“Sospecho de otra maniobra para sacarme de nuevo de la cancha”. “…Ruego recen por mi integridad personal…”
Tucumán – Argentina
En su oportunidad Adolfo Ángel Ale, me intimaba, mediante Carta Documento de fecha 28 de Octubre del 2011, a que mediante un juicio por “Injuria” como si fueran carmelitas descalzas, me obligarían a desdecirme de mis dichos. En esa circunstancias y desde hace más de 20 años como juez, asevere – lo sostuve en el tiempo – que existen numerosas querellas y denuncias sobre el Clan Ale en la justicia provincial por, amenazas de muerte agravadas, abuso de arma de fuego, usurpación de propiedad y otros delitos graves delitos, cuyo común denominador es la violencia. Las intimidaciones, amedrentamiento y amenazas es el “pan de cada día”. Sobre esta situación de enorme peligro se dio cuenta a la Justicia Federal hace pocos meses siendo testigo en audiencia pública. En la “mega causa federal” en donde el Clan es acusados por delitos gravísimos “asegure” públicamente ante el Tribunal federal, los fiscales, querellas y defensores que los Ale y sus secuaces, sin duda conforman una “asociación ilícita”. Sí. Fue ese Clan mafioso que me inicio hace tiempo un juicio por “injuria” en los Tribunales Provinciales. Juicio en donde fui absuelto por un Alto Tribunal. En donde confirme sobre su peligrosidad y sobre sus influencias todavias firmen y latentes. A la mafia le importaba solamente a través del juicio sacarme de la cancha. No lo pudieron hacer con “metrallas y artefactos explosivos” sobre mi estudio Jurídico. No importaba bajo que artilugio o ficción procesal. Se trataba de desacreditarme de alguna manera. Era el juez que en su oportunidad le dicto la prisión preventiva. Ahora sin el escudo de la justicia como un simple abogado en ejercicio de su profesión había que hacerme desaparecer de alguna manera. De nuevo el “silencio de muchos”. Salvo “periódicos amigos” en donde edito y público y el “Club Gente de Prensa” a nivel nacional al cual estoy asociado y adherido. Es que no importaba que se avasallara la profesión de abogado ni el derecho de defensa y principios constitucionales elementales. Se podía quedar en estado de indefensión en cualquier causa en que se denunciara a la mafia, si no fuera por la sentencia de absolución de la Cámara Penal de la Sala Tercera de nuestros Tribunales. La “Injuria o Calumnia”, era el argumento legal de La mafia. Obviamente – en esa oportunidad, muchos opinologos no quisieron entender esa realidad de inseguridad procesal. Regía la máxima bíblica de que “nadie es profeta en su tierra”. Y de nuevo. En la actualidad con el Clan y sus acólitos en libertad con el argumento de que no existe peligro de fuga, tengo que enfréntalos jurídicamente como representante de la querella en un juicio paralelo al federal en la justicia de mi provincia.
El debate es el día 25,26 y 27 del corriente mes y año. Lamentablemente recibí un llamado en donde me comunicaron que seguramente no seré el abogado querellante de quien represente durante más de 5 años para conseguir que se eleve la causa a juicio y a debate oral y público. Todos están en su derecho de revocar un poder, mandato o patrocinio. Pero llama la atención que a semanas de un debate de enorme trascendencia por sus protagonistas y peligrosidad. Nada más que “El Mono Adolfo Ángel Ale y su hijo el Monito Eduardo Said Ale”, mi poderdante se encuentre de viaje e incomunicado completamente. Pero cualquier estrategia no me condicionara. Seguramente presentaran un pedido de acuerdo o suspensión de juicio. Pero las querellas presentadas en el tiempo seguirán. Los juicios contra la mafia y en especial ante nuevos horizontes en la argentina irán esclareciéndose. Pero sigo sosteniendo y clamando a viva voz que “Los Ale son una mafia reinante”. ¿Se precisa que lo diga más claro? Hoy en la mega causa los mismos fueron liberados a pesar de que numerosos testigos encubiertos y otros como quien suscribe corren peligro de volver a sufrir nuevos atentados y ataques. Es cierto peligra mi integridad personal pero nunca bajare los brazos ante una verdadera asociación mafiosa. El delito de “asociación ilícita” pone en peligro el orden social sin el cual no es posible la convivencia. Vulnera además los sentimientos de seguridad y tranquilidad indispensables para el libre y completo desarrollo de las actividades humanas. Me pregunto ¿no existieron en nuestra provincia innumerables ostentaciones de poder, usurpaciones, amenazas de muerte agravadas, abuso de armas de fuego y otros ilícitos en donde se encuentran reunidos evidencias de un acuerdo tácito de voluntades derivados de una división de tareas a efectos de facilitar la perpetración de los ilícitos imputados? Asevero y sostengo que “Mafia ha habido siempre, pero es escandalosa la ostentación de fuerza realizada por los mismos, con su poder de movilización en todas las esferas. La justicia Federal – Cámara Oral – a pesar de la oposición de los fiscales haciendo valer la normativa procesal de falta de peligro de fuga colocó a la mafia de nuevo en situación de libertad. Como si no se supiera del peligro que implica para los nuevos testigos y los que atestiguaron su presencia en la calle con todos sus tentáculos como un pulpo en funcionamiento. Hoy me tocaba enfrentarlos como querellante en un nuevo juicio en la justicia provincial. Aun con los muchachos en libertad. Pidieron la Nulidad del juicio la que no fue otorgada. El secretario de la Sala con quien me entreviste hace unos días me confirmo que el expediente fue pedido por los defensores del integrante del clan para sacar copia. Me entere que otro abogado representaría a unos de los empresarios a quien lo defendí durante todo el proceso de investigación fiscal preliminar. Mientras el abogado a quien represente durante todos estos largos años con todas las vicisitudes que dicha representación implica se encuentra de viaje. No puedo comunicarme. Sospecho que a días del debate existe otra maniobra para sacarme de nuevo de la cancha como la querella por injuria en su momento. Pero de estos artilugios estoy acostumbrado. N o me desalienta ni desmoraliza que personas que durante años en las redes sociales y públicamente aseveraba que era el mejor y más valiente abogado hoy me deje de lado. Los argentinos y muy en especial los tucumanos saben cómo operan las mafias. Pero no debemos bajar los brazos en este empeño que, para todo hombre, debe ser primordial. Solamente pido que recen por mi integridad personal.
A los Ale no solamente se lo investiga por su pasado sino por su presente. Adolfo Ángel Ale sostuvo en una entrevista en el Diario la Gaceta de esta Ciudad – San Miguel de Tucumán – con fecha 22/10/2012. Que no niega su pasado. Aduce que ha peleado alguna vez en su vida; que ha golpeado y ha sido golpeado; incluso, admite que ha disparado, y que ha sentido también el dolor del plomo perforándole las carnes. Adolfo Ángel Ale sabe que todo eso forma parte de la imagen que se ha creado sobre él en las dos últimas décadas. Pero ya no quiere problemas. Por eso, “El Mono” elige mostrar otra parte de su historia: habla del trabajo en el campo; del compañerismo de su esposa Viviana; de la preocupación constante por sus padres, por sus hermanos y por sus hijos. “Quiero vivir tranquilo y en paz”, avisa. Creo, a lo mejor por mi pasado me quieren condenar. Afirma que tiene armas que son para caza; están en cajas de seguridad y todas fueron registradas. Pide en su diálogo que me lo dejen de perseguir y a su familia. Pero sus dichos se enfrentan con una realidad. Además del Juicio oral que se le avecina dentro de unos son diversos los juicios penales en la Provincia los que lo involucran e incriminan. Causas que también están en estado de Juicio Oral (lamentablemente paralizadas). Se me atribuye no solamente el rol de querellante sino de “persecutor judicial”. Las causas elevadas a juicio todas con trascendencia mediática se originan por delitos similares a su acusación federal en donde existe un común denominador “La Asociación” y la presencia de distintas armas de guerra y hasta de una ametralladora de mano, pertrechos que desde hace décadas hacen exhibicionismo y despliegue ostentoso. Otro factor reiterado es la intimidación o amedrentamiento de donde surge que la libertad es el bien jurídico afectado. Las bravatas, violencias y despliegues de armas de los Ale no cesan pese a que según sus dichos fueron virulentos en el pasado y que sus antecedentes también se remontan a otras épocas.
Las actitudes y posturas que quieren mostrar con su posturas de “Carmelitas descalzas”, no se condicen con las innumerables causas investigadas por la justicia Federal y Provincial.Para el Ministerio Público está latente la perturbación que implica el historial del clan.En los jueces todavía prevalece para integrantes del clan el principio general de libertad del detenido el proceso (Con prisión preventiva domiciliaria). Discusión bizantina y permanente en una sociedad como la actual en donde la inseguridad no es una sensación sino una realidad. Tristemente son realidades que emergen lastimeramente con individuos que muchas de las veces se relacionan con el poder. La actualidad judicial revela a los Ale como cabeza de una mafia en Tucumán. En muchas causas los personajes dicen no tener antecedentes, que su situación económica es casi de indigencias y en otras son empresarios del campo con manejo de abultadas sumas de dinero y con relaciones personales, profesionales, económicas e inmobiliarias con personas allegadas al juego Clandestino. Aclaran que no tienen miedo de andar con dinero. Que cargan armamento y son legítimos propietario y portadores de armas de guerra. En su pasado ya le secuestraron del baúl de un automóvil cuando se encontraban detenidos e internados en un conocido sanatorio de esta ciudad, un arsenal en donde se encontraban hasta granadas de mano; escopetas recortadas e itacas de alto poder destructivo. (Caso Homicidio al Oficial Salinas – Obviamente no son coleccionistas-). Desde hace más de veinte años desde el caso Gardelito; los Remises Cinco Estrellas y sus ocupaciones y impedimentos para circular obstruyendo todas las arterias de San Miguel de Tucumán. El copamiento a la Jefatura de policías como también a Gendarmería y al Concejo deliberante. Últimamente los casos de Marita Verón y Lebbos son los más relevantes en donde siempre surge su presencia. En otros casos conocidos abogados del foro local fueron amedrentados con armas de guerra. Abogado y empresarios que valientemente no se amilanaron. Como en la época del lejano oeste y tal vez con mayor impunidad. Por eso sigo aseverando y sosteniendo enfáticamente que “Mafia ha habido siempre, pero es escandalosa la ostentación de fuerza realizada por los mismos, con un enorme poder de movilización en todas las esferas. Esta mafia también llegó de su mano al Futbol, como gerencia dores del club más importante de la Provincia al futbol (San Martín). Una corrupción que “se está haciendo carne en la Argentina” como si fuera el pan de cada día.Los argentinos y puntualmente los tucumanos, debemos rechazar que sea inevitable que las mafias manejen la sociedad. No debemos bajar los brazos en este empeño que, para todo hombre, debe ser primordial. Recordemos a Sarmiento: “desgraciados los pueblos a los que se les agote ese instinto por mantener la salud colectiva. Los ciudadanos de tales pueblos serán tratados como presidiarios”.
En la editorial del Diario “la Gaceta” de mi provincia con fecha 20/12/2016, bajo el titulo “Los casos en los que estuvieron implicados los hijos de “El Mono” Ale”, se da cuenta que “Juan Facundo”, quien en la madrugada volcó su camioneta cuando intentaba huir de la Policía y su hermano, “Eduardo Said”, fueron aprehendidos varias veces por diferentes situaciones. Que el hijo mayor de “El Mono”, afrontó numerosos cargos durante este año 2016. Que en octubre del 2011, fue aprehendido y detenido por robo y posteriormente liberado. Que en Agosto del 2013 se le requirió la elevación a juicio por el Homicidio de Roberto Cabrera quien murió en febrero del 2009. Con relación a los hechos aludidos, sin querer controvertir con la información del prestigioso Diario, debo decir que el segundo de los hechos enunciados (Homicidio), he sido representante de la querella en la causa que se encuentra caratulada como “Ale Salvador Said (a) “El Monito” y otros s/ Homicidio. (Victima: Cabrera Roberto Salvador) – Expte nº: 1840/09. Por lo que se confirma una vez más lo que vengo aduciendo y sosteniendo hace más de veinte años. Que a los integrantes del Clan no solamente se lo investiga por su pasado sino también por su presente. En algunas de mis publicaciones como “Las Mafias Golpean Tucumán” y a “Puro Verso” manifiesto que los cabecillas de la organización siguen con las famosas “Mini-Scena” de hoy y de siempre. Abrazados en la primera audiencia de juicio oral lloraban con” lágrimas de cocodrilos” mientras sus presas habían sido devoradas en el tiempo con absoluta violencia y sadismo. Un gimoteo y apretón que seguramente no fue por remordimiento de cientos de víctimas indefensas que fueron amedrentadas, intimidadas, golpeadas y hasta asesinadas por esta banda de malandrines facinerosos. También en otra publicación rememoro una entrevista en el mismo Diario: “Por mi pasado me quieren condenar”, en donde el “Mono” con total desfachatez y cinismo elige mostrar otra parte de su historia: habla del trabajo en el campo; de la preocupación constante con sus hijos. Otra de las tantas falsedades y engaños a los que nos tiene acostumbrado el Clan. De este Padre ejemplar que quiere vivir en Paz y de manera honesta – según la misma entrevista-, cuidando de sus hijos. Quien se mostró dándole un beso protector sobre los labios de uno de ellos en la primera audiencia del Juicio oral federal. Nada se dice sobre una causa que se encuentra en estado de audiencia o debate Oral y que tuvo en su oportunidad enorme resonancia. Hecho cometido en contra de un prestigioso Abogado y un Empresario de nuestra Provincia. Causa en donde también intervino “El Monito” – Eduardito – junto con su Padre Adolfo “el “Mono”. Observándose en la misma nuevamente como común denominador “las amenazas, lesiones y abuso de arma de grueso calibre. Evento delictual ocurrido el 09/02/2011, – hace casi seis años -, en la localidad de “Chañar Muyo” departamento Leales. En donde el “Monito Eduardito” portando una “ametralladora” hizo disparos, golpeando al Letrado y amedrentando al empresario. El Padre Protector “Mono Adolfo” en el mismo hecho extrajo dos pistolas de su cintura, manifestando en la causa que no tenía miedo de andar con dinero encima ya que cargaba armas y es legítimo propietario y portador de armas de guerra. Dicha causa se encuentra desde hace más de tres años en las Salas Penales a seis años del hecho y todavía no se dignan a notificarme de la integración de la misma. Causa caratulada: Ale Adolfo Ángel, Ale Eduardo Said S/ Participación Criminal Necesaria Lesiones Leves, Abuso de Arma – Expte Nº: 2383/2011. Lamentablemente la crisis en la justicia penal es un una realidad indefendible. Los Fiscales de cámaras deben intervenir sin respiro en varias causas en un solo día y los Vocales deben clamar por integrar las salas. Una Justicia lenta no es justicia.
En una entrevista publicada por el “Diario Perfil” en Buenos Aires, bajo el título “Tucumán, la impunidad”, la periodista Agustina Grasso relata con objetividad y crudeza que fue el fallo en el caso Verón el que descorrió el telón sobre el clan Ale y la perversión del caso de Paulina Lebbos, asesinada en el año 2006, supuesta víctima de los “hijos del poder”. La periodista daba cuenta sobre trabajo silencioso de las familias de las víctimas. Artífices necesarios para que las investigaciones no se detengan ante un Estado ausente y un Poder Judicial ineficaz y sin medios. En dicha nota, manifesté que en Tucumán existía miedo, e indiferencia. Funcionarios, jueces e integrantes del Ministerio Publico Fiscal, adepta al oficialismo no actúan con la independencia debida. Los nombramientos tienen siempre alguna relación con el poder reinante. En los círculos de la Legislatura acontece lo mismo con una mayoría y quórum propio miran al sudeste con total impudicia. Un anexo o escribanía de la casa de gobierno. Que decir del otro poder del estado (Ejecutivo) autor intelectual de la desmaña imperante. Es como un trípode con pata larga manejada desde el gobierno, con una voracidad y desenfreno manifiesto. Apetencia verificada con la existencia de alianzas o contubernio entre el poder político, el juego y el fútbol que viene desde décadas atrás. Las mafias como tentáculos de un pulpo se manejan con indemnidad y policías afines y corruptos siguen relacionados con eventos de igual naturaleza. Estos hechos editados con fecha 06/01/2013, por el Diario Perfil de Buenos Aires, fue el disparador para que semanas después el Estudio Jurídico de quien suscribe recibiera amenazas de muerte, balaceras y atentados con artefactos explosivos. Amenazas que fueron denunciadas y como siempre quedaron en saco roto. Esta reiteración de hechos se va agudizando cada vez más con el tiempo. Hoy, la mafia y sus abogados en la primera audiencia del Juicio oral en contra de la asociación ilícita se dieron maña de que a sus defendidos se los mostrara como cándidos inocentes. Unas Carmelitas descalzas. Los dos jefes de la mafia desde hace más de treinta años (El Mono y la Chancha Ale) abrazados y llorando con” lágrimas de cocodrilos” mientras sus presas han sido devoradas en el tiempo con absoluta violencia y sadismo. Seguramente el gimoteo y abrazo no fue por remordimiento a cientos de víctimas indefensas que fueron amedrentadas, intimidados, golpeadas y hasta asesinados por esta banda de malandrines facinerosos. Acostumbrados a la “Mini- Scena” y a los alardes indecentes de inocencia mentida arremetieron principalmente contra la prensa. Un periodismo que conoce a fondo su accionar y a sus tentáculos. Una sociedad que no está dispuesta a resignarse otra vez a su impunidad. Las innumerables causas pendientes en su contra en la Justicia provincial – que resurgieron a la luz- , es otra muestra de sus simulaciones, fingimientos e hipocresías. Además otra confirmación de la existencia de una justicia penal siempre ambigua e irresoluta. O sea que las asociaciones ilícitas, no solo se encuentran muy difundida en Tucumán, sino que también impera en amplios sectores de la sociedad. Pero los Tucumanos no podemos resignarnos. Debemos formar parte de una sociedad que no consiente a la impunidad como si se tratase de una fuerza de la naturaleza. Que no admita una corrupción que “se está haciendo carne en la Argentina” y convirtiendo en el “pan nuestro de cada día en nuestra provincia”. Basta de Lágrimas y llantos fingidos.
DR. JORGE B. LOBO ARAGON
jorgeloboaragon@gmail.com
jorgeloboaragon@hotmail.com
Adolfo Ángel Ale, ya me intimaba, mediante Carta Documento de fecha 28 de Octubre del 2011, recepcionada en el Estudio Jurídico con fecha 01 de Noviembre del mismo año a que mediante un juicio por Injuria , me obligarían a rectificar mis dichos. Yo dije en esa oportunidad – lo sostuve en el tiempo – , que existen numerosas querellas y denuncias sobre el Clan Ale por Homicidio Agravado, Amenazas de Muerte, Violación de Domicilio, Usurpación de Propiedad y otros delitos que los representantes de la vindicta pública (Fiscales) deben investigar y las partes se encuentran facultados a ofrecer pruebas y solicitar medidas.El Clan Ale me inicia el juicio por injuria advertido, ante la Excma. Cámara Sala III del 1º al 3 de Octubre de 2013. Juicio en donde fui absuelto por el Alto Tribunal. No importaba ser abogado querellante en ejercicio de sus facultades. A la mafia le importaba a través del juicio solamente sacar de la cancha al abogado que los incomodaba. No importaba bajo que artilugio o ficción procesal. Se trataba de desacreditar de alguna manera. En el Juicio me presente por derecho propio – defendiéndome personalmente- con la gran ayuda de un abogado amigo, tratando de asegurar no solamente el ejercicio de la profesión que se avasallaba de manera ostensible. Un juicio relevante para quienes ejercemos la profesión ya que podíamos quedar en estado de indefensión en cualquier causa en que se denunciara a la mafia. Injuria o calumnia, era el argumento legal. Obviamente – en esa oportunidad -, tampoco hoy, el Colegio de abogados ni aquellos opinologos manifestaron esta realidad de inseguridad procesal ni tampoco la defensa del Abogado. Más que nunca regía la máxima bíblica de que “nadie es profeta en su tierra”, de innegable contenido religioso, que apunta a que es muy difícil predicar en el propio ámbito de pertenencia, sea éste el pueblo de origen, el lugar de trabajo o la familia,no tenemos la suerte de ser escuchados. El silencio de muchos – que no sabemos cómo seha sido conseguido, aunque lo sospechamos – no es motivo para que la Policía, los Fiscales, Jueces, la sociedad, se desentiendan. ¿Se precisa que lo diga más claro? Las ales son una mafia reinante. El delito de “asociación ilícita” pone en peligro el orden social sin el cual no es posible la convivencia. Vulnera además los sentimientos de seguridad y tranquilidad indispensables para el libre y completo desarrollo de las actividades humanas. Cuando una asociación de personas dotadas de cierta permanencia, actuando de manera planificada (Clan Ale), es capaz de producir por sí misma o por su convergencia otras situaciones (Ilícitos) similares, se encuentran encuadrados claramente en la figura prevista por el artículo 210 del Código Penal. Su permanencia se advierte si existe reiteración en el tiempo de las maniobras delictivas, basadas en un similar modus operandi en un lapso de tiempo prolongado. Me pregunto ¿no existieron en nuestra provincia numerosas ostentaciones de poder, usurpaciones, amenazas de muerte agravadas, abuso de armas de fuego y otros ilícitos en donde se encuentran reunidos evidencias de un acuerdo tácito de voluntades derivados de una división de tareas a efectos de facilitar la perpetración de los ilícitos imputados? Asevero y sostengo que “Mafia ha habido siempre, pero es escandalosa la ostentación de fuerza realizada por los mismos, con su poder de movilización en todas las esferas. La justicia debiera tener los elementos necesarios para investigarlas, reprimirlas y castigarlas. No debemos bajar los brazos en este empeño que, para todo hombre, debe ser primordial.
Durante mi actuación en la justicia, -Juez y Fiscal- , tuve oportunidad de juzgar al Clan Alecon el dictado de una prisión preventiva de oficio como órgano jurisdiccional. En aquella oportunidad recibí terribles amenazas, que no lograron amedrentarme.Pero aquella instancia, pasó, ya no soy un funcionario de la justicia, ni mi función es la juzgar a nadie, solamente ejerzo la profesión de abogado penalista. A la justicia ordinaria no se la teme, se la supone inocua (todo el mundo “confía en la justicia”; muchos, en realidad, confían en su torpeza), pero se sospecha que las mafias tienen poder, tienen fuerza y que son duchas en su aplicación. De todas maneras el debate sobre esta mafia nos alerta: los argentinos, en estos momentos, estamos ante la evidencia de mafias que extiendan su poderío hasta ciertos despachos que debieran mantenerse inconmovibles. Que la iniciación del juicio oral por similares delitos a la causa “Salinas” en donde se encontraban acusados los mismos personajes por asociación ilícita y tenencia de arma de guerra viene a corroborar que la absolución de los mismos durante mi función como juez en mi provincia (Tucumán) dejó mucho que desear.Es que en casos de corrupción, si los Jueces en el país y en especial mi provincia Tucumán no reaccionan, las consecuencias se agravaran sin duda. Esta asociación que no solo se encuentra difundida, sino que también impera y se despliega en amplios sectores de la sociedad, jamás alcanzo los alarmantes niveles de impunidad, que adquiere en la actualidad, y lo que es peor, el grado de resignación, de tolerancia y hasta de paciente aceptación.Debemos formar parte de una sociedad que no se resigne a la impunidad como si se tratase de una fuerza de la naturaleza. Es la corrupción que “se está haciendo carne en la Argentina” y convirtiendo en el pan nuestro de cada día”.Ante el mal que todos vemos y lamentamos, es necesario reaccionar buscando la forma de purificar la sociedad.Existen todavía en la provincia numerosas causas en estado de debate oral con demoras groseras “esperando el sueño de los justos”. Pareciera que se busca aviesamente el archivo o la prescripción de las mismas.Como muestra del libertinaje y los tentáculos con sectores de poder, el delegado de la Nación que participo de la investigación, manifestóclaramente lo que vengo sosteniendo. Quelos Ale hace 20 años que tienen una expansión continúa y que han llegado a tener candidatos a diputados y ha controlado el principal club de fútbol de Tucumán. Prácticamente están instalada como en una especie de supra poder que llegó a controlar hasta sectores de la justicia”. Precisó que en los allanamientos se secuestraron armas, se decomisó dinero y que el núcleo principal fue embargado. Asimismo, afirmó – lo sabemos todos los tucumanos – que el grupo tiene un empresa de taxis a la que describió como “una estructura que abarca varias provincias, y son autos que hacen los movimientos de mujeres a los prostíbulos y las trasladan sin saber adónde van”. Lo cierto es que si bien estamos ante un nuevo debate en juicio oral Federal, en Tucumán a nivel provincial, distintas causas se encuentran procesalmente hace más de seis años demoradas injustificadamente. Las Salas penales pesar de las presentaciones incoadas por las enormes demoras y retardos siguen mirando al sudeste. Los medios nada dicen al respecto. Una justicia lenta no es justicia.
Durante mi actuación en la justicia – Juez y Fiscal -, tuve oportunidad de dictar la prisión preventiva delClan Ale. En aquella oportunidad recibí terribles amenazas, que no lograron amedrentarme. Pero aquella instancia, pasó, ya no soy un funcionario de la justicia, ni mi función es la juzgar a nadie, solamente ejerzo la profesión de abogado penalista. No obstante siguieron con atentados al estudio Jurídico con arma de grueso calibre y artefactos explosivos. Nada se resolvió al respecto. A la justicia ordinaria no se la teme, se la supone inocua. Todo el mundo “confía en la justicia”, muchos, en realidad, confían en su torpeza. Pero se sospecha que las mafias tienen poder, tienen fuerza y que son duchas en su aplicación.Detodas maneras el debate sobre esta mafia nos alerta: los argentinos, en estos momentos, estamos ante la evidencia de mafias que extiendan su poderío hasta ciertos despachos que debieran mantenerse inconmovibles. Hoy la Justicia informa que el 16 de diciembre se sentarán en el banquillo de los acusados del Tribunal Oral Federal a los 16 integrantes del “Clan Ale” para ser enjuiciados. La banda, liderada por los hermanos Rubén (“La Chancha”) y Ángel (“El Mono”) Ale está acusada de lavado de activos, asociación ilícita, evasión impositiva, presunta producción y comercialización de estupefacientes, cobro extorsivo de acreencias propias del grupo y de terceros ajenos a éste y tenencia ilegítimas de armas de fuego. Todo esto viene a corroborar y ratificar que la absolución de los mismos en Juicio Oral durante mi función como juez en mi provincia – Caso del oficial Salinas y del Comando Atila – , dejo mucho que desear.Es que en casos de corrupción, de mafia o narcotráfico, si los Jueces en el país y en especial mi provincia no reaccionan, las consecuencias se agravaran sin duda. Los acusados que dicen ser “empresarios” y que se lo persigue por su pasado, alcanzaron durante décadas alarmantes niveles de impunidad.Es que la corrupción “se está haciendo carne en la Argentina” y convirtiendo en el pan nuestro de cada día”. Debemos formar parte de una sociedad que no se resigne a la impunidad como si se tratase de una fuerza de la naturaleza. Actualmente existen en la provincia numerosas causas en estado de debate oral contra esta asociación con demoras groseras“esperando el sueño de los justos”. Diría de los injustos. Pareciera que se busca aviesamente el archivo o la prescripción de las mismas. Fue tal el libertinaje y los tentáculos con sectores de poder,de esta pandilla de malhechores que hace 20 años que tienen una expansión continúa y han llegado a tener candidatos a diputados y controlado el principal club de fútbol de Tucumán. Prácticamente se instalaron como en una especie de supra poder controlando sectores del Juego, la trata y la justicia”. Personalmente no lograron amedrentarme y sigo esperando con paciencia Franciscana que se los llame a debate oral en numerosos juicios provinciales con demoras de seis años. Lamentablemente siguen durmiendo el sueño de los injustos con una lentitud exasperante. Una Justicia lenta no es justicia. Será Justicia.
El “Clan Ale” Juicio Oral y público el 25, 26 y 27
“Sospecho de otra maniobra para sacarme de nuevo de la cancha”. “…Ruego recen por mi integridad personal…”
Tucumán – Argentina
En su oportunidad Adolfo Ángel Ale, me intimaba, mediante Carta Documento de fecha 28 de Octubre del 2011, a que mediante un juicio por “Injuria” como si fueran carmelitas descalzas, me obligarían a desdecirme de mis dichos. En esa circunstancias y desde hace más de 20 años como juez, asevere – lo sostuve en el tiempo – que existen numerosas querellas y denuncias sobre el Clan Ale en la justicia provincial por, amenazas de muerte agravadas, abuso de arma de fuego, usurpación de propiedad y otros delitos graves delitos, cuyo común denominador es la violencia. Las intimidaciones, amedrentamiento y amenazas es el “pan de cada día”. Sobre esta situación de enorme peligro se dio cuenta a la Justicia Federal hace pocos meses siendo testigo en audiencia pública. En la “mega causa federal” en donde el Clan es acusados por delitos gravísimos “asegure” públicamente ante el Tribunal federal, los fiscales, querellas y defensores que los Ale y sus secuaces, sin duda conforman una “asociación ilícita”. Sí. Fue ese Clan mafioso que me inicio hace tiempo un juicio por “injuria” en los Tribunales Provinciales. Juicio en donde fui absuelto por un Alto Tribunal. En donde confirme sobre su peligrosidad y sobre sus influencias todavias firmen y latentes. A la mafia le importaba solamente a través del juicio sacarme de la cancha. No lo pudieron hacer con “metrallas y artefactos explosivos” sobre mi estudio Jurídico. No importaba bajo que artilugio o ficción procesal. Se trataba de desacreditarme de alguna manera. Era el juez que en su oportunidad le dicto la prisión preventiva. Ahora sin el escudo de la justicia como un simple abogado en ejercicio de su profesión había que hacerme desaparecer de alguna manera. De nuevo el “silencio de muchos”. Salvo “periódicos amigos” en donde edito y público y el “Club Gente de Prensa” a nivel nacional al cual estoy asociado y adherido. Es que no importaba que se avasallara la profesión de abogado ni el derecho de defensa y principios constitucionales elementales. Se podía quedar en estado de indefensión en cualquier causa en que se denunciara a la mafia, si no fuera por la sentencia de absolución de la Cámara Penal de la Sala Tercera de nuestros Tribunales. La “Injuria o Calumnia”, era el argumento legal de La mafia. Obviamente – en esa oportunidad, muchos opinologos no quisieron entender esa realidad de inseguridad procesal. Regía la máxima bíblica de que “nadie es profeta en su tierra”. Y de nuevo. En la actualidad con el Clan y sus acólitos en libertad con el argumento de que no existe peligro de fuga, tengo que enfréntalos jurídicamente como representante de la querella en un juicio paralelo al federal en la justicia de mi provincia.
El debate es el día 25,26 y 27 del corriente mes y año. Lamentablemente recibí un llamado en donde me comunicaron que seguramente no seré el abogado querellante de quien represente durante más de 5 años para conseguir que se eleve la causa a juicio y a debate oral y público. Todos están en su derecho de revocar un poder, mandato o patrocinio. Pero llama la atención que a semanas de un debate de enorme trascendencia por sus protagonistas y peligrosidad. Nada más que “El Mono Adolfo Ángel Ale y su hijo el Monito Eduardo Said Ale”, mi poderdante se encuentre de viaje e incomunicado completamente. Pero cualquier estrategia no me condicionara. Seguramente presentaran un pedido de acuerdo o suspensión de juicio. Pero las querellas presentadas en el tiempo seguirán. Los juicios contra la mafia y en especial ante nuevos horizontes en la argentina irán esclareciéndose. Pero sigo sosteniendo y clamando a viva voz que “Los Ale son una mafia reinante”. ¿Se precisa que lo diga más claro? Hoy en la mega causa los mismos fueron liberados a pesar de que numerosos testigos encubiertos y otros como quien suscribe corren peligro de volver a sufrir nuevos atentados y ataques. Es cierto peligra mi integridad personal pero nunca bajare los brazos ante una verdadera asociación mafiosa. El delito de “asociación ilícita” pone en peligro el orden social sin el cual no es posible la convivencia. Vulnera además los sentimientos de seguridad y tranquilidad indispensables para el libre y completo desarrollo de las actividades humanas. Me pregunto ¿no existieron en nuestra provincia innumerables ostentaciones de poder, usurpaciones, amenazas de muerte agravadas, abuso de armas de fuego y otros ilícitos en donde se encuentran reunidos evidencias de un acuerdo tácito de voluntades derivados de una división de tareas a efectos de facilitar la perpetración de los ilícitos imputados? Asevero y sostengo que “Mafia ha habido siempre, pero es escandalosa la ostentación de fuerza realizada por los mismos, con su poder de movilización en todas las esferas. La justicia Federal – Cámara Oral – a pesar de la oposición de los fiscales haciendo valer la normativa procesal de falta de peligro de fuga colocó a la mafia de nuevo en situación de libertad. Como si no se supiera del peligro que implica para los nuevos testigos y los que atestiguaron su presencia en la calle con todos sus tentáculos como un pulpo en funcionamiento. Hoy me tocaba enfrentarlos como querellante en un nuevo juicio en la justicia provincial. Aun con los muchachos en libertad. Pidieron la Nulidad del juicio la que no fue otorgada. El secretario de la Sala con quien me entreviste hace unos días me confirmo que el expediente fue pedido por los defensores del integrante del clan para sacar copia. Me entere que otro abogado representaría a unos de los empresarios a quien lo defendí durante todo el proceso de investigación fiscal preliminar. Mientras el abogado a quien represente durante todos estos largos años con todas las vicisitudes que dicha representación implica se encuentra de viaje. No puedo comunicarme. Sospecho que a días del debate existe otra maniobra para sacarme de nuevo de la cancha como la querella por injuria en su momento. Pero de estos artilugios estoy acostumbrado. N o me desalienta ni desmoraliza que personas que durante años en las redes sociales y públicamente aseveraba que era el mejor y más valiente abogado hoy me deje de lado. Los argentinos y muy en especial los tucumanos saben cómo operan las mafias. Pero no debemos bajar los brazos en este empeño que, para todo hombre, debe ser primordial. Solamente pido que recen por mi integridad personal.
Dr. Jorge B. Lobo Aragón
PrisioneroEnArgentina.com
Octubre 14, 2017
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“EL CLAN ALE” Rubén “La Chancha” Ángel “El Mono” Y otros
Por Jorge Lobo Aragón.
A los Ale no solamente se lo investiga por su pasado sino por su presente. Adolfo Ángel Ale sostuvo en una entrevista en el Diario la Gaceta de esta Ciudad – San Miguel de Tucumán – con fecha 22/10/2012. Que no niega su pasado. Aduce que ha peleado alguna vez en su vida; que ha golpeado y ha sido golpeado; incluso, admite que ha disparado, y que ha sentido también el dolor del plomo perforándole las carnes. Adolfo Ángel Ale sabe que todo eso forma parte de la imagen que se ha creado sobre él en las dos últimas décadas. Pero ya no quiere problemas. Por eso, “El Mono” elige mostrar otra parte de su historia: habla del trabajo en el campo; del compañerismo de su esposa Viviana; de la preocupación constante por sus padres, por sus hermanos y por sus hijos. “Quiero vivir tranquilo y en paz”, avisa. Creo, a lo mejor por mi pasado me quieren condenar. Afirma que tiene armas que son para caza; están en cajas de seguridad y todas fueron registradas. Pide en su diálogo que me lo dejen de perseguir y a su familia. Pero sus dichos se enfrentan con una realidad. Además del Juicio oral que se le avecina dentro de unos son diversos los juicios penales en la Provincia los que lo involucran e incriminan. Causas que también están en estado de Juicio Oral (lamentablemente paralizadas). Se me atribuye no solamente el rol de querellante sino de “persecutor judicial”. Las causas elevadas a juicio todas con trascendencia mediática se originan por delitos similares a su acusación federal en donde existe un común denominador “La Asociación” y la presencia de distintas armas de guerra y hasta de una ametralladora de mano, pertrechos que desde hace décadas hacen exhibicionismo y despliegue ostentoso. Otro factor reiterado es la intimidación o amedrentamiento de donde surge que la libertad es el bien jurídico afectado. Las bravatas, violencias y despliegues de armas de los Ale no cesan pese a que según sus dichos fueron virulentos en el pasado y que sus antecedentes también se remontan a otras épocas.
Las actitudes y posturas que quieren mostrar con su posturas de “Carmelitas descalzas”, no se condicen con las innumerables causas investigadas por la justicia Federal y Provincial. Para el Ministerio Público está latente la perturbación que implica el historial del clan. En los jueces todavía prevalece para integrantes del clan el principio general de libertad del detenido el proceso (Con prisión preventiva domiciliaria). Discusión bizantina y permanente en una sociedad como la actual en donde la inseguridad no es una sensación sino una realidad. Tristemente son realidades que emergen lastimeramente con individuos que muchas de las veces se relacionan con el poder. La actualidad judicial revela a los Ale como cabeza de una mafia en Tucumán. En muchas causas los personajes dicen no tener antecedentes, que su situación económica es casi de indigencias y en otras son empresarios del campo con manejo de abultadas sumas de dinero y con relaciones personales, profesionales, económicas e inmobiliarias con personas allegadas al juego Clandestino. Aclaran que no tienen miedo de andar con dinero. Que cargan armamento y son legítimos propietario y portadores de armas de guerra. En su pasado ya le secuestraron del baúl de un automóvil cuando se encontraban detenidos e internados en un conocido sanatorio de esta ciudad, un arsenal en donde se encontraban hasta granadas de mano; escopetas recortadas e itacas de alto poder destructivo. (Caso Homicidio al Oficial Salinas – Obviamente no son coleccionistas-). Desde hace más de veinte años desde el caso Gardelito; los Remises Cinco Estrellas y sus ocupaciones y impedimentos para circular obstruyendo todas las arterias de San Miguel de Tucumán. El copamiento a la Jefatura de policías como también a Gendarmería y al Concejo deliberante. Últimamente los casos de Marita Verón y Lebbos son los más relevantes en donde siempre surge su presencia. En otros casos conocidos abogados del foro local fueron amedrentados con armas de guerra. Abogado y empresarios que valientemente no se amilanaron. Como en la época del lejano oeste y tal vez con mayor impunidad. Por eso sigo aseverando y sosteniendo enfáticamente que “Mafia ha habido siempre, pero es escandalosa la ostentación de fuerza realizada por los mismos, con un enorme poder de movilización en todas las esferas. Esta mafia también llegó de su mano al Futbol, como gerencia dores del club más importante de la Provincia al futbol (San Martín). Una corrupción que “se está haciendo carne en la Argentina” como si fuera el pan de cada día. Los argentinos y puntualmente los tucumanos, debemos rechazar que sea inevitable que las mafias manejen la sociedad. No debemos bajar los brazos en este empeño que, para todo hombre, debe ser primordial. Recordemos a Sarmiento: “desgraciados los pueblos a los que se les agote ese instinto por mantener la salud colectiva. Los ciudadanos de tales pueblos serán tratados como presidiarios”.
JORGE B. LOBO ARAGÓN
jorgeloboaragon@gmail.com
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 22, 2016
El Mono Ale y sus Monitos
Por Jorge B. Lobo Aragón.
Tucumán . Argentina
Opinión:
En la editorial del Diario “la Gaceta” de mi provincia con fecha 20/12/2016, bajo el titulo “Los casos en los que estuvieron implicados los hijos de “El Mono” Ale”, se da cuenta que “Juan Facundo”, quien en la madrugada volcó su camioneta cuando intentaba huir de la Policía y su hermano, “Eduardo Said”, fueron aprehendidos varias veces por diferentes situaciones. Que el hijo mayor de “El Mono”, afrontó numerosos cargos durante este año 2016. Que en octubre del 2011, fue aprehendido y detenido por robo y posteriormente liberado. Que en Agosto del 2013 se le requirió la elevación a juicio por el Homicidio de Roberto Cabrera quien murió en febrero del 2009. Con relación a los hechos aludidos, sin querer controvertir con la información del prestigioso Diario, debo decir que el segundo de los hechos enunciados (Homicidio), he sido representante de la querella en la causa que se encuentra caratulada como “Ale Salvador Said (a) “El Monito” y otros s/ Homicidio. (Victima: Cabrera Roberto Salvador) – Expte nº: 1840/09. Por lo que se confirma una vez más lo que vengo aduciendo y sosteniendo hace más de veinte años. Que a los integrantes del Clan no solamente se lo investiga por su pasado sino también por su presente. En algunas de mis publicaciones como “Las Mafias Golpean Tucumán” y a “Puro Verso” manifiesto que los cabecillas de la organización siguen con las famosas “Mini-Scena” de hoy y de siempre. Abrazados en la primera audiencia de juicio oral lloraban con” lágrimas de cocodrilos” mientras sus presas habían sido devoradas en el tiempo con absoluta violencia y sadismo. Un gimoteo y apretón que seguramente no fue por remordimiento de cientos de víctimas indefensas que fueron amedrentadas, intimidadas, golpeadas y hasta asesinadas por esta banda de malandrines facinerosos. También en otra publicación rememoro una entrevista en el mismo Diario: “Por mi pasado me quieren condenar”, en donde el “Mono” con total desfachatez y cinismo elige mostrar otra parte de su historia: habla del trabajo en el campo; de la preocupación constante con sus hijos. Otra de las tantas falsedades y engaños a los que nos tiene acostumbrado el Clan. De este Padre ejemplar que quiere vivir en Paz y de manera honesta – según la misma entrevista-, cuidando de sus hijos. Quien se mostró dándole un beso protector sobre los labios de uno de ellos en la primera audiencia del Juicio oral federal. Nada se dice sobre una causa que se encuentra en estado de audiencia o debate Oral y que tuvo en su oportunidad enorme resonancia. Hecho cometido en contra de un prestigioso Abogado y un Empresario de nuestra Provincia. Causa en donde también intervino “El Monito” – Eduardito – junto con su Padre Adolfo “el “Mono”. Observándose en la misma nuevamente como común denominador “las amenazas, lesiones y abuso de arma de grueso calibre. Evento delictual ocurrido el 09/02/2011, – hace casi seis años -, en la localidad de “Chañar Muyo” departamento Leales. En donde el “Monito Eduardito” portando una “ametralladora” hizo disparos, golpeando al Letrado y amedrentando al empresario. El Padre Protector “Mono Adolfo” en el mismo hecho extrajo dos pistolas de su cintura, manifestando en la causa que no tenía miedo de andar con dinero encima ya que cargaba armas y es legítimo propietario y portador de armas de guerra. Dicha causa se encuentra desde hace más de tres años en las Salas Penales a seis años del hecho y todavía no se dignan a notificarme de la integración de la misma. Causa caratulada: Ale Adolfo Ángel, Ale Eduardo Said S/ Participación Criminal Necesaria Lesiones Leves, Abuso de Arma – Expte Nº: 2383/2011. Lamentablemente la crisis en la justicia penal es un una realidad indefendible. Los Fiscales de cámaras deben intervenir sin respiro en varias causas en un solo día y los Vocales deben clamar por integrar las salas. Una Justicia lenta no es justicia.
Dr. Jorge B. Lobo Aragón
jorgeloboaragon@gmail.com
Mafias golpean Tucumán
Por Jorge Lobo Aragón.
“Basta de lágrimas de cocodrilo…”
Opinión:
En una entrevista publicada por el “Diario Perfil” en Buenos Aires, bajo el título “Tucumán, la impunidad”, la periodista Agustina Grasso relata con objetividad y crudeza que fue el fallo en el caso Verón el que descorrió el telón sobre el clan Ale y la perversión del caso de Paulina Lebbos, asesinada en el año 2006, supuesta víctima de los “hijos del poder”. La periodista daba cuenta sobre trabajo silencioso de las familias de las víctimas. Artífices necesarios para que las investigaciones no se detengan ante un Estado ausente y un Poder Judicial ineficaz y sin medios. En dicha nota, manifesté que en Tucumán existía miedo, e indiferencia. Funcionarios, jueces e integrantes del Ministerio Publico Fiscal, adepta al oficialismo no actúan con la independencia debida. Los nombramientos tienen siempre alguna relación con el poder reinante. En los círculos de la Legislatura acontece lo mismo con una mayoría y quórum propio miran al sudeste con total impudicia. Un anexo o escribanía de la casa de gobierno. Que decir del otro poder del estado (Ejecutivo) autor intelectual de la desmaña imperante. Es como un trípode con pata larga manejada desde el gobierno, con una voracidad y desenfreno manifiesto. Apetencia verificada con la existencia de alianzas o contubernio entre el poder político, el juego y el fútbol que viene desde décadas atrás. Las mafias como tentáculos de un pulpo se manejan con indemnidad y policías afines y corruptos siguen relacionados con eventos de igual naturaleza. Estos hechos editados con fecha 06/01/2013, por el Diario Perfil de Buenos Aires, fue el disparador para que semanas después el Estudio Jurídico de quien suscribe recibiera amenazas de muerte, balaceras y atentados con artefactos explosivos. Amenazas que fueron denunciadas y como siempre quedaron en saco roto. Esta reiteración de hechos se va agudizando cada vez más con el tiempo. Hoy, la mafia y sus abogados en la primera audiencia del Juicio oral en contra de la asociación ilícita se dieron maña de que a sus defendidos se los mostrara como cándidos inocentes. Unas Carmelitas descalzas. Los dos jefes de la mafia desde hace más de treinta años (El Mono y la Chancha Ale) abrazados y llorando con” lágrimas de cocodrilos” mientras sus presas han sido devoradas en el tiempo con absoluta violencia y sadismo. Seguramente el gimoteo y abrazo no fue por remordimiento a cientos de víctimas indefensas que fueron amedrentadas, intimidados, golpeadas y hasta asesinados por esta banda de malandrines facinerosos. Acostumbrados a la “Mini- Scena” y a los alardes indecentes de inocencia mentida arremetieron principalmente contra la prensa. Un periodismo que conoce a fondo su accionar y a sus tentáculos. Una sociedad que no está dispuesta a resignarse otra vez a su impunidad. Las innumerables causas pendientes en su contra en la Justicia provincial – que resurgieron a la luz- , es otra muestra de sus simulaciones, fingimientos e hipocresías. Además otra confirmación de la existencia de una justicia penal siempre ambigua e irresoluta. O sea que las asociaciones ilícitas, no solo se encuentran muy difundida en Tucumán, sino que también impera en amplios sectores de la sociedad. Pero los Tucumanos no podemos resignarnos. Debemos formar parte de una sociedad que no consiente a la impunidad como si se tratase de una fuerza de la naturaleza. Que no admita una corrupción que “se está haciendo carne en la Argentina” y convirtiendo en el “pan nuestro de cada día en nuestra provincia”. Basta de Lágrimas y llantos fingidos.
DR. JORGE B. LOBO ARAGON
jorgeloboaragon@gmail.com
jorgeloboaragon@hotmail.com
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Diciembre 17, 2016
El Clan Ale me quiere sacar de la cancha…
Por Jorge Lobo Aragón.
TUCUMAN . ARGENTINA
Adolfo Ángel Ale, ya me intimaba, mediante Carta Documento de fecha 28 de Octubre del 2011, recepcionada en el Estudio Jurídico con fecha 01 de Noviembre del mismo año a que mediante un juicio por Injuria , me obligarían a rectificar mis dichos. Yo dije en esa oportunidad – lo sostuve en el tiempo – , que existen numerosas querellas y denuncias sobre el Clan Ale por Homicidio Agravado, Amenazas de Muerte, Violación de Domicilio, Usurpación de Propiedad y otros delitos que los representantes de la vindicta pública (Fiscales) deben investigar y las partes se encuentran facultados a ofrecer pruebas y solicitar medidas. El Clan Ale me inicia el juicio por injuria advertido, ante la Excma. Cámara Sala III del 1º al 3 de Octubre de 2013. Juicio en donde fui absuelto por el Alto Tribunal. No importaba ser abogado querellante en ejercicio de sus facultades. A la mafia le importaba a través del juicio solamente sacar de la cancha al abogado que los incomodaba. No importaba bajo que artilugio o ficción procesal. Se trataba de desacreditar de alguna manera. En el Juicio me presente por derecho propio – defendiéndome personalmente- con la gran ayuda de un abogado amigo, tratando de asegurar no solamente el ejercicio de la profesión que se avasallaba de manera ostensible. Un juicio relevante para quienes ejercemos la profesión ya que podíamos quedar en estado de indefensión en cualquier causa en que se denunciara a la mafia. Injuria o calumnia, era el argumento legal. Obviamente – en esa oportunidad -, tampoco hoy, el Colegio de abogados ni aquellos opinologos manifestaron esta realidad de inseguridad procesal ni tampoco la defensa del Abogado. Más que nunca regía la máxima bíblica de que “nadie es profeta en su tierra”, de innegable contenido religioso, que apunta a que es muy difícil predicar en el propio ámbito de pertenencia, sea éste el pueblo de origen, el lugar de trabajo o la familia, no tenemos la suerte de ser escuchados. El silencio de muchos – que no sabemos cómo se ha sido conseguido, aunque lo sospechamos – no es motivo para que la Policía, los Fiscales, Jueces, la sociedad, se desentiendan. ¿Se precisa que lo diga más claro? Las ales son una mafia reinante. El delito de “asociación ilícita” pone en peligro el orden social sin el cual no es posible la convivencia. Vulnera además los sentimientos de seguridad y tranquilidad indispensables para el libre y completo desarrollo de las actividades humanas. Cuando una asociación de personas dotadas de cierta permanencia, actuando de manera planificada (Clan Ale), es capaz de producir por sí misma o por su convergencia otras situaciones (Ilícitos) similares, se encuentran encuadrados claramente en la figura prevista por el artículo 210 del Código Penal. Su permanencia se advierte si existe reiteración en el tiempo de las maniobras delictivas, basadas en un similar modus operandi en un lapso de tiempo prolongado. Me pregunto ¿no existieron en nuestra provincia numerosas ostentaciones de poder, usurpaciones, amenazas de muerte agravadas, abuso de armas de fuego y otros ilícitos en donde se encuentran reunidos evidencias de un acuerdo tácito de voluntades derivados de una división de tareas a efectos de facilitar la perpetración de los ilícitos imputados? Asevero y sostengo que “Mafia ha habido siempre, pero es escandalosa la ostentación de fuerza realizada por los mismos, con su poder de movilización en todas las esferas. La justicia debiera tener los elementos necesarios para investigarlas, reprimirlas y castigarlas. No debemos bajar los brazos en este empeño que, para todo hombre, debe ser primordial.
Dr, Jorge Lobo Aragón.
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Diciembre 16, 2016
Juicio contra el Clan Ale
Por Jorge B. Lobo Aragón.
Tucumán – Argentina
El Silencio de Muchos!
OPINIÓN:
Durante mi actuación en la justicia, -Juez y Fiscal- , tuve oportunidad de juzgar al Clan Ale con el dictado de una prisión preventiva de oficio como órgano jurisdiccional. En aquella oportunidad recibí terribles amenazas, que no lograron amedrentarme. Pero aquella instancia, pasó, ya no soy un funcionario de la justicia, ni mi función es la juzgar a nadie, solamente ejerzo la profesión de abogado penalista. A la justicia ordinaria no se la teme, se la supone inocua (todo el mundo “confía en la justicia”; muchos, en realidad, confían en su torpeza), pero se sospecha que las mafias tienen poder, tienen fuerza y que son duchas en su aplicación. De todas maneras el debate sobre esta mafia nos alerta: los argentinos, en estos momentos, estamos ante la evidencia de mafias que extiendan su poderío hasta ciertos despachos que debieran mantenerse inconmovibles. Que la iniciación del juicio oral por similares delitos a la causa “Salinas” en donde se encontraban acusados los mismos personajes por asociación ilícita y tenencia de arma de guerra viene a corroborar que la absolución de los mismos durante mi función como juez en mi provincia (Tucumán) dejó mucho que desear. Es que en casos de corrupción, si los Jueces en el país y en especial mi provincia Tucumán no reaccionan, las consecuencias se agravaran sin duda. Esta asociación que no solo se encuentra difundida, sino que también impera y se despliega en amplios sectores de la sociedad, jamás alcanzo los alarmantes niveles de impunidad, que adquiere en la actualidad, y lo que es peor, el grado de resignación, de tolerancia y hasta de paciente aceptación. Debemos formar parte de una sociedad que no se resigne a la impunidad como si se tratase de una fuerza de la naturaleza. Es la corrupción que “se está haciendo carne en la Argentina” y convirtiendo en el pan nuestro de cada día”. Ante el mal que todos vemos y lamentamos, es necesario reaccionar buscando la forma de purificar la sociedad. Existen todavía en la provincia numerosas causas en estado de debate oral con demoras groseras “esperando el sueño de los justos”. Pareciera que se busca aviesamente el archivo o la prescripción de las mismas. Como muestra del libertinaje y los tentáculos con sectores de poder, el delegado de la Nación que participo de la investigación, manifestó claramente lo que vengo sosteniendo. Que los Ale hace 20 años que tienen una expansión continúa y que han llegado a tener candidatos a diputados y ha controlado el principal club de fútbol de Tucumán. Prácticamente están instalada como en una especie de supra poder que llegó a controlar hasta sectores de la justicia”. Precisó que en los allanamientos se secuestraron armas, se decomisó dinero y que el núcleo principal fue embargado. Asimismo, afirmó – lo sabemos todos los tucumanos – que el grupo tiene un empresa de taxis a la que describió como “una estructura que abarca varias provincias, y son autos que hacen los movimientos de mujeres a los prostíbulos y las trasladan sin saber adónde van”. Lo cierto es que si bien estamos ante un nuevo debate en juicio oral Federal, en Tucumán a nivel provincial, distintas causas se encuentran procesalmente hace más de seis años demoradas injustificadamente. Las Salas penales pesar de las presentaciones incoadas por las enormes demoras y retardos siguen mirando al sudeste. Los medios nada dicen al respecto. Una justicia lenta no es justicia.
Dr. Jorge B. Lobo Aragón
El Clan Ale Finalmente a Juicio Oral
Por Jorge B. Lobo Aragón.
Tucumán – Argentina
Opinión
Durante mi actuación en la justicia – Juez y Fiscal -, tuve oportunidad de dictar la prisión preventiva del Clan Ale. En aquella oportunidad recibí terribles amenazas, que no lograron amedrentarme. Pero aquella instancia, pasó, ya no soy un funcionario de la justicia, ni mi función es la juzgar a nadie, solamente ejerzo la profesión de abogado penalista. No obstante siguieron con atentados al estudio Jurídico con arma de grueso calibre y artefactos explosivos. Nada se resolvió al respecto. A la justicia ordinaria no se la teme, se la supone inocua. Todo el mundo “confía en la justicia”, muchos, en realidad, confían en su torpeza. Pero se sospecha que las mafias tienen poder, tienen fuerza y que son duchas en su aplicación.De todas maneras el debate sobre esta mafia nos alerta: los argentinos, en estos momentos, estamos ante la evidencia de mafias que extiendan su poderío hasta ciertos despachos que debieran mantenerse inconmovibles. Hoy la Justicia informa que el 16 de diciembre se sentarán en el banquillo de los acusados del Tribunal Oral Federal a los 16 integrantes del “Clan Ale” para ser enjuiciados. La banda, liderada por los hermanos Rubén (“La Chancha”) y Ángel (“El Mono”) Ale está acusada de lavado de activos, asociación ilícita, evasión impositiva, presunta producción y comercialización de estupefacientes, cobro extorsivo de acreencias propias del grupo y de terceros ajenos a éste y tenencia ilegítimas de armas de fuego. Todo esto viene a corroborar y ratificar que la absolución de los mismos en Juicio Oral durante mi función como juez en mi provincia – Caso del oficial Salinas y del Comando Atila – , dejo mucho que desear. Es que en casos de corrupción, de mafia o narcotráfico, si los Jueces en el país y en especial mi provincia no reaccionan, las consecuencias se agravaran sin duda. Los acusados que dicen ser “empresarios” y que se lo persigue por su pasado, alcanzaron durante décadas alarmantes niveles de impunidad. Es que la corrupción “se está haciendo carne en la Argentina” y convirtiendo en el pan nuestro de cada día”. Debemos formar parte de una sociedad que no se resigne a la impunidad como si se tratase de una fuerza de la naturaleza. Actualmente existen en la provincia numerosas causas en estado de debate oral contra esta asociación con demoras groseras “esperando el sueño de los justos”. Diría de los injustos. Pareciera que se busca aviesamente el archivo o la prescripción de las mismas. Fue tal el libertinaje y los tentáculos con sectores de poder, de esta pandilla de malhechores que hace 20 años que tienen una expansión continúa y han llegado a tener candidatos a diputados y controlado el principal club de fútbol de Tucumán. Prácticamente se instalaron como en una especie de supra poder controlando sectores del Juego, la trata y la justicia”. Personalmente no lograron amedrentarme y sigo esperando con paciencia Franciscana que se los llame a debate oral en numerosos juicios provinciales con demoras de seis años. Lamentablemente siguen durmiendo el sueño de los injustos con una lentitud exasperante. Una Justicia lenta no es justicia. Será Justicia.
JORGE B. LOBO ARAGÓN