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Después de meses de agitación y titubeos que dieron paso al debate, el presidente Trump finalmente se encontró cara a cara con Kim Jong Un en un hotel en la isla Sentosa en Singapur el martes por la mañana.

Poco después de las 9 a.m. hora local, Trump, vestido con un traje oscuro y corbata roja, y Kim, con un traje negro, caminaron a lo largo de una columnata blanca, reunidos frente a un banco de 12 alternan banderas estadounidenses y norcoreanas donde se dieron la mano. El apretón de manos duró unos 12 segundos.

De acuerdo con el Shanghai Media Group, Kim, de 35 años, llegó a la cumbre siete minutos antes que Trump, de 71 años, para mostrar respeto por su anciano.

Después de su saludo inicial, Trump y Kim entraron, se sentaron y hablaron brevemente a los periodistas.

Trump, que había insistido en que sabría “en el primer minuto” si Kim hablaba en serio sobre la desnuclearización, dijo que “se sentía realmente bien” y que era su “honor” reunirse con el dictador norcoreano.

“Vamos a tener una gran discusión”, dijo Trump. “Un tremendo éxito. Tendremos una gran relación “.

“No fue fácil llegar aquí”, dijo Kim. “Hubo obstáculos, pero los vencimos para estar aquí”.

Kim comparó la reunión con algo “de una película de ciencia ficción”, según una traducción de sus comentarios.

Luego, la pareja se retiró a una sala privada donde se reunieron uno a uno, con intérpretes, durante aproximadamente 35 minutos antes de una reunión bilateral ampliada con asesores estadounidenses y norcoreanos.

El presidente estaba flanqueado por el Secretario de Estado Mike Pompeo, el jefe de personal John Kelly y el asesor de seguridad nacional John Bolton. A Kim se unieron el vicepresidente Kim Yong Chol y los ministros de Relaciones Exteriores Ri Yong Ho y Ri Su Yong. Trump y Kim estaban sentados el uno frente al otro, cerca del centro de una larga mesa.

En la parte superior de la reunión ampliada, Trump dijo que él y Kim resolverán los problemas presentados por una Corea del Norte nuclear.

“Trabajando juntos, lo solucionaremos”, dijo Trump.

“Superamos todo tipo de escepticismo y especulaciones sobre esta cumbre”, agregó Kim, “y creo que esto es bueno para la paz”.

Trump llegó al hotel después de emitir un aluvión de tweets en los que los escépticos de la reunión entre los líderes de Estados Unidos y la nación nuclear corrupta se refirieron a los “escépticos y perdedores”.

También reveló que su asesor económico, Larry Kudlow, que no formaba parte de la delegación de Estados Unidos en Singapur, había sufrido un ataque al corazón que estaba siendo atendido en el Centro Médico Walter Reed en Maryland.

“Larry está actualmente en buenas condiciones”, dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders. “Y sus doctores esperan que se recupere de manera rápida y completa”.

Sumándose a la naturaleza surrealista del espectáculo Trump-Kim, el ex-estrella de la NBA Dennis Rodman apareció en CNN en una emotiva y entretenida entrevista en vivo desde Singapur, donde rompió a llorar mientras comentaba su papel al llevar a Kim y Trump a la mesa de negociaciones.

Rodman, quien viajó por primera vez a Corea del Norte en 2013 para reunirse con Kim, dijo que recibió amenazas de muerte como resultado de su alcance.

“Creí en Corea del Norte”, dijo Rodman. “Y cuando volví a casa, ni siquiera podía ir a casa. No podría irme a casa. Tuve que esconderme por 30 días. Ni siquiera podía irme a casa, pero mantuve la cabeza bien alta, hermano. Sabía que las cosas iban a cambiar. Lo sabía. Yo era el único.”

La extravagante ex estrella del baloncesto agregó que la Casa Blanca Trump lo llamó el martes para agradecerle por su improbable diplomacia.

 


PrisioneroEnArgentina.com

Junio 12, 2018


 

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