El expresidente estadounidense Donald J. Trump prometió poner fin a las “interminables” ayudas multimillonarias a Ucrania en caso de ganar las elecciones presidenciales de noviembre. Según él, al asignar más y más paquetes de ayuda al líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, el presidente Joe Biden está “despilfarrando dinero a niveles nunca vistos”.
“Creo que Zelenski es quizá el mejor vendedor de todos los políticos que han existido. Cada vez que viene a nuestro país, se va con 60.000 millones de dólares”, dijo Trump al intervenir ante sus partidarios en Detroit.
“Luego llega a casa y anuncia que necesita otros 60.000 millones de dólares. Nunca se acaba. Nunca se acaba. Eso lo arreglaré yo”, añadió.
La pasada semana, el presidente estadounidense Joe Biden y el líder del régimen ucraniano Volodymir Zaelensky firmaron un acuerdo bilateral de seguridad para los próximos 10 años, que incluye el suministro de armas y municiones por parte de EE.UU., entre otras cosas. Sin embargo, posteriormente se informó que Donald Trump, en caso de que gane las presidenciales este otoño, o cualquier futuro presidente de EE.UU., podría retirarse de este acuerdo.
Con antelación, Trump prometió en varias ocasiones que, en caso de ganar las elecciones presidenciales del 2024, se alcanzaría un acuerdo de paz en Ucrania en 24 horas, ya que tiene una buena relación con los líderes de ambos países.
La prensa norteamericana publicó ayer sábado el proyecto de acuerdo de paz que Rusia y Ucrania debatieron en 2022 en Estambul y no lograron firmar.
La última versión del documento data del 15 de abril de 2022. “Los documentos fueron proporcionados por fuentes ucranianas, rusas y europeas, y confirmados como auténticos por participantes en las conversaciones y otras personas cercanas a ellos”, reza el artículo del diario estadounidense.
El borrador señala que el Reino Unido, China, Rusia, EE.UU. y Francia debían actuar como garantes de “la seguridad de Ucrania como Estado neutral”, mientras que Moscú propuso para este papel también a Bielorrusia. Kiev sugirió agregar en la lista a Turquía.
De acuerdo con el documento; Kiev se comprometía a:
No participar en “conflictos armados en el lado de un Estado garante y/o de cualquier tercer Estado”.
No adherirse a uniones militares y no alcanzar acuerdos militares que contradigan su estatus neutral.
No permitir el despliegue de armas y tropas extranjeras en su territorio.
No permitir la creación de bases y otras infraestructuras militares extranjeras en su territorio.
No celebrar ejercicios militares con tropas extranjeras en su territorio sin la aprobación de Estados garantes, mientras que Moscú insistía en que todos los países garantes debían aprobar las maniobras.
No entrenar a sus tropas para usar armas nucleares y no autorizar el despliegue de armas nucleares en su territorio.
Además, el proyecto de pacto establecía “un número máximo de personal, armas y equipo militar de Ucrania”. Este número se precisa en el anexo del documento. No obstante, ambos bandos tenían posturas divergentes al respecto. Así, Rusia insistía en que las Fuerzas Armadas ucranianas deben tener 85.000 militares como máximo, mientras que Kiev quería tener hasta 250.000 soldados. Moscú y Kiev tenían también posturas diferentes en lo que se refería a tanques, lanzacohetes múltiples y morteros, entre otras armas.
En respuesta, los Estados garantes prometían, entre otros puntos:
Respetar la soberanía de Ucrania.
No interferir en los asuntos internos de Ucrania.
No emplear la fuerza contra Ucrania.
No desplegar sus armas y tropas y no crear bases militares en territorio ucraniano.
Ambos lados acordaron que las disposiciones no se debían aplicar a Crimea y el plan detalla que este punto establecía que la península quedaba bajo el control ruso pero sin que Ucrania lo reconociera.
El acuerdo incluye también las disposiciones sobre la declaración del idioma ruso como oficial en Ucrania, junto con el ucraniano, y la prohibición del nazismo y el fascismo en Ucrania, pero se precisa que Kiev “se niega a abordar” estos puntos.
El proyecto confirma las declaraciones de la parte rusa, que en repetidas ocasiones ha revelado puntos del pacto ya acordados con Ucrania. Cabe recordar que en junio del año pasado el presidente ruso, Vladímir Putin, incluso mostró el borrador del acuerdo y es precisamente el documento publicado por The New York Times.
“Se llama así: Tratado de Neutralidad Permanente y Garantías de Seguridad para Ucrania. Precisamente sobre garantías. 18 artículos”, afirmó en aquel entonces el líder ruso.
“Además, también tiene un anexo. (Las cláusulas) también se refieren a las Fuerzas Armadas, a otras cosas. Todo está detallado, hasta las unidades de equipo de combate y el personal de las Fuerzas Armadas. Este es el documento”, comentó Putin, añadiendo que había sido rubricado por la delegación ucraniana.
“Pero después de que hubiéramos retirado nuestras tropas de [la región de] Kiev como prometimos, las autoridades de Kiev y sus amos lo tiraron a la papelera de la historia”, subrayó.
Este viernes, el mandatario ruso anunció las condiciones que “permitirán realmente poner fin a la guerra en Ucrania”, subrayando que tan pronto como Kiev las acepte, Moscú estará dispuesta a negociar inmediatamente, sin demora. Las exigencias en cuestión también se hacen eco del proyecto de acuerdo difundido.
Entre las condiciones propuestas figuran: “la neutralidad, la no alineación, la desnuclearización de Ucrania, así como su desmilitarización y desnazificación”; el reconocimiento de las nuevas realidades territoriales, es decir, Crimea, Sebastopol, las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, las provincias de Zaporozhie y Jersón deben ser reconocidos como sujetos de Rusia; así como la cancelación de todas las sanciones occidentales. En febrero, Putin, declaró que las negociaciones que Moscú y Kiev entablaron poco después del inicio del operativo militar ruso en febrero de 2022 “llegaron a un nivel muy alto” en cuanto al acuerdo sobre las posiciones de ambas partes y “estaban casi terminadas”. “Pero, después de que retiráramos las tropas de Kiev, […] Ucrania desechó todos estos acuerdos y tuvo en cuenta las instrucciones de los países occidentales —países europeos y Estados Unidos— de luchar contra Rusia hasta el final”, destacó Putin.
David Arajamia, uno de los negociadores ucranianos que participó en las conversaciones de paz con Rusia, reveló en noviembre del año pasado que el rechazo por Kiev de un estatus de neutralidad para Ucrania que le impidiera unirse a la OTAN, así como la presión del entonces primer ministro británico, Boris Johnson, fueron los factores que obligaron a la parte ucraniana a retirarse del proceso de paz. “Además, cuando volvimos de Estambul, Boris Johnson vino a Kiev y dijo que no firmaríamos nada con ellos en absoluto. Y que ‘vamos a la guerra'”, recordó. Por su parte, otro miembro de la entonces delegación ucraniana, el diplomático Alexánder Chaly, declaró que Moscú y Kiev estaban “muy cerca” de llegar a un acuerdo en abril de 2022. “Estábamos muy cerca a mediados de abril, a finales de abril, para finalizar nuestra guerra con algún acuerdo pacífico. Por algunas razones [el acuerdo] se pospuso”, dijo a finales de diciembre del año pasado. De acuerdo con sus palabras, Putin “trató de hacer todo lo posible para concluir un acuerdo con Ucrania”.
La inclinación del expresidente Donald Trump por tergiversar narrativas volvió a ocupar un lugar central en un reciente mitin de campaña en Ohio.
Según un informe del domingo 17 de marzo de 2024, Trump, en un intento por cautivar a su audiencia, afirmó haber burlado a los demócratas con una supuesta publicación de una cinta de su controvertida llamada telefónica de 2019.
Sin embargo, el medio de comunicación señaló que la historia que Trump compartió en el mitin fue inventada, y un oficial retirado del ejército que estuvo presente durante la llamada en ese momento reveló la verdad sobre la historia de Trump.
Durante su discurso, Trump alegó que reveló estratégicamente “la cinta grabada” de su controvertida llamada telefónica de 2019 con el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky.
Afirmó que dejó que los demócratas hicieran afirmaciones “cada vez más descabelladas” sobre lo que le dijo a Zelensky, “y luego publicamos la cinta”.
Según Trump, esta medida dejó nerviosos a los líderes demócratas y expuso sus supuestas mentiras sobre la llamada.
Pintó una imagen de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, reaccionando con incredulidad al escuchar la cinta, supuestamente exclamando: “¿En qué diablos me metiste? ¿Escuchaste esta llamada? ¡Él no hizo nada de esto!”.
Trump, durante el mitin, afirmó que a Pelosi le dijeron: “Simplemente pretendamos que así fue y sigamos adelante”.
Continuó: “Después de que inventaron la historia y luego escucharon la cinta, murieron. No sabían que la llamada telefónica estaba grabada. Ese fue un buen caso de una llamada telefónica grabada. Y fueron grabadas y los atraparon.”
Sin embargo, una rigurosa verificación de hechos realizada por la prensa desmanteló rápidamente el fantástico relato de Trump. El quid de la historia de Trump dependía de la existencia de una grabación, pero el medio de comunicación señaló que tal cinta nunca ha aparecido.
Pelosi, por tanto, no podría haber reaccionado ante una grabación que simplemente no existe. La realidad es que, hasta la fecha, no existe ninguna grabación verificable de la conversación de julio de 2019 entre Trump y Zelensky, como señala el medio.
La documentación publicada por la Casa Blanca de Trump en septiembre de 2019 era una transcripción escrita aproximada de la llamada.
Las conversaciones presidenciales con líderes extranjeros suelen recordarse mediante transcripciones escritas en lugar de grabaciones. Estas llamadas telefónicas no suelen ser grabadas por la parte estadounidense. Esta práctica estándar llamó la atención sobre la ausencia de evidencia tangible que respalde las afirmaciones de Trump.
En particular, el portavoz de Pelosi, Aaron Bennett, reaccionó el domingo a la historia de Trump, calificándola de “tontería sin hechos”.
Alexander Vindman, un teniente coronel retirado del ejército y una figura clave en la investigación de juicio político derivada de la llamada de Zelensky, descartó enfáticamente la narrativa de Trump como falsa.
Vindman fue uno de los funcionarios que escuchó la llamada de Trump a Zelensky en su papel en ese momento como principal experto en Ucrania para el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
En una reprimenda directa, Vindman dijo en un mensaje de texto el domingo que “no hay grabación” de la llamada.
Vindman añadió sin rodeos: “Está mintiendo”.
El medio de comunicación señaló que el intento de Trump de reescribir la narrativa que rodea su intercambio con Zelensky no es un esfuerzo novedoso.
Desde que surgió la controversia por primera vez a fines de 2019, Trump ha buscado persistentemente remodelar la percepción pública de la llamada.
En esencia, la conversación entre Trump y Zelensky giró en torno a un escenario de quid pro quo, en el que Trump instó a Zelensky a investigar a su rival político Joe Biden y a las acusaciones infundadas de interferencia ucraniana en las elecciones de 2016.
La historia falsa que Trump contó durante el mitin se hizo eco de historias falsas anteriores que contó hace más de cuatro años, que eran versiones menos dramáticas.
El líder ucraniano dijo que el presidente estadounidense Joe Biden intenta que los republicanos de la Cámara de Representantes autoricen el desembolso de 61.000 millones de dólares adicionales a Ucrania.
Zelenski dijo que él “no puede entender cómo Donald Trump puede estar del lado de Putin”, y lo calificó de “increíble”.
Zelenski dijo que no cree que Trump, favorito para la nominación presidencial republicana de cara a las presidenciales de noviembre, entienda a Putin pese a haberse reunido con él durante su mandato. “Creo que Donald Trump no conoce a Putin“, afirmó Zelenski. “No creo que entienda que Putin nunca se detendrá”.
Trump ha calificado de despilfarro la ayuda y ha tratado de vincular el debate sobre Ucrania con un refuerzo de las políticas migratorias para frenar la entrada de migrantes por la frontera con México.
J.D. Vance, un senador republicano que simpatiza con Trump, dijo este mes en la Conferencia de Seguridad de Múnich que la ayuda estadounidense “no va a cambiar fundamentalmente la realidad en el campo de batalla“. Zelenski invitó a Vance a visitar la línea del frente: “Comprenderá que millones de personas serán asesinadas” sin una nueva ayuda estadounidense.
Recientemente Rusia se apoderó de la ciudad de Avdiivka, en la región oriental de Donetsk, y las tropas ucranianas afirmaron que se vieron obligadas a racionar la munición debido a la escasez.
Los funcionarios israelíes están criticando a Rusia y exigiendo una disculpa por los comentarios que hizo su ministro de Relaciones Exteriores sobre el nazismo durante el fin de semana. Es la condena más fuerte de Rusia por parte de Israel desde que comenzó la guerra en Ucrania en febrero. Todo comenzó el domingo, días después del Día del Recuerdo del Holocausto, cuando el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, hizo comentarios antisemitas en una entrevista con el programa de televisión italiano Zona Bianca.
Se le preguntó a Lavrov sobre la afirmación de Rusia de que había invadido Ucrania para “desnazificar” el país, que tiene un presidente judío elegido democráticamente.
“Entonces, cuando dicen ‘¿Cómo puede existir la nazificación si somos judíos?’ En mi opinión, Hitler también tenía orígenes judíos, por lo que no significa absolutamente nada”, dijo a la estación en ruso, refiriéndose a la religión del presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy. “Durante algún tiempo hemos escuchado del pueblo judío que los mayores antisemitas eran judíos”.
La reacción fue rápida, con funcionarios tanto en Israel como en Ucrania criticando los comentarios de Lavrov como profundamente ofensivos e históricamente inexactos. (Algunas personas han especulado que el abuelo paterno no identificado de Hitler era judío, un rumor no probado que la BBC explica que fue alimentado por una afirmación en una memoria de 1953 del abogado de Hitler, Hans Frank).
El ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Yair Lapid, hijo de un sobreviviente del Holocausto y nieto de una víctima del Holocausto, calificó los comentarios de Lavrov de “imperdonables” e “indignantes”.
“Los judíos no se suicidaron en el Holocausto”, escribió en un tuit. “El nivel más bajo de racismo contra los judíos es acusar a los propios judíos de antisemitismo”.
El primer ministro israelí, Naftali Bennett, emitió un comunicado el lunes pidiendo el fin inmediato del uso del Holocausto “como un ariete político”, según el Jerusalem Post.
“Mentiras como estas pretenden culpar a los propios judíos por los crímenes más terribles de la historia, que se cometieron contra ellos, y así liberar a los opresores de los judíos de su responsabilidad”, agregó.
Dani Dayan, presidente del memorial del Holocausto de Israel, Yad Vashem, escribió en Twitter que Lavrov estaba “propagando la inversión del Holocausto” al promover una afirmación infundada que convierte a sus víctimas en criminales.
Llamar a Zelenskyy, y al público ucraniano en general, nazis es “una completa distorsión de la historia y una grave afrenta a las víctimas del nazismo”, agregó.
Rusia ha invocado con frecuencia el nazismo y la Segunda Guerra Mundial para justificar su agresión en Ucrania, lo que provocó críticas y acusaciones de hipocresía, especialmente porque sus fuerzas atacaron sitios conmemorativos del Holocausto y mataron a varios sobrevivientes del Holocausto en bombardeos residenciales.
La condena rápida y contundente de Israel a los comentarios de Lavrov es particularmente notable porque el país ha sido criticado por no hacer lo suficiente para mostrar su apoyo a Ucrania.
Bennett ha evitado en gran medida criticar a Rusia por su invasión a gran escala. Y aunque otros funcionarios han expresado su apoyo a Ucrania, Israel no ha enviado equipo militar ni se ha sumado por completo a las sanciones occidentales contra Rusia.
Zelenskyy expresó su impaciencia en un discurso de marzo ante los legisladores israelíes en el que comparó la invasión de Rusia con el Holocausto e instó a Israel a tomar medidas más enérgicas, incluido el envío de armas a Ucrania y la aceptación de refugiados no judíos que huyen de la guerra.
Los comentarios de Lavrov también han provocado la ira fuera de Israel.
La Liga Antidifamación condenó su “mal uso de los nazis, Hitler y el Holocausto”, calificándolo como parte de sus “esfuerzos aparentemente desesperados” para justificar la guerra de Rusia en Ucrania.
Un portavoz del gobierno alemán dijo que la idea de que Hitler tenía herencia judía era propaganda “absurda”, según Reuters, mientras que el comisionado de antisemitismo del país dijo que los comentarios “enfrentan descaradamente no solo a los judíos sino a todo el público internacional con un antisemitismo abierto”.
El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, tuiteó que además de ofender a Zelenskyy, Ucrania, Israel y el pueblo judío, las declaraciones de Lavrov “demuestran que la Rusia de hoy está llena de odio hacia otras naciones”.
Un comediante que interpreta al presidente de Ucrania en la televisión encabeza las urnas en la carrera presidencial del país.
Volodymyr Zelensky, de 41 años, protagoniza el popular programa de televisión “Servant of the People”, en el que interpreta a un profesor de historia que es elegido presidente después de que su ataque contra la corrupción se vuelve viral.
Y ahora, faltan cinco semanas para la elección presidencial del 31 de marzo en Ucrania, Zelensky es el favorito, a pesar de no tener ninguna experiencia política real.
Se describe a sí mismo como “muy liberal”, y lanzó su campaña el 1 de enero, para coincidir con el discurso del año nuevo del presidente.
Una encuesta reciente sugiere que Zelensky tiene más apoyo que otros candidatos, incluido el presidente titular, Petro Poroshenko y la ex primera ministra Yulia Tymoshenko.
La encuesta nacional que muestra a Zelensky prestando la carrera presidencial encuestó a 2.000 personas y fue realizada a principios de febrero por el Centro Razumkov de Ucrania.
Mostró que el 17.5% votaría por Zelensky, el 13.1% por Poroshenko y el 11.5% por Tymoshenko.
Leer más: La Marina de los Estados Unidos ha enviado otro barco al Mar Negro, donde Ucrania se está preparando para otro ataque ruso.
Además de ser actor y comediante, Zelensky es abogado y empresario.
Su acercamiento a la campaña es único. No tiene mítines, y en cambio vende boletos para conciertos de comedia en los que parodia a su competencia. También usa Facebook y YouTube para compartir videos.
Si es elegido presidente, Zelensky tendrá que enfrentar tensiones continuas con Rusia, que se anexó a Crimea en 2014, así como una economía en crisis y una corrupción generalizada.
Zelensky dijo que quiere enfrentar la corrupción y hablar directamente con Putin sobre la guerra en el este de Ucrania.
Cuando le preguntaron en diciembre si podía imaginar negociar con el presidente Donald Trump en el futuro, Zelensky no se inmutó.
“Ambos somos de la misma industria, después de todo”, bromeó.
Luego de anunciar su candidatura presidencial, Zelensky se enfrentó a las críticas de los partidarios de Poroshenko, quienes lo llamaron “payaso” y lo acusaron de devaluar la presidencia, informó Bloomberg.
Otros lo acusaron de ser un títere para el oligarca Ihor Kolomoisky, cuyos abogados han negado las reclamaciones.
“Le damos 60.000 millones de dólares, vuelve a casa y pide otros 60.000 millones”
◘
El expresidente estadounidense Donald J. Trump prometió poner fin a las “interminables” ayudas multimillonarias a Ucrania en caso de ganar las elecciones presidenciales de noviembre. Según él, al asignar más y más paquetes de ayuda al líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, el presidente Joe Biden está “despilfarrando dinero a niveles nunca vistos”.
“Creo que Zelenski es quizá el mejor vendedor de todos los políticos que han existido. Cada vez que viene a nuestro país, se va con 60.000 millones de dólares”, dijo Trump al intervenir ante sus partidarios en Detroit.
“Luego llega a casa y anuncia que necesita otros 60.000 millones de dólares. Nunca se acaba. Nunca se acaba. Eso lo arreglaré yo”, añadió.
La pasada semana, el presidente estadounidense Joe Biden y el líder del régimen ucraniano Volodymir Zaelensky firmaron un acuerdo bilateral de seguridad para los próximos 10 años, que incluye el suministro de armas y municiones por parte de EE.UU., entre otras cosas. Sin embargo, posteriormente se informó que Donald Trump, en caso de que gane las presidenciales este otoño, o cualquier futuro presidente de EE.UU., podría retirarse de este acuerdo.
Con antelación, Trump prometió en varias ocasiones que, en caso de ganar las elecciones presidenciales del 2024, se alcanzaría un acuerdo de paz en Ucrania en 24 horas, ya que tiene una buena relación con los líderes de ambos países.
PrisioneroEnArgentina.com
Junio 19, 2024
El proyecto de acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania debatido
◘
La prensa norteamericana publicó ayer sábado el proyecto de acuerdo de paz que Rusia y Ucrania debatieron en 2022 en Estambul y no lograron firmar.
La última versión del documento data del 15 de abril de 2022. “Los documentos fueron proporcionados por fuentes ucranianas, rusas y europeas, y confirmados como auténticos por participantes en las conversaciones y otras personas cercanas a ellos”, reza el artículo del diario estadounidense.
El borrador señala que el Reino Unido, China, Rusia, EE.UU. y Francia debían actuar como garantes de “la seguridad de Ucrania como Estado neutral”, mientras que Moscú propuso para este papel también a Bielorrusia. Kiev sugirió agregar en la lista a Turquía.
De acuerdo con el documento; Kiev se comprometía a:
Además, el proyecto de pacto establecía “un número máximo de personal, armas y equipo militar de Ucrania”. Este número se precisa en el anexo del documento. No obstante, ambos bandos tenían posturas divergentes al respecto. Así, Rusia insistía en que las Fuerzas Armadas ucranianas deben tener 85.000 militares como máximo, mientras que Kiev quería tener hasta 250.000 soldados. Moscú y Kiev tenían también posturas diferentes en lo que se refería a tanques, lanzacohetes múltiples y morteros, entre otras armas.
En respuesta, los Estados garantes prometían, entre otros puntos:
Ambos lados acordaron que las disposiciones no se debían aplicar a Crimea y el plan detalla que este punto establecía que la península quedaba bajo el control ruso pero sin que Ucrania lo reconociera.
El acuerdo incluye también las disposiciones sobre la declaración del idioma ruso como oficial en Ucrania, junto con el ucraniano, y la prohibición del nazismo y el fascismo en Ucrania, pero se precisa que Kiev “se niega a abordar” estos puntos.
El proyecto confirma las declaraciones de la parte rusa, que en repetidas ocasiones ha revelado puntos del pacto ya acordados con Ucrania. Cabe recordar que en junio del año pasado el presidente ruso, Vladímir Putin, incluso mostró el borrador del acuerdo y es precisamente el documento publicado por The New York Times.
“Se llama así: Tratado de Neutralidad Permanente y Garantías de Seguridad para Ucrania. Precisamente sobre garantías. 18 artículos”, afirmó en aquel entonces el líder ruso.
“Además, también tiene un anexo. (Las cláusulas) también se refieren a las Fuerzas Armadas, a otras cosas. Todo está detallado, hasta las unidades de equipo de combate y el personal de las Fuerzas Armadas. Este es el documento”, comentó Putin, añadiendo que había sido rubricado por la delegación ucraniana.
“Pero después de que hubiéramos retirado nuestras tropas de [la región de] Kiev como prometimos, las autoridades de Kiev y sus amos lo tiraron a la papelera de la historia”, subrayó.
Este viernes, el mandatario ruso anunció las condiciones que “permitirán realmente poner fin a la guerra en Ucrania”, subrayando que tan pronto como Kiev las acepte, Moscú estará dispuesta a negociar inmediatamente, sin demora. Las exigencias en cuestión también se hacen eco del proyecto de acuerdo difundido.
Entre las condiciones propuestas figuran: “la neutralidad, la no alineación, la desnuclearización de Ucrania, así como su desmilitarización y desnazificación”; el reconocimiento de las nuevas realidades territoriales, es decir, Crimea, Sebastopol, las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, las provincias de Zaporozhie y Jersón deben ser reconocidos como sujetos de Rusia; así como la cancelación de todas las sanciones occidentales. En febrero, Putin, declaró que las negociaciones que Moscú y Kiev entablaron poco después del inicio del operativo militar ruso en febrero de 2022 “llegaron a un nivel muy alto” en cuanto al acuerdo sobre las posiciones de ambas partes y “estaban casi terminadas”. “Pero, después de que retiráramos las tropas de Kiev, […] Ucrania desechó todos estos acuerdos y tuvo en cuenta las instrucciones de los países occidentales —países europeos y Estados Unidos— de luchar contra Rusia hasta el final”, destacó Putin.
David Arajamia, uno de los negociadores ucranianos que participó en las conversaciones de paz con Rusia, reveló en noviembre del año pasado que el rechazo por Kiev de un estatus de neutralidad para Ucrania que le impidiera unirse a la OTAN, así como la presión del entonces primer ministro británico, Boris Johnson, fueron los factores que obligaron a la parte ucraniana a retirarse del proceso de paz. “Además, cuando volvimos de Estambul, Boris Johnson vino a Kiev y dijo que no firmaríamos nada con ellos en absoluto. Y que ‘vamos a la guerra'”, recordó. Por su parte, otro miembro de la entonces delegación ucraniana, el diplomático Alexánder Chaly, declaró que Moscú y Kiev estaban “muy cerca” de llegar a un acuerdo en abril de 2022. “Estábamos muy cerca a mediados de abril, a finales de abril, para finalizar nuestra guerra con algún acuerdo pacífico. Por algunas razones [el acuerdo] se pospuso”, dijo a finales de diciembre del año pasado. De acuerdo con sus palabras, Putin “trató de hacer todo lo posible para concluir un acuerdo con Ucrania”.
PrisioneroEnArgentina.com
Junio 16, 2024
La grabación de Trump
♦
Por Karen Boyd.
La inclinación del expresidente Donald Trump por tergiversar narrativas volvió a ocupar un lugar central en un reciente mitin de campaña en Ohio.
Según un informe del domingo 17 de marzo de 2024, Trump, en un intento por cautivar a su audiencia, afirmó haber burlado a los demócratas con una supuesta publicación de una cinta de su controvertida llamada telefónica de 2019.
Sin embargo, el medio de comunicación señaló que la historia que Trump compartió en el mitin fue inventada, y un oficial retirado del ejército que estuvo presente durante la llamada en ese momento reveló la verdad sobre la historia de Trump.
Durante su discurso, Trump alegó que reveló estratégicamente “la cinta grabada” de su controvertida llamada telefónica de 2019 con el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky.
Afirmó que dejó que los demócratas hicieran afirmaciones “cada vez más descabelladas” sobre lo que le dijo a Zelensky, “y luego publicamos la cinta”.
Según Trump, esta medida dejó nerviosos a los líderes demócratas y expuso sus supuestas mentiras sobre la llamada.
Pintó una imagen de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, reaccionando con incredulidad al escuchar la cinta, supuestamente exclamando: “¿En qué diablos me metiste? ¿Escuchaste esta llamada? ¡Él no hizo nada de esto!”.
Trump, durante el mitin, afirmó que a Pelosi le dijeron: “Simplemente pretendamos que así fue y sigamos adelante”.
Continuó: “Después de que inventaron la historia y luego escucharon la cinta, murieron. No sabían que la llamada telefónica estaba grabada. Ese fue un buen caso de una llamada telefónica grabada. Y fueron grabadas y los atraparon.”
Sin embargo, una rigurosa verificación de hechos realizada por la prensa desmanteló rápidamente el fantástico relato de Trump. El quid de la historia de Trump dependía de la existencia de una grabación, pero el medio de comunicación señaló que tal cinta nunca ha aparecido.
Pelosi, por tanto, no podría haber reaccionado ante una grabación que simplemente no existe. La realidad es que, hasta la fecha, no existe ninguna grabación verificable de la conversación de julio de 2019 entre Trump y Zelensky, como señala el medio.
La documentación publicada por la Casa Blanca de Trump en septiembre de 2019 era una transcripción escrita aproximada de la llamada.
Las conversaciones presidenciales con líderes extranjeros suelen recordarse mediante transcripciones escritas en lugar de grabaciones. Estas llamadas telefónicas no suelen ser grabadas por la parte estadounidense. Esta práctica estándar llamó la atención sobre la ausencia de evidencia tangible que respalde las afirmaciones de Trump.
En particular, el portavoz de Pelosi, Aaron Bennett, reaccionó el domingo a la historia de Trump, calificándola de “tontería sin hechos”.
Alexander Vindman, un teniente coronel retirado del ejército y una figura clave en la investigación de juicio político derivada de la llamada de Zelensky, descartó enfáticamente la narrativa de Trump como falsa.
Vindman fue uno de los funcionarios que escuchó la llamada de Trump a Zelensky en su papel en ese momento como principal experto en Ucrania para el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
En una reprimenda directa, Vindman dijo en un mensaje de texto el domingo que “no hay grabación” de la llamada.
Vindman añadió sin rodeos: “Está mintiendo”.
El medio de comunicación señaló que el intento de Trump de reescribir la narrativa que rodea su intercambio con Zelensky no es un esfuerzo novedoso.
Desde que surgió la controversia por primera vez a fines de 2019, Trump ha buscado persistentemente remodelar la percepción pública de la llamada.
En esencia, la conversación entre Trump y Zelensky giró en torno a un escenario de quid pro quo, en el que Trump instó a Zelensky a investigar a su rival político Joe Biden y a las acusaciones infundadas de interferencia ucraniana en las elecciones de 2016.
La historia falsa que Trump contó durante el mitin se hizo eco de historias falsas anteriores que contó hace más de cuatro años, que eran versiones menos dramáticas.
PrisioneroEnArgentina.com
Marzo 20, 2024
Zelenski acusa a Trump de ser aliiado de Putin
♦
El líder ucraniano dijo que el presidente estadounidense Joe Biden intenta que los republicanos de la Cámara de Representantes autoricen el desembolso de 61.000 millones de dólares adicionales a Ucrania.
Zelenski dijo que él “no puede entender cómo Donald Trump puede estar del lado de Putin”, y lo calificó de “increíble”.
Zelenski dijo que no cree que Trump, favorito para la nominación presidencial republicana de cara a las presidenciales de noviembre, entienda a Putin pese a haberse reunido con él durante su mandato. “Creo que Donald Trump no conoce a Putin“, afirmó Zelenski. “No creo que entienda que Putin nunca se detendrá”.
Trump ha calificado de despilfarro la ayuda y ha tratado de vincular el debate sobre Ucrania con un refuerzo de las políticas migratorias para frenar la entrada de migrantes por la frontera con México.
J.D. Vance, un senador republicano que simpatiza con Trump, dijo este mes en la Conferencia de Seguridad de Múnich que la ayuda estadounidense “no va a cambiar fundamentalmente la realidad en el campo de batalla“. Zelenski invitó a Vance a visitar la línea del frente: “Comprenderá que millones de personas serán asesinadas” sin una nueva ayuda estadounidense.
Recientemente Rusia se apoderó de la ciudad de Avdiivka, en la región oriental de Donetsk, y las tropas ucranianas afirmaron que se vieron obligadas a racionar la munición debido a la escasez.
PrisioneroEnArgentina.com
Febrero 29, 2024
Lavrov dice que Hitler era parte judio
😡
Los funcionarios israelíes están criticando a Rusia y exigiendo una disculpa por los comentarios que hizo su ministro de Relaciones Exteriores sobre el nazismo durante el fin de semana. Es la condena más fuerte de Rusia por parte de Israel desde que comenzó la guerra en Ucrania en febrero. Todo comenzó el domingo, días después del Día del Recuerdo del Holocausto, cuando el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, hizo comentarios antisemitas en una entrevista con el programa de televisión italiano Zona Bianca.
Se le preguntó a Lavrov sobre la afirmación de Rusia de que había invadido Ucrania para “desnazificar” el país, que tiene un presidente judío elegido democráticamente.
“Entonces, cuando dicen ‘¿Cómo puede existir la nazificación si somos judíos?’ En mi opinión, Hitler también tenía orígenes judíos, por lo que no significa absolutamente nada”, dijo a la estación en ruso, refiriéndose a la religión del presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy. “Durante algún tiempo hemos escuchado del pueblo judío que los mayores antisemitas eran judíos”.
La reacción fue rápida, con funcionarios tanto en Israel como en Ucrania criticando los comentarios de Lavrov como profundamente ofensivos e históricamente inexactos. (Algunas personas han especulado que el abuelo paterno no identificado de Hitler era judío, un rumor no probado que la BBC explica que fue alimentado por una afirmación en una memoria de 1953 del abogado de Hitler, Hans Frank).
El ministro de Relaciones Exteriores de Israel, Yair Lapid, hijo de un sobreviviente del Holocausto y nieto de una víctima del Holocausto, calificó los comentarios de Lavrov de “imperdonables” e “indignantes”.
“Los judíos no se suicidaron en el Holocausto”, escribió en un tuit. “El nivel más bajo de racismo contra los judíos es acusar a los propios judíos de antisemitismo”.
El primer ministro israelí, Naftali Bennett, emitió un comunicado el lunes pidiendo el fin inmediato del uso del Holocausto “como un ariete político”, según el Jerusalem Post.
“Mentiras como estas pretenden culpar a los propios judíos por los crímenes más terribles de la historia, que se cometieron contra ellos, y así liberar a los opresores de los judíos de su responsabilidad”, agregó.
Dani Dayan, presidente del memorial del Holocausto de Israel, Yad Vashem, escribió en Twitter que Lavrov estaba “propagando la inversión del Holocausto” al promover una afirmación infundada que convierte a sus víctimas en criminales.
Llamar a Zelenskyy, y al público ucraniano en general, nazis es “una completa distorsión de la historia y una grave afrenta a las víctimas del nazismo”, agregó.
Rusia ha invocado con frecuencia el nazismo y la Segunda Guerra Mundial para justificar su agresión en Ucrania, lo que provocó críticas y acusaciones de hipocresía, especialmente porque sus fuerzas atacaron sitios conmemorativos del Holocausto y mataron a varios sobrevivientes del Holocausto en bombardeos residenciales.
La condena rápida y contundente de Israel a los comentarios de Lavrov es particularmente notable porque el país ha sido criticado por no hacer lo suficiente para mostrar su apoyo a Ucrania.
Bennett ha evitado en gran medida criticar a Rusia por su invasión a gran escala. Y aunque otros funcionarios han expresado su apoyo a Ucrania, Israel no ha enviado equipo militar ni se ha sumado por completo a las sanciones occidentales contra Rusia.
Zelenskyy expresó su impaciencia en un discurso de marzo ante los legisladores israelíes en el que comparó la invasión de Rusia con el Holocausto e instó a Israel a tomar medidas más enérgicas, incluido el envío de armas a Ucrania y la aceptación de refugiados no judíos que huyen de la guerra.
Los comentarios de Lavrov también han provocado la ira fuera de Israel.
La Liga Antidifamación condenó su “mal uso de los nazis, Hitler y el Holocausto”, calificándolo como parte de sus “esfuerzos aparentemente desesperados” para justificar la guerra de Rusia en Ucrania.
Un portavoz del gobierno alemán dijo que la idea de que Hitler tenía herencia judía era propaganda “absurda”, según Reuters, mientras que el comisionado de antisemitismo del país dijo que los comentarios “enfrentan descaradamente no solo a los judíos sino a todo el público internacional con un antisemitismo abierto”.
El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, tuiteó que además de ofender a Zelenskyy, Ucrania, Israel y el pueblo judío, las declaraciones de Lavrov “demuestran que la Rusia de hoy está llena de odio hacia otras naciones”.
PrisioneroEnArgentina.com
Mayo 6, 2022
El Presidente es una risa
Un comediante que interpreta al presidente de Ucrania en la televisión encabeza las urnas en la carrera presidencial del país.
Volodymyr Zelensky, de 41 años, protagoniza el popular programa de televisión “Servant of the People”, en el que interpreta a un profesor de historia que es elegido presidente después de que su ataque contra la corrupción se vuelve viral.
Y ahora, faltan cinco semanas para la elección presidencial del 31 de marzo en Ucrania, Zelensky es el favorito, a pesar de no tener ninguna experiencia política real.
Se describe a sí mismo como “muy liberal”, y lanzó su campaña el 1 de enero, para coincidir con el discurso del año nuevo del presidente.
Una encuesta reciente sugiere que Zelensky tiene más apoyo que otros candidatos, incluido el presidente titular, Petro Poroshenko y la ex primera ministra Yulia Tymoshenko.
La encuesta nacional que muestra a Zelensky prestando la carrera presidencial encuestó a 2.000 personas y fue realizada a principios de febrero por el Centro Razumkov de Ucrania.
Mostró que el 17.5% votaría por Zelensky, el 13.1% por Poroshenko y el 11.5% por Tymoshenko.
Leer más: La Marina de los Estados Unidos ha enviado otro barco al Mar Negro, donde Ucrania se está preparando para otro ataque ruso.
Además de ser actor y comediante, Zelensky es abogado y empresario.
Su acercamiento a la campaña es único. No tiene mítines, y en cambio vende boletos para conciertos de comedia en los que parodia a su competencia. También usa Facebook y YouTube para compartir videos.
Si es elegido presidente, Zelensky tendrá que enfrentar tensiones continuas con Rusia, que se anexó a Crimea en 2014, así como una economía en crisis y una corrupción generalizada.
Zelensky dijo que quiere enfrentar la corrupción y hablar directamente con Putin sobre la guerra en el este de Ucrania.
Cuando le preguntaron en diciembre si podía imaginar negociar con el presidente Donald Trump en el futuro, Zelensky no se inmutó.
“Ambos somos de la misma industria, después de todo”, bromeó.
Luego de anunciar su candidatura presidencial, Zelensky se enfrentó a las críticas de los partidarios de Poroshenko, quienes lo llamaron “payaso” y lo acusaron de devaluar la presidencia, informó Bloomberg.
Otros lo acusaron de ser un títere para el oligarca Ihor Kolomoisky, cuyos abogados han negado las reclamaciones.
PrisioneroEnArgentina.com
Febrero 25, 2019