebe de Bonafini
MÁS VIDAS QUE UN GATO
También fue directora suplente de la petrolera estatal Energía Argentina SA (Enarsa). Igual responsabilidad le tocó asumir entre junio de 2006 y julio de 2007, pero esta vez en la Empresa Argentina de Soluciones Satelitales Argentinas (AR-SAT), ambas controladas políticamente por Julio De Vido, quien para la “justicia independiente”, tiene más vidas que un gato.
ARGENTINA, PAIS GENEROSO…PARA ALGUNOS Y ALGUNAS
En 2009, fue protagonista directa de un confuso episodio en el que Moreno se salvó de justificar unos 400.000 pesos que había omitido declarar. Según explicaron las autoridades del banco HSBC a la Justicia, la sorpresiva aparición de ese dinero en la cuenta bancaria de él se debió a un error en una operación financiera celebrada por la propia Cascales. Su nombre aparece en los casos Boudou-Ciccone, tarjeta SUBE, subsidios al trigo, transporte, combustibles, etc.
Por último, en abril de 2015 el Papa Francisco, la nombró administradora de las donaciones de la iglesia católica, en Argentina, país por demás generoso…para algunos y algunas. Por ello, si puede, canalice su donación por otra vía.
Claudio Kussman
PrisioneroEnArgentina.com
Claudio@PrisioneroEnArgentina.com
@PrisioneroA
Julio 01, 2017
PrisioneroEnArgentina.com
Julio 01, 2017
LADRÓN DE HEROÍSMOS Y MEMORIAS
“El ejecutor de una empresa atroz debe imaginar que ya la ha cumplido, debe imponerse un porvenir que sea irrevocable como el pasado”
Jorge Luis Borges.- El Jardín de Senderos que se Bifurcan.
Es fácil definir a Pérez Esquivel. Es su gusto y su fetiche, manejarse con sepulturas anónimas a las que les pueda sacar un provecho e imaginar cementerios olvidados. Idolo indecente de grupos que han hecho de la inmoralidad su culto cotidiano, maneja sus obsesiones con la febrilidad del poseso y es su trajín tratar que el mundo sea, cada día, un mejor estercolero.
Grotesco maestro del desatino, pero ahíto de maldad, venía ocupando su tiempo en tratar de conseguir que a un asesino, Marwan Barghouti, se le otorgue, junto con la libertad, el Nobel de la paz, “premio” devaluado si lo hay, desde que sujetos como Desmond Tutú y el propio Adolfo lo utilizaron como herramienta para promocionar asesinos, sean estos etarras, palestinos o irlandeses.
No menos cierto es que en su prontuario se destaca con luz propia la cerrada defensa que este sujeto hizo de cuanto facineroso andaba asesinando gente a bombazos y tiros por estos lares; pretérito precursor de Zaffaroni en momentos que éste se dedicaba a negar habeas corpus a los tirabombas que Adolfo que defendía o a escribir un tratado sobre derecho penal militar más adecuado para los tercios de Alejandro Farnesio que para un ejército moderno, ambos sostenían con pasión mercenaria, pero en tiempos diferentes, la perversa creencia que los derramamientos de sangre que tanto le han costado a la Argentina- en los setenta pero también en democracia- justificaban la teoría de que en el fondo es la sociedad la culpable de todo.
Experto en escribir a diario el evangelio de la canallada, Adolfo tuvo momentos de gloria amañando medias verdades como cuando en un reportaje de la revista Gente (*), juró y perjuró que él y sus secuaces habían condenado el asesinato del Capitán Viola y de su hija de tres años, la singular crueldad con que los capitostes del ERP intentaron- sin siquiera acercarse a ello- destruir moral, aunque si físicamente, al Coronel Larrabure o el burdo y cruel asesinato de Paula Lambruschini. Aunque uno recorra exhaustivamente, hemerotecas y bibliografía tratando de encontrar una prueba de que estas condenas existieron, jamás encontrará nada pues jamás dijeron una palabra de consuelo hacia los deudos de esas víctimas, aunque esto no signifique que quizás Adolfo las haya “pensado” en lo más profundo de su cerebro, ¿o debemos pensar que un cristiano como él puede mentir cuando de criaturas humanas, pero de otro palo, se trata?
Hoy Adolfo es testigo presencial del derrumbe de las tramoyas más falaces que se han urdido en la historia de nuestro país y como perverso telonero de estas, busca con desesperación una alquimia que le permita evadirse de su tramposa vida y forjarse un nuevo relato. Ha elegido tergiversar algo que para los argentinos tiene el valor y la fuerza de un sagrario, se ha metido con lo mejor que tuvo La Argentina en un siglo que en general fue para el olvido. Quiere, de manera descarada y grosera robarse la memoria de los SOLDADOS ARGENTINOS SOLOS CONOCIDOS POR DIOS, e inventarles un pasado de desaparecidos sin importarle que ellos están registrados como héroes con sus nombres, más que en un cementerio, en el corazón de los argentinos. ¡Tamaña estupidez que nos muestra que Al “Adolfo”, ya en su senilidad, solo le queda talento para convertir sus canalladas en bufonadas grotescas.
(*).- Revista Gente, entrevista de Renée Salas y Osvaldo Leboso. Entrevista a Adolfo Pérez Esquivel.
JOSE LUIS MILIA
PrisioneroEnArgentina.com
Marzo 20, 2017
Los Dos Milani
Escribe José Luis Milia.
Hay veces que la vida, impiadosa, nos pone en situaciones paradojales. Hoy está preso el general Milani. No nos equivoquemos, no lo han puesto preso por las escuchas, ni por la SI paralela, ni por las amenazas hechas- nunca denunciadas pero si recibidas- a muchas personas importantes del quehacer político, económico o social de la República, porque
Milani, con la autoridad que la “señora” le delegaba, sabía perfectamente y hora a hora que senador, diputado, obispo, empresario, colchonero o rey de bastos, se drogaba, tenía pasión por los menores de doce años, daba vueltas de noche por el rosedal o le pegaba a la mujer o a la amante. Milani ha caído preso por algo que
-como subteniente de veintiún años en el primer año de carrera- se supone que hizo como resultado de una orden, en una época en que el Ejército Argentino estaba en guerra por mandato de un gobierno constitucional.
Hoy debemos aceptar que si bien Milani hizo en los últimos años de la República y como Jefe del Estado Mayor General del Ejército cosas que no honran a nadie, tanto en lo institucional como en lo personal, hoy comparte barrotes con Señores dignísimos que por la Patria estaban dispuestos a entregar la vida y a los que una infame venganza les ha quitado la libertad.
No nos equivoquemos en la apreciación. Hoy Milani está preso, no por sus errores y trapisondas sino por haber creído, en su juventud- lo habían formado para eso- en ideales que se escriben con mayúscula. Milani, nos guste o no, es hoy un Preso Político.
PrisioneroEnArgentina.com
Febrero 18, 2017
A LA CONFERENCIA EPISCOPAL ARGENTINA AL NUNCIO APOSTÓLICO EN ARGENTINA A LA JERARQUÍA CATÓLICA MUNDIAL
Escribe José Luis Milia.
El Padre Christian Federico von Wernich, acusado de delitos de “lesa humanidad”, lleva trece años preso. Condenado por un tribunal en el cual la prevaricación y la mentira fue la norma – ardides utilizados por los jueces con el concurso de una importante cantidad de testigos falsos- aceptó la condena con la misma resignación con que años antes aceptó ser Capellán de la policía de la provincia de Buenos Aires ante el requerimiento del Nuncio Apostólico, Monseñor Pío Laghi y del Obispo de La Plata, Monseñor Antonio Plaza.
En estos trece años que el Padre von Wernich lleva prisionero, ha sido para ustedes, Eminencias, el leproso del Levítico: “El leproso llevará los vestidos rasgados y desgreñada la cabeza, se cubrirá hasta el bigote e irá gritando: ¡Impuro, impuro! […..]. Es impuro y habitará solo; fuera del campamento tendrá su morada” (Lv 13,45-46). Salvo honrosas y muy contadas excepciones, Eminencias, pocos de ustedes han querido saber de él ni, menos aún, estar con él; de muy pocos de ustedes podría el Padre von Wernich decir: “…estuve enfermo, y me atendisteis; estuve en la cárcel, y me visitasteis.” (Mt 25: 35-36) y sin embargo quienes comparten con él la prisión jamás le han escuchado una palabra hiriente sobre este abandono.
El Padre von Wernich va a cumplir setenta y nueve años. Estuvo enfermo de cáncer y pese a las requisitorias de los médicos del Servicio Penal Federal que debía ser intervenido de manera urgente, las “dilaciones” de su juez de ejecución, el Dr. Rozanski, hicieron que recién después de once meses se le extirpara un tumor de la pierna que pesaba 4,5 kgs en una operación que duró siete horas.
Más allá de lo injusto de su condena, hace nueve años que el Padre von Wernich tiene derecho a la prisión domiciliaria y sin embargo la Jerarquía Católica no se ha preocupado de buscarle un lugar donde pueda cumplirla sino que todo indica que es éste un tema en el cual la Conferencia Episcopal Argentina prefiere lavarse las manos.
Creo que ha llegado la hora en que ustedes, Eminencias, tengan el coraje de ayudar a un hermano a quien- quizás por miedo, quizás por oportunismo político- tiempo atrás abandonaron y pongan en práctica aquello que Jesucristo nos enseñó: Amar al prójimo como a ti mismo.
JOSE LUIS MILIA
josemilia_686@hotmail.com
Fuente: Dra. Andrea Palomas Alarcón
Odio y Sangre
Por José Luis Milia. Carta de lectores del periódico La Nación.
Odio y sangre
Quizá con la sola excepción de Donald Trump, un coro hipócrita y doliente de dirigentes de naciones que sufrieron el terrorismo castrista ha manifestado que lamenta la muerte de Fidel Castro. Bien decía Borges en su sabiduría sin tiempo: “No hay cosa como la muerte para mejorar a la gente”.
La muerte -vista desde la doblez con que acostumbramos a manejarnos- le ha provisto un impúdico baño de decencia a aquel que hizo del martirio de su pueblo la razón de su soberbia y que desde su cómodo sitial en La Habana, lejos de las balas y de las bombas que ordenaba a sus sicarios disparar, inundó en odio y sangre a toda América latina. No importan ya ni sus ideas ni sus acciones, él ya fue. Quizás a partir de ahora el mundo sea un poco mejor.
José Luis Milia