Durante la Segunda Guerra Mundial, los submarinos alemanes surcaron el Atlántico, hundiendo buques aliados e interrumpiendo las líneas de suministro. Sin embargo, uno de los aspectos más intrigantes de sus operaciones fue su presencia frente a las costas argentinas, especialmente en los últimos meses de la guerra. La llegada del U-530 y el U-977 a Argentina tras la rendición de Alemania en 1945 desató especulaciones, teorías conspirativas y debates históricos sobre su misión y propósito.
En julio y agosto de 1945, dos submarinos alemanes, el U-530 y el U-977, emergieron cerca de Mar del Plata, Argentina, meses después de la rendición oficial de Alemania. Su inesperada llegada planteó dudas sobre si habían participado en misiones secretas, como el transporte de líderes nazis, oro robado o documentos clasificados a Sudamérica.
U-530
El U-530 llegó el 10 de julio de 1945, y su tripulación se entregó a las autoridades argentinas.
El U-977 le siguió el 17 de agosto de 1945, tras un viaje sumergido inusualmente largo, evitando ser detectado durante meses.
Ambos submarinos fueron posteriormente entregados a la Armada de los Estados Unidos, lo que alimentó la especulación sobre su cargamento y misión.
La llegada de estos submarinos dio lugar a numerosas teorías, algunas más plausibles que otras:
Ruta de escape de los líderes nazis: Algunos creen que nazis de alto rango, incluido Adolf Hitler, huyeron a Argentina utilizando estos submarinos. Sin embargo, no hay pruebas concretas que respalden esta afirmación.
Misión secreta en la Antártida: Una teoría sugiere que el U-530 y el U-977 hicieron escala en la Antártida antes de llegar a Argentina, posiblemente para establecer una base nazi oculta.
Transporte de oro nazi: Algunos historiadores especulan que los submarinos transportaban oro y objetos de valor robados de la Europa ocupada.
Si bien estas teorías siguen sin demostrarse, siguen alimentando la curiosidad histórica.
U 977
Tras su rendición, ambos submarinos fueron examinados por las fuerzas aliadas. El U-530 fue finalmente hundido en 1947 como parte de ejercicios navales, mientras que el U-977 se utilizó para pruebas de torpedos antes de ser destruido por el USS Atule en 1946.
El misterio en torno a su misión sigue sin resolverse, pero su presencia en Argentina pone de relieve el alcance global de las operaciones de la Alemania nazi durante la guerra.
La llegada de submarinos alemanes a Argentina después de la Segunda Guerra Mundial sigue siendo uno de los misterios navales más intrigantes del siglo XX. Si bien los registros oficiales sugieren que simplemente fueron rendiciones tardías, las especulaciones sobre su misión siguen cautivando la imaginación de historiadores y teóricos de la conspiración. Ya sea que transportaran fugitivos nazis, carga secreta o documentos clasificados, su viaje a Argentina sigue siendo un capítulo fascinante de la historia de la Segunda Guerra Mundial.
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Durante la Segunda Guerra Mundial, los submarinos alemanes surcaron el Atlántico, hundiendo buques aliados e interrumpiendo las líneas de suministro. Sin embargo, uno de los aspectos más intrigantes de sus operaciones fue su presencia frente a las costas argentinas, especialmente en los últimos meses de la guerra. La llegada del U-530 y el U-977 a Argentina tras la rendición de Alemania en 1945 desató especulaciones, teorías conspirativas y debates históricos sobre su misión y propósito.
En julio y agosto de 1945, dos submarinos alemanes, el U-530 y el U-977, emergieron cerca de Mar del Plata, Argentina, meses después de la rendición oficial de Alemania. Su inesperada llegada planteó dudas sobre si habían participado en misiones secretas, como el transporte de líderes nazis, oro robado o documentos clasificados a Sudamérica.
El U-530 llegó el 10 de julio de 1945, y su tripulación se entregó a las autoridades argentinas.
El U-977 le siguió el 17 de agosto de 1945, tras un viaje sumergido inusualmente largo, evitando ser detectado durante meses.
Ambos submarinos fueron posteriormente entregados a la Armada de los Estados Unidos, lo que alimentó la especulación sobre su cargamento y misión.
La llegada de estos submarinos dio lugar a numerosas teorías, algunas más plausibles que otras:
Ruta de escape de los líderes nazis: Algunos creen que nazis de alto rango, incluido Adolf Hitler, huyeron a Argentina utilizando estos submarinos. Sin embargo, no hay pruebas concretas que respalden esta afirmación.
Misión secreta en la Antártida: Una teoría sugiere que el U-530 y el U-977 hicieron escala en la Antártida antes de llegar a Argentina, posiblemente para establecer una base nazi oculta.
Transporte de oro nazi: Algunos historiadores especulan que los submarinos transportaban oro y objetos de valor robados de la Europa ocupada.
Si bien estas teorías siguen sin demostrarse, siguen alimentando la curiosidad histórica.
Tras su rendición, ambos submarinos fueron examinados por las fuerzas aliadas. El U-530 fue finalmente hundido en 1947 como parte de ejercicios navales, mientras que el U-977 se utilizó para pruebas de torpedos antes de ser destruido por el USS Atule en 1946.
El misterio en torno a su misión sigue sin resolverse, pero su presencia en Argentina pone de relieve el alcance global de las operaciones de la Alemania nazi durante la guerra.
La llegada de submarinos alemanes a Argentina después de la Segunda Guerra Mundial sigue siendo uno de los misterios navales más intrigantes del siglo XX. Si bien los registros oficiales sugieren que simplemente fueron rendiciones tardías, las especulaciones sobre su misión siguen cautivando la imaginación de historiadores y teóricos de la conspiración. Ya sea que transportaran fugitivos nazis, carga secreta o documentos clasificados, su viaje a Argentina sigue siendo un capítulo fascinante de la historia de la Segunda Guerra Mundial.
PrisioneroEnArgentina.com
Junio 2, 2025
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