“Dios les da las batallas más duras a sus soldados más valientes”
Expresión Popular
SEÑOR PRESIDENTE DE LA NACION Sr. JAVIER MILEI:
Desde mi situación de condenado por el enemigo derrotado en el campo de batalla y preso por delitos bautizados “lesa humanidad”, me dirijo a usted por el derecho que confiere la condición de ciudadano para expresar lo siguiente:
La condena que cargo junto a mi esposa, hijos, nietos, madre (97) hermanos y sobrinos, fue aplicada por un aparato “judicial” creado por el enemigo a partir del “pacto mafioso” celebrado por dos personajes repudiados por un gran sector de la sociedad argentina como lo fue Carlos Néstor Kirchner y Horacio Verbisky de los cuales no es necesario ahondar en sus repudiables antecedentes de corrupto el primero y de traidor a la patria el segundo. Ambos “inmorales”.
Lo hasta aquí desarrollado permite un paréntesis para “recordar y destacar” que, la ausencia del peligro que encarnaron las bandas armadas que atacaron a la sociedad argentina en las décadas del 60/70, han naturalizado y creado entre los cuadros dirigentes, una atmósfera de “comodidad y confort” logrando que se olvide lo cerca que se estuvo de perder nuestro sistema de vida.
A usted y a ellos hay que recordarles, sin “miedo ni vergüenza” que de no haber existido cuadros profesionales, altamente capacitados, entrenados y con “coraje”, la extirpación de aquel cáncer no hubiese sido posible, por lo tanto, “usted no sería presidente, ni su diputada , Lurdes Arrieta caminaría en libertad. Tampoco, el genuflexo cuerpo de Diputados y Senadores de la Nación estarían sentados en las apoltronadas bancas.
Por lo descripto cabe el interrogante: ¿Usted, mantendrá el “pacto” y permitirá que continúe vigente la actual estructura judicial creada especialmente para encarcelar a los veteranos combatientes del terrorismo.?
Señor, es hora de decir basta y dejar de correr a la sociedad, por la “zurda” con el relato fabricado de 30.000 desaparecidos y tildar de negacionista a los que piensan distinto. Basta de ser rehenes de eslogan construidos por las ONG de DDHH y el Foro de Sao Pablo. Recordar que los desaparecidos, valga la construcción gramatical, aparecieron, con el peronismo en el gobierno.
Que fue su líder, el que llamó a las FFAA” a aniquilarlos y así nos embarcó en una guerra civil que aún perdura.
Por lo tanto, paren achacar la responsabilidad a los que en aquella época tenían entre 20 y 30 años de edad y tapar así, la cobardía de los verdaderos responsables.
Hoy, aún, existen personajes vivos que se pavonean por programas de TV, como Carlos Ruckauf dando clase de democracia, siendo que firmó, los “decretos de aniquilamiento” a sabiendas que ello significaba la eliminación de sus “propios compañeros”.
Dejen de “hacer jueguito para la tribuna”. No es necesario que visiten a los presos. Basta de hipocresía.
El reloj de los presos ilegales es la muerte.
Señor presidente, si realmente, usted ama la libertad:
Eliminé, como a hecho con otros organismos, la subsecretaría de DDHH.
Desarme la estructura “fiscal especial” que lleva adelante estos circos conducidos por ideólogos de “Justicia Legítima”.
Instruya a su ministro de justicia para que denuncie y pida “juicio político” a los jueces prevaricadores que hace veinte años violan la ley. Menos aún, sean propuesto para ministro de la Suprema Corte de Justicia.
No es amnistía, no es perdón, es justicia, lo que se requiere
Podrá bajar la inflación, el gasto público y lograr superávit fiscal, pero si no le pone “punto final” a este tema, la guerra continuará y más temprano que tarde se lo llevará puesto.
Advierta usted que, “los mismos” que piden investigar y expulsar a los diputados que visitaron a los “presos politicos” son los mismos que le ponen “palos en la rueda” en el Congreso para trabar las reformas. Hace cuarenta años que militan está política de “desarme y desintegración” de las FFAA y las instituciones republicanas.
Señor, es momento de terminar con la mentira de los “llamados juicios de lesa humanidad”. Son hijos del pacto y la casta política corrupta de Carrió y compañía. Esa nomenclatura marxista incubada en las arterias de la dirigencia política y social argentina, no permite cerrar las heridas abierta por una guerra no buscada por las FFAA y FFSS, hace 50 años.
¿Si la pregunta es como hacerlo? La respuesta es clara.
“Aplicar y respetar a raja tabla el Estatuto de Roma y el art 18 de la CN”.
Ello no quita que se siga debatiendo si hubo crueldad en los métodos y formas de lucha de ambas partes.
Pero primero se debe terminar con el encarcelamiento y condena de hombres que de “buena fe” se brindaron para que el “marxismo genocida” no avanzará sobre la patria.
Por último, para que usted, hoy, pueda gritar ¡Viva la Libertad…Carajo!, cincuenta años atrás, hombres honestos, hoy presos, “pelearon y defendieron esa libertad” sin especulación”.
Para llevar adelante tal tarea, no sé necesitan las fuerzas del cielo…. “solo coraje”..
◘
Por Juan Armando Giovarruscio.
“Dios les da las batallas más duras a sus soldados más valientes”
Expresión Popular
SEÑOR PRESIDENTE DE LA NACION Sr. JAVIER MILEI:
Desde mi situación de condenado por el enemigo derrotado en el campo de batalla y preso por delitos bautizados “lesa humanidad”, me dirijo a usted por el derecho que confiere la condición de ciudadano para expresar lo siguiente:
La condena que cargo junto a mi esposa, hijos, nietos, madre (97) hermanos y sobrinos, fue aplicada por un aparato “judicial” creado por el enemigo a partir del “pacto mafioso” celebrado por dos personajes repudiados por un gran sector de la sociedad argentina como lo fue Carlos Néstor Kirchner y Horacio Verbisky de los cuales no es necesario ahondar en sus repudiables antecedentes de corrupto el primero y de traidor a la patria el segundo. Ambos “inmorales”.
Lo hasta aquí desarrollado permite un paréntesis para “recordar y destacar” que, la ausencia del peligro que encarnaron las bandas armadas que atacaron a la sociedad argentina en las décadas del 60/70, han naturalizado y creado entre los cuadros dirigentes, una atmósfera de “comodidad y confort” logrando que se olvide lo cerca que se estuvo de perder nuestro sistema de vida.
Señor, es hora de decir basta y dejar de correr a la sociedad, por la “zurda” con el relato fabricado de 30.000 desaparecidos y tildar de negacionista a los que piensan distinto. Basta de ser rehenes de eslogan construidos por las ONG de DDHH y el Foro de Sao Pablo. Recordar que los desaparecidos, valga la construcción gramatical, aparecieron, con el peronismo en el gobierno.
Que fue su líder, el que llamó a las FFAA” a aniquilarlos y así nos embarcó en una guerra civil que aún perdura.
Por lo tanto, paren achacar la responsabilidad a los que en aquella época tenían entre 20 y 30 años de edad y tapar así, la cobardía de los verdaderos responsables.
Hoy, aún, existen personajes vivos que se pavonean por programas de TV, como Carlos Ruckauf dando clase de democracia, siendo que firmó, los “decretos de aniquilamiento” a sabiendas que ello significaba la eliminación de sus “propios compañeros”.
Dejen de “hacer jueguito para la tribuna”. No es necesario que visiten a los presos. Basta de hipocresía.
El reloj de los presos ilegales es la muerte.
Señor presidente, si realmente, usted ama la libertad:
Eliminé, como a hecho con otros organismos, la subsecretaría de DDHH.
Desarme la estructura “fiscal especial” que lleva adelante estos circos conducidos por ideólogos de “Justicia Legítima”.
Instruya a su ministro de justicia para que denuncie y pida “juicio político” a los jueces prevaricadores que hace veinte años violan la ley. Menos aún, sean propuesto para ministro de la Suprema Corte de Justicia.
No es amnistía, no es perdón, es justicia, lo que se requiere
Podrá bajar la inflación, el gasto público y lograr superávit fiscal, pero si no le pone “punto final” a este tema, la guerra continuará y más temprano que tarde se lo llevará puesto.
Advierta usted que, “los mismos” que piden investigar y expulsar a los diputados que visitaron a los “presos politicos” son los mismos que le ponen “palos en la rueda” en el Congreso para trabar las reformas. Hace cuarenta años que militan está política de “desarme y desintegración” de las FFAA y las instituciones republicanas.
Señor, es momento de terminar con la mentira de los “llamados juicios de lesa humanidad”. Son hijos del pacto y la casta política corrupta de Carrió y compañía. Esa nomenclatura marxista incubada en las arterias de la dirigencia política y social argentina, no permite cerrar las heridas abierta por una guerra no buscada por las FFAA y FFSS, hace 50 años.
“Aplicar y respetar a raja tabla el Estatuto de Roma y el art 18 de la CN”.
Ello no quita que se siga debatiendo si hubo crueldad en los métodos y formas de lucha de ambas partes.
Pero primero se debe terminar con el encarcelamiento y condena de hombres que de “buena fe” se brindaron para que el “marxismo genocida” no avanzará sobre la patria.
Por último, para que usted, hoy, pueda gritar ¡Viva la Libertad…Carajo!, cincuenta años atrás, hombres honestos, hoy presos, “pelearon y defendieron esa libertad” sin especulación”.
Para llevar adelante tal tarea, no sé necesitan las fuerzas del cielo…. “solo coraje”..
¡Dios y la patria se lo demandan!
Saludo a usted con respeto y cordialidad.
Mendoza, 20 de Agosto de 2024
Juan Armando Giovarruscio
Injusta e ilegítimamente preso
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 20, 2024
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