Todo comenzó en forma muy silenciosa y calma, sin que uno con la torpeza que trae aparejada la edad, lo percibiera desde el principio. Más allá de los derechos constitucionales y judiciales avasallados, estaba el doloso cansancio al que uno es sometido cuando a las cuatro de la madrugada lo trasladan 2.000 metros para declarar mediante video conferencia. Ahora sé que había otro peligroso y silente enemigo oculto. A los hipócritas y cobardes que nos están sistemáticamente exterminando, a quienes culpables o no, estamos imputados por estos mal llamados delitos de lesa humanidad, pareciera que no hay abuso que les alcance para cumplir con su sucia misión.
LA MALDAD ESCRITA
Por ello, ahora me referiré a las distorsiones y cambios que dolosamente se introducen, en las declaraciones indagatorias que uno presta. Por supuesto el perjudicado siempre es uno. Al comienzo en mis dos primeros comparendos a declarar, esas adulteraciones fueron casi sutiles, ya en la tercera oportunidad se hicieron más audaces. Algunas las detecté al finalizar el acto y tras leer lo declarado, pedí que se corrigieran. Otras directamente no las vi. Tonto de mí creyendo que eran “accidentes” culposos. Aclaro que ocurre esto, también con otros prisioneros imputados en otros juzgados de diferentes partes del país, lo mío no es excepción. Quiero inferir que en estas ilegales maniobras no participan los togados, y que actúan solo las personas encargadas de volcar al papel lo que uno expresa, o sea los o las escribientes. Pero a veces, viendo tanto ensañamiento me digo, todo puede ser.
LOS CAMBIOS Y DISTORSIONES
En mi declaración de fecha 20 de diciembre de 2016, prestada ante el juez federal WALTER EZEQUIEL LÓPEZ DA SILVA y el fiscal ANTONIO CASTAÑO, quien no es el de la causa, ( PALAZZANI y NEBBIA, que no aparecen, estarán escondidos?) se produjeron los siguientes “errores”:
UNO – A fojas nueve cuando me refiero a los hermanos BUSTOS, erróneamente se los consignó como imputados en la causa. Ellos son querellantes.
DOS – A fojas diez quedó asentado erróneamente que en los 70, el polarizado de vidrios existía. Muy por el contrario este NO EXISTÍA, por lo menos en Argentina.
TRES – A fojas trece cuando digo “PRECISIÓN Y CONCORDANCIA” (sic) repitiendo los términos empleados por la Cámara de Apelaciones de Bahía Blanca, al referirse al COLECTIVO (transporte de pasajeros) Y A LA AMBULANCIA que NO EXISTIERON, como pedí, deben ir entre comillas, ya que es un absurdo y me expreso en forma IRÓNICA al respecto.
CUATRO – A fojas dieciséis se asentó que yo tenía un Citroen 3CV, yo no lo tenía, este me lo prestaban y así lo expresé.
CINCO – A fojas diecisiete se asentó que en un “embute” se secuestra material bibliográfico. Se omitió transcribir “armas y explosivos” como yo expresara, Quien hizo esos procedimientos, evidentemente a los fiscales de este poder judicial no les importa.
SEIS – A fojas diecisiete, se escribió “Como yo me preparé tras años”, se cambió lo expresado por mí. Dije, me puse a disposición, y luego “esperé tres años” a ser detenido donde dije que iba a estar.
SIETE – A fojas veintitrés se comete una gruesa omisión cuando hablo de un empleado de nombre Esteban del mismo juzgado federal. No se dejó constancia, cuando expliqué sobre su detención, que esto me lo dijo él mismo cuando tiempo atrás, estando yo cautivo en la Unidad Penitenciaria 31, llamé por teléfono al juzgado y él me contara sus padecimientos. En esa comunicación le dije sobre las barbaridades que estaban haciendo “engarronándome” y que él, si estuvo preso, bien debía saber sobre mi desempeño en Bahía Blanca. Al no registrarse esta parte de la exposición se cambia totalmente el sentido de mis dichos, pareciendo que mi conocimiento sobre él data de los años 70.
OCHO – Cuando expreso que trabajé con entre 50 y 70 policías No es permanentemente como figura, sino alternativamente, a lo largo de 11 años de trabajar en calle en Bahía Blanca.
NUEVE – Acá se omitió mencionar la entrega que hiciera de dos carillas con un relato titulado: “LA HIJA DEL COMISARIO”, correspondiente a un fotolog que data del año 2004, http://www.fotolog.com/kbdejavu/5182100/. Su procedencia da para ser investigada, debido al conocimiento de los hechos que demuestra su titular. Este aparentemente residiría en la localidad de Ituzaingó, provincia de Buenos Aires. Acorde a lo expresado, el Comisario Inspector ATILIO ROSAS siempre mintió descaradamente.
Todo lo que expongo en esta nota, es la verdad, mi verdad y tengo la forma de mostrarla…pero será más adelante. Por ahora solo son tiempos de hipocresía y abusos impunes de poder, para con nosotros.
“Los abusos son como los viejos caducos: llega un tiempo en que dejan de infundir respeto.”
Por Claudio Kussman.
EL ENEMIGO SILENTE
Todo comenzó en forma muy silenciosa y calma, sin que uno con la torpeza que trae aparejada la edad, lo percibiera desde el principio. Más allá de los derechos constitucionales y judiciales avasallados, estaba el doloso cansancio al que uno es sometido cuando a las cuatro de la madrugada lo trasladan 2.000 metros para declarar mediante video conferencia. Ahora sé que había otro peligroso y silente enemigo oculto. A los hipócritas y cobardes que nos están sistemáticamente exterminando, a quienes culpables o no, estamos imputados por estos mal llamados delitos de lesa humanidad, pareciera que no hay abuso que les alcance para cumplir con su sucia misión.
LA MALDAD ESCRITA
Por ello, ahora me referiré a las distorsiones y cambios que dolosamente se introducen, en las declaraciones indagatorias que uno presta. Por supuesto el perjudicado siempre es uno. Al comienzo en mis dos primeros comparendos a declarar, esas adulteraciones fueron casi sutiles, ya en la tercera oportunidad se hicieron más audaces. Algunas las detecté al finalizar el acto y tras leer lo declarado, pedí que se corrigieran. Otras directamente no las vi. Tonto de mí creyendo que eran “accidentes” culposos. Aclaro que ocurre esto, también con otros prisioneros imputados en otros juzgados de diferentes partes del país, lo mío no es excepción. Quiero inferir que en estas ilegales maniobras no participan los togados, y que actúan solo las personas encargadas de volcar al papel lo que uno expresa, o sea los o las escribientes. Pero a veces, viendo tanto ensañamiento me digo, todo puede ser.
LOS CAMBIOS Y DISTORSIONES
En mi declaración de fecha 20 de diciembre de 2016, prestada ante el juez federal WALTER EZEQUIEL LÓPEZ DA SILVA y el fiscal ANTONIO CASTAÑO, quien no es el de la causa, ( PALAZZANI y NEBBIA, que no aparecen, estarán escondidos?) se produjeron los siguientes “errores”:
UNO – A fojas nueve cuando me refiero a los hermanos BUSTOS, erróneamente se los consignó como imputados en la causa. Ellos son querellantes.
DOS – A fojas diez quedó asentado erróneamente que en los 70, el polarizado de vidrios existía. Muy por el contrario este NO EXISTÍA, por lo menos en Argentina.
TRES – A fojas trece cuando digo “PRECISIÓN Y CONCORDANCIA” (sic) repitiendo los términos empleados por la Cámara de Apelaciones de Bahía Blanca, al referirse al COLECTIVO (transporte de pasajeros) Y A LA AMBULANCIA que NO EXISTIERON, como pedí, deben ir entre comillas, ya que es un absurdo y me expreso en forma IRÓNICA al respecto.
CUATRO – A fojas dieciséis se asentó que yo tenía un Citroen 3CV, yo no lo tenía, este me lo prestaban y así lo expresé.
CINCO – A fojas diecisiete se asentó que en un “embute” se secuestra material bibliográfico. Se omitió transcribir “armas y explosivos” como yo expresara, Quien hizo esos procedimientos, evidentemente a los fiscales de este poder judicial no les importa.
SEIS – A fojas diecisiete, se escribió “Como yo me preparé tras años”, se cambió lo expresado por mí. Dije, me puse a disposición, y luego “esperé tres años” a ser detenido donde dije que iba a estar.
SIETE – A fojas veintitrés se comete una gruesa omisión cuando hablo de un empleado de nombre Esteban del mismo juzgado federal. No se dejó constancia, cuando expliqué sobre su detención, que esto me lo dijo él mismo cuando tiempo atrás, estando yo cautivo en la Unidad Penitenciaria 31, llamé por teléfono al juzgado y él me contara sus padecimientos. En esa comunicación le dije sobre las barbaridades que estaban haciendo “engarronándome” y que él, si estuvo preso, bien debía saber sobre mi desempeño en Bahía Blanca. Al no registrarse esta parte de la exposición se cambia totalmente el sentido de mis dichos, pareciendo que mi conocimiento sobre él data de los años 70.
OCHO – Cuando expreso que trabajé con entre 50 y 70 policías No es permanentemente como figura, sino alternativamente, a lo largo de 11 años de trabajar en calle en Bahía Blanca.
NUEVE – Acá se omitió mencionar la entrega que hiciera de dos carillas con un relato titulado: “LA HIJA DEL COMISARIO”, correspondiente a un fotolog que data del año 2004, http://www.fotolog.com/kbdejavu/5182100/. Su procedencia da para ser investigada, debido al conocimiento de los hechos que demuestra su titular. Este aparentemente residiría en la localidad de Ituzaingó, provincia de Buenos Aires. Acorde a lo expresado, el Comisario Inspector ATILIO ROSAS siempre mintió descaradamente.
Todo lo que expongo en esta nota, es la verdad, mi verdad y tengo la forma de mostrarla…pero será más adelante. Por ahora solo son tiempos de hipocresía y abusos impunes de poder, para con nosotros.
CONTINUARÁ…
Claudio Kussman
PrisioneroEnArgentina.com
Claudio@PrisioneroEnArgentina.com
@PrisioneroA
Junio 22, 2017
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