En el editorial del 30 de junio se describe la persecución que sufre un grupo de oficiales y suboficiales del Regimiento de Infantería 5 (RI5), por su desempeño en la Guerra de Malvinas. Nacido con la Patria en 1810, el RI5 fue desplegado, durante dicha guerra, en la isla Gran Malvina, y sus 1500 integrantes, hoy veteranos de guerra (VGM), cumplieron su misión bajo bombardeo británico y aislados de Puerto Argentino.
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El 9 de mayo el buque Isla de los Estados, que transportaba pertrechos para el regimiento, fue hundido frente a las posiciones del mismo, perdiendo la vida sus veintidós tripulantes. Los soldados del RI5 se mantuvieron unidos y operando, a pesar de no haber recibido suministros por más de cincuenta días, a la intemperie, en un clima extremo, por lo cual, sin excepción, pasaron hambre y frío.
Los admiradores de los terroristas de los 70 hoy se proponen mancillar la gesta de Malvinas estigmatizando a los soldados como víctimas, lo que constituye un insulto para quienes combatieron y dieron su vida por la Patria, en 1982. Este relato la presenta como un mero plan criminal, sistemático y generalizado, de tortura, violación de los derechos humanos y asesinato de soldados conscriptos, lo que habilita a la acusación de oficiales y suboficiales por delitos de lesa humanidad (DLH), relato en el cual la fuerza de tareas británica no existe. Tuve la oportunidad de participar de reuniones de VGM, quienes, sin distinción de jerarquías ni grados, desmienten los hechos denunciados, los cuales, además de una mentira, son un mensaje devastador para las Fuerzas Armadas, que compromete la defensa nacional. Los máximos responsables de la conducción de la Guerra de Malvinas fueron juzgados y condenados, hace más de 30 años.
Fiscal Marcelo A. Rapoport
El juez Lijo, la Cámara Federal Penal de Comodoro Rivadavia, la Sala I de la Cámara de Casación y la Corte Suprema de Justicia ya se expidieron respecto de estos inexistentes DLH, en fallos firmes, con carácter de cosa juzgada, todos exculpatorios para los acusados. No obstante, un fiscal de Justicia Legítima, el doctor Rapoport, volvió a la carga y solicitó al juez, doctor Calvete, en Río Grande, la detención e indagatoria de veintiséis oficiales y suboficiales del RI5. Existen numerosas pruebas que demuestran que los testigos y las presuntas víctimas fueron incentivados a mentir con la promesa de un resarcimiento económico.
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Editorial de LA NACIÓN.
Malvinas: absurda persecución
(30 de Junio, 2018)
Es necesario acatar la palabra de la Justicia y no permitir que se usen acusaciones con oscuros fines contra oficiales
Otra denuncia penal presentada recientemente procura sostener que en el transcurso de la Guerra de Malvinas algunos de nuestros oficiales y suboficiales habrían torturado a soldados argentinos bajo sus órdenes. Que los habrían estaqueado y sometido a graves privaciones de comida y abrigo. Todo eso derivaría en presuntos delitos de lesa humanidad.
Uno de los casos emblemáticos en la materia, el del hoy retirado teniente primero Jorge Eduardo Taranto, permite inferir claramente que detrás de tal tipo de denuncias se mueven una vez más, como motivación esencial, espurios intereses económicos. Se puede afirmar eso en virtud de que en este delicado ejemplo hay similitudes con los excesos incurridos en alto número entre las decenas de miles de indemnizaciones pagadas al amparo de las llamadas leyes reparatorias. Estas tuvieron inicialmente como objeto compensar las muertes, desapariciones, torturas y detenciones ocurridas como parte del terrorismo de Estado durante la última dictadura militar.
Las indemnizaciones fueron luego extendidas, complementadas y ampliadas por otras leyes al período que abarca desde el 16 de junio de 1955 hasta el 9 de diciembre de 1983. Y, finalmente, con sospechosa liberalidad, por vía administrativa, pagadas incluso a terroristas juzgados, condenados y con penas cumplidas por diversos delitos aberrantes que deberían haber sido considerados de lesa humanidad. También ha habido compensaciones pagadas a miles de presuntas víctimas de “exilios forzosos”.
Recordemos que el propio presidente Macri manifestó en una oportunidad: “Conmigo se acaban los curros en derechos humanos”. Es, pues, razonable que se exija en esta nueva situación la mayor transparencia y haya suficiente alerta para evitar nuevos e inadmisibles excesos.
El teniente primero (R.) Taranto, junto con otros oficiales y suboficiales, han sido destinatarios de una seguidilla ininterrumpida e interminable de demandas dirigidas a demostrar la supuesta comisión de delitos de lesa humanidad durante la Guerra del Atlántico Sur, de 1982. Los responsables de tales persecuciones han sido identificados. Sus móviles tendrían connotaciones no solo económicas, sino también ideológicas y políticas.
Taranto ya fue juzgado en dos oportunidades y resultó sobreseído en el primer caso. Pero los embates judiciales han continuado con causas iniciadas en juzgados federales emplazados en distintos lugares del país, en lo que aparenta ser una maniobra selectiva: la nefasta práctica del forum shopping, o sea, la deliberada elección de un juez determinado.
En la segunda causa por los mismos delitos y con los mismos imputados, la Cámara de Casación hizo lugar al recurso de prescripción de la acción penal a favor de todos los demandados. Se excluyó del beneficio, sin embargo, al mencionado exoficial. Por una sentencia, se precisó que los supuestos crímenes investigados -y nunca probados- no constituían delitos de lesa humanidad. El fallo de Casación no fue recurrido ni apelado. A su vez, la Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia declaró extinguida la acción penal y sobreseyó a todos los imputados, Taranto incluido.
Finalmente, la Corte Suprema de Justicia de la Nación dio carácter de cosa juzgada a la sentencia en favor del teniente primero Taranto (R.) y de los demás oficiales y suboficiales involucrados en las denuncias. No obstante lo cual, la persecución no cesa. Quienes los siguen acosando han reabierto la causa original, tratando con ello de evitar o demorar una previsible condena adversa en una acción iniciada por el mencionado exoficial.
Ocurre que los presuntamente “estaqueados” y “torturados” negaron las acusaciones y confesaron, en cambio, haber sido sometidos a presiones y tentaciones deleznables para que falsearan testimonios a fin de facilitar el logro de una “reparación histórica” monetaria.
Por lo demás, ha quedado ampliamente probado que las presuntas víctimas nunca estuvieron a las órdenes del entonces subteniente Taranto, quien celebró su 24º cumpleaños en la isla Gran Malvina, durante la guerra. Su desempeño permitió que los cinco suboficiales y 33 soldados clase 1962, a sus órdenes, volvieran al continente vivos, aunque marcados para siempre por la guerra.
Los perversos manejos en torno de las acusaciones descriptas tienen muchas similitudes con los episodios ocurridos alrededor del caso Maldonado. En el fondo, este debería ser uno de los capítulos de la investigación abierta hace poco por un fiscal, a fin de llegar a establecer las razones del estado de degradación de recursos de todo orden en el que se encuentran las Fuerzas Armadas.
Sin una sociedad que tome conciencia del acorralamiento sistemático en el que han sido puestas las Fuerzas Armadas hace muchos años, la Argentina carecerá del sistema eficiente y respetado de defensa nacional que prevé la Constitución nacional. Y se prolongarán en esa atmósfera actitudes temerarias como las que aquí mencionamos.
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A esto hemos llegado en la Argentina, sin que nuestras autoridades nacionales atinen a desenmascarar a los responsables de estas denuncias, como sé se hizo en el caso Maldonado, al que esta felonía multiplica por cien. La sed de venganza de los pretendidos querellantes solo quedaría saciada si las Fuerzas Armadas fueran humana y espiritualmente exterminadas, lo que jamás sucederá. A los 649 caídos en Malvinas les debemos un tributo de honor y gloria, por eso debemos denunciar estos relatos infames y enfrentar, unidos, en paz y libertad, los desafíos del presente, esfuerzo imprescindible para rescatar a la Argentina de su decadencia, ganar la batalla del progreso y de ese modo ser merecedores del legado de nuestros héroes.
En víspera de este 9 de Julio, se me llenan los ojos de lágrimas al recordar que tantos soldados no tuvieron la suerte de volver de ninguna de las dos guerras que nos tocó librar, pero más aún se me llenan cuando recuerdo que también tenemos héroes, muertos y heridos en el monte tucumano, como en las ciudades. Muertos que nadie recuerda, que han sido abandonados y entregados por los cobardes Generales, que nos condujeron a esa guerra y de todos los actuales que dirigen mi querido Ejército. Esos que, preocupándose solo por sus propios intereses, permiten que todos los que defendieron a la Patria, uniformados o no, sean asesinados en las cárceles de nuestro país.
Entiendo que la primera culpabilidad de que esto ocurra, es de los altos mandos de las fuerzas armadas, se olvidaron lo que decía el Código de Justicia Militar, sobre que el único responsable es el que manda y que, cualquiera que estuvo en esa guerra dependía de estos Generales. Estos ni siquiera supieron defender a quienes ellos que, en su oportunidad, los obligaron a participar en la guerra revolucionaria y ahora también mueren en las cárceles, por culpa de estos cobardes.
Malvinas fue una gesta heroica, pero no fue nunca más heroica que la guerra contra el terrorismo, en ella se salvó a la Patria, en Malvinas se perdió parte de ella. Acaso el ejercito de la guerra contra el terrorismo era distinto al ejército que lucho contra los ingleses, eran los mismos oficiales, los mismos Suboficiales, solo los soldados eran distintos y mostraron su valor tanto en las ciudades, el monte tucumano como en Malvinas.
También lloro al ver un presidente cobarde, que desprecia a sus soldados, que prefiere jugar al golf o al ping pong en las fechas patrias, y no concurrir al acto de la bandera por miedo de que lo puedan matar, eso demuestra que no confía ni en su propia seguridad, además de su desprecio por su propia Patria, porque las Fuerzas Armadas, son la patria misma, y ellas nos dieron este país.
Le faltan los atributos que un presidente debería tener, además de ser mentiroso, hipócrita y traidor, nos está conduciendo al abismo.
Y realmente lloro a gritos y es así como lo siento, cuando los mismos presos políticos que concurrieron a Malvinas, hacen como todos los que he mencionado, una separación entre esta coya combatiente que solo lucho en el monte y ellos que fueron a Malvinas. Realmente lamentable, muy lamentable ya que también el pueblo nos abandonó y hace la misma discriminación, como si fueran mejores soldados.
Y por último lloro también, porque el silencio de los presos políticos, que se dejan llevar al matadero como corderos, es atroz y vergonzoso, por supuesto en todos estos casos existen honrosas excepciones.
Es así que este 9 de Julio de 2018, es para mí y para la Patria que amo, un verdadero día de luto, con el corazón desgarrado y la sangre de mis soldados muertos y heridos en el monte tucumano y en Malvinas, como mi único consuelo, porque sin ellos la Patria habría desaparecido.
PP – VGMT (PRESO POLITICO – VETERANO DE GUERRA EN EL MONTE TUCUMANO
2 de abril honramos a los héroes. Cada sociedad los necesita. Y cada sociedad los tiene. Los tiene también la Argentina, pero no los reconoce… sin darse cuenta del perjuicio que con ello se autoinflige. Hay dos clases de héroes. Quienes brillan en los campos de batalla en defensa de su país. Y quienes viven en la sociedad civil haciendo su trabajo sin alharaca, desapercibidos por la mayoría de nosotros, pero que hacen una gran diferencia en la vida del prójimo. Esteban Vilgré La Madrid es la encarnación de ambas clases de heroísmo. El joven subteniente de Malvinas se destacó combatiendo en las cercanías de Monte Tumbledown. Su valor, incluso, ha sido destacado en los libros de dos autores ingleses: Mike Seear y Martin Middlebrook. Pero no menos heroico fue su desempeño en la posguerra, principalmente como jefe del Centro de Salud de las Fuerzas Armadas, donde se dedicó por entero a organizar la curación de las heridas del alma de nuestros combatientes. Nunca tendremos la cantidad exacta de soldados que salvó del suicidio, ni a cuantos veteranos ayudó a reencausar sus vidas, pero sabemos que fueron legión. Vilgré La Madrid es una persona abnegada que realizó acciones extraordinarias. Su vida nos recuerda el alto propósito que debería guiar la nuestra: el servicio. Hombres como él dan forma a la definición de la palabra heroísmo. Simbolizan el honor, el deber y el verdadero ser argentino. ¿Qué es lo que inspira a argentinos como Vilgré La Madrid? ¿Es el sentido de la obligación? ¿La determinación? ¿La perseverancia? Todos esos factores juegan su rol. Pero hay otro elemento clave, vital y no mensurable, que es el amor. Amor a la patria, que se traduce en amor al prójimo. En este 2 de abril, ¡gloria y honor a nuestros guerreros de Malvinas! Y especialmente a aquellos que siguieron combatiendo, – con otras armas, – también en la paz.
La guerra “fue un desatino”, decía el general Martín Balza, jefe del ejército en ese entonces, refiriéndose a la recuperación de las Malvinas que ordenara en 1982 el general Galtieri. Tiene toda la razón. Fue un desatino, como son desatinos todas las guerras que en el mundo han sido. Siendo que el tino es moderación o cordura, llegar a emplear la violencia es, por definición, un desatino. Y precisamente por eso, por ir en contra de aquellos principios por los que el hombre siente un innato apego, es que valoramos a los que hacen el supremo sacrificio personal de exponer sus propias vidas y las vidas de sus enemigos por una causa superior. El artículo 21 de la Constitución dice que: “todo ciudadano argentino está obligado a armarse en defensa de la patria…” Y se supone que armarse no significa esgrimir armas de juguete para realizar un desfile sino empuñar armas de verdadpara realizar el supremo desatino, la magnífica locura, de exponer la vida por un bien superior que nos envuelve a todos. El general Balza, que ha jurado cumplir la constitución, debiera tenerlo en cuenta. La Constitución no es sólo para marcar cuántos años han de actuar las autoridades, sino también –por lo menos lo propone– , para “asegurar los beneficios de la libertad para nosotros, para nuestra posteridad…”. Libertad que se necesita defender para que sus beneficios sean seguros. Es evidente que Galtieri se equivocó. Fue imprudente. Fracasó como técnico del combate, que debe conocer las condiciones, las tropas, los pertrechos, el terreno, las reservas. La oportunidad cuando se toma la excelsa decisión de cometer el supremo desatino, debe buscarse el asesoramiento de gente idónea que enseñe cómo llegar al único objetivo válido: la victoria, ya que emprender una guerra para no ganarla se parece demasiado al suicidio. Galtieri falló como técnico. Pero no puede negársele a él, ni a ningún otro argentino, el acierto en su propósito de recuperar el territorio nacional y el de emplear la violencia cuando las pacíficas negociaciones han fracasado a lo largo de siglo y medio. ¿No alcanzó un siglo y medio para darse cuenta de que ese no es el camino eficaz? .Pero el objetivo, que la hermanita perdida vuelva a casa, ¿No es acaso el mayor logro al que puedan aspirar los que tienen a su cargo la defensa de la nación? Con sus declaraciones Balza ha puesto en claro la actitud que asumen nuestras fuerzas armadas hasta en la actualidad. Pueden actuar -muy prudentemente- en los Balcanes, en la cochinchina o en cualquier parte del mundo en que nuestros acreedores precisen su presencia. Ahora ¿Haciendo la guerra en defensa de la patria, como lo establece la constitución? ¿O defendiendo a sus camaradas de armas cuando son enjuiciados injustamente? No, eso no. Sería un desatino. Él lo dice. Lo dijo el general. El hombre que nunca estuvo.
La muy valiente y siempre activa doctora Andrea Palomas Alarcón hurgó en los periódicos de hoy, descubriendo impresiones de ciudadanos comunes ante la problemática nacional.
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Chocobar
Todo delincuente sabe, por su proceder, que corre riesgos: tener que huir, ser detenido, pelear, ser herido o morir. Cuando huye puede rendirse o afrontar el riesgo en cualquiera de sus etapas.
Al tratar de escaparse provoca la situación riesgosa, que le es imputable, así como sus consecuencias. Esta causalidad le es directamente atribuible por su accionar ilícito y su pretensión de fuga. Quien lo persigue trata, con los medios que tiene, de impedirlo.
Cuando lo consigue, el resultado puede ser abrupto, pero provocado por quien se puso en esa situación de riesgo a sabiendas. Esto debería justificar a Chocobar, quien actuó dentro de la esfera del riesgo que provocó y afrontó el delincuente, quien no se detuvo y resistió la detención.
Además, a quien dispara una bala azarosa, corriendo, no se le puede atribuir intención de matar. Hay instinto, no intencionalidad. Todo esto admite más desarrollos, pero estimo basta para exculpar a Chocobar.
Vi el reportaje del doctor Alconada Mon al periodista Uki Goñi en la página web, que me sorprendió porque la nacion nunca tuvo una visión sesgada de la guerra contra la subversión y sus consecuencias, e incluso ponderó la conocida postura equidistante de Graciela Fernández Meijide. Sin embargo, Goñi omitió decir que la guerra comenzó durante el gobierno constitucional peronista; comparó la actuación de las FF.AA. argentinas con el genocidio de judíos por Hitler, aunque fueron totalmente distintas (Hitler no tuvo motivo valedero alguno para asesinar seis millones de judíos por solo serlo; la represión argentina fue consecuencia directa de la violencia iniciada por la guerrilla, lo que Goñi también omitió). Omitir es mentir, desinformar a la audiencia.
Hubo excesos y murieron inocentes, pero de ambos bandos en pugna y no de uno solo, como pretendió Goñi. Omitió que en todas las guerras siempre hubo lamentables consecuencias (por ejemplo, Hiroshima y Nagasaki). Goñi mintió cuando dijo que hubo un solo marino muerto por la guerrilla: pasó por alto el asesinato del almirante Hermes Quijada y el asesinato por la espalda del suboficial de la ESMA que impidió que el guardiamarina César Urien saliera de la unidad a la que pertenecía con cinco camiones cargados de armas que robaba para Montoneros. Urien fue condenado por un consejo de guerra a prisión perpetua y amnistiado el 25 de mayo de 1973. Al asumir Néstor Kirchner como presidente, le devolvió el estado militar, lo ascendió, lo indemnizó y lo designó director del Astillero Naval de Río Santiago. Y Goñi omitió también el asesinato de la hija del almirante Lambruschini, entre otros. Lamento que se hayan posibilitado tantas mentiras directas por omisión.
Enrique Munilla
DNI 4.433.538
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Memoria y justicia
Respecto de la carta del señor Enzo Scaletta, quiero decirle que para superar las adversidades del pasado necesitaremos, como dijera en otra misiva reciente el general Juan M. Giuliano, una memoria sin ideología, una verdad completa y una justicia sin venganza.
Comparto la indignación que provocó la actitud del colegio que quiere dejar sin trabajo a la señora Cecilia Pando.
El país de la intolerancia, el escrache y la persecución no es el que queremos la mayoría de los argentinos.
Todo mi apoyo a la profesora Pando y mis deseos que el establecimiento recapacite y no deje sin trabajo a una persona que lo único que hizo, con enorme valentía, fue poner en evidencia el relato sesgado del gobierno anterior sobre una parte de nuestra historia.
“¡Morir por la patria, oh valientes; morir defendiendo su honor, es este el ideal más ardiente, de argentino que es todo valor!”
Sean estas estrofas de la “Canción del Infante Argentino”, y el juramento de seguir la bandera hasta perder la vida, mi más sincero y sentido homenaje a los caídos en Malvinas.
En homenaje a todos aquellos caídos por la patria, un homenaje al que se pliega en ocasional enemigo y no la propia tierra que protegieron. María Delicia, madre del héroe de Malvinas, Pedro Giachino, un una historia singular.
Una experiencia personal
Hoy quiero compartir con mis compatriotas…UNA EXPERIENCIA PERSONAL…
Lo que voy a narrar es un hecho vivido hace muy pocos días y que ha dejado en mi y me atrevo a decir en todas las pocas personas que participaron de él, un profundo sentimiento de amor a Dios y la Patria…
Alrededor del 20 del mes pp, recibí una llamada telefónica en la cual se me hacía saber que el SR. AGREGADO MILITAR DE LA EMBAJADA DEL REINO UNIDO ROBIN SMITH, quería conocerme y presentarme su saludo.
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María Delicia Rearte de Giachino,
Madre del Capitán Pedro Giachino héroe de Malvinas
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Robin Smith, Comodoro de la Fuerza Aérea Real
Agregado Militar y de Defensa (Buenos Aires)
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El Sr. Agregado y su señora, formaban parte de la comitiva que acompañaba al reconocido orfebre Juan Carlos Pallarols en su presentación en Mendoza de la campaña “DOS ROSAS POR LA PAZ”, una profunda y significativa iniciativa del artista que recorrerá todo el país, hasta ser depositadas en MALVINAS. El día 23 en la Legislatura Provincial a las 11 de la mañana se llevaría a cabo un sencillo Acto…
Ante esta sorpresiva llamada lo primero que respondí es que “no tengo ningún interés en confraternizar con los ingleses”… Se reiteró la llamada haciéndome saber lo privado, personal y afectivo que sería esa visita y analizando mis sentimientos, entendí la grandeza de la actitud del soldado inglés, Veterano de Afganistan y lo mezquino de mi proceder…
¡¡¡NOBLEZA OBLIGA…!!!” Acepté la visita en la seguridad de que el SR. CFIM (PM) D. PEDRO EDGARDO GIACHINO, aprobaba mi resolución…
Después del Acto en la Legislatura alrededor de las 12.30, los esperaría en mi casa. Vivo muy cerca de allí desde hace 50 años, sola desde hace 21 en que murió mi esposo, en un departamento muy sencillo, seguramente acogedor, pero humilde y que con la vetustez de quien lo habita se van notando también en él, los años… Pero aquel famoso dicho “ingles” la casa del hombre es su castillo… me conforta.
Llegaron puntualmente: el Sr. Agregado, su esposa, su Secretario, Pallarols y su fotógrafo, un amigo y mi hijo Alejandro. En mi living donde los recibí muy formalmente, tengo un importante retrato de mi hijo Pedro y la pared cubierta de fotos, recordatorios, diplomas, distinciones referentes a Malvinas y que he ido atesorando a través de estos 35 años….
Creo que ese momento será inolvidable para un soldado. Estar ante la mirada fría desde el fondo de la historia de otro soldado que su PATRIA había preparado para morir por ella. El Sr. Agregado se cuadró y pidió un minuto de silencios por los muertos en la Guerra de Malvinas, argentinos y británicos. Un minuto de profunda conmoción interior para todos. Sin sensiblerias, el homenaje cálido, hacia aquellos que en el Cielo gozan de la Paz Eterna, sin distinción de orígenes, grado ni misión…
Sé que el soldado que vive una guerra no vuelve más, ni vivo, ni muerto… por eso sentí ante este hombre que supo de la guerra y volvió, conmocionado ante la presencia intangible de un hombre que no volvió de la guerra, que una madre puede esconder en su corazón todo el dolor de Maria al pie de la Cruz… Se mantuvo una conversación hecha de silencios interiores y miradas húmedas, pero llena de comprensión y verdad. Sin falsas alabanzas, ni entrega de principios y convicciones. El Sr. Agregado me regaló una preciosa medalla de plata, obra de Pallarols, con la imagen de la Virgen Desatanudos y en el reverso mis iniciales. Sin absoluto ningún sentido ajeno a lo privado y personal del encuentro.
El secretario anotaba todo en una “bitácora” y la parte jocosa y que aflojó un poco las tensión emotiva del momento fue que ante un dibujo a lápiz de mi perfil, al mostrármelo le dije espontáneamente” me ha hecho igual a la Thatcher” lo que provocó la risa general, me pidió firmara el dibujo y escribió en el margen la frase mía…
Así terminó esa entrevista insólita, por lo menos para mí. No le doy ninguna trascendencia política, ni diplomática, ni histórica, solo un valor absolutamente íntimo y espiritual, que nos demuestra a los hombres y mujeres de nuestra Patria amada, que desde el 14 de Junio de 1982, permanece enterrada en Darwin bajo una enorme lápida con 649 nombres, bajo la dulce mirada de Maria de Lujan y a la sombra protectora de la Cruz, que el día sagrado de su Resurrección brillará cuando las tres noches del odio, de la venganza, del poder, de la soberbia, de la mentira, queden sepultadas en la oscuridad del infierno…
Esta ha sido mi reciente “Experiencia Personal”, que quiero entregar a mis compatriotas en la seguridad de que “se puede” cuando la Paz es la meta, la Caridad el motor y la Justicia el destino…
Muchas veces es tanto el montón de estiércol que políticos progres y cagones defecan diariamente en esta, nuestra Patria, que hace que uno tenga ganas de olvidarse de todo, de orígenes, familia, amigos… y tratar de convencerse que este es un país de mierda con un pueblo de mierda. Pero de golpe, Dios te enfrenta a un héroe y entonces comprendés que aquello en lo que crees y por lo que peleas siguen siendo esas torres de plata- Dios, Patria, Lealtad, Honor- las mismas en las que creías cuando eras apenas un joven con todas las ilusiones. Solo hace falta que Dios te permita leer lo siguiente:
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“Yo no sabía ni leer ni escribir, pero cuando me tocó en suerte tener que pelear por mi Patria no me fue necesario ni leer ni escribir. El Ejército me dio mucho, me daba la oportunidad de estudiar, en la colimba uno aprendía a valorar cada insignificancia como si fuera oro, un plato de comida, un baño con agua caliente, un minuto más de sueño, y sobre todo el valor de las cosas y no el precio. La guerra para mi no fue un tragedia como muchos quisieron contarla, para mi fue una bendición, porque yo seré pobre e inculto pero Dios me eligió para que peleara por mi bandera y eso no es algo de lo que muchos puedan alardear. Pasé por muchas cosas, como todos los que fuimos a pelear, dentro de ellas el olvido y la ingratitud, pero ese olvido y esa ingratitud nos la dieron los civiles no los militares, porque a nosotros, a todos, se nos dio la posibilidad de hacer carrera dentro del Ejército, nunca nos cerraron las puertas como muchos dicen, fueron los gobiernos de todos estos años los que nos han cerrado las puertas, a los que les tuvimos que rogar para que nos dieran una pensión digna, nos llenaron de medallas que nosotros no pedimos, porque al buen soldado no le importan las medallas, pelea por convicción no por premios ni condecoraciones, y lamentablemente muchos utilizaron Malvinas para llenarse los bolsillos, esos, son los que se prestaron a ensuciar nuestra causa. Malvinas no fue una locura de Galtieri, él hizo lo que tenía que hacer, lo que era necesario hacer, y nosotros cumplimos orgullosamente con nuestro deber, y quien reniegue de eso no merece la bendición de haber estado allá”
OSCAR POLTRONIERI (VGM)
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Cruz La Nación Argentina al Heroico Valor en Combate
La justicia tiene un valor superior, está primero que la paz.
Escribe Jorge B. Lobo Aragón.
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La verdad sin miedo
Los argentinos tuvimos una guerra. Desgraciada y sucia, sí, pero fue una guerra. Hay quienes dicen que no. Que eso arguyen los partidarios de la represión. Pero al comienzo fueron los subversivos los que hablaron de guerra, lo que servía de justificación a sus violencias. Porque estábamos en guerra y ocupaban un territorio – las laderas del Aconquija -, solicitaron a las Naciones Unidos que se los considerara potencia beligerante.
Y a esa guerra, por errores en la conducción política y económica, falta de objetivos – ya que el único enarbolado era la vuelta a la democracia -, derrota militar en las Malvinas, corrupción infiltrada en las fuerzas armadas y algunos otros más, la ganó la subversión. Nos guste o no, quedaron triunfantes. Ocuparon cargos en la conducción del Estado, algunas madres de sus muertos hicieron alardes de sus heroicos comportamientos, descalificaron mediante una prensa adicta a todos los que se les opusieron, a sus abogados se los ha elegido Ministros y hasta presidente. Y los represores -como suele ocurrir con los bandos derrotados- han desaparecido, se han diluido, se han borrado ante el cambio de frente de sus enemigos, que hasta han hecho suya la política de Martínez de Hoz.
Podría pensarse que venciendo los subversivos hubieran implantado el comunismo más absoluto, como se vislumbraba en la década del setenta. Pero han cambiado los tiempos: ya ni en Rusia gobierna el comunismo, desplazado por la aplastante fuerza del capital, y los que quedan en Cuba y en la China parecen domesticados, reprimidos, morigerados. Los extremistas muertos no lo hubieran aceptado, pero los vivos se encolumnaron tras el Fondo Monetario. Hubo una guerra y los subversivos triunfaron.
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Pueden juzgar a los vencidos e imponerles penas. Pueden ejercer el violento derecho que da la fuerza. Está en sus manos. Muchas guerras han terminado matando como a criminales a los jefes vencidos. Pero, por la dignidad de la Nación, por decoro, correspondería que a la revancha se la ejerza con un mínimo de circunspección. Peroquienes han tenido que enfrentaruna guerra yante el que muchas rodillas se hincaron condescendientes; que en su momento recibieron el aplauso y acatamiento de toda una clase dirigente, se lo trate ahora como a un malhechor común, equiparado en su vulgar delito a pandillas de mafiosos, resulta un insulto a la nación que en su momento le rindió respetuoso homenaje y que hasta le agradeció el haberla sacado de la descomposición del peronismo isabelino.
La nación corrió el peligro de ser tomados por grupos armados capaces de organizarse y emprender acciones conjuntas de profundo alcance.A esta organización no la demostraron en los secuestros que les aportaban gruesas sumas con las que con holgura cubrían sus cuantiosos gastos, pues las técnicas empleadas eran comunes a las de las bandas simplemente delictivas.Demostraron su capacidad militar en los asaltos a los diversos cuarteles y, sobre todo, en su ocupación de las serranías tucumanas.La subversión empleo distintas tácticas.La más generalizada es la gramsciana, basada en copamiento de las conciencias mediante el adecuado empleo de técnicas aportada por la psicología freudiana.Otra era la lucha urbana, para la que se necesita el apoyo de fuertes sindicatos adoctrinados. Y otra la guerrilla rural, con la que Fidel Castro obtuvo el triunfo en Cuba y con la que Ernesto Guevarafracasó en Bolivia a pesar de su dedicación, tal vez coraje y experiencia. Pero la guerrilla rural, la subversión halló un magnifico escenario en los cerros tucumanos. Sin duda durante el gobierno de Isabelita Martínez la subversión se fortificó. La Iglesia en su momento ha condenado el Irenismo. “Irene” en griego significa paz. Por lo que se llama Irenismo al movimiento que aspira a la paz a todo trance. La paz es buena, sí, pero la paz que surge de la justicia. La paz que imponen los dominadores al margen de lo justo, es sólo un camino para usufructuar su poder. La justicia tiene un valor superior, está primero que la paz. Nuestro “Señor” empleó la violencia contra los mercaderes que hacían del templo un mercado. Con eso nos enseñó que la violencia, bien aplicada, es buena; hasta puede ser santa.
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¿En qué circunstancias se justifica? ¡Ah!, eso precisa de un prudente criterio, como los de San Martín y de Belgrano.
Sabemos también del mal que causó el terrorismo y el proceso que asoló al país, y debemos adherirnos al dolor sufrido por sus víctimas.
Pero siempre debemosque tener presente las verdades de nuestros próceres. Decía Sarmiento y debemos recordarlos “desgraciados los pueblos a los que se les agote ese instinto por mantener la salud colectiva.
Los ciudadanos de tales pueblos serán tratados como presidiarios.” No debemos bajar los brazos en este empeño que, para todo hombre, debe ser primordial que las personas y especialmente nuestros héroes y quienes lucharon por nuestra patria en una guerra declarada sean juzgados conforme las reglas de la sana crítica, del debido procedimiento, en tiempo cierto y con argumentos legales. El tan mentado Principio de inocencia. (In Dubio Pro Reo) de Jerarquía constitucional. Son las pruebas no nos jueces los que condenan. Muchos todavía están enceguecidos por el odio y la venganza que debe acabar. Sabemos que una justicia lenta no es justicia.
Con profunda angustia estoy mirando el desfile alegórico al 25 de mayo, día de la patria, donde pasan desfilando las bandas y también pasaran los veteranos de guerra de Malvinas.
Señor Presidente, sabe usted cuantos veteranos de guerra de Malvinas están presos, humillados e ignorados por usted y toda la sociedad argentina?
Señor Presidente, usted sabe que ellos arriesgaron su vida para combatir a los terroristas subversivos marxistas y contra el enemigo inglés para que usted y todos los argentinos podamos vivir en democracia?
Señor Presidente no le da vergüenza que nuestra patria “la República Argentina“ sea el único país del mundo que tiene a sus veteranos de guerra presos y demás integrantes de las Fuerzas Armadas? Estos eran jóvenes con valor y con honor que defendieron nuestra patria con orgullo, con patriotismo, que era lo que les faltaba a los jóvenes idealistas de los 70, perdón, jóvenes terroristas y asesinos que hoy poseen puestos políticos y se pasean por los canales de televisión dando cátedra de Derechos Humanos, tan asesinos y cobardes como el “Che” Guevara que es un prócer para algunos desmemoriados.
Señor Presidente, de que sirvió tanta sangre derramada?
Señor Presidente, quiero que nuestros hijos, nuestros nietos y nuestro primer bisnieto puedan disfrutar de su padre y abuelo en el ocaso de su vida.
Señor Presidente de usted depende el destino de nuestra querida patria.
Señor Presidente, también me llamó la atención no verlo en el desfile militar, usted es el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, no hace falta que se lo recuerde. Gobernar la República Argentina no es tan fácil como Boca Juniors.
Señor Presidente, quiero ver a nuestra patria de pie, libre y soberana. Quiero volver a ver las Fuerzas Armadas respetadas como se merecen.
Coincidimos que está bien. El soldado dos veces herido en la Guerra de las Islas Malvinas, quién perdiera un ojo en el asalto en La Tablada, quién día a día arriesga su cabeza en defensa de los ex uniformados prisioneros ilegales, o presos políticos en la Argentina post-kirchnerista y la actual de cambiemos, ha pedido asilo político en el Vaticano. Es cristalino, sabiendo que una imputación es una sentencia de muerte, el Teniente Coronel Emilio Guillermo Nani va a pelear ya que se ha ganado su destino. El elegirá cuando y como dejar este mundo. No la “justicia independiente” que ataca a los ciudadanos cobardemente.
Además de su probado valor, el Teniente Coronel es recordado por devolver la condecoración que “por haber defendido las instituciones”, el 29 de mayo de 1989, el entonces presidente Raúl Alfonsín le entregó por su actuación en la recuperación del cuartel de La Tablada, copado el 23 de enero de ese año por el MTP. Los agresores a la patria quedaban impunes gracias a los negociados del Estado. La decisión le golpeó al descubrirse defraudado por un gobierno débil como el de De La Rúa, quien no tuvo la altura suficiente siquiera para recibir al inquebrantable guerrero.
Vivo en un país donde se saluda y se agradece el servicio a la patria de sus soldados. ¿Argentina? Allí se los combate, se los persigue, se los encarcela y se les deja morir en las sombras.
Fabian Kussman, desde Orlando, Florida. Estados Unidos de América.
Mayo 2, 2017
Emilio Guillermo Nani nació el 03 de noviembre de 1945, en la Ciudad de Buenos Aires, Argentina. Es Teniente Coronel (R) del Ejército Argentino y Veterano de Guerra de Malvinas. Cursó sus estudios primarios y secundarios en los Colegios “Guadalupe”, “San José” y “Manuel Belgrano”. Está casado, tiene dos hijas y tres nietos.
Ingresó al Colegio Militar de la Nación en enero de 1964, egresando como Subteniente del Arma de Artillería 17 de Diciembre de 1966. Es “Oficial de Estado Mayor” del Ejército Argentino y Licenciado en Estrategia y Organización.
Un joven Nani participó en la guerra contraterrorista, en el marco de la guerra revolucionaria declarada contra la Nación argentina y su sociedad, por parte de las organizaciones terroristas, inspiradas en la revoluciones cubana, china y vietnamita, que ensangrentaron a la Argentina en los ’60, ’70 y ’80 y en el abortado conflicto con Chile de 1978/79, en la defensa aérea de El Chocón y de la destilería de YPF en Plaza Huincul, en la Provincia de Neuquén.
Participó voluntariamente con el Grupo de Artillería 3 y con el Regimiento de Infantería 7 en el conflicto por la recuperación de las Islas Malvinas, Sandwich del Sur y Georgias del Sur, en el que fue herido en dos oportunidades durante las acciones desarrolladas en la madrugada del 14 de junio de 1982, siendo acreedor a las condecoraciones “Medalla del Ejército Argentino al Herido en Combate” y Medalla “El Honorable Congreso de la Nación a los Combatientes”.
En diciembre del año 1988 fue nombrado Jefe del Grupo de Artillería de Defensa Aérea 101 “Teniente General PABLO RICCHIERI”, con asiento en Ciudadela – Provincia de Buenos Aires. Como tal participó, el 23 de Enero de 1989, en la recuperación de los Cuarteles del Regimiento de Infantería Mecanizada 3 “General MANUEL BELGRANO” y del Escuadrón de Exploración de Caballería Mecanizada 10 con asiento en La Tablada – Provincia de Buenos Aires (Ver Ataque terrorista al cuartel de La Tablada), tomados por asalto por terroristas del Movimiento Todos por la Patria, con la complicidad del gobierno de Raúl Ricardo Alfonsín.
Durante el desarrollo de las acciones, en su intento de rescatar a un grupo de rehenes en manos de los terroristas, fue gravemente herido en el rostro. Por su desempeño en combate recibió la Condecoración “La Nación Argentina al Herido en Combate”.
En diciembre de 1990, solicitó su pase a retiro, el que se efectivizó en Julio de 1992.
A partir de ese momento se insertó en la actividad privada y realizó distintas actividades académicas y disertaciones relacionadas con la Defensa Nacional, el análisis político, la Seguridad Pública, Privada y Vial y la Administración Hospitalaria, entre otras.
Es Cofundador de la Asociación de Veteranos de la Guerra de Malvinas (AVEGUEMA) y del Centro de Estudios Continentales sobre Seguridad y Justicia (CEC).
Es miembro Director de la Asociación de Damas y Caballeros de la Merced.
Es fundador y Presidente del Movimiento por la Recuperación de la República (MORERA).
En la actualidad es Consultor de empresas, establecimientos, clubes de campo y concesionarios viales y organismos, en materia de Seguridad Pública, Privada y Vial.
Que la guerra“fue un desatino” nos dice el general Martín Balza, jefe del ejército en ese entonces, refiriéndose a la recuperación de las Malvinas que ordenara en 1982 el general Galtieri. Tiene toda la razón. “fue un desatino”, como son desatinos todas las guerras que en el mundo han sido.Siendo que el tino es moderación, juicio, cordura, llegar a emplear la violencia es, por definición, un desatino.Y precisamente por eso, por ir en contra de aquellos principios por los que el hombre siente un innato apego, es que valoramos a los que hacen el supremo sacrificio personal de exponer sus propias vidas y las vidas de sus enemigos por una causa superior. El artículo 21 de la Constitución dice que: “todo ciudadano argentino está obligado a armarse en defensa de la patria…”, y se supone que armarse no significa esgrimir armas de juguete para realizar un desfile sino empuñar armas de verdad para realizar el supremo desatino, la magnífica locura, de exponer la vida por un bien superior que nos envuelve a todos. El general balza, que ha jurado cumplir la constitución, debiera tenerlo en cuenta.La constitución no es sólo para marcar cuántos años han de actuar las autoridades, sino también –por lo menos lo propone– , para“asegurar los beneficios de la libertad para nosotros, para nuestra posteridad”, libertad que se necesita defender para que sus beneficios sean seguros. Es evidente que Galtieri se equivocó. Fue imprudente. Fracasó como técnico del combate, que debe conocer las condiciones, las tropas, los pertrechos, el terreno, las reservas. La oportunidad cuando se toma la excelsa decisión de cometer el supremo desatino, debe buscarse el asesoramiento de gente idónea que enseñe cómo llegar al único objetivo válido: la victoria, ya que emprender una guerra para no ganarla se parece demasiado al suicidio. Galtieri falló como técnico.Pero no puede negársele a él, ni a ningún otro argentino, el acierto en su propósito de recuperar el territorio nacional y el de emplear la violencia cuando las pacíficas negociaciones han fracasado a lo largo de siglo y medio.¿No alcanza un siglo y medio para darse cuenta de que ese no es el camino eficaz? Y el objeto, que la hermanita perdida vuelva a casa, ¿No es acaso el mayor logro al que puedan aspirar los que tienen a su cargo la defensa de la nación? Con sus declaraciones Balza ha puesto en claro la actitud que asumen nuestras fuerzas armadas hasta en la actualidad. Pueden actuar -muy prudentemente- en los Balcanes, en la cochinchina o en cualquier parte del mundo en que nuestros acreedores precisen su presencia. Ahora ¿Haciendo la guerra en defensa de la patria, como lo establece la constitución? No, eso no. Sería un desatino. Él lo dice.
En horas en diferentes unidades militares de este territorio llamado Argentina, se conmemorará una vez más la Gesta de Malvinas. Seguramente asistirán diversas autoridades del mundo político y social y todas las ceremonias serán realmente emotivas rememorando a quienes lucharon, murieron o fueron heridos en esas islas tan caras a nuestros sentimientos. Mucho se está escribiendo y diciendo en los medios al respecto, destacándose todo lo que se debe a esos valientes. De lo que todos se cuidan de mencionar es la porción de esos combatientes que hoy en cautiverio son “carne de presidio”, ilegalmente imputados de los mal llamados delitos de lesa humanidad. Hasta es posible que a esos actos estén invitados y asistan algunos de los jueces prevaricadores a cuya disposición nos encontramos. Pero bueno, de eso es preferible no hablar.
DESAGRADECIMIENTO
Reflotamos http://www.ar.dev3.greymatter.one/islas-malvinas una nota de abril de 2015, cuando todavía novato en la prisión, comprobé que el 10 por ciento de los prisioneros habían luchado en y por las “hermanas perdidas”. Mi recuerdo a: MARCELO LUCAS CASTRO, GUILLERMO DOMINGUEZ MATHEU, CARLOS HIDALGO GARZÓN, PEDRO LOPEZ, ERNESTO KISHIMOTO, CARLOS PLA, PABLO VERA, TOMAS MACEDRA, PEDRO PALAVEZZATI Y RODOLFO EDUARDO NICOLAS. En general poco sé de sus destinos, salvo de 2 de ellos. Con CARLOS PLÁ y con la familia de HIDALGO GARZÓN, mantengo periódicas comunicaciones telefónicas. El primero con prisión domiciliaria y el segundo alojado en el mentiroso Hospital Penitenciario Central de Ezeiza en graves condiciones físicas y mentales. De él conservo la Biblia que lo acompañara en Malvinas y que me regalara durante mi huelga de hambre. Sé también que el abogado defensor GONZALO MIÑO en una carrera contra reloj está bregando por su atención médica o su prisión domiciliaria. Este héroe condecorado y herido en la lucha por las islas, está clasificado como “paciente de alto riesgo expuesto a muerte súbita”.
TRIBUTO A LOS COMBATIENTES CAUTIVOS Y SUS ESPOSAS
En la persona de GARZÓN y MARINA, desde PrisioneroEnArgentina.com rendimos tributo a todos los que lucharon, creyendo en la patria, y a sus esposas quienes guardaron vigilia mientras ellos combatían. A los primeros se les pagó con cruel cautiverio, mientras ellas hoy continúan en la zozobra y la espera. Antes a manos “del vamos por todo” y ahora por los hipócritas de todo tipo que dirigen la Argentina. Esos que respetan y reconocen como juventud maravillosa, a quienes fueron los asesinos seriales que arrastraron a la muerte y el dolor al país pocos años antes de la Guerra de Malvinas.
“La prisión me había robado la libertad pero no los recuerdos”.
Al concepto general de que los ciudadanos son iguales, bien vale la pena modificarlo separando dos clases: el ciudadano común y los héroes de guerra, los que han jugado su vida por la patria y se merecen todos los honores, todos los privilegios, todas las atenciones, todas las desigualdades a su favor.Que la comunidad ofrende su respeto a los que han perdido la vida por defenderla y a los que no ha sido voluntad de Dios llevarlos, pero igualmente la expusieron ante el enemigo, es una obligación nacida de la más elemental decencia.
Opinión
Estamos a horas de conmemorar el día del Veterano y de los caídos en la guerra de Malvinas.El 2 de abril de 1982, la dictadura cívico-militar inició el desembarco de tropas en las islas Malvinas, usurpadas por Inglaterra desde 1833. Leyendo un excelente libro “La pasión Según Malvinas” – del entonces corresponsal de guerra Nicolás Kasanzew, me vino a la memoria cuando paraguayos y bolivianos se trenzaron en una guerra, dejando atrás un período de cinco años de ataques crónicos en la frontera. Debieron luchar por intereses extranjeros que se disputaban la explotación del petróleo en ricos yacimientos del Chaco. Una guerra evidentemente injusta. Pero una guerra, una vez declarada es, se lo quiera o no, una guerra de la nación.Es la nación la que -quizás- se beneficie con el triunfo, y es la nación la que -con toda seguridad- ha de perjudicarse con la derrota. Lucharon bolivianos y paraguayos con bravura, con abnegación, haciendo gala de amor a sus patrias. Y cuando reinó la paz cada nación rindió homenaje a sus héroes, a sus queridos muertos, a los venerables veteranos.Al concepto general de que los ciudadanos son iguales, bien vale la pena modificarlo separando dos clases: el ciudadano común y los héroes de guerra, los que han jugado su vida por la patria y se merecen todos los honores, todos los privilegios, todas las atenciones, todas las desigualdades a su favor. En el Paraguay los héroes sobrevivientes aún hoy son tratados con reverencia. Que la comunidad ofrende su respeto a los que han perdido la vida por defenderla y a los que no ha sido voluntad de Dios llevarlos, pero igualmente la expusieron ante el enemigo, es una obligación nacida de la más elemental decencia.Seríamos unos canallas despreciables regateando ese homenaje. Pero, además, honrar a los que nos defendieron es la mínima política de conservación, de defensa. Ver que a los que han expuesto su vida por la patria se los aplaude los 2 de abril y que los demás días tienen que andar buscando un trabajito. Cuando debiera ser la sociedad la que espontáneamente se ofrezca a que se les conceda algún beneficio de los que los burócratas usufructúan como merecidas conquistas sociales. ¿No es acaso una vergüenza que está proclamando que somos una sociedad que no se merece el esfuerzo de sus hijos? La Argentina -gracias a Dios- tiene héroes que le han ofrendado la vida.Unos la perdieron. El primero el teniente Pedro Giachino, muerto sin siquiera defenderse, en cumplimiento del plan impuesto de no hacer daño al enemigo. Post mortem fue ascendido a capitán de fragata y -el 4 de abril de 1982- sepultado en el cementerio de Punta Alta. Se cumplía con la obligación de honrar a los héroes, y también se rindió honores a los restos mortales del soldado Mario Almonacid. Muchos héroes de tierra mar y aire murieron, y son igualmente respetables los que pusieron su pecho al peligro y no murieron.Quizás un emblema de todos ellos, de los vivos y de los muertos, sea el abnegado teniente Giachino. Podría su nombre ser bandera de lo que significó ponerlo al Estado al servicio de un interés permanente de la nación. Que se haya llegado a la derrota significa que a la nación hay que defenderla mejor, no que no deba defendérsela. Aquel gobierno militar inmediatamente después -lo mismo que los gobiernos civiles que lo sucedieron- se impuso la tarea de “desmalvinizar”, y para desmalvinizar se considera a los respetables veteranos como a simples “chicos” a los que es preciso tirarles alguna propina.Y no es así. Ellos, como Guachineo, se merecen el homenaje permanente de la patria! Feliz Día Veteranos.
Como bien saben los presentes, El dos de abril de 1982 es una fecha cara al sentimiento de los argentinos. Ese día, producto de una decisión apresurada o no (no viene al caso dilucidarlo ahora) las Fuerzas Armadas de la Nación recuperaron el territorio patrio de las Islas Malvinas; ello sin derramar una gota de sangre del usurpador inglés y ofrendando la vida del capitán Pedro Edgardo Giachino. El hecho, por su osadía, desencadenó acontecimientos que tuvieron en vilo al mundo. El Reino Unido de Gran Bretaña respondió enviando a la Royal Navy, la tercera flota más poderosa del mundo, al Atlántico Sur. La guerra comenzó, de hecho, con el hundimiento del Crucero Belgrano el 2 de mayo de 1982 por parte del submarino nuclear HMS Conqueror submarino británico. 323 soldados argentinos quedaron para siempre en las gélidas y profundas aguas de nuestro mar austral. La aviación de la marina argentina devolvió el golpe echando a pique al buque destructor HMS Sheffield. La guerra era una realidad. Pronto llegaron los nombres de las bajas argentinas. Nacido en Cerrillos, el cabo 1º Patricio Guanca fue el primer salteño en caer por el fuego enemigo. Aquí le rendimos un modesto pero sentido homenaje. También y sin discriminar si soldados, suboficiales u oficiales, quisiera dejar en claro lo siguiente: la inmensa mayoría de los que pelearon estuvieron a la altura de los aguerridos granaderos José de San Martín y los bravos lanceros de Martín Güemes. Es pertinente la aclaración porque no faltan algunos que, al mismo tiempo que evocan el 2 de Abril de 1982 como gesta heroica, llaman “genocidas” a los que los que lo hicieron poniendo el cuerpo.
Vale también en este día especial desmentir el relato infame construido por propios y extraños que exhibe a los soldados como “los chicos de la guerra”; pusilánimes y aterrados argentinos que rehuían el combate. Enfatizo que de ninguna manera fue así sino todo lo contrario. Es más, el entonces enemigo inglés (fuerza militar que se vanagloria de nunca haber perdido una guerra) reconoció la bravura y el profesionalismo del soldado argentino. El almirante “Sandy” Woodward, jefe de la flota británica, admitió que estuvieron a un tris de perder la guerra de Malvinas. Por su parte, la BBC de Londres, el prestigioso servicio público de radio, televisión del Reino Unido editó un documental en el que políticos y militares ingleses ponderan la sobresaliente actuación de los argentinos. Es que le hundimos la mitad de la flota.
De los aviadores argentinos y con esto termino, vayan estas palabras de Pierre Clostermann, piloto de la aviación militar francesa y más grande as de la Segunda Guerra Mundial, quien en una carta a nuestros pilotos, así dice:
“Nunca en la historia de las guerras desde 1914, tuvieron aviadores que afrontar una conjunción tan terrorífica de obstáculos mortales, ni aun los de la RAF sobre Londres en 1940 o los de la Luftwaffe en 1945.
Vuestro valor ha deslumbrado no sólo al pueblo argentino sino que somos muchos los que en el mundo estamos orgullosos que seáis nuestros hermanos pilotos.
A los padres y a las madres, a los hermanos y a las hermanas, a las esposas y a los hijos de los pilotos argentinos que fueron a la muerte con el coraje más fantástico y más asombroso, les digo que ellos honran a la Argentina y al mundo latino.”
Señores padres, profesores y alumnos ¡VIVA LA PATRIA!
¿Tanta es nuestra confusión que resulta necesario aclarar que un caído por la patria no es lo mismo que un terrorista que pretendió tomar el poder por asalto?Sentí indignación al ver que la Comisión por la Memoria ha aprovechado su visita a las islas Malvinas para promover su visión parcial de la historia argentina. Aquellos que deploran las apropiaciones no han trepidado en apropiarse de la causa que más nos une como pueblo. Así, han contaminado de ideología lo que hasta hace poco era lugar sagrado de la memoria de los héroes. La señora Nora Cortiñas ha mancillado esta memoria, al afirmar que esos héroes son “hermanos de nuestras hijas e hijos desaparecidos”.
En abril de 1982 recuperamos las Malvinas con una operación en la que las únicas ilustres víctimas fueron soldados argentinos, tal fue el afán con el que se procuró no producirles daño a los usurpadores. Después de más de ciento ochenta y cuatro años de despojo; de varios pronunciamientos de las Naciones Unidas en contra de la ocupación colonial, y en medio de circunstancias que hacían imperioso no demorar la recuperación, las fuerzas armadas se instalaron allá. De inmediato se establecieron negociaciones buscando un acuerdo satisfactorio sin apelar a la fuerza. Se habló de un gobierno tripartito, argentino e inglés con los norteamericanos como veedores. De una administración mitad argentina y mitad anglokélper. La argentina rechaza estas posibilidades con el lógico argumento de que la soberanía no se negocia, pero manteniendo el dialogo abierto a la búsqueda de la solución pacífica. El Secretario de Estado norteamericano, Haig, viene, viaja a Londres, vuelve, y la solución aceptable no aparece. El 23 de Abril el ministro ingles, Pym, dice que aunque nada pueda anunciarse se registran progresos hacía una salida encaminada a evitar la guerra. El 24 nuestro ministro, Nicanor Costa Méndez, viaja a los Estados Unidos para participar en una reunión de la Organización de los Estados Americanos. El domingo 25 de abril los ingleses atacan nuestro submarino estacionado en la superficie en las Georgia, y cañonean a la escasa guarnición. Es la guerra. Avanza la flota británica y a través de la diplomacia suiza nos hace saber que cualquier buque o avión que se le aproxime “recibirá la respuesta adecuada”. Responde la junta declarando que defenderá de la manera que lo considere más conveniente los supremos intereses de la nación. Se disipa el optimismo de mantener la paz. Y el lunes 26 de Abril de 1982 se reúnen en Nueva York los cancilleres de las veintiuna naciones americanas. Costa Méndez explica la situación y pide una respuesta “Clara e inmediata”: la flota británica tiene su lugar en otra parte del mundo y el colonialismo en ninguno. El Tratado interamericano de Asistencia reciproca establece que toda América apoyará a un país americano atacado por una potencia extra continental. La Gran Bretaña nos ataca y la Comunidad Europea ha dispuesto un aislamiento económico en contra de nosotros. “Traíamos propuestas de paz. Antes de comenzar nos han contestado con la guerra”.Los cancilleres aplauden de pie su exposición. Bastarían catorce votos contra siete para decidir la ayuda americana, pero superamos la cantidad:hay diecisiete votos por el reconocimiento de nuestra soberanía en las Malvinas y la cesación del ataque inglés, y solo cuatro abstenciones.Chile, Colombia, Los Estados Unidos y Trinidad. Nicaragua ofrece su apoyo a cualquier medida que tomemos en nuestra defensa. El Ecuador especialmente reconoce nuestro derecho a la heredad territorial. El Perú propone mediar haciendo intervenir a las naciones unidad. El Brasil se brinda para burlar el bloqueo europeo. Los panameños hacen fiestas populares apoyándonos.-Pero no todos acatan los tratados internacionales. Los Estados Unidos anuncian que en caso de llegarse a la guerra participarán en contra de nosotros. El panamericanismo queda reducido a una ilusión.
La secretaria paralela de Defensa de la oposición (Partido Laboral) del Reino Unido no prometió que la protección de las Islas Malvinas aparecería en su revisión de las estrategias a seguir, en marzo de este año.
Emily Thornberry fue acusada de “equivocarse” al negarse repetidamente a prometer que la actual política de autodeterminación del partido estaría respaldada en su revisión de defensa.
Con sus declaraciones, la señora Thornberry insinuó una fractura en el partido, diciendo que ella había confrontado Jeremy Corbyn sobre su opinión sobre las Malvinas en privado y pero se negó a decir si el líder de su movimiento estaba o no de acuerdo con ella.
Hace apenas unos meses, el señor Corbyn -titular del Partido Laborista desde setiembre del 2015- pidió la apertura del “diálogo” con Argentina sobre las Malvinas, en medio de informes que apoyaba la idea de un acuerdo de reparto de poder al estilo de Irlanda del Norte.
Los comentarios en ese momento provocaron un día de furia en la interna del Partido Laborista mientras los ministros del gabinete paralelo se enfrentaban a Corbyn durante una reunión semanal a puerta cerrada.
Esa semana, una comisión de la ONU respaldó a Argentina expandiendo su territorio marítimo en el Océano Atlántico Sur en un 35 por ciento para incluir las disputadas Islas Malvinas.
La señora Thornberry dejó en claro repetidamente que la actual política del Partido Laborista es que las Malvinas seguirán siendo británicas mientras los residentes lo deseen.
En septiembre de 2015, Thornberry fue nombrada Ministra paralela de Trabajo por Corbyn. Fue ascendida a la Secretaría Paralela de Defensa en enero de 2016. Al ser nombrada, Thornberry fue entrevistada por el Servicio de Radiodifusión de las Fuerzas Británicas y allí dijo: “En realidad tengo mucha más experiencia de lo que la gente cree, tengo un familiar que es miembro de las fuerzas armadas: Mi cuñado es un General. Para más datos, me nombraron teniente coronel honorario cuando trabajaba en la corte marcial como abogada y por lo tanto recogí cierta experiencia de los militares allí “. Luego, durante una discusión en los cuarteles del Partido Laborista sobre seguridad nuclear, Thornberry admitió que no sabía lo que en defensa nuclear es DEFCON o sus diferentes categorías de riesgo.
En una entrevista televisiva de septiembre de 2016, mientras se desempeñaba como Ministra paralela de Relaciones Exteriores, se le pidió a Thornberry que nombrara al canciller de Francia. Thornberry confirmó que no conocía el nombre del funcionario y acusó al entrevistador de sexismo, en una evidente manipulación para tratar de salir airosa de su ignorancia.
En agosto de este año, Theresa May utilizó su primer contacto con Argentina para suavizar la discusión sobre las Islas Malvinas y dijo que quiere forjar una nueva relación de “respeto mutuo”.
En un cambio significativo en las relaciones la Primer Ministro ha escrito al Presidente de Argentina diciendo que es su “sincera esperanza” de que las dos naciones puedan construir una relación más constructiva.
Dijo que quiere “hacer progresos” para poner fin a las restricciones a la exploración de petróleo para impulsar la economía local y permitir más vuelos hacia y desde la isla. Gran Bretaña cree que puede construir una relación más “fructífera” con Mauricio Macri, el presidente argentino que entró en funciones en diciembre del año pasado.
Esta situación contrasta con la administración de David Cameron que fue marcada por una serie de enfrentamientos amargos con Cristina Fernández de Kirchner, la ex presidente de Argentina. En su oportunidad, Cameron había acusado a la mandataria argentina de amenazar a los kelpers, con la medida de cortar el puente aéreo, los contratos de pesca y pisotear el derecho de libre determinación ya que según los miembros de la Asamblea Legislativa de las islas “No hay ninguna persona que quiera ser argentina entre los habitantes de la Malvinas”.
Roger Edwards, un representante de los habitantes del archipiélago, destacó que gracias a la Carta Orgánica de la ONU que defiende el derecho a la autodeterminación de los pueblos”, los isleños “decidimos mantener nuestros vínculos con el Reino Unido”.
De acuerdo con la asamblea, las islas son autosuficientes excepto en el área de Defensa, departamento que no necesitaban de no haber sido por las extorsiones del gobierno kirchnerista.
En una carta dirigida al presidente Macri, la señora May auguró que esperaba sinceramente que, cuando existan diferencias, puedan reconocerse en un ambiente de respeto mutuo y con la intención de actuar de una manera que beneficie a todos los interesados, lo que incluye avanzar hacia nuevas conexiones aéreas entre las Islas Malvinas y terceros países de la región y la eliminación de medidas restrictivas sobre los hidrocarburos. Argentina ha prohibido la mayoría de los vuelos a las Malvinas a través de su espacio aéreo, lo que significa que los aviones tienen que ir a través de Chile y los servicios están severamente restringidos.
Los ex combatientes argentinos en las Islas Malvinas -los valientes olvidados, los que dejaron hermanos, sudor y sangre en la contienda, los que se trajeron el dolor y el trauma, los que, de a poco hemos convertido en simples siluetas- también tienen una firme opinión.
Unos meses atrás, la canciller argentina Susana Malcorra y el vicecanciller británico Alan Duncan firmaron una declaración conjunta en la que -según Malcorra- se incluye el tema del reconocimiento de los soldados enterrados como NN en las islas, y otros puntos de perfil beneficioso los cuales habría que estudiar y pulir como inversiones, asuntos culturales, investigación, el área de seguridad y también esto involucra la cuestión de Malvinas. La cuestión de Malvinas -evidentemente- no es la reanudación de los vuelos del continente a las islas Malvinas y la explotación conjunta de pesca e hidrocarburos en la zona marítima del conflicto, si acordado en el documento. Lo que es un hecho es que nunca se tocó el tema de la soberanía.
Los ex combatientes argentinos en las Islas Malvinas -los valientes olvidados, los que dejaron hermanos, sudor y sangre en las islas, los que se trajeron el dolor y el trauma, los que, de a poco hemos convertido en simples siluetas- opinan que el Gobierno incurre en el delito de incumplimiento de deberes de funcionario público, al alejarse del mandato constitucional de ratificar la soberanía sobre las Malvinas. Los kelpers han abierto los brazos sonrientes a este documento de cooperación. La oposición argentina -Frente para la Victoria- acusa a Malcorra de ambición personal por obtener un cargo y que no se puede justificar el renunciamiento a la defensa de la soberanía argentina sobre las islas Malvinas por un voto en las Naciones Unidas.
Mientras tanto, existe una división entre los británicos sobre si las islas deberían ser argentinas o de la corona. Los argumentos son variados, como la opinión del escritor Martin Amis quien señaló que, pese a que la guerra fue solo importante para los militares argentinos para ocultar sus estragos económicos y para la Dama de Hierro para escalar en popularidad, las islas pertenecen a Argentina.
Las Islas Malvinas se encuentran a 184 millas de distancia de la parte continental argentina, menuda diferencia con las 7.925 millas de distancia del Reino Unido. También no están en la misma plataforma continental que el Reino Unido a pesar de tener otras islas a su alrededor. Más aún son parte de la misma zona que tiene flora y fauna de Argentina. Dado estos factores geográficos, ¿no es correcto que las Malvinas estén bajo el dominio argentino que las británicas?
En primer lugar, el mayor argumento que el Reino Unido continúa empujando en la cuestión de Malvinas es el hecho de que menos de 4000 personas viven en las islas, todas las cuales hablan inglés. Para el Reino Unido -a través de su historia- poner una bandera en un territorio y reclamarlo, significa que sus habitantes son británicos. El Reino Unido no se preocupa por quién fue primero o quién tiene derecho a la tierra.
Las Malvinas pertenecen a la Argentina, cualquiera que no esté de acuerdo con este hecho tiene sus propios intereses y ellos son los de apoyar a una potencia en vez de un país menos desarrollado. Por eso es más que ineficiente el comportamiento de la ONU. Si la ONU fuera verdaderamente para los pueblos del mundo, obligaría al Reino Unido a salir de Malvinas.
¿O no? El argumento geográfico funcionaría si las islas Malvinas no hubieran tenido habitantes. Hay una población pequeña pero significativa de 3140 personas que desean permanecer con el Reino Unido y debe ser respetado. Ellos no hablan español y esto resultaría problemático.
En cuanto al Reino Unido colonialista, ¿cómo es lo que Argentina quiere hacer diferente? Los kelpers quieren quedarse con el Reino Unido, ¿cómo se los obliga a unirse a la Argentina contra su voluntad anticolonialista? Si se obliga a alguien a unirse a un país contra su voluntad, sofoca su derecho a la autodeterminación y forzar a las Malvinas a unirse a Argentina contra su voluntad sería exactamente lo contrario de lo que representa la ONU (autodeterminación de los pueblos).
Margaret Thatcher llevó al Reino Unido a la guerra por una sola razón. Para defender a los habitantes del Reino Unido en las Malvinas. ¿Por qué Argentina estaba decidida a dar una pelea obstinada? Porque las Malvinas son argentinas. El territorio malvinense en poder de la reina es una muestra de los antiguos trucos piratas manteniendo una colonia lejos de su país.
1982 no fue un accidente, la Argentina ha querido las islas de vuelta por un tiempo muy largo. Los británicos “contrabandean” petróleo y ese accionar tampoco es del gusto de los argentinos.
Siempre hubo colonias inglesas por el mundo. Que hubiera habitantes del Reino Unido en África durante siglos, no significaba que no era correcto para África lograr la independencia. Gibraltar es otro ejemplo perfecto. Una roca que comparte su oleaje con África no es un accidente, sino una muestra más de colonialismo.
Los kelpers deben darse cuenta de que no viven en las islas británicas, sino en una pequeña isla frente a la costa de Sudamérica. No hay nada británico en eso. Ellos podrían optar por estar bajo el dominio británico, pero el argumento de Argentina es que, si esas personas quieren vivir allí, están bajo el gobierno argentino porque la tierra es argentina.
Pero… Mientras que las acciones de los británicos en la toma inicial de las islas y del Peñón de Gibraltar en el pasado puede haber sido un acto de colonialismo, el hecho es que en la actualidad las Malvinas son un territorio autónomo que libremente eligen permanecer asociado con el Reino Unido y debe ser permitido que el pueblo, a través de su legislatura, elija democráticamente su propio futuro.
Los errores del colonialismo son precisamente lo que no debe repetirse. Los isleños actuales han estado allí por generaciones y son parte de esas islas, no las islas británicas.
Si eligen ser británicos, independientes o parte de otro país, depende de ellos. Son las únicas personas realmente afectadas por cualquier decisión hoy en día. Ignorar esto es tan malo como el imperialismo británico que es tan criticado o como la tendencia argentina de usar a las Malvinas como conquista de un partido político. Es un gran problema para los pobladores isleños. Los originales de Argentina ya estaban aquí. No eran el invasor europeo. Es decir, ¿la Argentina nos pertenece a los Hernández, a los Moretti, a los Pérez o a los tehuelches, a los tobas, a los wichis…?
En tanto, no hay explicaciones sobre la declaración conjunta entre las cancillerías de ambos países, ni sobre si se trata de un primer paso táctico. Ante ello, se vive frente a un partido laborista confuso y dividido, una ministra como Theresa May que puede estar usando elementos de delación y unos isleños totalmente decididos. ¿Es redundante decir que Argentina sigue sin ideas y sin rumbo?
Relato sobre Malvinas
Por el General de Brigada (R.) José Luis Figueroa
En el editorial del 30 de junio se describe la persecución que sufre un grupo de oficiales y suboficiales del Regimiento de Infantería 5 (RI5), por su desempeño en la Guerra de Malvinas. Nacido con la Patria en 1810, el RI5 fue desplegado, durante dicha guerra, en la isla Gran Malvina, y sus 1500 integrantes, hoy veteranos de guerra (VGM), cumplieron su misión bajo bombardeo británico y aislados de Puerto Argentino.
[ezcol_2fifth]El 9 de mayo el buque Isla de los Estados, que transportaba pertrechos para el regimiento, fue hundido frente a las posiciones del mismo, perdiendo la vida sus veintidós tripulantes. Los soldados del RI5 se mantuvieron unidos y operando, a pesar de no haber recibido suministros por más de cincuenta días, a la intemperie, en un clima extremo, por lo cual, sin excepción, pasaron hambre y frío.
Los admiradores de los terroristas de los 70 hoy se proponen mancillar la gesta de Malvinas estigmatizando a los soldados como víctimas, lo que constituye un insulto para quienes combatieron y dieron su vida por la Patria, en 1982. Este relato la presenta como un mero plan criminal, sistemático y generalizado, de tortura, violación de los derechos humanos y asesinato de soldados conscriptos, lo que habilita a la acusación de oficiales y suboficiales por delitos de lesa humanidad (DLH), relato en el cual la fuerza de tareas británica no existe. Tuve la oportunidad de participar de reuniones de VGM, quienes, sin distinción de jerarquías ni grados, desmienten los hechos denunciados, los cuales, además de una mentira, son un mensaje devastador para las Fuerzas Armadas, que compromete la defensa nacional. Los máximos responsables de la conducción de la Guerra de Malvinas fueron juzgados y condenados, hace más de 30 años.
Fiscal Marcelo A. Rapoport
El juez Lijo, la Cámara Federal Penal de Comodoro Rivadavia, la Sala I de la Cámara de Casación y la Corte Suprema de Justicia ya se expidieron respecto de estos inexistentes DLH, en fallos firmes, con carácter de cosa juzgada, todos exculpatorios para los acusados. No obstante, un fiscal de Justicia Legítima, el doctor Rapoport, volvió a la carga y solicitó al juez, doctor Calvete, en Río Grande, la detención e indagatoria de veintiséis oficiales y suboficiales del RI5. Existen numerosas pruebas que demuestran que los testigos y las presuntas víctimas fueron incentivados a mentir con la promesa de un resarcimiento económico.
[/ezcol_2fifth] [ezcol_3fifth_end]Editorial de LA NACIÓN.
Malvinas: absurda persecución
(30 de Junio, 2018)
Es necesario acatar la palabra de la Justicia y no permitir que se usen acusaciones con oscuros fines contra oficiales
Otra denuncia penal presentada recientemente procura sostener que en el transcurso de la Guerra de Malvinas algunos de nuestros oficiales y suboficiales habrían torturado a soldados argentinos bajo sus órdenes. Que los habrían estaqueado y sometido a graves privaciones de comida y abrigo. Todo eso derivaría en presuntos delitos de lesa humanidad.
Uno de los casos emblemáticos en la materia, el del hoy retirado teniente primero Jorge Eduardo Taranto, permite inferir claramente que detrás de tal tipo de denuncias se mueven una vez más, como motivación esencial, espurios intereses económicos. Se puede afirmar eso en virtud de que en este delicado ejemplo hay similitudes con los excesos incurridos en alto número entre las decenas de miles de indemnizaciones pagadas al amparo de las llamadas leyes reparatorias. Estas tuvieron inicialmente como objeto compensar las muertes, desapariciones, torturas y detenciones ocurridas como parte del terrorismo de Estado durante la última dictadura militar.
Recordemos que el propio presidente Macri manifestó en una oportunidad: “Conmigo se acaban los curros en derechos humanos”. Es, pues, razonable que se exija en esta nueva situación la mayor transparencia y haya suficiente alerta para evitar nuevos e inadmisibles excesos.
El teniente primero (R.) Taranto, junto con otros oficiales y suboficiales, han sido destinatarios de una seguidilla ininterrumpida e interminable de demandas dirigidas a demostrar la supuesta comisión de delitos de lesa humanidad durante la Guerra del Atlántico Sur, de 1982. Los responsables de tales persecuciones han sido identificados. Sus móviles tendrían connotaciones no solo económicas, sino también ideológicas y políticas.
Taranto ya fue juzgado en dos oportunidades y resultó sobreseído en el primer caso. Pero los embates judiciales han continuado con causas iniciadas en juzgados federales emplazados en distintos lugares del país, en lo que aparenta ser una maniobra selectiva: la nefasta práctica del forum shopping, o sea, la deliberada elección de un juez determinado.
En la segunda causa por los mismos delitos y con los mismos imputados, la Cámara de Casación hizo lugar al recurso de prescripción de la acción penal a favor de todos los demandados. Se excluyó del beneficio, sin embargo, al mencionado exoficial. Por una sentencia, se precisó que los supuestos crímenes investigados -y nunca probados- no constituían delitos de lesa humanidad. El fallo de Casación no fue recurrido ni apelado. A su vez, la Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia declaró extinguida la acción penal y sobreseyó a todos los imputados, Taranto incluido.
Finalmente, la Corte Suprema de Justicia de la Nación dio carácter de cosa juzgada a la sentencia en favor del teniente primero Taranto (R.) y de los demás oficiales y suboficiales involucrados en las denuncias. No obstante lo cual, la persecución no cesa. Quienes los siguen acosando han reabierto la causa original, tratando con ello de evitar o demorar una previsible condena adversa en una acción iniciada por el mencionado exoficial.
Ocurre que los presuntamente “estaqueados” y “torturados” negaron las acusaciones y confesaron, en cambio, haber sido sometidos a presiones y tentaciones deleznables para que falsearan testimonios a fin de facilitar el logro de una “reparación histórica” monetaria.
Por lo demás, ha quedado ampliamente probado que las presuntas víctimas nunca estuvieron a las órdenes del entonces subteniente Taranto, quien celebró su 24º cumpleaños en la isla Gran Malvina, durante la guerra. Su desempeño permitió que los cinco suboficiales y 33 soldados clase 1962, a sus órdenes, volvieran al continente vivos, aunque marcados para siempre por la guerra.
Los perversos manejos en torno de las acusaciones descriptas tienen muchas similitudes con los episodios ocurridos alrededor del caso Maldonado. En el fondo, este debería ser uno de los capítulos de la investigación abierta hace poco por un fiscal, a fin de llegar a establecer las razones del estado de degradación de recursos de todo orden en el que se encuentran las Fuerzas Armadas.
Sin una sociedad que tome conciencia del acorralamiento sistemático en el que han sido puestas las Fuerzas Armadas hace muchos años, la Argentina carecerá del sistema eficiente y respetado de defensa nacional que prevé la Constitución nacional. Y se prolongarán en esa atmósfera actitudes temerarias como las que aquí mencionamos.
A esto hemos llegado en la Argentina, sin que nuestras autoridades nacionales atinen a desenmascarar a los responsables de estas denuncias, como sé se hizo en el caso Maldonado, al que esta felonía multiplica por cien. La sed de venganza de los pretendidos querellantes solo quedaría saciada si las Fuerzas Armadas fueran humana y espiritualmente exterminadas, lo que jamás sucederá. A los 649 caídos en Malvinas les debemos un tributo de honor y gloria, por eso debemos denunciar estos relatos infames y enfrentar, unidos, en paz y libertad, los desafíos del presente, esfuerzo imprescindible para rescatar a la Argentina de su decadencia, ganar la batalla del progreso y de ese modo ser merecedores del legado de nuestros héroes.
General de Brigada (R.) José Luis Figueroa
Exjefe del Regimiento de Infantería 5
Envío y colaboración: DRA. ANDREA PALOMAS ALARCÓN
PrisioneroEnArgentina.com
Julio 15,2018
ESTE SOLDADO TAMBIÉN LLORA
Por el Tte. Cnel ARIEL VALDIVIEZO
En víspera de este 9 de Julio, se me llenan los ojos de lágrimas al recordar que tantos soldados no tuvieron la suerte de volver de ninguna de las dos guerras que nos tocó librar, pero más aún se me llenan cuando recuerdo que también tenemos héroes, muertos y heridos en el monte tucumano, como en las ciudades. Muertos que nadie recuerda, que han sido abandonados y entregados por los cobardes Generales, que nos condujeron a esa guerra y de todos los actuales que dirigen mi querido Ejército. Esos que, preocupándose solo por sus propios intereses, permiten que todos los que defendieron a la Patria, uniformados o no, sean asesinados en las cárceles de nuestro país.
Entiendo que la primera culpabilidad de que esto ocurra, es de los altos mandos de las fuerzas armadas, se olvidaron lo que decía el Código de Justicia Militar, sobre que el único responsable es el que manda y que, cualquiera que estuvo en esa guerra dependía de estos Generales. Estos ni siquiera supieron defender a quienes ellos que, en su oportunidad, los obligaron a participar en la guerra revolucionaria y ahora también mueren en las cárceles, por culpa de estos cobardes.
Malvinas fue una gesta heroica, pero no fue nunca más heroica que la guerra contra el terrorismo, en ella se salvó a la Patria, en Malvinas se perdió parte de ella. Acaso el ejercito de la guerra contra el terrorismo era distinto al ejército que lucho contra los ingleses, eran los mismos oficiales, los mismos Suboficiales, solo los soldados eran distintos y mostraron su valor tanto en las ciudades, el monte tucumano como en Malvinas.
También lloro al ver un presidente cobarde, que desprecia a sus soldados, que prefiere jugar al golf o al ping pong en las fechas patrias, y no concurrir al acto de la bandera por miedo de que lo puedan matar, eso demuestra que no confía ni en su propia seguridad, además de su desprecio por su propia Patria, porque las Fuerzas Armadas, son la patria misma, y ellas nos dieron este país.
Le faltan los atributos que un presidente debería tener, además de ser mentiroso, hipócrita y traidor, nos está conduciendo al abismo.
Y realmente lloro a gritos y es así como lo siento, cuando los mismos presos políticos que concurrieron a Malvinas, hacen como todos los que he mencionado, una separación entre esta coya combatiente que solo lucho en el monte y ellos que fueron a Malvinas. Realmente lamentable, muy lamentable ya que también el pueblo nos abandonó y hace la misma discriminación, como si fueran mejores soldados.
Y por último lloro también, porque el silencio de los presos políticos, que se dejan llevar al matadero como corderos, es atroz y vergonzoso, por supuesto en todos estos casos existen honrosas excepciones.
Es así que este 9 de Julio de 2018, es para mí y para la Patria que amo, un verdadero día de luto, con el corazón desgarrado y la sangre de mis soldados muertos y heridos en el monte tucumano y en Malvinas, como mi único consuelo, porque sin ellos la Patria habría desaparecido.
PP – VGMT (PRESO POLITICO – VETERANO DE GUERRA EN EL MONTE TUCUMANO
ARIEL VALDIVIEZO
D.N.I.: 8.196.717
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Juio 4, 2018
ESTEBAN VILGRÉ LAMADRID
Escribe NICOLÁS KASANZEW.
2 de abril honramos a los héroes. Cada sociedad los necesita. Y cada sociedad los tiene. Los tiene también la Argentina, pero no los reconoce… sin darse cuenta del perjuicio que con ello se autoinflige. Hay dos clases de héroes. Quienes brillan en los campos de batalla en defensa de su país. Y quienes viven en la sociedad civil haciendo su trabajo sin alharaca, desapercibidos por la mayoría de nosotros, pero que hacen una gran diferencia en la vida del prójimo. Esteban Vilgré La Madrid es la encarnación de ambas clases de heroísmo. El joven subteniente de Malvinas se destacó combatiendo en las cercanías de Monte Tumbledown. Su valor, incluso, ha sido destacado en los libros de dos autores ingleses: Mike Seear y Martin Middlebrook. Pero no menos heroico fue su desempeño en la posguerra, principalmente como jefe del Centro de Salud de las Fuerzas Armadas, donde se dedicó por entero a organizar la curación de las heridas del alma de nuestros combatientes. Nunca tendremos la cantidad exacta de soldados que salvó del suicidio, ni a cuantos veteranos ayudó a reencausar sus vidas, pero sabemos que fueron legión. Vilgré La Madrid es una persona abnegada que realizó acciones extraordinarias. Su vida nos recuerda el alto propósito que debería guiar la nuestra: el servicio. Hombres como él dan forma a la definición de la palabra heroísmo. Simbolizan el honor, el deber y el verdadero ser argentino. ¿Qué es lo que inspira a argentinos como Vilgré La Madrid? ¿Es el sentido de la obligación? ¿La determinación? ¿La perseverancia? Todos esos factores juegan su rol. Pero hay otro elemento clave, vital y no mensurable, que es el amor. Amor a la patria, que se traduce en amor al prójimo. En este 2 de abril, ¡gloria y honor a nuestros guerreros de Malvinas! Y especialmente a aquellos que siguieron combatiendo, – con otras armas, – también en la paz.
Nicolás Kasanzew
Fuente: https://www.facebook.com/nicolas.kasanzewcorresponsal
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Abril 21, 2018
Balza – El hombre del desatino…
Por JORGE BERNABE LOBO ARAGON·
La guerra “fue un desatino”, decía el general Martín Balza, jefe del ejército en ese entonces, refiriéndose a la recuperación de las Malvinas que ordenara en 1982 el general Galtieri. Tiene toda la razón. Fue un desatino, como son desatinos todas las guerras que en el mundo han sido. Siendo que el tino es moderación o cordura, llegar a emplear la violencia es, por definición, un desatino. Y precisamente por eso, por ir en contra de aquellos principios por los que el hombre siente un innato apego, es que valoramos a los que hacen el supremo sacrificio personal de exponer sus propias vidas y las vidas de sus enemigos por una causa superior. El artículo 21 de la Constitución dice que: “todo ciudadano argentino está obligado a armarse en defensa de la patria…” Y se supone que armarse no significa esgrimir armas de juguete para realizar un desfile sino empuñar armas de verdad para realizar el supremo desatino, la magnífica locura, de exponer la vida por un bien superior que nos envuelve a todos. El general Balza, que ha jurado cumplir la constitución, debiera tenerlo en cuenta. La Constitución no es sólo para marcar cuántos años han de actuar las autoridades, sino también –por lo menos lo propone– , para “asegurar los beneficios de la libertad para nosotros, para nuestra posteridad…”. Libertad que se necesita defender para que sus beneficios sean seguros. Es evidente que Galtieri se equivocó. Fue imprudente. Fracasó como técnico del combate, que debe conocer las condiciones, las tropas, los pertrechos, el terreno, las reservas. La oportunidad cuando se toma la excelsa decisión de cometer el supremo desatino, debe buscarse el asesoramiento de gente idónea que enseñe cómo llegar al único objetivo válido: la victoria, ya que emprender una guerra para no ganarla se parece demasiado al suicidio. Galtieri falló como técnico. Pero no puede negársele a él, ni a ningún otro argentino, el acierto en su propósito de recuperar el territorio nacional y el de emplear la violencia cuando las pacíficas negociaciones han fracasado a lo largo de siglo y medio. ¿No alcanzó un siglo y medio para darse cuenta de que ese no es el camino eficaz? .Pero el objetivo, que la hermanita perdida vuelva a casa, ¿No es acaso el mayor logro al que puedan aspirar los que tienen a su cargo la defensa de la nación? Con sus declaraciones Balza ha puesto en claro la actitud que asumen nuestras fuerzas armadas hasta en la actualidad. Pueden actuar -muy prudentemente- en los Balcanes, en la cochinchina o en cualquier parte del mundo en que nuestros acreedores precisen su presencia. Ahora ¿Haciendo la guerra en defensa de la patria, como lo establece la constitución? ¿O defendiendo a sus camaradas de armas cuando son enjuiciados injustamente? No, eso no. Sería un desatino. Él lo dice. Lo dijo el general. El hombre que nunca estuvo.
Opiniones varias sobre temas candentes de un país descarrilado
La muy valiente y siempre activa doctora Andrea Palomas Alarcón hurgó en los periódicos de hoy, descubriendo impresiones de ciudadanos comunes ante la problemática nacional.
Chocobar
Todo delincuente sabe, por su proceder, que corre riesgos: tener que huir, ser detenido, pelear, ser herido o morir. Cuando huye puede rendirse o afrontar el riesgo en cualquiera de sus etapas.
Al tratar de escaparse provoca la situación riesgosa, que le es imputable, así como sus consecuencias. Esta causalidad le es directamente atribuible por su accionar ilícito y su pretensión de fuga. Quien lo persigue trata, con los medios que tiene, de impedirlo.
Cuando lo consigue, el resultado puede ser abrupto, pero provocado por quien se puso en esa situación de riesgo a sabiendas. Esto debería justificar a Chocobar, quien actuó dentro de la esfera del riesgo que provocó y afrontó el delincuente, quien no se detuvo y resistió la detención.
Además, a quien dispara una bala azarosa, corriendo, no se le puede atribuir intención de matar. Hay instinto, no intencionalidad. Todo esto admite más desarrollos, pero estimo basta para exculpar a Chocobar.
Ricardo Flomenbaum
DNI 4.198.607
[/ezcol_1fifth] [ezcol_1fifth]Omisiones de Goñi
Vi el reportaje del doctor Alconada Mon al periodista Uki Goñi en la página web, que me sorprendió porque la nacion nunca tuvo una visión sesgada de la guerra contra la subversión y sus consecuencias, e incluso ponderó la conocida postura equidistante de Graciela Fernández Meijide. Sin embargo, Goñi omitió decir que la guerra comenzó durante el gobierno constitucional peronista; comparó la actuación de las FF.AA. argentinas con el genocidio de judíos por Hitler, aunque fueron totalmente distintas (Hitler no tuvo motivo valedero alguno para asesinar seis millones de judíos por solo serlo; la represión argentina fue consecuencia directa de la violencia iniciada por la guerrilla, lo que Goñi también omitió). Omitir es mentir, desinformar a la audiencia.
Hubo excesos y murieron inocentes, pero de ambos bandos en pugna y no de uno solo, como pretendió Goñi. Omitió que en todas las guerras siempre hubo lamentables consecuencias (por ejemplo, Hiroshima y Nagasaki). Goñi mintió cuando dijo que hubo un solo marino muerto por la guerrilla: pasó por alto el asesinato del almirante Hermes Quijada y el asesinato por la espalda del suboficial de la ESMA que impidió que el guardiamarina César Urien saliera de la unidad a la que pertenecía con cinco camiones cargados de armas que robaba para Montoneros. Urien fue condenado por un consejo de guerra a prisión perpetua y amnistiado el 25 de mayo de 1973. Al asumir Néstor Kirchner como presidente, le devolvió el estado militar, lo ascendió, lo indemnizó y lo designó director del Astillero Naval de Río Santiago. Y Goñi omitió también el asesinato de la hija del almirante Lambruschini, entre otros. Lamento que se hayan posibilitado tantas mentiras directas por omisión.
Enrique Munilla
DNI 4.433.538
[/ezcol_1fifth] [ezcol_1fifth]Memoria y justicia
Respecto de la carta del señor Enzo Scaletta, quiero decirle que para superar las adversidades del pasado necesitaremos, como dijera en otra misiva reciente el general Juan M. Giuliano, una memoria sin ideología, una verdad completa y una justicia sin venganza.
Guillermo Dagnino
guillecer11@gmail.com
[/ezcol_1fifth] [ezcol_1fifth]Intolerancia
Comparto la indignación que provocó la actitud del colegio que quiere dejar sin trabajo a la señora Cecilia Pando.
El país de la intolerancia, el escrache y la persecución no es el que queremos la mayoría de los argentinos.
Todo mi apoyo a la profesora Pando y mis deseos que el establecimiento recapacite y no deje sin trabajo a una persona que lo único que hizo, con enorme valentía, fue poner en evidencia el relato sesgado del gobierno anterior sobre una parte de nuestra historia.
María Rodríguez
maria.marge.rod@gmail.com
[/ezcol_1fifth] [ezcol_1fifth_end]Caídos en Malvinas
“¡Morir por la patria, oh valientes; morir defendiendo su honor, es este el ideal más ardiente, de argentino que es todo valor!”
Sean estas estrofas de la “Canción del Infante Argentino”, y el juramento de seguir la bandera hasta perder la vida, mi más sincero y sentido homenaje a los caídos en Malvinas.
Jorge Alberto Funes
Soldado clase 1948
DNI 5.077.354
[/ezcol_1fifth_end]PrisioneroEnArgentina.com
Marzo 29, 2018
UNA EXPERIENCIA PERSONAL
En homenaje a todos aquellos caídos por la patria, un homenaje al que se pliega en ocasional enemigo y no la propia tierra que protegieron. María Delicia, madre del héroe de Malvinas, Pedro Giachino, un una historia singular.
Una experiencia personal
Hoy quiero compartir con mis compatriotas…UNA EXPERIENCIA PERSONAL…
[ezcol_2third]Lo que voy a narrar es un hecho vivido hace muy pocos días y que ha dejado en mi y me atrevo a decir en todas las pocas personas que participaron de él, un profundo sentimiento de amor a Dios y la Patria…
Alrededor del 20 del mes pp, recibí una llamada telefónica en la cual se me hacía saber que el SR. AGREGADO MILITAR DE LA EMBAJADA DEL REINO UNIDO ROBIN SMITH, quería conocerme y presentarme su saludo.
María Delicia Rearte de Giachino,
Madre del Capitán Pedro Giachino héroe de Malvinas
[/ezcol_2third] [ezcol_1third_end]Robin Smith, Comodoro de la Fuerza Aérea Real
[/ezcol_1third_end]Agregado Militar y de Defensa (Buenos Aires)
El Sr. Agregado y su señora, formaban parte de la comitiva que acompañaba al reconocido orfebre Juan Carlos Pallarols en su presentación en Mendoza de la campaña “DOS ROSAS POR LA PAZ”, una profunda y significativa iniciativa del artista que recorrerá todo el país, hasta ser depositadas en MALVINAS. El día 23 en la Legislatura Provincial a las 11 de la mañana se llevaría a cabo un sencillo Acto…
Ante esta sorpresiva llamada lo primero que respondí es que “no tengo ningún interés en confraternizar con los ingleses”… Se reiteró la llamada haciéndome saber lo privado, personal y afectivo que sería esa visita y analizando mis sentimientos, entendí la grandeza de la actitud del soldado inglés, Veterano de Afganistan y lo mezquino de mi proceder…
¡¡¡NOBLEZA OBLIGA…!!!” Acepté la visita en la seguridad de que el SR. CFIM (PM) D. PEDRO EDGARDO GIACHINO, aprobaba mi resolución…
Después del Acto en la Legislatura alrededor de las 12.30, los esperaría en mi casa. Vivo muy cerca de allí desde hace 50 años, sola desde hace 21 en que murió mi esposo, en un departamento muy sencillo, seguramente acogedor, pero humilde y que con la vetustez de quien lo habita se van notando también en él, los años… Pero aquel famoso dicho “ingles” la casa del hombre es su castillo… me conforta.
Llegaron puntualmente: el Sr. Agregado, su esposa, su Secretario, Pallarols y su fotógrafo, un amigo y mi hijo Alejandro. En mi living donde los recibí muy formalmente, tengo un importante retrato de mi hijo Pedro y la pared cubierta de fotos, recordatorios, diplomas, distinciones referentes a Malvinas y que he ido atesorando a través de estos 35 años….
Creo que ese momento será inolvidable para un soldado. Estar ante la mirada fría desde el fondo de la historia de otro soldado que su PATRIA había preparado para morir por ella. El Sr. Agregado se cuadró y pidió un minuto de silencios por los muertos en la Guerra de Malvinas, argentinos y británicos. Un minuto de profunda conmoción interior para todos. Sin sensiblerias, el homenaje cálido, hacia aquellos que en el Cielo gozan de la Paz Eterna, sin distinción de orígenes, grado ni misión…
Sé que el soldado que vive una guerra no vuelve más, ni vivo, ni muerto… por eso sentí ante este hombre que supo de la guerra y volvió, conmocionado ante la presencia intangible de un hombre que no volvió de la guerra, que una madre puede esconder en su corazón todo el dolor de Maria al pie de la Cruz…
Se mantuvo una conversación hecha de silencios interiores y miradas húmedas, pero llena de comprensión y verdad. Sin falsas alabanzas, ni entrega de principios y convicciones. El Sr. Agregado me regaló una preciosa medalla de plata, obra de Pallarols, con la imagen de la Virgen Desatanudos y en el reverso mis iniciales. Sin absoluto ningún sentido ajeno a lo privado y personal del encuentro.
El secretario anotaba todo en una “bitácora” y la parte jocosa y que aflojó un poco las tensión emotiva del momento fue que ante un dibujo a lápiz de mi perfil, al mostrármelo le dije espontáneamente” me ha hecho igual a la Thatcher” lo que provocó la risa general, me pidió firmara el dibujo y escribió en el margen la frase mía…
Así terminó esa entrevista insólita, por lo menos para mí. No le doy ninguna trascendencia política, ni diplomática, ni histórica, solo un valor absolutamente íntimo y espiritual, que nos demuestra a los hombres y mujeres de nuestra Patria amada, que desde el 14 de Junio de 1982, permanece enterrada en Darwin bajo una enorme lápida con 649 nombres, bajo la dulce mirada de Maria de Lujan y a la sombra protectora de la Cruz, que el día sagrado de su Resurrección brillará cuando las tres noches del odio, de la venganza, del poder, de la soberbia, de la mentira, queden sepultadas en la oscuridad del infierno…
Esta ha sido mi reciente “Experiencia Personal”, que quiero entregar a mis compatriotas en la seguridad de que “se puede” cuando la Paz es la meta, la Caridad el motor y la Justicia el destino…
MARIA DELICIA REARTE DE GIACHINO
DNI 1605228
deliciagiachino@hotmail.com
Colaboración: Andrea Palomas Alarcón
PrisioneroEnArgentina.com
Noviembre 14, 2017
Nada más que un soldado
Muchas veces es tanto el montón de estiércol que políticos progres y cagones defecan diariamente en esta, nuestra Patria, que hace que uno tenga ganas de olvidarse de todo, de orígenes, familia, amigos… y tratar de convencerse que este es un país de mierda con un pueblo de mierda. Pero de golpe, Dios te enfrenta a un héroe y entonces comprendés que aquello en lo que crees y por lo que peleas siguen siendo esas torres de plata- Dios, Patria, Lealtad, Honor- las mismas en las que creías cuando eras apenas un joven con todas las ilusiones. Solo hace falta que Dios te permita leer lo siguiente:
[ezcol_2third]“Yo no sabía ni leer ni escribir, pero cuando me tocó en suerte tener que pelear por mi Patria no me fue necesario ni leer ni escribir. El Ejército me dio mucho, me daba la oportunidad de estudiar, en la colimba uno aprendía a valorar cada insignificancia como si fuera oro, un plato de comida, un baño con agua caliente, un minuto más de sueño, y sobre todo el valor de las cosas y no el precio. La guerra para mi no fue un tragedia como muchos quisieron contarla, para mi fue una bendición, porque yo seré pobre e inculto pero Dios me eligió para que peleara por mi bandera y eso no es algo de lo que muchos puedan alardear. Pasé por muchas cosas, como todos los que fuimos a pelear, dentro de ellas el olvido y la ingratitud, pero ese olvido y esa ingratitud nos la dieron los civiles no los militares, porque a nosotros, a todos, se nos dio la posibilidad de hacer carrera dentro del Ejército, nunca nos cerraron las puertas como muchos dicen, fueron los gobiernos de todos estos años los que nos han cerrado las puertas, a los que les tuvimos que rogar para que nos dieran una pensión digna, nos llenaron de medallas que nosotros no pedimos, porque al buen soldado no le importan las medallas, pelea por convicción no por premios ni condecoraciones, y lamentablemente muchos utilizaron Malvinas para llenarse los bolsillos, esos, son los que se prestaron a ensuciar nuestra causa. Malvinas no fue una locura de Galtieri, él hizo lo que tenía que hacer, lo que era necesario hacer, y nosotros cumplimos orgullosamente con nuestro deber, y quien reniegue de eso no merece la bendición de haber estado allá”
OSCAR POLTRONIERI (VGM)
[/ezcol_2third] [ezcol_1third_end]Cruz La Nación Argentina al Heroico Valor en Combate
[/ezcol_1third_end]Colaboración: Dra. Andrea Palomas Alarcón.
PrisioneroEnArgentina.com
Julio 25, 2017
La Verdad Sin Miedo…
La justicia tiene un valor superior, está primero que la paz.
Escribe Jorge B. Lobo Aragón.
La verdad sin miedo
Los argentinos tuvimos una guerra. Desgraciada y sucia, sí, pero fue una guerra. Hay quienes dicen que no. Que eso arguyen los partidarios de la represión. Pero al comienzo fueron los subversivos los que hablaron de guerra, lo que servía de justificación a sus violencias. Porque estábamos en guerra y ocupaban un territorio – las laderas del Aconquija -, solicitaron a las Naciones Unidos que se los considerara potencia beligerante.
Y a esa guerra, por errores en la conducción política y económica, falta de objetivos – ya que el único enarbolado era la vuelta a la democracia -, derrota militar en las Malvinas, corrupción infiltrada en las fuerzas armadas y algunos otros más, la ganó la subversión. Nos guste o no, quedaron triunfantes. Ocuparon cargos en la conducción del Estado, algunas madres de sus muertos hicieron alardes de sus heroicos comportamientos, descalificaron mediante una prensa adicta a todos los que se les opusieron, a sus abogados se los ha elegido Ministros y hasta presidente. Y los represores -como suele ocurrir con los bandos derrotados- han desaparecido, se han diluido, se han borrado ante el cambio de frente de sus enemigos, que hasta han hecho suya la política de Martínez de Hoz.
Podría pensarse que venciendo los subversivos hubieran implantado el comunismo más absoluto, como se vislumbraba en la década del setenta. Pero han cambiado los tiempos: ya ni en Rusia gobierna el comunismo, desplazado por la aplastante fuerza del capital, y los que quedan en Cuba y en la China parecen domesticados, reprimidos, morigerados. Los extremistas muertos no lo hubieran aceptado, pero los vivos se encolumnaron tras el Fondo Monetario. Hubo una guerra y los subversivos triunfaron.
Pueden juzgar a los vencidos e imponerles penas. Pueden ejercer el violento derecho que da la fuerza. Está en sus manos. Muchas guerras han terminado matando como a criminales a los jefes vencidos. Pero, por la dignidad de la Nación, por decoro, correspondería que a la revancha se la ejerza con un mínimo de circunspección. Pero quienes han tenido que enfrentar una guerra y ante el que muchas rodillas se hincaron condescendientes; que en su momento recibieron el aplauso y acatamiento de toda una clase dirigente, se lo trate ahora como a un malhechor común, equiparado en su vulgar delito a pandillas de mafiosos, resulta un insulto a la nación que en su momento le rindió respetuoso homenaje y que hasta le agradeció el haberla sacado de la descomposición del peronismo isabelino.
La nación corrió el peligro de ser tomados por grupos armados capaces de organizarse y emprender acciones conjuntas de profundo alcance. A esta organización no la demostraron en los secuestros que les aportaban gruesas sumas con las que con holgura cubrían sus cuantiosos gastos, pues las técnicas empleadas eran comunes a las de las bandas simplemente delictivas. Demostraron su capacidad militar en los asaltos a los diversos cuarteles y, sobre todo, en su ocupación de las serranías tucumanas. La subversión empleo distintas tácticas. La más generalizada es la gramsciana, basada en copamiento de las conciencias mediante el adecuado empleo de técnicas aportada por la psicología freudiana. Otra era la lucha urbana, para la que se necesita el apoyo de fuertes sindicatos adoctrinados. Y otra la guerrilla rural, con la que Fidel Castro obtuvo el triunfo en Cuba y con la que Ernesto Guevara fracasó en Bolivia a pesar de su dedicación, tal vez coraje y experiencia. Pero la guerrilla rural, la subversión halló un magnifico escenario en los cerros tucumanos. Sin duda durante el gobierno de Isabelita Martínez la subversión se fortificó. La Iglesia en su momento ha condenado el Irenismo. “Irene” en griego significa paz. Por lo que se llama Irenismo al movimiento que aspira a la paz a todo trance. La paz es buena, sí, pero la paz que surge de la justicia. La paz que imponen los dominadores al margen de lo justo, es sólo un camino para usufructuar su poder. La justicia tiene un valor superior, está primero que la paz. Nuestro “Señor” empleó la violencia contra los mercaderes que hacían del templo un mercado. Con eso nos enseñó que la violencia, bien aplicada, es buena; hasta puede ser santa.
[/ezcol_1third] [ezcol_1third_end]¿En qué circunstancias se justifica? ¡Ah!, eso precisa de un prudente criterio, como los de San Martín y de Belgrano.
Sabemos también del mal que causó el terrorismo y el proceso que asoló al país, y debemos adherirnos al dolor sufrido por sus víctimas.
Pero siempre debemos que tener presente las verdades de nuestros próceres. Decía Sarmiento y debemos recordarlos “desgraciados los pueblos a los que se les agote ese instinto por mantener la salud colectiva.
Los ciudadanos de tales pueblos serán tratados como presidiarios.” No debemos bajar los brazos en este empeño que, para todo hombre, debe ser primordial que las personas y especialmente nuestros héroes y quienes lucharon por nuestra patria en una guerra declarada sean juzgados conforme las reglas de la sana crítica, del debido procedimiento, en tiempo cierto y con argumentos legales. El tan mentado Principio de inocencia. (In Dubio Pro Reo) de Jerarquía constitucional. Son las pruebas no nos jueces los que condenan. Muchos todavía están enceguecidos por el odio y la venganza que debe acabar. Sabemos que una justicia lenta no es justicia.
Dr. Jorge B. Lobo Aragón
PrisioneroEnArgentina.com
Junio 16, 2017
[/ezcol_1third_end]
El Presidente tiene quien le escriba. Carta de la esposa de un Héroe de Malvinas, hoy… un Preso Político.
Escribe Viviana C. Figari.
Festejos por el 25 de Mayo
Señor Presidente de la Nación
Ingeniero don Mauricio Macri
Con profunda angustia estoy mirando el desfile alegórico al 25 de mayo, día de la patria, donde pasan desfilando las bandas y también pasaran los veteranos de guerra de Malvinas.
Señor Presidente, sabe usted cuantos veteranos de guerra de Malvinas están presos, humillados e ignorados por usted y toda la sociedad argentina?
Señor Presidente, usted sabe que ellos arriesgaron su vida para combatir a los terroristas subversivos marxistas y contra el enemigo inglés para que usted y todos los argentinos podamos vivir en democracia?
Señor Presidente no le da vergüenza que nuestra patria “la República Argentina“ sea el único país del mundo que tiene a sus veteranos de guerra presos y demás integrantes de las Fuerzas Armadas? Estos eran jóvenes con valor y con honor que defendieron nuestra patria con orgullo, con patriotismo, que era lo que les faltaba a los jóvenes idealistas de los 70, perdón, jóvenes terroristas y asesinos que hoy poseen puestos políticos y se pasean por los canales de televisión dando cátedra de Derechos Humanos, tan asesinos y cobardes como el “Che” Guevara que es un prócer para algunos desmemoriados.
Señor Presidente, de que sirvió tanta sangre derramada?
Señor Presidente, quiero que nuestros hijos, nuestros nietos y nuestro primer bisnieto puedan disfrutar de su padre y abuelo en el ocaso de su vida.
Señor Presidente de usted depende el destino de nuestra querida patria.
Señor Presidente, también me llamó la atención no verlo en el desfile militar, usted es el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, no hace falta que se lo recuerde. Gobernar la República Argentina no es tan fácil como Boca Juniors.
Señor Presidente, quiero ver a nuestra patria de pie, libre y soberana. Quiero volver a ver las Fuerzas Armadas respetadas como se merecen.
¡¡Viva la patria!!
Lo saludo atentamente,
Viviana Clementina Figari
Señora del Coronel (R) Pedro Adolfo López
Veterano de guerra de Malvinas
Preso Político por defender la patria
Mayo 27, 2017
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PrisioneroEnArgentina.com
Mayo 27, 2017
¿Quién es Emilio Guillermo Nani?
Emilio Guillermo Nani nació el 03 de noviembre de 1945, en la Ciudad de Buenos Aires, Argentina. Es Teniente Coronel (R) del Ejército Argentino y Veterano de Guerra de Malvinas. Cursó sus estudios primarios y secundarios en los Colegios “Guadalupe”, “San José” y “Manuel Belgrano”. Está casado, tiene dos hijas y tres nietos.
Ingresó al Colegio Militar de la Nación en enero de 1964, egresando como Subteniente del Arma de Artillería 17 de Diciembre de 1966. Es “Oficial de Estado Mayor” del Ejército Argentino y Licenciado en Estrategia y Organización.
Un joven Nani participó en la guerra contraterrorista, en el marco de la guerra revolucionaria declarada contra la Nación argentina y su sociedad, por parte de las organizaciones terroristas, inspiradas en la revoluciones cubana, china y vietnamita, que ensangrentaron a la Argentina en los ’60, ’70 y ’80 y en el abortado conflicto con Chile de 1978/79, en la defensa aérea de El Chocón y de la destilería de YPF en Plaza Huincul, en la Provincia de Neuquén.
Participó voluntariamente con el Grupo de Artillería 3 y con el Regimiento de Infantería 7 en el conflicto por la recuperación de las Islas Malvinas, Sandwich del Sur y Georgias del Sur, en el que fue herido en dos oportunidades durante las acciones desarrolladas en la madrugada del 14 de junio de 1982, siendo acreedor a las condecoraciones “Medalla del Ejército Argentino al Herido en Combate” y Medalla “El Honorable Congreso de la Nación a los Combatientes”.
En diciembre del año 1988 fue nombrado Jefe del Grupo de Artillería de Defensa Aérea 101 “Teniente General PABLO RICCHIERI”, con asiento en Ciudadela – Provincia de Buenos Aires. Como tal participó, el 23 de Enero de 1989, en la recuperación de los Cuarteles del Regimiento de Infantería Mecanizada 3 “General MANUEL BELGRANO” y del Escuadrón de Exploración de Caballería Mecanizada 10 con asiento en La Tablada – Provincia de Buenos Aires (Ver Ataque terrorista al cuartel de La Tablada), tomados por asalto por terroristas del Movimiento Todos por la Patria, con la complicidad del gobierno de Raúl Ricardo Alfonsín.
Durante el desarrollo de las acciones, en su intento de rescatar a un grupo de rehenes en manos de los terroristas, fue gravemente herido en el rostro. Por su desempeño en combate recibió la Condecoración “La Nación Argentina al Herido en Combate”.
En diciembre de 1990, solicitó su pase a retiro, el que se efectivizó en Julio de 1992.
A partir de ese momento se insertó en la actividad privada y realizó distintas actividades académicas y disertaciones relacionadas con la Defensa Nacional, el análisis político, la Seguridad Pública, Privada y Vial y la Administración Hospitalaria, entre otras.
Es Cofundador de la Asociación de Veteranos de la Guerra de Malvinas (AVEGUEMA) y del Centro de Estudios Continentales sobre Seguridad y Justicia (CEC).
Es miembro Director de la Asociación de Damas y Caballeros de la Merced.
Es fundador y Presidente del Movimiento por la Recuperación de la República (MORERA).
En la actualidad es Consultor de empresas, establecimientos, clubes de campo y concesionarios viales y organismos, en materia de Seguridad Pública, Privada y Vial.
PrisioneroEnArgentina.com
Mayo 2, 2017
Malvinas, del uniforme a la toga
Conferencia sobre experiencias en el frente de batalla en el conflicto del Atlántico Sur.
Malvinas…
Escribe Jorge B. Lobo Aragón.
“…Un Desatino…
Opinión:
Que la guerra “fue un desatino” nos dice el general Martín Balza, jefe del ejército en ese entonces, refiriéndose a la recuperación de las Malvinas que ordenara en 1982 el general Galtieri. Tiene toda la razón. “fue un desatino”, como son desatinos todas las guerras que en el mundo han sido.Siendo que el tino es moderación, juicio, cordura, llegar a emplear la violencia es, por definición, un desatino. Y precisamente por eso, por ir en contra de aquellos principios por los que el hombre siente un innato apego, es que valoramos a los que hacen el supremo sacrificio personal de exponer sus propias vidas y las vidas de sus enemigos por una causa superior. El artículo 21 de la Constitución dice que: “todo ciudadano argentino está obligado a armarse en defensa de la patria…”, y se supone que armarse no significa esgrimir armas de juguete para realizar un desfile sino empuñar armas de verdad para realizar el supremo desatino, la magnífica locura, de exponer la vida por un bien superior que nos envuelve a todos. El general balza, que ha jurado cumplir la constitución, debiera tenerlo en cuenta. La constitución no es sólo para marcar cuántos años han de actuar las autoridades, sino también –por lo menos lo propone– , para “asegurar los beneficios de la libertad para nosotros, para nuestra posteridad”, libertad que se necesita defender para que sus beneficios sean seguros. Es evidente que Galtieri se equivocó. Fue imprudente. Fracasó como técnico del combate, que debe conocer las condiciones, las tropas, los pertrechos, el terreno, las reservas. La oportunidad cuando se toma la excelsa decisión de cometer el supremo desatino, debe buscarse el asesoramiento de gente idónea que enseñe cómo llegar al único objetivo válido: la victoria, ya que emprender una guerra para no ganarla se parece demasiado al suicidio. Galtieri falló como técnico. Pero no puede negársele a él, ni a ningún otro argentino, el acierto en su propósito de recuperar el territorio nacional y el de emplear la violencia cuando las pacíficas negociaciones han fracasado a lo largo de siglo y medio. ¿No alcanza un siglo y medio para darse cuenta de que ese no es el camino eficaz? Y el objeto, que la hermanita perdida vuelva a casa, ¿No es acaso el mayor logro al que puedan aspirar los que tienen a su cargo la defensa de la nación? Con sus declaraciones Balza ha puesto en claro la actitud que asumen nuestras fuerzas armadas hasta en la actualidad. Pueden actuar -muy prudentemente- en los Balcanes, en la cochinchina o en cualquier parte del mundo en que nuestros acreedores precisen su presencia. Ahora ¿Haciendo la guerra en defensa de la patria, como lo establece la constitución? No, eso no. Sería un desatino. Él lo dice.
Dr. Jorge B. Lobo Aragón
PrisioneroEnArgentina.com
Abril 2, 2017
2 DE ABRIL Y LA CARNE DE PRESIDIO
Escribe Claudio Kussman.
LAS MALVINAS SON ARGENTINAS
En horas en diferentes unidades militares de este territorio llamado Argentina, se conmemorará una vez más la Gesta de Malvinas. Seguramente asistirán diversas autoridades del mundo político y social y todas las ceremonias serán realmente emotivas rememorando a quienes lucharon, murieron o fueron heridos en esas islas tan caras a nuestros sentimientos. Mucho se está escribiendo y diciendo en los medios al respecto, destacándose todo lo que se debe a esos valientes. De lo que todos se cuidan de mencionar es la porción de esos combatientes que hoy en cautiverio son “carne de presidio”, ilegalmente imputados de los mal llamados delitos de lesa humanidad. Hasta es posible que a esos actos estén invitados y asistan algunos de los jueces prevaricadores a cuya disposición nos encontramos. Pero bueno, de eso es preferible no hablar.
DESAGRADECIMIENTO
Reflotamos http://www.ar.dev3.greymatter.one/islas-malvinas una nota de abril de 2015, cuando todavía novato en la prisión, comprobé que el 10 por ciento de los prisioneros habían luchado en y por las “hermanas perdidas”. Mi recuerdo a: MARCELO LUCAS CASTRO, GUILLERMO DOMINGUEZ MATHEU, CARLOS HIDALGO GARZÓN, PEDRO LOPEZ, ERNESTO KISHIMOTO, CARLOS PLA, PABLO VERA, TOMAS MACEDRA, PEDRO PALAVEZZATI Y RODOLFO EDUARDO NICOLAS. En general poco sé de sus destinos, salvo de 2 de ellos. Con CARLOS PLÁ y con la familia de HIDALGO GARZÓN, mantengo periódicas comunicaciones telefónicas. El primero con prisión domiciliaria y el segundo alojado en el mentiroso Hospital Penitenciario Central de Ezeiza en graves condiciones físicas y mentales. De él conservo la Biblia que lo acompañara en Malvinas y que me regalara durante mi huelga de hambre. Sé también que el abogado defensor GONZALO MIÑO en una carrera contra reloj está bregando por su atención médica o su prisión domiciliaria. Este héroe condecorado y herido en la lucha por las islas, está clasificado como “paciente de alto riesgo expuesto a muerte súbita”.
TRIBUTO A LOS COMBATIENTES CAUTIVOS Y SUS ESPOSAS
En la persona de GARZÓN y MARINA, desde PrisioneroEnArgentina.com rendimos tributo a todos los que lucharon, creyendo en la patria, y a sus esposas quienes guardaron vigilia mientras ellos combatían. A los primeros se les pagó con cruel cautiverio, mientras ellas hoy continúan en la zozobra y la espera. Antes a manos “del vamos por todo” y ahora por los hipócritas de todo tipo que dirigen la Argentina. Esos que respetan y reconocen como juventud maravillosa, a quienes fueron los asesinos seriales que arrastraron a la muerte y el dolor al país pocos años antes de la Guerra de Malvinas.
Claudio Kussman
claudio@PrisioneroEnArgentina.com
www.PrisioneroEnArgentina.com
Abril 1, 2017
Los Héroes de Guerra
Escribe Jorge B. Lobo Aragón.
Al concepto general de que los ciudadanos son iguales, bien vale la pena modificarlo separando dos clases: el ciudadano común y los héroes de guerra, los que han jugado su vida por la patria y se merecen todos los honores, todos los privilegios, todas las atenciones, todas las desigualdades a su favor. Que la comunidad ofrende su respeto a los que han perdido la vida por defenderla y a los que no ha sido voluntad de Dios llevarlos, pero igualmente la expusieron ante el enemigo, es una obligación nacida de la más elemental decencia.
Opinión
Estamos a horas de conmemorar el día del Veterano y de los caídos en la guerra de Malvinas. El 2 de abril de 1982, la dictadura cívico-militar inició el desembarco de tropas en las islas Malvinas, usurpadas por Inglaterra desde 1833. Leyendo un excelente libro “La pasión Según Malvinas” – del entonces corresponsal de guerra Nicolás Kasanzew, me vino a la memoria cuando paraguayos y bolivianos se trenzaron en una guerra, dejando atrás un período de cinco años de ataques crónicos en la frontera. Debieron luchar por intereses extranjeros que se disputaban la explotación del petróleo en ricos yacimientos del Chaco. Una guerra evidentemente injusta. Pero una guerra, una vez declarada es, se lo quiera o no, una guerra de la nación. Es la nación la que -quizás- se beneficie con el triunfo, y es la nación la que -con toda seguridad- ha de perjudicarse con la derrota. Lucharon bolivianos y paraguayos con bravura, con abnegación, haciendo gala de amor a sus patrias. Y cuando reinó la paz cada nación rindió homenaje a sus héroes, a sus queridos muertos, a los venerables veteranos. Al concepto general de que los ciudadanos son iguales, bien vale la pena modificarlo separando dos clases: el ciudadano común y los héroes de guerra, los que han jugado su vida por la patria y se merecen todos los honores, todos los privilegios, todas las atenciones, todas las desigualdades a su favor. En el Paraguay los héroes sobrevivientes aún hoy son tratados con reverencia. Que la comunidad ofrende su respeto a los que han perdido la vida por defenderla y a los que no ha sido voluntad de Dios llevarlos, pero igualmente la expusieron ante el enemigo, es una obligación nacida de la más elemental decencia. Seríamos unos canallas despreciables regateando ese homenaje. Pero, además, honrar a los que nos defendieron es la mínima política de conservación, de defensa. Ver que a los que han expuesto su vida por la patria se los aplaude los 2 de abril y que los demás días tienen que andar buscando un trabajito. Cuando debiera ser la sociedad la que espontáneamente se ofrezca a que se les conceda algún beneficio de los que los burócratas usufructúan como merecidas conquistas sociales. ¿No es acaso una vergüenza que está proclamando que somos una sociedad que no se merece el esfuerzo de sus hijos? La Argentina -gracias a Dios- tiene héroes que le han ofrendado la vida. Unos la perdieron. El primero el teniente Pedro Giachino, muerto sin siquiera defenderse, en cumplimiento del plan impuesto de no hacer daño al enemigo. Post mortem fue ascendido a capitán de fragata y -el 4 de abril de 1982- sepultado en el cementerio de Punta Alta. Se cumplía con la obligación de honrar a los héroes, y también se rindió honores a los restos mortales del soldado Mario Almonacid. Muchos héroes de tierra mar y aire murieron, y son igualmente respetables los que pusieron su pecho al peligro y no murieron. Quizás un emblema de todos ellos, de los vivos y de los muertos, sea el abnegado teniente Giachino. Podría su nombre ser bandera de lo que significó ponerlo al Estado al servicio de un interés permanente de la nación. Que se haya llegado a la derrota significa que a la nación hay que defenderla mejor, no que no deba defendérsela. Aquel gobierno militar inmediatamente después -lo mismo que los gobiernos civiles que lo sucedieron- se impuso la tarea de “desmalvinizar”, y para desmalvinizar se considera a los respetables veteranos como a simples “chicos” a los que es preciso tirarles alguna propina. Y no es así. Ellos, como Guachineo, se merecen el homenaje permanente de la patria! Feliz Día Veteranos.
PrisioneroEnArgentina.com
Abril 1, 2017
Discurso de una maestra salteña en el acto en que se conmemoró el 2 DE ABRIL de 1982
Como bien saben los presentes, El dos de abril de 1982 es una fecha cara al sentimiento de los argentinos. Ese día, producto de una decisión apresurada o no (no viene al caso dilucidarlo ahora) las Fuerzas Armadas de la Nación recuperaron el territorio patrio de las Islas Malvinas; ello sin derramar una gota de sangre del usurpador inglés y ofrendando la vida del capitán Pedro Edgardo Giachino. El hecho, por su osadía, desencadenó acontecimientos que tuvieron en vilo al mundo. El Reino Unido de Gran Bretaña respondió enviando a la Royal Navy, la tercera flota más poderosa del mundo, al Atlántico Sur. La guerra comenzó, de hecho, con el hundimiento del Crucero Belgrano el 2 de mayo de 1982 por parte del submarino nuclear HMS Conqueror submarino británico. 323 soldados argentinos quedaron para siempre en las gélidas y profundas aguas de nuestro mar austral. La aviación de la marina argentina devolvió el golpe echando a pique al buque destructor HMS Sheffield. La guerra era una realidad. Pronto llegaron los nombres de las bajas argentinas. Nacido en Cerrillos, el cabo 1º Patricio Guanca fue el primer salteño en caer por el fuego enemigo. Aquí le rendimos un modesto pero sentido homenaje. También y sin discriminar si soldados, suboficiales u oficiales, quisiera dejar en claro lo siguiente: la inmensa mayoría de los que pelearon estuvieron a la altura de los aguerridos granaderos José de San Martín y los bravos lanceros de Martín Güemes. Es pertinente la aclaración porque no faltan algunos que, al mismo tiempo que evocan el 2 de Abril de 1982 como gesta heroica, llaman “genocidas” a los que los que lo hicieron poniendo el cuerpo.
Vale también en este día especial desmentir el relato infame construido por propios y extraños que exhibe a los soldados como “los chicos de la guerra”; pusilánimes y aterrados argentinos que rehuían el combate. Enfatizo que de ninguna manera fue así sino todo lo contrario. Es más, el entonces enemigo inglés (fuerza militar que se vanagloria de nunca haber perdido una guerra) reconoció la bravura y el profesionalismo del soldado argentino. El almirante “Sandy” Woodward, jefe de la flota británica, admitió que estuvieron a un tris de perder la guerra de Malvinas. Por su parte, la BBC de Londres, el prestigioso servicio público de radio, televisión del Reino Unido editó un documental en el que políticos y militares ingleses ponderan la sobresaliente actuación de los argentinos. Es que le hundimos la mitad de la flota.
De los aviadores argentinos y con esto termino, vayan estas palabras de Pierre Clostermann, piloto de la aviación militar francesa y más grande as de la Segunda Guerra Mundial, quien en una carta a nuestros pilotos, así dice:
“Nunca en la historia de las guerras desde 1914, tuvieron aviadores que afrontar una conjunción tan terrorífica de obstáculos mortales, ni aun los de la RAF sobre Londres en 1940 o los de la Luftwaffe en 1945.
Vuestro valor ha deslumbrado no sólo al pueblo argentino sino que somos muchos los que en el mundo estamos orgullosos que seáis nuestros hermanos pilotos.
A los padres y a las madres, a los hermanos y a las hermanas, a las esposas y a los hijos de los pilotos argentinos que fueron a la muerte con el coraje más fantástico y más asombroso, les digo que ellos honran a la Argentina y al mundo latino.”
Señores padres, profesores y alumnos ¡VIVA LA PATRIA!
Fuente y colaboración: Mauricio Ortín
PrisioneroEnArgentina.com
Abril 2, 2017
Madres
Escribe Luis Bardín.
MADRES
Hubo otras madres iguales,
como son todas las madres,
iguales pero distintas.
Sus hijos también partieron.
No los perdieron de vista.
Sabían a donde fueron,
donde estaban y qué hacían.
Los cedieron a la patria
sin odios ni ideologías.
Los vieron partir al sur,
algunos no volverían.
Ellas sí fueron realmente
grandes madres argentinas.
¡No lucran con el dolor
ni están tan llenas de odio
las madres de Las Malvinas!
Luis Bardín
Cortiñas en Malvinas
Cartas de lectores del diario La Nación.
Cortiñas en Malvinas
¿Tanta es nuestra confusión que resulta necesario aclarar que un caído por la patria no es lo mismo que un terrorista que pretendió tomar el poder por asalto?Sentí indignación al ver que la Comisión por la Memoria ha aprovechado su visita a las islas Malvinas para promover su visión parcial de la historia argentina. Aquellos que deploran las apropiaciones no han trepidado en apropiarse de la causa que más nos une como pueblo. Así, han contaminado de ideología lo que hasta hace poco era lugar sagrado de la memoria de los héroes. La señora Nora Cortiñas ha mancillado esta memoria, al afirmar que esos héroes son “hermanos de nuestras hijas e hijos desaparecidos”.
Juan Martín Molinari
Colaboración: Andrea Palomas Alarcón
PrisioneroEnArgentina.com
Marzo 23, 2017
PANAMERICANISMO
LO QUE NO SE DEBE NI PUEDE OLVIDAR
OPINIÓN
En abril de 1982 recuperamos las Malvinas con una operación en la que las únicas ilustres víctimas fueron soldados argentinos, tal fue el afán con el que se procuró no producirles daño a los usurpadores. Después de más de ciento ochenta y cuatro años de despojo; de varios pronunciamientos de las Naciones Unidas en contra de la ocupación colonial, y en medio de circunstancias que hacían imperioso no demorar la recuperación, las fuerzas armadas se instalaron allá. De inmediato se establecieron negociaciones buscando un acuerdo satisfactorio sin apelar a la fuerza. Se habló de un gobierno tripartito, argentino e inglés con los norteamericanos como veedores. De una administración mitad argentina y mitad anglokélper. La argentina rechaza estas posibilidades con el lógico argumento de que la soberanía no se negocia, pero manteniendo el dialogo abierto a la búsqueda de la solución pacífica. El Secretario de Estado norteamericano, Haig, viene, viaja a Londres, vuelve, y la solución aceptable no aparece. El 23 de Abril el ministro ingles, Pym, dice que aunque nada pueda anunciarse se registran progresos hacía una salida encaminada a evitar la guerra. El 24 nuestro ministro, Nicanor Costa Méndez, viaja a los Estados Unidos para participar en una reunión de la Organización de los Estados Americanos. El domingo 25 de abril los ingleses atacan nuestro submarino estacionado en la superficie en las Georgia, y cañonean a la escasa guarnición. Es la guerra. Avanza la flota británica y a través de la diplomacia suiza nos hace saber que cualquier buque o avión que se le aproxime “recibirá la respuesta adecuada”. Responde la junta declarando que defenderá de la manera que lo considere más conveniente los supremos intereses de la nación. Se disipa el optimismo de mantener la paz. Y el lunes 26 de Abril de 1982 se reúnen en Nueva York los cancilleres de las veintiuna naciones americanas. Costa Méndez explica la situación y pide una respuesta “Clara e inmediata”: la flota británica tiene su lugar en otra parte del mundo y el colonialismo en ninguno. El Tratado interamericano de Asistencia reciproca establece que toda América apoyará a un país americano atacado por una potencia extra continental. La Gran Bretaña nos ataca y la Comunidad Europea ha dispuesto un aislamiento económico en contra de nosotros. “Traíamos propuestas de paz. Antes de comenzar nos han contestado con la guerra”. Los cancilleres aplauden de pie su exposición. Bastarían catorce votos contra siete para decidir la ayuda americana, pero superamos la cantidad: hay diecisiete votos por el reconocimiento de nuestra soberanía en las Malvinas y la cesación del ataque inglés, y solo cuatro abstenciones. Chile, Colombia, Los Estados Unidos y Trinidad. Nicaragua ofrece su apoyo a cualquier medida que tomemos en nuestra defensa. El Ecuador especialmente reconoce nuestro derecho a la heredad territorial. El Perú propone mediar haciendo intervenir a las naciones unidad. El Brasil se brinda para burlar el bloqueo europeo. Los panameños hacen fiestas populares apoyándonos.-Pero no todos acatan los tratados internacionales. Los Estados Unidos anuncian que en caso de llegarse a la guerra participarán en contra de nosotros. El panamericanismo queda reducido a una ilusión.
DR. JORGE B. LOBO ARAGÓN
Malvinas: ¿Con quién hay que negociar?
Por Fabian Kussman.
La secretaria paralela de Defensa de la oposición (Partido Laboral) del Reino Unido no prometió que la protección de las Islas Malvinas aparecería en su revisión de las estrategias a seguir, en marzo de este año.
Emily Thornberry fue acusada de “equivocarse” al negarse repetidamente a prometer que la actual política de autodeterminación del partido estaría respaldada en su revisión de defensa.
Con sus declaraciones, la señora Thornberry insinuó una fractura en el partido, diciendo que ella había confrontado Jeremy Corbyn sobre su opinión sobre las Malvinas en privado y pero se negó a decir si el líder de su movimiento estaba o no de acuerdo con ella.
Hace apenas unos meses, el señor Corbyn -titular del Partido Laborista desde setiembre del 2015- pidió la apertura del “diálogo” con Argentina sobre las Malvinas, en medio de informes que apoyaba la idea de un acuerdo de reparto de poder al estilo de Irlanda del Norte.
Los comentarios en ese momento provocaron un día de furia en la interna del Partido Laborista mientras los ministros del gabinete paralelo se enfrentaban a Corbyn durante una reunión semanal a puerta cerrada.
Esa semana, una comisión de la ONU respaldó a Argentina expandiendo su territorio marítimo en el Océano Atlántico Sur en un 35 por ciento para incluir las disputadas Islas Malvinas.
La señora Thornberry dejó en claro repetidamente que la actual política del Partido Laborista es que las Malvinas seguirán siendo británicas mientras los residentes lo deseen.
En septiembre de 2015, Thornberry fue nombrada Ministra paralela de Trabajo por Corbyn. Fue ascendida a la Secretaría Paralela de Defensa en enero de 2016. Al ser nombrada, Thornberry fue entrevistada por el Servicio de Radiodifusión de las Fuerzas Británicas y allí dijo: “En realidad tengo mucha más experiencia de lo que la gente cree, tengo un familiar que es miembro de las fuerzas armadas: Mi cuñado es un General. Para más datos, me nombraron teniente coronel honorario cuando trabajaba en la corte marcial como abogada y por lo tanto recogí cierta experiencia de los militares allí “. Luego, durante una discusión en los cuarteles del Partido Laborista sobre seguridad nuclear, Thornberry admitió que no sabía lo que en defensa nuclear es DEFCON o sus diferentes categorías de riesgo.
En una entrevista televisiva de septiembre de 2016, mientras se desempeñaba como Ministra paralela de Relaciones Exteriores, se le pidió a Thornberry que nombrara al canciller de Francia. Thornberry confirmó que no conocía el nombre del funcionario y acusó al entrevistador de sexismo, en una evidente manipulación para tratar de salir airosa de su ignorancia.
En agosto de este año, Theresa May utilizó su primer contacto con Argentina para suavizar la discusión sobre las Islas Malvinas y dijo que quiere forjar una nueva relación de “respeto mutuo”.
En un cambio significativo en las relaciones la Primer Ministro ha escrito al Presidente de Argentina diciendo que es su “sincera esperanza” de que las dos naciones puedan construir una relación más constructiva.
Dijo que quiere “hacer progresos” para poner fin a las restricciones a la exploración de petróleo para impulsar la economía local y permitir más vuelos hacia y desde la isla. Gran Bretaña cree que puede construir una relación más “fructífera” con Mauricio Macri, el presidente argentino que entró en funciones en diciembre del año pasado.
Esta situación contrasta con la administración de David Cameron que fue marcada por una serie de enfrentamientos amargos con Cristina Fernández de Kirchner, la ex presidente de Argentina. En su oportunidad, Cameron había acusado a la mandataria argentina de amenazar a los kelpers, con la medida de cortar el puente aéreo, los contratos de pesca y pisotear el derecho de libre determinación ya que según los miembros de la Asamblea Legislativa de las islas “No hay ninguna persona que quiera ser argentina entre los habitantes de la Malvinas”.
Roger Edwards, un representante de los habitantes del archipiélago, destacó que gracias a la Carta Orgánica de la ONU que defiende el derecho a la autodeterminación de los pueblos”, los isleños “decidimos mantener nuestros vínculos con el Reino Unido”.
De acuerdo con la asamblea, las islas son autosuficientes excepto en el área de Defensa, departamento que no necesitaban de no haber sido por las extorsiones del gobierno kirchnerista.
En una carta dirigida al presidente Macri, la señora May auguró que esperaba sinceramente que, cuando existan diferencias, puedan reconocerse en un ambiente de respeto mutuo y con la intención de actuar de una manera que beneficie a todos los interesados, lo que incluye avanzar hacia nuevas conexiones aéreas entre las Islas Malvinas y terceros países de la región y la eliminación de medidas restrictivas sobre los hidrocarburos. Argentina ha prohibido la mayoría de los vuelos a las Malvinas a través de su espacio aéreo, lo que significa que los aviones tienen que ir a través de Chile y los servicios están severamente restringidos.
Unos meses atrás, la canciller argentina Susana Malcorra y el vicecanciller británico Alan Duncan firmaron una declaración conjunta en la que -según Malcorra- se incluye el tema del reconocimiento de los soldados enterrados como NN en las islas, y otros puntos de perfil beneficioso los cuales habría que estudiar y pulir como inversiones, asuntos culturales, investigación, el área de seguridad y también esto involucra la cuestión de Malvinas. La cuestión de Malvinas -evidentemente- no es la reanudación de los vuelos del continente a las islas Malvinas y la explotación conjunta de pesca e hidrocarburos en la zona marítima del conflicto, si acordado en el documento. Lo que es un hecho es que nunca se tocó el tema de la soberanía.
Los ex combatientes argentinos en las Islas Malvinas -los valientes olvidados, los que dejaron hermanos, sudor y sangre en las islas, los que se trajeron el dolor y el trauma, los que, de a poco hemos convertido en simples siluetas- opinan que el Gobierno incurre en el delito de incumplimiento de deberes de funcionario público, al alejarse del mandato constitucional de ratificar la soberanía sobre las Malvinas. Los kelpers han abierto los brazos sonrientes a este documento de cooperación. La oposición argentina -Frente para la Victoria- acusa a Malcorra de ambición personal por obtener un cargo y que no se puede justificar el renunciamiento a la defensa de la soberanía argentina sobre las islas Malvinas por un voto en las Naciones Unidas.
Mientras tanto, existe una división entre los británicos sobre si las islas deberían ser argentinas o de la corona. Los argumentos son variados, como la opinión del escritor Martin Amis quien señaló que, pese a que la guerra fue solo importante para los militares argentinos para ocultar sus estragos económicos y para la Dama de Hierro para escalar en popularidad, las islas pertenecen a Argentina.
Las Islas Malvinas se encuentran a 184 millas de distancia de la parte continental argentina, menuda diferencia con las 7.925 millas de distancia del Reino Unido. También no están en la misma plataforma continental que el Reino Unido a pesar de tener otras islas a su alrededor. Más aún son parte de la misma zona que tiene flora y fauna de Argentina. Dado estos factores geográficos, ¿no es correcto que las Malvinas estén bajo el dominio argentino que las británicas?
En primer lugar, el mayor argumento que el Reino Unido continúa empujando en la cuestión de Malvinas es el hecho de que menos de 4000 personas viven en las islas, todas las cuales hablan inglés. Para el Reino Unido -a través de su historia- poner una bandera en un territorio y reclamarlo, significa que sus habitantes son británicos. El Reino Unido no se preocupa por quién fue primero o quién tiene derecho a la tierra.
¿O no? El argumento geográfico funcionaría si las islas Malvinas no hubieran tenido habitantes. Hay una población pequeña pero significativa de 3140 personas que desean permanecer con el Reino Unido y debe ser respetado. Ellos no hablan español y esto resultaría problemático.
En cuanto al Reino Unido colonialista, ¿cómo es lo que Argentina quiere hacer diferente? Los kelpers quieren quedarse con el Reino Unido, ¿cómo se los obliga a unirse a la Argentina contra su voluntad anticolonialista? Si se obliga a alguien a unirse a un país contra su voluntad, sofoca su derecho a la autodeterminación y forzar a las Malvinas a unirse a Argentina contra su voluntad sería exactamente lo contrario de lo que representa la ONU (autodeterminación de los pueblos).
Margaret Thatcher llevó al Reino Unido a la guerra por una sola razón. Para defender a los habitantes del Reino Unido en las Malvinas. ¿Por qué Argentina estaba decidida a dar una pelea obstinada? Porque las Malvinas son argentinas. El territorio malvinense en poder de la reina es una muestra de los antiguos trucos piratas manteniendo una colonia lejos de su país.
1982 no fue un accidente, la Argentina ha querido las islas de vuelta por un tiempo muy largo. Los británicos “contrabandean” petróleo y ese accionar tampoco es del gusto de los argentinos.
Siempre hubo colonias inglesas por el mundo. Que hubiera habitantes del Reino Unido en África durante siglos, no significaba que no era correcto para África lograr la independencia. Gibraltar es otro ejemplo perfecto. Una roca que comparte su oleaje con África no es un accidente, sino una muestra más de colonialismo.
Los kelpers deben darse cuenta de que no viven en las islas británicas, sino en una pequeña isla frente a la costa de Sudamérica. No hay nada británico en eso. Ellos podrían optar por estar bajo el dominio británico, pero el argumento de Argentina es que, si esas personas quieren vivir allí, están bajo el gobierno argentino porque la tierra es argentina.
Pero… Mientras que las acciones de los británicos en la toma inicial de las islas y del Peñón de Gibraltar en el pasado puede haber sido un acto de colonialismo, el hecho es que en la actualidad las Malvinas son un territorio autónomo que libremente eligen permanecer asociado con el Reino Unido y debe ser permitido que el pueblo, a través de su legislatura, elija democráticamente su propio futuro.
Los errores del colonialismo son precisamente lo que no debe repetirse. Los isleños actuales han estado allí por generaciones y son parte de esas islas, no las islas británicas.
Si eligen ser británicos, independientes o parte de otro país, depende de ellos. Son las únicas personas realmente afectadas por cualquier decisión hoy en día. Ignorar esto es tan malo como el imperialismo británico que es tan criticado o como la tendencia argentina de usar a las Malvinas como conquista de un partido político. Es un gran problema para los pobladores isleños. Los originales de Argentina ya estaban aquí. No eran el invasor europeo. Es decir, ¿la Argentina nos pertenece a los Hernández, a los Moretti, a los Pérez o a los tehuelches, a los tobas, a los wichis…?
En tanto, no hay explicaciones sobre la declaración conjunta entre las cancillerías de ambos países, ni sobre si se trata de un primer paso táctico. Ante ello, se vive frente a un partido laborista confuso y dividido, una ministra como Theresa May que puede estar usando elementos de delación y unos isleños totalmente decididos. ¿Es redundante decir que Argentina sigue sin ideas y sin rumbo?
PrisioneroEnArgentina.com
Noviembre 17, 2016