El presente ensayo fue escrito por el General Heriberto J. Auel en el año 2002. Había indicios de una reacción al multilateralismo globalizador. Hoy, con la llegada de Bolsonaro a Brasilia y luego de reacciones nacionalistas en Europa y EEUU, se verá un fenómeno de reacción al “progresismo de izquierda” que afectó a la Argentina desde 1984.
Observemos lo que decía el General 16 años atrás:
Grl Br Heriberto Justo Auel
Octubre de 2002
“Aquel a quien no le preocupa el futuro, se topará con la desgracia.”
Confucio
“He aquí la recta manera de estudiar; la que no se limita al saber histórico, sino que transforma cada vez lo histórico enactualidad, mediante la aplicación de ese saber.”
I Ching
EL PENSAMIENTO NACIONAL.
El pensamiento nacional es, de hecho, el germen y núcleo de una teoría política nacional y ésta, situada en nuestro espacio y tiempo histórico, la base de una doctrina política nacional. Hoy ambas son las grandes ausentes en nuestra circunstancia nacional y, consecuentemente, fuentes de ansiedad e incertidumbre social.
Una doctrina, es decir, un actualizado pensamiento nacional desarrollado en forma sistematizada y orgánica, con plena posibilidad de aplicación real, da lugar a la unidad y homogeneidad de una sociedad, que alcanza así la categoría de comunidad nacional. Impulsa a la sinergia y felicidad del país a través de la construcción de su propio futuro.
Una comunidad, en libertad y diversidad, al alcanzar ese rango ostenta un solo y común escenario a lograr. Es su “destino manifiesto”, su “proyecto de vida en común”, un ramillete de objetivos políticos en el horizonte que reúne a un pueblo y le da vigor monolítico y esperanzas.
Esa comunión proyectada de intereses e ideales producirá –naturalmente- la unidad nacional, que se traducirá en poder y fortaleza política, sobre el soporte de una identidad, de una cultura singular que unifica, diferencia y define a una personalidad nacional, -en el concierto de la variada multiplicidad universal- y en una necesidad insoslayable en la relación con “el otro” o con “los otros” en la presente e ineludible globalización planetaria, que nos hace a todos vecinos cercanos.
Establecida la unidad de fines –unidad objetiva- alcanzaríamos en consecuencia el enlace espiritual de la Nación. En ese estadio, es lícita y necesaria la confrontación de ideas, la oposición inteligente en la elección de las prioridades, de los medios y caminos para alcanzar aquellos fines u objetivos, optimizando así el empleo del Poder Público, siempre escaso y de uso alternativo. Éste es el rol de las organizaciones sociales y de los partidos políticos que representan a los diversos sectores de la sociedad. Para la acción operativa comunitaria están las instituciones estatales, en sus diversos niveles. Sin ellas, es imposible el progreso.
Por el contrario, la ausencia de un pensamiento nacional, originario y originante, se traduce en la ausencia de la unidad actora-soberana y en la presencia de un “pueblo arena”,objeto de las circunstancias y no sujeto de su propia historia, como “pueblo roca”.
Un “pueblo roca”, unido, exige el aglutinante de una Doctrina Nacional fundada en un Pensamiento Nacional. Colegimos así que un Pensamiento Nacional – Doctrina Nacional- es la base de la unión y de la unidadresultante, condición sine-qua-non que nos hace actores del propio destino posible, es decir, de un futuro real a prever y lograr, para “no toparnos con la desgracia”, según la sentencia confuciana que encabeza estas líneas.
Es el “pensar,para luego obrar”, que nos legó el Estagirita y que, desde Moltke El Viejo, orienta a los modernos estados mayores y a sus correlatos privados o públicos.
LA DOCTRINA NACIONAL.
Hemos señalado que un pensamiento sistematizado –teoría-, con un objeto definido, deriva en doctrina. Ésta, definida por uno o varios principios, es el instrumento que ilumina al Plan Estratégico consecuente, como sendero para lograr con eficiencia las metas de largo, mediano y corto plazo y a la vez sortear la complejidad de situaciones conflictivas que nos presenta un mundo complejo, en vertiginosa evolución.
Cuando ese ejercicio intelectivo logra “transformar cada vez lo histórico en actualidad“, según la sentencia del I Ching, estamos en presencia de una doctrina nacional, de un aglutinador pensamiento singular, que es de aplicación en un espacio y en un tiempo definido y dinámico. No estaremos pensando ni obrando en abstracto y/o improvisadamente, sino accionando en un determinado espacio y en un determinado tiempo, en pos de fines deseados y queridos, interpretados por “la aplicación de ese saber” histórico –nuestra cultura-.
Una doctrina nacional se sitúa en un espacio, -en el espacio de la Patria-, entendida ésta como el hogar común de quienes están hermanados por una cultura, una tradición, un pasado histórico común. Quienes tienen Patria, tienen padres, tienen identidad. Comparten un origen histórico, un espacio y una forma específica de sentir y vivir: una tradición. Desde esos espacios, nos situaremos también en un tiempo. Desde “el saber histórico”, desde el pasado trascendente, vamos hacia el presente y el futuro, descifrando su clave, su naturaleza y su ritmo.
Entonces sí estaremos en presencia de una actualizada y dinámica doctrina nacional, de un pensamiento elaborado y sistematizado de posible aplicación y relacionado con un determinado, dinámico y singular espacio y tiempo. Sostenido por una cultura que irradia confianza, credibilidad.
Estaremos en presencia de “una realidad innovadora y expansiva” y en el ámbito de la ciencia y arte de la Política y de la Estrategia, por cuanto ambas como ciencias persiguen la verdad; ambas por su objeto transitan sobre los acontecimientos socio-políticos proyectados sobre el futuro. Y ambas como artes desarrollaran creativamente el espíritu del estadista, en pos de la Nación a lograr.
Queda así abierta la posibilidad del ejercicio creador –arquitectónico- de la Política y de la Estrategia, como puesta en acto de la transformación posible –apta, factible y aceptable- de las realidades actuales, con el trasfondo de la voluntad unificada de la Nación, en el complejo ámbito de la mundialización acelerada, para el logro de un futuro de grandeza y a fin de cumplir con los mandatos de los Padres Fundadores.
LOS TIEMPOS DE LA GLOBALIZACION PLANETARIA.
Queda claro que el pensamiento nacional –que hemos señalado como origen y núcleo de una doctrina nacional-, no debe ser considerado en forma abstracta, sino en un aquí y ahora, en relación con ésta compleja circunstancia de globalización planetaria, según el enunciado del tema que nos convoca.
La Globalización o Mundialización Planetaria, es hoy una situación insoslayable que nos abarca, condiciona y a veces nos determina. Es esa realidad comprobable que está omnipresente en el universo, como “única verdad”. En nuestro entender, es un efecto ineludible de la etapa de la civilización en la que ya vivimos y que, según diferentes autores, conocemos como posindustrial,hiper-industrial, tecnotrónica, de las comunicaciones, de la informática, de la cibernética, de la tercera ola, etc., etc., que está exigiendo y originando a la “sociedad del conocimiento”,condición -sine qua non- para ingresar con éxito al Siglo XXI.
Podríamos expresar, en consecuencia, que en la era antropozoica y en la edad contemporánea, hemos alcanzado a través de las culturas la etapa de la civilización posindustrial, o como quiera llamársele, que nos hace testigos privilegiados de un punto de inflexión hacia una nueva e insoslayable situación, hacia un nuevo estadio internacional estructural, cuyo efecto más notable es el de la actual globalización:
la transformación progresiva del mundo en una “aldea global” y
la aceleración constante del ritmo histórico.
Queda dicho, en otros términos, que son afectados en su naturaleza y dimensión factores básicos de la acción política y estratégica:
el espacio (hoy uno-global),
el tiempo (acelerado en su ritmo) y que un tercer factor,
el Poder, se construye actualmente desde la comunidad, desde su cultura, desarrollando su educación espiritual y adquiriendo las destrezas que exigen los nuevos medios en una masa crítica de la sociedad nacional/regional.
Los catalizadores que han impulsado a éste complejo fenómeno, provienen del ámbito de la Revolución Científico-Tecnológica: el ordenador o computadora, las telecomunicaciones, los vectores aeroespaciales, etc. La Ciencia y la Tecnología han desarrollado su propio impulso, retroalimentándose a escala geométrica. El efecto causado por este hecho en las ciencias sociales, ha sido de carácter “tectónico”, en términos de Lester Thurow. No afectó a los sistemas, sino a las estructuras.
En parte del mundo académico, el fenómeno quedó evidenciado. Surgió allí una perversa confusión conceptual, parálisis intelectual o perplejidad ideológica, manifestaciones claramente observables en las publicaciones de la última década del siglo XX y aun en los 2000.
LA GLOBALIZACION IMPERIAL.
En 1989/91 al implosionar la URSS, se quiebra en el ámbito político-estratégico la lógica imperial bipolar. Esta crisis geopolítica y aquella otra, la ya citada Revolución Científico-Tecnológica, -que da lugar a la Iniciativa de Defensa Estratégica-, se potenciaron mutuamente, creando un inédito Poder Imperial Global, un Unicato Multipolar corporizado por los Países Desarrollados Norte, que conforman el Grupo de los Siete / Ocho.
Este “Nuevo Orden Internacional” adopta el modelo de la Revolución de Filadelfia, triunfante en la Guerra Fría y acepta a un “primum inter pares”, EE.UU., en reconocimiento de su liderazgo estratégico indiscutido en la nueva etapa de la presente civilización, la de ” la Tercera Ola”, que lo consagra como el único poder nacional con capacidad de “proyección de fuerza”, hacia cualquier punto del Universo.
Este es el escenario emergente de la posguerra fría, signado por el “economicismo pragmático” de quienes imperan desde el Norte y cuya impronta es la no resuelta crisis del internacionalismo liberal triunfante. Anthony Lake, ex asesor del Presidente Clinton en temas de Seguridad, le ha llamado “wilsonianismo pragmático”, que pareciera acentuarse con Obama, en el 2009, bajo la presión abarcadora de la crisis financiera internacional, emergente en el 2008.
El liberalismo, en el ápice de su hegemonía universal, “no encontró aun el principio aplicablea laenorme variedad de conflictos a enfrentar…” Ha prohibido la guerra, impulsado el desarme o el control de armas, ha creado un sinnúmero de burocracias internacionales para la promoción y el sostenimiento de la Paz Internacional, pero no ha podido evitar los conflictos, aun entre Estados liberales, mientras éstos manifiesten y sostengan sus intereses nacionales.
En el debate íntimo, chocan los liberales cosmopolitas (Kant, Bentham, Wilson) con los liberales nacionales (Rousseau) y el resultado se traduce el llamado “caos desintegrador” político o institucional, mientras esos mismos actores se integran en bloques económicos regionales y/o continentales.
Frente al marxismo desacreditado y al realismo estratificado, el liberalismo está paralizado por su propia incongruencia ante una situación compleja y no resuelta, que Obama intenta superar con estrategias aparentemente idealistas, que producen vivas desconfianzas en antiguos aliados. Por el momento se duda si esta actitud “blanda”, es hija de la crisis financiera o de una ideología “progresista”. La complejidad de la guerra mundial contra el terrorismo global, a fines del 2009, tiene en Afganistán una prueba paradigmática para el nuevo gobierno demócrata que, junto a la actitud política frente a la situación interna de Honduras, constituyen indicativos clarificadores de las opciones “carterianas” que pareciera asumir hoy la superpotencia imperial.
Se llega siempre al “estado de guerra” que han planteado a lo largo de la historia Tucídides, Maquiavelo, Hobbes o Rousseau. La eficiencia económica no se armoniza con la seguridad estratégica. La globalización económica es un triunfo liberal obtenido a un alto costo, con consecuencias inesperadas y aun irresueltas.
Se ha reconocido la independencia de Croacia, Bosnia o Eritrea, pero no se lo hizo con Biafra o Chechenia, con los kurdos o tibetanos, legitimándose estas diferentes resoluciones con la apelación a las conveniencias económicas o para no “aumentar el caos” existente. El mercantilismo, que se inició y expandió con “el mare liberum” de Grocio, fue normado para el comercio. Actualmente, cuando debe incluirse en la internacionalización a la producción y la distribución, hay áreas que quedan fuera del control de los Estados.
El liberalismo, triunfante en el último medio siglo sobre los diversos totalitarismos socialistas, redujo el poder del Estado-Nación en favor de la esfera protegida de los derechos individuales, creando progresivamente otro poder, ANONIMO Y FORMIDABLE, fuera de los Estados, que afecta al concepto tradicional de soberanía estatal y que, por el momento, es solo considerado como una mera extensión de los derechos individuales.
Sin embargo, la euforia idealista inicial -Fukuyama- luego de la caída del muro de Berlín y hasta la llegada de la Guerra del Golfo, se ha transformado en el pesimismo de la violenciadispersa, de los conflictos de exclusión, de la amenaza de “los nuevos bárbaros” o de las polaridades indefinidas.
En los últimos años, ni republicanos ni demócratas han definido con claridad los intereses externos de los EE.UU., apareciendo una significativa grieta entre los ideales liberales y las políticas en acto del gobierno demócrata, en el período Clinton, siendo las de la actual administración un enorme interrogante. Ha llegado el momento de decidir la continuidad de la transición estructural iniciada por nosotros en los ’90 y de reflexionar acerca de los efectos públicos de ciertas actividades privadas y públicas fuera de control con posterioridad al caos decadente conducido por el “progresismo” de los últimos años. El caos institucional nos está llevando al “estado fallido”, santuario de las mafias ya presentes en Ibero América y en nuestro querido país.
EL NARCOTERRORISMO.
Ha llegado el momento, en la Región, de repensar al “Estado Residual” para rehabilitarlo como “Estado Necesario”. Debiera de ser esta una preocupación central de la Gran Política y del Derecho Político, una responsabilidad primaria de las dirigencias y materia obligada de quienes nos ocupamos de la Seguridad Nacional y de la Política de Defensa, hoy inexistentes. La guerra fría, como una guerra diferente, -la primera en ambiente nuclear- nos ha deparado una posguerra también distinta, con un inventario de riesgos y amenazas estratégicas sin antecedentes teóricos, que ponen en riesgo la enorme oportunidad que la misma crisis nos ha abierto.
Escuetamente, podemos enumerarlos así:
Desintegración o feudalización de Estados.
Presencia generalizada del crimen organizado internacional.
Conflictos étnicos.
Luchas facciosas, religiosas o políticas. Indigenismo radical. Fundamentalismos.
Fracaso de Estados-poscoloniales.
Terrorismo globalizado. Insurgencias.
Desecularización del Estado.
Refugiados y migraciones, con su corolario xenófobo.
Marginamiento estructural, estatal y social.
Aplicación distorsionada de los Derechos Humanos.
Agresión al medio ambiente.
Intervención selectiva, etc.
Los análisis superficiales, los planteos abstractos, las inclinaciones cuestionadoras e ideológicas y la permanente receta copiada, nos llevaron al error constante; éste a la decadencia y, en 1989 al estado de necesidad. Esta situación impuso el comienzo improvisado de una situación regresiva, irrazonable, conflictiva y sin salida. Permanecemos paralizados, detenidos en el tiempo, con la ansiedad que proporciona la escasa/nula claridad de los discursos electorales, en total incertidumbre cuando se trata de nuestro futuro. Esa es la razón de haber colocado a la cabeza de estos renglones las dos sentencias de la sabia y vieja cultura china. El pensamiento nacional tiene hoy un enorme desafío por delante: “preocuparse por el futuro, para no toparnos con la desgracia.”
LA SEGUNDA ARGENTINA EN TIEMPOS DE GLOBALIZACION PLANETARIA.
La Primera Argentina, (la Argentina Agropecuaria), pensada por la Generación del ’37 y llevada a los hechos por la Generación del ’80, tuvo un magnífico resultado económico y un gran fracaso socio-político. Luego de una prolongada guerra civil, logró modernizar el sistema económico, mantuvo estratificado el sistema político e ignoró al sistema social.
El propio éxito económico del ´80 y la naciente clase media, movilizaron a la “democracia incivilizada” de toda nuestra geografía, en pos de la modernización del sistema político: la participación. El desarrollo económico exigía desarrollo político. La cultura hispano-criolla-cristiana de la Proto-Argentina había sido avasallada por los copistas de ayer. Estos, desde la civilización mercantilista impusieron las instituciones de moda y desataron una guerra civil campal, contenida brevemente por la Revolución del ’80 y su consecuente Primera Argentina. Sin embargo, con otras formas, la guerra civil se reactivó a partir de la Revolución del ’90. En el Parque de Artillería, manzana hoy ocupada por los Tribunales, se inició el ciclo de los golpes de estado del siglo XX. El sistema político no logra establecerse. El cuestionamiento social sin propuestas políticas cubre al siglo XX. La Argentina queda envuelta en los ideologismos.
La guerra civil cambia de formas.
La participación llegará tardíamente, a fines de la Primera Guerra Mundial, sin re-dinamizar al éxito económico de Roca, sin ideas, manteniendo la inercia quejosa que legitimó su origen, pero vacía de arraigo y de proyección hacia el futuro. Ello le vale un relevo definitivo, un 17 de Octubre. Será la nueva sociedad de masas, consecuencia de la incipiente industrialización provocada por las guerras europeas, -la sustitución de importaciones-, la que llegará desde el interior profundo a las “orillas urbanas” e intentará darle continuidad a la modernización de los sistemas. Los elementos más cultos y menos civilizados, intentaran ingresar a la industrialización y a la urbanización ordenada. La clase media urbana se sintió agredida por el “aluvión zoológico”. La Gran Política quedó paralizada.
La clase media, que debió liderar esta nueva etapa, desertó de su responsabilidad histórica. Prefirió buscar el reemplazo del patriciado agrario o bien especuló, al amparo de las crisis sucesivas. El enfrentamiento social se hizo maniqueo y fue cabalgado por el conflicto hemisférico Este-Oeste, iniciado en 1947 -y en Ibero América a partir de la revolución cubana-, agravando la violencia de la guerra civil, que se hace revolucionaria, desquiciando al maltrecho y débil Estado Nacional.
En 1982, la Guerra del Atlántico Sur pone fin a la recurrencia de los “democratistas” a los golpes de estado cívico-militares, como alternativa a la no-aceptación de las “mayorías emergentes” o a la “faltade soluciones”, en las repetidas y cíclicas crisis del sistema político.
Emerge la Posibilidad de una Segunda Argentina.
Luego de las hiperinflaciones, la licuación de los partidos y las crisis institucionales, el electorado argentino enfrenta en los 2000 la responsabilidad de cambios estructurales insoslayables, exigidos por el entorno internacional y regional y el incuestionable agotamiento del proyecto de la Primera Argentina.
La Revolución del Parque y el 17 de Octubre, tienen su correlato histórico en la Gesta del Atlántico Sur. Los tres constituyen hitos históricos dentro de una decadencia centenaria, en lo que hace ala actualización funcional de los sistemas. Del mismo modo, la Generación del ’37, la del ’80 y la del 43 -Forja y el GOU-, tienen su correlato en la presente Generación Malvinas, que abarca a la juventud argentina menor de 45 años.
A diferencia de sus predecesoras, la Generación Malvinas tiene por delante algo más que adelantar el reloj de la historia y hacer congruentes a los sistemas de un país con constitución liberal, economía socialista y sociedad corporativa. El nivel de irracional decadencia alcanzado está comprendido por un proceso revolucionario neo-estalinista que, abarca a todo el sub-continente iberoamericano y una crisis financiera internacional.
En breve, la comunidad argentina deberá lograr restablecer el “Estado Necesario”, recuperar la República y las instituciones; restablecer la identidad a través de la educación y de la comunicación social. La cultura –identidad- es el firme soporte de la construcción de nuestro futuro. A éste lo imaginamos como el de una Segunda Argentina Posindustrial, designio central de la Gran Política, que por el momento no aparece. El Estado, en sus diferentes niveles, es el instrumento imprescindible para la acción constructiva de nuestro futuro y las instituciones, para ser tales, deben ser funcionales a la globalización planetaria que nos abarca.
En síntesis: debemos dentro de un corto lapso, recuperar nuestra identidad, establecer el escenario a lograr en el largo plazo y comprender a nuestra compleja circunstancia global. Estas son las bases imprescindibles para desarrollar un Pensamiento Nacional en Tiempos de Globalización Planetaria.
No ” limitarnos al saber histórico, sino transformar cada vez lo histórico en actualidad, mediante la aplicación de ese saber… “, sin olvidar, en momento alguno, que el procesohistórico está acelerado. El ritmo del tiempo ha cambiado.
“Si conoces a los demás y te conoces a ti mismo, ni en cien batallas correrás peligro;
si no conoces a los demás pero te conoces a ti mismo, perderás una batalla y
ganarás otra: si no conoces a los demás y no te conoces a ti mismo, correrás peligro en cada batalla”.
Sun Tzu – S. Vto a C-
La situación estratégica que nos envuelve.
La “modalidad” de la presente guerra mundial.
Nociones básicas acerca de la guerra híbrida -GH-.
La Revolución de los Asuntos Militares -RAM- y la GH.
Posición adoptada por países y organizaciones internacionales ante la conceptualización de la GH y la situación argentina.
La reorganización de las Fuerzas Terrestres -FFTT-.
El Hizballah y el paradigma de la GH.
¿Híbrida…con derivación nuclear?
La situación estratégica que nos envuelve.
A pesar de que la dirigencia política argentina lo ignore, o simule ignorarlo, los argentinos -como sociedad- estamos actualmente abarcados por una compleja e inédita guerra mundial que transita -en el 2015- su décimo cuarto año, en un continuo y progresivo agravamiento.
Pero además, esta misma dirigencia, en pleno proceso electoral “para cambiar el rumbo de la historia”, hasta hoy no ha dicho una sola palabra sobre los dos “estados de guerra” (1) -hoy presentes e incardinados- que son directa herencia de las recientes guerras que la nación sostuvo en la última mitad del siglo XX.
Unánimemente, estos conocidos líderes concluyen -con todo acierto-, que la preocupación central de la ciudadanía es la inseguridad nacional -que comprende la inseguridad pública y la indefensión estratégica- sin embargo, por las propuestas que nos hacen conocer, o ignoran irresponsablemente la naturaleza de la situación y de los conceptos más elementales de las preceptivas polemológicas y estratégicas que están en plena y acelerada evolución en los ambientes académicos, políticos y estratégicos del mundo desarrollado y en algunos países vecinos, o bien carecen de ideas, de soluciones.
Hechos recientes que han conmovido al país, directamente relacionadoscon la guerramundial en acto -como lo es la muerte del Fiscal General Nisman- no han logrado romper el llamativo silencio de los candidatos, a pesar de que se encuentran en plena carrera electoral. ¿Cuál es la razón de éste silencio atronador? Es ignorancia, cobardía o compromiso asumido con quienes instalaron la política de derechos humanos unidireccionados. “De esto no se habla”.
Tanta irracionabilidad se debe -sin dudas- a causales muy profundas, que hunden sus raíces en nuestro pasado reciente. La Argentina ha debido enfrentar -a partir de 1959- una larga guerra civil revolucionaria, asimétrica, no convencional, ante una sorpresiva agresión estratégica internacional -en el marco de la guerra fría- que cabalgó antiguas crisis de arrastre, llevando a sectores sociales medios, fuertemente resentidos, al empleo de tácticas terroristas -impulsadas por el odio- de raíz ideológica.
Cuando ésta guerra muy-limitada aún no había finalizado, el RU plantó un señuelo en el Atlántico Sur que -nuevamente por sorpresa-, nos llevó a escalarla a una guerra breve, convencional, de carácter limitado, dentro del propio Hemisferio. (2)
Vivimos y somatizamos las consecuencias de ambas guerras, como posguerras nodigeridas, no asimiladas y menos aun asumidas políticamente. Por ello se mantiene la ignorada ¿? situación de los “dos estados de guerra” que a partir de 1983 se incardinaron, empleando para ello las consecuencias del Decreto 158/83 y de la política de derechos humanos unidireccionados, ambos medios conducidos localmente -hasta hoy- por el anciano terrorista y agente británico Horacio Verbitsky. Es en éste punto donde las dos guerras recientes ingresan a una síntesis que dificulta la comprensión situacional, para los analistas estratégicos amateurs. (3)
En Iberoamérica la Argentina es el único país que recientemente ha reunido tan caras y dolorosas experiencias. Ambas nos han llevado a la actual decadencia generalizada. Con el cúmulo de tan caros conocimientos deberíamos haber logrado una reacción homóloga a la de Alemania o de Japón, luego de sus derrotas estratégicas en 1945. Pero el colapso del “Proceso” fue fatal para nuestro país. El “entrismo de izquierda” alcanzó -desde entonces- el poder y con todo sigilo nos ha llevado a una situación que se hace ya insostenible, bajo dirección del Foro de San Pablo, en las últimas etapas.
La difícil y compleja crisis que atraviesa el proceso pseudo-revolucionario subcontinental -por la grave situación que viven los países que lo impulsan- ya fuere en nuestra Patria como en la región, si bien abre una ventana de oportunidad para superarlo, también radicaliza a sus actores -abiertos o encubiertos- y ello amenaza con el regreso de la violencia. La oportunidad de los argentinos para el “cambio de rumbo” se da a fines del año en curso y ésta podría ser la última oportunidad para las presentes generaciones.
Si el soberano no toma conocimiento de las profundas causas de su decadencia y de los presentes riesgos y amenazas a la Seguridad Nacional, actualmente descontrolados, el “cambio de rumbo” se hará imposible. Hasta el presente, vamos en camino a la auto-destrucción, inconscientemente. Para tratar las causas de nuestra decadencia -que se ha acentuado en las últimas décadas- nos remitimos a la página web del IEEBA (4) y (5). Y para difundir la naturaleza y modalidad de los riesgos y amenazas a la Seguridad Nacional en curso, desarrollaremos los siguientes puntos.
La “modalidad” de la presente guerra mundial.
Terminada la posguerra fría -1991/2001- período caracterizado por diversas opciones estratégicas -“optimistas, pesimistas o realistas”- en el Norte desarrollado y una “gran confusión” en la dirigencia del Sur subdesarrollado, las teorizaciones cedieron paso a las nuevas modalidades de conflictos y guerras que proliferaron espontáneamente, en las más diversas regiones del orbe.
En el mundo desarrollado se reaccionó rápidamente y las “transformaciones” conceptuales y orgánicas continúan abiertas, en permanente debate y reorganización. En nuestra región iberoamericana, desde principios del nuevo siglo se reinició -con el ascenso del precio del crudo- el proceso revolucionario paralizado por la implosión soviética, que pasó a ser conducido por el Foro de San Pablo -que reúne a estalinistas y socialdemócratas-, en alianza estratégica con los epicentros de violencia del Gran Medio Oriente y Asia, vía Caracas.
Las modalidades con que se manifiesta esta guerra mundial cubre una amplísima gama de variantes, según los diferentes objetivos que se persiguen en diversas y distantes áreas en las que se desarrolla, compartiendo en cambio características generalesy la conformación de los actores-directores complejos -“los enemigos sin rostro”- con los que se enfrenta hoy Occidente (6).
En nuestra querida Patria Argentina se vive de espaldas a esta conflictiva situación internacional. Carecemos -por Ley- de planeamiento estratégico, de inteligencia estratégica y además, de objetivos políticos. El cuasi-Estado remanente no cumple mínimamente con su primaria responsabilidad -su razón de ser- la Seguridad Nacional.
Ante ésta dramática escena, la dirigenciacalla, de rodillas ante una “vaca sagrada”: la política de derechos humanos, conducida en el subcontinente por el Foro de San Pablo que reúne a las diversas vertientes del comunismo internacional.
A la vez la ciudadanía -el electorado- ya llamada a las urnas, carece de una mínima información referida a los riesgos y amenazas estratégicos presentes, envuelta en elaboradas falacias -más conocidas como “relatos”–mientras se avanza hacia el caos social y al Estado Fallido. Nuestro propósito es brindar, en éstas líneas, una información mínima al respecto, a pocos meses de las elecciones presidenciales.
Es el Soberano -el Pueblo- quien debe salvarse a sí mismo. Vivimos en una República y el“electorado es elmandante”.
Nociones básicas acerca de la GH (7) (8) (9).
Frente a la evidente superioridad militar convencional de Occidente -al comenzar el siglo XXI- su sorpresivo enemigo “no occidental” desarrolló formas de empleo de fuerzas orientadas a la explotación de sus “debilidades”, en particular las de carácterno militar, que apuntan fundamentalmente a los campos de la representación cognoscitiva y al tono moral de la población. Así lo hemos visto en las agresiones del Hizbollah en el 2006 y del Hamas, en el 2014.
Thomas Huber -historiador- describe en 1996 a éste nuevo fenómeno como el combate coordinado de fuerzas regulares -convencionales- con irregulares -no convencionales- y lo conceptualiza como “guerra compuesta”. Advierte que estas fuerzas, que actúan bajo mando unificado de modo coordinado y cohesionado, nunca lo hacen fusionadas en el combate y advierte que proporcionan ventajas no igualables por fuerzas convencionales que operen en soledad. Éste concepto nos recuerda a la “guerra de zapa” que instrumentó el Br Grl San Martín en la Campaña Libertadora, o bien las ideas expuestas por Clausewitz y K. Holsti, hace años, que comentamos en el año 2011 en un trabajo anterior y que citamos a continuación (10):
“Señala Raymond Aron, en “Pensar la Guerra”[1], que al final de sus días Clausewitz comenzó una revisión de su monumental obra[2], puesto que descubrió, en el plano del concepto, lo que jamás había comprobado en el campo de batalla. Ese descubrimiento giraba en torno a una modalidad de combate distinta a la que él había reducido abstractamente como “duelo”, es decir, el enfrentamiento por aniquilamiento entre dos ejércitos pertenecientes a sendos estados nacionales. El descubrimiento giraba en torno de lo que hoy se denomina “guerra asimétrica”. Quedaba sobrepasado el conflicto del “fuerte contra el fuerte” y emergía -con toda su crudeza- la posibilidad del enfrentamiento entre un fuerte (defensivo) y un débil (ofensivo)”.
[1] Aron Raymond. “PENSAR LA GUERRA”, Instituto de Publicaciones Navales, Buenos Aires, 1988.
2 V. Clausewitz C. “DE LA GUERRA”, Editorial Océano, Buenos Aires, 1958.
………………..
“Éste tipo de amenazas ha proliferado como consecuencia del desplome del sistema bipolar de la guerra fría y el ingreso a una nueva etapa de la civilización. Los combatientes de antiguos bandos revolucionarios han devenido en bandas criminales, equipadas con elementos de tecnología satelital que les permiten constituirse en nodo de una red mayor, en la que circulan las diversas actividades del nihilismo posmoderno: guerrilla, narcotráfico, tráfico de armas, guerra en la infosfera, contrabando, tráfico de órganos, tráfico de niños, esclavismo, secuestros extorsivos, tráfico de animales exóticos, tráfico de piedras preciosas, terrorismo islámico, etnicismo genocida, etc.”.
……………….
“El profesor emérito de la Universidad de Vancouver -Columbia Británica- Kalevi Holsti desarrolló la teoría de las guerras de la ´tercera clase’. La importancia de la misma no obsta para plantear una modificación del cuadro legal precedente, cuyas razones de validez no objetamos. Sin embargo, entendemos que el nuevo concepto de guerras de la ‘tercera especie´, amerita la apertura del marco de comprensión y el desarrollo de su conceptualización, búsqueda y descripción”.
Los Cnl(s) chinos Qiao Liang y Wang Xiangsui -en 1999- denominaron “guerra sin restricciones” al empleo lo más amplio posible de todos los medios para oponerse a un enemigo tecnológicamente superior. El gobierno de la nueva superpotencia los desautorizó, pero sin duda los Cnl (s) están cubriendo -por el momento- el actual desequilibrio estratégico chino, frente a eventuales desafíos.
Es en el año 2005 en que aparece por primera vez la denominación de GH, en un artículo de Mattis y Hoffman: “Future Warfare: The Rise of Hybrid Wars”. Conceptualizaban a ésta guerra como una “combinación de tecnologías y tácticas que permitieran obtener una ventaja sobre su adversario”. Esta combinación innovadora combina capacidades regulares e irregulares, en rápida transición, a los efectos de obtener resultados estratégicos. Para estos autores las “debilidades” y “vulnerabilidades” que evidenciaba Occidente, eran:
La alta sensibilidad de la opinión pública, en tiempos “pos heroicos”.
El eventual número de bajas civiles.
El alto costo de las operaciones militares.
El modo en que finalizaban las operaciones militares -victoria/derrota-.
Apoyándose en éstas debilidades y vulnerabilidades, los enemigos de Occidente -estatales o no estatales- diseñaron tácticas que permitieran eludir la superioridad tecnológica, permitiendo la paridad o aun la superación del más fuerte, explotando:
Poseer mayor número de población y territorio en el espacio donde se operaría.
Poseer una asimetría favorable en la importancia de los intereses, de los objetivos de guerra, en el nivel de “determinación” y “resolución”, en la voluntad ante los riesgos y en la entereza para soportar bajas.
A estas ventajas asimétricas hay que sumarle una determinante -que la dirigencia argentina no percibió ni percibe en nuestra guerra contrarrevolucionaria reciente- : la ausencia de restricciones políticas y culturales por parte del agresor.
Hoffman (11) -en el 2007- apuntó que la búsqueda de la oportunidad estratégica -en las guerras híbridas-, se aparta de los conceptos clausewitzianos tradicionales -la búsqueda de la decisión a través de un centro de gravedad- y contrariamente se busca hacer difuso al conflicto, sin darle relevancia al choque.
Lasica (12) -en el 2009- agrega que EEUU ha enfrentado a la GH con su tradicional principio “jominiano” de quebrar la voluntad de lucha del enemigo y así hafracasadoen Iraq y en Afganistán, como le ocurrió también a los israelíes frente al Hezbollah -2006- y el Hamas -2009 y 2013-.
Valensi y Brun (13) -en el 2010- teorizaron que -en el campo táctico- la GH integra a los siguientes componentes:
Capacidad de supervivencia de las fuerzas empeñadas, a través de:
Deliberada confusión entre instalaciones militares y civiles.
Llevar el combate a zonas pobladas de alta densidad, con alta presencia de medios de comunicación.
Amplia diversidad de armamento liviano -antipersonal, antitanque, antiaéreo, y cohetes tierra-tierra-.
Elementos operacionales especializados y terroristas suicidas.
Métodos imponderables de terrorismo y guerrilla.
Armas portátiles, sencillas, de bajo costo y alto rendimiento y penetración que sean:
De difícil localización y gran disponibilidad.
Que permitan gran número de bajas civiles y militares.
Explosivos de distintos tipos.
Atentados suicidas como componente central, con empleo calculado para condicionar el comportamiento político del enemigo, con gran repercusión mediática. Transmitir percepciones de fracaso.
Crear las narraciones -“relatos”- que favorezcan al más débil.
Empleo intensivo de los medios de comunicación para el esfuerzo de propaganda sobre el público local, el enemigo y el internacional, con la intención de socavar la legitimidad de las operaciones militares, modelar las agendas, entregar interpretaciones alternativas y minar la fortaleza moral del enemigo.
El público local deberá percibir que la acción armada le favorece, al igual que en las lejanas retaguardias del fuerte alcanzadas por las narraciones propias, del enemigo y de los independientes.
El nuevo “centro de gravedad” está en las percepciones desfavorables para el enemigo, que desmovilice su voluntad de vencer y en lograr la confianza del público propio.
Obligar a que el combate se desarrolle “en contacto”, intentando soslayar así las ventajas tecnológicas del enemigo.
Desarrollar tácticas activas y pasivas para atemperar la supremacía aérea del enemigo.
Fleming (14) -2011- define a ésta nueva modalidad de la guerra, así:
“Un actor de GH se caracteriza por tener un mando y control descentralizado, por realizar actividades militares y no militares distribuidas, por combinar acciones tradicionales, irregulares, terroristas y métodos criminales disruptivos, por explotar las condiciones ambientales operativas complejas y por operar con intención de sacrificio el tiempo y el espacio con el fin de lograr una decisión por desgaste”.
Según éste autor, los actores de la GH interrelacionan estrategia y táctica de manera asimétrica y sin restricciones, fuera de las costumbres militares y de los límites culturales, sin ataduras de ninguna especie como las que ha tenido la guerra convencional. El actor híbrido pretende abrumar al enemigo occidental sobre el terreno, con una variedad de imponderables que lleven a la derrota o a la retirada.
Estamos en presencia de un retroceso acelerado y brutal hacia la barbarie, que la civilización moderna y contemporánea ya había superado. Éste cambio de paradigma del nuevo enemigo posguerra fría, encuentra a los argentinos estratificados en el pasado y con la política de derechos humanos como “cepo” que impide mirar hacia el futuro.
He allí la causa central de la inseguridad e indefensión nacional que padecemos.
La Revolución de los Asuntos Militares -RAM- y la GH (6).
En varios artículos publicados por nuestro Instituto (3) hemos citado y descripto a la RAM. Nuestro propósito, en éste punto, es relacionarla con la GH.
Es muy conocida una antigua expresión que dice: “políticos y militares se preparan siempre para la guerra que pasó”. Es así. Existe una natural tendencia a permanecer en el “statu quo” establecido. A ella la conocemos como el “quedantismo”, frente al “reformismo”. Los reformistas que no tengan en cuenta las fuerzas inerciales que sostienen que “todo está bien”, se encontrarán con el fracaso de su intento.
Ahora bien, en los tiempos que corren -en las últimas cinco o seis décadas- la necesidad de evolucionarse haacelerado, pues la civilización del conocimiento así lo exige. Esa evolución es una necesidad de continua y abierta adaptación de las organizaciones a los cambios de “la naturaleza de las cosas” y a los cambios situacionales posguerra fría:
emergió la primera globalización planetaria -1989/1991-,
se inició el movimiento tectónico que provoca los cambios geopolíticos -un nuevo mapa político y estratégico mundial- aun no consolidado, y
se aceleró y generalizó el ingreso de numerosos actores internacionales a la civilización posindustrial -la etapa de la civilización del conocimiento-. Surgía una nueva forma de producir y una nueva forma de hacer la guerra. La situación se hizo compleja.
Como respuesta a los cambios citados, surgió la RAM, dando lugar a la innovación tecnológica, organizativa y doctrinal. Inicialmente se dio lugar a la innovación tecnológica, pero la aparición de la insurgencia luego de operaciones convencionales exitosas -tal el caso de las guerras de Iraq- demostró que ésta era insuficiente. Se hizo necesaria la innovación organizativa y doctrinal. Estos pasos han sido sucesivos y tomaron el nombre de Reforma Integral -RI- y es cuando los estrategas teóricos introducen el neologismo GH.
Los citados autores, Hoffman y Huber, tienen diferencias en la conceptualización de “guerra compuesta” y GH. El primero plantea que es “compuesta” cuando las fuerzas convencionales y las no convencionales actúan por separado, -estas últimas desgastan y las convencionales explotan esa situación- y que es “híbrida” cuando operan como una sola fuerza que ejecuta operaciones regulares e irregulares. Ambos coinciden en el potencial que tiene la combinación de las dos modalidades en las futuras guerras.
En conclusión, los diferentes enfoques que hemos citado más arriba acerca del concepto de GH nos permiten expresar que éste queda comprendido por el término más amplio de “guerra irregular”, que abarca al accionar no convencional y/o asimétrico.
Posición adoptada por países y organizaciones internacionales ante la conceptualización de la GH y la situación argentina.
EEUU. Es el país donde se origina y se debate con mayor intensidad la expresión GH. Obviamente, la superpotencia militar orienta teóricamente a los aliados occidentales. Fleming, en el 2011, apunta que la expresión no es aun empleada oficialmente por el Departamento de Defensa, pero que la noción híbrida surge en los documentos de planificación estratégica, reconociendo la mayor complejidad operativa, pero no el nuevo concepto, lo que podría frenar el dinamismo de las doctrinas combinadas.
Hay un reconocimiento -en la comunidad militar estadounidense- de la necesidad de organizaciones más flexibles y adaptables, pero pareciera que intelectualmente están estancados frente a las amenazas híbridas. Así es que la Oficina de Responsabilidad Gubernamental ha informado en Septiembre de 2010:
Que el Dto. de Defensa no ha definido al término “hybrid warfare”, por no considerarlo una nueva forma de hacer la guerra.
Que el término “hybrid conflict” incluye todos los elementos de las “full spectrum operations”. En consecuencia, definir lo “hibrido” hace correr el riesgo de omitir elementos claves o desconocidos.
Que el término “híbrido” describe mayor complejidad -que exige respuestas adaptativas y flexibles- pero no se corresponde a una nueva clase de guerra.
Que se reconoce la proliferación del término, pero no existe aún una definición formal del mismo.
Que en lugar del término “híbrido” -o además de éste- se emplea normalmente el de “full spectrum operations”.
Que aunque el término aparece en documentos de planeamiento estratégico, éste no se ha incluido en la doctrina.
En conclusión, la comunidad militar de la superpotencia tiene dudas y una respuesta ambigua a las presentes condiciones de los nuevos teatros de operaciones. Sin duda que esta actitud exige profundizar -sin demora- los análisis de las nuevas situaciones que ya están planteadas.
La OTAN. El último concepto estratégico aprobado por los Jefes de Estado de la Organización, en el año 2010, dice:
“El compromiso de la OTAN es el de disuadir y defenderse de cualquier amenaza de agresióny de los desafíos de seguridad emergentescuando estos supongan unaamenaza a la seguridad fundamentalde los aliados, individualmente o de la Alianza en su conjunto”.
La expresión “cualquier amenaza” abarca al extremismo ideológico, al terrorismo, a las actividades ilícitas transnacionales, al tráfico de armas, de narcóticos y de personas, a los ataques cibernéticos y a otras amenazas tecnológicas y ambientales. (Es oportuno aclarar que la legislación argentina establece que estas reales amenazas estratégicas son meros delitos comunes, bajo responsabilidad policial). El concepto estratégico de la OTAN -aprobado en el año 2010- es indudablemente genérico e incompleto. Pero es lo que admite una alianza tan numerosa y diferenciada como es la OTAN.
En conclusión: la OTAN reconoce la necesidad de reorganizar sus instrumentos militares para enfrentar los nuevos desafíos, pero ante la improbabilidad de un acuerdo político, retiene activa a la RI y continúa estudiando la evolución de la guerra, que exige incorporar elementos civiles en el planeamiento militar y ello aun no ha sido totalmente solucionado.
La reorganización de las Fuerzas Terrestres -FFTT-.
Estos conceptos “híbridos”, que aun no han sido incorporados como doctrina por los países centrales -aunque se los reconoce como válidos- están desarrollando nuevas organizaciones experimentales que probablemente se incorporarán a las operaciones en el corto plazo, ante la complejidad de las situaciones que se están presentando en el Gran Medio Oriente y en África.
La paradójica lógica de la guerra -“si quieres la Paz, prevé la guerra”- exige, desde tiempos de paz, pasando por las crisis, los conflictos armados y las guerras internas o internacionales, estar preparados para enfrentar el amplio espectro del conflicto que nos presenta el amanecer del siglo XXI. Ello exige establecer los efectos sinérgicos a afrontar, para accionar coordinadamente en las acciones simétricas y asimétricas. La caracterización orgánica central de las FFTT será su flexibilidad y adaptabilidad a las amenazas cambiantes. La responsabilidad conceptual, recaerá en los niveles político-estratégicos: poder ejecutivo, EMCFFAA y los Cdo(s) de Áreas Estratégicas.
El desafío que se plantea a los planificadores es la de lograr la combinación equilibrada -en el campo táctico- de armas de gran poder de destrucción a distancia, con elementos tradicionales y medios de comunicación para operaciones sicológicas incardinadas con los niveles superiores. En el nivel de las organizaciones tácticas, será fundamental la integración -a nivel Batallón y superiores- de:
Elementos de operaciones especiales,
Sistemas de armas de alto poder destructivo,
Elementos especializados de Inteligencia -con acceso satelital-,
Elementos de comunicación en red con los escalones superiores,
Medios de operaciones sicológicas, y
Elementos de comunicación local.
El Hizballah y el paradigma de la GH.
Un poco de historia: El Hizballah -Partido de Dios- nació en 1982., como escisión de las milicias chiitas de Amal. Desde su origen se ha mantenido en guerra con Israel. En 1989 se firmaron en Taif -Arabia Saudita- los acuerdos de paz de la guerra civil libanesa, que permitieron al Hizballah el derecho de permanecer armado.
Desde entonces se mantuvo en guerra -con apoyo iraní- con las fuerzas israelíes que ocupaban el Sur del Líbano. A lo largo de los años 90 su rendimiento operacional fue mejorando dadas las reformas orgánicas y tácticas que impuso la conducción del líder Hassan Nasralah. Se abandonaron las inmolaciones, dando paso a tácticas cada vez más elaboradas.
A fines de los ‘90 Israel se retira -unilateralmente- del Sur del Líbano. A partir de entonces la frontera fue el escenario de las actividades violentas de esta organización, frente a las FDI -Fuerzas de Defensa de Israel-. El objetivo de Nasralah era el de superar la imagen de una mera milicia guerrillera y erigirse en un movimiento de resistencia nacional libanesa, bajo el lema “Pueblo, Ejército y Resistencia”.
Guerra de 2006: El 12 Jul 06, un destacamento del Hizballah ingresó a territorio israelí y emboscó a una patrulla de las FDI. -Técnicamente éste es un “incidente provocado”, como lo fue el del “Endurance” frente a los chatarreros de Davidoff, en Gritviken, en 1982-. Como consecuencia de esta acción murieron tres soldados israelíes y fueron “secuestrados” otros dos. Israel reaccionó con un ataque aéreo a todo el territorio libanés, entendiendo que ello forzaría al gobierno de Beirut a desarmar al Hizballah. Se había iniciado así un escalamiento hacia lo se conoce como la “Guerra de los Treinta y tres Días”.
Los blancos de la Fuerza Aérea fueron los depósitos de cohetes de la organización y aquellos de mayor importancia que llevaran a la retirada del Hizballah del Sur del Líbano. El efecto de estos ataques aéreos fue inverso. Las bajas civiles y la destrucción de la infraestructura del país impulsaron el rechazo de los libaneses, apoyados por la comunidad internacional.
Tras éste fracaso, el FDI reocupó el Sur del Líbano y también fracasó, provocando la admiración de los observadores militares acostumbrados a los resonantes éxitos israelíes en operaciones de contrainsurgencia en Gaza y Cisjordania.
La Resolución 1701 del CS de la ONU, logró el alto el fuego. El consenso de la comunidad militar, acerca de la eventual derrota israelí, entendió que su factor principal fue el de confiar la victoria a la primacía del poder aéreo, a expensas de la maniobra terrestre, con el fin de ahorrar vidas. El Hizballah sorprendió con una evolución inesperada en sus tácticas y con la adquisición de nuevas tecnologías. De una fuerza guerrillera pasó -en pocos años- a una cuasi-convencional. Estudió las tácticas del enemigo y descubrió sus limitaciones. Adaptó su comando, su control, la organización del terreno y los procedimientos de combate, para aceptar el combate aéreo y terrestre.
El Hizballah desarrolló nuevas tácticas defensivas -para retener sus ciudades- y ofensivas -contra los blindados incursores, lanzamiento de cohetes y operaciones con tropas especiales en la profundidad del territorio israelí-. Llama la atención la forma en se preparó -durante años- el terreno donde se operaría. Construyeron una amplia red de refugios subterráneos y depósitos de munición. Bloquearon la aproximación del enemigo en las avenidas principales de manera de dispersar a los mecanizados y esperarlos en “zonas de muerte”, demorando el avance mientras se ganaba tiempo para el empleo de los cohetes de largo, mediano y corto alcance, coordinado con las incursiones de las tropas especiales. Todo esto fue posible por la especial capacitación de comando y control de las fracciones tácticas, a nivel compañía.
Así fue como el Hizballah se erigió en el paradigma de la GH. Lo hizo explotando vulnerabilidades del enemigo, combinando acertadamente procedimientos convencionales con los no convencionales -sin limitaciones- y realizando una eficaz acción psicológica sobre la población enemiga y propia.
Sorprendieron con las innovaciones tecnológicas logradas en armamento antitanque, drones y guerra electrónica. Las operaciones fueron seguidas en el mundo entero por televisión, en tiempo real. Los efectos logrados fueron:
El apoyo de la población libanesa al Hizballah.
El alto rendimiento mediático de los limitados éxitos tácticos. Minaban la moral israelí y levantaban el prestigio interno e internacional de la Organización.
Con éxitos tácticos limitados y bajas superiores a las del enemigo, el Hizballah lograba un éxito estratégico y político significativo con una alta sensación de victoria.
Aun cuando las fuerzas israelíes no hayan sido derrotadas, es claro que no lograron ninguno de los objetivos que se le había impuesto. Contrariamente, la Organización se posicionó frente a la población libanesa como una fuerza de disuasión efectiva frente a Israel. Si bien no prevalecieron, negaron la consecución de los objetivos al enemigo y optimizaron el apoyo de la propia población. El Hamas, en el pasado verano del 2014, replicó -dentro de las limitaciones de espacio del área de Gaza- el modelo empleado en la “guerra de los treinta y tres días” por el Hisballah.
En conclusión:
El actual enemigo de Occidente ha desarrollado un tipo de guerra que explota sus vulnerabilidades, particularmente el relativismo moral de su población y las inercias del pensamiento militar.
El término GH acuñado por Mattis y Hoffman en el 2005 está hoy en pleno debate en la comunidad académica especializada. En general se acepta como concepto de GH, el siguiente: “GH es aquella que emplea los medios simétricos y asimétricos coordinados en tiempo, espacio y propósitos, para alcanzar un objetivo final, uniendo los niveles de conducción estratégico, operacional y táctico”.
Quien emplea la GH lo hace de modo asimétrico y sin restricciones. En el nivel táctico emplea operaciones independientes y simultáneas -regulares e irregulares- coordinadas en tiempo, espacio y objetivos, con operaciones del nivel superior que se orientan a la cultura del enemigo y desafían a las normas de la guerra convencional.
La gran superioridad militar convencional de Occidente llevó a éste nuevo enemigo innominado a cambios que parecieran una contra-RAM. Si empíricamente se confirmara dicha doctrina, Occidente deberá asumir severoscambios políticos, sociales y militares, para enfrentar a ésta guerra en su azarosa evolución. Y éstos aspectos son sumamente importantes.
El Departamento de Defensa de los EEUU oficialmente no reconoce aun la existencia de una GH, pues entiende que sus FFAA están en aptitud de enfrentar los retos presentes. Pero sus pensadores y planificadores siguen profundizando su análisis, permanentemente, ante el incremento de actores armados no estatales frente a las FFAA convencionales.
La OTAN ha estudiado a la GH y reconoce su existencia, pero dada su complejidad en la toma de decisiones ha preferido recurrir a la RI – experimentada parcialmente en Afganistán- que incorporó al elemento civil en el planeamiento y en el comando de las operaciones.
En la Argentina hay una total despreocupación por los temas que hacen a la Seguridad Nacional. Las leyes que rigen fueron votadas en tiempos de la guerra fría, hace casi tres décadas. La reglamentación de la Ley de Defensa llegó quince años después de su promulgación, para profundizar sus gravísimos desconceptos. El país somatiza la directa consecuencia de dichas leyes perversas, con un estado de inseguridad e indefensión que es, en el 2015, la preocupación central de la población. El número de muertos -en las últimas tres décadas- sigue en continuo ascenso. La dirigencia nacional carece del coraje cívico necesario para enfrentar la “política dederechos humanos”, en manos comunistas, empleada con éxito como instrumento de retención del poder. La mencionada legislación de inseguridad, es garantía de la continuidad de la citada “política”.
En los países centrales de Occidente hay cierta resistencia al reconocimiento del riesgo estratégico creado por la GH. Sin embargo la RAM y la RI apuntan a innovaciones -que aun no se han cerrado- en la dirección correcta. En el corto plazo veremos que continuarán las reorganizaciones, allí donde hay responsabilidad y conocimientos. En nuestra Argentina, en un año electoral, no existe ningúnindicio de reacción acertada. Abundan las palabras huecas de los diletantes, que encubren así sus carencias intelectuales específicas. No hay conciencia en la sociedad que actual guerra mundial está también globalizada.
Nuestro país carece de la más mínima “política comunicacional para la Defensa”. Sin embargo -ante un cambio de orientación política a fines del 2015- sería indispensable que el nuevo gobierno se concientizase y concientizara a la opinión pública acerca de la complejidad de los conflictos que tenemos ya presentes y por delante, en el corto plazo. “La mejor defensa de la ciudad no está en las piedras de sus murallas, sino en cada uno de sus habitantes”.
Recientemente hemos visto la adaptación al siglo XXI –en Estados seculares– de la “maskirovca” soviética (15) en Crimea y Ucrania. Hubo allí una combinación de operaciones encubiertas, apoyo a grupos locales, empleo de contratistas militares privados, criminales y fuerzas regulares operando coordinadamente y una maquinaria propagandística masiva…que llegó a insinuar el empleo nuclear; pero este es el tema del próximo punto. Cerraremos el punto VII con una expresión muy acertada del Dr. Pedro Sánchez Herráez (16):
“Pero la guerra no enfrenta solo fuerzas militares; enfrenta las voluntades de grupos humanos y, si bien, con todos los matices que se quieran señalar, vivimos en una era de relativa paz, la GH no es una nueva guerra…es la guerra de nuevo”.
¿Híbrida…con derivación nuclear?
Durante la guerra fría funcionó la mutua destrucción asegurada. Es decir, el poder nuclear retuvo la mutua disuasión y su consecuencia fue la “Pax del Terror Nuclear”. Ello no fue óbice para que la probabilidad del empleo táctico nuclear se abandonara totalmente. La duda -en su momento- acerca del compromiso americano para defender a Europa frente a una embestida soviética, con empleo nuclear sobre Alemania, llevó a De Gaulle a crear su propio arsenal nuclear y a salir de la OTAN.
Terminada la guerra fría el arsenal nuclear parecía perder la probabilidad de empleo, pero la situación reciente en el cambio de gobierno de Ucrania, con la intervención de la OTAN, pareciera que despertó el ancestral sentimiento de inseguridad fronteriza de los rusos y con él, dada la situación de deterioro de sus fuerzas terrestres, la posibilidad-probabilidad de recurrir a su potencial nuclear.
Como lo expresamos en el punto VII., a lo largo de nuestro verano austral hemos observado -con alguna sorpresa- que una variante de la GH se estaba desarrollando entre estados seculares, en la frontera este de Ucrania y en Crimea. El recurso de volver a recordar la existencia del arsenal nuclear ¿fue una reacción rusa por impotencia?; ¿desde la GH, se deslizará Rusia a la posibilidad de empleo nuclear? Hasta ahora a esa probabilidad se le asignaba solamente a la irresponsable e ilimitada acción del terrorismo no estatal, pero el discurso de algunos altos funcionarios rusos y estadounidenses -entre otros los que citaremos a continuación- indican una ampliación de las probabilidades supuestas (15):
“…Un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso recordó al mundo este hecho, en un comentario a la salida de los medios de comunicación rusa Interfax. Al hacer referencia al derecho de Moscú para desplegar armas nucleares en Crimea, Mijail Ulianov, Jefe del Departamento del Ministerio de Control de Armas, dijo: ´Yo no sé si hay armas nucleares allí ahora. Yo no sé nada de ningún plan, pero, en principio, Rusia puede hacerlo’”.
Contemporáneamente, en EEUU el Almirante William Gortney, Comandante del Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte -NORAD-, advirtió al Congreso -en un testimonio escrito- acerca de la amenaza planteada por los bombarderos y misiles rusos:
“…los bombarderos pesados rusos sobrevolaron patrullando más veces fuera del área en el 2014, que en cualquier otro año, desde la Guerra Fría. También hemos sido testigos de una mejor interoperabilidad rusa entre la aviación de largo alcance y otros elementos de las fuerzas armadas, incluyendo las aéreas y marítimas, todas ellas plataformas de recolección de información de inteligencia posicionadas para monitorear las respuestas del NORAD”[3].
“…Rusia está avanzando hacia su objetivo de despliegue de largo alcance de misiles de crucero convencionalmente armados, con mayores distancias de lanzamiento para mantener alejados[4] del peligro a sus bombarderos pesados, submarinos y fuerzas de superficie. Si estas tendencias continúan, con el tiempo NORAD se enfrenta a un mayor riesgo en nuestra capacidad para defender el norte de Estados Unidos contra una incursión aérea o marítima rusa y las amenazas de sus misiles de crucero.”
NORADes elacrónimo de North American Aerospace Defense Command. (Mando Norteamericano de Defensa Aeroespacial). Se trata de una organización conjunta de los EEUU y Canadá, que provee la defensa y control aéreo a toda Norteamérica. Se inició en 1958 bajo el nombre de “Mando Norteamericano de Defensa Aérea” (North American Air Defense Command). Desde 1963 la principal instalación del NORAD está en el Estado de Colorado. Mientras que los términos “NORAD” y “Cheyenne Mountain” son usados indistintamente en el lenguaje común, lo cierto es que NORAD es el nombre de la unidad, mientras que Cheyenne Mountain se refiere a las instalaciones del cuartel general.
4. Stand-off, en el original.
Éste deslizamiento ruso en dirección a la amenaza nuclear, es una clara manifestación de la hipersensibilidad de Moscú por la aproximación de la OTAN a Ucrania, luego de la caída de su gobierno pro-ruso. La OTAN se acerca peligrosamente a la frontera de la “Madre Patria Rusa” y los dramáticos recuerdos de Napoleón incendiando Moscú, antes de su dolorosa retirada, o de los blindados de Hitler detenidos por el “GeneralInvierno” a treinta Kms de Moscú, están presentes hoy en el Kremlin.
En tiempos del presidente Clinton Rusia se había incorporado al G7 y así emergió el G8. Un veedor ruso fue invitado a participar en ciertas reuniones de la OTAN en Bruselas. Pero aquellos días han quedado atrás. El presidente Putin no concurrió recientemente a una serie de reuniones internacionales y el aire helado de la estepa llegó a Europa, enfriando las relaciones mutuas por la torpe audacia del avance Occidental hacia el Este. Y esto acontecía en tiempos del agravamiento de los combates del nuevo Estado Islámico -EI- en las fronteras de Siria, Irak e Irán, donde se sabía de la existencia de una solapada e inentendible logística que provenía desde Turquía, país que revista en la organización atlántica. De ésta manera, ante la posibilidad-probable de que el primitivo fundamentalismo que inspira al terrorismo global adquiriera -y eventualmente empleara en un futuro no muy lejano- “bombas y/o minas sucias”, en combinación con acciones típicas de la GH, se ha agregado últimamente la posibilidad-probable del regreso a la amenaza nuclear entreestados seculares, en un reverdecer de lo que el periodismo llama -sin acierto- una “nueva guerra fría”.
La UE, núcleo originante del Occidente Cristiano, está viviendo una profunda y prolongada crisis, en el ámbito de su cultura. Frente al fundamentalismo islamista y al crimen organizado, somatiza su relativismo identitario, su débil y contractivo sentido de pertenencia y retiene sus aspiraciones hedonísticas. Ésta situación la lleva a cometer graves errores de percepción, en un momento en que Washington se ocupa demasiado de sí mismo y abandona el cumplimiento de sus deberes para con el Imperio Occidental.
Putin, que sufre la actual caída del precio del barril de crudo, ha redoblado su firmeza y se está dirigiendo con palabras muy severas a sus pares occidentales.
Con conocimiento de éste cuadro estratégico propio e internacional -altamente riesgoso- nuestra Argentina –a nivel político dirigencial– ha optado por ignorar nuestros dos “estados de guerra” vigentes -como herencia del siglo pasado-, se ha desarmado unilateralmente y carece de las mínimas previsiones conceptuales, disuasivas u orgánicas, en el ámbito de la guerra mundial que se presenta -en la región- como narcoterrorismo, en acelerada expansión nacional y regional. En un breve lapso -el gobierno- está dando decididos pasos para abandonar su adscripción cultural -naturalmente occidental- para llegar, en muletas, al final del año 2015. Esto es grave y traerá grandes problemas en el futuro inmediato.
Un rígido muro de contención impide el resurgimiento del coraje cívico de los criollos de otros tiempos. Es una “vaca sagrada”: la política de derechos humanos, en manos de los veteranos terroristas domésticos y de interesados y numerosos idiotas útiles, más jóvenes.
La mano tendida a los Castro por Obama -en la presente situación regional- se constituye en un fuerte aliciente para la pseudo-revolución neo marxista iberoamericana. Estaremos atentos al documento de su próximo “Encuentro” en el 2016.
CITAS:
J. Auel. “Cultura, Civilización y Crisis Política”. Verano de 01. www.ieeba.com.ar
J. Auel. “Cultura y Civilización. La Guerra: Continuidad y Cambio”. Dic 01. www.ieeba.com.ar
“Los nexos entre Irán, Hezbollah y los carteles de la droga”. 01 Abr 15. Infobae Digital.
J. Auel. “La larga guerra civil argentina y el actual estado de guerra civil revolucionario”. 09 Jul 13. www.ieeba.com.ar
J. Auel. “¿Cómo salimos de la actual crisis política y estratégica? Ago 14. www.ieeba.com.ar
J. Auel. “El pensamiento estratégico militar en el siglo XXI”. 12 Oct 14. www.ieeba.com.ar
García Guindo, G. Martínez y V. González. “La guerra híbrida: nociones preliminares y su repercusión en el planeamiento de los países y organizaciones occidentales”. Feb 2015. www.ieee.org
Baqués Quesada. “Las guerras híbridas: un balance provisional”. Ene 15. www.ieee.org
Colom Piella. “¿El auge de los conflictos híbridos?”. Oct 14. www.ieee.org
J. Auel, “Democracia, FFAA, Seguridad y Sociedad”. Jul 11. Ponencia en Sgo. de Chile. www.ieeba.com.ar
Hoffman. “Conflict in the 21st century: the rise of hybrid wars”. 2007. Arlington. Virginia. Potomac Institute for Policy Studies.
Lasica. “Strategic implications of hybrid war: a theory of victory”. 2009. Fort Leavenworth, Kansas School of Advances Military Studies. US Army Command and General Staff College.
Valensi y Brun: señalan que el tipo de guerra que encontró Israel en El Líbano (2006) y en la Franja de Gaza (2009), es un resultado claro y desafiante de éste desarrollo doctrinal basado en el aprendizaje de las doctrinas de Occidente, en la interpretación de la realidad en la década de los noventa, desde una perspectiva religiosa, cultural e islámica y de los combates con los oponentes en los campos de batalla del Líbano, Palestina e Iraq, entre otros.
Fleming. “The hybrid threat concept; contemporary war, military planning and the advent of unrestricted operational art”. 2011. Fort Leavenworth, Kansas, School of Advanced Military Studies.
El General Heriberto J. Auel despertó -en principio- curiosidad en mí luego de un mini-debate en un programa de Marcelo Longobardi, cuyo contrincante fue Eduardo Aliverti. Mi impresión fue la de haber sido testigo, incluso desde mi posición neutral en ese entonces (Sin admitir, claro, que haya dejado de serlo)- una conversación adulta. Tiempo después, el 21 de marzo del año 2014, fui testigo de una “Master Class”. en donde el General Auel desplegó su artillería de conocimientos frente a un Ttribunal Criminal Oral Federal Nº1, que proseguía firme en su caza de brujas (Agentes del Estado, que actuaron o no contra el terrorismo de los años 70s)
PrisioneroEnArgentina.com: ¿Cuáles son las contradicciones económicas y políticas elementales en las que caen los procesos populistas en tanto en Argentina como en América Latina? ¿Cuáles son sus tendencias o posibles horizontes? ¿Qué errores está cometiendo el actual gobierno del Ingeniero Macri que lo diferencia o lo une a la administración anterior?
Heriberto J. Auel: Desde mi humilde punto de vista, lo que se designa como “populismo” en Iberoamérica, es en realidad la revolución marxista que se inició en 1959, con conducción unificada y claros objetivos que se mantienen a través de las décadas con un plan de largo plazo que se adapta periódicamente a la evolución de la situación internacional, avanzando sin plazos, mientras los Estados reaccionan de diversos modos, improvisada y aisladamente. Por lo tanto las “contradicciones” que se observan son directa consecuencia del choque de la revolución con nuestra cultura identitaria. La revolución avanza, paso a paso, logrando un proceso de transculturación que ha adoptado el nombre de “progresismo”, imperceptible y sigiloso, para cumplir el mandato gramsciano de “lograr que las clases medias alcancen el comunismo, sin darse cuenta”. Éste proceso es discontinuo. Por ello hay transiciones, cada vez más breves en las que la agresión revolucionaria opera con estrategias de desgaste –fabianas- buscando la ingobernabilidad. Hoy las estamos viviendo en la Argentina, en el tímido pasaje -transición- de una etapa socialista/estatizante, a una liberal/de mercado. El mal uso de los términos construye las falacias -relatos- y confunde a dirigencias con escasa formación política y altamente ideologizadas. ES ÉSTA “CONTRADICCIÓN” LA QUE ORIGINA Y PROFUNDIZA A LA POCO EXLICADA “GRIETA”.
PEA: ¿Hay material humano para desarrollar un debate en el ambiente geopolítico?
HJA: Hay algunas -escasas- personalidades en el ambiente académico capaces de desarrollar conceptos geopolíticos innovadores, pero no se las encuentra en el ámbito de la acción política. Hay historiadores de la Geopolítica, pero escasean los geopolíticos generacionales.
PEA: En los primeros tres años de actuación, no se ve en el mandato de Mauricio Macri -al menos en el área de justicia- los cambios prometidos. ¿Ronzenkratz es el puntapié inicial o simplemente maquillaje para la continuación de Lorenzetti?
HJA: Gobierna una coalición. Algunos de sus componentes principales, hasta pocos días antes de las elecciones de Dic 15 decían: “mi límite es Macri”. Éste sector social-demócrata ocupa hoy ministerios centrales e impide “ciertos cambios”, que esperamos y no llegan, para terminar con el “curro de los DDHH”. El nuevo presidente de la Corte fue un distinguido discípulo de Carlos Nino. Este antecedente indica más una continuación que un cambio. La coalición electoral sirvió para ganar las elecciones, pero tiene grandes dificultades como coalición de gobierno. La crisis cambiaria y en particular la del aborto, las puso en superficie. El “progresismo” es transversal y abarca de ese modo a todo el espectro socio-político.
PEA: En otras oportunidades le consultamos sobre ese líder que guíe los destinos de la República Argentina. Su respuesta siempre fue negativa. ¿Se ve hoy en el ambiente una figura representativa, ese estratega que otros no ven?
HJA: Las crisis traen en sus pliegues la salida de las mismas, pero hasta hoy no se observan líderes alternativos. Los partidos carecen de cohesión doctrinaria y de líderes reconocidos por una mayoría.
PEA: En los últimos años se ha visto -mientras muchos arqueamos las cejas- ciertos comportamientos extraños por parte de gente de las Fuerzas Armadas que parecen deshonestos. Me gustaría que describiera la posición de alguno de ellos. Al pasar, menciono a Roberto Bendini, Hugo Domingo Bruera, Martín Balza, Gerardo Santos Milani…
HJA: Si la “política ha decidido no tener FFAA” -como alguna vez lo he afirmado-, necesariamente los nombramientos recaen en hombres que puedan ayudar a ese designio. Hoy las cosas han cambiado. Los hombres al mando en Ejército, tienen las condiciones personales necesarias para reconstruir a la Institución. Tengo esperanzas. El tiempo y las circunstancias ayudan.
PEA: Yo creo que fue un slogan de campaña, tal vez manufacturado por Jaime Duran Barba, y también considero que la frase fue un abstracto. ¿Qué interpretación tuvo en su momento y cuál es hoy su idea sobre la -ahora- tristemente célebre frase del candidato Mauricio Macri “Conmigo se van a acabar los curros de los derechos humanos…”?
HJA: En parte, he respondido a esta pregunta más arriba. Dentro de la coalición gobernante no hay acuerdo sobre el tema. Es más, algunos de los que son parte del gobierno son los fundadores del “curro” y actualmente, siendo parte de “Cambiemos”, están creando una alianza electoral “progresista” para participar electoralmente en el 2019. La corrupción no es solo económica.
LA CIRCUNSTANCIA ACTUAL INVITA A REFLEXIONAR SOBRE ÉSTE TEMA.
LA NATURALEZA DE LAS COSAS.
¿PORQUÉ NECESITAMOS DETENERNOS HOY EN LA ÉTICA PROFESIONAL MILITAR?
LA CIRCUNSTANCIA ACTUAL INVITA A REFLEXIONAR SOBRE ÉSTE TEMA.
Preliminarmente pretendo plantear la importancia de dar tratamiento al tema enunciado. Es importante pues la crisis de arrastre que nos ha llevado a la actual decadencia, como Nación y Estado, es de origen cultural y político y la circunstancia es oportuna, toda vez que estamos -según promesas oficiales- en las acciones preliminares de la recuperación del núcleo duro del Estado Nación: las FFAA. (1)
A las generaciones de Oficiales de las FFAA argentinas que egresamos en la década 1950/1960 nos tocó vivir, mientras revistábamos en actividad, las crisis socio-políticas más graves del siglo XX que culminaron con las guerras posnucleares -limitada y muy limitada- que hoy, en sus posguerras, retienen a nuestra querida Patria Argentina -mientras nos empeñamos en un nuevo y arduo intento de resurgimiento- en doble “estado de guerra” (2) (3) y en plena inseguridad pública y estratégica, que somatizamos diariamente a través de una fuerte ansiedad colectiva frente al futuro, aun en el de corto plazo.
Las guerras -en la Historia Universal- son anteriores a la existencia de los ejércitos, que recién llegaron cuando lo permitieron los excedentes financieros de las comunidades organizadas. Estos -los ejércitos- siempre fueron medios disuasivos/defensivos frente al agresor eventual o bien, ante una situación crítica interior que conllevara un riesgo existencial y legitimara el empleo de la vía institucional, para retener la sobrevivencia identitaria de la nación.
En manos del conquistador o del revolucionario, las FFAA fueron también empleadas para la perversidad en las relaciones políticas, internacionales o internas. Cuando se agota la comunicación política negociadora entre actores internacionales o internos, la alternativa es siempre la violencia organizada, impulsada por un agresor. En este caso estamos en presencia de una guerra ofensiva, ya fuere internacional o guerra civil -interna-. Ésta última es la peor especie de las guerras, pues su instrumento central es el odio social.
Expresadas estas generalidades conceptuales, volvamos a nuestra situación. Desde 1945, después de la Segunda Guerra Mundial -que finaliza con lanzamientos nucleares en Japón- se inicia la apertura de una nueva rama de la Ciencia Política: la Polemología y una nueva etapa de la Estrategia, la Contemporánea. Reaparecen -desde 1947- “actores agresores no estatales” en el marco interno y externo y la más primitiva modalidad de la acción violenta: el terrorismo. El espectro del conflicto se amplía así, bruscamente, es sus extremos: desde la hecatombe nuclear -en uno de ellos- a las primitivas guerras muy limitadas -en el opuesto- (4).
Al finalizar la Guerra Fría -1989/caída del muro de Berlín – 1991/implosión de la URSS- la disuasión se hace abstracta por carencia de responsabilidad política de los nuevos actores-agresores. Surgen las nuevas amenazas y riesgos estratégicos que la Argentina -aun hoy- legalmente no reconoce, como lo demuestra la legislación de Seguridad Nacional vigente.
La Carta de la ONU y en particular la eficiencia del Consejo de Seguridad para preservar la Paz, ingresan progresivamente en un cono de sombras. El conflicto violento se difumina y generaliza en el orbe, abandona los teatros de operaciones militares y se posa sobre las sociedades, con un número cada vez mayor de “víctimas civiles inocentes” y también de dirigentes políticos y militares “confundidos” (4).
Así llegamos al siglo XXI y a la situación que nos abarca. De las actuales sesenta guerras activas en el mundo, la totalidad de ellas son internas, es decir, guerras civiles que se caracterizan por su tipificación “asimétrica”,“híbrida” o de “séptima generación” como bien lo expresa el artículo de La Nación -“Sin fronteras entre la defensa y la Seguridad”– del 14 Feb 18.
Son las guerras que la Argentina no puede planificar -prever- para evitarlas, por imposición de la vigente legislación de Seguridad Nacional. Esta irracionalidad no es casual, sino consecuencia de las derrotas estratégicas que sufrimos en el siglo XX, aun no asumidas.
Constituye la tremenda paradoja de estas horas: quienes fuimos los primeros en enfrentar a este desconocido tipo de agresión asimétrica sorpresiva -a partir de los años ’60- nos encaminamos ahora a repetir los mismos errores, medio siglo después, como si no nos hubiese ocurrido nada.
El “relato” ha superado a la verdad. La “narrativa” se impuso a través de los medios y de la escuela (5). El pre-juicio domina a la realidad presente y la cobardía permanece ante la pseudo-revolución en retirada, herida pero no vencida.
La mayoría de nuestros vecinos ha reaccionado positivamente ante la evolución acelerada -al ingresar al siglo XXI- del fenómeno “socio-político” guerra. Nuestro país -su dirigencia-, contrariamente, permanece paralizado, confundido y en altísimo riesgo estratégico, frente a una situación que carece de tratamiento público e idóneo por los medios y en particular por parte de los responsables de la comunicación social referida a la Seguridad Nacional. “De eso no se habla”.
Mientras en el mundo desarrollado se vive una constante transformación doctrinaria y orgánica, acompañada por la multiplicación de los presupuestos de Seguridad Nacional, la Argentina permanece de espaldas a esa realidad y a necesidades indiscutibles que la condenan, irremediablemente, a nuevos fracasos (6), si no se recupera el Estado Institucional.
LA NATURALEZA DE LAS COSAS.
Los cambios sorpresivos de la naturaleza del fenómeno guerra, que han llegado con el avance del alto ritmo de evolución de la civilización humana y la creciente crisis cultural de Occidente, no han podido superar -entre nosotros- la explotación estratégica colusiva que nuestros enemigos triunfantes -en el plano político-estratégico- nos han impuesto -a través del Estado- de un elaborado “relato”. Es la homologación de la “purga” que los bolcheviques impusieron a los Oficiales del Zar en 1921, impulsada aquí por el Decreto 158/83, que continúa llevando a centenares de soldados y civiles argentinos a ser condenados ilegalmente con el Código Penal Ordinario, por haber combatido y triunfado en los combates de la guerra contrarrevolucionaria -1974/1989-.
Ambas maniobras -la jurídica y la comunicacional- han “trastocado” la victoria -en combate- de los argentinos e impidieron la creación de una nueva Política de Seguridad Nacional, fruto de la durísima experiencia reciente. Esta ha sido reemplazada por una perversa y falaz política de derechos humanos, unidireccionados.
Prueba de ésta paradójica situación -en las presentes circunstancias- es que a los Cadetes de los Institutos de Formación de nuestras FFAA, no se les puede citar la agresión terrorista-revolucionaria -1959/1989-, sino solamente al “terrorismo de Estado” -1976/1983- bajo supervisión de la UNDEF y por parte de profesores provenientes de “Franja Morada”. Y esto mientras en Azul el JEMGE, al rendir homenaje a los muertos en el ataque al cuartel, expresó todo lo contrario. ¿Puede edificarse sobre la ciénaga del “relato” la personalidad de los futuros oficiales de las FFAA argentinas? ¿Puede existir tanta incoherencia dentro de las Instituciones, en un momento en que se dice que se las recuperará?.
Las guerras en acto -en el mundo entero- siguen siendo fenómenos “lúdicos y agonales” (7) (8)-como en el pasado- pero su naturaleza ha variado. Son de otra “especie”, diría Clausewitz y ellos -los noveles oficiales- inevitablemente -si el Estado no cambia el rumbo- deberán enfrentarlas a su egreso y a lo largo de muchos años, pues no las prevemos y por eso, llegan. Estas nuevas guerras no tienen fácil ni rápida resolución. Nuestra juventud militar ¿será lanzada a combatir -nuevamente- sin previsiones estratégicas y “formados” en las falacias de la política de los derechos humanos?
¿PORQUÉ NECESITAMOS DETENERNOS HOY EN LA ÉTICA PROFESIONAL MILITAR?
Nuestros enemigos -hoy en colusión- en las guerras que peleamos recientemente encontraron -en las posguerras- una “debilidad” en nuestra apertura de la guerra contrarrevolucionaria. El PEN lo hizo por Decreto -que no envió al Congreso- y en él no dictó el concepto “ético – jurídico” que correspondía al empleo de las Fuerzas en el marco interno -la DENAC- (9) y la DEMIL (10). La Convención de Ginebra regula las guerras internacionales y en sus Protocolos II y III, trata la forma de encarar los conflictos armados internos.
Estas normas debieron ser homologadas en el Derecho Nacional, pero no se lo hizo. Esa fue la razón por la cual cada Cte. de Zona tuvo que reemplazar aquel vacío conceptual –deneta responsabilidad política– en la polvareda del combate y establecer sus propias reglas de empeñamiento táctico. Todos ellos se hicieron responsables, pública y oportunamente, de lo que ordenaron durante las operaciones. Éste aspecto ético-jurídico, que es central, ha sido desarrollado detalladamente por el Grl Jorge Apa Ferraro, en su libro “Al gran fraude argentino ¡Salud!” (11)
Aquella “debilidad”, convertida en “vulnerabilidad” por la aguda experiencia coludida de nuestros enemigos, fue explotada a través de una maniobra de pinzas, jurídica y comunicacional, que aun sigue en curso. Tuvo un punto de partida en el Decreto 158/83, complementado por la demonización de las FFAA a través de los medios de comunicación del Estado; desde el mismo Estado que abrió operaciones militares de “aniquilamiento” de modo “defectuoso”, desde el máximo nivel político.
Así las cosas y como consecuencia de éste “trastocamiento” de la victoria táctica frente al terrorismo-revolucionario, en derrota política y estratégica de los argentinos, el país ingresó en una acelerada decadencia que se encamina aun al “Estado fallido”. Sus graves consecuencias están a la vista y en lo que hace a las FFAA, además de su objetivo desarme unilateral y extrañamiento constitucional, se les quitó el fuero militar. Quedaron sin Código de Justicia Militar y de su correspondiente Reglamentación, como principal sustento de la disciplina y del mando militar. Sepamos que somos el único país de la región que sufre semejante despropósito, agravado por los dos “estados de guerra”, como fruto del trastocamiento.
El Jus in Bello -en la Argentina- ha quedado en manos absolutamente legas, como lo están demostrando, hasta el ridículo, los jueces y fiscales de los TTOOFF, en todo el país. Si se entrara en operaciones ¿qué actitud tomarán los futuros mandos operacionales? En sus cuarteles generales ¿estarán los jueces federales y fiscales que acompañen a las tropas de primera línea, para autorizar la apertura del fuego? Tengamos presente que estarán operando según el articulado del Código Penal ordinario y según los principios de la “legítima defensa”. Estos despropósitos, únicos en el mundo, no son solo ignorancia.
En realidad se los ha sancionado -para lograr el “control civil de los militares”- un Jus ad Bellum que, en línea con la legislación de Seguridad Nacional vigentes, niegan por ley la probabilidad de una guerra híbrida, interna. En consecuencia, es muy probable que esa guerra llegue y nuestra derrota está así asegurada, porque está prohibido preverla, por Ley. Como lo expresara Séneca: “Peor que la guerra, es tenerle miedo a la guerra” (13).
No terminan allí las consecuencias del “trastocamiento”. A las FFAA también se les ha quitado el Código de Honor Sanmartiniano y los Tribunales de Honor. Es decir, no solo se han destruido a las FFAA como Instituciones Constitucionales, sino que se ha destruido al SER militar, aquel al que se lo identificaba por su “Honor y su Valor”, y esto también está directamente relacionado con el objetivo de eliminar a las FFAA.
Se está hablando de “re-estructuración”, “reconversión”, “reconstrucción” de las FFAA. Hasta hoy no escuchamos una sola palabra dirigida a lo esencial: la recuperación de la autoestima militar, del espíritu militar, de las Instituciones Militares fundadas en su “Ética Profesional”. Napoleón lo decía en términos sencillos: “Una Fuerza no vale por el número de sus bayonetas, sino por el temple de sus corazones”.Y las burocracias carecen de corazones. ¿Hay alguna “idoneidad” polemológica o estratégica en el ámbito de las decisiones políticas pertinentes? Yo no la observo. Deben ser mis sensores de dinosaurio.
El prostibulario Zaffaroni y la Cte Hebe no están buscando solo la ingobernabilidad. Están anunciando que la pseudo-revolución está activa y que pronto “puede haber un accidente violento”. ¿Así le llama ahora el garantismo -“un accidente”- a un asalto revolucionario violento, que probablemente prevén junto a las mafias de la corrupción, como aliados ocasionales? Y qué hacen nuestros demócratas de cartón. Por lo menos deberían rasgarse las vestiduras, una vez más.
CITAS:
Auel H. J. “¿Cómo salimos de la actual emergencia político-estratégica?. FFAA y Estado Nacional”. Ago 14. ieeba.org
Auel H. J. “La larga guerra civil argentina y el actual estado de guerra civil revolucionaria”. Jul 13. ieeba.org
Auel H. J. “La Política de Derechos Humanos”. Jun 16. ieeba.org
Auel H. J. “La dirigencia argentina frente a los desafíos de la Seguridad Nacional en el Siglo XXI”. Ago 15. ieeba.org
Auel H. J. “El narcoterrorismo, el Estado Nacional, la democracia y las FFAA”. Abr 14. ieeba.org
Auel H. J. “El pensamiento estratégico militar en el siglo XXI”. Oct 14. ieeba.org
Lúdico: Azaroso. Impredecible, pues será consecuencia del choque de voluntades inteligentes.
Agonal: “Perteneciente a lo relativo a los certámenes, luchas y juegos públicos, así corporales como de ingenio”. Diccionario Enciclopédico Salvat. T. I. 8va, Ed. 1957. Aplicado al concepto guerra, el término indica que la Política -responsable de la apertura y el cierre de una guerra- es la que debe dictar a las FFAA “lo relativo” a las normas -éticas- a las que deben ajustarse. Estas, a su vez, emergen de la cultura de la Nación. De estos conceptos se derivarán las “reglas de empeñamiento” a nivel táctico inferior.
DENAC: Directiva Estratégica Nacional.
DEMIL: Directiva Estratégica Militar.
Apa Ferraro. “Al gran fraude argentino ¡Salud!”. Ed. Edivérn SRL. May 17.
Estado de Guerra: (O “estado de beligerancia”).“Situación que se plantea a una nación como eventual ruptura de hostilidades a través de un conflicto armado con otra nación o internamente, en el supuesto de una eventual guerra civil”. Diccionario Militar. T. II. Cabanellas de Torres y Alcalá Zamora. Bs. As. 1962. Argentina cumple con ambas situaciones: frente al RU, en razón de su permanente negativa de negociar la soberanía de las Is. del Atlántico Sur y frente al terrorismo revolucionario, pues éste retiene aun su actitud hostil, ratificada permanentemente por sus organizaciones y representantes actuales, con palabras y hechos.
J. Auel. “Relaciones Cívico Militares, la necesaria reconstrucción del Estado y de imprescindible Seguridad Nacional, Regional y Continental”. May 13. www.ieeba.org
“Uno no puede librar una guerra en la actualidad sin el apoyo de la opinión pública,
que es tremendamente moldeada por la prensa y otras formas de propaganda.”
Grl Douglas MacArthur (1880 –1964)
La “confusión” de los pensadores y dirigentes.
La violencia organizada.
¿Cuál es el horizonte de nuestras FFAA?
La “confusión” de los pensadores y dirigentes.
Nuestra querida Patria Argentina aun somatiza, en el 2017, sus posguerras que corresponden a las guerras que vivimos en la segunda mitad del siglo XX, ambas hijas -por su tipología aun no asumida por los argentinos- de la presencia en el mundo de los arsenales QBN, desde 1947.
¿Por qué los efectos psico-sociales de esas guerras -vividas como verdaderos y sorpresivos dramas- se prolongan hasta hoy, durante tan largo tiempo, a pesar de los acelerados procesos de cambios que caracterizan a la presente etapa de la civilización humana? (1) (2) y (3).
Es probable que una de las razones que explica al fenómeno esté en aquella conocida frase del Grl Mac Arthur, que encabeza a éste trabajo: “En la guerra no hay sustituto para la victoria”. Podríamos concluir, consecuentemente, que lo que realmente somatizamos son las derrotas estratégicas sufridas, ambas actualmente incardinadas y en plena explotación por nuestros enemigos de ayer, hoy aliados -a través de sus vicarios-, en una nueva circunstancia histórica (4).
La “confusión” de nuestros pensadores y dirigentes, que aun continúa y se prolonga -sin indicios de un final- se explicada por la segunda frase del quien fuera el Supremo Comandante del Pacífico Sur: “Uno no puede librar una guerra en la actualidad -1943– sin el apoyo de la opinión pública, que es tremendamente moldeada por la prensa y otras formas de propaganda”. Esa ha sido y es la razón del eje del “relato”, que nos impidió comprender y superar nuestras crisis de posguerra y que nos puso al borde del abismo, hasta el 10 Dic 15(1).
¿Arena…, o pan rallado?. No existe en la Historia Militar Universal un solo caso que nos muestre la ausencia de una reacción social positiva, frente a una derrota en la guerra. Allí están a la mano los ejemplos de Alemania y Japón, después de la IIGM. ¿Qué nos ha ocurrido para volver a ser -otra vez- una excepción en el mundo?. Nada de lo aprendido en los dramas de esas guerras fue políticamente asimilado y aplicado. Nada. Estamos repitiendo todos los errores del pasado. ¿Hubo mera “confusión” o hubo “traidores a la Patria”,desde 1983? (2) (3) (4) y (5).
En los días que corren la Justicia descubre a estos últimos, luego del asesinato de un fiscal que investigaba un hecho de terrorismo, de un “desaparecido” en el Río Chubut, de la pérdida de un submarino y de una víctima de la “represión del Estado” en Villa Mascardi. La sentencia de Cicerón vuelve a recordarse, luego de un paréntesis de treinta y cuatro largos y penosos años: “Cuando la Patria está en peligro, Dios es invocado y el soldado convocado; cuando el peligro cesa, Dios es olvidado y el soldado juzgado” (6) y (7).
Algunos periodistas y políticos, conmovidos por los acontecimientos citados, caen en la cuenta que la Argentina está en plena indefensión, sin presupuesto y con sus FFAA humilladas y…como “la Patria está en peligro” (8) (9) y (10), “¿¡no habría que volver a pensar en la necesidad de tener FFAA?!”.
Decíamos en Feb 14, en un ensayo titulado “Confusión, ignorancia o propósitos ocultos” (11): “La guerra evoluciona con la civilización humana -que en las últimas décadas ha acelerado notablemente su ritmo- sin perder por ello su esencia. Se inscriben en ella todas las formas de la violencia organizada. Es un hecho político y es la Política la que señala su “para qué”. Lo que dijera Mao ha tomado -a lo largo de éste tiempo- cada vez mayor entidad: ´la guerra es política con derramamiento de sangre y la política es guerra sin derramamiento de sangre´. La guerra es gestión política a través de alguna variante de fuerza. Cuando se la analiza sin considerar esta cualidad, el análisis es por lo menos incompleto”.
La violencia organizada.
Ha reaparecido la “violencia organizada” en el Comahue y en las grandes ciudades. El discurso de los agresores centrales, es el de los ’70 pero, llamativamente, hasta ahora no ha habido quien los relacione. Seguimos viendo lo superficial y no las esencias. Seguimos mirando la punta del botín y no la cancha entera. Algunos actores cambiaron, los modos son distintos, los procedimientos también (8), (12) y (13). Sin embargo, el núcleo y los objetivos son los mismos. Sería imprescindible que los responsables del área de la Seguridad Nacional fijaran su atención en la metamorfosis en curso en la zona de la Orinoquia (12), antes de adentrarse en los detalles de las orillas del Río Chubut o la cantidad de colectivos que trajeron la barbarie a la Plaza de los Dos Congresos.
En estos días algunas voces preguntan ¿para qué sirven las FFAA?. Las muertes en el Comahue, la pérdida de un submarino o el riesgo de desabastecimiento de las Bases Antárticas hacen pensar que algún atraso hay en el sistema de Seguridad Nacional y por lo tanto es necesario “re-estructurar el sistema defensivo”.
Ello nos lleva -como institución- a la obligación perentoria de encender las alarmas rojas. Por ello ya le hemos solicitado una audiencia al Sr Ministro de Defensa Nacional. ¿Cómo vamos a “re-estructurar” la Defensa Nacional sin planeamiento estratégico? La legislación actual prohíbe prever los riesgos y amenazas estratégicas reales -dentro de nuestros límites- que ensombrecen nuestro futuro inmediato. ¿Alguien está pensando que con la eliminación del Decreto reglamentario de la Ley de Defensa ese obstáculo está salvado? Craso error.
Sería conveniente que relean las leyes vigentes y recuerden que la guerra, las actuales, siguen siendo “lúdicas y agonales”, a pesar de su acelerada transformación. ¿O hay quienes quieren enfrentar la nueva amenaza volviendo a improvisar? Entonces sepamos que acunamos, ingenuamente, una nueva derrota estratégica, a pesar de las durísimo experiencias recientes.
Restablecer una legislación de Seguridad Nacional relacionada con la real situación que atravesamos, exige dos cosas: 1. Decirnos la verdad y, 2. Reemplazar la Política de Derechos Humanos por una Política de Defensa realista, innovadora y posible. Es decir: volver a la racionalidad, pero esta vez con eficiencia.
¿Cuál es el horizonte de nuestras FFAA?
Las experiencias recientes permitirían a las FFAA argentinas ponerse nuevamente los “pantalones largos”.Debemos pensar y obrar pisando nuestro suelo. La mochila está cargada de experiencias propias, durísimas y recientes. El código a seguir está en la doctrina a adoptar y la doctrina está en el plan estratégico a concebir, desde una total ausencia de alistamientos. Tendríamos que realizar un salto de garrocha responsable, si despertamos en tiempo.
Las teorías estratégicas en acto en el 2017 son de conocimiento universal y nos facilitaránconcebir -si existiere una decisión política- las organizaciones, los instrumentos y el personal adiestrado para la acción. Para lograrlo, nuestra situación actual nos indica aspectos desfavorables y otros favorables, sabiendo de antemano que siempre habrá oposición a la innovación.
Sin planificación estratégica no habrá noción de actitud -ofensiva o defensiva- ni prioridad para las aptitudes. Cuando más se aproxime la doctrina a la clave de nuestra propia situación, mayor será la adaptación de las FFAA para atender y entender a los objetivos y misiones a cumplir.
Las FFAA del orbe que están actuando permanentemente son las que más aprenden. Acumulan experiencias y evolucionan. Cuando hay lucidez, mientras combaten ya se están preparando para la próxima guerra. Ese conocimiento será de gran apoyo para nuestro singular planeamiento estratégico. No hay lugar para la “copia”. Deberíamos considerar a nuestra exclusiva realidad iberoamericana, en evolución, a las limitaciones presupuestarias del país, al tiempo de incorporación de los soldados para adquirir destrezas o el nivel de bajas que acepta una fuerza “profesional”. El tono moral de nuestra sociedad sería un aspecto importantísimo a considerar.
Tengamos en cuenta que en Occidente, desde la Guerra de Corea -1950/53-, no han existido mayores enfrentamientos entre Estados que permitan determinar capacidades militares. Las experiencias bélicas han sido muy variadas en los últimos tiempos y han ocurrido en lapsos muy cortos. Las capacidades para el combate de alta intensidad, están en descenso. Occidente se especializó en operaciones de estabilización de países del tercer mundo, como lo hicimos nosotros por imitación, con total descuido de nuestra propia situación interna.
Los efectos de nuestras derrotas estratégicas se reflejan muy bien en el éxito de nuestros enemigos -internos y externos-, que lograron el desarme unilateral y la ausencia del planeamiento estratégico frente a los verdaderos riesgos y amenazas que padecemos desde 1985. Y ello cuando la totalidad de las guerras en acto, en el mundo, SON INTERNAS.
Hubo un acuerdo político, producto del “entrismo de izquierda” en los partidos tradicionales, para eliminar a las Instituciones Militares del escenario nacional. Se judicializaron las guerras recientes, se privó de presupuesto a la Seguridad Nacional y se humilló a las FFAA, de Seguridad y Policiales a través de la comunicación del propio Estado. Más de treinta años de acción psicológica negativa y de enseñanzas escolares “progresistas”, ¿cómo se remueven hoy, ante las necesidades que exige la proximidad de las presentes amenazas?
Por el momento, la “ocupación” de amplias extensiones de nuestro territorio por elementos “extraños”, más de setenta ataques “revolucionarios” -en breve lapso- con tácticas “terroristas” para “despejar” aun más los vacíos espacios patagónicos -en tres provincias- del Comahue, tienen tratamiento de seguridad pública, a pesar de la declaratoria del “ocupante” -agresor violento- que reclama soberanía y opera bajo conducción externa, como lo ha comprobado el Fiscal General de Neuquén, José Gerez, que acusó a la RAM de tener vínculos con las FARC (12), por contar con los documentos probatorios (14).
El Estado está cumpliendo con la legislación vigente, que pone el caso en manos policiales y judiciales y le niega jurisdicción al planeamiento estratégico, con una lógica perversa, propia del resentimiento ideológico del terrorismo setentista que diseñó y aprobó estas leyes. Pero, allí sigue firme la “Política de Derechos Humanos”, como Política de Estado.
Estamos en presencia, nuevamente, de la actitud que asumió el Estado Nacional desde 1959 hasta 1974. Luego improvisó, histéricamente, con las consecuencias que aun soportamos. ¿Arena…¿o pan rallado?. ¿De qué naturaleza es la situación en desarrollo en la Patagonia argentina y chilena?. Si existe una agresión violenta y apátrida, que reclama soberanía sobre parte del propio territorio, que lo ocupa sin reconocer al Estado Argentino y se impone ante la Justicia y la policía, paralizándolos, deberíamos preguntarnos: ¿qué más necesitamos para entender que estamos en presencia de una agresión estratégica-revolucionaria?.
Si las pancartas y estribillos de algunos grupos izquierdistas que irrumpen diariamente en la CABA reclaman por la libertad del jefe de la RAM, o para que aparezca el desaparecido que no desapareció ¿no podríamos concluir que enfrentamos a una organización bajo comando único externo y con un objetivo común, actuando en todo el país? ¿O estamos creyendo que un fiscal o un juez de una remota localidad patagónica o de la CABA solucionarán una “agresión revolucionaria” modelo 2017?
La respuesta es clara: el Estado retiene vigente la política de derechos humanos -como lo demuestra la reciente presentación del Plan Avruj-, no existe política de seguridad nacional y gran parte de la dirigencia política carece del coraje y los conocimientos necesarios para enfrentar esta cruda realidad estratégica presente.
La guerra sigue siendo un hecho socio-político de naturaleza violenta, interactiva y cambiante, cabalgando sobre la evolución acelerada de la civilización, influida por la legalidad internacional y nacional, las diferencias culturales y sus derivaciones políticas, militares y sociales. Ya nos hemos alejado del modelo napoleónico-industrial y el ingreso a la etapa posindustrial nos muestra tendencias disruptivas. Los argentinos ya lo hemos vivido y sufrido -desde sus comienzos- y parece imposible no haberlo comprendido aun, repitiendo errores.
La legislación actual prevé solo la guerra con otros Estados y con sus fuerzas regulares, pero hace muchas décadas que la agresión proviene desde organizaciones no estatales. El proceso revolucionario iberoamericano -que hipócritamente se oculta- ha mutado de forma, pero sigue siendo el mismo. Su núcleo impulsor, también.
La maniobra ofensiva principal pareciera desplazarse -en la actualidad- a una de las variadas ramas inauguradas por el proceso revolucionario en los ’90: el indigenismo radical, que encontró en el Quinto Centenario del Descubrimiento de América un punto de partida y legitimación, con apoyo de intelectuales y clérigos neo marxistas. La localización periférica de su organización y ejercitación, se mantuvo fuera de la atención pública en la Argentina, hasta el momento en que ejecutan la operación pre-electoral del “desaparecido”. Es cuando nos enteramos por la prensa que llevaban años de acción y ejercitación en ambos lados de la Cordillera (12), con la sigilosa protección de Justicia Legitima en nuestro país.
Las tribus urbanas, desde lesbianas a piqueteros, constituyen las maniobras subsidiarias, con un objetivo en el corto plazo: la “resistencia” en todos los frentes. Desgastar al poder e impedir la gobernabilidad (13) y (14).
Las teorías estratégicas mundiales que pueden ayudarnos al momento de pensar en la propia doctrina –si nos decidiéramos salir del actual vacío conceptual- origen de la actual indefensión e inseguridad, serán enumeradas muy sintéticamente, limitándonos a las principales. Son las siguientes:
Guerras de Tercera y Cuarta Generación: El término se originó en 1989 cuando William Lind y cuatro oficiales del Ejército y del Cuerpo de Infantería de Marina de los Estados Unidos, titularon a un ensayo “El rostro cambiante de la guerra: hacia la cuarta generación”. Ese año, el documento se publicó simultáneamente en la edición de octubre de Military Review y de la Marine Corps Gazette. La propuesta está relacionada con la guerra asimétrica y la guerra contraterrorista.
Guerras de Cuarta Generación: La formularon Van Creveld y Thomas Hammes en 1994, planteando los modos no convencionales de la guerra. Identifican principalmente la acción psicológica y la infiltración en las retaguardias enemigas (15). A esa altura, la Argentina llevaba décadas de agresión de éste tipo.
Guerras de Quinta Generación: Ray Alderman las define por su alcance y su desarrollo sin contacto y silenciosamente, en el 2017 (16).
Guerras de Sexta y Séptima Generación: Niño González las conceptualiza en el 2017, dándole a las guerras en curso en el mundo una dimensión de degradación de las violencias multifacéticas, a las que el Estado Occidental responde tardía y erráticamente ante las nuevas amenazas y riesgos a la Seguridad Nacional e Internacional. Concluye que el terrorismo exige un reordenamiento de la Seguridad (17).
Las Guerras Irrestrictas: Concepto revolucionario concebido por dos Coroneles del Ejército Popular Chino -Quiao Liang y Wang Xiangsui- en 1999, en su libro “Unrestricted Warfare”. En esta obra los autores señalan que ante la disminución de la violencia militar, aumenta la violencia política, económica y tecnológica. Señalan la importancia que alcanzan la desinformación -el relato- y el control de áreas sensibles del poder bajo influencia de la globalización y de la dependencia tecnológica. Vale la pena reproducir cómo conciben los “ataques integrados”:
“Guerra cultural, controlando o influenciando los puntos de vista culturales de la nación adversaria. Guerra de las drogas, invadiendo a la nación adversaria con drogas ilegales. Guerra económica, empleando la dependencia de la ayuda financiera para controlar al adversario. Guerra ambiental, destruyendo los recursos ambientales a la nación adversaria. Guerra financiera, subvirtiendo o dominando el sistema bancario del adversario y su mercado de valores. Guerra de leyes internacionales, subvirtiendo o dominando las políticas de las Organizaciones Internacionales o multinacionales. Guerra mediática, manipulando los medios de prensa extranjeros. Guerra de Internet, mediante el dominio o destrucción de sistemas informáticos transnacionales. Guerra psicológica, dominando la percepción de las capacidades de la nación adversaria. Guerra de recursos, controlando el acceso a los escasos recursos naturales o manipulando su valor en el mercado. Guerra de contrabando, invadiendo el mercado del adversario con productos ilegales. Guerra tecnológica, ganando ventaja en el control de tecnologías civiles y militares. Terrorismo” (1).
La Teoría Gerasimov: Es muy probable que la teoría más difundida e influyente en los últimos años, provenga del Jefe del Estado Mayor para la Defensa de Rusia, Grl Valery Gerasimov (18). Señala los casos de la intervención en Libia del 2011, las revueltas árabes o la Revolución de Colores o la invasión de Iraq del 2003 como muestras de la forma de operar de Occidente. Señala a las capacidades no militares como principales para la obtención del objetivo, en una relación de 4 a 1. Destaca la creciente tendencia al empleo de sistemas de armas con control remoto y a la robotización del campo de combate. Sin duda, la caracterización principal que destaca es la de ganar la supremacía en el campo de la información y en la comunicación estratégica. Subraya el carácter híbrido de las acciones de guerra, lo que dificulta la identificación de una agresión. La frontera entre la guerra y la paz están difuminadas. Rusia ha logrado en Georgia, Ucrania o en Siria, sincronizar las operaciones militares con las acciones de la comunicación, llegando a socavar la soberanía de un país, sin ocupar su territorio.
Las “observaciones” de McMaster. El actual Consejero de Seguridad Nacional de EEUU citaba en el The New York Times (19) tres normas para evitar una comprensión errónea de la naturaleza de las guerras en acto: 1. Su carácter político, que debe ser coordinado con las restantes acciones del Estado para alcanzar el objetivo impuesto. 2. Considerar su dimensión humana, pues se sigue persiguiendo “la honra, el temor y el provecho”.3. La conjunción de las dos anteriores: su carácter lúdico, pues se trata de voluntades inteligentes en oposición, que la hace impredecible. Concluye que no debe confundirse al éxito de las tecnologías en el combate, con la existencia de una estrategia en la batalla.
Por último, no queremos cerrar estas síntesis que nos sirven de antecedentes y apoyos a nuestro pensar, sin citar a Eugeny Messner -1891-1974-, Cnl ruso blanco, que falleció en Buenos Aires y anticipó, en sus estudios teóricos durante la guerra fría, muchos conceptos que hoy encontramos en los estrategas teóricos más recientes y que hemos citado más arriba.
El acceso a las nuevas tecnologías por parte de actores no estatales, con el condimento de los fundamentalismos radicales de tipo social, político o religioso, están mostrando los fracasos de la disuasión en la posguerra fría. Las guerras asimétricas tienen la capacidad de lograr efectos estratégicos con acciones tácticas de baja escala, como lo estamos comprobando algunos argentinos en el 2017, a pesar de que lo sabíamos desde los ’80. Pensar en términos de Paz o Guerra, ya no tiene mayor sentido. Ha surgido la “zona gris”, pues se ha diluido la dicotomía entre ambos estados. Surge la idea de lo híbrido. Desde el punto de vista jurídico ello retiene su importancia, pues muestra una gran debilidad/vulnerabilidad de los Estados, pero ha perdido importancia con respecto de los resultados estratégicos, pues los objetivos pueden ser alcanzados a través de otros instrumentos y sus respectivas tácticas. Es lo que nos está sucediendo.
Ha desaparecido el “teatro de operaciones militares”. La totalidad del territorio nacional es el campo de batalla, pero específicamente lo es la población civil. Del dominio físico de la geografía, el resultado estratégico se ha desplazado al dominio psicológico de la sociedad. Ello es lo que da una enorme importancia a la comunicación social. Lo hemos visto en los días en que el Congreso Nacional votaba una nueva norma previsional. El opinólogo televisivo de turno comentaba acerca del “cerco que ejercía la Gendarmería sobre los legisladores”, cuando el cerco lo realizaban los revolucionarios anarquistas, que enfrentaban las empalizadas que defendía la Gendarmería. Para el elemental periodista, el agresor era la Gendarmería. Quizás provoca más daño al país, que el piquetero.
Por lo tanto, estos nuevos conflictos no se resuelven exclusivamente con el dominio de los espacios llaves del territorio, sino con la conquista del espíritu de la ciudadanía. Éstos “periodistas” ¿están confundidos?, ¿se equivocan? O, ¿para quién juegan?. ¿Son infiltrados? ¿Tienen conciencia que el motivo del caos no es la reforma de una ley?. Hemos dicho con anterioridad y reiteradamente, que la “pseudo-revolución en retirada”actuaría como una “bestia herida” (11) y (13). Es muy probable que los responsables de la seguridad tengan una lectura totalmente distinta de los hechos de violencia creciente. Sabemos que no hay “doctrina estratégica” y estamos tomando conciencia -a través de sus acciones- que los responsables de la Seguridad Nacional carecen de las nociones polemológicas más elementales.
La Argentina vive diariamente graves hechos de Inseguridad Nacional. Nuestra dirigencia confunde“seguridad pública” con “seguridad estratégica”. En todo el orbe se trabaja intensamente para actualizar doctrinas, organizaciones, sistemas de armas y actitudes sociales, mientras aquí se sacrifica a los uniformados, desarmados frente a la locura revolucionaria, bajo cualquier excusa. Las víctimas siguen siendo los agresores, no los agredidos.
Entre nosotros, la actualización será muy difícil. Los hechos cada vez más graves están impulsando la necesidad de una transformación estructural de la Seguridad Nacional. Pero no es igual en el ámbito de las convicciones ni de los conocimientos específicos, que no aparecen. Hay trascendidos, rumores y algunas declaraciones desde el gobierno, que “se está trabajando en ello”. Sin embargo, todo nos lleva a pensar que la motivación del “cambio” es solo originado por exigencias presupuestarias.
Nuestro Instituto de Estudios Estratégicos de Buenos Aires desde su creación, luego de la Guerra del Atlántico Sur, viene bregando y proponiendo superar la angustiosa situación de la Seguridad Nacional. Entendemos que ya no podemos demorar un solo minuto más, sin correr el riesgo de graves problemas violentos que nos llevarán a la disgregación. Nuestra propuesta está desarrollada como plan esquemático básico y éste se actualiza, periódicamente. Además de considerar las teorías internacionales, hemos diseñado una doctrina estratégica, nuevas organizaciones, nuevos sistemas y despliegues. Estamos soportando conflictos internacionalizados y complejos y necesitamos audacia e idoneidad para superarlos con éxito.
El punto de partida para conducir esta operación exige eliminar dos ministerios y crear uno nuevo, el de la Seguridad Nacional, con dos Secretarias, la de Defensa Nacional y la de Seguridad Pública, mientras se negocia el Tratado de Seguridad Colectiva y Defensa Común con el vecindario afín a la posición que adoptó la Argentina el 10 Dic 15, como vanguardia contra-revolucionaria. Brasil, Chile y Perú deberían ser los primeros invitados por Buenos Aires para desarrollar una alianza eminentemente política, como lo es la que corresponde a la Seguridad Regional, frente al neo-marxismo del Foro de San Pablo.
Grl Heriberto Justo Auel
CITAS:
(1) H. J. Auel. “Política de Defensa o Estado de Indefensión Legal”. Investigación. Jul 01. www.ieeba.org
(2) H. J. Auel. “La Guerra en la Civilización del Conocimiento”. Investigación. Ene 02. www.ieeba.org
(3) H. J. Auel. “La Guerra en el Siglo XXI”. Jul 02. Investigación. www.ieeba.org
(4) H. J. Auel. “El Nuevo Ordenamiento Internacional Posterior a la Intervención de EE.UU. y sus Aliados en Irak”– Conferencia en la AAAI. 21 May 03. www.ieeba.org
(5) E. de Vergara. “Los Conflictos en Ibero América”. Investigación. Feb 06. www.ieeba.org
(6) H. Dieterich. “Cumbre Sudamericana: nace vanguardia criolla y crece subversión oligárquica”. 10 Dic 06. www.rebelion.org
(7) H. J. Auel. “La Argentina Encapsulada”. 28 Mar 03. Investigación. www.ieeba.org
(8) H. J. Auel. “Sr. Cte J FFAA: llegó la hora de pintar la carta”. Feb 17. www.ieeba.org
(9) H. J. Auel. “Política de Derechos Humanos Vs. Política de Seguridad Nacional”. 01 Ago 17. www.ieeba.org
(10) H. J. Auel. “Terrorismo global y terrorismo doméstico en el siglo XXI”. Oct/Nov 17. www.ieeba.org
(11) H. J. Auel. “Confusión, ignorancia o propósitos ocultos”. Feb 14. www.ieeba.org
(12) H. J. Auel. “Las FARC-EP, actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano”. 05 Sep 17. www.ieeba.org
(13) H. J. Auel. “Terrorismo Global y Terrorismo Doméstico en el siglo XXI”. Oct-Nov 17. www.ieeba.org
(14) Infobae. “Hallaron documentación que vincula al RAM con grupos guerrilleros de otros países sudamericanos”. 22 Nov 17. www.infobae.com
“Estoy preocupado por la seguridad de nuestra gran nación;
no tanto por una amenaza externa,
sino por las fuerzas insidiosas que trabajan adentro”.
Grl Douglas MacArthur – 1945
Nuestro agradecimiento a las autoridades de este prestigioso e histórico Club, por la invitación que nos han hecho llegar al IEEBA, permitiéndonos -además- la elección del tema a tratar con Uds., en éste clásico almuerzo del “Foro de la Ciudad”.
Es de nuestro conocimiento comunitario que la principal preocupación social -permanente- de los argentinos, en las últimas décadas, es la inseguridad. Por esa razón hemos decidido tratar éste tema aquí -aunque fuere brevemente- planteando algunas de sus “claves” esenciales, pues entendemos que éstas no tienen tratamiento público.
Cuando citamos el término “claves”, nos estamos refiriendo a “aquello que nos permite resolver algo que se nos presenta como enigmático o desconocido” (1). En nuestro caso, no creemos que se trate de “algo enigmático”, o de una “sensación”, pero estamos convencidos que es “algo desconocido” por gran parte de nuestra dirigencia que -al respecto- mantiene una enorme deuda con sus conciudadanos “de a pie”.
¿Pueden los padres ignorar qué “defensas” deben darle a su bebé, a través de vacunas, alimentos y vitaminas, para que rechace la agresión del medio ambiente en el que vive? Pues, valga el caso, eso es lo que estamos haciendo con nuestra sociedad, toda vez que una política comunicacional de la Seguridad Nacional (2), no existe. Esta es la principal causa de la inseguridad/indefensión que padecemos, pues en las guerras en acto -de 7ma G-, la orientación de la opinión pública es esencial.
Hemos dividido nuestra exposición en tres partes:
LA SEGURIDAD DE LA CIUDADANÍA ¿ESTÁ EN LAS PIEDRAS DE LAS MURALLAS O EN LOS HOMBRES QUE VIVEN DENTRO DE ELLAS?.
¿QUÉ DEBERÍAN SABER NUESTROS CONCIUDADANOS, AQUELLOS QUE VIVEN DENTRO DE LAS MURALLAS, ACERCA DE LA PRIMERA RESPONSABILIDAD DEL ESTADO-NACIÓN: LA SEGURIDAD NACIONAL?
EN CONCLUSIÓN:
LA SEGURIDAD DE LA CIUDADANÍA ¿ESTÁ EN LAS PIEDRAS DE LAS MURALLAS O EN LOS HOMBRES QUE VIVEN DENTRO DE ELLAS?
En la presente etapa de la “civilización del conocimiento”, la Seguridad Pública se unificó con la Seguridad Estratégica pero, en éste extremo occidente-sur, ello no ha sido difundido. La Argentina -ideológicamente encapsulada- (3) se evadió de su circunstancia y envuelta en falacias -el relato- se dirigió inconscientemente al “Estado fallido” (4) a través de la auto-destrucción de su núcleo duro: las FFAA y el sistema Judicial Penal Federal, que fue y es empleado para la destrucción de las primeras.
Simultáneamente, mientras esa narrativa falaz ocultaba al latrocinio más grande de nuestra historia, nuestra clase media era llevada al castro-comunismo, sin que se enterara.
Podríamos realizar un sinnúmero de interrogantes, relacionados con las citadas “claves”, para demostrar el desconocimiento generalizado de las causas de la inseguridad, pero por razones de disponibilidad de tiempo vamos a plantear solo siete y así intentar comprender cuál es la profundidad sustantiva de la rampante Inseguridad Nacional y abandonar el superficial anecdotario al que ya nos han acostumbrado (5).
¿QUÉ DEBERÍAN SABER NUESTROS CONCIUDADANOS, AQUELLOS QUE VIVEN DENTRO DE LAS MURALLAS, ACERCA DE LA PRIMERA RESPONSABILIDAD DEL ESTADO-NACIÓN: LA SEGURIDAD NACIONAL?
¿Se tiene hoy presente -en los diversos análisis y/o propuestas dirigenciales- que somos un país en doble posguerra, una convencional y otra no convencional y que esas guerras permanecen aún abiertas, dentro de la categoría de “estado de guerra”?
No, no se las considera cuando se analiza nuestra prolongada crisis-decadencia pero, además, la guerra no convencional -la contra-terrorista-revolucionaria 1974/1988- es negada como tal, aun hoy por Jueces y Fiscales Federales legos de los TTOOFF, quienes ignoran el “abc” de las guerras “asimétricas”,“muy limitadas”,“debaja intensidad”, “irrestrictas” o “híbridas”, que tienen sobre sus estrados desde 1984.
Debemos reconocer que las organizaciones de derechos humanos -DDHH- los controlan cercanamente, a través de las querellas -verdaderas vestales revolucionarias de posguerra- que les impiden a los tribunales reconocer la existencia de nuestra larga, malparida y dramática guerra civil contrarrevolucionaria. Pero ello no los exime de ser prevaricadores y me consta que son conscientes de ello (6).
Han pasado treinta y cinco años desde el cese de los combates y aun la sociedad no ha asumido a sus guerras. No las asimilamos. Nuestros TTOOFF legos aceptan lo que las querellas -representantes del agresor de ayer- dictan ante los estrados: “no hubo una guerra”. Si la Justicia y las querellas reconocieran que la hubo, nuestros soldados deberían estar frente a los tribunales del Fuero Militar. Los jurisconsultos del más alto nivel estatal borraron el Art. 18 de la CN y la psico-política hizo el resto. “Una política de estado”, de hecho, ha podido reformar la Constitución Nacional, al Tratado de Roma, a la Justicia Militar y a los Tribunales de Honor de las FFAA (7).
La guerra limitada convencional del Atlántico Sur -en 1982-, detonada a través de un “incidente provocado” por el RU, tampoco fue asimilada por nuestra dirigencia. “No aprendimos a no aprender”. Aun se sigue repitiendo que fuimos los agresores, pero -por lo menos-, ya quedó en el olvido que fue “un carro atmosférico”.
Ninguna reforma se ha iniciado en el Estado Nacional para poder conducir -en el futuro- una negociación diplomática con una prueba de fuerza simultánea y controlada. Ese es el concepto de guerra limitada. Es la que peleamos en el Atlántico Sur en 1982, con un objetivo muy claro por parte de EEUU y el RU y una gran sorpresa para el “cuasi-Estado” argentino, que nunca entendió ni conoció la especie de guerra que le ocurría. Todo se improvisó.
A la “invasión cubana” -1959/1960- (8) se le dio tratamiento de seguridad pública durante quince años -1959/1974-. El Poder Político decidió en 1974 -por decreto- movilizar a las FFAA y abrir operaciones militares en el marco interno, “mañana mismo”, sin planificación estratégica, sin inteligencia estratégica, sin adaptación orgánica, bajo comandos específicos -no conjuntos-, sin emitir la ley necesaria, ni la DENAC, ni la consecuente DEMIL y, más grave aún, dirigiendo el Decreto a los EEMMGG con responsabilidades administrativas, en vez de hacerlo al EMC, con responsabilidades estratégicas.
Por todo ello a esta guerra la he llamado malparida. Habían pasado quince años sin que la dirigencia reconociera que en el 59/60 se había presentado un hecho estratégico. No se entendió o no se quiso entender “la naturaleza del desafío que representaba la invasión revolucionaria”.Tardíamente,en 1974 se reaccionó y todo se improvisó.
Estamos en curso de volver repetir nuevas improvisaciones homólogas, a pesar de la experiencia acumulada y no asimilada. A ello debemos agregar que ahora lo haríamos con mucho menos poder.
El Decreto que ordenó “el aniquilamiento del accionar subversivo” no fue al Congreso para transformarse en Ley Nacional -como lo hicieron Avellaneda-Roca en 1878, antes de atacar al malón-. El PEN tampoco dictó la Directiva Estratégica Nacional -DENAC- con la base ética-jurídica para el empleo de las Fuerzas en el marco interno. Esa base –de absoluta y exclusiva responsabilidad política– debió llegar a las tropas con forma de “reglas de empeñamiento”. Pero estas nunca llegaron. Son los “procedimientos” que los legos TTOOFF les reclaman hoy a oficiales subalternos, suboficiales y aun a soldados, para encuadrarlos en el Código Penal, como vulgares asesinos.
Tampoco se dictó la Directiva Estratégica Militar -la DEMIL-, responsabilidad del EMC, que quedó marginado de la guerra. Toda la apertura de esta guerra asimétrica, civil, contrarrevolucionaria, interna, no convencional, fue un mamarracho que hoy están pagando con su libertad quienes nos defendieron.
A fines de 1983, con asesoramiento británico y en colusión con las derrotadas organizaciones terroristas, el gobierno logró “trastocar” la derrota táctica del enemigo revolucionario, en una victoria estratégica y política, que aun retiene. Se judicializó el hecho socio-político “guerra” y las FFAA fueron llevadas ilegalmente a los estrados penales federales -es decir, al Código Penal ordinario- como criminales comunes responsables del tardío “mamarracho” -su errónea apertura- y al escarnio social del “relato”, difundido por todos los medios de comunicación del Estado, durante años.
Fue el momento crucial en que la Política de DDHH reemplazó a la Política de Seguridad Nacional. Las bajas de inocentes, provocadas por este desatino ideologizado, es la infamia que hoy se pretende ocultar, pero ello se hace cada vez más difícil (9).
Simultáneamente el RU confirmó -nuevamente- que no cumpliría con la Resolución de la AG-ONU que lo obliga a abrir negociaciones diplomáticas con la Argentina por la soberanía de las Islas del Atlántico Sur e inició el refuerzo de la “Fortaleza del Atlántico”. De esta manera, en términos estratégicos, el RU retuvo el “estado de guerraen el Atlántico Sur”, mientras sectores políticos, sociales y periodísticos internos, activaron desde entonces y hasta hoy, la actitud hostil del agresor revolucionario y en consecuencia el “estado de guerra interno”.
Esta interrelación colusiva entre los dos enemigos que agredieron a la Argentina con las armas en la segunda mitad del siglo XX, está objetivamente representada en la trágica figura del “perro”, Horacio Verbistky, agente de inteligencia británico y de la organización armada ilegal Montoneros.
La reciente y fracasada operación conducida por él, con un “desaparecido” en el Río Chubut, lo expuso ante la opinión pública nuevamente. Durante más de cincuenta días mantuvo al simbólico término en las primeras páginas del periodismo nacional y ello demostró el alcance y continuidad del “estado de beligerancia interno” (10). Pero, “segundas partes, nunca buenas”.
Comprobada la total falsedad de esta nueva “falacia”, no hubo retractaciones ni disculpas de sus numerosos voceros. Ello da una idea de la fortaleza psico-política remanente de la “pseudo-revolución” -aparentemente vencida y en retirada- y de sus camaleónicos partidarios conscientes o inconscientes, infiltrados dentro y fuera del Estado.
¿Es consciente -nuestra dirigencia- que nos abarca una nueva guerra mundial desde el año 2001 –“la Contraterrorista Global”- y que ella está totalmente interrelacionada con los dos “estados de guerra” que retenemos desde 1982 y 1988, respectivamente?
La Guerra Mundial en acto cursa su décimo séptimo año y, hasta hoy, no ha merecido el mínimo tratamiento público por parte de quienes tienen la responsabilidad de hacerlo. A este enemigo “no estatal” que enfrentan los Estados “responsables” del orbe, se lo cita -genéricamente- como “el enemigo sin rostro” (11).
Su composición es compleja y desigual, según el área en que actúe. La complejidad se manifiesta a través de la presencia de diversos actores: fundamentalismos, crimen organizado internacional y, en Iberoamérica, la particularidad del narcoterrorismo: elementos terroristas domésticos, remanentes de la guerra fría, interrelacionados con los carteles de la droga en alianza con el “terrorismo global”,a través de acuerdos estratégicos firmados en el pasado por Caracas y recientemente por las FARC (10).
En nuestra región continúa la consolidación del narcoterrorismo con elementos revolucionarios neo marxistas reciclados y los gobiernos adscriptos al “Socialismo Siglo XXI”. Ésta pseudo-revolución actualmente en retirada en gran parte del Cono Sur y en plena recomposición orgánica en la Orinoquia y el Caribe luego de la muerte de Fidel, la prisión de Lula, los graves problemas internos de los sandinistas en Nicaragua y el reciente posicionamiento político de las FARC -principal cartel regional- en Colombia.
La conducción estratégica revolucionaria subcontinental -desde 1959- continúa en manos del PC de Cuba, que ha cambiado sucesivamente de mecenas, acompañando a los grandes sucesos internacionales. Por esa razón, cuando la URSS se encaminaba a su implosión, Fidel se apoya en Lula para crear -en 1990- dos organizaciones neo-marxistas que asocian a las antiguas bandas estalinistas iberoamericanas con la social-democracia gramsciana: el Foro de San Pablo y el Foro de Porto Alegre.
El primero cubre las nuevas responsabilidades políticas y estratégicas luego de la caída del paradigma moscovita y el segundo la conducción social y comunicacional de apoyo a la nueva etapa de movilización continental, en la que aparecen las “organizaciones sociales” y los “grupos de choque”, que en la CABA se despliegan diariamente como “piqueteros”.
En aquel momento -1991- se sumó a la doctrina estalinista de origen, la social-democracia de reciente desembarco en la región, impulsando innovadores modos de acción, fundados en las doctrinas gramscianas. El gatopardismo revolucionario gana así en flexibilidad, pero aumenta el conflicto interno en su alta conducción. El mecenazgo de ésta etapa fue cubierto por el petróleo venezolano y el poder vicario de la alta conducción le es otorgada -por esa razón- a Caracas.
Cuando a partir del 2002 cae el precio del barril de petróleo y muere el Cte. Chávez, se inicia la negociación cubana con Obama y el ala izquierda del Partido Demócrata de EEUU para darle oxígeno a la Isla, incapaz de sostenerse por sí sola. Con la llegada de Trump, EEUU regresa a una política de aislamiento de la Isla. Ello activó la firma -en La Habana- del Tratado de Paz entre el gobierno de Santos y las FARC -el cartel multi-billonario regional- y esta organización armada se constituye así en partido político y nuevo sostén económico-financiero de La Habana y de la revolución comunista subcontinental.
El resultado de las elecciones presidenciales en Colombia el 17 Jun 18, contrario a los intereses de las FARC, inicia una nueva etapa revolucionaria subcontinental.
Seguramente se va a acelerar una nueva ola de violencia en ese país. Además, los resultados de las próximas elecciones en Méjico y Brasil serán definitorios para articular los próximos pasos a dar por los “encuentros” de los Foros de San Pablo y de Porto Alegre y condicionaránel ritmo/oportunidad de la contraofensiva revolucionaria en el Cono Sur, ya prometida en el Encuentro de Managua. Los ejercicios preliminares de esta maniobra están en superficie en El Comahue, Buenos Aires, La Plata, Córdoba, Rosario y Mendoza.
Uno de los actores centrales de la guerra mundial “Contraterrorista Global” -el ISIS-, ha realizado acuerdos básicos con las FARC, nuevo pivote del proceso revolucionario regional (10). La mesa de la negociación fue tendida por el PIE -Partido de la Izquierda Europea- en Berlín, en el año 2017. A su vez, las FARC -que han simulado su desarme- han desplegado en el Cono Sur sus avanzadas, en particular en el sur chileno y argentino con araucanos adiestrados por ellos en los años pasados, por pedido del PC chileno.
La dirigencia argentina vuelve a darle tratamiento de “seguridad pública” a estos acontecimientos estratégicos, como los ocurridos recientemente en El Chubut y Río Negro y la Defensa Nacional -frente a la nueva agresión estratégica revolucionaria- está en manos de jóvenes fiscales de “Justicia Legítima”.
Decía Gastón Bouthoul hace unos setenta años: “Si quieres la Paz, conoce a la guerra”. Tenemos la impresión de que Bouthoul ni Séneca -siglo I d C- aun no han sido leídos ni entendidos por los responsables de tantas muertes de inocentes en nuestro suelo. Decía el hispano-romano: “Peor que la guerra, es tenerle miedo a la guerra”. Luego de escuchar al Ministro Garavano sostener la necesidad de preservar el espíritu y la letra de la legislación de Seguridad Nacional vigente, tenemos la certeza que, como estratega civil, el ministro carece de la más mínima información de la situación política-estratégica en que vivimos, a pesar de que está presente en el puente de mando.
¿Ha comprendido -nuestra dirigencia- que la presente guerra mundial “Contraterrorista Global” es de naturaleza totalmente distinta a las dos anteriores -la GMII 1939/1945 y la Guerra Fría 1947/1991- y que -además- la actual no reconoce disuasión alguna?
Conocer la “naturaleza de las cosas” es imprescindible para abarcar a los temas estratégicos. Lo superficial y operativo, explican a la acción táctica. Sirve a la crónica de los hechos, al anecdotario, a la visión cortoplacista. Lo esencial-sustantivo está en la profundidad conceptual del hecho socio-político -fuera del alcance de los sentidos- y en su proyección en el tiempo, en el largo plazo.
La GMII fue total, convencional y “clásica”, localizada en teatros de operaciones militares. Fue la última guerra mundial de la civilización industrial. Cuando finalizaba -1945- se lanzaron dos bombas nucleares en Japón. Con ellas nació la Estrategia Contemporánea e ingresábamos -con la computadora- a la etapa de la civilización posindustrial, la “del conocimiento”. Einstein vaticinó que regresaríamos a las guerras primitivas, las de la honda, el arco y las flechas. Con la computadora cambió el ritmo de los acontecimientos y el número de las oportunidades. Se aceleró la Historia.
La pos-GMII fue muy breve: 1945/1947. En 1947 se inició la Guerra Fría, la primera guerra mundial en ambiente QBN. Ingresábamos a la estrategia de la disuasión, que funcionó en el hemisferio N. Se vivió allí la “Pax del terror nuclear”. En el hemisferio Sur -desnuclearizado- no hubo Paz. Hubo guerras no convencionales, asimétricas, terroristas-revolucionarias, totalmente sorpresivas para países mayoritariamente subdesarrollados y en crisis recurrentes.
En 1989 cayó del muro de Berlín y en 1991 implosionó la URRS. Finalizó la guerra fría. Fueron los primeros cuarenta y cuatro años de Paz en Europa y, durante ese período se elaboraron en sus Universidades las teorías filosóficas que “marchitaron su alma”. Europa relativizó su identidad y se hizo “contractiva”, desde entonces “se odia a sí misma”. Ello afectó a los argentinos, culturalmente europeizados. El “progresismo ideológico europeo” cruzó transversalmente a todo el arco socio-político argentino y una demostración de ello la hemos visto hace unos días, en el tratamiento del aborto en las calles y en el recinto de Diputados.
La posguerra fría -1991/2001- se caracterizó por la “confusión” de los intelectuales occidentales que intentaban predecir cómo evolucionaría el mundo y las guerras, luego de la prolongada estratificación de la bipolaridad de las Repúblicas Imperiales. Aparecieron teorías “idealistas”,“realistas”,“nihilistas” y muy pocas se acercaron a los acontecimientos que se precipitaron luego del 11Sep01, con el ataque del “terrorismo global” a la “fortaleza americana”.
Esa fecha es considerada por los estrategas teóricos como el hito que señala la iniciación de una nueva guerra mundial, que nos regresó a la estrategia de la acción. La “nueva” guerra mundial ya no se desarrolla en teatros de operaciones militares, sino en y sobre las sociedades. Las bajas -en su mayoría- son de civiles inocentes. El enemigo “sin rostro” carece de responsabilidad y de límites. Se inmola para hacer entender a Occidente que la vida no le interesa. Es la segunda guerra mundial en ambiente QBN, pero esta no reconoce a la disuasión, como la anterior.
De las guerras de tercera/cuarta generación, en acto en el 2001, llegamos al año 2018 con las guerras de séptima generación, que los chinos llaman “irrestrictas” y la OTAN “híbridas”, mientras la dirigencia argentina vive aun estratificada en la guerra fría (12).
Las sesenta guerras activas -en el mundo de hoy- todas son internas:“guerras civiles”. A éstas, nuestros visionarios legisladores las “prohibieron” por Ley y ésta doctrina es la que sostienen las querellas y fiscales de los TTOOFF: “en los ´70 no hubo guerra, aquello fue un genocidio”. ¿Será una casualidad?.
Kirchner y Garré quisieron asegurar el extrañamiento de las FFAA que las leyes de “inseguridad” impusieron al Estado Nacional. Reglamentaron la Ley de Defensa y determinaron que las únicas guerras posibles para la Argentina son las convencionales, con las FFAA de nuestros vecinos, con quienes -a la vez- ¡¡queremos integrarnos¡¡. El objetivo fue mantener las FFAA argentinas sin misiones a cumplir. Transformar a las Instituciones Armadas en burocracias inútiles.
El espacio interno se trasformó en “zona liberada” para la pseudo-revolución narco-terrorista, “nacional y popular”, que operó como una gran cortina de humo a través de la política de DDHH, con la que se encubrieron niveles de corrupción inéditos.
¿Qué porcentaje -de nuestros dirigentes- ha entendido que la clásica separación entre Seguridad Estratégica y Seguridad Pública ha desaparecido?
La metamorfosis de la guerra se ha acelerado (13) pues se ha acelerado el proceso civilizatorio que la contiene. La investigación y desarrollo han encontrado en la electrónica y en las comunicaciones los medios para acortar los tiempos en la generación de medios. Como lo adelantáramos, el ritmo de la acción ha cambiado. La adaptación de gran parte de la dirigencia argentina al ritmo de la nueva etapa, no existe. A ello se suma el salto cualitativo de la civilización: el ingreso a la “etapa del conocimiento”. Hay una nueva forma de producir y una nueva forma de hacer la guerra(14).
La mayoría de los pocos que entre nosotros “cambiaron” el ritmo, confundieroncivilización con cultura. La civilización es la que aceleró su ritmo de evolución, entregándonos nuevos medios en cortos lapsos. La cultura es nuestra identidad. No evoluciona y si lo hace, nos corrompemos, pues se relativizan los valores y principios que la constituyen. Perdemos moral, ética, confiabilidad y credibilidad. Perdemos el crédito. Y eso es lo que ha ocurrido y continúa ocurriendo.
La civilización es“modernizable”,pero no lo es la cultura que la sostiene (14). “La cultura es lo que importa, es la que da forma al progreso”, como lo sostiene el Profesor S. Huntington, en el título de su último libro.
La manifestación más clara de la metamorfosis de la guerra a partir de la posguerra fría, es la “naturaleza” de la agresión de los actores “no estatales” -el complejo narco/terrorismo/revolucionario en nuestra Región- y, consecuentemente, de la imprescindible exigencia de reorganización del Estado y de la Seguridad Nacional, para evitarlos o eliminarlos.
Si esta agresión afecta a la población en su conjunto y al Estado Institucional -en todos sus niveles-, estamos en presencia de una agresión de naturaleza estratégica, pero ello no quiere decir que sea estratégica-militar.
Los nuevos actores agresores del Estado y de la sociedad, mayoritariamente no son estatales, constituyen una compleja asociación de milicianos, mafias, ONG, sectas fundamentalistas, etc. Y su modo de operar es, en la mayoría de los casos, a través del delito común, pero con consecuencias estratégicas.
Quienes hablan de sacar a los militares a las calles para combatir a la nueva amenaza, o son totalmente ignorantes del fenómeno belígero en el siglo XXI o bien quieren continuar en la actual situación y hacer del espacio argentino una gran “zona liberada” para nuestro enemigo sin rostro.
En consecuencia la Seguridad Nacional que reconocía hasta fines de la guerra fría su división en Seguridad Estratégica y Seguridad Pública, encaminadas orgánicamente por andariveles paralelos y alternativos, hoy ya no existe, pues operativamente se han incardinado, excepto en nuestro país, que llama “seguridad interior” a ambas y “defensa nacional” a la guerra clásica internacional, por Ley del Congreso; inédita ocurrencia que nos hace una reiterada excepción en el mundo.
La necesaria reorganización de la Seguridad Nacional debe considerar la “naturaleza” y la evolución del fenómeno socio-político “guerra”. La reciente creación del Ministerio de Seguridad por parte del gobierno K, nos da una clara idea de la ausencia de idoneidad y comprensión de la situación político-estratégica mundial, regional y propia, por parte de sus mentores. Cuando el mundo entero unifica a la Seguridad, la Argentina la divide, orgánica y geográficamente.
Cuando la Seguridad Nacional -en el orbe- unificaba o centralizaba sus componentes, el gobierno argentino las separaba, asegurando dejar a las FFAA sin sus funciones constitucionales. Es una prueba más de que los K, hipócritamente, siempre operaron dentro del Socialismo Siglo XXI, aunque no lo exhibieran públicamente como Bolivia, Ecuador o Nicaragua.
Desde 1988 la nueva agresión estratégica -internacionalizada en toda América- en el marco interno quedó en manos policiales y judiciales, absolutamente legos en la materia. Es lo que -sin duda- la “revolución” necesitaba y es lo que se ha logrado desde los años ´88/91 con las leyes perversas que hemos llamado “vacas sagradas”.
Bajo la excusa de lograr el “control civil” de los militares, la mayoría política dejó al país en absoluta inseguridad nacional.
Aun hoy, escuchamos por boca de las más altas autoridades del área, citar a una “seguridad interna” y “una seguridad externa”. ¿Alguien puede creer que un límite político puede detener una agresión estratégica? El criterio seguido por el legislador, fue cuanto menos absurdo. Es una prueba más que el fin perseguido por esta legislación ha sido la desaparición de las FFAA, del mismo modo en que se pretende la abolición del derecho penal.
Hemos propuesto -hace mucho tiempo- la unificación de la Seguridad Nacional en un solo Ministerio -el de Seguridad Nacional- con dos Secretarías: Defensa Nacional y Seguridad Pública. Ello nos permitiría facilitar la conducción de una Gran Estrategia Conjunta-Combinada, con economía de esfuerzos, unidad de objetivos, interoperabilidad, controles cruzados, etc.
Deberíamos iniciar -cuanto antes- la negociación de un Acuerdo de Seguridad Colectiva y Defensa Común con países “amigos” de la región y, obtenido éste, subrogar la vigente legislación perversa que nos lleva, sin dudas, a un permanente agravamiento de la situación de Seguridad Nacional y regional.
El Congreso Nacional, que con sus leyes y reformas nos ha llevado a la situación de grave inseguridad en que vivimos, no podría dejar de votar éste Acuerdo para llevarlo a categoría de Tratado que subrogue los desatinos jurídicos vigentes, frutos de nuestras guerras recientes. No votarlo demostraría mantener compromisos con nuestros enemigos de hoy; que son los de ayer, reciclados (15).
El Tratado recuperaría también un aspecto central e imprescindible para enfrentar a las guerras “híbridas”: su sostén agonal, actualmente destrozado por la supresión del Fuero Militar y de los Tribunales de Honor Sanmartinianos (16).
¿Es consciente -nuestra dirigencia- que el tipo de legislación de Seguridad Nacional vigente en nuestro país desde 1988 y 1991, es única en el mundo e intrínsecamente perversa?
Cuando se promulgó la actual Ley de Defensa Nacional, el “Cronista Comercial” nos publicó un artículo titulado “Se promulgó hoy la Ley de Indefensión Nacional”. No nos equivocamos. Tres años después -1991- en Santiago del Estero se incendiaba la Casa de Gobierno, la Legislatura y el edificio del Supremo Tribunal de Justicia, además de varios domicilios de legisladores. El gobierno nacional no pudo actuar para contener el “caos”. La Ley de Defensa se lo impedía.
Pocos días después de este hecho anárquico, uno de los artículos de la Ley de Defensa se transformaba en Ley de Seguridad Interior. En ésta, se mantenían los lineamientos de la “Ley deIndefensión” y se profundizaban sus desconceptos. Quedaba explícito que se cercenaban potestades que la Constitución le otorga al Cte J FFAA. Quince años después Kirchner-Garré reglamentaron la Ley de Defensa, para evitar que se la interprete de modo inconveniente a la pseudo revolución “chavista”, que empezaba a hacer agua.
El extrañamiento de las FFAA argentinas de su propio Estado quedaba asegurado y “el esfuerzo nacional de policía” recibía la responsabilidad de hacerse cargo de los desafíos estratégicos internos, es decir, de la Defensa Interiorfrente a las nuevas amenazas. Como el exabrupto hacía inviable a la reglamentación, la Ministro Garré afirmó al diario la Nación: “las nuevas amenazas no existen. Son una creación del Imperio para controlar a los países subdesarrollados”. Un paso más dentro de las falacias del “relato”.
Desde 1991 -con esta nueva legislación- la jerarquía institucional se invirtió, los presupuestos se invirtieron y los haberes de un Comisario, desde entonces, superan en un 30% al de un Oficial Superior de las FFAA. Éstas quedaron sin objetivos, sin cumplir las misiones centrales que la Constitución les impone. No fueron pocos los políticos que entonces se preguntaban: “¿para qué sirven las FFAA?”, mientras tanto nuestros vecinos duplicaban los presupuestos de Defensa, las reorganizaban y adquirían tecnologías de última generación.
Como era de prever, contemporáneamente las policías -totalmente ajenas a esta maniobra- fueron desbordadas por el delito común y corrompidas por el crimen organizado. Como correctivo, se nombraron ex jueces y fiscales como expertos polemólogos y estrategas civiles para “transformar y democratizar” -desde los Ministerios de Seguridad- a las “viejaspolicías de la dictadura”.
El fracaso de estas gestiones fue total, a un costo varias veces millonario y con miles de víctimas de la ignorancia, de la estupidez o del compromiso ideológico. Por último, se apeló al número. Con cursillos semestrales se incorporaron miles de nuevos agentes. Pero la inseguridad y la indefensión siguieron y siguen agravándose, día a día, a pesar de más patrulleros, más chalecos, más radios.
Los funcionarios bien intencionados, con mera visión táctica-operativa, siguen buscando “salvadores”: audaces legos que se animan a lo que no conocen. Los mal intencionados cosechaban lo que han sembrado y “cuando peor, mejor”, aunque los muertos inocentes aumentaban día a día y lo siguen haciendo.
La carencia de conceptualización y visión estratégica, más la no comprensión de que ya estamos en la “era posindustrial”, nos lleva a tropezar -reiteradamente- con la misma piedra, desde 1984 hasta la actualidad.
La próxima reunión del G 20 en la Argentina y los acontecimientos internacionales en curso, están obligando al gobierno a entender que se transita por un camino equivocado, que debe racionalizar la Seguridad Nacional y entender “la naturaleza de las cosas”. Pero, en la coalición gobernante están presentes los creadores de las “vacas sagradas”, son quienes reemplazaron la Política de Seguridad Nacional por la Política de DDHH (17).
¿Qué se hará entonces? ¿Prevalecerá la ideología o se impondrá la realidad de la situación política-estratégica, que hasta ahora se declaró inexistente? Con la sola eliminación de la Reglamentación de la Ley de Defensa no alcanza. Esta fue un mero reaseguro que buscaban los pseudo-revolucionarios en retirada. (18)
Si la Seguridad Nacional es la primera responsabilidad del Estado Nacional ¿no sería oportuno que la dirigencia argentina tome conocimiento de los desatinos ideologizados de los diletantes que nos ha traído a la situación presente y que, de una vez por todas, se inicie la normalización racional de la Seguridad Nacional? ¿Cuántos conciudadanos más deben morir para que como sociedad reaccionemos? El enroque de mandar las FFAA a las fronteras -con las manos atadas- y las FFSS a la grandes ciudades, es hacerle el juego al “enemigo sin rostro”, además de demostrar falta de idoneidad, ausencia de ideas, de audacia y de la energía que exige la circunstancia en que vivimos.
Ha llegado el momento de imitar a Demóstenes, cuando se dirigía a los atenienses “para convencerlos a obrar correctamente”. Son los fines los que indican qué medios necesitamos para la reconstrucción. Y las “leyes de inseguridad” prohíben el planeamiento de las verdaderas amenazas.
Desde el Estado -en años pasados y en nuestra presencia- se ha tratado de “vender” a nuestros vecinos el modelo de legislación de Seguridad Nacional argentino, pero nadie lo “compró”. Hemos sentido vergüenza ajena por las respuestas que recibieron nuestros empinados “vendedores”.
Está presente la oportunidad para entender la “naturaleza del fenómeno socio político” que enfrentamos, que es estratégico, pero no estratégico militar. Su solución exige una Gran Estrategia conjunta-combinada y fuertes controles cruzados.
Ese es el rol militar en esta nueva guerra asimétrica de séptima generación y no subordinar las FFAA a las policías, como seguridad fronteriza desarmada.
Hay que restablecer los roles constitucionales de la instituciones. Solo la miopía del lego puede repetir los fracasos conocidos del empleo táctico de las FFAA, cualquiera fueren sus formas, para combatir al narcoterrorismo. Ésta opción ya ha fracasado en Iberoamérica. Regresemos a la Constitución Nacional y entendamos la circunstancia política-estratégica “líquida” que nos rodea, en el siglo XXI.
El FMI nos ha entregado un crédito superior al que solicitamos -el 25% de su encaje-. Hasta hoy no se ha escuchado un solo comentario que interrelacione la situación política-estratégica del subcontinente, con la crisis cambiaria y el nuevo crédito argentino. ¿Es porque no se entiende la naturaleza de la nueva guerra mundial en Iberoamérica, o porque no existe una visión global de la situación regional, o porque la ciudadanía debe ignorarla, para beneficio de unos pocos?
El presidente dijo que “ya no hay más lugar para la locura en la Argentina”, dirigiéndose al peronismo. Me pregunto si el oficialismo y la oposición han entendido los mensajes con que el G7 dio sus instrucciones a Lagarde. Si no las entienden, la “locura” que avizoramos seguirá adelante. Será nuestra disgregación territorial.
Una “Gran Nación”, en el siglo XXI, no soporta la conducción de “pequeños políticos”. Una visión geopolítica y estratégica del mundo globalizado es indispensable dado los movimientos tectónicos posguerra fría.
¿Confunde -nuestra dirigencia- el concepto de “populismo” con el de “revolución”, o es una confusión a designio como parte del “relato” o de la “narrativade la memoria”?
El temor reverencial que la izquierda revolucionaria ha logrado imponer a gran parte de nuestra dirigencia y particularmente a algunos medios de comunicación, ha logrado que -públicamente- el empleo de ciertas palabras esté sumamente restringido. Las enseñanzas del “Grupo de Frankfurt” han sido sumamente eficaces.
Tal es el caso del término “revolución”. Se lo ha reemplazado por el de “populismo”, pues éste último “huele a oveja”, se acerca a “pueblo” o a lo “popular” y ello es bueno para la modalidad gramsciana de hacer la “revolución”. No se habla de “guerra contrarrevolucionaria” sino de “genocidio”, no porque se ignore el desconcepto, sino porque no se podría continuar con el “circo jurídico de los juicios de lesa humanidad”, si se aceptara que hubo una guerra no convencional, como la hubo.
Si las palabras exponen el contenido de las ideas o de un mapa de ellas -el concepto-, podemos cambiar el sentido de las ideas o conceptos, reemplazando las palabras e invirtiendo el proceso mental-discursivo. Afectar las ideas o conceptos, desde el reiterado mal empleo de las palabras.
Pongamos atención en los informativos televisivos o radiales o en los titulares de los medios escritos y encontraremos a éste ejercicio -altamente eficaz-, repetido una y mil veces a lo largo del tiempo. En los medios se llama “represor” a un soldado, pero los soldados combaten, no reprimen como lo hacen Jueces y sus auxiliares, según reza el código penal. Pero “represor” tiene un efecto mucho más eficaz al fin perseguido por el revolucionario o el periodista consciente o inconsciente que los sirve.
Al “terrorista” se lo cita como “disidente político”, al “agresor” como “víctima de una persecución ilegal”, a los “centros de reunión de prisioneros” como “lugares clandestinos de detención ilegales” y así podríamos continuar citando un lenguaje que se origina en las usinas revolucionarias de propaganda, pero que es totalmente tomado por el periodismo y aun por la justicia penal federal.
El resultado es paradójico. Gran parte de la sociedad ayer agredida, hoy habla, piensa y alienta a su antiguo agresor. Nuestros DDHH, que fuimos a defender, quedaron en manos de los agresores revolucionarios comunistas que no respetan un solo derecho humano en donde gobiernan. Pero ello no es percibido por la gran mayoría. Ello nos da una idea de la idoneidad de quienes conducen estas operaciones especializadas sobre la opinión pública.
¿Conoce -nuestra dirigencia- cuál es el principal riesgoestratégico y cuál es la principal amenaza estratégica de la Argentina actual?
Hay un importante sector dirigencial que entiende que la ciencia y arte de la Estrategia, es de exclusiva responsabilidad militar, probablemente porque así eran designados los comandantes -estrategas- de las fuerzas griegas, en la antigüedad. La Estrategia, en nuestro tiempo, como dependencia de la Política, es su expresión activa. La Gran Política determina los Objetivos Políticos generacionales y la dosificación del poder para alcanzarlos. La Gran Estrategia maniobra para lograrlos, resolviendo los conflictos que encuentra en el camino.
La formación como estratega de quien decide ingresar a la Gran Política, es indispensable y también lo es para quienes asumen responsabilidades estratégicas sectoriales, en el alto nivel político. La exigencia constitucional de idoneidad no se está cumpliendo en el área de la Seguridad Nacional. Hay quienes creen que la guerra es responsabilidad de los militares. No es así. La guerra es un hecho socio-político. Se abre y se cierra en el plano político. Los militares se ocupan de la batalla -en el nivel estratégico militar- y de los combates -en el nivel operacional y táctico-. A la guerra la deciden y orientan los responsables del plano político, en el más alto nivel del poder nacional.
Por todo lo expresado, el conocimiento de los “riesgos y amenazas estratégicas” por parte de “quienes viven dentro de las murallas”, es deexclusiva y excluyente responsabilidad política, con asesoramiento del alto comando militar. Si esa responsabilidad era ya importante en tiempos históricos, hoy, en tiempo de las guerras asimétricas, civiles y que tienen como espacio de desarrollo a la sociedad misma, ese conocimiento es central(18).
El 70/80 % del esfuerzo de las guerras de séptima generación se desarrolla para lograr el “manejo de la opinión públicainterna y externa”, sin lo cual estas guerras están perdidas de antemano.
La Argentina de hoy, ante exigencias situacionales que obligan a volver la mirada sobre las olvidadas y humilladas FFAA, ¿en qué estadio nos encontramos para “recuperarlas en tiempo”, con una ex – guerrillera en la presidencia de la Comisión de Defensa en la Cámara de Diputados y con los redactores de las leyes de inseguridad en la conducción del área de defensa y en la supervisión de la formación y perfeccionamiento de los cuadros militares?
¿Cómo podemos recuperar una sana Política de Seguridad Nacional, reemplazada hace décadas por la Política de DDHH, si su principal operador-querellante ante los TTOOFF y apoyo financiero de las organizaciones de DDHH dependientes del Foro de Porto Alegre, es el propio Estado Nacional a través de su Ministerio de Justicia y de la Secretaría de DDHH?
Desde 1984 el “riesgo estratégico principal” de nuestra Patria, es la pérdida del Estado Institucional, que ha sido ferozmente atacado en su núcleo duro –las FFAA-, empleando para ello a la prensa adicta, al presupuesto nacional y a la Justicia Penal Federal que a la vez se auto-destruye corporativamente al prevaricar en conjunto y conscientemente.
Dichos ataques han sido inducidos por nuestros enemigos en las guerras de fines del siglo XX, actuando de consuno y la ejecución ha sido instrumentada por los sucesivos gobiernos, desde 1984, con breves intervalos en los que se persiguió la “pacificación”. De esa manera, cuando llegamos a diciembre de 2015 estábamos a un paso del “Estado Fallido” (19).
Pensábamos que en los primeros cien días del nuevo gobierno habría un giro copernicano que recuperaría a las Instituciones, para que ellas condujeran “el regreso a la normalidad”. No fue así. Algunos componentes de la coalición de gobierno lo impidieron y muy probablemente seguirán haciéndolo. El sincericidio de Artaza, cuando dice por TV “no sé qué hace mi partido en éste gobierno”, nos releva de mayores aclaraciones. El “Estado Fallido” continúa siendo nuestro “riesgo estratégico principal”, siguiendo ahora el ritmo del nuevo “gradualismopos-turbulencia cambiaria”.
Desde 1984 la “amenaza estratégica principal” de nuestro país es el narco-terrorismo–revolucionario, en continua evolución y fortalecimiento en el transcurso de las últimas décadas. Los rumores, trascendidos y discursos oficiales recientes, referidos a la “reconversión” de las FFAA sin el reemplazo de las “vacas sagradas”,la hacen absolutamente inviable. Esas leyes han hecho del espacio argentino una enorme “zona liberada” para la agresión del narco-terrorismo-revolucionario y el delito común, en la continuidad histórica del proceso estalinista iniciado en 1959/60.
EN CONCLUSIÓN:
La naturaleza de las guerras en acto exigen que la ciudadanía conozca y participe en la Seguridad Nacional, frente a la grave situación estratégica que nos afecta. Nuestra población, al respecto, permanece absolutamente desinformada.
Somos un país en doble posguerra y convivimos con un “doble estado de guerra” pues ambas permanecen abiertas dentro de esa categoría. La mayoría de nuestra dirigencia lo ignora.
Nos abarca una guerra mundial en su decimoséptimo año de discontinuo desarrollo. Es la segunda en ambiente QBN, pero esta no reconoce disuasión y por ello una sorpresa violenta es inevitable en cualquier lugar del mundo. Tampoco es conocida, pues se entiende que nos es ajena.
La Seguridad Pública y la Seguridad Estratégica se han incardinado durante la posguerra fría. El mundo reorganiza al Estado Nación para asumir y resolver a los nuevos desafíos estratégicos. Mientras tanto la Argentina continúa desorganizada, ignorando la naturaleza de los riesgos y amenazas presentes y piensa con criterios ideologizados o con ideas del siglo XIX (20).
Nuestra inseguridad nacional no es casual. Es consecuencia de la inédita y perversa legislación vigente inducida por nuestros enemigos, que extrañó a las FFAA del Estado y entregó las responsabilidades estratégicas internas a las policías. El precio en vidas inocentes que estamos pagando, es enorme.
Existe una evidente actitud política y periodística -de algunos sectores- que tiende a ocultar la agresión terrorista revolucionaria de los años ´60, ´70 y ´80 y sostienen una constante apelación al “terrorismo de Estado”, con la finalidad de tergiversar la historia y mantener una narrativa favorable a un proceso revolucionario neo-marxista, derrotado en el terreno y en las urnas, pero aun presente.
El “entrismo de izquierda” en los partidos políticos tradicionales desde los ´80 y el “progresismo europeo”, transversal a todo el espectro político partidario, ha quebrado a nuestra identidad cultural, nos ha llevado a una sociedad “light”,“pos heroica” y “contractiva”, que en la búsqueda del “bien-estar” ha perdido el “bien-vivir”, ha aceptado el progresivo vaciamiento institucional del Estado y no es consciente del trastocamiento de la victoria táctica argentina contra el agresor revolucionario, en una derrota político-estratégica que nos lleva al “Estado Fallido” y a un probable regreso a una situación revolucionaria que creíamos superada (21).
La “política de DDHH” ha reemplazado a la “política de seguridad nacional” desde 1984 y ello no ha cambiado el 10 de Diciembre de 2015. Permanecemos en inseguridad pública e indefensión estratégica y las innovaciones prometidas profundizan los desconceptos originales, retenemos el “riego estratégico” y la “amenaza estratégica” se expande desde la faceta “narco-terrorista” hacia una aproximación preliminar de la etapa final “revolucionaria”. El IEEBA ha planteado, en las últimas décadas, una propuesta para resolver estos desafíos, pero no hubo respuestas por parte de los responsables estatales.
La Argentina vive una situación que no da lugar a seguir ocultando la verdad. TODA LA VERDAD. El agravamiento de la inseguridad tiene, en la muy probable recesión económica del segundo semestre, un peligroso catalizador.
Por lo dicho, hago mías las palabras del Ex Cte Supremo del Pacífico:
“Estoy preocupado por la seguridad de nuestra gran nación;
no tanto por una amenaza externa,
sino por las fuerzas insidiosas que trabajan adentro”.
Grl Douglas MacArthur – 1945
BIBLIOGRAFÍA:
(1). G. Cabanellas de Torres. “Diccionario Militar”. Tomo I. Bibliográfica Omeba. 1961.
(2). E. de Vergara. “Las diferencias conceptuales entre Seguridad y Defensa”. Febrero de 2009. www.ieeba.org
(3). H. J. Auel. “La Argentina Encapsulada”. Julio de 2010. www.ieeba.org
(4). H. J. Auel. “El Estado Nación regional frente a las amenazas estratégicas globalizadas”. Junio de 1998. www.ieeba.org
(5). H. J. Auel. “La dirigencia argentina frente a los desafíos de la Seguridad Nacional en el siglo XXI”. Agosto de 2015. www.ieeba.org
(6). H. J. Auel. “Escándalo judicial en Tucumán”. 25 de Mayo de 2016. www.ieeba.org
(7). H. J. Auel. “El narco-terrorismo, el Estado Nacional, la democracia y las FFAA”. 26 de Abril de 2014. www.ieeba.org
(8). J. B. Jofre. “Fue Cuba”. E. Sudamericana. 2014.
(9). H. J. Auel. “Relaciones cívico-militares, la necesaria reconstrucción del Estado y de la imprescindible Seguridad Nacional, Regional y Continental”. 2013. www.ieeba.org
(10). H. J. Auel. “Las Farc-EP, actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano”. 05 de Septiembre de 2017. www.ieeba.org
(11). H. J. Auel. “La guerra mundial contraterrorista global, ¿híbrida…con derivación QBN”. Abril de 2015. www.ieba.org
(12). La ilegitimidad e ilegalidad de la actual legislación de Seguridad Nacional queda demostrada por los sucesivos presidentes que la incumplieron, o intentaron hacerlo. El primero de ellos fue el mismo presidente que la promulgara, el Dr. Alfonsín, que empleó ilegalmente tropas militares para recuperar al RIMec 3 -tomado por Gorriarán Merlo con terroristas contratados- a través de una “orden verbal”. El presidente de la Rúa, intentó emplear ilegalmente fuerzas militares ante el caos desatado en Plaza de Mayo, con numerosos muertos, a través de “una sugerencia”. Recientemente, la presidente Kirchner empleó ilegalmente elementos de las FFAA en el “Escudo Norte”, con “una resolución administrativa” y una doble simulación: debían simular la ejecución de ejercicios militares ante la Justicia, mientras simulaban que “contralaban” las fronteras, ante la prensa, pero en los hechos tenían prohibición de hacerlo, -un detalle más del falaz “relato”-.
(13). H. J. Auel. “El pensamiento estratégico militar en el siglo XXI”. Octubre/Noviembre de 2017. www.ieeba.org
(14). H. J. Auel. “Cultura y Civilización – La Guerra: continuidad y cambio”. Diciembre de 2001”. www.ieeba.org
(15). J. Corrado. “Las Guerras de la Tercera Especie en las Américas, en el ámbito de la Guerra Mundial Antiterrorista”. Octubre de 2002. www.ieeba.org
(16). H. J. Auel. “La política de DDHH, el muro más alto a superar por el actual gobierno”. 22 de Junio de 2016. www.ieeba.org
(17). H. J. Auel. “Política de DDHH Vs. Política de Seguridad Nacional”. 01 de Agosto de 2017. www.ieeba.org
18). J. Corrado. “Las Guerras de la Tercera Especie en las Américas, en el ámbito de la Guerra Mundial Antiterrorista”. Octubre de 2002. www.ieeba.org
(19). H. J. Auel. “Arena… ¿o pan rallado?”. Diciembre de 2017. www.ieeba.org
(19). H. J. Auel. “¿Habrá reformulación de la Seguridad Nacional?”. 01 de Agosto de 2017. www.ieeba.org
(20). H. J. Auel. “Terrorismo Global y terrorismo doméstico en el siglo XXI”. Octubre/Noviembre de 2017. www.ieeba.org
(21) F. G. Auel. Tesis de la Licenciatura de Estrategia: “La Argentina y su probabilidad de llegar a la situación de Estado Fallido, como riesgo estratégico en el mediano plazo”. Agosto de 2011. www.ieeba.org
La producción del Centro de Estudios de Historia, Politica y Derechos Humanos de Salta presenta el documental dirigido por Andrés Edmundo Paternostro, que fuera prohibido en la Feria del Libro en Argentina.
[ezcol_1half]
English Version
A Centre for the Studies of History, Politics and Human Rights of Salta presents: An Andres Edmundo Paternostro documentary
FOR THE SAKE OF REVENGE
[/ezcol_1half]
[ezcol_1half_end]
versão portuguesa
Centro de Esttudos em Historia, Politica e Direitos Humanos Salta apresenta: Un documental de Andres Edmundo Paternostro
el 3ro. no discierne ni entiende lo que los otros disciernen.
El 1ro. es excelente, el 2do. es bueno y el 3ro. es inútil”.
Nicolás Maquiavelo.
LA GRAVE INSEGURIDAD NACIONAL, TIENE BASE LEGAL/ILEGAL.
EL RIESGO ESTRATÉGICO CENTRAL QUE PADECE NUESTRA ARGENTINA.
LAS AMENAZAS ESTRATÉGICAS SURGIDAS EN LA POSGUERRA FRÍA.
¿HABRÁ ´REFORMULACIÓN´ DE LA SEGURIDAD NACIONAL?
LA GRAVE INSEGURIDAD NACIONAL, TIENE BASE LEGAL/ILEGAL.
El día 20 de Marzo pasado, en el ámbito de la Academia Argentina de Asuntos Nacionales e Internacionales, desarrollamos muy brevemente -en una conferencia- el tema del epígrafe. Hoy nos disponemos llevarlo al papel a solicitud de Profesores Patagónicos asociados a nuestro Instituto, ostensiblemente preocupados por los acontecimientos terroristas provocados por la RAM -en los últimos años- en el Comahue y las graves promesas formuladas por su jefe ante el juez que hace unas semanas lo extraditó a Chile.
Puede llamar la atención de nuestros lectores que el título se presente como un interrogante. Ello se debe a que la información fragmentada que hemos recogido hasta hoy, acerca del esencial problema de la “reformulación”, nos trae serias dudas en cuanto a su viabilidad, por cuanto existe un condicionante-determinante: “solo se removerá la Reglamentación de la Ley de Defensa” -2006-, obra de la ministro Garré dieciocho años después de la promulgación de la Ley de Defensa -1988- y catorce años después de la promulgación de la Ley de Seguridad Interior -1992-.
Humildemente, pensamos que ello impedirá alcanzar la “reformulación” de la Seguridad Nacional (1). A lo sumo se reducirá el presupuesto y el número de personal, se venderán propiedades y se modificará el despliegue de los elementos. Operaciones cosméticas que encubrirán que “todo sigue como era entonces”: la inseguridad pública y la indefensión estratégica SE AGRAVARÁN. Su base legal seguirá siendo ilegal (2).
La ley de Seguridad Interior fue la ampliación de un artículo de la Ley de Defensa y la tardía Reglamentación de ésta última modificó -en el 2006-su espíritu y su letra, convirtiéndola de hecho en una nueva Ley de Defensa ¡dictada a través de un decreto del PEN!.
Esta grave irregularidad jurídica se sumaba a otras, aun más graves. La Ley de Defensa -de 1988- y la de Seguridad Interior -de 1992- cercenaron los derechos que la Constitución Nacional le otorga a los Cte (s) J FFAA a pesar que -irresponsablemente- hayan sido dos de ellos quienes las promulgaron. Habían pasado incólumes por las Comisiones de Asuntos Constitucionales de ambas Cámaras y ambas Cámaras las aprobaron ¡por unanimidad! (3)
Estos múltiples desatinos anticonstitucionales son una clara demostración de los vientos que soplaban en esos años de nuestras posguerras y de nuestras derrotas estratégicas.
“En estos momentos no podemos hacer otra cosa”, me decían los políticos de las más diversas extracciones, cuando se les señalaba la irracionalidad de la legislación de “inseguridad” que habían elaborado. Eran conscientes de su extravío, excepto aquellos que sí sabían lo que hacían: las FFAA eran extrañadas -como instituciones- del Estado Nacional, por ley. No tendrían verdaderos objetivos a cumplir y por lo tanto, tampoco entregarían valor agregado alguno a la nación, a la que se debían. No habría en adelante reconocimiento social hacia las FFAA.
Eran los autores de estas leyes quienes preguntaban y aun preguntan públicamente: “¿para qué sirven las FFAA”?. Lo que no les fue posible en los combates de los ´60/´70, lo lograron desde 1984 en el Congreso Nacional: las FFAA “residuales”, bajo control civil “subjetivo” (4), ya no serían un obstáculo para el proceso revolucionario iniciado en 1959 y que aun continúa, sin plazos y por otros andariveles.
Así las cosas, el diario La Nación del 06 Mar 17, en su editorial preguntaba: ¿Cómo deberíamos considerar al EI (5), un ente nacido a fines de 2013 y con presencia destructiva hoy en al menos 18 países?. Y responde -sin ser un especialista en el tema el responsable del editorial-: “Deben actualizarse las normas y optimizarse la estructura operativa y el despliegue estratégico de las Fuerzas Armadas para potenciar su capacidad disuasiva mediante equipamiento moderno y organización para respuestas inmediatas y eficaces ante situaciones de amenazas internas y externas”.
Un año después del Editorial de marras, nuestra absoluta inseguridad y total indefensión continúan, como lo demuestran las periódicas mediciones de opinión y la situación que nos aflige. Son -en las últimas décadas- preocupaciones centrales de nuestra población. Sepamos que ambas se originan en la legislación perversa e inédita que nos han dejado los continuadores, admiradores o sumisos representantes de las derrotadas organizaciones armadas de los ´60, ´70 y ´80, desde 1988 hasta hoy, luego de “trastocar” su derrota táctica en victoria estratégica, a fines de 1983.
El martes 13 de Junio de 2006, “Página 12” celebró con júbilo el éxito alcanzado con la firma del presidente de la Rca. de la Reglamentación de la Ley de Defensa, en presencia de los cuatro Jefes de los EEMMFFAA, impávidos, ingenuos y complacientes. Sin duda que era un importante paso para el “socialismo siglo XXI” -nombre adoptado por el castro-comunismo en ese momento-, que lograba, en la ruta para alcanzar el “estado fallido” (6), inmovilizar aun más a las FFAA. Decía el diario oficialista K, Página 12, aquel 13 de Junio de 2006:
“A contramano de los deseos de los Estados Unidos, que insisten con la necesidad de borrar la frontera entre defensa y seguridad interior, Garré destacó que el decreto describe con “absoluta precisióncuál es la responsabilidad primaria de las Fuerzas Armadas, dejando afuera claramente cuestiones que tienen que ver con la seguridad interior”. Aclaró que“las denominadas nuevas amenazas (terrorismo, narcotráfico y crimen organizado) no son materia de responsabilidad de las Fuerzas Armadas”, cuyo trabajo –indicó– “debe orientarse estructural y organizativamente hacia la conjuración de situaciones de agresión externa perpetradas por fuerzas armadas de otro Estado”.
En ese contexto, la ministro puso el acento en la posibilidad de “proyectar con los otros países de la región un Sistema de Defensa Subregional, interdependiente, interoperable, con medidas de confianza mutua y condiciones políticas suficientes para generar un proceso muy especial en esta región, que es una región de paz”. Los considerandos del decreto estipulan en forma taxativa que “se rechazanenfáticamente todas aquellas concepciones que procuran extender y/o ampliar la utilización del instrumento militar en funciones ajenas a la defensa y a cargo de otras agencias del Estado, usualmente conocidas bajo la denominación de nuevas amenazas”.(Las negritas y subrayados son nuestros).
Habían transcurrido solo ocho años desde último asalto del ERP al RIMec 3, en la Tablada y por Decreto la Ministro de Defensa expresaba -en presencia de los altos mandos militares- que no habría riesgo o amenaza estratégica alguna dentro de los límites del país. Debían orientarse -las FFAA- “estructural y organizativamente hacia la conjuración de situaciones de agresión externa, perpetradas por FFAA de otro Estado”.
Alguien debería avisarle a la ex-ministro de defensa -¡hoy presidente de la comisión de defensa de la Cámara de Diputados!- que transcurridos doce años de su “brillante” reglamentación, las sesenta guerras activas en el mundo SON TODAS INTERIORES. GUERRAS CIVILES, SRA (7). Si la ex–ministro tuviese un mínimo resto de vergüenza o “discernimiento”, debería renunciar a su actual cargo en la Comisión de Defensa. Como polemóloga nos da vergüenza ajena. Como ex-guerrillera, debería estar entre rejas.
EEUU había recibido dentro de su “fortaleza bioceánica” el ataque del 11S01 y días después ese espacio ya era una nueva área estratégica. No era Washington “que insistía con la necesidad de borrar la frontera entre defensa y seguridad interior”, era la dura realidad posguerra fría que el relato oficial K ocultaba, provocando innumerables víctimas inocentes en el país, para llevar adelante la pseudo-revolución y una sistemática corrupción, que terminará desplazándolo del poder el 10 Dic 15.
Sin dudas que el objetivo de la extemporánea reglamentación era reasegurar jurídicamente lo que ya se había establecido en las Leyes de “Inseguridad”. La revolución siglo XXI empezaba a hacer agua, a pesar de que “había llegado para quedarse” o “que iban por todo”. Era necesario avanzar un poco más en la maniobra del “control civil de los militares”, a pesar de haber logrado su desarme por vía presupuestaria, su división entre retirados y activos por vía de sus haberes y, principalmente, continuaban llevándonos masivamente a los legos TTOOFF y para juzgarlos ilegalmente, como criminales comunes, buscando su aplastamiento moral.
El propio presidente de la CSJ -factor clave de esta última maniobra- aun hoy intenta, periódicamente, legitimar sus gravísimas arbitrariedades escudándose en que cumple con una “política de estado”. Como ex-montonero no puede ignorar el Dr. Lorenzetti que, lograda la eliminación de la capacidad operacional de las Fuerzas, a él se le ha encomendado la eliminación de la autoestima de los soldados argentinos por vía judicial. PERO, hay muchos “Larraboures” y muchos “Lunas” en las FFAA argentinas, que cantan el Himno mientras los torturan física y moralmente. Saben que la verdad llegará y están preparados -desde sus cunas- para esperarla, aunque ya sean ancianos. Es el testimonio que hoy la Patria nos exige a los de edad provecta, ante las nuevas generaciones.
EL RIESGO ESTRATÉGICO CENTRAL QUE PADECE NUESTRA ARGENTINA.
Hace décadas que el riesgo estratégico central de nuestra querida Patria es la pérdida progresiva y constante del Estado Institucional, en todos sus niveles. Probablemente por ser éste un concepto abstracto nuestra dirigencia no lo asume, pues no lo ve. El nivel de degradación alcanzado por las Instituciones Constitucionales exigirá un esfuerzo muy lúcido y prolongado para recuperarlas, si llegáramos en algún momento a comprenderlo y decidirlo.
En lo que hace a la “reformulación” de la Seguridad Nacional, específicamente, la recuperación de la Institución FFAA es una condición previa e imprescindiblea la existencia de un status de Seguridad y Desarrollo. Las FFAA constituyen el núcleo duro del Estado Nacional. Junto a la Institución Judicial otorgan a la sociedad la Pax y la credibilidad necesarias para alcanzar nuestra pretendida recuperación socio-económica.
Ésta no va a llegar si no se recupera previamente la confianza en el país y ésta es solo posible si tenemos Seguridad y Justicia, obligaciones primarias del Estado-Nación y su razón de ser.
Si quienes conducen el país no comprenden esta exigencia y no establecen prioridades para el restablecimiento del Estado Institucional -como instrumento jurídico indispensable al logro de los objetivos establecidos- no habrá inversiones ni salida del estancamiento. Lo que habrá es desconfianza, “resistencia” conducida, desarticulación de las coaliciones electoralistas, desorden social e inconformismo violento y creciente. El gobierno busca “ganar tiempo” para llegar al “mundial” y luego al segundo semestre, pero en realidad está perdiendo un tiempo que no volverá, mientras la revolución agazapada se recupera y desgasta.
Estamos saltando de un trapecio muy elevado a otro, sin red de seguridad y sin pacificación. Pretender salir del sigiloso proceso revolucionario argentino a la “normalidad”, citando a aquel como mero “populismo” y priorizando a la economía en detrimento de la Seguridad y la Justicia, es absurdo. Es cobardía frente a los actuales espantapájaros de la izquierda revolucionaria y un fracaso anticipado. Es no entender la naturaleza de las cosas y no haber aprendido nada en los últimos tiempos, a pesar de los dramas ya vividos (8).
No desconocemos que hacerlo es difícil. Muy difícil. Décadas de trabajo psicopolítico sobre el electorado han creado falsos mitos, un relato falaz y hasta un nuevo lenguaje. Cuando más se demore en retomar el camino de la Verdad y de la Justicia, las probabilidades de un regreso “revolucionario” serán aún mayores. Es lo que ya insinúa su presencia callejera bajo la consigna de la “resistencia” y que percibe cualquier observador independiente, con sensores bien formados en Ciencias Sociales.
Si no se asume que ambas instituciones -FFAA y sistema judicial- han sido desarticuladas por nuestros enemigos del siglo XX (9) a través de la colusión -tan evidente como desconocida- de la inteligencia británica y del neoterrorismo revolucionario, el restablecimiento institucional del Estado Nacional será imposible. El oportuno empleo de una maniobra estratégica de aproximación indirecta en los ‘80 nosha inducido la auto-destruccióndel Estado Nacional (10) y frente a ello solo se observan escasas reacciones intuitivas. Las dirigencias no están a la altura de los desafíos actuales y la sociedad se siente huérfana. Que mil “intelectuales progresistas” rechacen el encausamiento de Luis Mattini en el caso Larraboure, da una idea del alcance y penetración de la “narrativa revolucionaria” (11).
Nuestra Justicia Penal Federal está destruyendo a las FFAA -al Ser Militar- y al hacerlo se suicida, arrasando con la Constitución, con los principios del derecho penal y con la credibilidad de todo el sistema judicial, puesto hoy en la picota, como nunca antes en nuestra Historia Institucional (12).
Con lo expresado, queda dicho que no habrá “reformulación” de la Seguridad Nacional si no se inicia primero la recuperación del núcleo duro del Estado-Nación: las FFAA y el Sistema Judicial. A partir de allí -y recién entonces- habrá que encarar con realismo a las “verdaderas amenazas estratégicas” que el concierto internacional ha reconocido hace años y las ha asumido rápidamente, terminada la posguerra fría (13). En la Argentina encapsulada de los K (14) se pretendió ignorar la actual circunstancia mundial, dinámica y conflictiva, reemplazándola con un “amañado relato” aun subsistente en gran parte de la comunicación social y de la sociedad.
Si se recuperara la posibilidad de reiniciar el planeamiento estratégico, la inteligencia estratégica, la reorganización de la Defensa, de las FFAA y de los sistemas de armas, se asegurarían los objetivos de largo plazo. Habría credibilidad creciente. Son los fines los que indican qué medios (15). Por el momento esta metodología está invertida. Hay propuestas anunciadas de nuevas organizaciones y nuevas adquisiciones, sin que se hayan establecido con anterioridad qué tipos de guerra se prevén, en qué ámbitos geográficos, en qué oportunidad, etc. Las “vacas sagradas” –la legislación vigente- que nos dejaron los simpatizantes de la pseudo-revolución, lo impide (16).
En el ámbito de la Seguridad Nacional el “gradualismo del cambio”, aun no ha llegado. Se han tomado algunas decisiones positivas en áreas administrativas secundarias, pero no se lo ha hecho en sus áreas centrales, de naturaleza estratégica. Desde 1991 la perversa “política de derechos humanos” -como instrumento eje de la maniobra neo-marxista en Iberoamérica- sigue ocupando el espacio de una imprescindible y sabia “Política de Defensa”, frente a los “estados de guerra” heredados y frente a los múltiples, nuevos e inéditos conflictos que nos abarcan, en el siglo XXI.
LAS AMENAZAS ESTRATÉGICAS SURGIDAS EN LA POSGUERRA FRÍA.
Contrariamente a lo expresado por la ministro Garré y su diario preferido Página 12, el narcoterrorismo y el crimen organizado -las mafias- constituyen actualmente los pilares de sostén del proceso pseudo-revolucionario que conduce el Foro de San Pablo -FSP-: son las principales amenazas estratégicas de Iberoamérica en las primeras décadas del siglo XXI. En Argentina estas amenazas estratégicas están en manos policiales, como meros hechos de seguridad pública. Es por ello que a la vigente legislación de Seguridad Nacional la calificamos de “perversa”.
La razón de negar la existencia de dichas amenazas y además sostener una legislación de altísimo costo en vidas de inocentes, es que el neo-marxismo se sostiene financieramente con estas ONG, con las que ha firmado “acuerdos estratégicos” (17). Eliminar o controlar la Seguridad Nacional y sus medios les permite a estas organizaciones territorialidad -santuarios-. Se han constituido en los nuevos enemigos de Occidente y han obligado repensar las “guerras asimétricas”. La mayoría de la dirigencia política argentina, niega estos hechos objetivos.
Reconocer la existencia de las “nuevas amenazas estratégicas” no quiere decir que estas sean de carácter “estratégico militar”. La agresión la producen civiles, terroristas, milicianos, delincuentes de guantes blancos o negros, religiosos extraviados y ONG (s) de variadas especies -desde derechos humanos, feministas, verdes, indigenistas radicales y hasta entidades de beneficencia-. Quienes no conceptualizan al nuevo fenómeno belígero, imaginan a las tropas militares desplegadas en las calles para enfrentar al nuevo enemigo no estatal. GRAVE ERROR. No ven lo sustantivo, sino solamente lo verbal: la acción operacional. Son mentalidades tácticas que nos pueden llevar a un nuevo gran fracaso.
Hemos repetido hasta el cansancio que la violencia en las guerras de la civilización pos-industrial ya no se desarrolla en los teatros de operaciones militares, sino sobre las sociedades. Las bajas son mayoritariamente civiles inocentes. En consecuencia, darle a una agresión de éste tipo una respuesta militar-operacional, es no entender la naturaleza del desafío a superar. Lo que exige esta sorpresiva innovación socio-política, es una GranEstrategia, elaborada en el alto nivel conjunto-combinado. Es allí donde aparece el rol de las FFAA y luego, en una función necesariamente combinada, la supervisión cruzada del Plan Regional Estratégico General. Ante una agresión “internacionalizada”, una respuesta “internacionalizada”.
El eventual próximo resultado electoral en Brasil y el destino de Lula en un calabozo, constituyen hechos definitorios para la pseudo revolución Iberoamericana. No olvidemos que Lula es el Nro 2 en la cúpula del FSP, hoy prácticamente acéfalo. El PT, sin Lula, difícilmente retenga la Secretaría ejecutiva del Foro, que pasaría de una influencia moderada estilo social-demócrata, a la rústica presencia estalinista-castrista de las FARC, la nueva conducción del PC de La Habana y el natural ascenso del sandinismo nicaragüense y del chavismo de las Islas caribeñas. Habrá una conducción más violenta de la pseudo-revolución en el Cono Sud, proporcional a su desalojo del poder político, por vía electoral.
Éste relevo en la conducción del órgano supranacional FSP se hará sentir en la Región en el año 2019, en particular en la Patagonia argentina y chilena, la zona del Lago Titicaca y en la frontera brasileña-paraguaya, en donde existen desde hace tiempo pre-despliegues de sus avanzadas orgánicas.
Durante las horas en que Lula desarrollaba su último acto pre-electoral, demorando su ingreso a prisión, en la CABA, frente a la Embajada de Brasil se presentó, para “resistir”, el elenco de superficie de nuestros revolucionarios “piqueteros”, pero días antes el tema del aborto mostró la transversalidad del otro elenco, más variado y peligroso, compuesto por anarquistas de origen marxista y otros, de origen libertario. Son los extremos que se tocan.
Estos son los sectores sociales fundadores de la profunda “grieta” argentina, que se caracterizan por resentimientos adquiridos por herencia o por la pedagogía del “relato”. Impiden la unidad nacional, la reconstitución institucional del Estado y la Paz de los argentinos. “No disciernen ni entienden lo que los otros disciernen”, diría Maquiavelo.“Son inútiles”. Y para nosotros, nos son inútiles.
¿HABRÁ ´REFORMULACIÓN´ DE LA SEGURIDAD NACIONAL?
Creemos que existen, en las esferas de decisión gubernamental, quienes “entienden lo que los otros disciernen” y eso “es bueno”, PERO, no se animan con las “vacas sagradas”: las leyes que rigen a la Seguridad Nacional. Apenas se animan con su reglamentación y eso no solo es insuficiente, sino que es un agravante de la situación que padecemos para quienes deban operar en el terreno.
Si existieren objetivos firmes, no habría miedo para lograrlos. Habría coraje. Cuando los objetivos no existen o son débiles, el miedo supera al coraje.
Hay una solución para no pasar por las “horcas caudinas” del Congreso: el urgente Acuerdo de Seguridad Colectiva y Defensa Común que permitiríasubrogar la inédita y perversa legislación custodiada por un vago “progresismo”, comodín que encubre y mimetiza a esa minoría que, consciente o inconscientemente, se alinea y forma parte de la extraña mixtura de “inútiles” que oscurece nuestro futuro como Nación. Ayer, sus antecesores por lo menos jugaban sus propias vidas, como “imberbes” irresponsables. Hoy son un pelotón de adultos espiritualmente corrompidos, que no solo forman parte de la oposición, sino que también están en la coalición gobernante (18).
CITAS:
(1). E. de Vergara. “Las diferencias conceptuales entre Seguridad y Defensa”. Feb 09. www.ieeba.org
(2). H. J. Auel. “El estado-nación regional frente a las amenazas estratégicas globalizadas”. Jun 98. www.ieeba.org
(3). H. J. Auel. “Ponencia en Santiago de Chile: Nuevo entorno de Seguridad. Nuevas alternativas de la Defensa. Respondiendo a los desafíos de la IX CMDA”. Jul 11. www.ieeba.org
(4). H. J. Auel. “Relaciones cívico-militares, la necesaria reconstrucción del Estado y de la imprescindible Seguridad Nacional, Regional y Continental”. Nov 13. www.ieeba.org
(6). H. J. Auel. “La dirigencia argentina frente a los desafíos de la Seguridad Nacional en el siglo XXI”. Ago 15. www.ieeba.org
(7). H. J. Auel. “El pensamiento estratégico militar en el siglo XXI”. 12 Oct 14. www.ieeba.org
(8). H. J. Auel. “Política de Derechos Humanos Vs. Política de Defensa”. 01 Ago 17. www.ieeba.org
(9). H. J. Auel. “El narcoterrorismo, el Estado Nacional, la democracia y las FFAA”. 26 Abr 14. www.ieeba.org
(10). H. J. Auel. “La larga guerra civil argentina y el actual estado de guerra civil-revolucionario”. 09 Jul 13. www.ieeba.org
(11). L. Di Marco. “Un caso que quema y reabre heridas de los 70”. La Nación. 06 Abr 18.
(12). Es indispensable la lectura del lapidario ensayo de la Dra. Silvia Marcotullio: “Breves apuntes sobre una inquietud: continúa la comisión de delitos de lesa humanidad por parte de los poderes Ejecutivo y Legislativo”. www.ieeba.org
(13). H. J. Auel. “La guerra mundial contraterrorista global, ¿híbrida con derivación nuclear?”. Abr 15. www.ieeba.org
(14). H. J. Auel. “La Argentina encapsulada”. Jul 10. www.ieeba.org
(15). H. J. Auel. “Arena… ¿o pan rallado?”. Dic 17. www.ieeba.org
(16). H. J. Auel. “Sr. CJFFAA: llegó la hora de pintar la carta”. Feb 17. www.ieeba.org
(17). H. J. Auel. “Las FARC-EP, actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano”. 05 Sep 17. www.ieeba.org
(18). eldiario24com. “Alfonsín exigió que la UCR se pronuncie sobre la situación de Brasil”. 08 Abr 18.
“El miedo a la guerra, es peor que la guerra misma”.
Séneca -4 a C/65 d C-
“Las derrotas están inscriptas en el alma de los pueblos,antes de que las guerras comiencen”.
René Benjamín -1885/1948-
La evolución y el desarrollo internacional de la Polemología.
Quiénes y cómo desarrollaron internacionalmente a la Polemología.
La evolución y el desarrollo internacional de la Polemología.
En este tercer y último artículo de la serie dedicado a “¿Qué es la Polemología?”, continuaremos con la sabia compañía del extinto Grl. Alonso Baquer que, como testigo del nacimiento y expansión de la Polemología nos ha dejado una descripción clara y precisa de los primeros pasos de la nueva ciencia y de los diferentes enfoques nacionales del fenómeno socio-político guerra (1).
Fue un hecho sumamente positivo -desde el punto de vista científico- el obligado encuentro de quienes teorizaban en forma abstracta sobre el fenómeno guerra, con Oficiales franceses, todos ellos prisioneros de los alemanes en el Campo de Elsterhost entre 1940 y 1945. Las figuras más destacadas del grupo eran las de Jean Guitton, Gastón Bouthoul y el Grl René Carrerre.
Según Guitton, ante el prolongado tiempo de su internamiento “…para llenar las horas de este tiempo de forzosa inactividad, los oficiales allí reunidos decidieron organizar una escuela clandestina que contribuyera a hacer útil el tiempo, que corría el riesgo de ser perdido”. Eligieron como único tema de reflexión al “fenómeno guerra, en el devenir del tiempo histórico”. Allí se concebía, en suelo alemán y por franceses prisioneros de guerra, al futuro “Instituto Francés de Polemología”. Hombres de pensamiento y de acción iniciaban una tarea interdisciplinaria que aun continúa y que ha creado otras instituciones homólogas al IFP en el mundo entero.
Bouthoul sostenía como origen de las guerras -a lo largo de la Historia- a los excedentesdemográficos. Carrere, le incorporaba dos variables:
la geográfica, localizada sobre las fronteras culturales donde chocan mentalidades y
la técnica, el progreso tecnológico, que pone en manos de un poder político una mayor capacidad de medios que los de sus vecinos.
Sobre el despliegue multidisciplinario de Bouthoul, Carrere edificó dos conclusiones:
la que localiza “los riesgos en el espacio” y
la que “mide las intensidades en el tiempo” y concluía que los conflictos se encaminarían hacia alguno de estos cuatro puntos de aplicación:
enespacios marginales, con guerras limitadas,
porcompetencias económicas o reemplazos culturales, sin intervención militar,
por incompatibilidades sectoriales, con lucha de clases en el interior de la nación en crisis,
pordesestabilización, con el objetivo de obtener cansancio/desarme moral de la comunidad política.
El “IFP” no pretendió ni pretende hacer futurología ni predecir conflictos, sino lograr aproximaciones válidas que orientaran la caracterización estratégica más adecuada a la naturaleza de los futuros problemas socio-políticos con empleo de fuerza.
Quiénes y cómo desarrollaron internacionalmente a la Polemología.
En Italia, a partir de los esfuerzos de la Cátedra de Estrategia Global de la Escuela de Guerra “Alere Flammam”, 1945/1977, bajo la dirección de Franco Alberto Casadio y del Cnl Giuliano Giovanelli, se produjo una evidente aproximación metodológica con los esfuerzos del Profesor Wolf Dieter Eberwein en Alemania, en el Instituto Internacional de Investigación Comparada -IIIC-, de Berlín.
Estos tres Centros de Investigación -que comparten un sistema metodológico habitual en los estudios sociológicos- tienen una organización totalmente diferente. El alemán es un comité de expertos civiles, el italiano una escuela de altos estudios militares y el francés una comisión mixta, cívico-militar. Los tres ordenaron y clasificaron los conflictos y enunciaron las tendencias resultantes de una extrapolación estadística. Las conclusiones referidas a los frentes de agresividad y niveles de violencia alcanzaron una amplia similitud, lo que demuestra que ésta comunidad científica había roto las fronteras nacionales.
Los italianos establecieron que la conflictología es un área de estudios multidisciplinarios, no una mera disfuncionalidad de un sistema social de convivencia, sino un dato natural de la dinámica social. Valorizaron el método inductivo de investigación.
Los alemanes, en el Informe Nro 74 del IIIC, firmado por el Dr. Eberwein -en 1981- que abarca tres volúmenes: conflictos internos, acumulación de armamentos y conflictos internacionales. Hace un empleo intenso de modelos matemáticos. Su proceso de escalada del conflicto es más sencillo que el de Hermann Khan -el de los treinta escalones-. Diferencia tres niveles de tensión: “negociaciones conflictivas”,“intervenciones militares” y “guerra”.
En EEUU quienes se han ocupado de resumir la creación de un conjunto de disciplinas abarcadas por la Polemología, fueron Morris Janowitz y Roger W. Little -en 1964-. El mejor trabajo en la materia “Las Fuerzas Armadas y la Sociedad”, más reciente, es fruto de la colaboración de un inglés -Gwyn Harries-Jenkins- y de Charles Moskos, estadounidense. La universidad de Chicago fue pionera en éste frente de investigación.
En España las Instituciones que se han ocupado centralmente de nuestro tema han sido: el Instituto Español de Estudios Estratégicos y el Centro Superior de Estudios para la Defensa Nacional, que se mantienen en permanente contacto con sus pares europeos y de EEUU. Nuestro IEEBA ha convenido trabajar en colaboración con el IEEE, en el pasado mes de Abr 16.
En el RU se fundó el Royal United Services Institute -RUSI- en 1831, el más veterano centro de estudios coordinados de diplomacia y estrategia militar. Mantiene actualmente una publicación trimestral y anualmente edita un libro sobre temas polemológicos. El ex-Imperio acumula una experiencia belígera de siglos, que se refleja en el número de publicaciones especializadas tales como: The Military Balance, Strategie Survey, Adelphi Papers y Conflicts Studies. El King’s College de la Universidad de Londres, sigue siendo el centro tradicional de estudio de los conflictos internacionales.
La situación internacional “líquida”, como ha sido calificada la que ha emergido de la posguerra fría -a partir del 2001- y la particular situación conflictiva en el interior de los Estados de la región iberoamericana, como consecuencia de la dificultosa retirada de la pseudo-revolución del “Socialismo Siglo XXI”, indica que éste es un momento insoslayable en el que los argentinos debemos ocuparnos, intensamente, de la promoción de una Polemología hoy inexistente en el conocimiento de nuestra dirigencia, cuando ya avizoramos -en toda la región- eventuales frentes de conflictos diversos y complejos, contemporáneamente con una gran oportunidad para recuperar un rumbo de Paz y prosperidad para el sub-continente.
CITAS:
Alonso Baquer. “Estudio Preliminar”, en el “Tratado de Polemología” de G. Bouthoul, Ediciones Ejército. Reino de España.
“El miedo a la guerra, es peor que la guerra misma”.
Séneca -4 a C/65 d C-
“Las derrotas están inscriptas en el alma de los pueblos,
antes de que las guerras comiencen”.
René Benjamín -1885/1948-
¿Cuál es el estado actual de la Polemología?
El “Instituto Francés de Polemología”.
¿Cuál es el estado actual de la Polemología?
De la mano de quien fuera mi distinguido huésped en Madrid, hace unos años, en mi visita al Instituto Cap. Grl. Gutiérrez Mellado, Grl. Dr. D. Miguel Alonso Baquer (1), en éste segundo artículo acerca de lo “¿Qué es la Polemología?”, vamos a describir sucintamente cómo se ha desarrollado la disciplina y en qué estado se encuentra hoy, en el mundo y en nuestro país.
Bouthoul reiteradamente -en sus exposiciones y escritos- ha corregido al adagio romano de Flavius Vegeetius, expresando: “Si quieres la Paz, conoce a la guerra” y para ello creó la disciplina polemológica y escribió su erudito “Tratado de Polemología”, entre otras obras. En el Tratado se puede admirar la claridad de sus conceptos y la ordenada exposición de la reiteración cíclica del fenómeno socio-político bélico, en la Historia de la Humanidad.
Éste pretendido mayor conocimiento de la guerra ¿ha favorecido al mantenimiento de la Paz mundial? En la respuesta deberíamos considerar lo que hubiese ocurrido en las últimas décadas, si no existiera actualmente el conocimiento polemológico, fruto de dicho Tratado, en los niveles de decisión política de los principales actores internacionales.
Desde los años ’50 venimos hablando de la “Tercera Guerra Mundial”, incluyendo el “holocausto nuclear”, que nunca ha llegado. Pero llegaron otras guerras, imprevistas e imponderables, muy probablemente como consecuencia del esfuerzo de dirigentes que han logrado localizar a la guerra, limitando sus medios y los tiempos de sus fases más calientes. Desde 1945 han habido guerras, pero no declaradas y es evidente el esfuerzo de los líderes para reducir el avance de los conflictos, en la medida en que los medios de destrucción van aumentando exponencialmente sus capacidades.
No está demás, consecuentemente, realizar una síntesis actualizada de los avances polemológicos, cuando la gravedad de los riesgos estratégicos aumentan en los años 2000 y cuando retener la Paz no puede quedar solo en manos de la buena voluntad de las gentes, sino en el logro colectivo de una situación de concordia interna o internacional, encarnada por la inteligente comunicación política. La capacitación de los dirigentes sociales, el profundo conocimiento del origen del belicismo y de los síntomas de la inseguridad nacional e internacional, nos llevará a la resolución pacífica de los conflictos. Es éste el camino que permitirá superar las utopías idealistas, creadoras de los mitos o al determinismo de los fundamentalismos extremos.
Es cierto que los Organismos Internacionales no han sido totalmente capaces para retener la Paz, desde su creación hasta la fecha. Pero es indiscutible que han sido un espacio de diálogo que, cuando hubo buena fe, se demostraron eficaces. En el ámbito regional estas organizaciones proliferaron últimamente por razones ideológicas, al impulso de una pseudo-revolución que malversó a las pre-existentes. Ha llegado la hora -en el año 2016- de desmontar lo artificioso y re impulsar a los organismos genuinos, totalmente debilitados por la duplicidad de funciones, con fines inconfesables.
El “Instituto Francés de Polemología” -IFP-.
Éste Instituto, creado por G. Bouthoul en 1945, tenía por misión “proceder al estudio científico de las guerras, de las paces y de los conflictos intermedios” y a través de los años, hasta la actualidad, la misión fue cumplida. El Instituto lleva la impronta de su creador, hombre de amplios conocimientos pluridisciplinares -psicología, economía, demografía, historia y sociología política- que impuso un estilo y una metodología multi e interdisciplinaria para el análisis de las impulsiones belígeras.
La mencionada metodología es esencialmente cuantificadora. Se orienta por los grandes números y las series de datos. Bouthoul fue un discípulo de Durkheim, Bergson y Braudel. Investiga a los grandes ciclos y a las coyunturas críticas conflictivas.
El Instituto produjo en 1976 “Le Défi de la Guerre” -El Desafío de la Guerra- en colaboración con el Grl René Carrere y en 1980 “Guerres et Civilizations” -Guerras y Civilizaciones- que sumó a los dos autores del anterior libro, al sociólogo Jean-Louis Annequin, con un prefacio de nuestro conocido Jean Guitton. En ambos se sostiene una paradoja: en el S. XIX se identifica a la guerra con “la barbarie” y a la Paz con un “avance de la civilización”.
El Instituto publica una revista: “Etudes Polemologiques”, en la que se sostiene también dicha paradoja, señalando que las explosiones más violentas se originaron en las naciones más cultas. Con ello se daba por tierra la hipótesis citada, proveniente del positivismo, que establecía la sustitución del “espírituguerrero” por el “industrial”, en el mundo del progreso. Se llega a la conclusión -con Ortega y Gasset- de la “exquisita mixtura” de ambas cosas, como ha ocurrido con las naciones más avanzadas para resolver sus conflictos en la modernidad.
En los dos libros citados y en la colección completa de la revista del Instituto, se tiende a la verificación de los principios que sostiene el IFP. Estas publicaciones son complementarias. El “Desafio…” de orientación histórica, describe a las guerras entre 1740 a 1974, pretendiendo demostrar la “depuración y transformación” de las sociedades modernas. En “Guerras y…” hay mayor ambición: partiendo desde la prehistoria alcanza los albores del empleo nuclear y pone de relieve la permanente interacción del fenómeno guerra con la evolución de la civilización, donde el conflicto se genera. No hay pasaje de una etapa de la civilización a la subsiguiente, sin su condigna guerra mundial. Vivimos hoy, en la globalización planetaria desde 1991, el pasaje de la etapa de la civilización industrial a la posindustrial -la del conocimiento-, cabalgada por la guerra mundial contraterrorista global (2) y (3).
CITAS:
Alonso Baquer. “Estudio Preliminar”, en el “Tratado de Polemología” de G. Bouthoul, Ediciones Ejército. Reino de España.
J. Auel. “El Pensamiento Estratégico Militar en el Siglo XXI”. 12 Oct 14. www.ieeba.com.ar
J. Auel. “La Guerra Mundial Contraterrorista Global. ¿Híbrida…con derivación nuclear?”. Abr 15. www.ieeba.com.ar
“El miedo a la guerra, es peor que la guerra misma”.
Séneca -4 a C/65 d C-
“Las derrotas están inscriptas en el alma de los pueblos,
antes de que las guerras comiencen”.
René Benjamín -1885/1948-
El surgimiento de la Polemología.
¿Qué propone la Polemología?
El surgimiento de la Polemología.
Es éste el primero de una serie de breves artículos a publicar en nuestra Página Web (1), que estarán referidos a una -relativamente- nueva disciplina, la Polemología, que cumple sesenta y cinco años de evolución acelerada e importancia constante, pero que en nuestra querida Patria no es conocidapor la dirigencia política. Tampoco tienen tratamiento -entre nosotros- las diversas razones que provocan ésta gravísima ausencia curricular universitaria -que más adelante trataremos-.
Calificamos de gravísimo a este vacío conceptual en los conductores políticos, pues la Argentina -en crisis/decadencia- soporta y somatiza actualmente dos “estados de guerra” -heredados de las que peleamos en la segunda mitad del siglo XX- y está hoy riesgosamente involucrada -como el resto del orbe- en la “guerra mundial contraterrorista global”, en continuo agravamiento (2). A pesar de ello no hay un solo indicio -hoy- que indique que saldremos de la total indefensión e inseguridad rampante, que preocupa seriamente a la mayoría de los argentinos (3).
Nuestro objetivo es el de impulsar -desde el IEEBA- la creación -en la UCALP/Bernal- una “Diplomatura en Introducción a la Polemología” -como ya lo hiciéramos con la Licenciatura en Estrategia, hace más de una década, en la Universidad Maimónides- y más tarde ¿2018?, una “Maestría en Polemología” para todos aquellos egresados universitarios que hayan cumplido con la diplomatura de Introducción a la Polemología.
El neologismo “Polemología” surge de la elaboración intelectual de Gastón Bouthoul -1896/1980- que, como sociólogo -sumergido en las grandes guerras civiles europeas 14/18 y 39/45- perseguía la búsqueda de la Paz. De la Paz posible entre los hombres y entre las naciones.
Para entender aun mejor los fines perseguidos por éste francés-tunecino, deseamos agregar tempranamente que, si “la guerra es un inexorable fenómeno socio-político”,la Paz también lo es. Guerra y Paz, consecuentemente, son dos grandes temas de la Ciencia Política que necesariamente -a nivel posgrado- debería desdoblarse en dos ramas de conocimientos alternativos: las Relaciones Internacionales, que por vía de la diplomacia retienen la Paz a través de la Comunicación Política -la negociación y el diálogo- ó, cuando la comunicación no es viable y los objetivos en juego son vitales, necesariamente se recurre a una prueba de fuerza: a la guerra, como mal necesario para alcanzar una nueva Paz -que hemos citado como la Paz posible- Se ingresa así al campo de la Polemología.
Si la incomunicación es absoluta, estamos en presencia de las guerras totales, como fue el caso de la Guerra de la Triple Alianza. Si en cambio se mantiene alguna de las variables de comunicación, mientras se combate, se trata de una guerra limitada, tal el caso de la Guerra del Atlántico Sur de 1982 y, cuando el agresor simula que no recurre a la violencia y hasta niega haber provocado a la guerra, a través de su narrativa pos-bellum, arrogándose un ideal de redención social, estamos en presencia de una guerra muy limitada ó sublimitada, como se dio en el caso de la Guerra Civil Contrarrevolucionaria Argentina, en la etapa 1974/1988.
A estas tres opciones polemológicas los argentinos las hemos sufrido en diversos períodos de nuestra corta Historia. Pero nada aprendimos de esos graves dramas socio-políticos (4). Las dos sentencias inscriptas en el acápite de éste artículo pertenecen a europeos, uno hispano-romano y el otro francés, distanciados en el tiempo por casi veinte siglos. La UE pareciera que tampoco ha entendido a sus pensadores protopolemólogos y es ello lo que oportunamente motivó a Bouthoul. Actualmente la Unión está incursa en ambas sentencias: en 1991/1995 no pudo contener la matanza de Los Balcanes y actualmente medra temerosa ante los desafíos y amenazas del ISIS.
Argentinos y europeos padecemos una fuerte crisis cultural -por relativización de nuestros valores- que nos han llevado a la anomia social, a la contracción económica y a la extrema debilidad del Estado Institucional. Los presupuestos de Defensa se desplazaron al bienestar y así perdimos el bien-vivir. En España y en la Argentina hubo intelectuales que incorporaron tempranamente a “LasGuerras” (5) a sus bibliotecas, traducido al castellano, pero allí quedó la obra innovadora de Bouthoul, limitada a unos pocos lectores, sin incorporarse a las currículas especializadas.
La “Intervención Humanitaria” -como doctrina Occidental de los ’90- restringió el concepto de soberanía, pero con el “nuevo orden” emergente en el Asia, en los 2000, se está revirtiendo dando lugar al empleo cada vez más osado del poder militar (6). En el nuevo mapa político que se está desarrollando en Iberoamérica a partir de fines del 2015, esta tendencia internacional podría -muy probablemente- reemplazar a la “Política de Derechos Humanos” iniciada en 1983. Las Políticas de Defensa Regionales, que fueran reemplazadas en la toda la región por aquella, con el impulso de pseudas revoluciones neo-marxistas extemporáneas, están hoy en acelerada y peligrosa retirada.
En nuestras universidades se dicta la Licenciatura de Relaciones Internacionales -que en nuestra opinión debería ser un posgrado de la Licenciatura de Ciencia Política –pero se ignora a la Polemología– que en breve propondremos como maestría-.
Cuando la propia experiencia -la más cara y tardía- se desecha por razones ideológicas y la experiencia ajena no se aprehende ni registra para superar nuestros repetidos fracasos, estamos condenados a reiterarlos y, en éste caso a continuar perdiendo guerras que no prevemos -aunque obtengamos victorias en combate-. Nos colocamos -en la escala animal- por debajo de las nobles mulas, que “no tropiezan dos veces en la misma piedra”.
¿Qué propone la Polemología?
No han faltado críticos al libro de Bouthoul que se han preguntado ¿para qué ha servido la Polemología si las guerras continuaron después de la publicación en 1951 de “Les Guerres” (5)? Sin duda estos críticos no habían leído al “Tratado” del creador -en el año 1945- del “Instituto Francés de Polemología”. Simplemente conocieron alguna frase feliz del libro -como lo hacen quienes citan a Aristóteles, Sartre o Borges- y con ese breve y corto conocimiento sacan conclusiones.
Gastón Bouthoul, profundo conocedor de la naturaleza humana, no intentó hacer desaparecer las guerras. La violencia es inherente a la naturaleza humana y por eso es que hubo, hay y habrá guerras y también períodos de Paz.
En el “Prólogo del Traductor” de la edición argentina (5) encontramos ésta reflexión: “¿Aspira Bouthoul, con su hipótesis, llegar a construir -valgamos la comparación- una bola de cristal de precisión que posibilite ‘adivinar’ la próxima guerra, su oportunidad, sus causas, su intensidad…? No hay tal cosa…” (5).
El “Tratado de Polemología” editado por Ediciones Ejército del Reino de España (5) recientemente, también fue prologado por su traductor, el Grl. Enrique Jarnés Bergua. En él, dice: …el “Tratado de Polemología” es la obra fundamental de una escuela ya extendida por todo el mundo. No una teoría, no una doctrina, sino una tesis y un propósito”…“El propósito de Bouthoul, a través de un enorme esfuerzo científico, es encontrar las instituciones socio-políticas que cumplan, sin guerras, las funciones sociológicas que cumple el fenómeno guerra”.
Así es cómo éste “pacifista científico” ha dado origen en las últimas décadas a un sinnúmero de ONG y Organismos Internacionales que velan por la Paz Internacional. En ese sentido Gastón Bouthoul y los militares bien formados comparten una misión vocacional: disuadir al agresor y retener un equilibrio estratégico regional aceptable.
Los argentinos hemos sufrido la ignorancia de quienes han creído que hay guerras porque hay militares, ignorando que las guerras existieron antes de que estos aparecieran con los excedentes económicos. Las soluciones planteadas por Bouthoul son una incógnita que develará el futuro y serán materia de nuestros prometidos artículos, a continuación del presente. Ningún esfuerzo es inútil cuando se persigue retener la Paz de la Humanidad.
(2). H. J. Auel. “La Guerra Mundial Contraterrorista Global. ¿Híbrida con derivación nuclear?”. Abr 2015. www.ieeba.org.ar
(3). H. J. Auel. “La Dirigencia Argentina frente a los desafíos de la Seguridad Nacional en el Siglo XXI”. Ago 15. www.ieeba.org.ar
(4). H. J. Auel. “El Narcoterrorismo, el Estado Nacional, la Democracia y las FFAA”. Abr 14. www.ieeba.org.ar
(5). G. Bouthoul. “Les Guerres”. Ed Payot. París. 1951. Ésta obra fue traducida al castellano en España y en la Argentina en 1956 por la Biblioteca del Oficial del Círculo Militar. El traductor fue el Tcnl D. Manrique M. Mom, en dos Volúmenes: Nros. 456 y 457. En 1971 el original, con algunos agregados del el autor, es nuevamente editado con el título “Tratado de Polemología” por el Servicio de Publicaciones del EME del Reino de España.
(6) M Leonard. “Las nuevas intervenciones militares”. Clarín. 16 Abr 16.
Estamos comenzando un segundo semestre de este ano 2018 que quedara en las paginas de nuestra historia.
Es lamentable que la amnesia es un sindrome de la mayoria de los Argentino. Recuerdo el 28/12/2017, Dia de los Inocentes, cuando el hoy Ministro Coordinador, y el hoy Presidente del BCRA junto con el que renuncio, en una Conferencia, anunciaban las pautas para 2018, a horas de la fiesta de Fin de Ano.
Y con un pie en la playa, convencidos que era la verdad y solamente la verdad lo que estaba por venir.
Y hoy aun sin saber lo que pasara en el Mundial de Rusia con nuestros muchachos, me entero que el dolar esta a 30 mangos, cuando estaba a 18, las prepagas aumentaran nuevamente el 7.5%, y el nuevo Ministro de Energia dijo que lo que Aranguren
previo para los combustibles es insuficiente y que aumentaran el
5% en horas mas.
Ahora me estoy dando cuenta que lo peor ya paso y lo mejor esta por venir.
Dentro de la mas estricta austeridad, compraremos armas a Gran Bretana , y a la Corte Suprema de Justicia no le alcanza el Presupuesto.
Estos cinco Jueces, saben que se llevan por mes aproximadamente $ 2.000.000 solo en sueldos ellos solos y que hay 4 millones de jubilados no llegan a $ 9.000 mensuales, o viven en otra Argentina, mientras los casos de corrupcion quiebran las estanterias de los juzgados; y encima no pagan impuesto a las ganancia.
Solo el triunfo Argentino, nos dara un poco mas de alegria, pero por un rato solamente. Como decia CFK, TODO VA CON TODO!
Desde 2003 el Estado, violando la Constitución, comenzó a poner presos a quienes lucharon contra el terrorismo, y haciendo de esto un gran curro de los derechos humanos tenemos en la Argentina 489 muertos por abandono de persona desde diciembre de 2015. El domingo pasado sumamos uno más. Los casos aberrantes pueden corroborarse en los expedientes e informes forenses de los fallecidos. Algunos de estos presos mal llamados de lesa humanidad han muerto engangrenados, cortados a pedazos cada vez que se presentaba este cuadro. Otros, de cáncer generalizado por falta de tratamientos adecuados, de enfermedades cardíacas, muerte súbita o ataques de presión. Otros fueron hallados muertos en sus celdas o sufrieron un ACV que causó el fallecimiento, o sufren de Parkinson, depresión o Alzheimer por falta de atención médica. Todo esto provocado y agravado por la injusta situación que padecen. Es una muerte por goteo a la que son sentenciados sin pruebas y con testigos falsos. Hombres que promedian los 73 años y cuyo “pecado” parece haber sido impedir que la Argentina sea hoy otra Cuba.
Ana Magi
LO QUE EL VIENTO SE LLEVO
Junio 26, 2018
En nuestra Argentina en donde realmente la VACA MUERTA esta vivita y coleando, ya que esta viva, mas viva que nunca, las causas administrativas y/o judiciales se vuelan por arte de magia
pero lo que no es facil que se vuele de la memoria ciudadana.
Cuando subio NK (qeopd) en el 2003, fue nombrado Comandante en Jefe del Ejercito, el Gral Bendini, que venia de un Comando del Sur, con un informe lapidario de la SIGEN a la cabeza de Rafael Bielsa , por manejos financieron non santos, y fuera de las normas pero siguio en su cargos sin problemas, hasta que se lo desplazo por otros motivos.
Hoy a la distancia me entero por familiares que residen en forma transitoria en Peru, que el nuevo Embajador de Argentina en dicho es Jorge Yoma, y pense que mi familia estaba con Alzheimer, y no, el Gobierno esta padeciendo los comienzos de la enfermedad. Jorge Yoma es el nuevo Embajador en Peru, y reemplazo a una funcionaria con 40 anos de carrera diplomatica
llamada Ana Maria Ramirez.
Que paso nos volvimos locos? este tipo tiene una causa originada en la SIGEN por perjuicio fiscal de $ 4.296.167 (que habria que indexar) de cuando era Embajador en Mexico.
Ahora me entero que fue un cambio de favores para que Pichetto apoye con su gente una ley, o sea un vulgar tome y daca, *Mandame a Jorge Yoma de Emba a Peru y vamos para adelante con la Ley*.
Y aparte el Presidente MM lo recibio en la Rosada, la amnesia
nos lleva a el Alzheimer, y el Canciller tambien firmo el decreto
estamos en el horno, casi seguro que para que le acepten el placet en Peru, habremos que aceptar otro tome y daca.
Podemos patear la misma piedra tantas veces, Del Sel, Juez,
Comienza una semana muy importante para los Argentinos que juegan de local, y los que estamos por el Mundo, y en Rusia, la Capital del Mundial 2018.
Respecto a la crisis economica, y despues de los cambios anunciados el sabado, dia no laborable, nos enteramos que el amigo Cabrera y Aranguren se fueron a su casa, y en el momento ya estan los reemplazantes a quien les auguro mas suerte.
No obstante quiero destacar que Cabrera, jamas me ha contestado una sola carta, nunca tuvo tiempo.
Me molesta que desde que comenzo este proceso , ya se han suplantado varios del mejor elenco de los ultimos 50 anos, pero es un merito tener en la manga los suplentes.
El dolar ya esta cerca de los 30 mangos, cuando en diciembre pasado estaba en 17 mangos.
No puedo olvidar cuando el 28/12/2017 , Dia de los Inocentes, el Trio Economista, dijo que las metas de inflacion para este ano serian del 17% y el dolar flotara levemente.Ya el Presidente del BCRA volo, el de Finanzas lo reemplazara, y el Ministro Coordinador Nicolas del Baldio, ya tiene todas las riendas en sus manos , gracias a Dios.
Pero en las ultimas horas el Presidente Macri, manifiesta publicamente que es una lastima haber afectado la confianza de los inversores; y tambien se han expedido Economistas Asesores del FMI algunos Argentinos, respecto que la inflacion a este paso
llegara al 30%; y ahi se le prendio la lamparita a mi amiga Cristina Lagarde, que enviara esta semana u$s 7.500 millones como
la primera cuota de lo pactado, pero ojo al piojo, los que vendran tienen relacion con los ajustes solicitados!!
Dicen algunos expertos locales que el primer adelanto sera como una *aspirina*, pero no les des bola son destituyentes!!
La verdad que Sampaoli no nos hizo ningun favor, porque podria haber levantados nuestros animos, tenia la llave en la mano,
pero se equivoco de llavero.
Tel Aviv enarbolo banderas en casas de nuestros compatriotas y tambien en lo de los Israelies, hoy no ves una bandera ni de casualidad.
Algunos chistosos dicen que esto ocurrio, porque Messi se nego a ir a rezar al Muro de los Lamentos junto a la Ministra de Cultura y Sport, Miri Reguev (un queso al lado de Antonella), y no se dio cuenta que Dios esta en todos lados, pero la Casa Central esta en Tierra Santa.
Aca se espera que antes del partido con Croacia salgan las banderas a los balcones, pero no es todo, Sampaoli se debe poner las pilas sino volvemos a casa,y no va a haber foto de familia con MM.
Yo prometo que el dia anterior al partido con Croacia, voy a ir a rezar a una Sinagoga, una Mezquita y una Iglesia, porque si nos tenemos que volver, el dolar se puede ir a la damier junto con la inflacion, y la Lagarde nos puede decir Uds son unos inutiles,no
les alcanza ni con el Mesias Messi.
Hasta la proxima, y criticame que me encanta. Y no te olvides las palabras de mi Madre Adoptiva, la Korrupta CFK……………….
En las ultimas horas y a propuesta de el Secretario de la ONU, Antonio Guterres, se ha reunido esta organizacion burocratica y
antiisraeli de toda la historia , para tratar la situacion en la frontera de Gaza con Israel.
Como es habitual reproches de cada lado, pero ninguno de los burocratas ahi sentados, hizo una visita y apreciar la situacion in situ, claro como van a venir si esta la zona que arde de incendios provocados, no los provocaron las fuerzas del Estado Sionista, sino una banda dirigida por Ismail Haniye, que desde su bunker con aire acondicionado y todo el confort da la orden.
Haniye no esta solo en el comando, tiene otra segunda y tercera linea.
Pero mientras estaban reunidos en la ONU, y su representante
en la misma defendia lo indefendible, Yusuf al Mahmoud, portavoz de la AP, da a conocer esatas palabras de Abu Mazen:
” no hay fuerza en el Mundo que pueda hacernos renunciar a nuestros prisioneros y martires”. Encima muy ofendido porque Israel decidio deducir de los impuestos que le transfiere en forma mensual, los danos ocasionados desde que comenzo la Marcha del Retorno, causada por sus heroes y martires.
Que los terroristas incendiaron 75 has en un solo dia , y los barriletes incendiariosprovocaron otros 17 incendios en un dia, nadie habla, ni Guterres, y menos Abu Mazen.
El subsidio que abona Abu Mazen o la AP, a las familias de los prisioneros y martires es mas alto de lo que percibe un miembro de sus fuerzas de seguridad en actividad.
Esto es la ONU, no hoy , siempre ha sido asi, no le levantan la cola para ir a opinar por conflictos en ningun Pais.
Pero el que si lo hizo despues de haber sido Secretario General
fue Kofi Annan especialmente contratado para el conflicto en Siria,pero salio con las manos vacias.
El presidente Mauricio Macri va a pasar a la historia como el hombre que, cuando nadie lo imaginaba, abrió en nuestro país las puertas al aborto. Con eso logró generosamente distraernos por unos días de la grave crisis económica, y obtuvo varias horas de festejos para numerosos ciudadanos.
Facilitó también que en el futuro miles de mujeres puedan hacer eliminar a miles de descartables seres humanos por nacer, con la facilidad aséptica de quien se saca una muela cariada. Favorecerá además la prosperidad de incontables clínicas médicas y laboratorios que lograrán importantes ganancias, y permitirá que muchos médicos puedan liberarse de su engorroso juramento de defender la vida.
Todo un estadista el presidente Macri. Aunque su manejo de la economía haya fracasado lamentablemente, no importa, la conquista del aborto lo absolverá de cualquier falta. Y ahora hasta quizás logre ser recibido con una sonrisa por el papa Francisco, cuyos fieles seguidores del kirchnerismo apoyaron en su absoluta mayoría la felicidad del aborto.
A pesar de que no todos los medios lo han publicado , no se pudo esconder debajo de la alfombra, el tema del baldio de 332 m2 en el Barrio de Belgrano especificamente en Mendoza y Cazadores, hoy edificio de tres pisos cuyo titular es el Ministro Nicolas Dujovne, el
amigo de la Sra Cristina Lagarde, la que dirige el FMI.
El Ministro despues de quedar concluida la tambien siguio pagando de ABL alrededor de $ 2.400, y despues que el periodista detecto esta
anomalia, el entorno de ND afirmo que es cierto porque la documentacion del tramite primero se incendio, y luego se transpapelo , pero que el Ministro esta dispuesto a abonar el importe correspondiente, aun en forma retroactiva. No hay dudas que lo hara.
Los que firmaron el final de obra son del Estudio Dujovne-Hirsch, y esta ultima especificamente como Socia del Estudio, casualmente su Madre.
Espero que me publiquen la presente, y me encantaria una respuesta de la Oficina Anticorrupcion, especificamente de la Lic Laura Alonso
que seguramente procedera a hacerle un llamado de atencion como lo hizo con Triaca, y ahi quedara todo.
Y asi la transparencia se ira borrando de la Real Academia Espanola.
Hay una Senadora Nacional y ex Presidenta , procesada en varias causas, con el aval de unos pocos, logro que no la desafueren para que se presente frente a el Juez Bonadio,logrando postergar todo para noviembre y ella dijo en varias oportunidades QUE TODO VA CON TODO, y en eso no se equivoco.
En estos momentos el Mundo tiene en primera plana la anulacion del partido amistoso de Israel y Argentina,que se iba a jugar en Jerusalem el proximo sabado x la noche, los motivos ?? la poderosa presion de la maquinaria Palestina que llego a Barcelona con camisetas pintadas de sangre, etc; con una carta firmada por 70 ninos palestinos entregadas al Embajador Argentino, dirigido a Messi, etc.
El gobierno espanol en Barcelona, permitio los desmanes, porque????El Embajador Argentino en Israel, acepto la carta de los ninos, verifico su autenticidad??? ya que siempre los Palestinos hasta hoy sigue usando como escudos a ninos, mujeres y ancianos.
Este mismo Embajador, cuando hace meses presento sus cartas credenciales le dijo al Presidente Israeli, Rivlin, que estaba muy contento con la venida del equipo Argentino Mundialista, y el diplomatico le aseguro que haria lo imposible para que asistiera el Presidente Argentino
El mismo Presidente Argentino le contesto al Primer Ministro Netanyhau, que no podria interceder!!!
La Asociacion del Futbol Israeli hoy presentara una denuncia ante la Justicia contra la Autoridad Palestina y Jibril Rajoub, Presidente de
la Asociacion Palestina de Futbol, terrorista detenido 19 anos , y deportado a Libano, por incitacion a la violencia!!!
Ahora para cambiar la realidad, este terrorista de Rajoub, dice que si se hubiera jugado en Tel Aviv o Haifa, no se hubieran opuesto y es una TOTAL MENTIRA.
La Justicia Israeli no es la Argentina, donde las causas prescriben empolvadas en el tiempo!!!
El Ministro de Defensa Israeli, manifesto que no esperaba esta decision Argentina. (Nadie lo esperaba)
Y en pocas horas se desarrollara una Conferencia de Prensa de la Asociacion del Futbol Israeli, como veran TODO VA CON TODO!
El que no se animara a llamar a una Conferencia de Prensa es el Embajador Argentino, ni tampoco el Presidente de la AFA!!
Hay que escuchar a un Maradona tirando flema sin ningun conocimiento, diciendo yo no iria a Jerusalem a jugar, que vaya Bilardo!!!!!!
nombrarlo a este ultimo cuando esta internado es vergonzoso, que se puede esperar del Maradona de hoy, con su pedriguee muy pesado!
Me parece que aquello de ‘medidas sustitutivas’ se convierte en una alcahuetería de quienes ejercen la ley. Aquí en nuestro país debe haber mano dura para todos quienes la transgreden, lo mismo sucede con el famoso y absurdo ‘grillete’ del mismo que se ríen los ladrones, asesinos y demás, que con todo cinismo se la quitan, vuelven a cometer la infracción y luego se la ponen como que nada ocurrió. Otro absurdo es taparles la cara. ¡Qué desfachatez! Dejen el rostro al aire para conocerlos y para crearles más vergüenza por el mal accionar de estos delincuentes.
Otro caso es el ‘arresto domiciliario’. Salen cuando les da la gana, la policía ni se entera o se hace la no enterada, y luego vuelven con cara de “yo no fui” hasta con pelo, los que entraron pelados. La Cárcel 4, otra burla. Tenemos los ecuatorianos que pagarles un hotel casi de lujo, cuando merecen una de esas cárceles a la antigua.
Leyeron los años de cárcel que pusieron en España a los ladrones pertenecientes a un partido político, eso es ley, aquí con 3 o 5 años y sin que devuelvan lo robado creen que es suficiente. Qué lindo actuar así. Y luego salen, millonarios, a disfrutar, viajando con la familia por todo el mundo. Mi Ecuador, país de Ripley.
M. Rodríguez
CULTURA Y GOL ES GOL
Junio 5, 2018
No estoy en contra del futbol. Me gusta el futbol, pero hay queponer unlimite.
Los profesores de antaño tenían por costumbre llevarnos a museos y otros lugares históricos donde nos daban explicaciones y al regresar a clases presentábamos escritos que eran calificados. Existen países donde es obligación llevar a los estudiantes a estos lugares, da mucha satisfacción en Atenas, Grecia, ver a alumnos y maestros ascender 156 metros hasta llegar a la Acrópolis para desarrollar las clases de historia.
Ahora parece que la obligación es mirar los partidospor TV del mundial.
Gustavo Corradi
[/ezcol_1half_end]
LO QUE EL MUNDIAL NO PODRA BORRAR
Junio 4, 2018
El Mundo casi entero esta esperando la llegada del Mundial de Rusia, ya que aparte de la emocion, aflojaran las tensiones politicas y sociales como es casi logico.
Pasion de multitudes, llegara a los televisores del Planeta, aunque hay muchos que aun no lo disponen, pero son los menos.
Lo que el Mundial no podra borrar son las necesidades del ser humano diarias y normales, y por ello con mucho dolor y a traves de una
informacion a traves de estudios de un Organismo que prefiero reservarme, acabo de enterarme que :
1.200.000 personas en Argentina no tienen bano ni letrina (imaginar donde efectuan sus necesidades), y accede al agua a traves de canillas comunitarias.
Tengo la esperanza de que esto se publique, porque sigue siendo una realidad con o sin herencia.Atencion politicos Argentinos!!!
Los ultimos acontecimientos en Espana,demuestran que la Jusitica ha demostrado que es * independiente *, y un ejemplo del cual seria muy interesante contagiarse.
Efectivamente la sentencia del Caso Gurtel, se lleva al hombro a 27 personas entre rejas y un total de 351 anos de detencion, donde ha
quedado evidenciado que el Partido Popular, o sea el Gobernante, ha manejado con mucha tranquilidad , y con la intencion de perpetuarse
en el Poder, sin tener en cuenta que tienen una Justicia dificil de doblegar.Tambien reconocen que la declaracion judicial del Presidente Rajoy no sera considerara veridica.
No hay que olvidar que el cunado del Rey Felipe VI, en cualquier momento entrara en la carcel.
En nuestra querida Argentina, donde hace dias cantamos el Himno por el 208 aniversario, tenemos una Senadora con varios procesos con los fueros que no queremos tocar, por corrupcion cuando se desempeno como Presidenta de la Nacion, y tambien de la misma forma su hijo Maximo, Diputado con fueros.
No solo esto, sino que el Jefe de la Bancada de Diputados, Ing Agustin Rossi, tiene procesos en Santa Fe, y tambien sostiene sus fueros, y en las ultimas horas le cayo de regalo una nuva causa por sobreprecios en la Provision de la Campana Antartica , cuando era Ministro de Defensa.
Sin fueros, tambien sostenemos hoy como Ministro de Agroindustria, al Dr Etchevehere, con varias causas en Entre Rios,
Tambien a un Presidente de la Corte Suprema, con causas pendientes en Rafaela. No quisiera entrar en el tema de las Offshores, porque no quisiera nombrar a varios funcionarios actuales, pero en Espana cuando se destapo el caso del Ministro de Industria ,Ing. Soria, este en 24 hs renuncio.
Espero que me publiquen el presente, y seguro que recibire criticas y adhesiones.
Beni Cotler
TRANSPARENCIA
Junio 2, 2018
Escuche varias veces a nuestro Presidente decir que uno de los objetivos es la *transparecia*, y es por ello que agradece las criticas, para
poder analizarlas, evaluarlas, y tratar de modificar lo que se pueda.
Veo que practicamente no hay difusion en los medios y es por ello que me atrevo a dar conocer algo que me parece una falta de respeto a la transparencia y falta de eficiencia.
El Juez Bonadio ha citado a declarar al ex Intendente de Loberia , Hugo Rodriguez, quien fallecio en el 2013. Es cierto que puede haber atrasos en el vuelco de informaciones, pero pasaron cinco anos, y la familia tiene razon en sentirse tocada, y ahora se puede entender porque los Bancos exigen los certificados de supervivencia a personas que estan con vida, pero son muy mayores que no les facil hacer el tramite, entonces si queremos vestirnos el traje de Primer Mundo, no es posible, ya que en esos Paises, cuando la gente fallece de modo automatico los Organismos se enteran.
Y si de transparencia hablamos, como se puede entender que tampoco los medios publican que quedo vacio y por lo tanto inefectivo el
Tribunal de Cuentas de la Pcia de Bs As, que controla los gastos de la Gobernadora Vidal y de los Intendentes de dicha Provincia, ya que se han jubilado y han fallecido y han quedado solo dos integrantes en el mismo.Porque no se hacen estos importantes reemplazos? o no?
La lucha contra la inseguridad ciudadana debe de ser tomada más en serio y con medidas eficientes y radicales, predominando el trabajo de inteligencia antes que los operativos policiales para poder capturar a los delincuentes y criminales.
La situación en Lima norte es preocupante; en Carabayllo, en la zona de Las Lomas de Carabayllo, han asaltado 15 veces un grifo, robado múltiples veces a los vecinos y esta situación persiste; pese a eso, no se observa un trabajo efectivo de los agentes del orden. También en la zona de Enace, muy próxima a la urbanización Edwin Vásquez se han incrementado los robos a punta de armas de fuego.
Mediante esta carta quiero pedir y exigir al jefe de la Región Policial Lima y a la División Territorial Norte 2 que tengan muy en cuenta esta denuncia y procedan a poner orden y sancionar, para empezar con aquellos malos agentes que no cumplen su trabajo, pues no realizan los patrullajes que se han dispuesto. ¡Como ciudadanos debemos exigir cambios radicales!
Enrique Rojas L.
erojasl1980@gmail.com
[ezcol_1half_end]
Cadena de venganza
En un enfrentamiento armado, el 19 de enero de 1977, en la ciudad de Santa Fe, fueron abatidos cuatro dirigentes del Ejército Montonero. Rolando Martínez, mi papá, era entonces chofer y agente del Comando Radioeléctrico de la policía provincial, el rango más bajo del escalafón. Hoy, 41 años después del tiroteo, mi padre que tiene 77, está sometido a prisión preventiva domiciliaria, la que lleva más de dos años, por el “asesinato” de los cuatro guerrilleros, no obstante no haber participado en los hechos por los que se lo acusa, ya que tomó servicio a las 19.45 y el enfrentamiento terminó horas antes, según consta en el expediente judicial. Así, mi papá ha pasado a integrar la larga lista de los acusados como “violadores de los derechos humanos”, “delincuentes de lesa humanidad”, “genocidas” y “represores”. Mi padre es un hombre bueno que hace más de 45 años vive en el mismo lugar, tiene tres hijas y siete nietos, cobra una jubilación mínima y aquel mismo año, 1977, dejó de trabajar en la policía provincial por una enfermedad que aún hoy padece.
¿Alguien podría explicarme cómo un ser humano que no participó jamás en ningún enfrentamiento armado y empezó a trabajar horas más tarde de los sucesos de la causa en la que está acusado puede estar preso y calificado de esa manera? ¿Cómo puede ser que un agente chofer, sin un mínimo poder de decisión para ordenar un ataque, matanza, secuestro o tortura hoy esté pasando sus últimos días de vida en cautiverio, acusado de cuatro “asesinatos” que no cometió? Como mi papá, hay muchos verdaderos “presos políticos” a los que “alguien” nombró o se acordó de las caras, imágenes, voces, olores, sensaciones, o su nombre apareció en un libro tomando servicio después de más de 40 años, que terminaron acusados en alguno de los cientos de juicios por “delitos de lesa humanidad”, pasando a ser nuevos eslabones, en su caso uno muy débil, en la cadena de una venganza, y para ellos no hay derechos humanos.
Quizás definir legalmente si mi papá es un ser humano sería una respuesta a mis preguntas, porque ha sido tratado como si no lo fuera.
Gabriela Martínez
[/ezcol_1half_end]
[ezcol_1half]
INADMISIBLE !!!!
En un solo medio se puede apreciar el caso de una joven de 21 anos de la Ciudad de Noetinger, Cordoba, que ha nacido sin los miembros superiores y estaria perdiendo al llegar la mayoria de edad la Obra Social de su Padre, OSTAMMA, porque este ultimo tiene una propiedad y trabaja. Agustina Sanchez , lee, pinta y escribe con los pies.
El Municipio de Noetinger acompaño los estudios de Agustina, pero la Agencia Nacional de DISCAPACIDAD le nego toda ayuda.
La joven le envio una carta a el Presidente, y le han contestado que debe dirigirse a ANSES, y hasta el momento no ha tenido suerte.
Ruego encarecidamente al Gobernador de Cordoba o a aquellos que puedan ayudar a buscar la forma de hacerlo llegar via Municipio de Noetinger, ya que Agustina, ya tiene estudios terciarios , pero necesita acceder a los derechos por incapacidad, o no???
Solo me asombra que porque el Padre trabaje y tenga una propiedad, a la hija no le correspondan sus derechos?
Quiero apoyar desde aqui la presentacion de la documental Sera Venganza que se presenta hoy
Es un gran documento audiovisual de sumo inetres para que se conozca la verdadera historia que han sepyutado los Kirchenrs por mucho tiempo y en este momento es muy importante que se conozca la historia completa.
Gracias.
Daniel Vacca
[/ezcol_1half_end]
[ezcol_1half]
Respetar
En estos días, pero viene pasando desde largo tiempo, la política está exacerbando los ánimos y se apela a cualquier argumento para defenderse y de paso ofender. Deja de ser el arte discursivo para ser un engendro del odio. La política es una circunstancia social que no nos puede llevar a maltrechar la amistad.
Hay ideologías que se basan en las costumbres, en teorías, ideas, en conceptos, y eso es comprensible, y de ahí se parte al discurso que cada quien pretende ofrecer, pero lo que no es valido es que nos dejemos llevar por la emociones negativas y entremos en el universo del odio y sus intríngulis.
Cada quien es libre de argumentar su pensamiento político sin rebasar los límites de la ética social, la que es inherente al arte de la política en el escenario público, pues mientras esta última es argumentativa, la otra fija los límites entre lo decente y lo indecente. No olvidemos de acompañarnos siquiera de un mínimo de ética social cuando entremos en el mundo de la política partidista, para argumentar el discurso bajo el prisma de los valores deontológicos y axiológicos y no desbordarnos al mundo vulgar de la ofensa, que en cambio de sumar, resta.
Nunca olvidemos que mis derechos van hasta donde empiezan los derechos ajenos y más tratándose del respeto. Las ideas son valederas por la fuerza de sus argumentos, no por la cantidad de vulgaridades o de vejámenes con que se les pretende estólidamente reforzar.
Nos convertimos en salvajes… y puede terminar peor, si es que termina.
Juan Pablo Onzari
CABA
[/ezcol_1half]
[ezcol_1half_end]
LA UNICA VERDAD ES LA REALIDAD EN UN GAZA EXPLOSIVO
Leyendo las noticias de v/Diario de la fecha, relacionadas con la situacion en la franja de Gaza en su frontera con Israel, me veo en la obligacion de efectuar algunas aclaraciones ya que la unica verdad es la realidad.
Desde el 30/3 ultimo han comenzado habitantes de Gaza a manifestarse en la Frontera con Israel, con intenciones de penetrar en el Estado Sionista por la fuerza, y cabe preguntarse para que?? Y como la respuesta es clara: para perpetrar atentados indudablemente, las FFAA y de Seguridad proceden a defender a su poblacion.
Alguien puede explicar porque la Autoridad Palestina, en lugar de no permitirlo , alienta los disturbios.? Todos los familiares de los muertos percibiran de la Autoridad Palestina, pensiones vitalicias!! Porque no van a efectuar estas manifestaciones en las fronteras con Egipto o Jordania?
Han utilizado piedras, gomeras, incendiado neumaticos, barriletes explosivos, etc., que se pueden ver en los medios.
Han utilizado de escudo a ninos, mujeres y ancianos, y pueden comprobar en videos.
Han provocado incendio en dos pasos terrestres donde se derivan a traves de Israel, alimentos y ayuda humanitaria, es normal?
[/ezcol_1half_end]
[ezcol_1half]
Estimada Diputada – Dra Elisa Carrio
En este domingo 13/5 le estoy enviando este articulo que Clarin le dedica a los viejos caranchos, todos accionistas de una ANSES defaulteada
para que por favor lea los del dia de ayer sabado. Y se dara cuenta que es muy triste llegar a viejo con un PAMI Y ANSES que miran para otro lado junto con un Estado ausente.
Años que la vengo admirando por su lucha contra la corrupcion, y por ello, me tomo el atrevimiento de solicitarle que preste atencion no solo al tema de la publicacion sino a otros , que desmerecen la pretendida calidad de la transparencia democratica.
Que esta haciendo el Estado por los presos mayores de 70 anos, civiles o militares, que se encuentran en carceles con y sin sentencia, y que se van muriendo paulatinamente, practicamente sin atencion medica, en lugar de otorgarles la prision domiciliaria?
Que esta haciendo el Estado para dejar a abonar las pensiones vitalicias a los terroristas, de acuerdo a la Ley 26913, que incluyen a Kunkel, Taiana, Zannini, y otros miles?
Que esta haciendo el Estado para cumplir con la tan ansiosa Reparacion Historica, ya que aun hay 200.000 beneficiarios que siguen esperando que el Sr Basavilbaso los atienda? Hay casos con sentencia judicial de mas de 20 anos!!!
Sabe Ud que en diciembre de 2017 , fueron empujados al umbral de la pobreza mas de tres millones de jubilados que aun hoy perciben menos de $ 8.000, mientras el terrorista Kunkel por la Ley 26913 percibe el doble?
Sabe Ud que a los jubilados que residen en el extranjero, ANSES les descuenta el porcentaje condestino a PAMI, como si estuvieran en Argentina , y utilizaran los servicios, a pesar de no ser posible?
Asi como salio a abrazar en las ultimas horas a Cambiemos , a Macri y al FMI, es necesario que ahora lo haga con los que mas estan sufriendo el cambio que aun no llego.
Le agradezco el acuse de recibo, y si es posible me informe como se van a solucionar los problemas expuestos.
Sera Justicia
Beni Cotler
[/ezcol_1half]
[ezcol_1half_end]
Maestra jubilada
Como maestra primaria en la Ciudad de Buenos Aires, me jubilé con el 82% móvil. Es decir que mis ajustes de haber se relacionan a los aumentos de los maestros de mi antigüedad y categoría en la Ciudad según paritarias docentes.
Ocurre que los sistemas informáticos de la ANSeS y de la CABA no están interconectados y los maestros en mi condición debemos conseguir la información en la CABA, hacerlo validar, y presentarlo a la ANSeS cada vez que ocurre un ajuste salarial de activos. Gracias a la buena voluntad de funcionarios de la CABA y de la ANSeS, este trámite se me agiliza algo, pero de todas formas es una incomodidad pesada para personas de nuestra edad.
Por suerte, aún estoy en condiciones de hacerlo, pero indudablemente hay otros que no lo están, y yo no sé por cuánto tiempo. No veo ninguna razón técnica para que la la CABA no pueda informar por una interconexión entre sistemas en forma directa los cambios de las remuneraciones a la ANSeS y así evitar este disparate. Es sólo cuestión de buena voluntad y de compromiso social de las más altas autoridades, digamos Basavilbaso y Rodríguez Larreta. Les pido aquí, por favor, que se muevan y ayuden a los adultos mayores.
El viernes 11 de abril acompañé a una vecina (78) a darse las vacunas al Hospital Houssay, con tan mala suerte que no tenían la vacuna contra la gripe, por lo cual le solicitaban que concurriera al día siguiente a las 7 a hacer la cola, ya que sólo repartían 30 números. Nos acercamos a una farmacia y pudo aplicársela. ¿Hasta cuándo los pobres jubilados tenemos que soportar los malos tratos en dicho hospital? ¿Cómo pretenden que gente tan mayor tenga que ir a las 7 de la mañana a hacer una cola para que le den un número para aplicarse la vacuna que le corresponde por ser afiliada al PAMI y que es a la vez su obra social?
No hace falta tanta propaganda si las cosas funcionarían como corresponde, ni hablar de los turnos. El poco respeto a los mayores hace pensar que algunos empleados gozan de dar ese tipo de instrucciones. El descuento que hace el PAMI es bastante importante en algunos casos. Señores, espero que tomen cartas en el asunto y de una vez por todas den lo que corresponde a los jubilados, no todos tienen familia a su disposición para que realicen los trámites por ellos ni para ayudarlos económicamente. Espero tomen debida nota y exijan a los empleados una mejor atención.
El Día de la Libertad de Prensa, el Consejo de Administración de la Feria del Libro censuró la exhibición del documental Será venganza, sobre la violencia atroz de los años 70 y los actuales juicios que derivaron de aquella. El primer consejero titular de ese organismo es el exterrorista montonero Jorge Luis Bernetti, que ahora, con lobby y el dinero de la gente que visita la Feria, pretende impedir que se conozcan los asesinatos, secuestros y bombas que antes cometió. En la obra de otros dos exguerrilleros, Eduardo Anguita y Martín Caparrós, La voluntad, se cuenta cómo su propia “organización político-militar Montoneros” condenó a muerte al ahora temeroso censurador, junto a los terroristas de los que él era jefe en esa célula guerrillera: Nicolás Casullo, Silvia Rudni, Lilia Ferreyra y Carlos Ábalo. Allí está bien explicado todo. Como ahora se puede ver el video en YouTube, cualquiera puede constatar que no tiene nada agraviante salvo denunciar el enorme curro de los derechos humanos, que pagamos incluso a aquellos a quienes asesinaron a nuestros padres, como es el caso de mi padre, Carlos Alberto Sacheri. Es importante que se sepa que los asesinos de entonces se acomodaron a la “no violencia” y ahora usan su poder y la fuerza para censurar un sencillo, veraz y respetuoso documental que descubre sus modernos procedimientos.
¡Viva la libertad de prensa!
José María Sacheri
Asociación de Víctimas del Terrorismo de Argentina
[/ezcol_1half]
[ezcol_1half_end]
MEDICINA
11-5-18
Nuestro país posee médicos y profesionales de la salud sin vocación de servicio, terminan la consulta con el paciente rápidamente porque tienen que completar los cupos de atención que deben hacer diario, para que al término de su trabajo se dirijan a trabajar a otro hospital o consultorio privado.
Hoy la carrera de medicina es mercantilista y muchos profesionales trabajan por compromiso. Hoy se forman muchos médicos sin criterio, sin ninguna exigencia y ya vemos cuáles son los resultados.
Espero que esta nota le sirva de reflexión a toda la ciudadanía, que las autoridades permitan que solo profesionales con entrega desarrollen tan honorable labor, en donde el paciente reciba el trato y el beneficio de estar en manos de excelentes profesionales de la salud.
Manuel Davila
[/ezcol_1half_end]
[ezcol_1half]
EL HILO SIEMPRE SE CORTA EN LO MAS DELGADO
10-5-18
Cuidar la democracia es importante, pero tambien es importante no echar kerosene al fuego , afectando las cuestiones sociales elementales.
Es ya conocido a nivel Mundial, que el FMI para prestar o ayudar financieramente, pone condiciones que agrava los beneficios jubilatorios con recortes, el achique del gasto publico, y el control del deficit fiscal, y otros controles.
Que pueden esperar si prospera el prestamo del FMI, los jubilados que perciben menos de $ 8.000?, que pueden esperar el resto de los jubilados? y que pasa con aquellos que aun esperan percibir los montos de sentencias judiciales por parte de ANSES?
En FMI se ocupara de controlar los precios en las gondolas? NUNCA JAMAS!!!
Pregunto, como sera que hemos llegado a esto, cuando el Ministro Dujovne, decia hace 12 anos: AL FONDO NUNCA MAS?????
El hilo se corta siempre pero siempre por lo mas delgado y en ese ovillo no hay ningun Ministro o Legislador incluido,
solo con mirar a Grecia ya tenemos uno de los tantos ejemplos.
Es tan grande y tan malo lo que está sucediendo con la justicia en Argentina que casi no me lo puedo creer. Voy a fijarme en los últimos acontecimientos, aunque en la memoria de todos los lectores habrá muchos mas casos, porque por desgracia en estos últimos años esto está sucediendo y con bastante frecuencia.
Lo que me ataña es el caso de militares y policias que actuaron en la decada del setenta bajo ordenes democráticas y hoy en dia dan con sus huesos en las carceles de nuestro país sin pruebas o con pruebas inventadas.
Lo más curioso que nuestro presidente, ese que hablaba de “cambios” y “curros” parece haber sido acallado por grupos de derechos humanos que se ponen a favor de jueces que dejan libres a asesinos (como el caso Micaela) sin importarles los derechos que pudiera haber tenido esa chica.
Pero, lo mas importante es la parte económica para que la gente este contenta de cara a la re elección.
Vote a Macri.
Ya no votaré a Macri
Mónica Roldán
[/ezcol_1half_end]
[ezcol_1half]
SERÁ VENGANZA EN TUCUMÁN
9-5-18
Amigos tucumanos:
necesitamos mostrar una sala llena. Demostrar que en Tucumán hay libertad de expresión y que estamos avidos de justicia y verdad. Que es necesario terminar con esta grieta horrible y dar a todos nuestros mayores y ancianos, que han defendido a la Patria, en su mayoría cumpliendo órdenes, un digno reconocimiento y la posibilidad de terminar sus vidas en paz y junto a los suyos. En Argentina se viene juzgando y condenando a militares, gendarmes, policías, jueces, sacerdotes, abogados, y en Tucumán, ahora van por los industriales azucareros.
Es hora de construir la paz, de educar en el respeto, en el amor y no en el resentimiento y el odio. Acompañemos al Centro Estudios de Salta y estemos PRESENTES el Martes 15, a las 19.30 , en el Hotel Carlos V. LA PATRIA NOS LO RECLAMA. Los invitamos a asistir y les pedimos, ” no nos dejen solos”. Podrán escuchar testimonios directos y ver la película que la semana pasada fue vergonzosamente censurada en La Feria del Libro de Buenos Aires. Los esperamos!!!!
LA CIRCUNSTANCIA ACTUAL INVITA A REFLEXIONAR SOBRE ÉSTE TEMA.
LA NATURALEZA DE LAS COSAS.
¿PORQUÉ NECESITAMOS DETENERNOS HOY EN LA ÉTICA PROFESIONAL MILITAR?
LA CIRCUNSTANCIA ACTUAL INVITA A REFLEXIONAR SOBRE ÉSTE TEMA.
Preliminarmente pretendo plantear la importancia de dar tratamiento al tema enunciado. Es importante pues la crisis de arrastre que nos ha llevado a la actual decadencia, como Nación y Estado, es de origen cultural y político y la circunstancia es oportuna, toda vez que estamos -según promesas oficiales- en las acciones preliminares de la recuperación del núcleo duro del Estado Nación: las FFAA. (1)
A las generaciones de Oficiales de las FFAA argentinas que egresamos en la década 1950/1960 nos tocó vivir, mientras revistábamos en actividad, las crisis socio-políticas más graves del siglo XX que culminaron con las guerras posnucleares -limitada y muy limitada- que hoy, en sus posguerras, retienen a nuestra querida Patria Argentina -mientras nos empeñamos en un nuevo y arduo intento de resurgimiento- en doble “estado de guerra”(2) (3)y en plena inseguridad pública y estratégica, que somatizamos diariamente a través de una fuerte ansiedad colectiva frente al futuro, aun en el de corto plazo.
Las guerras -en la Historia Universal- son anteriores a la existencia de los ejércitos, que recién llegaron cuando lo permitieron los excedentes financieros de las comunidades organizadas. Estos -los ejércitos- siempre fueron medios disuasivos/defensivos frente al agresor eventual o bien, ante una situación crítica interior que conllevara un riesgo existencial y legitimara el empleo de la vía institucional, para retener la sobrevivencia identitaria de la nación.
En manos del conquistador o del revolucionario, las FFAA fueron también empleadas para la perversidad en las relaciones políticas, internacionales o internas. Cuando se agota la comunicación política negociadora entre actores internacionales o internos, la alternativa es siempre la violencia organizada, impulsada por un agresor. En este caso estamos en presencia de una guerra ofensiva, ya fuere internacional o guerra civil -interna-. Ésta última es la peor especie de las guerras, pues su instrumento central es el odio social.
Expresadas estas generalidades conceptuales, volvamos a nuestra situación. Desde 1945, después de la Segunda Guerra Mundial -que finaliza con lanzamientos nucleares en Japón- se inicia la apertura de una nueva rama de la Ciencia Política: la Polemología y una nueva etapa de la Estrategia, la Contemporánea. Reaparecen -desde 1947- “actores agresores no estatales” en el marco interno y externo y la más primitiva modalidad de la acción violenta: el terrorismo. El espectro del conflicto se amplía así, bruscamente, es sus extremos: desde la hecatombe nuclear -en uno de ellos- a las primitivas guerras muy limitadas -en el opuesto- (4).
Al finalizar la Guerra Fría -1989/caída del muro de Berlín – 1991/implosión de la URSS- la disuasión se hace abstracta por carencia de responsabilidad política de los nuevos actores-agresores. Surgen las nuevas amenazas y riesgos estratégicos que la Argentina -aun hoy- legalmente no reconoce, como lo demuestra la legislación de Seguridad Nacional vigente.
La Carta de la ONU y en particular la eficiencia del Consejo de Seguridad para preservar la Paz, ingresan progresivamente en un cono de sombras. El conflicto violento se difumina y generaliza en el orbe, abandona los teatros de operaciones militares y se posa sobre las sociedades, con un número cada vez mayor de “víctimas civiles inocentes” y también de dirigentes políticos y militares “confundidos” (4).
Así llegamos al siglo XXI y a la situación que nos abarca. De las actuales sesenta guerras activas en el mundo, la totalidad de ellas son internas, es decir, guerras civiles que se caracterizan por su tipificación “asimétrica”,“híbrida” o de “séptima generación” como bien lo expresa el artículo de La Nación -“Sin fronteras entre la defensa y la Seguridad”– del 14 Feb 18.
Son las guerras que la Argentina no puede planificar -prever- para evitarlas, por imposición de la vigente legislación de Seguridad Nacional. Esta irracionalidad no es casual, sino consecuencia de las derrotas estratégicas que sufrimos en el siglo XX, aun no asumidas.
Constituye la tremenda paradoja de estas horas: quienes fuimos los primeros en enfrentar a este desconocido tipo de agresión asimétrica sorpresiva -a partir de los años ’60- nos encaminamos ahora a repetir los mismos errores, medio siglo después, como si no nos hubiese ocurrido nada.
El “relato” ha superado a la verdad. La “narrativa” se impuso a través de los medios y de la escuela (5). El pre-juicio domina a la realidad presente y la cobardía permanece ante la pseudo-revolución en retirada, herida pero no vencida.
La mayoría de nuestros vecinos ha reaccionado positivamente ante la evolución acelerada -al ingresar al siglo XXI- del fenómeno “socio-político” guerra. Nuestro país -su dirigencia-, contrariamente, permanece paralizado, confundido y en altísimo riesgo estratégico, frente a una situación que carece de tratamiento público e idóneo por los medios y en particular por parte de los responsables de la comunicación social referida a la Seguridad Nacional. “De eso no se habla”.
Mientras en el mundo desarrollado se vive una constante transformación doctrinaria y orgánica, acompañada por la multiplicación de los presupuestos de Seguridad Nacional, la Argentina permanece de espaldas a esa realidad y a necesidades indiscutibles que la condenan, irremediablemente, a nuevos fracasos (6), si no se recupera el Estado Institucional.
LA NATURALEZA DE LAS COSAS.
Los cambios sorpresivos de la naturaleza del fenómeno guerra, que han llegado con el avance del alto ritmo de evolución de la civilización humana y la creciente crisis cultural de Occidente, no han podido superar -entre nosotros- la explotación estratégica colusiva que nuestros enemigos triunfantes -en el plano político-estratégico- nos han impuesto -a través del Estado- de un elaborado “relato”. Es la homologación de la “purga” que los bolcheviques impusieron a los Oficiales del Zar en 1921, impulsada aquí por el Decreto 158/83, que continúa llevando a centenares de soldados y civiles argentinos a ser condenados ilegalmente con el Código Penal Ordinario, por haber combatido y triunfado en los combates de la guerra contrarrevolucionaria -1974/1989-.
Ambas maniobras -la jurídica y la comunicacional- han “trastocado” la victoria -en combate- de los argentinos e impidieron la creación de una nueva Política de Seguridad Nacional, fruto de la durísima experiencia reciente. Esta ha sido reemplazada por una perversa y falaz política de derechos humanos, unidireccionados.
Prueba de ésta paradójica situación -en las presentes circunstancias- es que a los Cadetes de los Institutos de Formación de nuestras FFAA, no se les puede citar la agresión terrorista-revolucionaria -1959/1989-, sino solamente al “terrorismo de Estado” -1976/1983- bajo supervisión de la UNDEF y por parte de profesores provenientes de “Franja Morada”. Y esto mientras en Azul el JEMGE, al rendir homenaje a los muertos en el ataque al cuartel, expresó todo lo contrario. ¿Puede edificarse sobre la ciénaga del “relato” la personalidad de los futuros oficiales de las FFAA argentinas? ¿Puede existir tanta incoherencia dentro de las Instituciones, en un momento en que se dice que se las recuperará?.
Las guerras en acto -en el mundo entero- siguen siendo fenómenos “lúdicos y agonales” (7) (8)-como en el pasado- pero su naturaleza ha variado. Son de otra “especie”, diría Clausewitz y ellos -los noveles oficiales-inevitablemente -si el Estado no cambia el rumbo- deberán enfrentarlas a su egreso y a lo largo de muchos años, pues no las prevemos y por eso, llegan. Estas nuevas guerras no tienen fácil ni rápida resolución. Nuestra juventud militar ¿será lanzada a combatir -nuevamente- sin previsiones estratégicas y “formados” en las falacias de la política de los derechos humanos?
¿PORQUÉ NECESITAMOS DETENERNOS HOY EN LA ÉTICA PROFESIONAL MILITAR?
Nuestros enemigos -hoy en colusión- en las guerras que peleamos recientemente encontraron -en las posguerras- una “debilidad” en nuestra apertura de la guerra contrarrevolucionaria. El PEN lo hizo por Decreto -que no envió al Congreso- y en él no dictó el concepto “ético – jurídico” que correspondía al empleo de las Fuerzas en el marco interno -la DENAC- (9) y la DEMIL (10). La Convención de Ginebra regula las guerras internacionales y en su Protocolo II, trata la forma de encarar los conflictos armados internos.
Estas normas debieron ser homologadas en el Derecho Nacional, pero no se lo hizo. Esa fue la razón por la cual cada Cte. de Zona tuvo que reemplazar aquel vacío conceptual –deneta responsabilidad política– en la polvareda del combate y establecer sus propias reglas de empeñamiento táctico. Todos ellos se hicieron responsables, pública y oportunamente, de lo que ordenaron durante las operaciones. Éste aspecto ético-jurídico, que es central, ha sido desarrollado detalladamente por el Grl Jorge Apa Ferraro, en su libro “Al gran fraude argentino ¡Salud!” (11)
Aquella “debilidad”, convertida en “vulnerabilidad” por la aguda experiencia coludida de nuestros enemigos, fue explotada a través de una maniobra de pinzas, jurídica y comunicacional, que aun sigue en curso. Tuvo un punto de partida en el Decreto 158/83, complementado por la demonización de las FFAA a través de los medios de comunicación del Estado; desde el mismo Estado que abrió operaciones militares de “aniquilamiento” de modo “defectuoso”, desde el máximo nivel político.
Así las cosas y como consecuencia de éste “trastocamiento” de la victoria táctica frente al terrorismo-revolucionario, en derrota política y estratégica de los argentinos, el país ingresó en una acelerada decadencia que se encamina aun al “Estado fallido”. Sus graves consecuencias están a la vista y en lo que hace a las FFAA, además de su objetivo desarme unilateral y extrañamiento constitucional, se les quitó el fuero militar. Quedaron sin Código de Justicia Militar y de su correspondiente Reglamentación, como principal sustento de la disciplina y del mando militar. Sepamos que somos el único país de la región que sufre semejante despropósito, agravado por los dos “estados de guerra”, como fruto del trastocamiento.
El Jus in Bello -en la Argentina- ha quedado en manos absolutamente legas, como lo están demostrando, hasta el ridículo, los jueces y fiscales de los TTOOFF, en todo el país. Si se entrara en operaciones ¿qué actitud tomarán los futuros mandos operacionales? En sus cuarteles generales ¿estarán los jueces federales y fiscales que acompañen a las tropas de primera línea, para autorizar la apertura del fuego? Tengamos presente que estarán operando según el articulado del Código Penal ordinario y según los principios de la “legítima defensa”. Estos despropósitos, únicos en el mundo, no son solo ignorancia.
En realidad se los ha sancionado -para lograr el “control civil de los militares”- un Jus ad Bellum que, en línea con la legislación de Seguridad Nacional vigentes, niegan por ley la probabilidad de una guerra híbrida, interna. En consecuencia, es muy probable que esa guerra llegue y nuestra derrota está así asegurada, porque está prohibido preverla, por Ley. Como lo expresara Séneca: “Peor que la guerra, es tenerle miedo a la guerra” (13).
No terminan allí las consecuencias del “trastocamiento”. A las FFAA también se les ha quitado el Código de Honor Sanmartiniano y los Tribunales de Honor. Es decir, no solo se han destruido a las FFAA como Instituciones Constitucionales, sino que se ha destruido al SER militar, aquel al que se lo identificaba por su “Honor y su Valor”, y esto también está directamente relacionado con el objetivo de eliminar a las FFAA.
Se está hablando de “re-estructuración”, “reconversión”, “reconstrucción” de las FFAA. Hasta hoy no escuchamos una sola palabra dirigida a lo esencial: la recuperación de la autoestima militar, del espíritu militar, de las Instituciones Militares fundadas en su “Ética Profesional”. Napoleón lo decía en términos sencillos: “Una Fuerza no vale por el número de sus bayonetas, sino por el temple de sus corazones”.Y lasburocracias carecen de corazones. ¿Hay alguna “idoneidad” polemológica o estratégica en el ámbito de las decisiones políticas pertinentes? Yo no la observo. Debes ser mis sensores de dinosaurio.
El prostibulario Zaffaroni y la Cte Hebe no están buscando solo la ingobernabilidad. Están anunciando que la pseudo-revolución está activa y que pronto “puede haber un accidente violento”. ¿Así le llama ahora el garantismo-“un accidente”- a un asalto revolucionario violento, que probablemente prevén junto a las mafias de la corrupción, como aliados ocasionales? Y qué hacen nuestros demócratas de cartón. Por lo menos deberían rasgarse las vestiduras, una vez más.
CITAS:
(1) Auel H. J. “¿Cómo salimos de la actual emergencia político-estratégica?. FFAA y Estado Nacional”. Ago 14. www.ieeba.org
(2) Auel H. J. “La larga guerra civil argentina y el actual estado de guerra civil revolucionaria”. Jul 13. www.ieeba.org
(3) Auel H. J. “La Política de Derechos Humanos”. Jun 16. www.ieeba.org
(4) Auel H. J. “La dirigencia argentina frente a los desafíos de la Seguridad Nacional en el Siglo XXI”. Ago 15. www.ieeba.org
(5) Auel H. J. “El narcoterrorismo, el Estado Nacional, la democracia y las FFAA”. Abr 14. www.ieeba.org
(6) Auel H. J. “El pensamiento estratégico militar en el siglo XXI”. Oct 14. www.ieeba.org
(7) Lúdico: Azaroso. Impredecible, pues será consecuencia del choque de voluntades inteligentes.
(8) Agonal: “Perteneciente a lo relativo a los certámenes, luchas y juegos públicos, así corporales como de ingenio”. Diccionario Enciclopédico Salvat. T. I. 8va, Ed. 1957. Aplicado al concepto guerra, el término indica que la Política -responsable de la apertura y el cierre de una guerra- es la que debe dictar a las FFAA “lo relativo” a las normas -éticas- a las que deben ajustarse. Estas, a su vez, emergen de la cultura de la Nación. De estos conceptos se derivarán las “reglas de empeñamiento” a nivel táctico inferior.
(9) DENAC: Directiva Estratégica Nacional.
(10) DEMIL: Directiva Estratégica Militar.
(11) J. Apa Ferraro. “Al gran fraude argentino ¡Salud!”. Ed. Edivérn SRL. May 17.
(12) Estado de Guerra: (O “estado de beligerancia”).“Situación que se plantea a una nación como eventual ruptura de hostilidades a través de un conflicto armado con otra nación o internamente, en el supuesto de una eventual guerra civil”. Diccionario Militar. T. II. Cabanellas de Torres y Alcalá Zamora. Bs. As. 1962. Argentina cumple con ambas situaciones: frente al RU, en razón de su permanente negativa de negociar la soberanía de las Is. del Atlántico Sur y frente al terrorismo revolucionario, pues éste retiene aun su actitud hostil, ratificada permanentemente por sus organizaciones y representantes actuales, con palabras y hechos.
(13) H. J. Auel. “Relaciones Cívico Militares, la necesaria reconstrucción del Estado y de imprescindible Seguridad Nacional, Regional y Continental”. May 13. www.ieeba.org
El documental de Andrés Edmundo Paternostro, exhibe en doce minutos el cruel manejo que le ha dado el gobierno kirchnerista (Y por qué no el actual?) al espinozo tema de los presos políticos o prisioneros ilegalmente arrestados que participaron o no en la lucha contra la subversión, décadas atras.
[ezcol_1third]
Gral. Heriberto J. Auel
[/ezcol_1third]
[ezcol_1third]
Ricardo Sain Jean
[/ezcol_1third]
[ezcol_1third_end]
Adolfo Vázquez
[/ezcol_1third_end]
Con testimonios personales, de familiares como Guadalupe Jones y las palabras autorizadas de -entre otros- el General Heriberto J. Auel o el ex Juez Adolfo Vázquez, este reporte ataca las trasgresiones que se cometieron para llevar adelante uno de los tantos y exitosos negocios de corrupción con el encarcelamiento indiscriminado de mujeres y agentes del Estado.
“Uno no puede librar una guerra en la actualidad sin el apoyo de la opinión pública,
que es tremendamente moldeada por la prensa y otras formas de propaganda.”
Grl Douglas MacArthur (1880 –1964)
La “confusión” de los pensadores y dirigentes.
La violencia organizada.
¿Cuál es el horizonte de nuestras FFAA?
La “confusión” de los pensadores y dirigentes.
Nuestra querida Patria Argentina aun somatiza, en el 2017 sus posguerras, que corresponden a las guerras que vivimos en la segunda mitad del siglo XX, ambas hijas -por su tipología aun no asumida por los argentinos- de la presencia en el mundo de los arsenales QBN, desde 1947.
¿Por qué los efectos psico-sociales de esas guerras -vividas como verdaderos y sorpresivos dramas- se prolongan hasta hoy, durante tan largo tiempo, a pesar de los acelerados procesos de cambios que caracterizan a la presente etapa de la civilización humana? (1) (2) y (3).
Es probable que una de las razones que explica al fenómeno esté en aquella conocida frase del Grl Mac Arthur, que encabeza a éste trabajo: “En la guerra no hay sustituto para la victoria”. Podríamos concluir, consecuentemente, que lo que realmente somatizamos son las derrotas estratégicas sufridas, ambas actualmente incardinadas y en plena explotación por nuestros enemigos de ayer, hoy aliados -a través de sus vicarios-, en una nueva circunstancia histórica (4).
La “confusión” de nuestros pensadores y dirigentes, que aun continúa y se prolonga -sin indicios de un final- se explicada por la segunda frase del quien fuera el Supremo Comandante del Pacífico Sur: “Uno no puede librar una guerra en la actualidad -1943– sin el apoyo de la opinión pública, que es tremendamente moldeada por la prensa y otras formas de propaganda”. Esa ha sido y es la razón del eje del “relato”, que nos impidió comprender y superar nuestras crisis de posguerra y que nos puso al borde del abismo, hasta el 10 Dic 15(1).
¿Arena…, o pan rallado?. No existe en la Historia Militar Universal un solo caso que nos muestre la ausencia de una reacción social positiva, frente a una derrota en la guerra. Allí están a la mano los ejemplos de Alemania y Japón, después de la IIGM. ¿Qué nos ha ocurrido para volver a ser -otra vez- una excepción en el mundo?. Nada de lo aprendido en los dramas de esas guerras fue políticamente asimilado y aplicado. Nada. Estamos repitiendo todos los errores del pasado. ¿Hubo mera “confusión” o hubo “traidores a la Patria”,desde 1983? (2) (3) (4) y (5).
En los días que corren la Justicia descubre a estos últimos, luego del asesinato de un fiscal que investigaba un hecho de terrorismo, de un “desaparecido” en el Río Chubut, de la pérdida de un submerino y de una víctima de la “represión del Estado” en Villa Mascardi. La sentencia de Cicerón vuelve a recordarse, luego de un paréntesis de treinta y cuatro largos y penosos años: “Cuando la Patria está en peligro, Dios es invocado y el soldado convocado; cuando el peligro cesa, Dios es olvidado y el soldado juzgado” (6) y (7).
Algunos periodistas y políticos, conmovidos por los acontecimientos citados, caen en la cuenta que la Argentina está en plena indefensión, sin presupuesto y con sus FFAA humilladas y…como “la Patria está en peligro” (8) (9) y (10), ¿¡no habría que volver a pensar en la necesidad de tener FFAA?!.
Decíamos en Feb 14, en un ensayo titulado “Confusión, ignorancia o propósitos ocultos” (11): “La guerra evoluciona con la civilización humana -que en las últimas décadas ha acelerado notablemente su ritmo- sin perder por ello su esencia. Se inscriben en ella todas las formas de la violencia organizada. Es un hecho político y es la Política la que señala su “para qué”. Lo que dijera Mao ha tomado -a lo largo de éste tiempo- cada vez mayor entidad: ´la guerra es política con derramamiento de sangre y la política es guerra sin derramamiento de sangre´. La guerra es gestión política a través de alguna variante de fuerza. Cuando se la analiza sin considerar esta cualidad, el análisis es por lo menos incompleto”.
La violencia organizada.
Ha reaparecido la “violencia organizada” en el Comahue y en las grandes ciudades. El discurso de los agresores centrales, es el de los ’70 pero, llamativamente, hasta ahora no ha habido quien los relacione. Seguimos viendo lo superficial y no las esencias. Seguimos mirando la punta del botín y no la cancha entera. Algunos actores cambiaron, los modos son distintos, los procedimientos también (8), (12) y (13). Sin embargo, el núcleo y los objetivos son los mismos. Sería imprescindible que los responsables del área de la Seguridad Nacional fijaran su atención en la metamorfosis en curso en la zona de la Orinoquia (12), antes de adentrarse en los detalles de las orillas del Río Chubut o la cantidad de colectivos que trajeron la barbarie a la Plaza de los Dos Congresos.
En estos días algunas voces preguntan ¿para qué sirven las FFAA?. Las muertes en el Comahue, la pérdida de un submarino o el riesgo de desabastecimiento de las Bases Antárticas hacen pensar que algún atraso hay en el sistema de Seguridad Nacional y por lo tanto es necesario “re-estructurar el sistema defensivo”.
Ello nos lleva -como institución- a la obligación perentoria de encender las alarmas rojas. Por ello ya le hemos solicitado una audiencia al Sr Ministro de Defensa Nacional. ¿Cómo vamos a “re-estructurar” la Defensa Nacional sin planeamiento estratégico? La legislación actual prohíbe prever los riesgos y amenazas estratégicas reales -dentro de nuestros límites- que ensombrecen nuestro futuro inmediato. ¿Alguien está pensando que con la eliminación del Decreto reglamentario de la Ley de Defensa ese obstáculo está salvado? Craso error.
Sería conveniente que relean las leyes vigentes y recuerden que la guerra, las actuales, siguen siendo “lúdicas y agonales”, a pesar de su acelerada transformación. ¿O hay quienes quieren enfrentar la nueva amenaza volviendo a improvisar? Entonces sepamos que acunamos, ingenuamente, una nueva derrota estratégica, a pesar de las durísimo experiencias recientes.
Restablecer una legislación de Seguridad Nacional relacionada con la real situación que atravesamos, exige dos cosas: 1. Decirnos la verdad y, 2. Reemplazar la Política de Derechos Humanos por una Política de Defensa realista, innovadora y posible. Es decir: volver a la racionalidad, pero esta vez con eficiencia.
¿Cuál es el horizonte de nuestras FFAA?
Las experiencias recientes permitirían a las FFAA argentinas ponerse nuevamente los “pantalones largos”. Debemos pensar y obrar pisando nuestro suelo. La mochila está cargada de experiencias propias, durísimas y recientes. El código a seguir está en la doctrina a adoptar y la doctrina está en el plan estratégico a concebir, desde una total ausencia de alistamientos. Tendríamos que realizar un salto de garrocha responsable, si despertamos en tiempo.
Las teorías estratégicas en acto en el 2017 son de conocimiento universal y nos facilitaránconcebir -si existiere una decisión política- las organizaciones, los instrumentos y el personal adiestrado para la acción. Para lograrlo, nuestra situación actual nos indica aspectos desfavorables y otros favorables, sabiendo de antemano que siempre habrá oposición a la innovación.
Sin planificación estratégica no habrá noción de actitud -ofensiva o defensiva- ni prioridad para las aptitudes. Cuando más se aproxime la doctrina a la clave de nuestra propia situación, mayor será la adaptación de las FFAA para atender y entender a los objetivos y misiones a cumplir.
Las FFAA del orbe que están actuando permanentemente son las que más aprenden. Acumulan experiencias y evolucionan. Cuando hay lucidez, mientras combaten ya se están preparando para la próxima guerra. Ese conocimiento será de gran apoyo para nuestro singular planeamiento estratégico. No hay lugar para la “copia”. Deberíamos considerar a nuestra exclusiva realidad iberoamericana, en evolución, a las limitaciones presupuestarias del país, al tiempo de incorporación de los soldados para adquirir destrezas o el nivel de bajas que acepta una fuerza “profesional”. El tono moral de nuestra sociedad sería un aspecto importantísimo a considerar.
Tengamos en cuenta que en Occidente, desde la Guerra de Corea -1950/53-, no han existido mayores enfrentamientos entre Estados que permitan determinar capacidades militares. Las experiencias bélicas han sido muy variadas en los últimos tiempos y han ocurrido en lapsos muy cortos. Las capacidades para el combate de alta intensidad, están en descenso. Occidente se especializó en operaciones de estabilización de países del tercer mundo, como lo hicimos nosotros por imitación, con total descuido de nuestra propia situación interna.
Los efectos de nuestras derrotas estratégicas se reflejan muy bien en el éxito de nuestros enemigos -internos y externos-, que lograron el desarme unilateral y la ausencia del planeamiento estratégico frente a los verdaderos riesgos y amenazas que padecemos desde 1985. Y ello cuando la totalidad de las guerras en acto, en el mundo, SON INTERNAS.
Hubo un acuerdo político, producto del “entrismo de izquierda” en los partidos tradicionales, para eliminar a las Instituciones Militares del escenario nacional. Se judicializaron las guerras recientes, se privó de presupuesto a la Seguridad Nacional y se humilló a las FFAA, de Seguridad y Policiales a través de la comunicación del propio Estado. Más de treinta años de acción psicológica negativa y de enseñanzas escolares “progresistas”, ¿cómo se remueven hoy, ante las necesidades que exige la proximidad de las presentes amenazas?
Por el momento, la “ocupación” de amplias extensiones de nuestro territorio por elementos “extraños”, más de setenta ataques “revolucionarios” -en breve lapso- con tácticas “terroristas” para “despejar” aun más los vacíos espacios patagónicos -en tres provincias- del Comahue, tienen tratamiento de seguridad pública, a pesar de la declaratoria del “ocupante” -agresor violento- que reclama soberanía y opera bajo conducción externa, como lo ha comprobado el Fiscal General de Neuquén, José Gerez, que acusó a la RAM de tener vínculos con las FARC (12), por contar con los documentos probatorios (14).
El Estado está cumpliendo con la legislación vigente, que pone el caso en manos policiales y judiciales y le niega jurisdicción al planeamiento estratégico, con una lógica perversa, propia del resentimiento ideológico del terrorismo setentista que diseñó y aprobó estas leyes. Pero, allí sigue firme la “Política de Derechos Humanos”, como Política de Estado.
Estamos en presencia, nuevamente, de la actitud que asumió el Estado Nacional desde 1959 hasta 1974. Luego improvisó, histéricamente, con las consecuencias que aun soportamos. ¿A rena…¿o pan rallado?. ¿De qué naturaleza es la situación en desarrollo en la Patagonia argentina y chilena?. Si existe una agresión violenta y apátrida, que reclama soberanía sobre parte del propio territorio, que lo ocupa sin reconocer al Estado Argentino y se impone ante la Justicia y la policía, paralizándolos, deberíamos preguntarnos: ¿qué más necesitamos para entender que estamos en presencia de una agresión estratégica-revolucionaria?.
Si las pancartas y estribillos de algunos grupos izquierdistas que irrumpen diariamente en la CABA reclaman por la libertad del jefe de la RAM, o para que aparezca el desaparecido que no desapareció ¿no podríamos concluir que enfrentamos a una organización bajo comando único externo y con un objetivo común, actuando en todo el país? ¿O estamos creyendo que un fiscal o un juez de una remota localidad patagónica o de la CABA solucionarán una “agresión revolucionaria” modelo 2017?
La respuesta es clara: el Estado retiene vigente la política de derechos humanos -como lo demuestra la reciente presentación del Plan Avruj-, no existe política de seguridad nacional y gran parte de la dirigencia política carece del coraje y los conocimientos necesarios para enfrentar esta cruda realidad estratégica presente.
La guerra sigue siendo un hecho socio-político de naturaleza violenta, interactiva y cambiante, cabalgando sobre la evolución acelerada de la civilización, influida por la legalidad internacional y nacional, las diferencias culturales y sus derivaciones políticas, militares y sociales. Ya nos hemos alejado del modelo napoleónico-industrial y el ingreso a la etapa posindustrial nos muestra tendencias disruptivas. Los argentinos ya lo hemos vivido y sufrido -desde sus comienzos- y parece imposible no haberlo comprendido aun, repitiendo errores.
La legislación actual prevé solo la guerra con otros Estados y con sus fuerzas regulares, pero hace muchas décadas que la agresión proviene desde organizaciones no estatales. El proceso revolucionario iberoamericano -que hipócritamente se oculta- ha mutado de forma, pero sigue siendo el mismo. Su núcleo impulsor, también.
La maniobra ofensiva principal pareciera desplazarse -en la actualidad- a una de las variadas ramas inauguradas por el proceso revolucionario en los ’90: el indigenismo radical, que encontró en el Quinto Centenario del Descubrimiento de América un punto de partida y legitimación, con apoyo de intelectuales y clérigos neo marxistas. La localización periférica de su organización y ejercitación, se mantuvo fuera de la atención pública en la Argentina, hasta el momento en que ejecutan la operación pre-electoral del “desaparecido”. Es cuando nos enteramos por la prensa que llevaban años de acción y ejercitación en ambos lados de la Cordillera (12), con la sigilosa protección de Justicia Legitima en nuestro país.
Las tribus urbanas, desde lesbianas a piqueteros, constituyen las maniobras subsidiarias, con un objetivo en el corto plazo: la “resistencia” en todos los frentes. Desgastar al poder e impedir la gobernabilidad (13) y (14).
Las teorías estratégicas mundiales que pueden ayudarnos al momento de pensar en la propia doctrina –si nos decidiéramos salir del actual vacío conceptual- origen de la actual indefensión e inseguridad, serán enumeradas muy sintéticamente, limitándonos a las principales. Son las siguientes:
Guerras de Tercera y Cuarta Generación: El término se originó en 1989 cuando William Lind y cuatro oficiales del Ejército y del Cuerpo de Infantería de Marina de los Estados Unidos, titularon a un ensayo “El rostro cambiante de la guerra: hacia la cuarta generación”. Ese año, el documento se publicó simultáneamente en la edición de octubre de Military Review y de la Marine Corps Gazette. La propuesta está relacionada con la guerra asimétrica y la guerra contraterrorista.
Guerras de Cuarta Generación: La formularon Van Creveld y Thomas Hammes en 1994, planteando los modos no convencionales de la guerra. Identifican principalmente la acción psicológica y la infiltración en las retaguardias enemigas (15). A esa altura, la Argentina llevaba décadas de agresión de éste tipo.
Guerras de Quinta Generación: Ray Alderman las define por su alcance y su desarrollo sin contacto y silenciosamente, en el 2017 (16).
Guerras de Sexta y Séptima Generación: Niño González las conceptualiza en el 2017, dándole a las guerras en curso en el mundo una dimensión de degradación de las violencias multifacéticas, a las que el Estado Occidental responde tardía y erráticamente ante las nuevas amenazas y riesgos a la Seguridad Nacional e Internacional. Concluye que el terrorismo exige un reordenamiento de la Seguridad (17).
Las Guerras Irrestrictas: Concepto revolucionario concebido por dos Coroneles del Ejército Popular Chino -Quiao Liang y Wang Xiangsui- en 1999, en su libro “Unrestricted Warfare”. En esta obra los autores señalan que ante la disminución de la violencia militar, aumenta la violencia política, económica y tecnológica. Señalan la importancia que alcanzan la desinformación -el relato- y el control de áreas sensibles del poder bajo influencia de la globalización y de la dependencia tecnológica. Vale la pena reproducir cómo conciben los “ataques integrados”:
“Guerra cultural, controlando o influenciando los puntos de vista culturales de la nación adversaria. Guerra de las drogas, invadiendo a la nación adversaria con drogas ilegales. Guerra económica, empleando la dependencia de la ayuda financiera para controlar al adversario. Guerra ambiental, destruyendo los recursos ambientales a la nación adversaria. Guerra financiera, subvirtiendo o dominando el sistema bancario del adversario y su mercado de valores. Guerra de leyes internacionales, subvirtiendo o dominando las políticas de las Organizaciones Internacionales o multinacionales. Guerra mediática, manipulando los medios de prensa extranjeros. Guerra de Internet, mediante el dominio o destrucción de sistemas informáticos transnacionales. Guerra psicológica, dominando la percepción de las capacidades de la nación adversaria. Guerra de recursos, controlando el acceso a los escasos recursos naturales o manipulando su valor en el mercado. Guerra de contrabando, invadiendo el mercado del adversario con productos ilegales. Guerra tecnológica, ganando ventaja en el control de tecnologías civiles y militares. Terrorismo” (1).
La Teoría Gerasimov: Es muy probable que la teoría más difundida e influyente en los últimos años, provenga del Jefe del Estado Mayor para la Defensa de Rusia, Grl Valery Gerasimov (18). Señala los casos de la intervención en Libia del 2011, las revueltas árabes o la Revolución de Colores o la invasión de Iraq del 2003 como muestras de la forma de operar de Occidente. Señala a las capacidades no militares como principales para la obtención del objetivo, en una relación de 4 a 1. Destaca la creciente tendencia al empleo de sistemas de armas con control remoto y a la robotización del campo de combate. Sin duda, la caracterización principal que destaca es la de ganar la supremacía en el campo de la información y en la comunicación estratégica. Subraya el carácter híbrido de las acciones de guerra, lo que dificulta la identificación de una agresión. La frontera entre la guerra y la paz están difuminadas. Rusia ha logrado en Georgia, Ucrania o en Siria, sincronizar las operaciones militares con las acciones de la comunicación, llegando a socavar la soberanía de un país, sin ocupar su territorio.
Las “observaciones” de McMaster. El actual Consejero de Seguridad Nacional de EEUU citaba en el The New York Times (19) tres normas para evitar una comprensión errónea de la naturaleza de las guerras en acto: 1. Su carácter político, que debe ser coordinado con las restantes acciones del Estado para alcanzar el objetivo impuesto. 2. Considerar su dimensión humana, pues se sigue persiguiendo “la honra, el temor y el provecho”. 3. La conjunción de las dos anteriores: su carácter lúdico, pues se trata de voluntades inteligentes en oposición, que la hace impredecible. Concluye que no debe confundirse al éxito de las tecnologías en el combate, con la existencia de una estrategia en la batalla.
Por último, no queremos cerrar estas síntesis que nos sirven de antecedentes y apoyos a nuestro pensar, sin citar a Eugeny Messner -1891-1974-, Cnl ruso blanco, que falleció en Buenos Aires y anticipó, en sus estudios teóricos durante la guerra fría, muchos conceptos que hoy encontramos en los estrategas teóricos más recientes y que hemos citado más arriba.
El acceso a las nuevas tecnologías por parte de actores no estatales, con el condimento de los fundamentalismos radicales de tipo social, político o religioso, están mostrando los fracasos de la disuasión en la posguerra fría. Las guerras asimétricas tienen la capacidad de lograr efectos estratégicos con acciones tácticas de baja escala, como lo estamos comprobando algunos argentinos en el 2017, a pesar de que lo sabíamos desde los ’80. Pensar en términos de Paz o Guerra, ya no tiene mayor sentido. Ha surgido la “zona gris”, pues se ha diluido la dicotomía entre ambos estados. Surge la idea de lo híbrido. Desde el punto de vista jurídico ello retiene su importancia, pues muestra una gran debilidad/vulnerabilidad de los Estados, pero ha perdido importancia con respecto de los resultados estratégicos, pues los objetivos pueden ser alcanzados a través de otros instrumentos y sus respectivas tácticas. Es lo que nos está sucediendo.
Ha desaparecido el “teatro de operaciones militares”. La totalidad del territorio nacional es el campo de batalla, pero específicamente lo es la población civil. Del dominio físico de la geografía, el resultado estratégico se ha desplazado al dominio psicológico de la sociedad. Ello es lo que da una enorme importancia a la comunicación social. Lo hemos visto en los días en que el Congreso Nacional votaba una nueva norma previsional. El opinólogo televisivo de turno comentaba acerca del “cerco que ejercía la Gendarmería sobre los legisladores”, cuando el cerco lo realizaban los revolucionarios anarquistas, que enfrentaban las empalizadas que defendía la Gendarmería. Para el elemental periodista, el agresor era la Gendarmería. Quizás provoca más daño al país, que el piquetero.
Por lo tanto, estos nuevos conflictos no se resuelven exclusivamente con el dominio de los espacios llaves del territorio, sino con la conquista del espíritu de la ciudadanía. Éstos “periodistas” ¿están confundidos?, ¿se equivocan? O, ¿para quién juegan?. ¿Son infiltrados? ¿Tienen conciencia que el motivo del caos no es la reforma de una ley?. Hemos dicho con anterioridad y reiteradamente, que la “pseudo-revolución en retirada” actuaría como una “bestia herida” (11) y (13). Es muy probable que los responsables de la seguridad tengan una lectura totalmente distinta de los hechos de violencia creciente. Sabemos que no hay “doctrina estratégica” y estamos tomando conciencia -a través de sus acciones- que los responsables de la Seguridad Nacional carecen de las nociones polemológicas más elementales.
La Argentina vive diariamente graves hechos de Inseguridad Nacional. Nuestra dirigencia confunde“seguridad pública” con “seguridad estratégica”. En todo el orbe se trabaja intensamente para actualizar doctrinas, organizaciones, sistemas de armas y actitudes sociales, mientras aquí se sacrifica a los uniformados, desarmados frente a la locura revolucionaria, bajo cualquier excusa. Las víctimas siguen siendo los agresores, no los agredidos.
Entre nosotros, la actualización será muy difícil. Los hechos cada vez más graves están impulsando la necesidad de una transformación estructural de la Seguridad Nacional. Pero no es igual en el ámbito de las convicciones ni de los conocimientos específicos, que no aparecen. Hay trascendidos, rumores y algunas declaraciones desde el gobierno, que “se está trabajando en ello”. Sin embargo, todo nos lleva a pensar que la motivación del “cambio” es solo originado por exigencias presupuestarias.
Nuestro Instituto de Estudios Estratégicos de Buenos Aires desde su creación, luego de la Guerra del Atlántico Sur, viene bregando y proponiendo superar la angustiosa situación de la Seguridad Nacional. Entendemos que ya no podemos demorar un solo minuto más, sin correr el riesgo de graves problemas violentos que nos llevarán a la disgregación. Nuestra propuesta está desarrollada como plan esquemático básico y éste se actualiza, periódicamente. Además de considerar las teorías internacionales, hemos diseñado una doctrina estratégica, nuevas organizaciones, nuevos sistemas y despliegues. Estamos soportando conflictos internacionalizados y complejos y necesitamos audacia e idoneidad para superarlos con éxito.
El punto de partida para conducir esta operación exige eliminar dos ministerios y crear uno nuevo, el de la Seguridad Nacional, con dos Secretarias, la de Defensa Nacional y la de Seguridad Pública, mientras se negocia el Tratado de Seguridad Colectiva y Defensa Común con el vecindario afín a la posición que adoptó la Argentina el 10 Dic 15, como vanguardia contra-revolucionaria. Brasil, Chile y Perú deberían ser los primeros invitados por Buenos Aires para desarrollar una alianza eminentemente política, como lo es la que corresponde a la Seguridad Regional, frente al neo-marxismo del Foro de San Pablo.
CITAS:
(1) H. J. Auel. “Política de Defensa o Estado de Indefensión Legal”. Investigación. Jul 01. www.ieeba.com.ar
(2) H. J. Auel. “La Guerra en la Civilización del Conocimiento”. Investigación. Ene 02. www.ieeba.com.ar
(3) H. J. Auel. “La Guerra en el Siglo XXI”. Jul 02. Investigación. www.ieeba.com.ar
(4) H. J. Auel. “El Nuevo Ordenamiento Internacional Posterior a la Intervención de EE.UU. y sus Aliados en Irak” – Conferencia en la AAAI. 21 May 03. www.ieeba.com.ar
(5) E. de Vergara. “Los Conflictos en Ibero América”. Investigación. Feb 06. www.ieeba.com.ar
(6) H. Dieterich. “Cumbre Sudamericana: nace vanguardia criolla y crece subversión oligárquica”. 10 Dic 06. www.rebelion.org
(7) H. J. Auel. “La Argentina Encapsulada”. 28 Mar 03. Investigación. www.ieeba.com.ar
(8) H. J. Auel. “Sr. Cte J FFAA: llegó la hora de pintar la carta”. Feb 17. www.ieeba.com.ar
(9) H. J. Auel. “Política de Derechos Humanos Vs. Política de Seguridad Nacional”. 01 Ago 17. www.ieeba.com.ar
(10) H. J. Auel. “Terrorismo global y terrorismo doméstico en el siglo XXI”. Oct/Nov 17. www.ieeba.com.ar
(11) H. J. Auel. “Confusión, ignorancia o propósitos ocultos”. Feb 14. www.ieeba.com.ar
(12) H. J. Auel. “Las FARC-EP, actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano”. 05 Sep 17. www.ieeba.com.ar
(13) H. J. Auel. “Terrorismo Global y Terrorismo Doméstico en el siglo XXI”. Oct-Nov 17. www.ieeba.com.ar
(14) Infobae. “Hallaron documentación que vincula al RAM con grupos guerrilleros de otros países sudamericanos”. 22 Nov 17. www.infobae.com
El General Auel, el Fiscal Romero, la doctora Andrea Palomas Alarcón y la conductora radial Ana Barreiro se sometieron a una especie de cuestionario de “memoria y balance” antes de arribar al año 2018, dejando sus pareceres con respecto al período a punto de cesar.
[ezcol_1half]
Andrea Palomas Alarcón
Nos encontramos a dos años de gestión del ingeniero Mauricio Macri como presidente. ¿Cuáles son los principales cambios -si los ha habido- que se observan en el ámbito de la Justicia Argentina con respecto a la administración Kirchner?
La Justicia no ha cambiado en lo absoluto. Sigue siendo la corporación inoperante, corrupta, oportunista, carroñera, soberbia e hipócrita que fue siempre. Siguen protegiéndose unos a otros. Siguen buscando el macho alfa que les diga cómo tienen que ser los fallos, qué tan fuertes o flojitos, de cuántas palabras. Quieren un jefe que les diga qué necesita y que les deje seguir haciendo sus buenos negocios sin molestar. Sólo que no lo han encontrado.
El gobierno se niega a intervenir.
En mi opinión es un exceso de “purismo” afirmar que no se va a intervenir cuando los jueces lacayos del kirchnerismo son los mismos y no van a volver sobre sus pasos
en los casos de “lesa” porque eso sería admitir el prevaricato.
El gobierno tiene una guerra contra las “orgas” de DDHH y contra la CIDH que les compromete todo el prestigio que están preparados a ceder en estos temas relacionados con la guerra de los 70, que no les gusta. El asunto de los militares y policías presos no les importa en lo más mínimo, es más, lo utilizan para demostrar que no influencian sobre la Justicia.
Es digno de felicitación que un gobierno quiera respetar la República y no interferir con otro Poder del Estado, pero en los hechos, como están dadas las cosas hoy en Argentina, no interferir es interferir, es dejar que los juicios de “lesa” sigan a control remoto destruyendo la vida de la gente y el prestigio de la República.
Tampoco es totalmente cierto que no intervenga el gobierno, dice una cosa y hace otra. La Secretaría de DDHH se presenta como querellante en los juicios de “lesa” lo que indica que el Poder Ejecutivo toma partido y que los imputados son expulsados de la raza humana, ya que no tienen derechos humanos.
Es que al gobierno el asunto de los militares y policías le sale gratis cuando “acusa” y caro cuando “defiende”. La cuenta es muy sencilla. Por lo que se ve hasta ahora, pretenden “solucionar” este asunto de una manera bastante hipócrita, enviando a los “invisibles” a domiciliaria y ensañándose con los emblemáticos que tendrán que pagar los platos rotos.
¿Puede nombrar situaciones jurídicas que imperativamente deberían ser revisadas?
Lo que imperativamente debe ser revisado es el concepto de soberanía jurídica. Si Argentina quiere ser una colonia jurídica que reciba órdenes de algunas organizaciones internacionales (internacionalistas) de dudosa representatividad en lugar de ser un país soberano que atiende sus propios intereses como hacen los países que protestan, cada vez que nuestro país se sale del redil.
A menudo se dice que las elecciones se pierden, nunca se ganan. El mejor candidato es el menos peor ¿Se debe obligar a los ciudadanos a tomar algún tipo de prueba de inteligencia o conocimiento general antes de poder votar?
Es posible, pero desconozco si existe el test del sentido común. La inteligencia no es garantía de sentido común.
Son archiconocidos los casos de personas inteligentísimas que pueden resolver abstracciones con maestría, pero en la vida diaria son estúpidas y toman decisiones estúpidas.
Lo que sí creo es que se debe educar (e informar) al ciudadano, que muchas veces desconoce qué es lo que pasa y cuál es la prosapia de quienes lo gobiernan.
Existe un enorme apagón informativo en toda una generación que alcanzó la adultez desde la guerra de Malvinas. Si uno le explica que su periodista preferido, Leuco, es un terrorista que formó parte del movimiento que atacó La Tablada en democracia, la gente se enfurece pensando que es una injuria. Así con todo. El periodismo tradicional es parte de la maquinaria desinformativa que se utiliza para manipular al ciudadano. Afortunadamente están las redes.
No soy partidaria de excluir del voto a nadie porque eso genera caos y terminaría en violencia. Los activistas de siempre se arrogarán el derecho a votar excluyendo a los demás.
¿Qué considera que es la actual falencia, el mayor problema, la gran preocupación que sufre y respira el país en este momento?
Nuestro país, como de costumbre, vive preocupado por las cosas menos importantes. Le preocupa el fútbol, el mundial, el precio del transporte, de la nafta, la economía a corto plazo. El día a día. Parte de la falencia informativa es que desconoce graves problemas que aquejan a toda la Nación y, lo que es peor, el ciudadano piensa que no es importante informarse porque entiende que no puede cambiar nada. Sólo ante un gobierno abusivo e irritante como el de los Kirchner terminó reaccionando con manifestaciones callejeras y con el voto.
Por otra parte, tengo la impresión de que el argentino es pasivo, pero va sumando agravios de sus gobernantes y cuando llega a su límite se cobra todo junto, con intereses. Lo estamos viendo.
De realizar un repaso a su participación como servidor público o como ciudadano en este año que ya tropieza con su final. ¿Qué podría mencionar como un logro personal en su actividad, en sus objetivos?
Mis logros personales son haber intermediado entre los funcionarios burócratas y la situación desesperante de algún detenido preso político, que incluso llegó a estar al borde de la muerte sin que a los funcionarios se les mueva un pelo.
Sólo en un caso un funcionario accedió a comportarse como un ser humano y se involucró personalmente en casos humanitarios de extrema gravedad, donde estaba comprometida la vida. El resto fue cuesta arriba.
Siento como logro haber roto, en parte, ese cerco mediático en el que están encerrados algunos temas e influido en que se tomen algunas medidas en favor de la Justicia. Hace mucho elegí la tarea de esclarecer e informar, al menos, a los más próximos a mí para que entre todos podamos hacer un país mejor.
HERIBERTO JUSTO AUEL
Nos encontramos a dos años de gestión del ingeniero Mauricio Macri como presidente. ¿Cuáles son los principales cambios -si los ha habido- que se observan en el ámbito de la Justicia Argentina con respecto a la administración Kirchner?
Mis respuestas a este cuestionario las daré en función de mi condición de militar retirado y analista de los problemas estratégicos que enfrentamos.
El actual gobierno es resultado de una coalición que surge de reales necesidades electorales -no políticas-. Recién en Oct 17 logra mejorar su posición en las Cámaras del Congreso para iniciar reformas imprescindibles para atender la gobernabilidad de una Argentina que está saltando de un trapecio a otro, sin red de salvataje. El salto es cualitativo: de una hipócrita situación adherida al socialismo S. XXI, debe posicionarse en un mundo geopolíticamente “licuado” y así recuperar un mínimo de confianza para lograr inversiones. En los dos primeros años de gobierno los cambios en el ámbito de la Justicia Argentina han sido mínimos, pues el presidente de la Corte es un obstáculo tan importante, como el de la Procuradora General. A partir de enero deberá comenzar la remoción de ambos obstáculos. El “circo” montado en las causas de “lesa-humanidad” han mostrado débiles pero necesarios indicios de un giro en el 2018 (Causa Catamarca y Santiago del Estero)
¿Puede nombrar situaciones jurídicas que imperativamente deberían ser revisadas?
Los juicios de “lesa-humanidad”, absolutamente ilegales. La Unión de Promociones y el Foro de Generales han solicitado auditar todo lo realizado por los TTOOFF, ante el Consejo de la Magistratura. La respuesta fue negativa, PERO se hace INEVITABLE. La situación estratégica iberoamericana o exige.
[/ezcol_1half]
[ezcol_1half_end]
A menudo se dice que las elecciones se pierden, nunca se ganan. El mejor candidato es el menos peor ¿Se debe obligar a los ciudadanos a tomar algún tipo de prueba de inteligencia o conocimiento general antes de poder votar?
La Constitución exige idoneidad -moral e intelectual-. Hasta ahora no se ha cumplido éste mandato. No creo que el actual Congreso pueda regular dicha condición.
¿Qué considera que es la actual falencia, el mayor problema, la gran preocupación que sufre y respira el país en este momento?
La Inseguridad Nacional, estratégica y pública. Ha legislado el enemigo en los 80 y 90 y las dos leyes que rigen aun en el área SON INTOCABLES, por la acción psico-política de las últimas tres décadas.
De realizar un repaso a su participación como servidor público o como ciudadano en este año que ya tropieza con su final. ¿Qué podría mencionar como un logro personal en su actividad, en sus objetivos?
He logrado mayor libertad para desarrollar mis tareas académicas. En los años anteriores he sufrido dos denuncias penales del gobierno por “apología del delito”.
Ana Barreiro
Nos encontramos a dos años de gestión del ingeniero Mauricio Macri como presidente. ¿Cuáles son los principales cambios -si los ha habido- que se observan en el ámbito de la Justicia Argentina con respecto a la administración Kirchner?
Los jueces han comenzado a actuar y ajustarse a derecho reactivando las causas de corrupción, poniendo presos a los ex funcionarios responsables, investigando la muerte del fiscal Nisman y tema Amia
¿Puede nombrar situaciones jurídicas que imperativamente deberían ser revisadas?
Si bien hay una mayor apertura (coraje) en el tratamiento de los llamados juicios de Lesa Humanidad, aun no se resuelve la situación del tema Se sigue condenando sin pruebas en juicios nulos etc. y el Estado sigue cometiendo GERONTICIDIO.
¿Qué considera que es la actual falencia, el mayor problema, la gran preocupación que sufre y respira el país en este momento?
Tema inseguridad y económico sigue siendo preocupante para el común de los ciudadanos
De realizar un repaso a su participación como servidor público o como ciudadano en este año que ya tropieza con su final. ¿Qué podría mencionar como un logro personal en su actividad, en sus objetivos?
Acercamiento y receptividad positiva con la mayoría de los funcionarios del gobierno El mayor logro de quienes como en mi caso sufrimos esta grave situación de discriminación judicial es haber logrado tener más presencia en los medios
Marcelo Carlos Romero
Nos encontramos a dos años de gestión del ingeniero Mauricio Macri como presidente. ¿Cuáles son los principales cambios -si los ha habido- que se observan en el ámbito de la Justicia Argentina con respecto a la administración Kirchner?
El principal cambio es el final del intervencionismo del Ejecutivo en las decisiones judiciales. Se respira un aire diferente en los despachos judiciales. De todas maneras, esto no es excusa para justificar la larga siesta que tuvieron ciertos tribunales -en especial los ubicados en la Avda. Comodoro Py de la CABA- , sobre todo en las causas por corrupción.
¿Puede nombrar situaciones jurídicas que imperativamente deberían ser revisadas?
Sin ninguna duda, deben revisarse los criterios de excarcelación y morigeración de las medidas de coerción. La doctrina abolicionista ha concebido magistrados agnósticos de la pena, cuyo fallos causan un daño irreparable a la comunidad jurídicamente organizada.
También debería revisarse -a nivel códigos procesales- la multiplicidad de instancias para llegar a una sentencia defintiva. Es absurdo tener entre 6 y 8 instancias, más las que puedan operar en los tribunales internacionales.
A menudo se dice que las elecciones se pierden, nunca se ganan. El mejor candidato es el menos peor ¿Se debe obligar a los ciudadanos a tomar algún tipo de prueba de inteligencia o conocimiento general antes de poder votar?
Definitivamente, no. Debemos insistir en la educación general y en inculcar valores desde el hogar. Es una tarea titánica en un país cuya estructura educacional ha sido derruída, pero es el único camino.
¿Qué considera que es la actual falencia, el mayor problema, la gran preocupación que sufre y respira el país en este momento?
Sin dudas, la corrupción. Activa y pasiva. Estatal y privada. Pero lo más grave, es la falta de un agravio total y absoluto por parte de la ciudadanía frente a los hechos de corrupción.
De realizar un repaso a su participación como servidor público o como ciudadano en este año que ya tropieza con su final. ¿Qué podría mencionar como un logro personal en su actividad, en sus objetivos?
Como fiscal del Ministerio Público, representante de los derechos de la ciudadanía en los procesos penales, siento que cumplí con mi deber de denunciar -en todo ámbito que pude- los desastrosos efectos de la teoría abolicionista del Derecho Penal, cuyo máximo abanderado local es Eugenio Zaffaroni.
La Dra. Andrea Palomas Alarcón nació en Buenos Aires el 15 de mayo de 1965 en el seno de una familia de clase media. Padre policía (se retiró como comisario de la Policía Federal en 1967) y madre empresaria, tenía un negocio de ropa y su propio taller de confecciones.
Fue a una escuela religiosa en donde perdió la fe en la Iglesia, no en Dios ni en Cristo, sólo en la Iglesia.
Estudió equivocadamente agronomía, por creer que esos veranos en el campo de unos amigos en La Pampa eran la forma en que quería vivir el resto de su vida. Nunca se desvinculó totalmente de ese sueño pero siguió otros…como pelear contra la injusticia.
Estudió derecho y conoció la justicia desde ambos lados del mostrador, estuvo algún tiempo en un juzgado civil como meritoria y luego pasó por varios estudios jurídicos como procuradora, abogada junior y socia. Hoy tiene su propio estudio y perseguir el sueño de pelear por un país más justo, más ajustado a las leyes es como se ve terminando sus días.
Tuvo unas tímidas participaciones en política, en los años de la UCeDe, como afiliada y militante y como dirigente de UPAU cuando seguía la carrera de agronomía.
Se considera a sí misma liberal de derecha “si es que eso existe” dice.
El Gral. Heriberto Justo Auel tuvo el honor de iniciar sus estudios secundarios en el Liceo Militar “Gral. Belgrano”, en calidad de cadete de la promoción fundadora y abanderado de ese Instituto. La Provincia de Santa Fe le concedió una “Beca al Mérito”, que mantuvo luego al ingresar al Colegio Militar de la Nación. A su egreso, como Subteniente del arma de Infantería, se incorporó a una unidad de elite e inmediatamente, dos años después, pasó a ejercer la docencia en Institutos del Ejército.(Liceo y Colegio Militar).
Ello amplió su tiempo, en particular para participar en el planeamiento y auditoria de los planes de capacitación en el nivel de la enseñanza media y superior, mientras ejercía la docencia y cursaba sucesivas carreras universitarias, afines con su vocación original.
Con el grado de Capitán y como especialista en tropas aerotransportadas, fue destinado como Observador Militar de la ONU en la Línea del Cese del Fuego del Canal de Suez, luego de la Guerra de los Seis Días. Profesionalmente esa etapa de casi dos años enriqueció su experiencia militar, dada la constante actividad de combate que se desarrollaba en la llamada “Línea de Cese del Fuego”. Pero, además, pudo estar en permanente contacto con todos los niveles sociales de las partes en conflicto y, como Licenciado en Ciencias Políticas, inició sus publicaciones en Revistas especializadas sobre temas relacionados con el conflicto de Medio Oriente, aun subsistente.
Ana Barreiro conduce el programa radial DE ESO NO SE HABLA y es una preocupada activista por los derechos de los Presos Políticos argentinos ilegalmente encarcelados debido a su participación o no en la lucha contra el terrorismo.
Barreiro también fue una perseguida por las organizaciones tristemente autoproclamadas de derechos humanos, hostigando a su persona y a sus hijas.
[/ezcol_1quarter]
[ezcol_1quarter_end]
El Fiscal Marcelo Carlos Romero represento al Ministerio Público. Subraya no pertenecer a la generación de abogados “progres” de Argentina. Enfatiza que por esta razón no utiliza eufemismos para hablar y/o escribir sobre Delincuentes, Crimenes, Penas, Cárcel, etc.
Ha dejado claro que no le encandilan las falsas luces del abolicionismo penal, pregonado -entre otros tantos- por Eugenio Zaffaroni y sus discípulos. Sin tapujos declara no ser lector tardío de Michel Foucault y sin ruborizarse, ni ser pretencioso afirma jamás haber entendido a dicho autor.
Encontramos en su inmaculada trayectoria en la Institución Judicial:
28 de noviembre del año1988 ingresa al Poder Judicial de la Provincia de Buenos Aires, en el Fuero Penal, como auxiliar administrativo.
Recibió una promoción en diciembre de1994 a los cuadros Profesionales del Poder Judicial de la Provincia de Buenos Aires (Fuero Penal) esta vez como Auxiliar Letrado.
Si bien en el 2015 con mi familia nos dejamos engañar con el difuso eslogan del “fin del curro de los DDHH” y lo votamos a MAURICIO MACRI, luego nunca más… fin. Creo que es igual o peor que CRISTINA KIRCHNER, con otra metodología y obediente a su extranjero asesor de imagen, llamado DURÁN BARBA. No obstante el rechazo que siento por sus hipócritas falacias, nada que no sea normal en todo político, por momentos creo que es un genio, mucho más vivo y despierto que la “arquitecta egipcia”. En el caso de ella, a dos años de haber dejado el
[/ezcol_1third]
[ezcol_2third_end][/ezcol_2third_end]
trono real, todavía se le sigue echando en cara lo que estamos viviendo los adultos mayores imputados a como dé lugar, por los mal llamados delitos de lesa humanidad. Pareciera que la continuidad de su política de estado no fuera responsabilidad del actual gobierno.
Que las 89 muertes en cautiverio ocurridas a partir del 10 de diciembre de 2015, fueran diferentes y casi benignas, en comparación a las anteriores. A un promedio de casi 50 anuales, muerte más muerte menos, MACRI luego de su segundo mandato, habrá superado ampliamente a las 340 que llevan la marca Kirchner. Eso sí, sin ufanarse de ello y solo porque “la justicia es independiente”, lo cual lo hace casi simpático, vio? Para entonces se la seguirá responsabilizando a la Cristina?
PARA QUE NO QUEDEN DUDAS, EL GRAN PLAN NACIONAL
MACRI, recientemente presentó el “PRIMER PLAN NACIONAL DE ACCIÓN EN DERECHOS HUMANOS” de su gobierno. Una referente en el tema, Graciela Fernández Meijide, estuvo en el programa de TV “Mesa de Mujeres” y expresó loas al respecto. “Nadie esperaba de Macri que se ocupara del tema Derechos Humanos”, manifestó Meijide.
En esa línea, criticó que la oposición lo presentaba “como que iba a liberar a todos los militares y que iba a terminar con la ayuda social”. Simultáneamente de este lado, el de los que no tenemos derecho alguno, salvo pocas excepciones como en el caso del veraz Juan Manuel Otero (1), en general se responsabilizó al Secretario de DDHH CLAUDIO AVRUJ, quien como bien sabemos solo es un peón del Ministerio de Justicia y del ejecutivo. Macri casi indemne. Destacable es que en las recientes elecciones, tanto él, como EUGENIA VIDAL y otros, masivamente recibieron nuevamente el voto de prisioneros adultos mayores y familiares. Esta vez ayudados por el rechazo a Cristina, actual miembro del poder legislativo, cargo que ocupa gracias a la “bondad” de MACRI, sin que nadie pareciera reparar en ello. Como así tampoco que él fue el artífice, junto al resto de su equipo, de una verdadera táctica ajedrecística.
FUERA DE TODO PLAN DE VIDA
Mientras se dejaron de lado a dignos candidatos como AUEL, GIULIANO, LARRABURE, LUNA (Jovina), SACHERI, VERCESI, etc. no se vio que nosotros no estamos en los planes de vida de ningún político, llámese Kirchner, Massa, Carrió, Vidal, Macri o quien sea.
Si saltamos de nuestro asfixiante mundo paralelo en el cual estamos destinados a morir y vamos al real, podemos ver como un Ministro de Defensa, OSCAR AGUAD, descarga su incapacidad ministerial entre jefes de la Armada, tan incapaces como él, para anticiparse o manejar una tragedia como la del ARA San Juan. En este caso es el destinatario de las antipatías de familiares de las víctimas y gran parte de la sociedad. Quien pasa desapercibido y queda bastante bien parado? Nada menos que el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas (desarmadas) o sea MAURICIO MACRI, que justamente lo designara a Aguad en el cargo. Pero cuidado, este presidente tan afecto a los feriados y días de descanso, frente a sí tiene a muy peligrosos enemigos. Estos no descansan, un día fueron por nosotros y porque van por todo, ahora también van por él.
Claudio Kussman
Claudio@PrisioneroEnArgentina.com
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 17, 2017
“No puedo parar de trabajar.
Tendré toda la eternidad para descansar”.
Teresa De Calcuta (1910-1997)
*DICHO POPULAR DE LA LENGUA ESPAÑOLA – Describe, a la par que condena, la actitud de algunas personas que hacen un doble juego, que no evidencian una postura clara, que apuestan en varios lados para asegurarse una victoria. Mayormente, alude a las veces en que alguien, en una contienda, especula estando a favor de los dos oponentes. La frase retoma las figuras de Dios y el Diablo, tradicionales rivales y emblemas del bien y del mal en el ideario popular.
Un antiguo mito, que México reclama para sus indios chocholtecos, habla de una lucha ancestral entre el sapo y la serpiente. Existen distintas versiones y lecturas de esta historia: el sapo, animal torpe, lento e inerme se ve amenazado por la serpiente, ágil y peligrosa. El sapo no tiene aguijones ni dientes, en cambio, la serpiente cuenta con grandes colmillos de los que emana veneno.
La serpiente se duerme y el sapo traza a su alrededor un círculo de baba, asquerosa pero inocua. La serpiente despierta y se encuentra encerrada por una cárcel imaginaria, absurda, tan repugnante como inofensiva. Cada vez que pretende traspasar los límites impuestos por el sapo, éste le vomita una creciente dosis de baba pegajosa hasta que la víbora sin entender los motivos pero sin atreverse a enfrentar tal kafkiano destino, muere dentro del círculo. Algunas versiones afirman que se suicida inyectándose su propio veneno, otras que fallece de hambre en los límites impuestos por su exótico carcelero.
[ezcol_2third]
No voy a presumir de haber sido yo la que aplicó a la estrategia militar esta fábula. Lejos de ello quiero citar y reconocer en el General Heriberto Auel, militar, profesor universitario de estrategia ser el primero al que le oí esta alegoría aplicada a la política de “Derechos Humanos” como guerra subversiva por otros medios.
La sociedad argentina se encuentra circunscripta a su círculo de baba que le han impuesto los grupos autodenominados “defensores de los Derechos Humanos” los que no son otra cosa que el resabio de los grupos terroristas que quisieron tomar la Nación por las armas.
La domesticación que sufre nuestra sociedad frente a la “política de Derechos Humanos” es producto de un largo proceso en el que ha intervenido la prensa, los medios culturales en general, la educación y, particularmente, la indolencia de quienes han preferido dejar hacer porque era más sencillo que recibir un baño de baba asquerosa.
[/ezcol_2third]
[ezcol_1third_end]
General H.J. Auel
[/ezcol_1third_end]
¿Cómo explicar, sino, que se imponga por ley la mentira de los 30.000 desaparecidos? ¿Cómo explicar la morbosa exageración del caso Maldonado? ¿Cómo entender que el gobierno, que ha recibido un espaldarazo electoral como ningún otro en décadas siga postrándose ante hippies con carteles? ¿Cómo admitir que un organismo internacional que ya no debería existir, como la CIDH, le ordene liberar delincuentes y encarcelar inocentes?
La sociedad argentina vive presa en una cárcel ficticia que han venido construyendo pacientemente desde que perdieron por las armas las “orgas” que hoy se llaman “organismos”. Han venido doblegando a la sociedad con un miedo real a amenazas virtuales que se aplican de a uno, sobre uno a la vez como ejemplo para disciplinar a los demás. Una maestra que pretendió dar a sus alumnos una clase de lo que fue el ataque al Regimiento de Infantería Mecanizada R29 de Formosa, otra maestra que mostró a sus alumnos un video sobre el terrorismo de los 70s, un veterano de Malvinas, hoy funcionario que habló de 22.000 mentiras, un profesor universitario que quiso poner en contexto la guerra antisubversiva describiendo los ataques terroristas; y así hasta el infinito. Todos salpicados de baba como ejemplo para que los demás se autocensuren, temerosos de emitir la verdad que perciben por sus sentidos y con su inteligencia. Temerosos de quién sabe qué. Nadie atina a explicar concretamente las consecuencias de liberarse de la mentira.
Las antiguas “orgas” hoy “organismos defensores de los Derechos Humanos” pueden estar complacidos, han perdido la guerra de las armas pero aprendieron el método de imponer su voluntad con armas de utilería, amenazando con enchastrar de baba a todo aquel que se salga del círculo que arbitrariamente marcaron. Crearon algo de la nada, sin nada, una “verdad” mítica admitida a fuerza de repetir sistemáticamente mentiras.
Esta no es una guerra que ellos hayan ganado sino que hemos perdido nosotros, por dejarnos dominar de a uno, por no tomar en cuenta nuestra fuerza y no jugarnos por la verdad y la justicia. Es una guerra perdida por comodidad antes que por diferencia de fuerzas.
La ciudadanía empieza a darse cuenta de que mientras dormía construyeron a su alrededor una prisión hipotética, ilusoria de la que no se sale sin mancharse la ropa.
Ya no podemos seguir rodeados por delincuentes con armas de juguete. Tenemos colmillos poderosos que debemos usar porque en esta insólita guerra, como la serpiente de la fábula, nos jugamos la vida.
* La Dra. Andrea Palomas Alarcón es miembro de la Asociación Civil Abogados por la Justicia y la Concordia.
El actual estado de guerra civil revolucionario y las nuevas guerras.
Conclusiones
(1). Quousque tandem…Argentina.
Desde la publicación efectuada por el Episcopado Argentino hace unas semanas, referido a la grave situación de la Seguridad Nacional frente al narcotráfico, hemos conocido la total aprobación de la mayoría de los dirigentes políticos que coincidían con el grave diagnóstico de nuestros Obispos. El gobierno reaccionó nombrando a un sacerdote en el Sedronar, Secretaría que permanecía vacante desde hacía meses y que prácticamente no contaba -ni cuenta- con presupuesto para cumplir con su cometido.
Como nuestro Instituto -IEEBA- realiza un constante seguimiento de la situación estratégica regional y propia, dicho nombramiento nos llamó la atención. ¿Qué idoneidad podría tener un pastor religioso para ocupar el cargo que le hacía responsable, en el Estado, de la más importante amenaza estratégica continental? ¿Era Molina un cura dedicado a la Polemología o a la Estrategia Contemporánea?
Del resultado de nuestra investigación surgió que se siguió, en éste caso, con lo que ha sido norma en las últimas décadas: nombrar en el área de la Seguridad Nacional a simpatizantes del gobierno, aunque carecieran de la más mínima idoneidad exigida para ejercer la función. En éste caso, además, se le respondía indirectamente a los Obispos nombrando a un hombre de ellos, para solucionar el más grave desafío a la Seguridad Nacional reclamado en el documento del Episcopado. Era una forma de decirles: ¿Qué quieren hacer? Pues, entonces, háganlo.
Debemos conjeturar -pues no lo sabemos- que alguna reacción tuvieron los Obispos frente a esta respuesta -tan descomedida cuanto extraña- pues acaba de dictarse un decreto limitando la actividad del Sedronar a la lucha contra la “drogadicción”, un tema médico y social que podría estar en manos de un sacerdote. La responsabilidad de la lucha contra el “narcoterrorismo” fue transferido -por el mencionado decreto- al Ministerio de Seguridad.
Es decir, se le entrega al “esfuerzo nacional de policía”la principal amenaza y el central riesgo estratégico del continente, que queda así en manos de un médico y de una especialista en estragos naturales o antrópicos. Sutil gatopardismo que se incluye en el largo y denso “relato”. En términos políticos es una nueva “falacia”, aunque la sociedad -en un 80%- ya no las digiere.
Algunos dirigentes políticos -aun no cooptados totalmente por el “progresismo de izquierda”-, ante el campanazo de la Iglesia lanzaron la propuesta de “comprometer a las FFAA en la lucha contra narcotráfico”, recibiendo la inmediata admonición del gobierno y de los pseudo-opositores “neomarxistas”, encubiertos como “progresistas”, dando lugar a una discusión absurda, con justificaciones ridículas que avergüenzan u ofenden a la razón de quienes despuntan el “abc” académico del real desafío de marras (1).
Mientras la Argentina avanza deliberada y decididamente hacia el “Estado fallido” y los ciudadanos de a pie percibimos una progresiva tensión y ansiedad social, ante un anunciado y reiterado desastre económico -acompañado esta vez por caos social cuyo preanuncio se ha dado en el barómetro socio-político argentino, la ciudad de Córdoba-, nuestros dirigentes políticos continúan “debatiendo”, como meros espectadores inconscientes e irresponsables.
En gran parte la percibida tensión y ansiedad social se retroalimenta naturalmente con los vacíos discursos y porfías de quienes se postulan a la presidencia de la República, careciendo de una propuesta de Gran Política y una clara conceptualización de la naturaleza de los problemas que enfrentamos en la actual etapa, que ha llegado con las propias posguerras y que nos llevan a reflexionar, obligadamente, según lo expresado en el título que hemos dado a éste trabajo.
Nuestra dirigencia ¿está confundida y por ello se equivoca, es ignorante por graves carencias de formación o tiene propósitos que oculta con total hipocresía? La solución al desafío que plantea la “violencia en el Siglo XXI” la trataremos más adelante, pero desdeya, adelantamos queno está en el mero empleo operativo de las FFAA.
En relación con la Seguridad Nacional, –que es la razón de ser del Estado Nacional y su responsabilidad primaria, exclusiva y excluyente-, ¿pueden nuestros dirigentes políticos continuar con el nivel de confusión, ignorancia o propósitos ocultos que ostentan, frente a la gravísima situación que ha denunciado el Episcopado Argentino, reconocida por casi todos,pero ante la que no se actúa sino con “simulaciones”, en los últimos treinta años?
Entendemos que alcanzamos una circunstancia de crisis generalizada que exige tomar decisiones razonables y abandonar los dogmas ideológicos -totalmente extemporáneos- que orientan a los gobiernos y a gran parte de la pseudo-oposición “progresista”. Para que el vaso desborde faltan solo unas gotas…y aun no vislumbramos quién podría sacarnos del presente rumbo de disolución nacional.
(2). Entendiendo a Darwin.
En el acápite citamos a Charles Darwin, que hace ya largo tiempo señaló que en el mundo “no sobrevive el más fuerte, sino el más apto”. Sin embargo, entre nosotros pareciera que éste concepto aun no se asimiló. Ante el clamor generalizado por el grave nivel de inseguridad alcanzado, nuestros dirigentes prometen aumentar el número de policías o bien, conocido el fracaso del sistema educativo, responden elevando el presupuesto del área. Con ello nuestros representantes entienden que han satisfecho el reclamo de sus representados. Es evidente que no han entendido a Charles Darwin. ¿O no lo quieren entender?
Si captamos la idea del inglés, antes de actuar deberíamos reparar en la naturaleza y categoría del desafío a resolver: conceptualizarlo y luego adoptar el modo de acción más apto, factible y aceptable. No es solo una sencilla respuesta de cuantificación. Es necesario ingresar en la compleja comprensión del nuevo fenómeno, provocado por la aceleración de la innovación producida por la investigación y el desarrollo científico-tecnológico. Gran parte de nuestra ideologizada y aculturizada dirigencia está estratificada en el tiempo de la primera revolución industrial y en el ámbito de la finalizada guerra fría.
En 1984 los argentinos acumulábamos las experiencias directas de dos recientes guerras, hijas de la presencia de los arsenales QBN en el hemisferio Norte, desde 1947 (2). En el EMCFFAA el Tte Grl Fernández Torres resolvió aprovechar ese conocimiento, adquirido a altísimo precio. El Ministro Borrás apoyó la iniciativa y se avanzó rápidamente en el planeamiento de transformaciones estructurales en el área de la Seguridad Nacional.
Desgraciadamente, a partir de la muerte de Ministro a fines del ´84, no solo se retrogradó y anuló todo lo hecho, sino que en el Congreso Nacional los “entrismos” (del ERP, en la representación radical –la coordinadora– y de Montoneros, en el peronismo renovador –la cafieradora-) lograron, entre 1988 y 1991 la aprobación de la legislación de Seguridad Nacional, vigente actualmente. Allí está la clave de la actual y total indefensión e inseguridad argentinas.
Es en esos años críticos cuando la Renovación Peronista pierde las elecciones primarias en su bastión bonaerense y la UCR ingresa a la Internacional Socialista. El partido de Alem, Irigoyen y Alvear transmuta a la social-democracia y el Justicialismo se “desperoniza”. El “relato” profundiza su intensidad, permeando a las masas, pero especialmente está dirigido a las clases medias, para llevarla a una transculturación gramsciana: “deben ser socialistas -marxistas- sin saberlo ni quererlo”.
Las leyes de Defensa Nacional -1988- y de Seguridad Interior -1991- se construyeron desde la ideología revolucionaria derrotada en combate en los ´60, ´70 y ´80. Fueron promulgadas en el momento histórico en que terminaba la guerra fría y emergían “nuevas amenazas y riesgos estratégicos”. Pero el legislador, cooptado ideológicamente, no consideró la naturaleza y tipología de los nuevos conflictos, para evitarlos, a través de la reorganización institucional de la Seguridad Nacional. Su objetivo fue otro. Se dictaron estas leyes para anular a las FFAA en el cumplimiento de sus roles constitucionales y para proscribirlas dentro del propio Estado. Con ello abrieron la Caja de Pandora que aún permanece abierta. Miles de muertos, desde entonces, lo atestiguan.
Este despropósito legal complicó las funciones establecidas para las Fuerzas de Seguridad y Policiales, que debieron salir de sus andariveles naturales asumiendo responsabilidades estratégicas, que les eran ajenas, sufriendo sucesivas sangrías y el castigo de un desprestigio permanente. Progresivamente el crimen organizado y el delito común crecieron exponencialmente a lo largo de las tres últimas décadas.
Nuestros estrategas civiles no consideraron construir lo más “aptopara sobrevivir” sino lo más conveniente para alcanzar, por ésta vía, la “pseudo-revolución marxista” que había fracasado con las armas. Para ello se creó el “relato”,que aun hoy mantiene como eje a la “política de derechos humanos”, vaca sagrada intocable, a pesar de los graves delitos cometidos por sus principales abanderadas. Así se anestesió al electorado, principalmente urbano y de clase media.
Las consecuencias de esta perversidad están a la vista y ello obliga al estalinismo y a la socialdemocracia -bolcheviques y mencheviques- encubiertos como “progresistas” -hoy mayoría en el Congreso Nacional- a retener al “relato”. El complejo “progresismo”encubierto como opositor, vota toda la legislación propuesta por el Ejecutivo, ayudando a profundizar con hipocresía las falacias de “el modelo”, como necesaria condición de continuidad y alternancia en el poder de los “aliados”.
El eje y común denominador de ésta disimulada “alianza revolucionaria” seguirá siendo la “política de derechos humanos y el igualitarismo”, con futuras consecuencias políticas ya programadas e inevitables:
a) la reforma constitucional sobre el modelo cubano,
b) el total control político de las FFAA (3), de la Justicia y de los medios y
c) la consolidación de una “pseudo-democracia” de partido único.
El relevo o alternancia en el poder dentro de la “alianza revolucionaria” entre bolcheviques estalinistas y mencheviques gramscianos, en los comienzos del presente año 2014 está en plena preparación, con vistas a las elecciones del 2015.
(3). La violencia en el Siglo XXI. (4)
Podríamos decir que el Siglo XXI comenzó tempranamente, con la caída del muro de Berlín y la implosión del Imperio Soviético -1989 / 1991-. Cesa en esos años la Guerra Fría -aunque gran número de nuestros dirigentes continúan en ella- y se inicia un consecuente proceso de globalización, con la particularidad de ser el primero de alcance planetario y de permanecer aun incompleto. El efecto más inmediato de este proceso fue la aceleración del encuentro de las culturas que, como sabemos, siempre emergen de una religión. No es casual, entonces, la importancia que éstas han cobrado hoy en las Relaciones Internacionales.
Su otra consecuencia ha sido la pérdida precisa de los límites entre Paz y Guerra, como efecto de que hoy “todos somos vecinos” y en consecuencia los conflictos se multiplican y mutan, pues simultáneamente hemos ingresado -aceleradamente- a la civilización posindustrial. A un cambio estructural. Es en estas circunstancias internacionales cuando la Argentina se “encapsula” (5) y se hace “antiglobalizadora”, -como si pudiese contener el avance de la “civilización del conocimiento”-.
Para concentrarnos en el tema que nos convoca debemos señalar, tempranamente, que el progresismo debe, además de sostener el “relato falaz” -a través de su masiva publicidad- consolidar el “control civil subjetivo” de las FFAA (2) -a través del mantenimiento de la legislación de “inseguridad e indefensión”- mientras se “democratiza” al sistema judicial y a los medios de comunicación. Esa es la razón por la que llamamos “vacassagradas” a las leyes perversas.
Otra de las consecuencias de la citada perversidad de la legislación de “inseguridad nacional”, es que ha obligado a los sucesivos ministros del área a negar la existencia de las sorpresivas y flagrantes amenazas y riegosestratégicos actuales,aceptados universalmente, que produjeron sucesivamente -en los Estados desarrollados y en la región- la “revolución de los asuntos militares” –RAM- y la inmediata y posterior “reforma integral” -RI- a fines del Siglo XX.
Contrariamente, la Argentina que tiene impedido por Ley el planeamiento estratégico de los reales desafíos que enfrenta, desarrolla -en el EMCFFAA- “un plan de capacidades”. Se ignora con qué objetivos. Se anuncian compras de armas y equipos, es decir medios, pero se ignora para qué fines. La irracionalidad es total, pero no conmueve a la dirigencia “pacifista, progresista y garantista”. Mientras esto ocurre, decenas de legos opinólogos tratan en los medios el tema de la inseguridad, sin encontrar sus verdaderas causas.
Los candidatos que en los períodos preelectorales tratan éste tema, jamás tocan a la “vacasagrada”, la legislación causante de la absoluta y comprobada “inseguridad nacional”. Legislación única en la región y en el mundo (6). Sin embargo, llegada la aristotélica situación de que “la única verdad es la realidad”, por vía del “control subjetivo hungtintoniano” (3) el “relato” acaba de incorporar a él a las FFAA, que actualmente están actuando ilegalmente -por necesidades políticas- en el marco interno –como tropas de “vigilancia y control de fronteras”-pero simulando que se encuentran en esa zona en plenas “ejercitaciones finales”.La pseudo-oposición progresista, mira hacia otro costado.
El encubierto rumbo “neomarxista-revolucionario” que orienta a la conducción política de nuestro país -desde 1983, excepto un breve período-, exige que la “política de derechos humanos” -que tuvo su iniciación con el Decreto 158/83- continúe. Ésta es la razón por la que la legislación de Seguridad Nacional -lograda en tiempos de la guerra fría- es intocable en el 2014, a pesar del drama de la inseguridad generalizada y creciente. La guerra fría terminó en 1989/1991, iniciándose diez años de posguerra fría signados en Iberoamérica por la confusión, en particular en los ámbitos intelectuales marxistas.
En el 2001 si inicia una nueva mundial, “contra el terrorismo global”. Llevamos en ella trece años. Sin embargo nuestros dirigentes y en particular el Estado Nacional, no reaccionan, no han tomado conocimiento de su existencia. Mientras la metástasis provocada por los nuevos riegos estratégicos avanza, dejando una estela de sangre -particularmente en las grandes ciudades- los irresponsables que conducen la Seguridad Nacional, reparten aspirinas.
(4) ¿Cómo “adaptarnos” para sobrevivir en Paz?
Si reconocemos que vivimos una nueva etapa de la civilización, la posindustrial, -que ha sido llamada “de las comunicaciones”, “de la cibernética”, “de la tecnotrónica” o más recientemente “la del conocimiento”- y que ésta se superpone -en el tiempo- a la situación emergente del final inesperado de la estratificada guerra fría, dando lugar a un mundo que procesa un nuevo mapa político-estratégico y a “una nueva forma de producir y de hacer la guerra”, nuestra rápida adaptación sería viable,pero no lo será si continuamos negando a la realidad que nos abarca.
Aznar Fernández-Montesinos (4) cita cuatro claves para despejar la incertidumbre que produce la complejidad de la situación en nuevo tablero internacional. Vamos a describirlas e interpretarlas, brevemente:
La sombra de la Guerra Fría: cuatro décadas de congelamiento de las relaciones internacionales se licuaron, pero no dejan de proyectar “su sombra” hacia el futuro. Se inicia una transición en la que el comunismo no desapareció totalmente, sino que camaleónicamente mutó hacia populismos diversos, en Iberoamérica.
La presente globalización como fenómeno incompleto: no es ésta la primera globalización. Siempre acompañaron al final de las guerras mundiales, en sus inmediatas posguerras. La que correspondió a la posguerra fría ha maximizado ciertos beneficios y ha traído novedades que es necesario asumir, para no llevarlas por delante. Ya no hay compartimentos estancos entre comunidades y ello incrementa sus vulnerabilidades. Aumenta la interdependencia y un tropiezo de uno, afecta al conjunto. Entran en relación actores premodernos con posmodernos, sin intermediarios y entran en riesgo las culturas débiles. Las relaciones directas pueden ser beneficiosas o bien pueden ser fuente de variados conflictos. Exigen mayor gobernabilidad, mayor capacidad para acordar y mayor racionalidad ante la confrontación de pareceres. Aumenta la fragmentación y con ella la pluralidad.
La aceleración en el encuentro de las culturas: en éste ítem vamos a detenernos con mayor extensión pues la grave crisis que padecemos tiene, en su causa más profunda, una severa transculturación acelerada por las guerras que peleamos en la segunda mitad del siglo XX. Ya hemos dicho que toda cultura-identidad tiene como cimiento a una religión. En ésta están los dogmas -mandamientos y preceptos- que son inconmovibles y que se trasladan a la cultura como valores y principios, más flexibles, que nos identifican, consagrando una ética política en la organización institucional de la sociedad. Pues bien, en la etapa que hemos descripto, en la que se aceleró el encuentro de las culturas que exigía, para relacionarnos con solvencia expansiva, la afirmación de nuestros valores, los extraviados dirigentes políticos argentinos orientados por el “progresismo revolucionario gramsciano”, hicieron exactamente lo contrario. A través de las mayorías en las Cámaras del Congreso Nacional dictaron leyes “contraculturales” que, acompañadas por la acción de alguna prensa, lograron una sociedad desorientada, contractiva y corrupta, que proyecta su creciente irresponsabilidad “al otro”. La Argentina se “encapsuló” (5), multiplicó sus conflictivos, se empobreció, ingresó en la decadencia y el nivel de su crisis de identidad, es inédita. El Cardenal Bergoglio lo señalaba con energía desde la Catedral de Buenos Aires y era ignorado. Cuando llega a Roma como Papa Francisco, es visitado –con total hipocresía- por quienes le habían dado la espalda en su país, durante años. Es en éste ámbito, de fuerte crisis cultural y política, donde cunde la más rampante inseguridad nacional, producto de la perversa legislación de los transculturizadores. Y es la oportunidad en que la Iglesia Católica, a través de su jerarquía, produce la grave denuncia que hemos citado al comienzo de éste trabajo.
La visión del mundo en clave religiosa: El 11S01 fue un fogonazo que obligó a quienes se orientaban en las relaciones humanas o internacionales solo por los intereses e ideologías, a reconsiderar sus visiones. Súbitamente se produjo un retorno de la sacralidad de la religión y se empezó a revalorizar a Huntington (7) y su teoría que titulaba en su último libro: “La cultura es lo que importa”. Por su repercusión internacional “elfenómeno Francisco” también puede explicarse desde esta perspectiva, que para los argentinos ya es muy importante hoy y lo será aun más mañana, al enfrentar la transición hacia el 2015, si consideramos la naturaleza de nuestra crisis y el abismo que tenemos por delante.
Las claves aquí comentadas, si fueran asumidas y resueltas, nos permitirían procurar una vía para sobrevivir en Paz, entendiendo la naturaleza de la nueva situación, adaptando a la sociedad y a las instituciones a la nueva etapa de la civilización del conocimiento, reconstruyendo la fortaleza de nuestra identidad cultural y asumiendo los desafíos que nos presentan las nuevas amenazas y riesgos estratégicos, en el ámbito iberoamericano de la presente guerra mundial “contraterrorista global”.
(5). El fenómeno socio-político guerra.
La guerra evoluciona con la civilización humana -que en las últimas décadas ha acelerado notablemente su ritmo- sin perder por ello su esencia. Se inscriben en ella todas las formas de la violencia organizada. Es un hecho político y es la Política la que señala su “para qué”. Lo que dijera Mao ha tomado -a lo largo de éste tiempo- cada vez mayor entidad: “la guerra es política con derramamiento de sangre y la política es guerra sin derramamiento de sangre”. La guerra es gestión política a través de alguna variante de fuerza. Cuando se la analiza sin considerar esta cualidad, el análisis es por lo menos incompleto.
Las “grandes guerras” han ido en disminución mientras avanzó la civilización, pero en ellas aumentó notablemente la mortandad. Tilly (8) apunta 27 guerras en el S. XVI, 17 en el XVII, 10 en el XVIII, 5 en el XIX y 5 en el XX. La mortandad en cambio, por mil habitantes fue: 5 en el S. XVIII, 6 en el XIX y 46 en el XX con tendencia a aumentar en el S. XXI, por cuanto se han multiplicado los conflictos y el terrorismo está operando con medios tecnológicos de punta.
El actual encuentro entre culturas nos ha traído a las “guerras asimétricas”. Es un diálogo que incorpora un suplemento de violencia y cuando el diálogo es menor, o no existe, la ecuación se resuelve solo con mayor violencia o exclusivamente con fuerza. Gluksmann lo expresa así (7): “…por su realidad, la guerra es una prueba de fuerza, por su necesidad una prueba de sentido. Opone físicamente…fuerzas que no son jamás estrictamente físicas y materiales”.“…se comunica mediante actos, más que mediante palabras o mediante actos que se añaden a las palabras y la acción se convierte en una forma de comunicación”.
Todos estos conceptos básicos no han estado presentes en los discursos de los recintos parlamentarios, cuando se trataron las vigentes leyes de Seguridad Nacional. ¿Confusión, ignorancia o compromisos? ¿O las tres cosas a la vez? Lo cierto es que el cuerpo social argentino, en la extrema debilidad generalizada a que nos han llevado los desgobiernos, necesita recuperar -cuanto antes- sus anticuerpos: su Seguridad Nacional. Estamos en total inseguridad e indefensión nacional.
El Informe Anual del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos de Londres -HSS- acaba de publicar sus balance militar 2013, revelando que “el crimen organizado y las insurgencias armadas son aun la mayor amenaza estratégica para América Latina” (10). Sin embargo nuestra dirigencia considera al crimen organizado y a la insurgencia como un tema “meramente policial”. Es decir, una agresión que no afecta al Estado ni a la sociedad en su conjunto, sino solo a algunas o varias personas. Es el criterio que se sostiene en los TTOOFF actualmente: “…en la Argentina no hubo una guerra civil revolucionaria”, “hubo una dictadura genocida”,…… “¿porqué no intervino un fiscal junto a las tropas…?”.
Oposición y gobierno ignoran en sus discursos a los presentes y evidentes riesgos estratégicos. Estos no existen, pues la colusión “progresista”los ha prohibido por ley, hace un cuarto de siglo. Sin duda el nexo más fuerte de la alianza de estalinistas y socialdemócratas es su política de derechos humanos. Con ella han extrañado a las FFAA del Estado Nacional, nos están llevando al “Estado fallido” y a la disolución nacional.
A dicha política se la complementa con otra “vaca sagrada”, la intocable legislación de Seguridad Nacional.
Nuestro propósito es dejar planteada esta grave falacia de raíz ideológica y proponer esquemáticamente la salida de esta senda que nos está llevando -eventualmente- a un próximo caos sangriento. Para ello debemos ingresar a la taxonomía de la guerra, estableciendo sus rasgos y mutaciones al término de la posguerra fría -en el 2001-. Este breve proceso, de poco más que una década, reconoce tres condiciones esenciales:
nuevas tecnologías,
nuevos procedimientos y
un cambio generacional del fenómeno.
Es lo que nos llevó a afirmar, más arriba, que “hay una nueva forma de hacer la guerra”. El matrimonio Toffler (11) estableció en 1989 tres “olas guerreras”, identificándolas con las etapas de la azada, la cinta de montaje y la computadora. Lind (12) luego de las experiencias de Irak y Afganistán, propone una clasificación de las guerras según el siguiente esquema:
Primera Generación: surgen en el Renacimiento junto al concepto de Estado Nación. Son guerras limitadas con objetivos definidos y tropas profesionales. Interesa lo cuantitativo. La batalla se trata de evitar. Son dinásticas. Paradigmas: Carlos V y Francisco I.
Segunda Generación: se asumen como compromisos sociales con una causa, tal el caso de la revolución francesa y de las revoluciones industriales y de los transportes. Aparece la guerra de masas, la artillería, las comunicaciones, la organización, la evolución táctica. Interesa el poder de fuego. Son guerras nacionales. Paradigma: Napoleón y San Martín.
Tercera Generación: se correlacionan con la motorización. Se privilegia a los medios tecnológicos en confrontación. Se combate por ideas y el componente social inercial activado tiende al aniquilamiento. La guerra se hace ilimitada, total. Interesa la maniobra. G.M. II. Paradigmas: Rommel y Montgomery.
Cuarta Generación: aparecen con la globalización posguerra fría, a partir del 2001. El hombre pasa a ser su eje. La “imagen” comunicacional es central para el dominio de la opinión pública. Se apela a lo emocional, no a lo racional. En nuestro mundo iberoamericano se caracterizan por su informalidad (2), su asimetría, su acción corruptora, y por la licuación de las fronteras físicas y conceptuales. Se desarrollan en nuestro mundo periférico, tales los casos de Irak, Afganistán o Iberoamérica. Son guerras que se han retirado de los teatros de operaciones militares y se han posado sobre las sociedades. Kal Holsti (13), respondiendo a un interrogante de Adam Jones acerca de la caracterización de las nuevas guerras en Iberoamérica, dio una respuesta sumamente ilustrativa -en el año 2001- para los dirigentes argentinos de hoy: “Si Ud. desea conocer la situación estratégica de un país o una región sudamericana, observe el estado del Estado”. El Grl David Petraeus, que comandó las operaciones contra insurreccionales en el Gran Medio Oriente, es el teórico de las Guerras de Cuarta Generación más reconocido.
El ya citado William Lind continuó estudiando la evolución de las nuevas guerras y ha perfilado a las de “Quinta Generación” como: “…la lucha del Estado para mantener su monopolio sobre la fuerza y la organización social, de cara a los desafíos de las guerras de Cuarta Generación. El siglo XXI será cada vez más marcado por las guerras de Quinta Generación y su raíz tecnocibernética en todos los ámbitos de las telecomunicaciones. La confrontación en Beirut, entre a guerrilla chiíta Hezbola y sus derrotados contrincantes sunitas, podría ser muy bien definida como una guerra de las telecomunicaciones”.
Entiendo que en los párrafos precedentes queda claramente demostrada la acelerada transformación de la guerra, en la última década. A pesar de ello, la Argentina “encapsulada”, sumida en la profundidad de una inseguridad generalizada, con un inédito número de víctimas inocentes que aplasta a la sociedad, no ha logrado que la dirigencia política se ocupe de la más alta preocupación de la sociedad y principal responsabilidad del Estado. La Seguridad Nacional sigue siendo un tema tabú. “De eso no se habla”.Es el reaseguro de la continuidad del “actual estado de guerra civil revolucionario”.
(6). El actual estado de guerra civil revolucionario y las nuevas guerras (2).
En las nuevas guerras que describimos en el punto 5., el plano militar no es – necesariamente- el más relevante. Esa es la razón por la que a lo largo de estas páginas citamos permanentemente a la Seguridad Nacional y no a la Defensa Nacional. Para abarcar a estos conceptos hay que diferenciar a lo que consideramos sustantivo-esencial, de lo meramente verbal-operativo. Éste equívoco es el que señalábamos en el punto 1. entre quienes proponen operar con las FFAA contra el narcoterrorismo y quienes se oponen. Ambos están equivocados. No entienden la naturaleza de las guerras de Cuarta Generación. ¿Están confundidos, son ignorantes o están comprometidos con el “enemigo sin rostro”? Quienes adscriben al Foro de San Pablo, cubren -sin duda- las tres probabilidades.
La primera condición para superar la demoledora acción mafiosa del narcoterrorismo -que es la forma más importante del crimen organizado en nuestro continente- es la recuperación institucional de Estado, mientras ello sea viable (14). De lo contrario habrá intervención externa. Las instituciones estatales constituyen el objetivo principal a ocupar por éste enemigo. El objetivo subsiguiente es el control de la población. Estas son “guerras civiles”, “internas”, que nuestra legislación prohíbe planificar, es decir, prever, desde 1988. Consecuentemente están en pleno desarrollo -como estado de guerra civil revolucionario– (2) ante una conducción nacional irresponsable y comprometida, un pueblo inconsciente y un cuasi-Estado institucional. Si a estas guerras no se las comprende, no hay posibilidad alguna de contenerlas, reducirlas o eliminarlas.
Hasta la fecha no existe ningún indicio de comprensión, en el oficialismo ni en la oposición. Por el contrario, abundan indicios de colusión con el agresor, en ambos sectores. Carecemos -en el débil y anticuado Estado Nacional- del órgano que desarrolle una Gran Estrategia -que debiera corresponder a una Gran Política que tampoco existe-, indispensable para enfrentar a estos desafíos provocados por enemigos “no estatales”.
La Ley de Defensa Nacional 23.554 fue promulgada durante la guerra fría, en 1988. Hemos afirmado y lo reiteramos, podríamos llamarla sin temor a equivocarnos Ley de Indefensión Nacional. El 12 de Junio de 2006, dieciocho años después, a cinco años de iniciada la nueva guerra mundial “Contraterrorista Global” y en pleno desarrollo de las guerras de Cuarta Generación, la ministro de Defensa Garré la reglamenta, profundizado los desconceptos de la Ley al punto que, afirmamos: la reemplaza con un decreto. Para demostrar la perversidad de la Ley y su decreto reglamentario 727/06, transcribo un párrafo del Art. 1° de éste último: “Se entenderá como “agresión de origen externo” el uso de la fuerzaarmada por un Estado contra la soberanía, la integridad territorial o la independencia política de nuestro país, o en cualquier otra forma que sea incompatible con la Carta de las Naciones Unidas”.
Éste párrafo va mucho más allá de lo que la Ley 23.554 prescribía y es el que abre su reemplazo, aproximándola a la Ley de Seguridad Interior. En un momento histórico en que -en el mundo- el 99,5% de las guerras en acto son “interiores”, la Argentina organiza al Estado para pelear guerras internacionales –exclusivamente-,“contra FFAA de países vecinos”, con los que -se dice- estamos en proceso de integración. Estos despropósitos no conmovieron ni conmueven a nuestra dirigencia, pero nos consta que sí preocupan a las de los vecinos.
Pero hay más. En sus considerandos, el Decreto muestra las “patas de la sota”: “Que por ello deben rechazarse enfáticamente todas aquellas concepciones que procuran extender y/o ampliar la utilización del instrumento militar hacia funciones totalmente ajenas a la defensa, usualmente conocidas bajo la denominación “nuevas amenazas”,responsabilidad de otras agencias del Estado organizadas y preparadas a tal efecto; toda vez que la intervención regular sobre tales actividades supondría poner en severa e inexorable crisis la doctrina, la organización y el funcionamiento de una herramienta funcionalmente preparada para asumir otras responsabilidades distintas de las típicamente policiales”.
Sería muy conveniente que la ministro -y sus asesores estrategas civiles- se dieran por enterados del cambio de naturaleza de las guerras presentes. La seguridad pública y la seguridad estratégica, que se desplazaban -hace años- por caminos paralelos, hoy actúanincardinados y obligan -necesariamente- a contar con una Gran Estrategia. ¿Cuáles son las “otras agencias del Estado organizadas y preparadas a tal efecto? La respuesta es: no existen. No hay planeamiento, no hay previsiones. Solo hay improvisación reactiva.
Este expreso rechazo a “las nuevas amenazas” nos deja en soledad en la región, en el continente y en el mundo. Además, nos avergüenza como argentinos cuando participamos de encuentros internacionales (6). ¿Confusión, ignorancia o compromiso con el nuevo agresor? No olvidemos quienes fueron los proponentes de esta legislación, según lo describimos en el punto 2. Concretamente: a fines de la guerra fría, simpatizantes del terrorismo ideológico nos impusieron la actual legislación de Inseguridad Nacional.
El desafío a la Seguridad que tiene todo el continente Iberoamericano, es común, es internacional. Por esa razón es imprescindible darle una respuesta también internacional a través de un Tratado de Seguridad Colectiva y Defensa Común, como nuestro Instituto lo viene proponiendo desde 1985.
Los efectos dramáticos e indiscutibles de los vigentes despropósitos “legales”, están evidenciados en la realidad de todos los días. Se debate acerca de lo anecdótico y se evita, en las entrevistas televisivas o radiales, la presencia de un solo polemólogo o estratega para intentar explicitar el drama, con alguna profesionalidad. Se encuentran allí innumerables causales a la rampante inseguridad, menos las sustantivas. Como ya lo señaláramos, así como la caída de la educación no se resolvió aumentando los presupuestos, la inseguridad nacional no se logrará aumentando el número de los agentes de policía o llamando a un abogado “progre” para que remedie al “gatillo fácil”.
La Constitución establece idoneidad para ocupar cargos en el Estado y en el área de la Seguridad Nacional hace décadas hay solo diletantes y algún aprendiz de brujo. Mientras tanto, avanzamos inconscientemente hacia el “Estado fallido” y diariamente “las nuevas amenazas” cobran vidas en las calles del país, en progresión geométrica.
(7) Conclusiones.
En extrema síntesis, llegamos a las siguientes conclusiones:
Gran parte de nuestra dirigencia es extemporánea, permanece ideológicamente en el estadio de la guerra fría y se ha resistido a ingresar -decididamente- a la presente etapa de la civilización posindustrial.
Hay “una nueva forma de producir y de hacer la guerra” y la Argentina, transculturizada y “encapsulada” carece, en su conducción, del coraje y la audacia necesarios para lanzarse al futuro. La parálisis política nos llevó a la pobreza, a la corrupción, a la inseguridad creciente y a una eventual disolución.
El actual “estado de guerra civil revolucionaria” es muy probable que ingrese -en el 2014- a una situación de caos social -cuyos indicios ya se han dado en Córdoba y Tucumán- bajo la conducción internacional del “Foro de San Pablo”.
La inseguridad nacional imperante es ilegítima, pero absolutamente legal, impuesta colusivamente por los simpatizantes del estalinismo y de la socialdemocracia desde el Congreso Nacional, en 1988 y 1891.
El presente año se inicia con una fuerte crisis económica-financiera que cataliza a la tensión y ansiedad social, frente a un incierto futuro. No existen indicios de cambio de rumbo, toda vez que el “progresismo” controla a los partidos de la pseudo-oposición, siendo la política de derechos humanos el nexo de la oculta alianza “revolucionaria” de bolcheviques y mencheviques.
La legislación de Seguridad Nacional –“vaca sagrada” de dicha alianza- lleva progresivamente a la Argentina a la situación de “Estado fallido”, al santuario de tráficos ilegales -consecuentemente espacio de intervención externa- y a una eventual disolución nacional.
Ante la caída del petrodólar venezolano, el proceso “pseudo-revolucionario” se apoya hoy financieramente en el narcodólar. Ello explica que el espacio nacional es -de hecho- “zona liberada” para los carteles de la droga y de los tráficos ilegales.
El “relato”, sostenido en las últimas tres décadas con éxito, impide que una gran mayoría de los ciudadanos realice una lectura correcta de su circunstancia. Mira, pero no ve, mientras el gobierno actúa sobre un espejismo opuesto a la realidad que oculta.
¿Confusión, ignorancia o compromiso de una dirigencia extraviada?
Citas:
Claudio Chávez. “Scioli y las Fuerzas Armadas”. 27 Ene 14. infobae.com
Heriberto J. Auel. “La larga guerra civil argentina y el actual estado de guerra civil revolucionario”. 09 Jul 13. ieeba.com.ar
Heriberto J. Auel. “Relaciones Cívico Militares, la necesaria Reconstrucción del Estado y de la imprescindible Seguridad Nacional- Regional y Continental”. Ago 13. ieeba.com.ar
Aznar Fernández-Montesinos. “La violencia del nuevo siglo”. 16 Oct 13. www.ieee.es
Heriberto J. Auel. “La Argentina Encapsulada”. Mar 03. ieeba.com.ar
Heriberto J. Auel. “Democracia. Fuerzas Armadas, Seguridad y Sociedad”. Jul 11. Ponencia en el IX CMDA. Santiago de Chile. ieeba.com.ar
Samuel P Huntington y Lawrence Harrison. “La cultura es lo que importa”. May 01. Ed. Planeta. CABA
Charles Tilly. “Coerción, capital y los estados europeos 990-1990”. Ed. Alianza. Madrid.
André Gluksmann. “El discurso de la guerra”. Ed. Anagrama. Barcelona.
La Nación. “La región, bajo amenaza del crimen y de la insurgencia”. 06 Feb 14.
Alvin y Heidi Toffler. “Las guerras del futuro”. Ed. Plaza & Janés. Barcelona.
Willam Lind. “El rostro cambiante de la guerra: hacia la Cuarta Generación”. Oct 89. Artículo en la Marine Corps Gazette de EEUU.
Kalevi Holsti. “Interview with Kal Holsti”. Adam Jones. 2001. Google.
Federico G. Auel. “La Argentina y la probabilidad de llegar a la situación de Estado Fallidocomo riesgo estratégico en el mediano plazo”. Licenciatura de Estrategia. Universidad Maimónides. 2010. www.ieeba.com.ar
“Definitivamente las FARC no se han desarmado y no parece claro que estén dispuestas a hacerlo…”
A. González Martín** – 30 Ago 17 (1).
Un “desaparecido” en el desierto patagónico.
Las FARC-EP ¿están desarmadas?, y… ¿están aquí?
Más allá del eventual “desaparecido”.
Un “desaparecido” en el desierto patagónico.
En estos primeros días de Sep 17, mientras los argentinos esperamos una nueva primavera y las elecciones legislativas de Octubre, el antiguo proceso revolucionario setentista se ha reactivado con indudables fines electorales. En el desierto patagónico hubo -al parecer misteriosamente- un “desaparecido”.
Las “organizaciones de DDHH” en los últimos treinta y cinco años desarrollaron una intensa “comunicación psico-política” (2) como directas continuadoras de las operaciones revolucionarias iniciadas en 1959 por la “guerrilla armada”. Construyeron -desde 1983- un “relato”, según el manual de Antonio Gramsci, tras la derrota de las bandas armadas en los singulares combates -1974/1988- de la “guerra asimétrica” contra-insurgente, o contra-terrorista, según el nivel en que se la considere.
Es esa intensa y masiva narrativa épica la que permite hoy una aviesa y planificada maniobra política, como única bandera electoral disponible por parte de la“pseudo-revolución, en manos de la hipocresía KK.
En aquel elaborado relato surgieron términos-símbolos. Entre ellos, uno insignia: “desaparecido”. Esta palabra es llave en la sibilina maniobra, en plena ejecución pre-electoral, exista o no el desaparecido. “Desaparecido” ha sido y es la palabra de mayor empleo en la comunicación tansculturizadora, a lo largo de las últimas décadas. Pero no deja de llamar nuestra atención que, después del 10 Dic 15 y habiendo pasado ya más de un año y medio desde aquella fecha, aun haya seguidores ingenuos o inocentes del perverso “relato”. Que el núcleo duro K lo sostenga, es comprensible, pero que exista una majada neutra y mansa que los siga, debería preocuparnos como sociedad.
La profesora Lic. Analía L. Pastran (3) del IEEBA, -especializada en comunicación política-, a través de una cita nos explica así al fenómenosocio-comunicacional:
Por comunicación podemos entender -según José Luis Sánchis- “… aquellos procedimientos por medio de los cuales una mente afecta a otras (…). La comunicación busca siempre un feetback, una respuesta del receptor desde la cual puede aprender y desarrollarse; así se habla de comunicación perfecta cuando el mensaje ha sido bien recibido y se produce la reacción deseada en el receptor. La comunicación tiene un ingrediente de cultura, de inter-subjetividad y de inter-relación”.
Podríamos agregar aquí que esa comunicación puede ser empleada apuntando al bien común o a la creación de una engañosa “falacia” política, encubridora de propósitos inconfesables, como lo ha sido el caso argentino reciente, que nos puso al borde de un drama similar al que padece Venezuela.
La marcha convocada por las Organizaciones de DDHH en la CABA el día viernes 01 Sep 17, ha sido una comprobación concreta del fenómeno citado. Otra, que lo ratifica, fue la del 2×1. Conocedores del fruto de la “reacción deseada en el receptor”, los revolucionarios de cartón explotan electoralmente el “ingrediente de cultura, de inter-subjetividad y de inter-relación”.
Sobre ese cultivo se encuentran las únicas banderas disponibles para el nuevo neo-marxismo pseudo-revolucionario. No es Macri quien “yatiene su desaparecido” como lo dice “el perro” Verbitzky en Página 12; sino Cristina, que lo necesita imperiosamente. ¿Qué otra bandera tiene para alcanzar los fueros parlamentarios, sino explotar lo sembrado en la últimas décadas? Ayer ingresaron por las quebradas del NO, con armas y hoy lo hacen con el “indigenismo radical”, por los portillos del SO, con un “desaparecido” y…¿con armas?…
Las FARC-EP ¿están desarmadas?, y… ¿están aquí?
Pero, detrás del dudoso y eventual “desaparecido” hay una compleja trama que parcialmente hemos citado en un artículo del 01 Ago 17 (4), en el que decíamos:
“El XXIII Encuentro del Foro de San Pablo -FSP- acaba de desarrollarse en Managua -Nicaragua- entre el 15/19 Jul 17, bajo dirección del sandinismo por ausencia de su fallecido presidente/fundador -Fidel Castro- y de su vice-presidente -Lula-, sentenciado a nueve años de prisión, por corrupción. El informe final del Encuentro expresa claramente”:
“Las fuerzas de izquierda y progresistas perdieron el control del Poder Ejecutivo en Honduras, Paraguay, Argentina y Brasil y resisten en Venezuela, Bolivia, Ecuador, Uruguay, Nicaragua y El Salvador”. Por estas razones la directiva establece como nuevo objetivo: “buscar la unidad de las izquierdas revolucionarias y organizar la resistencia, hasta que se inicie la contraofensiva”.
Las FARC retienen un peso específico central en la dirección del FSP y están presentes en nuestro Cono Sur. Veamos lo que expresa una prestigiosa institución española, el Instituto Español de Estudios Estratégicos -IEEE-, a través de su investigador Andrés González Martín, que nos da una categórica respuesta -el 30 Ago 17- a una de las preguntas de nuestro subtítulo: “las Farc no están desarmadas”,“no han entregado todo su arsenal”.
¿Es de interés para los argentinos esta información? Nuestro Instituto -IEEBA- entiende que es de enorme importancia. Las FARC son -sin duda- el actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano. Constituyen el eje de poder del FSP -órgano director político/estratégico de la revolución iberoamericana- y sabemos que están presentes en Bolivia y Paraguay desde hace muchos años y que también lo hacen en la “Araucania” chilena. ¿Estarán en la pretendida área de la Patagonia argentina ocupada por los “noveles mapuches” o antiguos araucanos chilenos, en donde se han cometido últimamente un sinnúmero de crímenes con el sello de las FARC?
En Bolivia, el ex Ministro de Defensa Sr. Kieffer, aseguró la presencia de las FARC, desde 1998. En Paraguay, el Fiscal Alejo Vera confirmó tener pruebas de la histórica relación del Ejército del Pueblo Paraguayo -EPP- con las FARC, desde 2008. En Chile la relación del PC chileno con las FARC quedó evidenciada en las computadoras encontradas en el cuartel general de Tiro Fijo, en Ecuador, luego de que la Fuerza Aérea Colombiana lo bombardeara.
En esos documentos se encontró el acuerdo para que las RAM se capacitaran con las FARC en Colombia. Se trata de los cursos de entrenamiento especial recibidos por Facundo Jones Huala y su grupo, que en los últimos meses produjo un centenar de graves hechos terroristas en ambos lados de la cordillera, con fines políticos. Chile le ha solicitado la extradición, acusándolo de terrorista. Ésta fue denegada por un Juez Federal argentino y aun sigue irresuelta. A su vez el Gobernador del Chubut ha pedido el juicio político al mencionado Juez y no conocemos en que laberinto se atascó.
Llama la atención que frente al mencionado cuadro de situación, Jones Huala se haya presentado espontáneamente a un control de rutas de la Gendarmería Argentina, sabiendo que es buscado por Interpol. Allí comienza el drama o ¿la farsa? del “desaparecido” Maldonado, que hemos calificado como muy probable “maniobra planificada”. Si así fuere, el FSP-FARC tendría el total control de la operación pre-electoral.
Respondida una parte de la pregunta formulada en el subtítulo y con la seguridad que las FARC están presentes en nuestra región desde hace tiempo, tenemos la intima convicción que, alcanzado el tortuoso y dudoso acuerdo de Paz con el presidente Santos, su alta conducción ha desplazado hacia la Araucania hombres y armas, por imperiosas necesidades logísticas de su cartel de la cocaína, que es la fuente de su poder y que está fuera del alcance del Tratado de Paz.
El enorme espacio vacío de nuestra Patagonia les ofrece la posibilidad de ocultar allí grandes depósitos de drogas y armas. Por ello están desplazando por el terror a los puesteros de inmensas estancias, con las RAM, que ellos adiestraron con anterioridad. La comprobación de este supuesto la tendremos cuando se conozcan las cargas de cocaína que se decomisarían en los puertos patagónicos del Atlántico, en un futuro cercano. Los indicios ya existen.
Con referencia a la otra pregunta que nos formuláramos: ¿las FARC, están desarmadas?, la respuesta es que no lo están y en eso coincidimos con González Martín (1) cuando expresa que después del Tratado de Paz “podrían convertirse en un partido político armado” y agregamos, “con un creciente poder económico” compuesto por miles de millones de narco dólares, que les aseguraría llegar a la presidencia de Colombia en el mediano plazo. Es lo que el presidente Santos -premio Nobel de la Paz al estilo de nuestro Pérez Esquivel- ha logrado, y lo que el ex presidente Uribe predijo antes de la consulta para la aprobación del “acuerdo de Paz”.
El 26 Jun pasado, la misión de la ONU en Colombia anunció que las FARC habían entregado 6803 guerrilleros y 7132 armas -fusiles y armas de puño-; pero ello no significa que se hayan desarmado totalmente. Gran parte de la prensa mundial interpretó mal ese hecho, manifestando que la organización se había desarmado. 1200 ex guerrilleros pasaron a formar parte de la Unidad Nacional de Protección -UNP-, escoltas de los nuevos políticos y ex jefes provenientes de las FARC. Otros han formado empresas de seguridad privada, al servicio de otras empresas de ex componentes de la organización armada.
Medio millar de disidentes de las FARC decidieron no ingresar al Tratado. Continúan en rebeldía y con las armas en sus manos. A ello debemos sumar aproximadamente mil quinientos guerrilleros desplegados en Venezuela que continúan en ese país. Lo más trascendente es que existen aun más de novecientos almacenes secretos. Las FARC han manifestado que no tienen inventarios de material de guerra -por lo menos para la ONU y el gobierno-. No hay certeza de lo que aun no se ha entregado, pero es muy probable que lo hecho no llegue al 50% de lo existente.
Un dato preocupante, que no aparece, es el de los misiles portátiles tierra aire y los misiles antitanques. Se calcula que suman varios centenares. A este arsenal disperso se suman las minas antipersonales. Los campos de coca de las FARC están protegidos por campos minados. Hubo once mil bajas producidas por minas en los últimos años y solo las FARC tienen los planos de los campos que han sembrado. El efecto psicológico de su sola existencia, sobre la población, limita seriamente el desplazamiento en las zonas rurales.
A fines del mes de Jun 17 se habían intervenido setenta y siete depósitos, de un total declarado de novecientos cuarenta y nueve. En esos depósitos, además de armamento, materiales, munición y vestuarios, hay mucho dinero. Hay un gran número de civiles que compiten con los guerrilleros disidentes para apropiarse de los depósitos enterrados. Al no poder bancarizar sus ingresos negros, la organización ha tenido que recurrir a lo que se conoce como “El Dorado de las FARC”, en la selva.
La minería es otro de los grandes ingresos de las FARC y gran parte de ella está trabajando legalmente, administrada por testaferros. El Procurador General de Colombia ha declarado que la mayor fortuna del país es la de las FARC. El Ministerio de Hacienda la calcula en 39 billones de dólares. El Procurador ha declarado que “el Tratado de Paz puede terminar siendo la mayor operación de la Historia de lavado de dinero”.
Más allá del eventual “desaparecido”.
La antigua revolución estalinista que afectó a toda Iberoamérica desde 1959, evoluciona a un neo-marxismo progresista, altamente violento y corrompido. Mientras está en retirada en algunos países de la región, cuenta hoy con Las FARC -en Colombia– como un nuevo partido armado y financieramente poderoso -con base en un país importante- que ha extendido ya sus tentáculos armados hacia el Sur, en las preliminares de una contraofensiva revolucionaria.
El poder vicario depositado por Cuba en Venezuela se desplaza inexorablemente a Colombia y Cuba, sin Fidel, deberá encontrar un nuevo socio, entregando probablemente -para sobrevivir- el petróleo y los puertos venezolanos a China y Rusia. Brasil -en crisis- estaría maduro para negociar a través de sus sectores de izquierda con las FARC, en Bogotá, y no sabemos qué futuro le aguardan a Chile-Perú y Argentina, con regímenes no consolidados.
Nuestra querida Patria, carente de una Política de Defensa y de su correspondiente planeamiento estratégico que active al subsistema de inteligencia estratégica, ha perdido la iniciativa estratégica y -consecuentemente- su libertad de acción, como lo evidencia la maniobra política con eje en un “sorpresivodesaparecido”. La Argentina está hoy en un doble riesgo: en el corto plazo puede perder el rumbo tomado el 10 Dic 15, para regresar caóticamente a la etapa anterior, en el 2019. En el mediano plazo podría escalar desde el actual “estado de guerra civil”, a una situación belígera asumida sin planeamiento estratégico, improvisadamente, como lo hicimos en los ´70 y en el ´82. En esta oportunidad la consecuencia más probable sería su desintegración social y geográfica.
Sobre la conciencia -si la hubiere- de los legisladores que nos dejaron desde el ´88 en total inseguridad estratégica y pública, pesan ya miles de muertes, que diariamente siguen acumulándose. Se le ha entregado legalmente al “esfuerzo nacional de policía” la responsabilidad de prever los riesgos y amenazas estratégicas posguerra fría, para extrañar a las FFAA del Estado Nacional. Lo han logrado, con absoluta inconsciencia, ignorancia e irresponsabilidad. Las Policías actúan reactivamente. La actitud proactiva exige planeamiento estratégico y éste es ajeno a las policías, aquí o en la China.
A esta “venganza” irracional de nuestros revolucionarios y sus simpatizantes hipócritas, debemos sumar el arrasamiento institucional del politizado sistema judicial. Podríamos llegar, en breve, a la paradoja de continuar con los “juicios de lesa humanidad” mientras el mismo Estado Nacional está siendo agredido y lucha nuevamente con los continuadores de los que lo hicieron en los ´70 y que lo explotan -políticamente- desde el ´83. Son las paradojas de la inmadurez, la ideologización de la Política y de la debilidad cultural -corrupción- de un pueblo.
Más allá del “desaparecido” hay una dramática historia que hemos aceptado reemplazar por una narrativa o relato, impuesto por un enemigo derrotado en combate. Una profunda “grieta” divide a una mayoría social pasiva, escasamente comprometida, que no ha encontrado un liderazgo a la medida de su crisis; de una minoría activa, híper-ideologizada, rentada, bajo una conducción revolucionaria internacional, lúcida y experimentada para operar las guerras de séptima generación. Mientras tanto nuestra dirigencia discute el sexo de los ángeles.
CITAS:
*Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército Popular.
(1) A. González Martín. “Las FARC no están desarmadas”. 30 Ago 17. www.ieee.com.es
(2) En particular el CELS de Horacio Verbitzky y el diario Página 12.
(3) A. L. Pastran. “La Comunicación como Estrategia”. Ago 17. www.ieeba.com.ar
(4) H. J. Auel. “Política de DDHH Vs. Política de Seguridad Nacional”. 01 Ago 17. www.ieeba.com.ar
El voto militar, la familia militar y las poco apoyadas listas 262 y 298.
[ezcol_1half]
LOS AMORFOS*
Luego de leer la noticia que por supuesto todos ya sabíamos, sobre el voto militar, vuelvo a escribir sobre el tema dirigiéndome a mis “camaradas”. Si bien la nota periodística solo habla del voto de los militares, todas las instituciones de uniformados a las cuales unos y otros pertenecimos hizo exactamente lo mismo. Dejando de lado las listas 262 y 298 con honorables candidatos militares y civiles víctimas del terrorismo y olvidando a quienes sufrimos y morimos en ilegal prisión, prefirieron la falacia del “fin del curro de los derechos humanos”.
Cuando leo sobre San Martín y me los imagino a ustedes haciendo lo propio, o cantando el Himno Nacional Argentino, me da nauseas. Lamentablemente tienen una mente y un espíritu amorfo y no son dignos de confianza. Yo nos le compraría un auto usado ni en broma. Muchos menos si tuviera la posibilidad de un enfrentamiento armado los quisiera de mi lado, prefiero la soledad. Sé que me abandonarían a la primera de cambio como hicieron y hacen ahora. Esto ocurre desde las más altas a las más bajas jerarquías. El uniforme que llevan les queda muy grande ya que carecen de honor. Lo lamento por ustedes.
*Sin forma regular o bien determinada. Que carece de personalidad y carácter propio”
“La multitud obedece más a la necesidad que a la razón, y a los castigos más que al honor”.
Aristóteles (284 AC-322 AC)
[/ezcol_1half]
[ezcol_1half_end]
Cambiemos se impuso entre el voto militar y ganó ampliamente en la Antártida
Ganó en las mesas cercanas a las unidades de El Palomar, Campo de Mayo, Regimiento de Patricios, entre otros.
Así como Cristina Kirchner se impuso ampliamente en las cárceles de la provincia de Buenos Aires, Cambiemos ganó en la mayoría de las mesas ubicadas en las zonas cercanas a los cuarteles militares.
Por ejemplo en la Antártida, lugar de referencia histórica para medir el voto militar, Cambiemos sacó el 83,2%, unos 114 votos sobre un total de 137.
Aunque el triunfo fue más acotado en la zona de Campo de Mayo, en el Gran Buenos Aires, con un 37,5%; ganó con el 60% en las mesas de Palermo cercanas al Regimiento de Infantería Patricios, obtuvo un 54% en Villa Martelli, 51% en Puerto Belgrano y el 40% en El Palomar, entre otros resultados favorables al macrismo.
Los datos fueron publicados esta mañana por el diario La Nación, que tuvo acceso a un relevamiento sobre el voto castrense.
Por su parte, la candidata a senadora de Unidad Ciudadana se impuso en localidades bonaerenses como Moreno, con un 39,7% en cercanías a la sede de la Brigada Aérea VII de la Fuerza Aérea; en Merlo con 46,6% y Quilmes con 35,4%, donde se encuentra Aérea tiene la Dirección de Vigilancia y Control Aeroespacial y el Área Material Quilmes, dedicada al mantenimiento de aeronaves de la Fuerza Aérea.
Otros resultados favorables a los candidatos de Cambiemos se dieron también en las mesas cercanas a la Base Naval de Mar del Plata (42,2%), la VI Brigada Aérea de Tandil (44,4%,) el Apostadero Naval de Río Santiago (41%), el Grupo de Artillería Blindada de Azul (43,2%) y la Base Aeronaval de Punta Indio (46,6%).
En la provincia de Córdoba, donde en las generales el macrismo obtuvo una victoria arrasante, también sacó un 46% de votos en las cercanías del Comando de la División de Ejército II, el Batallón de Comunicaciones 141 y el Área Logística Córdoba, entre otras unidades.
Estimados Heriberto Justo Auel y miembros de El Movimiento Lista 262 y Arturo Cirilo Larrabure, José María Sacheri y miembros de Todos por Buenos Aires, Lista 298.
[ezcol_1half]
Juntamente con mi familia, les queremos hacer llegar a todos y a sus respectivos seres queridos, nuestro eterno agradecimiento por todo el esfuerzo puesto para, casi sin tiempo, prepararse y llegar a la votación de las PASO 2017.
Imagino que dado el magro resultado obtenido, en gran parte por el poco apoyo brindado por la familia militar, de fuerzas de seguridad, policiales y penitenciarias estarán deliberando sobre el curso de acción a seguir. Desde ya hago votos para que la determinación que cada uno tome, sea lo más acertado y beneficioso a ustedes y sus honorables sentimientos.
[/ezcol_1half]
[ezcol_1half_end]
[/ezcol_1half_end]
Todos sabemos que uno de sus tantos objetivos es luchar por el reconocimiento de las víctimas del terrorismo, como así también abogar por verdad y justicia para quienes hoy estamos en ilegal prisión. En este caso por haber o inclusive no haber combatido a los sanguinarios asesinos de los años 70, que enlutaron esta nación. Al respecto tengan en cuenta el factor tiempo. Nosotros por edad, ya casi no lo tenemos y la labor emprendida es a largo plazo. De allí que es muy importante que cuenten con gente joven, como el resto de los partidos políticos y en particular los de ideologías más radicalizadas. Sabemos que la tarea es verdaderamente titánica y por ello lo que resuelvan será lo acertado.
Reiterando una vez más nuestros buenos deseos y agradecimiento, los saludamos con gran afecto.
“No esperemos recompensas de nuestras fatigas y desvelos”.
“El mundo contemporáneo se enfrenta a dinámicas que ponen
en aprietos a los operadores clásicos de la Seguridad”.
César Augusto Niño González*.
El “Encuentro” de Managua.
Entre “relatos” y falacias.
La Política de Seguridad Nacional.
El “Encuentro” de Managua.
La publicación del informe final del “XXIII Encuentro del Foro de San Pablo-FSP-” confirma -definitivamente- las afirmaciones que nuestro IEEBA viene realizando hace mucho tiempo… “el gobierno argentino de los K -hipócritamente- simuló no adscribirse al Socialismo Siglo XXI” (1).
Se dijo peronista y gran parte del peronismo suicida lo aceptó y lo sigue aceptando cuando rechaza el desafuero del “honorable” De Vido. Los K se adscribieron a la “pseudo-revolución” y la ex presidente lo confirma actualmente con la ideología de quienes la acompañan en su candidatura al Senado Nacional, en las elecciones de Octubre de éste año.
El Socialismo Siglo XXI -o Chavismo- no es otra cosa que la continuidad del proceso revolucionario conducido por La Habana desde 1959 -hasta hoy- y en la presente etapa post-implosión soviética -1991- conducido por el FSP, en el que revistan estalinistas y social-demócratas, estos últimos citados normalmente como “progresistas” (2).
El “XXIII Encuentro” acaba de desarrollarse en Managua -Nicaragua- entre el 15 y el 19 de Julio de 2017, bajo dirección del sandinismo, por ausencia de su fallecido presidente/fundador -Fidel Castro- y de su vice-presidente -Lula-, sentenciado a nueve años de prisión, por corrupción.
El informe final del Encuentro expresa claramente: “Las fuerzas de izquierda y progresistas perdieron el control del Poder Ejecutivo en Honduras, Paraguay, Argentina y Brasil y resisten en Venezuela, Bolivia, Ecuador, Uruguay, Nicaragua y El Salvador”. Por estas razones la nueva directiva establece como nuevo objetivo “buscar la unidad de las izquierdas revolucionarias y organizar la resistencia, hasta que se inicie la contraofensiva”.
Entre “relatos” y falacias.
Llama la atención que el periodismo y los partidos políticos, en nuestro medio, no se hace eco de estos hechos políticos y estratégicos, centrales para el futuro de nuestra región iberoamericana. La “resistencia” está hoy en nuestras caóticas avenidas y autopistas, en las vaciadas instituciones, en la comunicación, en las aulas, en los sindicatos, en los transportes. Sin embargo, cuando se la describe en sus detalles, no se la cita como tal. Se habla del actor: “el piquete”. Pero no de su acción: “la resistencia revolucionaria”.
Tampoco lo hace el Gobierno. Nose cita a la “revolución”, pero se afirma que no debemos regresar al pasado violento y ese mismo pasado está presente, con otras formas y en otra circunstancia. Se mira y no se ve. Se habla con el lenguaje simbólico del enemigo, con expresiones derivadas de una masiva comunicación psico-social de nuestro viejo enemigo, trasladadas a un nuevo “relato” que es determinante para las conductas fanáticas y condicionantes para los actores dubitativos o confundidos.
Lo que en verdad ha ocurrido es que el terrorismo revolucionario de los ’60 y ´70 ha mutado desde sus formulaciones estalinistas a las gramscianas, creando “falacias” encubridoras para que las mayorías de clase media “llegaran al comunismo, sin saberlo”. Hasta ahora el cambio de vía ha tenido un relativo éxito. Prueba reciente: la elección del nuevo presidente. Pero a su vez éste mismo presidente, que en la última reunión del Mercosur reclamó a Caracas por “los presos políticos en Venezuela”, tiene casi dos mil en su propia casa que aumentan constantemente -defunciones y nuevas incorporaciones de por medio- y no actúa.
Continúa -con absoluta vigencia en el 2017- la “política de derechos humanos -DDHH-”, conducida ahora por el Ministro Garavano y su Secretario Avruj, ambos bajo control y supervisión de los llamados “organismos de Derechos Humanos”, constituidos por simpatizantes de la “pseudo-revolución”, defensores de Maduro, de su dictadura y francos opositores -si no enemigos- del gobierno Macri. ¿Cómo se explica semejante paradoja? ¿Cómo se entiende semejante contrasentido?.
Hay quienes -aun estando presos- todavía esperan que las elecciones de Octubre “normalicen” su situación pues, después de ellas -dicen-, todo cambiará. Se terminará con “el curro de los DDHH”. Otros, más realistas, descreen de dicha probabilidad, pues la coalición gobernante tiene en su seno “progresistas de izquierda” y “progresistas liberales”, que en lo que tiene relación con la “política de derechos humanos” actúan tomados de la mano.
Hemos sostenido -desde el final de la guerra fría en 1991- que hay mucha confusión en variados dirigentes ideologizados, con bajísimo nivel de conocimientos políticos y estratégicos. No es lo mismo “derechos humanos” que “política de derechos humanos”. Los derechos humanos están en nuestra Constitución Nacional. Los defendió la Nación Argentina cuando el terrorismo revolucionario nos agredió -desde 1959-, con el objetivo de imponernos el partido único y una constitución comunista.
Estos objetivos revolucionarios aun se mantienen -como lo acaba de afirmar el XXIII Encuentro de FSP-, pero el procedimiento que hoy emplea para lograrlos ya no es a través de las “organizaciones armadas”. Estas han sido reemplazadas por “la política de DDHH”, conducida por los “organismos de DDHH” que emplean a parte del Estado Argentino como instrumento para alcanzar sus fines: al PEN -Ministerio de Justicia y DDHH, Secretaría de DDHH -querellante en todos los casos- y al Poder Judicial -la Justicia Penal Federal, consciente prevaricadora- que ha arrasado con la jurisprudencia penal argentina.
A su vez, la “política de DDHH” desplazó a la Política de Seguridad Nacional, mediante la colusión -en la posguerra- de nuestros enemigos de la segunda mitad del siglo XX: los británicos y los personeros actuales de la revolución neo marxista (3).
Esta maniobra colusiva, originada con el Decreto 158/83, a puesto a la Argentina en los umbrales del “estado fallido” y ha retenido el “estado de guerra civil revolucionario” hasta nuestros días.
No es solo Cristina ni el “populismo” lo que espanta a las inversiones o impide darle un mayor ritmo a la recuperación de la crisis generalizada que nos envuelve.
Cristina es solo el rostro, la imagen de superficie que oculta al proceso revolucionario que afecta a toda Iberoamérica, en la profundidad de los acontecimientos. El término “populismo” es solo el encubrimiento discursivo que evita llamar a las cosas por su nombre. Al pan, pan y al vino, vino.
En la Argentina aparentemente no existen los comunistas, pero la pseudo-revolución neo-marxista sigue su curso y sus actores, en superficie, son todos “democráticos”, pero aclaremos: son demócratas del partido único. Son quienes no hablan de la situación venezolana. ¡Qué esperan las cámaras del Congreso Nacional para expresar su repudio al criminal gobierno castrista de Caracas!
El complemento de la citada maniobra judicial originada por el Decreto 158/83 -que nos ha dejado sin FFAA y en total desamparo en lo que hace a la seguridad pública- ha sido la masiva acción psico-social desarrollada desde los años ´80, en tiempos en que los medios de comunicación eran estatales.
Hoy ese discurso continúa, bien disimilado por el escándalo de la corrupción de los gobiernos adscriptos al “chavismo”, aun en el caso argentino en el que la “revolución” fue contenida -en Diciembre de 2015- por elecciones libres, pero con un nuevo gobierno que carece del poder suficiente, dentro de su coalición, para enfrentar a las “vacas sagradas” creadas -en los últimos treinta y cinco años- por la “política de DDHH” que le imponen las “respetadísimas” comandantes de “abuelas” y “madres” y las leyes que originaron la actual inseguridad e indefensión -las de Defensa y Seguridad Interior- intrínsecamente perversas (4).
La Política de Seguridad Nacional.
Como ya lo expresáramos más arriba, la Política de Seguridad Nacional no existe. Ha sido reemplazada por la “política de DDHH” (5). Es suficiente -para comprobarlo- un análisis comparado de los Libros Blancos de la región, o bien observar la situación de inseguridad progresiva y generalizada, que ha pasado a ser la principal preocupación social.
Nuestra dirigencia política, frente a éste tema central -principal responsabilidad del Estado- y de cara a su electorado, ha defeccionado. El muro psico-político construido durante los últimos treinta y cinco años la ha paralizado. Es “políticamente incorrecto” tratar la actualización conceptual y orgánica de la Seguridad Nacional. La legislación que la rige fue desarrollada por los simpatizantes y herederos de las organizaciones terroristas-revolucionarias domésticas, en tiempo de la guerra fría. Con ellas lograron extrañar a las FFAA de sus misiones constitucionales y así pudieron avanzar contra nuestra cultura, nuestra educación, nuestra economía y alcanzaron la actual “grieta” social -la lucha de clases-, a un precio escandaloso de inseguridad, indefensión, muertes diarias de inocentes, corrupción institucional y conflicto social. Nos han llevado al borde del “Estado fallido”.
Mientras tanto, el mundo siguió andando. Contrariamente a nuestra parálisis socio-política y económica, nuestros vecinos y el mundo desarrollado dinamizó los cambios de estructuras, de conceptos y organizaciones de seguridad. Mientras está en debate la “séptima generación de la guerra” en el ámbito de los estrategas teóricos *, la anquilosada dirigencia política argentina y los responsables legos de nuestra Seguridad Nacional, continúan sordos, ciegos y mudos, mientras los riesgos y amenazas posguerra fría se agravan día a día y en las calles y avenidas los vecinos gritan por SEGURIDAD Y JUSTICIA. En nuestra querida Patria Argentina el “motor del reordenamiento de la Seguridad”* está fuera de servicio desde 1984, hace treinta y cinco años.
Por los motivos expuestos, quien suscribe los invita a acompañarnos con su voto en Agosto y en Octubre, para alcanzar a ocupar una banca en la Cámara de Diputados de la Nación, apoyando al partido “El Movimiento” – Lista 262- “Orden y Justicia”.
* César A. Niño González. “Séptima generación de la guerra: el terrorismo como motor del reordenamiento de la Seguridad”. 21 Jul 17.http://www.ieee.es/
(1). Heriberto J. Auel. “La larga guerra civil argentina y el actual estado de guerra civil-revolucionario”. 09 Jul 13. www.ieeba.com.ar
(2) Heriberto J. Auel. “El narcoterrorismo, el estado nación, la democracia y las FFAA”. 26 Abr 14. www.ieeba.com.ar
(3) Heriberto J. Auel. “Estamos en Guerra “por partes”. 05 Ago 16. www.ieeba.com.ar
(4) Heriberto J. Auel. “Democracia, FFAA, Seguridad y Sociedad”. Ponencia en Santiago de Chile. 21 Jul 11. www.ieeba.com.ar
(5) Mario Cadena Madariaga. “Los partidos políticos, las FFAA y la Defensa Nacional”. Mar 10. www.ieeba.com.ar
EL PENSAMIENTO NACIONAL EN TIEMPOS DE GLOBALIZACION PLANETARIA.
El presente ensayo fue escrito por el General Heriberto J. Auel en el año 2002. Había indicios de una reacción al multilateralismo globalizador. Hoy, con la llegada de Bolsonaro a Brasilia y luego de reacciones nacionalistas en Europa y EEUU, se verá un fenómeno de reacción al “progresismo de izquierda” que afectó a la Argentina desde 1984.
Observemos lo que decía el General 16 años atrás:
Grl Br Heriberto Justo Auel
Octubre de 2002
EL PENSAMIENTO NACIONAL.
El pensamiento nacional es, de hecho, el germen y núcleo de una teoría política nacional y ésta, situada en nuestro espacio y tiempo histórico, la base de una doctrina política nacional. Hoy ambas son las grandes ausentes en nuestra circunstancia nacional y, consecuentemente, fuentes de ansiedad e incertidumbre social.
Una doctrina, es decir, un actualizado pensamiento nacional desarrollado en forma sistematizada y orgánica, con plena posibilidad de aplicación real, da lugar a la unidad y homogeneidad de una sociedad, que alcanza así la categoría de comunidad nacional. Impulsa a la sinergia y felicidad del país a través de la construcción de su propio futuro.
Una comunidad, en libertad y diversidad, al alcanzar ese rango ostenta un solo y común escenario a lograr. Es su “destino manifiesto”, su “proyecto de vida en común”, un ramillete de objetivos políticos en el horizonte que reúne a un pueblo y le da vigor monolítico y esperanzas.
Esa comunión proyectada de intereses e ideales producirá –naturalmente- la unidad nacional, que se traducirá en poder y fortaleza política, sobre el soporte de una identidad, de una cultura singular que unifica, diferencia y define a una personalidad nacional, -en el concierto de la variada multiplicidad universal- y en una necesidad insoslayable en la relación con “el otro” o con “los otros” en la presente e ineludible globalización planetaria, que nos hace a todos vecinos cercanos.
Establecida la unidad de fines –unidad objetiva- alcanzaríamos en consecuencia el enlace espiritual de la Nación. En ese estadio, es lícita y necesaria la confrontación de ideas, la oposición inteligente en la elección de las prioridades, de los medios y caminos para alcanzar aquellos fines u objetivos, optimizando así el empleo del Poder Público, siempre escaso y de uso alternativo. Éste es el rol de las organizaciones sociales y de los partidos políticos que representan a los diversos sectores de la sociedad. Para la acción operativa comunitaria están las instituciones estatales, en sus diversos niveles. Sin ellas, es imposible el progreso.
Por el contrario, la ausencia de un pensamiento nacional, originario y originante, se traduce en la ausencia de la unidad actora-soberana y en la presencia de un “pueblo arena”, objeto de las circunstancias y no sujeto de su propia historia, como “pueblo roca”.
Un “pueblo roca”, unido, exige el aglutinante de una Doctrina Nacional fundada en un Pensamiento Nacional. Colegimos así que un Pensamiento Nacional – Doctrina Nacional- es la base de la unión y de la unidad resultante, condición sine-qua-non que nos hace actores del propio destino posible, es decir, de un futuro real a prever y lograr, para “no toparnos con la desgracia”, según la sentencia confuciana que encabeza estas líneas.
Es el “pensar, para luego obrar”, que nos legó el Estagirita y que, desde Moltke El Viejo, orienta a los modernos estados mayores y a sus correlatos privados o públicos.
LA DOCTRINA NACIONAL.
Hemos señalado que un pensamiento sistematizado –teoría-, con un objeto definido, deriva en doctrina. Ésta, definida por uno o varios principios, es el instrumento que ilumina al Plan Estratégico consecuente, como sendero para lograr con eficiencia las metas de largo, mediano y corto plazo y a la vez sortear la complejidad de situaciones conflictivas que nos presenta un mundo complejo, en vertiginosa evolución.
Cuando ese ejercicio intelectivo logra “transformar cada vez lo histórico en actualidad“, según la sentencia del I Ching, estamos en presencia de una doctrina nacional, de un aglutinador pensamiento singular, que es de aplicación en un espacio y en un tiempo definido y dinámico. No estaremos pensando ni obrando en abstracto y/o improvisadamente, sino accionando en un determinado espacio y en un determinado tiempo, en pos de fines deseados y queridos, interpretados por “la aplicación de ese saber” histórico –nuestra cultura-.
Una doctrina nacional se sitúa en un espacio, -en el espacio de la Patria-, entendida ésta como el hogar común de quienes están hermanados por una cultura, una tradición, un pasado histórico común. Quienes tienen Patria, tienen padres, tienen identidad. Comparten un origen histórico, un espacio y una forma específica de sentir y vivir: una tradición. Desde esos espacios, nos situaremos también en un tiempo. Desde “el saber histórico”, desde el pasado trascendente, vamos hacia el presente y el futuro, descifrando su clave, su naturaleza y su ritmo.
Entonces sí estaremos en presencia de una actualizada y dinámica doctrina nacional, de un pensamiento elaborado y sistematizado de posible aplicación y relacionado con un determinado, dinámico y singular espacio y tiempo. Sostenido por una cultura que irradia confianza, credibilidad.
Estaremos en presencia de “una realidad innovadora y expansiva” y en el ámbito de la ciencia y arte de la Política y de la Estrategia, por cuanto ambas como ciencias persiguen la verdad; ambas por su objeto transitan sobre los acontecimientos socio-políticos proyectados sobre el futuro. Y ambas como artes desarrollaran creativamente el espíritu del estadista, en pos de la Nación a lograr.
Queda así abierta la posibilidad del ejercicio creador –arquitectónico- de la Política y de la Estrategia, como puesta en acto de la transformación posible –apta, factible y aceptable- de las realidades actuales, con el trasfondo de la voluntad unificada de la Nación, en el complejo ámbito de la mundialización acelerada, para el logro de un futuro de grandeza y a fin de cumplir con los mandatos de los Padres Fundadores.
LOS TIEMPOS DE LA GLOBALIZACION PLANETARIA.
Queda claro que el pensamiento nacional –que hemos señalado como origen y núcleo de una doctrina nacional-, no debe ser considerado en forma abstracta, sino en un aquí y ahora, en relación con ésta compleja circunstancia de globalización planetaria, según el enunciado del tema que nos convoca.
La Globalización o Mundialización Planetaria, es hoy una situación insoslayable que nos abarca, condiciona y a veces nos determina. Es esa realidad comprobable que está omnipresente en el universo, como “única verdad”. En nuestro entender, es un efecto ineludible de la etapa de la civilización en la que ya vivimos y que, según diferentes autores, conocemos como posindustrial, hiper-industrial, tecnotrónica, de las comunicaciones, de la informática, de la cibernética, de la tercera ola, etc., etc., que está exigiendo y originando a la “sociedad del conocimiento”, condición -sine qua non- para ingresar con éxito al Siglo XXI.
Podríamos expresar, en consecuencia, que en la era antropozoica y en la edad contemporánea, hemos alcanzado a través de las culturas la etapa de la civilización posindustrial, o como quiera llamársele, que nos hace testigos privilegiados de un punto de inflexión hacia una nueva e insoslayable situación, hacia un nuevo estadio internacional estructural, cuyo efecto más notable es el de la actual globalización:
la transformación progresiva del mundo en una “aldea global” y
la aceleración constante del ritmo histórico.
Queda dicho, en otros términos, que son afectados en su naturaleza y dimensión factores básicos de la acción política y estratégica:
el espacio (hoy uno-global),
el tiempo (acelerado en su ritmo) y que un tercer factor,
el Poder, se construye actualmente desde la comunidad, desde su cultura, desarrollando su educación espiritual y adquiriendo las destrezas que exigen los nuevos medios en una masa crítica de la sociedad nacional/regional.
Los catalizadores que han impulsado a éste complejo fenómeno, provienen del ámbito de la Revolución Científico-Tecnológica: el ordenador o computadora, las telecomunicaciones, los vectores aeroespaciales, etc. La Ciencia y la Tecnología han desarrollado su propio impulso, retroalimentándose a escala geométrica. El efecto causado por este hecho en las ciencias sociales, ha sido de carácter “tectónico”, en términos de Lester Thurow. No afectó a los sistemas, sino a las estructuras.
En parte del mundo académico, el fenómeno quedó evidenciado. Surgió allí una perversa confusión conceptual, parálisis intelectual o perplejidad ideológica, manifestaciones claramente observables en las publicaciones de la última década del siglo XX y aun en los 2000.
LA GLOBALIZACION IMPERIAL.
En 1989/91 al implosionar la URSS, se quiebra en el ámbito político-estratégico la lógica imperial bipolar. Esta crisis geopolítica y aquella otra, la ya citada Revolución Científico-Tecnológica, -que da lugar a la Iniciativa de Defensa Estratégica-, se potenciaron mutuamente, creando un inédito Poder Imperial Global, un Unicato Multipolar corporizado por los Países Desarrollados Norte, que conforman el Grupo de los Siete / Ocho.
Este “Nuevo Orden Internacional” adopta el modelo de la Revolución de Filadelfia, triunfante en la Guerra Fría y acepta a un “primum inter pares”, EE.UU., en reconocimiento de su liderazgo estratégico indiscutido en la nueva etapa de la presente civilización, la de ” la Tercera Ola”, que lo consagra como el único poder nacional con capacidad de “proyección de fuerza”, hacia cualquier punto del Universo.
Este es el escenario emergente de la posguerra fría, signado por el “economicismo pragmático” de quienes imperan desde el Norte y cuya impronta es la no resuelta crisis del internacionalismo liberal triunfante. Anthony Lake, ex asesor del Presidente Clinton en temas de Seguridad, le ha llamado “wilsonianismo pragmático”, que pareciera acentuarse con Obama, en el 2009, bajo la presión abarcadora de la crisis financiera internacional, emergente en el 2008.
El liberalismo, en el ápice de su hegemonía universal, “no encontró aun el principio aplicable a la enorme variedad de conflictos a enfrentar…” Ha prohibido la guerra, impulsado el desarme o el control de armas, ha creado un sinnúmero de burocracias internacionales para la promoción y el sostenimiento de la Paz Internacional, pero no ha podido evitar los conflictos, aun entre Estados liberales, mientras éstos manifiesten y sostengan sus intereses nacionales.
En el debate íntimo, chocan los liberales cosmopolitas (Kant, Bentham, Wilson) con los liberales nacionales (Rousseau) y el resultado se traduce el llamado “caos desintegrador” político o institucional, mientras esos mismos actores se integran en bloques económicos regionales y/o continentales.
Frente al marxismo desacreditado y al realismo estratificado, el liberalismo está paralizado por su propia incongruencia ante una situación compleja y no resuelta, que Obama intenta superar con estrategias aparentemente idealistas, que producen vivas desconfianzas en antiguos aliados. Por el momento se duda si esta actitud “blanda”, es hija de la crisis financiera o de una ideología “progresista”. La complejidad de la guerra mundial contra el terrorismo global, a fines del 2009, tiene en Afganistán una prueba paradigmática para el nuevo gobierno demócrata que, junto a la actitud política frente a la situación interna de Honduras, constituyen indicativos clarificadores de las opciones “carterianas” que pareciera asumir hoy la superpotencia imperial.
Se llega siempre al “estado de guerra” que han planteado a lo largo de la historia Tucídides, Maquiavelo, Hobbes o Rousseau. La eficiencia económica no se armoniza con la seguridad estratégica. La globalización económica es un triunfo liberal obtenido a un alto costo, con consecuencias inesperadas y aun irresueltas.
Se ha reconocido la independencia de Croacia, Bosnia o Eritrea, pero no se lo hizo con Biafra o Chechenia, con los kurdos o tibetanos, legitimándose estas diferentes resoluciones con la apelación a las conveniencias económicas o para no “aumentar el caos” existente. El mercantilismo, que se inició y expandió con “el mare liberum” de Grocio, fue normado para el comercio. Actualmente, cuando debe incluirse en la internacionalización a la producción y la distribución, hay áreas que quedan fuera del control de los Estados.
El liberalismo, triunfante en el último medio siglo sobre los diversos totalitarismos socialistas, redujo el poder del Estado-Nación en favor de la esfera protegida de los derechos individuales, creando progresivamente otro poder, ANONIMO Y FORMIDABLE, fuera de los Estados, que afecta al concepto tradicional de soberanía estatal y que, por el momento, es solo considerado como una mera extensión de los derechos individuales.
Sin embargo, la euforia idealista inicial -Fukuyama- luego de la caída del muro de Berlín y hasta la llegada de la Guerra del Golfo, se ha transformado en el pesimismo de la violencia dispersa, de los conflictos de exclusión, de la amenaza de “los nuevos bárbaros” o de las polaridades indefinidas.
En los últimos años, ni republicanos ni demócratas han definido con claridad los intereses externos de los EE.UU., apareciendo una significativa grieta entre los ideales liberales y las políticas en acto del gobierno demócrata, en el período Clinton, siendo las de la actual administración un enorme interrogante. Ha llegado el momento de decidir la continuidad de la transición estructural iniciada por nosotros en los ’90 y de reflexionar acerca de los efectos públicos de ciertas actividades privadas y públicas fuera de control con posterioridad al caos decadente conducido por el “progresismo” de los últimos años. El caos institucional nos está llevando al “estado fallido”, santuario de las mafias ya presentes en Ibero América y en nuestro querido país.
EL NARCOTERRORISMO.
Ha llegado el momento, en la Región, de repensar al “Estado Residual” para rehabilitarlo como “Estado Necesario”. Debiera de ser esta una preocupación central de la Gran Política y del Derecho Político, una responsabilidad primaria de las dirigencias y materia obligada de quienes nos ocupamos de la Seguridad Nacional y de la Política de Defensa, hoy inexistentes. La guerra fría, como una guerra diferente, -la primera en ambiente nuclear- nos ha deparado una posguerra también distinta, con un inventario de riesgos y amenazas estratégicas sin antecedentes teóricos, que ponen en riesgo la enorme oportunidad que la misma crisis nos ha abierto.
Escuetamente, podemos enumerarlos así:
Desintegración o feudalización de Estados.
Presencia generalizada del crimen organizado internacional.
Conflictos étnicos.
Luchas facciosas, religiosas o políticas. Indigenismo radical. Fundamentalismos.
Fracaso de Estados-poscoloniales.
Terrorismo globalizado. Insurgencias.
Desecularización del Estado.
Refugiados y migraciones, con su corolario xenófobo.
Marginamiento estructural, estatal y social.
Aplicación distorsionada de los Derechos Humanos.
Agresión al medio ambiente.
Intervención selectiva, etc.
Los análisis superficiales, los planteos abstractos, las inclinaciones cuestionadoras e ideológicas y la permanente receta copiada, nos llevaron al error constante; éste a la decadencia y, en 1989 al estado de necesidad. Esta situación impuso el comienzo improvisado de una situación regresiva, irrazonable, conflictiva y sin salida. Permanecemos paralizados, detenidos en el tiempo, con la ansiedad que proporciona la escasa/nula claridad de los discursos electorales, en total incertidumbre cuando se trata de nuestro futuro. Esa es la razón de haber colocado a la cabeza de estos renglones las dos sentencias de la sabia y vieja cultura china. El pensamiento nacional tiene hoy un enorme desafío por delante: “preocuparse por el futuro, para no toparnos con la desgracia.”
LA SEGUNDA ARGENTINA EN TIEMPOS DE GLOBALIZACION PLANETARIA.
La Primera Argentina, (la Argentina Agropecuaria), pensada por la Generación del ’37 y llevada a los hechos por la Generación del ’80, tuvo un magnífico resultado económico y un gran fracaso socio-político. Luego de una prolongada guerra civil, logró modernizar el sistema económico, mantuvo estratificado el sistema político e ignoró al sistema social.
El propio éxito económico del ´80 y la naciente clase media, movilizaron a la “democracia incivilizada” de toda nuestra geografía, en pos de la modernización del sistema político: la participación. El desarrollo económico exigía desarrollo político. La cultura hispano-criolla-cristiana de la Proto-Argentina había sido avasallada por los copistas de ayer. Estos, desde la civilización mercantilista impusieron las instituciones de moda y desataron una guerra civil campal, contenida brevemente por la Revolución del ’80 y su consecuente Primera Argentina. Sin embargo, con otras formas, la guerra civil se reactivó a partir de la Revolución del ’90. En el Parque de Artillería, manzana hoy ocupada por los Tribunales, se inició el ciclo de los golpes de estado del siglo XX. El sistema político no logra establecerse. El cuestionamiento social sin propuestas políticas cubre al siglo XX. La Argentina queda envuelta en los ideologismos.
La guerra civil cambia de formas.
La participación llegará tardíamente, a fines de la Primera Guerra Mundial, sin re-dinamizar al éxito económico de Roca, sin ideas, manteniendo la inercia quejosa que legitimó su origen, pero vacía de arraigo y de proyección hacia el futuro. Ello le vale un relevo definitivo, un 17 de Octubre. Será la nueva sociedad de masas, consecuencia de la incipiente industrialización provocada por las guerras europeas, -la sustitución de importaciones-, la que llegará desde el interior profundo a las “orillas urbanas” e intentará darle continuidad a la modernización de los sistemas. Los elementos más cultos y menos civilizados, intentaran ingresar a la industrialización y a la urbanización ordenada. La clase media urbana se sintió agredida por el “aluvión zoológico”. La Gran Política quedó paralizada.
La clase media, que debió liderar esta nueva etapa, desertó de su responsabilidad histórica. Prefirió buscar el reemplazo del patriciado agrario o bien especuló, al amparo de las crisis sucesivas. El enfrentamiento social se hizo maniqueo y fue cabalgado por el conflicto hemisférico Este-Oeste, iniciado en 1947 -y en Ibero América a partir de la revolución cubana-, agravando la violencia de la guerra civil, que se hace revolucionaria, desquiciando al maltrecho y débil Estado Nacional.
En 1982, la Guerra del Atlántico Sur pone fin a la recurrencia de los “democratistas” a los golpes de estado cívico-militares, como alternativa a la no-aceptación de las “mayorías emergentes” o a la “falta de soluciones”, en las repetidas y cíclicas crisis del sistema político.
Emerge la Posibilidad de una Segunda Argentina.
Luego de las hiperinflaciones, la licuación de los partidos y las crisis institucionales, el electorado argentino enfrenta en los 2000 la responsabilidad de cambios estructurales insoslayables, exigidos por el entorno internacional y regional y el incuestionable agotamiento del proyecto de la Primera Argentina.
La Revolución del Parque y el 17 de Octubre, tienen su correlato histórico en la Gesta del Atlántico Sur. Los tres constituyen hitos históricos dentro de una decadencia centenaria, en lo que hace a la actualización funcional de los sistemas. Del mismo modo, la Generación del ’37, la del ’80 y la del 43 -Forja y el GOU-, tienen su correlato en la presente Generación Malvinas, que abarca a la juventud argentina menor de 45 años.
A diferencia de sus predecesoras, la Generación Malvinas tiene por delante algo más que adelantar el reloj de la historia y hacer congruentes a los sistemas de un país con constitución liberal, economía socialista y sociedad corporativa. El nivel de irracional decadencia alcanzado está comprendido por un proceso revolucionario neo-estalinista que, abarca a todo el sub-continente iberoamericano y una crisis financiera internacional.
En breve, la comunidad argentina deberá lograr restablecer el “Estado Necesario”, recuperar la República y las instituciones; restablecer la identidad a través de la educación y de la comunicación social. La cultura –identidad- es el firme soporte de la construcción de nuestro futuro. A éste lo imaginamos como el de una Segunda Argentina Posindustrial, designio central de la Gran Política, que por el momento no aparece. El Estado, en sus diferentes niveles, es el instrumento imprescindible para la acción constructiva de nuestro futuro y las instituciones, para ser tales, deben ser funcionales a la globalización planetaria que nos abarca.
En síntesis: debemos dentro de un corto lapso, recuperar nuestra identidad, establecer el escenario a lograr en el largo plazo y comprender a nuestra compleja circunstancia global. Estas son las bases imprescindibles para desarrollar un Pensamiento Nacional en Tiempos de Globalización Planetaria.
No ” limitarnos al saber histórico, sino transformar cada vez lo histórico en actualidad, mediante la aplicación de ese saber… “, sin olvidar, en momento alguno, que el procesohistórico está acelerado. El ritmo del tiempo ha cambiado.
PrisioneroEnArgentina.com
Noviembre 1, 2018
LA GUERRA MUNDIAL CONTRATERRORISTA GLOBAL. ¿HÍBRIDA… CON DERIVACIÓN QBN?
Grl. Heriberto J. Auel
Abril de 2015
La situación estratégica que nos envuelve.
La “modalidad” de la presente guerra mundial.
Nociones básicas acerca de la guerra híbrida -GH-.
La Revolución de los Asuntos Militares -RAM- y la GH.
Posición adoptada por países y organizaciones internacionales ante la conceptualización de la GH y la situación argentina.
La reorganización de las Fuerzas Terrestres -FFTT-.
El Hizballah y el paradigma de la GH.
¿Híbrida…con derivación nuclear?
La situación estratégica que nos envuelve.
A pesar de que la dirigencia política argentina lo ignore, o simule ignorarlo, los argentinos -como sociedad- estamos actualmente abarcados por una compleja e inédita guerra mundial que transita -en el 2015- su décimo cuarto año, en un continuo y progresivo agravamiento.
Pero además, esta misma dirigencia, en pleno proceso electoral “para cambiar el rumbo de la historia”, hasta hoy no ha dicho una sola palabra sobre los dos “estados de guerra” (1) -hoy presentes e incardinados- que son directa herencia de las recientes guerras que la nación sostuvo en la última mitad del siglo XX.
Unánimemente, estos conocidos líderes concluyen -con todo acierto-, que la preocupación central de la ciudadanía es la inseguridad nacional -que comprende la inseguridad pública y la indefensión estratégica- sin embargo, por las propuestas que nos hacen conocer, o ignoran irresponsablemente la naturaleza de la situación y de los conceptos más elementales de las preceptivas polemológicas y estratégicas que están en plena y acelerada evolución en los ambientes académicos, políticos y estratégicos del mundo desarrollado y en algunos países vecinos, o bien carecen de ideas, de soluciones.
Hechos recientes que han conmovido al país, directamente relacionados con la guerra mundial en acto -como lo es la muerte del Fiscal General Nisman- no han logrado romper el llamativo silencio de los candidatos, a pesar de que se encuentran en plena carrera electoral. ¿Cuál es la razón de éste silencio atronador? Es ignorancia, cobardía o compromiso asumido con quienes instalaron la política de derechos humanos unidireccionados. “De esto no se habla”.
Tanta irracionabilidad se debe -sin dudas- a causales muy profundas, que hunden sus raíces en nuestro pasado reciente. La Argentina ha debido enfrentar -a partir de 1959- una larga guerra civil revolucionaria, asimétrica, no convencional, ante una sorpresiva agresión estratégica internacional -en el marco de la guerra fría- que cabalgó antiguas crisis de arrastre, llevando a sectores sociales medios, fuertemente resentidos, al empleo de tácticas terroristas -impulsadas por el odio- de raíz ideológica.
Cuando ésta guerra muy-limitada aún no había finalizado, el RU plantó un señuelo en el Atlántico Sur que -nuevamente por sorpresa-, nos llevó a escalarla a una guerra breve, convencional, de carácter limitado, dentro del propio Hemisferio. (2)
Vivimos y somatizamos las consecuencias de ambas guerras, como posguerras no digeridas, no asimiladas y menos aun asumidas políticamente. Por ello se mantiene la ignorada ¿? situación de los “dos estados de guerra” que a partir de 1983 se incardinaron, empleando para ello las consecuencias del Decreto 158/83 y de la política de derechos humanos unidireccionados, ambos medios conducidos localmente -hasta hoy- por el anciano terrorista y agente británico Horacio Verbitsky. Es en éste punto donde las dos guerras recientes ingresan a una síntesis que dificulta la comprensión situacional, para los analistas estratégicos amateurs. (3)
En Iberoamérica la Argentina es el único país que recientemente ha reunido tan caras y dolorosas experiencias. Ambas nos han llevado a la actual decadencia generalizada. Con el cúmulo de tan caros conocimientos deberíamos haber logrado una reacción homóloga a la de Alemania o de Japón, luego de sus derrotas estratégicas en 1945. Pero el colapso del “Proceso” fue fatal para nuestro país. El “entrismo de izquierda” alcanzó -desde entonces- el poder y con todo sigilo nos ha llevado a una situación que se hace ya insostenible, bajo dirección del Foro de San Pablo, en las últimas etapas.
La difícil y compleja crisis que atraviesa el proceso pseudo-revolucionario subcontinental -por la grave situación que viven los países que lo impulsan- ya fuere en nuestra Patria como en la región, si bien abre una ventana de oportunidad para superarlo, también radicaliza a sus actores -abiertos o encubiertos- y ello amenaza con el regreso de la violencia. La oportunidad de los argentinos para el “cambio de rumbo” se da a fines del año en curso y ésta podría ser la última oportunidad para las presentes generaciones.
Si el soberano no toma conocimiento de las profundas causas de su decadencia y de los presentes riesgos y amenazas a la Seguridad Nacional, actualmente descontrolados, el “cambio de rumbo” se hará imposible. Hasta el presente, vamos en camino a la auto-destrucción, inconscientemente. Para tratar las causas de nuestra decadencia -que se ha acentuado en las últimas décadas- nos remitimos a la página web del IEEBA (4) y (5). Y para difundir la naturaleza y modalidad de los riesgos y amenazas a la Seguridad Nacional en curso, desarrollaremos los siguientes puntos.
La “modalidad” de la presente guerra mundial.
Terminada la posguerra fría -1991/2001- período caracterizado por diversas opciones estratégicas -“optimistas, pesimistas o realistas”- en el Norte desarrollado y una “gran confusión” en la dirigencia del Sur subdesarrollado, las teorizaciones cedieron paso a las nuevas modalidades de conflictos y guerras que proliferaron espontáneamente, en las más diversas regiones del orbe.
En el mundo desarrollado se reaccionó rápidamente y las “transformaciones” conceptuales y orgánicas continúan abiertas, en permanente debate y reorganización. En nuestra región iberoamericana, desde principios del nuevo siglo se reinició -con el ascenso del precio del crudo- el proceso revolucionario paralizado por la implosión soviética, que pasó a ser conducido por el Foro de San Pablo -que reúne a estalinistas y socialdemócratas-, en alianza estratégica con los epicentros de violencia del Gran Medio Oriente y Asia, vía Caracas.
Las modalidades con que se manifiesta esta guerra mundial cubre una amplísima gama de variantes, según los diferentes objetivos que se persiguen en diversas y distantes áreas en las que se desarrolla, compartiendo en cambio características generales y la conformación de los actores-directores complejos -“los enemigos sin rostro”- con los que se enfrenta hoy Occidente (6).
En nuestra querida Patria Argentina se vive de espaldas a esta conflictiva situación internacional. Carecemos -por Ley- de planeamiento estratégico, de inteligencia estratégica y además, de objetivos políticos. El cuasi-Estado remanente no cumple mínimamente con su primaria responsabilidad -su razón de ser- la Seguridad Nacional.
Ante ésta dramática escena, la dirigencia calla, de rodillas ante una “vaca sagrada”: la política de derechos humanos, conducida en el subcontinente por el Foro de San Pablo que reúne a las diversas vertientes del comunismo internacional.
A la vez la ciudadanía -el electorado- ya llamada a las urnas, carece de una mínima información referida a los riesgos y amenazas estratégicos presentes, envuelta en elaboradas falacias -más conocidas como “relatos”– mientras se avanza hacia el caos social y al Estado Fallido. Nuestro propósito es brindar, en éstas líneas, una información mínima al respecto, a pocos meses de las elecciones presidenciales.
Es el Soberano -el Pueblo- quien debe salvarse a sí mismo. Vivimos en una República y el “electorado es el mandante”.
Nociones básicas acerca de la GH (7) (8) (9).
Frente a la evidente superioridad militar convencional de Occidente -al comenzar el siglo XXI- su sorpresivo enemigo “no occidental” desarrolló formas de empleo de fuerzas orientadas a la explotación de sus “debilidades”, en particular las de carácter no militar, que apuntan fundamentalmente a los campos de la representación cognoscitiva y al tono moral de la población. Así lo hemos visto en las agresiones del Hizbollah en el 2006 y del Hamas, en el 2014.
Thomas Huber -historiador- describe en 1996 a éste nuevo fenómeno como el combate coordinado de fuerzas regulares -convencionales- con irregulares -no convencionales- y lo conceptualiza como “guerra compuesta”. Advierte que estas fuerzas, que actúan bajo mando unificado de modo coordinado y cohesionado, nunca lo hacen fusionadas en el combate y advierte que proporcionan ventajas no igualables por fuerzas convencionales que operen en soledad. Éste concepto nos recuerda a la “guerra de zapa” que instrumentó el Br Grl San Martín en la Campaña Libertadora, o bien las ideas expuestas por Clausewitz y K. Holsti, hace años, que comentamos en el año 2011 en un trabajo anterior y que citamos a continuación (10):
“Señala Raymond Aron, en “Pensar la Guerra”[1], que al final de sus días Clausewitz comenzó una revisión de su monumental obra[2], puesto que descubrió, en el plano del concepto, lo que jamás había comprobado en el campo de batalla. Ese descubrimiento giraba en torno a una modalidad de combate distinta a la que él había reducido abstractamente como “duelo”, es decir, el enfrentamiento por aniquilamiento entre dos ejércitos pertenecientes a sendos estados nacionales. El descubrimiento giraba en torno de lo que hoy se denomina “guerra asimétrica”. Quedaba sobrepasado el conflicto del “fuerte contra el fuerte” y emergía -con toda su crudeza- la posibilidad del enfrentamiento entre un fuerte (defensivo) y un débil (ofensivo)”.
[1] Aron Raymond. “PENSAR LA GUERRA”, Instituto de Publicaciones Navales, Buenos Aires, 1988.
2 V. Clausewitz C. “DE LA GUERRA”, Editorial Océano, Buenos Aires, 1958.
………………..
“Éste tipo de amenazas ha proliferado como consecuencia del desplome del sistema bipolar de la guerra fría y el ingreso a una nueva etapa de la civilización. Los combatientes de antiguos bandos revolucionarios han devenido en bandas criminales, equipadas con elementos de tecnología satelital que les permiten constituirse en nodo de una red mayor, en la que circulan las diversas actividades del nihilismo posmoderno: guerrilla, narcotráfico, tráfico de armas, guerra en la infosfera, contrabando, tráfico de órganos, tráfico de niños, esclavismo, secuestros extorsivos, tráfico de animales exóticos, tráfico de piedras preciosas, terrorismo islámico, etnicismo genocida, etc.”.
……………….
“El profesor emérito de la Universidad de Vancouver -Columbia Británica- Kalevi Holsti desarrolló la teoría de las guerras de la ´tercera clase’. La importancia de la misma no obsta para plantear una modificación del cuadro legal precedente, cuyas razones de validez no objetamos. Sin embargo, entendemos que el nuevo concepto de guerras de la ‘tercera especie´, amerita la apertura del marco de comprensión y el desarrollo de su conceptualización, búsqueda y descripción”.
Los Cnl(s) chinos Qiao Liang y Wang Xiangsui -en 1999- denominaron “guerra sin restricciones” al empleo lo más amplio posible de todos los medios para oponerse a un enemigo tecnológicamente superior. El gobierno de la nueva superpotencia los desautorizó, pero sin duda los Cnl (s) están cubriendo -por el momento- el actual desequilibrio estratégico chino, frente a eventuales desafíos.
Es en el año 2005 en que aparece por primera vez la denominación de GH, en un artículo de Mattis y Hoffman: “Future Warfare: The Rise of Hybrid Wars”. Conceptualizaban a ésta guerra como una “combinación de tecnologías y tácticas que permitieran obtener una ventaja sobre su adversario”. Esta combinación innovadora combina capacidades regulares e irregulares, en rápida transición, a los efectos de obtener resultados estratégicos. Para estos autores las “debilidades” y “vulnerabilidades” que evidenciaba Occidente, eran:
La alta sensibilidad de la opinión pública, en tiempos “pos heroicos”.
El eventual número de bajas civiles.
El alto costo de las operaciones militares.
El modo en que finalizaban las operaciones militares -victoria/derrota-.
Apoyándose en éstas debilidades y vulnerabilidades, los enemigos de Occidente -estatales o no estatales- diseñaron tácticas que permitieran eludir la superioridad tecnológica, permitiendo la paridad o aun la superación del más fuerte, explotando:
Poseer mayor número de población y territorio en el espacio donde se operaría.
Poseer una asimetría favorable en la importancia de los intereses, de los objetivos de guerra, en el nivel de “determinación” y “resolución”, en la voluntad ante los riesgos y en la entereza para soportar bajas.
A estas ventajas asimétricas hay que sumarle una determinante -que la dirigencia argentina no percibió ni percibe en nuestra guerra contrarrevolucionaria reciente- : la ausencia de restricciones políticas y culturales por parte del agresor.
Hoffman (11) -en el 2007- apuntó que la búsqueda de la oportunidad estratégica -en las guerras híbridas-, se aparta de los conceptos clausewitzianos tradicionales -la búsqueda de la decisión a través de un centro de gravedad- y contrariamente se busca hacer difuso al conflicto, sin darle relevancia al choque.
Lasica (12) -en el 2009- agrega que EEUU ha enfrentado a la GH con su tradicional principio “jominiano” de quebrar la voluntad de lucha del enemigo y así ha fracasado en Iraq y en Afganistán, como le ocurrió también a los israelíes frente al Hezbollah -2006- y el Hamas -2009 y 2013-.
Valensi y Brun (13) -en el 2010- teorizaron que -en el campo táctico- la GH integra a los siguientes componentes:
Capacidad de supervivencia de las fuerzas empeñadas, a través de:
Túneles, depósitos enterrados, posiciones pre-construidas.
Enmascaramiento y engaño.
Dispersión o reunión de fuerzas, en oportunidad.
Deliberada confusión entre instalaciones militares y civiles.
Llevar el combate a zonas pobladas de alta densidad, con alta presencia de medios de comunicación.
Amplia diversidad de armamento liviano -antipersonal, antitanque, antiaéreo, y cohetes tierra-tierra-.
Elementos operacionales especializados y terroristas suicidas.
Métodos imponderables de terrorismo y guerrilla.
Armas portátiles, sencillas, de bajo costo y alto rendimiento y penetración que sean:
De difícil localización y gran disponibilidad.
Que permitan gran número de bajas civiles y militares.
Explosivos de distintos tipos.
Atentados suicidas como componente central, con empleo calculado para condicionar el comportamiento político del enemigo, con gran repercusión mediática. Transmitir percepciones de fracaso.
Crear las narraciones -“relatos”- que favorezcan al más débil.
Empleo intensivo de los medios de comunicación para el esfuerzo de propaganda sobre el público local, el enemigo y el internacional, con la intención de socavar la legitimidad de las operaciones militares, modelar las agendas, entregar interpretaciones alternativas y minar la fortaleza moral del enemigo.
El público local deberá percibir que la acción armada le favorece, al igual que en las lejanas retaguardias del fuerte alcanzadas por las narraciones propias, del enemigo y de los independientes.
El nuevo “centro de gravedad” está en las percepciones desfavorables para el enemigo, que desmovilice su voluntad de vencer y en lograr la confianza del público propio.
Obligar a que el combate se desarrolle “en contacto”, intentando soslayar así las ventajas tecnológicas del enemigo.
Desarrollar tácticas activas y pasivas para atemperar la supremacía aérea del enemigo.
Fleming (14) -2011- define a ésta nueva modalidad de la guerra, así:
“Un actor de GH se caracteriza por tener un mando y control descentralizado, por realizar actividades militares y no militares distribuidas, por combinar acciones tradicionales, irregulares, terroristas y métodos criminales disruptivos, por explotar las condiciones ambientales operativas complejas y por operar con intención de sacrificio el tiempo y el espacio con el fin de lograr una decisión por desgaste”.
Según éste autor, los actores de la GH interrelacionan estrategia y táctica de manera asimétrica y sin restricciones, fuera de las costumbres militares y de los límites culturales, sin ataduras de ninguna especie como las que ha tenido la guerra convencional. El actor híbrido pretende abrumar al enemigo occidental sobre el terreno, con una variedad de imponderables que lleven a la derrota o a la retirada.
Estamos en presencia de un retroceso acelerado y brutal hacia la barbarie, que la civilización moderna y contemporánea ya había superado. Éste cambio de paradigma del nuevo enemigo posguerra fría, encuentra a los argentinos estratificados en el pasado y con la política de derechos humanos como “cepo” que impide mirar hacia el futuro.
He allí la causa central de la inseguridad e indefensión nacional que padecemos.
La Revolución de los Asuntos Militares -RAM- y la GH (6).
En varios artículos publicados por nuestro Instituto (3) hemos citado y descripto a la RAM. Nuestro propósito, en éste punto, es relacionarla con la GH.
Es muy conocida una antigua expresión que dice: “políticos y militares se preparan siempre para la guerra que pasó”. Es así. Existe una natural tendencia a permanecer en el “statu quo” establecido. A ella la conocemos como el “quedantismo”, frente al “reformismo”. Los reformistas que no tengan en cuenta las fuerzas inerciales que sostienen que “todo está bien”, se encontrarán con el fracaso de su intento.
Ahora bien, en los tiempos que corren -en las últimas cinco o seis décadas- la necesidad de evolucionar se ha acelerado, pues la civilización del conocimiento así lo exige. Esa evolución es una necesidad de continua y abierta adaptación de las organizaciones a los cambios de “la naturaleza de las cosas” y a los cambios situacionales posguerra fría:
emergió la primera globalización planetaria -1989/1991-,
se inició el movimiento tectónico que provoca los cambios geopolíticos -un nuevo mapa político y estratégico mundial- aun no consolidado, y
se aceleró y generalizó el ingreso de numerosos actores internacionales a la civilización posindustrial -la etapa de la civilización del conocimiento-. Surgía una nueva forma de producir y una nueva forma de hacer la guerra. La situación se hizo compleja.
Como respuesta a los cambios citados, surgió la RAM, dando lugar a la innovación tecnológica, organizativa y doctrinal. Inicialmente se dio lugar a la innovación tecnológica, pero la aparición de la insurgencia luego de operaciones convencionales exitosas -tal el caso de las guerras de Iraq- demostró que ésta era insuficiente. Se hizo necesaria la innovación organizativa y doctrinal. Estos pasos han sido sucesivos y tomaron el nombre de Reforma Integral -RI- y es cuando los estrategas teóricos introducen el neologismo GH.
Los citados autores, Hoffman y Huber, tienen diferencias en la conceptualización de “guerra compuesta” y GH. El primero plantea que es “compuesta” cuando las fuerzas convencionales y las no convencionales actúan por separado, -estas últimas desgastan y las convencionales explotan esa situación- y que es “híbrida” cuando operan como una sola fuerza que ejecuta operaciones regulares e irregulares. Ambos coinciden en el potencial que tiene la combinación de las dos modalidades en las futuras guerras.
En conclusión, los diferentes enfoques que hemos citado más arriba acerca del concepto de GH nos permiten expresar que éste queda comprendido por el término más amplio de “guerra irregular”, que abarca al accionar no convencional y/o asimétrico.
Posición adoptada por países y organizaciones internacionales ante la conceptualización de la GH y la situación argentina.
EEUU. Es el país donde se origina y se debate con mayor intensidad la expresión GH. Obviamente, la superpotencia militar orienta teóricamente a los aliados occidentales. Fleming, en el 2011, apunta que la expresión no es aun empleada oficialmente por el Departamento de Defensa, pero que la noción híbrida surge en los documentos de planificación estratégica, reconociendo la mayor complejidad operativa, pero no el nuevo concepto, lo que podría frenar el dinamismo de las doctrinas combinadas.
Hay un reconocimiento -en la comunidad militar estadounidense- de la necesidad de organizaciones más flexibles y adaptables, pero pareciera que intelectualmente están estancados frente a las amenazas híbridas. Así es que la Oficina de Responsabilidad Gubernamental ha informado en Septiembre de 2010:
Que el Dto. de Defensa no ha definido al término “hybrid warfare”, por no considerarlo una nueva forma de hacer la guerra.
Que el término “hybrid conflict” incluye todos los elementos de las “full spectrum operations”. En consecuencia, definir lo “hibrido” hace correr el riesgo de omitir elementos claves o desconocidos.
Que el término “híbrido” describe mayor complejidad -que exige respuestas adaptativas y flexibles- pero no se corresponde a una nueva clase de guerra.
Que se reconoce la proliferación del término, pero no existe aún una definición formal del mismo.
Que en lugar del término “híbrido” -o además de éste- se emplea normalmente el de “full spectrum operations”.
Que aunque el término aparece en documentos de planeamiento estratégico, éste no se ha incluido en la doctrina.
En conclusión, la comunidad militar de la superpotencia tiene dudas y una respuesta ambigua a las presentes condiciones de los nuevos teatros de operaciones. Sin duda que esta actitud exige profundizar -sin demora- los análisis de las nuevas situaciones que ya están planteadas.
La OTAN. El último concepto estratégico aprobado por los Jefes de Estado de la Organización, en el año 2010, dice:
“El compromiso de la OTAN es el de disuadir y defenderse de cualquier amenaza de agresión y de los desafíos de seguridad emergentes cuando estos supongan una amenaza a la seguridad fundamental de los aliados, individualmente o de la Alianza en su conjunto”.
La expresión “cualquier amenaza” abarca al extremismo ideológico, al terrorismo, a las actividades ilícitas transnacionales, al tráfico de armas, de narcóticos y de personas, a los ataques cibernéticos y a otras amenazas tecnológicas y ambientales. (Es oportuno aclarar que la legislación argentina establece que estas reales amenazas estratégicas son meros delitos comunes, bajo responsabilidad policial). El concepto estratégico de la OTAN -aprobado en el año 2010- es indudablemente genérico e incompleto. Pero es lo que admite una alianza tan numerosa y diferenciada como es la OTAN.
En conclusión: la OTAN reconoce la necesidad de reorganizar sus instrumentos militares para enfrentar los nuevos desafíos, pero ante la improbabilidad de un acuerdo político, retiene activa a la RI y continúa estudiando la evolución de la guerra, que exige incorporar elementos civiles en el planeamiento militar y ello aun no ha sido totalmente solucionado.
La reorganización de las Fuerzas Terrestres -FFTT-.
Estos conceptos “híbridos”, que aun no han sido incorporados como doctrina por los países centrales -aunque se los reconoce como válidos- están desarrollando nuevas organizaciones experimentales que probablemente se incorporarán a las operaciones en el corto plazo, ante la complejidad de las situaciones que se están presentando en el Gran Medio Oriente y en África.
La paradójica lógica de la guerra -“si quieres la Paz, prevé la guerra”- exige, desde tiempos de paz, pasando por las crisis, los conflictos armados y las guerras internas o internacionales, estar preparados para enfrentar el amplio espectro del conflicto que nos presenta el amanecer del siglo XXI. Ello exige establecer los efectos sinérgicos a afrontar, para accionar coordinadamente en las acciones simétricas y asimétricas. La caracterización orgánica central de las FFTT será su flexibilidad y adaptabilidad a las amenazas cambiantes. La responsabilidad conceptual, recaerá en los niveles político-estratégicos: poder ejecutivo, EMCFFAA y los Cdo(s) de Áreas Estratégicas.
El desafío que se plantea a los planificadores es la de lograr la combinación equilibrada -en el campo táctico- de armas de gran poder de destrucción a distancia, con elementos tradicionales y medios de comunicación para operaciones sicológicas incardinadas con los niveles superiores. En el nivel de las organizaciones tácticas, será fundamental la integración -a nivel Batallón y superiores- de:
Elementos de operaciones especiales,
Sistemas de armas de alto poder destructivo,
Elementos especializados de Inteligencia -con acceso satelital-,
Elementos de comunicación en red con los escalones superiores,
Medios de operaciones sicológicas, y
Elementos de comunicación local.
El Hizballah y el paradigma de la GH.
Un poco de historia: El Hizballah -Partido de Dios- nació en 1982., como escisión de las milicias chiitas de Amal. Desde su origen se ha mantenido en guerra con Israel. En 1989 se firmaron en Taif -Arabia Saudita- los acuerdos de paz de la guerra civil libanesa, que permitieron al Hizballah el derecho de permanecer armado.
Desde entonces se mantuvo en guerra -con apoyo iraní- con las fuerzas israelíes que ocupaban el Sur del Líbano. A lo largo de los años 90 su rendimiento operacional fue mejorando dadas las reformas orgánicas y tácticas que impuso la conducción del líder Hassan Nasralah. Se abandonaron las inmolaciones, dando paso a tácticas cada vez más elaboradas.
A fines de los ‘90 Israel se retira -unilateralmente- del Sur del Líbano. A partir de entonces la frontera fue el escenario de las actividades violentas de esta organización, frente a las FDI -Fuerzas de Defensa de Israel-. El objetivo de Nasralah era el de superar la imagen de una mera milicia guerrillera y erigirse en un movimiento de resistencia nacional libanesa, bajo el lema “Pueblo, Ejército y Resistencia”.
Guerra de 2006: El 12 Jul 06, un destacamento del Hizballah ingresó a territorio israelí y emboscó a una patrulla de las FDI. -Técnicamente éste es un “incidente provocado”, como lo fue el del “Endurance” frente a los chatarreros de Davidoff, en Gritviken, en 1982-. Como consecuencia de esta acción murieron tres soldados israelíes y fueron “secuestrados” otros dos. Israel reaccionó con un ataque aéreo a todo el territorio libanés, entendiendo que ello forzaría al gobierno de Beirut a desarmar al Hizballah. Se había iniciado así un escalamiento hacia lo se conoce como la “Guerra de los Treinta y tres Días”.
Los blancos de la Fuerza Aérea fueron los depósitos de cohetes de la organización y aquellos de mayor importancia que llevaran a la retirada del Hizballah del Sur del Líbano. El efecto de estos ataques aéreos fue inverso. Las bajas civiles y la destrucción de la infraestructura del país impulsaron el rechazo de los libaneses, apoyados por la comunidad internacional.
Tras éste fracaso, el FDI reocupó el Sur del Líbano y también fracasó, provocando la admiración de los observadores militares acostumbrados a los resonantes éxitos israelíes en operaciones de contrainsurgencia en Gaza y Cisjordania.
La Resolución 1701 del CS de la ONU, logró el alto el fuego. El consenso de la comunidad militar, acerca de la eventual derrota israelí, entendió que su factor principal fue el de confiar la victoria a la primacía del poder aéreo, a expensas de la maniobra terrestre, con el fin de ahorrar vidas. El Hizballah sorprendió con una evolución inesperada en sus tácticas y con la adquisición de nuevas tecnologías. De una fuerza guerrillera pasó -en pocos años- a una cuasi-convencional. Estudió las tácticas del enemigo y descubrió sus limitaciones. Adaptó su comando, su control, la organización del terreno y los procedimientos de combate, para aceptar el combate aéreo y terrestre.
El Hizballah desarrolló nuevas tácticas defensivas -para retener sus ciudades- y ofensivas -contra los blindados incursores, lanzamiento de cohetes y operaciones con tropas especiales en la profundidad del territorio israelí-. Llama la atención la forma en se preparó -durante años- el terreno donde se operaría. Construyeron una amplia red de refugios subterráneos y depósitos de munición. Bloquearon la aproximación del enemigo en las avenidas principales de manera de dispersar a los mecanizados y esperarlos en “zonas de muerte”, demorando el avance mientras se ganaba tiempo para el empleo de los cohetes de largo, mediano y corto alcance, coordinado con las incursiones de las tropas especiales. Todo esto fue posible por la especial capacitación de comando y control de las fracciones tácticas, a nivel compañía.
Así fue como el Hizballah se erigió en el paradigma de la GH. Lo hizo explotando vulnerabilidades del enemigo, combinando acertadamente procedimientos convencionales con los no convencionales -sin limitaciones- y realizando una eficaz acción psicológica sobre la población enemiga y propia.
Sorprendieron con las innovaciones tecnológicas logradas en armamento antitanque, drones y guerra electrónica. Las operaciones fueron seguidas en el mundo entero por televisión, en tiempo real. Los efectos logrados fueron:
El apoyo de la población libanesa al Hizballah.
El alto rendimiento mediático de los limitados éxitos tácticos. Minaban la moral israelí y levantaban el prestigio interno e internacional de la Organización.
Con éxitos tácticos limitados y bajas superiores a las del enemigo, el Hizballah lograba un éxito estratégico y político significativo con una alta sensación de victoria.
Aun cuando las fuerzas israelíes no hayan sido derrotadas, es claro que no lograron ninguno de los objetivos que se le había impuesto. Contrariamente, la Organización se posicionó frente a la población libanesa como una fuerza de disuasión efectiva frente a Israel. Si bien no prevalecieron, negaron la consecución de los objetivos al enemigo y optimizaron el apoyo de la propia población. El Hamas, en el pasado verano del 2014, replicó -dentro de las limitaciones de espacio del área de Gaza- el modelo empleado en la “guerra de los treinta y tres días” por el Hisballah.
En conclusión:
El actual enemigo de Occidente ha desarrollado un tipo de guerra que explota sus vulnerabilidades, particularmente el relativismo moral de su población y las inercias del pensamiento militar.
El término GH acuñado por Mattis y Hoffman en el 2005 está hoy en pleno debate en la comunidad académica especializada. En general se acepta como concepto de GH, el siguiente: “GH es aquella que emplea los medios simétricos y asimétricos coordinados en tiempo, espacio y propósitos, para alcanzar un objetivo final, uniendo los niveles de conducción estratégico, operacional y táctico”.
Quien emplea la GH lo hace de modo asimétrico y sin restricciones. En el nivel táctico emplea operaciones independientes y simultáneas -regulares e irregulares- coordinadas en tiempo, espacio y objetivos, con operaciones del nivel superior que se orientan a la cultura del enemigo y desafían a las normas de la guerra convencional.
La gran superioridad militar convencional de Occidente llevó a éste nuevo enemigo innominado a cambios que parecieran una contra-RAM. Si empíricamente se confirmara dicha doctrina, Occidente deberá asumir severos cambios políticos, sociales y militares, para enfrentar a ésta guerra en su azarosa evolución. Y éstos aspectos son sumamente importantes.
El Departamento de Defensa de los EEUU oficialmente no reconoce aun la existencia de una GH, pues entiende que sus FFAA están en aptitud de enfrentar los retos presentes. Pero sus pensadores y planificadores siguen profundizando su análisis, permanentemente, ante el incremento de actores armados no estatales frente a las FFAA convencionales.
La OTAN ha estudiado a la GH y reconoce su existencia, pero dada su complejidad en la toma de decisiones ha preferido recurrir a la RI – experimentada parcialmente en Afganistán- que incorporó al elemento civil en el planeamiento y en el comando de las operaciones.
En la Argentina hay una total despreocupación por los temas que hacen a la Seguridad Nacional. Las leyes que rigen fueron votadas en tiempos de la guerra fría, hace casi tres décadas. La reglamentación de la Ley de Defensa llegó quince años después de su promulgación, para profundizar sus gravísimos desconceptos. El país somatiza la directa consecuencia de dichas leyes perversas, con un estado de inseguridad e indefensión que es, en el 2015, la preocupación central de la población. El número de muertos -en las últimas tres décadas- sigue en continuo ascenso. La dirigencia nacional carece del coraje cívico necesario para enfrentar la “política de derechos humanos”, en manos comunistas, empleada con éxito como instrumento de retención del poder. La mencionada legislación de inseguridad, es garantía de la continuidad de la citada “política”.
En los países centrales de Occidente hay cierta resistencia al reconocimiento del riesgo estratégico creado por la GH. Sin embargo la RAM y la RI apuntan a innovaciones -que aun no se han cerrado- en la dirección correcta. En el corto plazo veremos que continuarán las reorganizaciones, allí donde hay responsabilidad y conocimientos. En nuestra Argentina, en un año electoral, no existe ningún indicio de reacción acertada. Abundan las palabras huecas de los diletantes, que encubren así sus carencias intelectuales específicas. No hay conciencia en la sociedad que actual guerra mundial está también globalizada.
Nuestro país carece de la más mínima “política comunicacional para la Defensa”. Sin embargo -ante un cambio de orientación política a fines del 2015- sería indispensable que el nuevo gobierno se concientizase y concientizara a la opinión pública acerca de la complejidad de los conflictos que tenemos ya presentes y por delante, en el corto plazo. “La mejor defensa de la ciudad no está en las piedras de sus murallas, sino en cada uno de sus habitantes”.
Recientemente hemos visto la adaptación al siglo XXI –en Estados seculares– de la “maskirovca” soviética (15) en Crimea y Ucrania. Hubo allí una combinación de operaciones encubiertas, apoyo a grupos locales, empleo de contratistas militares privados, criminales y fuerzas regulares operando coordinadamente y una maquinaria propagandística masiva…que llegó a insinuar el empleo nuclear; pero este es el tema del próximo punto. Cerraremos el punto VII con una expresión muy acertada del Dr. Pedro Sánchez Herráez (16):
“Pero la guerra no enfrenta solo fuerzas militares; enfrenta las voluntades de grupos humanos y, si bien, con todos los matices que se quieran señalar, vivimos en una era de relativa paz, la GH no es una nueva guerra…es la guerra de nuevo”.
¿Híbrida…con derivación nuclear?
Durante la guerra fría funcionó la mutua destrucción asegurada. Es decir, el poder nuclear retuvo la mutua disuasión y su consecuencia fue la “Pax del Terror Nuclear”. Ello no fue óbice para que la probabilidad del empleo táctico nuclear se abandonara totalmente. La duda -en su momento- acerca del compromiso americano para defender a Europa frente a una embestida soviética, con empleo nuclear sobre Alemania, llevó a De Gaulle a crear su propio arsenal nuclear y a salir de la OTAN.
Terminada la guerra fría el arsenal nuclear parecía perder la probabilidad de empleo, pero la situación reciente en el cambio de gobierno de Ucrania, con la intervención de la OTAN, pareciera que despertó el ancestral sentimiento de inseguridad fronteriza de los rusos y con él, dada la situación de deterioro de sus fuerzas terrestres, la posibilidad-probabilidad de recurrir a su potencial nuclear.
Como lo expresamos en el punto VII., a lo largo de nuestro verano austral hemos observado -con alguna sorpresa- que una variante de la GH se estaba desarrollando entre estados seculares, en la frontera este de Ucrania y en Crimea. El recurso de volver a recordar la existencia del arsenal nuclear ¿fue una reacción rusa por impotencia?; ¿desde la GH, se deslizará Rusia a la posibilidad de empleo nuclear? Hasta ahora a esa probabilidad se le asignaba solamente a la irresponsable e ilimitada acción del terrorismo no estatal, pero el discurso de algunos altos funcionarios rusos y estadounidenses -entre otros los que citaremos a continuación- indican una ampliación de las probabilidades supuestas (15):
“…Un funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores ruso recordó al mundo este hecho, en un comentario a la salida de los medios de comunicación rusa Interfax. Al hacer referencia al derecho de Moscú para desplegar armas nucleares en Crimea, Mijail Ulianov, Jefe del Departamento del Ministerio de Control de Armas, dijo: ´Yo no sé si hay armas nucleares allí ahora. Yo no sé nada de ningún plan, pero, en principio, Rusia puede hacerlo’”.
Contemporáneamente, en EEUU el Almirante William Gortney, Comandante del Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte -NORAD-, advirtió al Congreso -en un testimonio escrito- acerca de la amenaza planteada por los bombarderos y misiles rusos:
“…los bombarderos pesados rusos sobrevolaron patrullando más veces fuera del área en el 2014, que en cualquier otro año, desde la Guerra Fría. También hemos sido testigos de una mejor interoperabilidad rusa entre la aviación de largo alcance y otros elementos de las fuerzas armadas, incluyendo las aéreas y marítimas, todas ellas plataformas de recolección de información de inteligencia posicionadas para monitorear las respuestas del NORAD”[3].
“…Rusia está avanzando hacia su objetivo de despliegue de largo alcance de misiles de crucero convencionalmente armados, con mayores distancias de lanzamiento para mantener alejados[4] del peligro a sus bombarderos pesados, submarinos y fuerzas de superficie. Si estas tendencias continúan, con el tiempo NORAD se enfrenta a un mayor riesgo en nuestra capacidad para defender el norte de Estados Unidos contra una incursión aérea o marítima rusa y las amenazas de sus misiles de crucero.”
NORADes elacrónimo de North American Aerospace Defense Command. (Mando Norteamericano de Defensa Aeroespacial). Se trata de una organización conjunta de los EEUU y Canadá, que provee la defensa y control aéreo a toda Norteamérica. Se inició en 1958 bajo el nombre de “Mando Norteamericano de Defensa Aérea” (North American Air Defense Command). Desde 1963 la principal instalación del NORAD está en el Estado de Colorado. Mientras que los términos “NORAD” y “Cheyenne Mountain” son usados indistintamente en el lenguaje común, lo cierto es que NORAD es el nombre de la unidad, mientras que Cheyenne Mountain se refiere a las instalaciones del cuartel general.
4. Stand-off, en el original.
Éste deslizamiento ruso en dirección a la amenaza nuclear, es una clara manifestación de la hipersensibilidad de Moscú por la aproximación de la OTAN a Ucrania, luego de la caída de su gobierno pro-ruso. La OTAN se acerca peligrosamente a la frontera de la “Madre Patria Rusa” y los dramáticos recuerdos de Napoleón incendiando Moscú, antes de su dolorosa retirada, o de los blindados de Hitler detenidos por el “General Invierno” a treinta Kms de Moscú, están presentes hoy en el Kremlin.
En tiempos del presidente Clinton Rusia se había incorporado al G7 y así emergió el G8. Un veedor ruso fue invitado a participar en ciertas reuniones de la OTAN en Bruselas. Pero aquellos días han quedado atrás. El presidente Putin no concurrió recientemente a una serie de reuniones internacionales y el aire helado de la estepa llegó a Europa, enfriando las relaciones mutuas por la torpe audacia del avance Occidental hacia el Este. Y esto acontecía en tiempos del agravamiento de los combates del nuevo Estado Islámico -EI- en las fronteras de Siria, Irak e Irán, donde se sabía de la existencia de una solapada e inentendible logística que provenía desde Turquía, país que revista en la organización atlántica. De ésta manera, ante la posibilidad-probable de que el primitivo fundamentalismo que inspira al terrorismo global adquiriera -y eventualmente empleara en un futuro no muy lejano- “bombas y/o minas sucias”, en combinación con acciones típicas de la GH, se ha agregado últimamente la posibilidad-probable del regreso a la amenaza nuclear entre estados seculares, en un reverdecer de lo que el periodismo llama -sin acierto- una “nueva guerra fría”.
La UE, núcleo originante del Occidente Cristiano, está viviendo una profunda y prolongada crisis, en el ámbito de su cultura. Frente al fundamentalismo islamista y al crimen organizado, somatiza su relativismo identitario, su débil y contractivo sentido de pertenencia y retiene sus aspiraciones hedonísticas. Ésta situación la lleva a cometer graves errores de percepción, en un momento en que Washington se ocupa demasiado de sí mismo y abandona el cumplimiento de sus deberes para con el Imperio Occidental.
Putin, que sufre la actual caída del precio del barril de crudo, ha redoblado su firmeza y se está dirigiendo con palabras muy severas a sus pares occidentales.
Con conocimiento de éste cuadro estratégico propio e internacional -altamente riesgoso- nuestra Argentina –a nivel político dirigencial– ha optado por ignorar nuestros dos “estados de guerra” vigentes -como herencia del siglo pasado-, se ha desarmado unilateralmente y carece de las mínimas previsiones conceptuales, disuasivas u orgánicas, en el ámbito de la guerra mundial que se presenta -en la región- como narcoterrorismo, en acelerada expansión nacional y regional. En un breve lapso -el gobierno- está dando decididos pasos para abandonar su adscripción cultural -naturalmente occidental- para llegar, en muletas, al final del año 2015. Esto es grave y traerá grandes problemas en el futuro inmediato.
Un rígido muro de contención impide el resurgimiento del coraje cívico de los criollos de otros tiempos. Es una “vaca sagrada”: la política de derechos humanos, en manos de los veteranos terroristas domésticos y de interesados y numerosos idiotas útiles, más jóvenes.
La mano tendida a los Castro por Obama -en la presente situación regional- se constituye en un fuerte aliciente para la pseudo-revolución neo marxista iberoamericana. Estaremos atentos al documento de su próximo “Encuentro” en el 2016.
CITAS:
Entrevista al General HERIBERTO JUSTO AUEL.
El General Heriberto J. Auel despertó -en principio- curiosidad en mí luego de un mini-debate en un programa de Marcelo Longobardi, cuyo contrincante fue Eduardo Aliverti. Mi impresión fue la de haber sido testigo, incluso desde mi posición neutral en ese entonces (Sin admitir, claro, que haya dejado de serlo)- una conversación adulta. Tiempo después, el 21 de marzo del año 2014, fui testigo de una “Master Class”. en donde el General Auel desplegó su artillería de conocimientos frente a un Ttribunal Criminal Oral Federal Nº1, que proseguía firme en su caza de brujas (Agentes del Estado, que actuaron o no contra el terrorismo de los años 70s)
PrisioneroEnArgentina.com: ¿Cuáles son las contradicciones económicas y políticas elementales en las que caen los procesos populistas en tanto en Argentina como en América Latina? ¿Cuáles son sus tendencias o posibles horizontes? ¿Qué errores está cometiendo el actual gobierno del Ingeniero Macri que lo diferencia o lo une a la administración anterior?
Heriberto J. Auel: Desde mi humilde punto de vista, lo que se designa como “populismo” en Iberoamérica, es en realidad la revolución marxista que se inició en 1959, con conducción unificada y claros objetivos que se mantienen a través de las décadas con un plan de largo plazo que se adapta periódicamente a la evolución de la situación internacional, avanzando sin plazos, mientras los Estados reaccionan de diversos modos, improvisada y aisladamente. Por lo tanto las “contradicciones” que se observan son directa consecuencia del choque de la revolución con nuestra cultura identitaria. La revolución avanza, paso a paso, logrando un proceso de transculturación que ha adoptado el nombre de “progresismo”, imperceptible y sigiloso, para cumplir el mandato gramsciano de “lograr que las clases medias alcancen el comunismo, sin darse cuenta”. Éste proceso es discontinuo. Por ello hay transiciones, cada vez más breves en las que la agresión revolucionaria opera con estrategias de desgaste –fabianas- buscando la ingobernabilidad. Hoy las estamos viviendo en la Argentina, en el tímido pasaje -transición- de una etapa socialista/estatizante, a una liberal/de mercado. El mal uso de los términos construye las falacias -relatos- y confunde a dirigencias con escasa formación política y altamente ideologizadas. ES ÉSTA “CONTRADICCIÓN” LA QUE ORIGINA Y PROFUNDIZA A LA POCO EXLICADA “GRIETA”.
PEA: ¿Hay material humano para desarrollar un debate en el ambiente geopolítico?
HJA: Hay algunas -escasas- personalidades en el ambiente académico capaces de desarrollar conceptos geopolíticos innovadores, pero no se las encuentra en el ámbito de la acción política. Hay historiadores de la Geopolítica, pero escasean los geopolíticos generacionales.
PEA: En los primeros tres años de actuación, no se ve en el mandato de Mauricio Macri -al menos en el área de justicia- los cambios prometidos. ¿Ronzenkratz es el puntapié inicial o simplemente maquillaje para la continuación de Lorenzetti?
HJA: Gobierna una coalición. Algunos de sus componentes principales, hasta pocos días antes de las elecciones de Dic 15 decían: “mi límite es Macri”. Éste sector social-demócrata ocupa hoy ministerios centrales e impide “ciertos cambios”, que esperamos y no llegan, para terminar con el “curro de los DDHH”. El nuevo presidente de la Corte fue un distinguido discípulo de Carlos Nino. Este antecedente indica más una continuación que un cambio. La coalición electoral sirvió para ganar las elecciones, pero tiene grandes dificultades como coalición de gobierno. La crisis cambiaria y en particular la del aborto, las puso en superficie. El “progresismo” es transversal y abarca de ese modo a todo el espectro socio-político.
PEA: En otras oportunidades le consultamos sobre ese líder que guíe los destinos de la República Argentina. Su respuesta siempre fue negativa. ¿Se ve hoy en el ambiente una figura representativa, ese estratega que otros no ven?
HJA: Las crisis traen en sus pliegues la salida de las mismas, pero hasta hoy no se observan líderes alternativos. Los partidos carecen de cohesión doctrinaria y de líderes reconocidos por una mayoría.
PEA: En los últimos años se ha visto -mientras muchos arqueamos las cejas- ciertos comportamientos extraños por parte de gente de las Fuerzas Armadas que parecen deshonestos. Me gustaría que describiera la posición de alguno de ellos. Al pasar, menciono a Roberto Bendini, Hugo Domingo Bruera, Martín Balza, Gerardo Santos Milani…
HJA: Si la “política ha decidido no tener FFAA” -como alguna vez lo he afirmado-, necesariamente los nombramientos recaen en hombres que puedan ayudar a ese designio. Hoy las cosas han cambiado. Los hombres al mando en Ejército, tienen las condiciones personales necesarias para reconstruir a la Institución. Tengo esperanzas. El tiempo y las circunstancias ayudan.
PEA: Yo creo que fue un slogan de campaña, tal vez manufacturado por Jaime Duran Barba, y también considero que la frase fue un abstracto. ¿Qué interpretación tuvo en su momento y cuál es hoy su idea sobre la -ahora- tristemente célebre frase del candidato Mauricio Macri “Conmigo se van a acabar los curros de los derechos humanos…”?
HJA: En parte, he respondido a esta pregunta más arriba. Dentro de la coalición gobernante no hay acuerdo sobre el tema. Es más, algunos de los que son parte del gobierno son los fundadores del “curro” y actualmente, siendo parte de “Cambiemos”, están creando una alianza electoral “progresista” para participar electoralmente en el 2019. La corrupción no es solo económica.
Fabian Kussman
PrisioneroEnArgentina.com
Septiembre 24, 2018
LA ÉTICA PROFESIONAL MILITAR . Actualizado
Por
Grl Heriberto Justo Auel
LA CIRCUNSTANCIA ACTUAL INVITA A REFLEXIONAR SOBRE ÉSTE TEMA.
LA NATURALEZA DE LAS COSAS.
¿PORQUÉ NECESITAMOS DETENERNOS HOY EN LA ÉTICA PROFESIONAL MILITAR?
LA CIRCUNSTANCIA ACTUAL INVITA A REFLEXIONAR SOBRE ÉSTE TEMA.
Preliminarmente pretendo plantear la importancia de dar tratamiento al tema enunciado. Es importante pues la crisis de arrastre que nos ha llevado a la actual decadencia, como Nación y Estado, es de origen cultural y político y la circunstancia es oportuna, toda vez que estamos -según promesas oficiales- en las acciones preliminares de la recuperación del núcleo duro del Estado Nación: las FFAA. (1)
A las generaciones de Oficiales de las FFAA argentinas que egresamos en la década 1950/1960 nos tocó vivir, mientras revistábamos en actividad, las crisis socio-políticas más graves del siglo XX que culminaron con las guerras posnucleares -limitada y muy limitada- que hoy, en sus posguerras, retienen a nuestra querida Patria Argentina -mientras nos empeñamos en un nuevo y arduo intento de resurgimiento- en doble “estado de guerra” (2) (3) y en plena inseguridad pública y estratégica, que somatizamos diariamente a través de una fuerte ansiedad colectiva frente al futuro, aun en el de corto plazo.
Las guerras -en la Historia Universal- son anteriores a la existencia de los ejércitos, que recién llegaron cuando lo permitieron los excedentes financieros de las comunidades organizadas. Estos -los ejércitos- siempre fueron medios disuasivos/defensivos frente al agresor eventual o bien, ante una situación crítica interior que conllevara un riesgo existencial y legitimara el empleo de la vía institucional, para retener la sobrevivencia identitaria de la nación.
En manos del conquistador o del revolucionario, las FFAA fueron también empleadas para la perversidad en las relaciones políticas, internacionales o internas. Cuando se agota la comunicación política negociadora entre actores internacionales o internos, la alternativa es siempre la violencia organizada, impulsada por un agresor. En este caso estamos en presencia de una guerra ofensiva, ya fuere internacional o guerra civil -interna-. Ésta última es la peor especie de las guerras, pues su instrumento central es el odio social.
Expresadas estas generalidades conceptuales, volvamos a nuestra situación. Desde 1945, después de la Segunda Guerra Mundial -que finaliza con lanzamientos nucleares en Japón- se inicia la apertura de una nueva rama de la Ciencia Política: la Polemología y una nueva etapa de la Estrategia, la Contemporánea. Reaparecen -desde 1947- “actores agresores no estatales” en el marco interno y externo y la más primitiva modalidad de la acción violenta: el terrorismo. El espectro del conflicto se amplía así, bruscamente, es sus extremos: desde la hecatombe nuclear -en uno de ellos- a las primitivas guerras muy limitadas -en el opuesto- (4).
Al finalizar la Guerra Fría -1989/caída del muro de Berlín – 1991/implosión de la URSS- la disuasión se hace abstracta por carencia de responsabilidad política de los nuevos actores-agresores. Surgen las nuevas amenazas y riesgos estratégicos que la Argentina -aun hoy- legalmente no reconoce, como lo demuestra la legislación de Seguridad Nacional vigente.
La Carta de la ONU y en particular la eficiencia del Consejo de Seguridad para preservar la Paz, ingresan progresivamente en un cono de sombras. El conflicto violento se difumina y generaliza en el orbe, abandona los teatros de operaciones militares y se posa sobre las sociedades, con un número cada vez mayor de “víctimas civiles inocentes” y también de dirigentes políticos y militares “confundidos” (4).
Así llegamos al siglo XXI y a la situación que nos abarca. De las actuales sesenta guerras activas en el mundo, la totalidad de ellas son internas, es decir, guerras civiles que se caracterizan por su tipificación “asimétrica”, “híbrida” o de “séptima generación” como bien lo expresa el artículo de La Nación -“Sin fronteras entre la defensa y la Seguridad”– del 14 Feb 18.
Son las guerras que la Argentina no puede planificar -prever- para evitarlas, por imposición de la vigente legislación de Seguridad Nacional. Esta irracionalidad no es casual, sino consecuencia de las derrotas estratégicas que sufrimos en el siglo XX, aun no asumidas.
Constituye la tremenda paradoja de estas horas: quienes fuimos los primeros en enfrentar a este desconocido tipo de agresión asimétrica sorpresiva -a partir de los años ’60- nos encaminamos ahora a repetir los mismos errores, medio siglo después, como si no nos hubiese ocurrido nada.
El “relato” ha superado a la verdad. La “narrativa” se impuso a través de los medios y de la escuela (5). El pre-juicio domina a la realidad presente y la cobardía permanece ante la pseudo-revolución en retirada, herida pero no vencida.
La mayoría de nuestros vecinos ha reaccionado positivamente ante la evolución acelerada -al ingresar al siglo XXI- del fenómeno “socio-político” guerra. Nuestro país -su dirigencia-, contrariamente, permanece paralizado, confundido y en altísimo riesgo estratégico, frente a una situación que carece de tratamiento público e idóneo por los medios y en particular por parte de los responsables de la comunicación social referida a la Seguridad Nacional. “De eso no se habla”.
Mientras en el mundo desarrollado se vive una constante transformación doctrinaria y orgánica, acompañada por la multiplicación de los presupuestos de Seguridad Nacional, la Argentina permanece de espaldas a esa realidad y a necesidades indiscutibles que la condenan, irremediablemente, a nuevos fracasos (6), si no se recupera el Estado Institucional.
LA NATURALEZA DE LAS COSAS.
Los cambios sorpresivos de la naturaleza del fenómeno guerra, que han llegado con el avance del alto ritmo de evolución de la civilización humana y la creciente crisis cultural de Occidente, no han podido superar -entre nosotros- la explotación estratégica colusiva que nuestros enemigos triunfantes -en el plano político-estratégico- nos han impuesto -a través del Estado- de un elaborado “relato”. Es la homologación de la “purga” que los bolcheviques impusieron a los Oficiales del Zar en 1921, impulsada aquí por el Decreto 158/83, que continúa llevando a centenares de soldados y civiles argentinos a ser condenados ilegalmente con el Código Penal Ordinario, por haber combatido y triunfado en los combates de la guerra contrarrevolucionaria -1974/1989-.
Ambas maniobras -la jurídica y la comunicacional- han “trastocado” la victoria -en combate- de los argentinos e impidieron la creación de una nueva Política de Seguridad Nacional, fruto de la durísima experiencia reciente. Esta ha sido reemplazada por una perversa y falaz política de derechos humanos, unidireccionados.
Prueba de ésta paradójica situación -en las presentes circunstancias- es que a los Cadetes de los Institutos de Formación de nuestras FFAA, no se les puede citar la agresión terrorista-revolucionaria -1959/1989-, sino solamente al “terrorismo de Estado” -1976/1983- bajo supervisión de la UNDEF y por parte de profesores provenientes de “Franja Morada”. Y esto mientras en Azul el JEMGE, al rendir homenaje a los muertos en el ataque al cuartel, expresó todo lo contrario. ¿Puede edificarse sobre la ciénaga del “relato” la personalidad de los futuros oficiales de las FFAA argentinas? ¿Puede existir tanta incoherencia dentro de las Instituciones, en un momento en que se dice que se las recuperará?.
Las guerras en acto -en el mundo entero- siguen siendo fenómenos “lúdicos y agonales” (7) (8)-como en el pasado- pero su naturaleza ha variado. Son de otra “especie”, diría Clausewitz y ellos -los noveles oficiales- inevitablemente -si el Estado no cambia el rumbo- deberán enfrentarlas a su egreso y a lo largo de muchos años, pues no las prevemos y por eso, llegan. Estas nuevas guerras no tienen fácil ni rápida resolución. Nuestra juventud militar ¿será lanzada a combatir -nuevamente- sin previsiones estratégicas y “formados” en las falacias de la política de los derechos humanos?
¿PORQUÉ NECESITAMOS DETENERNOS HOY EN LA ÉTICA PROFESIONAL MILITAR?
Nuestros enemigos -hoy en colusión- en las guerras que peleamos recientemente encontraron -en las posguerras- una “debilidad” en nuestra apertura de la guerra contrarrevolucionaria. El PEN lo hizo por Decreto -que no envió al Congreso- y en él no dictó el concepto “ético – jurídico” que correspondía al empleo de las Fuerzas en el marco interno -la DENAC- (9) y la DEMIL (10). La Convención de Ginebra regula las guerras internacionales y en sus Protocolos II y III, trata la forma de encarar los conflictos armados internos.
Estas normas debieron ser homologadas en el Derecho Nacional, pero no se lo hizo. Esa fue la razón por la cual cada Cte. de Zona tuvo que reemplazar aquel vacío conceptual –de neta responsabilidad política– en la polvareda del combate y establecer sus propias reglas de empeñamiento táctico. Todos ellos se hicieron responsables, pública y oportunamente, de lo que ordenaron durante las operaciones. Éste aspecto ético-jurídico, que es central, ha sido desarrollado detalladamente por el Grl Jorge Apa Ferraro, en su libro “Al gran fraude argentino ¡Salud!” (11)
Aquella “debilidad”, convertida en “vulnerabilidad” por la aguda experiencia coludida de nuestros enemigos, fue explotada a través de una maniobra de pinzas, jurídica y comunicacional, que aun sigue en curso. Tuvo un punto de partida en el Decreto 158/83, complementado por la demonización de las FFAA a través de los medios de comunicación del Estado; desde el mismo Estado que abrió operaciones militares de “aniquilamiento” de modo “defectuoso”, desde el máximo nivel político.
Así las cosas y como consecuencia de éste “trastocamiento” de la victoria táctica frente al terrorismo-revolucionario, en derrota política y estratégica de los argentinos, el país ingresó en una acelerada decadencia que se encamina aun al “Estado fallido”. Sus graves consecuencias están a la vista y en lo que hace a las FFAA, además de su objetivo desarme unilateral y extrañamiento constitucional, se les quitó el fuero militar. Quedaron sin Código de Justicia Militar y de su correspondiente Reglamentación, como principal sustento de la disciplina y del mando militar. Sepamos que somos el único país de la región que sufre semejante despropósito, agravado por los dos “estados de guerra”, como fruto del trastocamiento.
El Jus in Bello -en la Argentina- ha quedado en manos absolutamente legas, como lo están demostrando, hasta el ridículo, los jueces y fiscales de los TTOOFF, en todo el país. Si se entrara en operaciones ¿qué actitud tomarán los futuros mandos operacionales? En sus cuarteles generales ¿estarán los jueces federales y fiscales que acompañen a las tropas de primera línea, para autorizar la apertura del fuego? Tengamos presente que estarán operando según el articulado del Código Penal ordinario y según los principios de la “legítima defensa”. Estos despropósitos, únicos en el mundo, no son solo ignorancia.
En realidad se los ha sancionado -para lograr el “control civil de los militares”- un Jus ad Bellum que, en línea con la legislación de Seguridad Nacional vigentes, niegan por ley la probabilidad de una guerra híbrida, interna. En consecuencia, es muy probable que esa guerra llegue y nuestra derrota está así asegurada, porque está prohibido preverla, por Ley. Como lo expresara Séneca: “Peor que la guerra, es tenerle miedo a la guerra” (13).
No terminan allí las consecuencias del “trastocamiento”. A las FFAA también se les ha quitado el Código de Honor Sanmartiniano y los Tribunales de Honor. Es decir, no solo se han destruido a las FFAA como Instituciones Constitucionales, sino que se ha destruido al SER militar, aquel al que se lo identificaba por su “Honor y su Valor”, y esto también está directamente relacionado con el objetivo de eliminar a las FFAA.
Se está hablando de “re-estructuración”, “reconversión”, “reconstrucción” de las FFAA. Hasta hoy no escuchamos una sola palabra dirigida a lo esencial: la recuperación de la autoestima militar, del espíritu militar, de las Instituciones Militares fundadas en su “Ética Profesional”. Napoleón lo decía en términos sencillos: “Una Fuerza no vale por el número de sus bayonetas, sino por el temple de sus corazones”. Y las burocracias carecen de corazones. ¿Hay alguna “idoneidad” polemológica o estratégica en el ámbito de las decisiones políticas pertinentes? Yo no la observo. Deben ser mis sensores de dinosaurio.
El prostibulario Zaffaroni y la Cte Hebe no están buscando solo la ingobernabilidad. Están anunciando que la pseudo-revolución está activa y que pronto “puede haber un accidente violento”. ¿Así le llama ahora el garantismo -“un accidente”- a un asalto revolucionario violento, que probablemente prevén junto a las mafias de la corrupción, como aliados ocasionales? Y qué hacen nuestros demócratas de cartón. Por lo menos deberían rasgarse las vestiduras, una vez más.
CITAS:
PrisioneroEnArgentina.com
Septiembre 6, 2018
ARENA…, ¿O PAN RALLADO?
Por el General HERIBERTO JUSTO AUEL
La “confusión” de los pensadores y dirigentes.
La violencia organizada.
¿Cuál es el horizonte de nuestras FFAA?
La “confusión” de los pensadores y dirigentes.
Nuestra querida Patria Argentina aun somatiza, en el 2017, sus posguerras que corresponden a las guerras que vivimos en la segunda mitad del siglo XX, ambas hijas -por su tipología aun no asumida por los argentinos- de la presencia en el mundo de los arsenales QBN, desde 1947.
¿Por qué los efectos psico-sociales de esas guerras -vividas como verdaderos y sorpresivos dramas- se prolongan hasta hoy, durante tan largo tiempo, a pesar de los acelerados procesos de cambios que caracterizan a la presente etapa de la civilización humana? (1) (2) y (3).
Es probable que una de las razones que explica al fenómeno esté en aquella conocida frase del Grl Mac Arthur, que encabeza a éste trabajo: “En la guerra no hay sustituto para la victoria”. Podríamos concluir, consecuentemente, que lo que realmente somatizamos son las derrotas estratégicas sufridas, ambas actualmente incardinadas y en plena explotación por nuestros enemigos de ayer, hoy aliados -a través de sus vicarios-, en una nueva circunstancia histórica (4).
La “confusión” de nuestros pensadores y dirigentes, que aun continúa y se prolonga -sin indicios de un final- se explicada por la segunda frase del quien fuera el Supremo Comandante del Pacífico Sur: “Uno no puede librar una guerra en la actualidad -1943– sin el apoyo de la opinión pública, que es tremendamente moldeada por la prensa y otras formas de propaganda”. Esa ha sido y es la razón del eje del “relato”, que nos impidió comprender y superar nuestras crisis de posguerra y que nos puso al borde del abismo, hasta el 10 Dic 15(1).
¿Arena…, o pan rallado?. No existe en la Historia Militar Universal un solo caso que nos muestre la ausencia de una reacción social positiva, frente a una derrota en la guerra. Allí están a la mano los ejemplos de Alemania y Japón, después de la IIGM. ¿Qué nos ha ocurrido para volver a ser -otra vez- una excepción en el mundo?. Nada de lo aprendido en los dramas de esas guerras fue políticamente asimilado y aplicado. Nada. Estamos repitiendo todos los errores del pasado. ¿Hubo mera “confusión” o hubo “traidores a la Patria”, desde 1983? (2) (3) (4) y (5).
En los días que corren la Justicia descubre a estos últimos, luego del asesinato de un fiscal que investigaba un hecho de terrorismo, de un “desaparecido” en el Río Chubut, de la pérdida de un submarino y de una víctima de la “represión del Estado” en Villa Mascardi. La sentencia de Cicerón vuelve a recordarse, luego de un paréntesis de treinta y cuatro largos y penosos años: “Cuando la Patria está en peligro, Dios es invocado y el soldado convocado; cuando el peligro cesa, Dios es olvidado y el soldado juzgado” (6) y (7).
Algunos periodistas y políticos, conmovidos por los acontecimientos citados, caen en la cuenta que la Argentina está en plena indefensión, sin presupuesto y con sus FFAA humilladas y…como “la Patria está en peligro” (8) (9) y (10), “¿¡no habría que volver a pensar en la necesidad de tener FFAA?!”.
Decíamos en Feb 14, en un ensayo titulado “Confusión, ignorancia o propósitos ocultos” (11): “La guerra evoluciona con la civilización humana -que en las últimas décadas ha acelerado notablemente su ritmo- sin perder por ello su esencia. Se inscriben en ella todas las formas de la violencia organizada. Es un hecho político y es la Política la que señala su “para qué”. Lo que dijera Mao ha tomado -a lo largo de éste tiempo- cada vez mayor entidad: ´la guerra es política con derramamiento de sangre y la política es guerra sin derramamiento de sangre´. La guerra es gestión política a través de alguna variante de fuerza. Cuando se la analiza sin considerar esta cualidad, el análisis es por lo menos incompleto”.
La violencia organizada.
Ha reaparecido la “violencia organizada” en el Comahue y en las grandes ciudades. El discurso de los agresores centrales, es el de los ’70 pero, llamativamente, hasta ahora no ha habido quien los relacione. Seguimos viendo lo superficial y no las esencias. Seguimos mirando la punta del botín y no la cancha entera. Algunos actores cambiaron, los modos son distintos, los procedimientos también (8), (12) y (13). Sin embargo, el núcleo y los objetivos son los mismos. Sería imprescindible que los responsables del área de la Seguridad Nacional fijaran su atención en la metamorfosis en curso en la zona de la Orinoquia (12), antes de adentrarse en los detalles de las orillas del Río Chubut o la cantidad de colectivos que trajeron la barbarie a la Plaza de los Dos Congresos.
En estos días algunas voces preguntan ¿para qué sirven las FFAA?. Las muertes en el Comahue, la pérdida de un submarino o el riesgo de desabastecimiento de las Bases Antárticas hacen pensar que algún atraso hay en el sistema de Seguridad Nacional y por lo tanto es necesario “re-estructurar el sistema defensivo”.
Ello nos lleva -como institución- a la obligación perentoria de encender las alarmas rojas. Por ello ya le hemos solicitado una audiencia al Sr Ministro de Defensa Nacional. ¿Cómo vamos a “re-estructurar” la Defensa Nacional sin planeamiento estratégico? La legislación actual prohíbe prever los riesgos y amenazas estratégicas reales -dentro de nuestros límites- que ensombrecen nuestro futuro inmediato. ¿Alguien está pensando que con la eliminación del Decreto reglamentario de la Ley de Defensa ese obstáculo está salvado? Craso error.
Sería conveniente que relean las leyes vigentes y recuerden que la guerra, las actuales, siguen siendo “lúdicas y agonales”, a pesar de su acelerada transformación. ¿O hay quienes quieren enfrentar la nueva amenaza volviendo a improvisar? Entonces sepamos que acunamos, ingenuamente, una nueva derrota estratégica, a pesar de las durísimo experiencias recientes.
Restablecer una legislación de Seguridad Nacional relacionada con la real situación que atravesamos, exige dos cosas: 1. Decirnos la verdad y, 2. Reemplazar la Política de Derechos Humanos por una Política de Defensa realista, innovadora y posible. Es decir: volver a la racionalidad, pero esta vez con eficiencia.
¿Cuál es el horizonte de nuestras FFAA?
Las experiencias recientes permitirían a las FFAA argentinas ponerse nuevamente los “pantalones largos”.Debemos pensar y obrar pisando nuestro suelo. La mochila está cargada de experiencias propias, durísimas y recientes. El código a seguir está en la doctrina a adoptar y la doctrina está en el plan estratégico a concebir, desde una total ausencia de alistamientos. Tendríamos que realizar un salto de garrocha responsable, si despertamos en tiempo.
Las teorías estratégicas en acto en el 2017 son de conocimiento universal y nos facilitarán concebir -si existiere una decisión política- las organizaciones, los instrumentos y el personal adiestrado para la acción. Para lograrlo, nuestra situación actual nos indica aspectos desfavorables y otros favorables, sabiendo de antemano que siempre habrá oposición a la innovación.
Sin planificación estratégica no habrá noción de actitud -ofensiva o defensiva- ni prioridad para las aptitudes. Cuando más se aproxime la doctrina a la clave de nuestra propia situación, mayor será la adaptación de las FFAA para atender y entender a los objetivos y misiones a cumplir.
Las FFAA del orbe que están actuando permanentemente son las que más aprenden. Acumulan experiencias y evolucionan. Cuando hay lucidez, mientras combaten ya se están preparando para la próxima guerra. Ese conocimiento será de gran apoyo para nuestro singular planeamiento estratégico. No hay lugar para la “copia”. Deberíamos considerar a nuestra exclusiva realidad iberoamericana, en evolución, a las limitaciones presupuestarias del país, al tiempo de incorporación de los soldados para adquirir destrezas o el nivel de bajas que acepta una fuerza “profesional”. El tono moral de nuestra sociedad sería un aspecto importantísimo a considerar.
Tengamos en cuenta que en Occidente, desde la Guerra de Corea -1950/53-, no han existido mayores enfrentamientos entre Estados que permitan determinar capacidades militares. Las experiencias bélicas han sido muy variadas en los últimos tiempos y han ocurrido en lapsos muy cortos. Las capacidades para el combate de alta intensidad, están en descenso. Occidente se especializó en operaciones de estabilización de países del tercer mundo, como lo hicimos nosotros por imitación, con total descuido de nuestra propia situación interna.
Los efectos de nuestras derrotas estratégicas se reflejan muy bien en el éxito de nuestros enemigos -internos y externos-, que lograron el desarme unilateral y la ausencia del planeamiento estratégico frente a los verdaderos riesgos y amenazas que padecemos desde 1985. Y ello cuando la totalidad de las guerras en acto, en el mundo, SON INTERNAS.
Hubo un acuerdo político, producto del “entrismo de izquierda” en los partidos tradicionales, para eliminar a las Instituciones Militares del escenario nacional. Se judicializaron las guerras recientes, se privó de presupuesto a la Seguridad Nacional y se humilló a las FFAA, de Seguridad y Policiales a través de la comunicación del propio Estado. Más de treinta años de acción psicológica negativa y de enseñanzas escolares “progresistas”, ¿cómo se remueven hoy, ante las necesidades que exige la proximidad de las presentes amenazas?
Por el momento, la “ocupación” de amplias extensiones de nuestro territorio por elementos “extraños”, más de setenta ataques “revolucionarios” -en breve lapso- con tácticas “terroristas” para “despejar” aun más los vacíos espacios patagónicos -en tres provincias- del Comahue, tienen tratamiento de seguridad pública, a pesar de la declaratoria del “ocupante” -agresor violento- que reclama soberanía y opera bajo conducción externa, como lo ha comprobado el Fiscal General de Neuquén, José Gerez, que acusó a la RAM de tener vínculos con las FARC (12), por contar con los documentos probatorios (14).
El Estado está cumpliendo con la legislación vigente, que pone el caso en manos policiales y judiciales y le niega jurisdicción al planeamiento estratégico, con una lógica perversa, propia del resentimiento ideológico del terrorismo setentista que diseñó y aprobó estas leyes. Pero, allí sigue firme la “Política de Derechos Humanos”, como Política de Estado.
Estamos en presencia, nuevamente, de la actitud que asumió el Estado Nacional desde 1959 hasta 1974. Luego improvisó, histéricamente, con las consecuencias que aun soportamos. ¿Arena…¿o pan rallado?. ¿De qué naturaleza es la situación en desarrollo en la Patagonia argentina y chilena?. Si existe una agresión violenta y apátrida, que reclama soberanía sobre parte del propio territorio, que lo ocupa sin reconocer al Estado Argentino y se impone ante la Justicia y la policía, paralizándolos, deberíamos preguntarnos: ¿qué más necesitamos para entender que estamos en presencia de una agresión estratégica-revolucionaria?.
Si las pancartas y estribillos de algunos grupos izquierdistas que irrumpen diariamente en la CABA reclaman por la libertad del jefe de la RAM, o para que aparezca el desaparecido que no desapareció ¿no podríamos concluir que enfrentamos a una organización bajo comando único externo y con un objetivo común, actuando en todo el país? ¿O estamos creyendo que un fiscal o un juez de una remota localidad patagónica o de la CABA solucionarán una “agresión revolucionaria” modelo 2017?
La respuesta es clara: el Estado retiene vigente la política de derechos humanos -como lo demuestra la reciente presentación del Plan Avruj-, no existe política de seguridad nacional y gran parte de la dirigencia política carece del coraje y los conocimientos necesarios para enfrentar esta cruda realidad estratégica presente.
La guerra sigue siendo un hecho socio-político de naturaleza violenta, interactiva y cambiante, cabalgando sobre la evolución acelerada de la civilización, influida por la legalidad internacional y nacional, las diferencias culturales y sus derivaciones políticas, militares y sociales. Ya nos hemos alejado del modelo napoleónico-industrial y el ingreso a la etapa posindustrial nos muestra tendencias disruptivas. Los argentinos ya lo hemos vivido y sufrido -desde sus comienzos- y parece imposible no haberlo comprendido aun, repitiendo errores.
La legislación actual prevé solo la guerra con otros Estados y con sus fuerzas regulares, pero hace muchas décadas que la agresión proviene desde organizaciones no estatales. El proceso revolucionario iberoamericano -que hipócritamente se oculta- ha mutado de forma, pero sigue siendo el mismo. Su núcleo impulsor, también.
La maniobra ofensiva principal pareciera desplazarse -en la actualidad- a una de las variadas ramas inauguradas por el proceso revolucionario en los ’90: el indigenismo radical, que encontró en el Quinto Centenario del Descubrimiento de América un punto de partida y legitimación, con apoyo de intelectuales y clérigos neo marxistas. La localización periférica de su organización y ejercitación, se mantuvo fuera de la atención pública en la Argentina, hasta el momento en que ejecutan la operación pre-electoral del “desaparecido”. Es cuando nos enteramos por la prensa que llevaban años de acción y ejercitación en ambos lados de la Cordillera (12), con la sigilosa protección de Justicia Legitima en nuestro país.
Las tribus urbanas, desde lesbianas a piqueteros, constituyen las maniobras subsidiarias, con un objetivo en el corto plazo: la “resistencia” en todos los frentes. Desgastar al poder e impedir la gobernabilidad (13) y (14).
Las teorías estratégicas mundiales que pueden ayudarnos al momento de pensar en la propia doctrina –si nos decidiéramos salir del actual vacío conceptual- origen de la actual indefensión e inseguridad, serán enumeradas muy sintéticamente, limitándonos a las principales. Son las siguientes:
Guerras de Tercera y Cuarta Generación: El término se originó en 1989 cuando William Lind y cuatro oficiales del Ejército y del Cuerpo de Infantería de Marina de los Estados Unidos, titularon a un ensayo “El rostro cambiante de la guerra: hacia la cuarta generación”. Ese año, el documento se publicó simultáneamente en la edición de octubre de Military Review y de la Marine Corps Gazette. La propuesta está relacionada con la guerra asimétrica y la guerra contraterrorista.
Guerras de Cuarta Generación: La formularon Van Creveld y Thomas Hammes en 1994, planteando los modos no convencionales de la guerra. Identifican principalmente la acción psicológica y la infiltración en las retaguardias enemigas (15). A esa altura, la Argentina llevaba décadas de agresión de éste tipo.
Guerras de Quinta Generación: Ray Alderman las define por su alcance y su desarrollo sin contacto y silenciosamente, en el 2017 (16).
Guerras de Sexta y Séptima Generación: Niño González las conceptualiza en el 2017, dándole a las guerras en curso en el mundo una dimensión de degradación de las violencias multifacéticas, a las que el Estado Occidental responde tardía y erráticamente ante las nuevas amenazas y riesgos a la Seguridad Nacional e Internacional. Concluye que el terrorismo exige un reordenamiento de la Seguridad (17).
Las Guerras Irrestrictas: Concepto revolucionario concebido por dos Coroneles del Ejército Popular Chino -Quiao Liang y Wang Xiangsui- en 1999, en su libro “Unrestricted Warfare”. En esta obra los autores señalan que ante la disminución de la violencia militar, aumenta la violencia política, económica y tecnológica. Señalan la importancia que alcanzan la desinformación -el relato- y el control de áreas sensibles del poder bajo influencia de la globalización y de la dependencia tecnológica. Vale la pena reproducir cómo conciben los “ataques integrados”:
“Guerra cultural, controlando o influenciando los puntos de vista culturales de la nación adversaria. Guerra de las drogas, invadiendo a la nación adversaria con drogas ilegales. Guerra económica, empleando la dependencia de la ayuda financiera para controlar al adversario. Guerra ambiental, destruyendo los recursos ambientales a la nación adversaria. Guerra financiera, subvirtiendo o dominando el sistema bancario del adversario y su mercado de valores. Guerra de leyes internacionales, subvirtiendo o dominando las políticas de las Organizaciones Internacionales o multinacionales. Guerra mediática, manipulando los medios de prensa extranjeros. Guerra de Internet, mediante el dominio o destrucción de sistemas informáticos transnacionales. Guerra psicológica, dominando la percepción de las capacidades de la nación adversaria. Guerra de recursos, controlando el acceso a los escasos recursos naturales o manipulando su valor en el mercado. Guerra de contrabando, invadiendo el mercado del adversario con productos ilegales. Guerra tecnológica, ganando ventaja en el control de tecnologías civiles y militares. Terrorismo” (1).
La Teoría Gerasimov: Es muy probable que la teoría más difundida e influyente en los últimos años, provenga del Jefe del Estado Mayor para la Defensa de Rusia, Grl Valery Gerasimov (18). Señala los casos de la intervención en Libia del 2011, las revueltas árabes o la Revolución de Colores o la invasión de Iraq del 2003 como muestras de la forma de operar de Occidente. Señala a las capacidades no militares como principales para la obtención del objetivo, en una relación de 4 a 1. Destaca la creciente tendencia al empleo de sistemas de armas con control remoto y a la robotización del campo de combate. Sin duda, la caracterización principal que destaca es la de ganar la supremacía en el campo de la información y en la comunicación estratégica. Subraya el carácter híbrido de las acciones de guerra, lo que dificulta la identificación de una agresión. La frontera entre la guerra y la paz están difuminadas. Rusia ha logrado en Georgia, Ucrania o en Siria, sincronizar las operaciones militares con las acciones de la comunicación, llegando a socavar la soberanía de un país, sin ocupar su territorio.
Las “observaciones” de McMaster. El actual Consejero de Seguridad Nacional de EEUU citaba en el The New York Times (19) tres normas para evitar una comprensión errónea de la naturaleza de las guerras en acto: 1. Su carácter político, que debe ser coordinado con las restantes acciones del Estado para alcanzar el objetivo impuesto. 2. Considerar su dimensión humana, pues se sigue persiguiendo “la honra, el temor y el provecho”.3. La conjunción de las dos anteriores: su carácter lúdico, pues se trata de voluntades inteligentes en oposición, que la hace impredecible. Concluye que no debe confundirse al éxito de las tecnologías en el combate, con la existencia de una estrategia en la batalla.
Por último, no queremos cerrar estas síntesis que nos sirven de antecedentes y apoyos a nuestro pensar, sin citar a Eugeny Messner -1891-1974-, Cnl ruso blanco, que falleció en Buenos Aires y anticipó, en sus estudios teóricos durante la guerra fría, muchos conceptos que hoy encontramos en los estrategas teóricos más recientes y que hemos citado más arriba.
El acceso a las nuevas tecnologías por parte de actores no estatales, con el condimento de los fundamentalismos radicales de tipo social, político o religioso, están mostrando los fracasos de la disuasión en la posguerra fría. Las guerras asimétricas tienen la capacidad de lograr efectos estratégicos con acciones tácticas de baja escala, como lo estamos comprobando algunos argentinos en el 2017, a pesar de que lo sabíamos desde los ’80. Pensar en términos de Paz o Guerra, ya no tiene mayor sentido. Ha surgido la “zona gris”, pues se ha diluido la dicotomía entre ambos estados. Surge la idea de lo híbrido. Desde el punto de vista jurídico ello retiene su importancia, pues muestra una gran debilidad/vulnerabilidad de los Estados, pero ha perdido importancia con respecto de los resultados estratégicos, pues los objetivos pueden ser alcanzados a través de otros instrumentos y sus respectivas tácticas. Es lo que nos está sucediendo.
Ha desaparecido el “teatro de operaciones militares”. La totalidad del territorio nacional es el campo de batalla, pero específicamente lo es la población civil. Del dominio físico de la geografía, el resultado estratégico se ha desplazado al dominio psicológico de la sociedad. Ello es lo que da una enorme importancia a la comunicación social. Lo hemos visto en los días en que el Congreso Nacional votaba una nueva norma previsional. El opinólogo televisivo de turno comentaba acerca del “cerco que ejercía la Gendarmería sobre los legisladores”, cuando el cerco lo realizaban los revolucionarios anarquistas, que enfrentaban las empalizadas que defendía la Gendarmería. Para el elemental periodista, el agresor era la Gendarmería. Quizás provoca más daño al país, que el piquetero.
Por lo tanto, estos nuevos conflictos no se resuelven exclusivamente con el dominio de los espacios llaves del territorio, sino con la conquista del espíritu de la ciudadanía. Éstos “periodistas” ¿están confundidos?, ¿se equivocan? O, ¿para quién juegan?. ¿Son infiltrados? ¿Tienen conciencia que el motivo del caos no es la reforma de una ley?. Hemos dicho con anterioridad y reiteradamente, que la “pseudo-revolución en retirada”actuaría como una “bestia herida” (11) y (13). Es muy probable que los responsables de la seguridad tengan una lectura totalmente distinta de los hechos de violencia creciente. Sabemos que no hay “doctrina estratégica” y estamos tomando conciencia -a través de sus acciones- que los responsables de la Seguridad Nacional carecen de las nociones polemológicas más elementales.
La Argentina vive diariamente graves hechos de Inseguridad Nacional. Nuestra dirigencia confunde“seguridad pública” con “seguridad estratégica”. En todo el orbe se trabaja intensamente para actualizar doctrinas, organizaciones, sistemas de armas y actitudes sociales, mientras aquí se sacrifica a los uniformados, desarmados frente a la locura revolucionaria, bajo cualquier excusa. Las víctimas siguen siendo los agresores, no los agredidos.
Entre nosotros, la actualización será muy difícil. Los hechos cada vez más graves están impulsando la necesidad de una transformación estructural de la Seguridad Nacional. Pero no es igual en el ámbito de las convicciones ni de los conocimientos específicos, que no aparecen. Hay trascendidos, rumores y algunas declaraciones desde el gobierno, que “se está trabajando en ello”. Sin embargo, todo nos lleva a pensar que la motivación del “cambio” es solo originado por exigencias presupuestarias.
Nuestro Instituto de Estudios Estratégicos de Buenos Aires desde su creación, luego de la Guerra del Atlántico Sur, viene bregando y proponiendo superar la angustiosa situación de la Seguridad Nacional. Entendemos que ya no podemos demorar un solo minuto más, sin correr el riesgo de graves problemas violentos que nos llevarán a la disgregación. Nuestra propuesta está desarrollada como plan esquemático básico y éste se actualiza, periódicamente. Además de considerar las teorías internacionales, hemos diseñado una doctrina estratégica, nuevas organizaciones, nuevos sistemas y despliegues. Estamos soportando conflictos internacionalizados y complejos y necesitamos audacia e idoneidad para superarlos con éxito.
El punto de partida para conducir esta operación exige eliminar dos ministerios y crear uno nuevo, el de la Seguridad Nacional, con dos Secretarias, la de Defensa Nacional y la de Seguridad Pública, mientras se negocia el Tratado de Seguridad Colectiva y Defensa Común con el vecindario afín a la posición que adoptó la Argentina el 10 Dic 15, como vanguardia contra-revolucionaria. Brasil, Chile y Perú deberían ser los primeros invitados por Buenos Aires para desarrollar una alianza eminentemente política, como lo es la que corresponde a la Seguridad Regional, frente al neo-marxismo del Foro de San Pablo.
Grl Heriberto Justo Auel
CITAS:
(1) H. J. Auel. “Política de Defensa o Estado de Indefensión Legal”. Investigación. Jul 01. www.ieeba.org
(2) H. J. Auel. “La Guerra en la Civilización del Conocimiento”. Investigación. Ene 02. www.ieeba.org
(3) H. J. Auel. “La Guerra en el Siglo XXI”. Jul 02. Investigación. www.ieeba.org
(4) H. J. Auel. “El Nuevo Ordenamiento Internacional Posterior a la Intervención de EE.UU. y sus Aliados en Irak”– Conferencia en la AAAI. 21 May 03. www.ieeba.org
(5) E. de Vergara. “Los Conflictos en Ibero América”. Investigación. Feb 06. www.ieeba.org
(6) H. Dieterich. “Cumbre Sudamericana: nace vanguardia criolla y crece subversión oligárquica”. 10 Dic 06. www.rebelion.org
(7) H. J. Auel. “La Argentina Encapsulada”. 28 Mar 03. Investigación. www.ieeba.org
(8) H. J. Auel. “Sr. Cte J FFAA: llegó la hora de pintar la carta”. Feb 17. www.ieeba.org
(9) H. J. Auel. “Política de Derechos Humanos Vs. Política de Seguridad Nacional”. 01 Ago 17. www.ieeba.org
(10) H. J. Auel. “Terrorismo global y terrorismo doméstico en el siglo XXI”. Oct/Nov 17. www.ieeba.org
(11) H. J. Auel. “Confusión, ignorancia o propósitos ocultos”. Feb 14. www.ieeba.org
(12) H. J. Auel. “Las FARC-EP, actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano”. 05 Sep 17. www.ieeba.org
(13) H. J. Auel. “Terrorismo Global y Terrorismo Doméstico en el siglo XXI”. Oct-Nov 17. www.ieeba.org
(14) Infobae. “Hallaron documentación que vincula al RAM con grupos guerrilleros de otros países sudamericanos”. 22 Nov 17. www.infobae.com
(15) M. Van Creveld. “La transformación de la guerra”. 1994. www.bibliotecapleyades.com
(16) C. A. Niño González. “La Séptima Generación de la Guerra”. 2017. Ed. USTA. Bogotá. Colombia.
(17) Q. Liang y W Xiangsui. “Unrestricted Warfare”. 1999. PLA Literature and Arts Publishing House.
(18) S. Morales Morales. “El futuro de la naturaleza de los conflictos armados”. 23 Nov 17. www.ieee.es
(19) H. R. Mc Master. “The Pipe Dream of Easy War”. The New York Times. Jul 13.
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 14, 2018
“LAS CLAVES DE LA INSEGURIDAD NACIONAL”
Por el Grl Heriberto Justo Auel
Conferencia en el “Foro de la Ciudad”
Club del Progreso. 04 Jul 18
“Estoy preocupado por la seguridad de nuestra gran nación;
no tanto por una amenaza externa,
sino por las fuerzas insidiosas que trabajan adentro”.
Grl Douglas MacArthur – 1945
Nuestro agradecimiento a las autoridades de este prestigioso e histórico Club, por la invitación que nos han hecho llegar al IEEBA, permitiéndonos -además- la elección del tema a tratar con Uds., en éste clásico almuerzo del “Foro de la Ciudad”.
Es de nuestro conocimiento comunitario que la principal preocupación social -permanente- de los argentinos, en las últimas décadas, es la inseguridad. Por esa razón hemos decidido tratar éste tema aquí -aunque fuere brevemente- planteando algunas de sus “claves” esenciales, pues entendemos que éstas no tienen tratamiento público.
Cuando citamos el término “claves”, nos estamos refiriendo a “aquello que nos permite resolver algo que se nos presenta como enigmático o desconocido” (1). En nuestro caso, no creemos que se trate de “algo enigmático”, o de una “sensación”, pero estamos convencidos que es “algo desconocido” por gran parte de nuestra dirigencia que -al respecto- mantiene una enorme deuda con sus conciudadanos “de a pie”.
¿Pueden los padres ignorar qué “defensas” deben darle a su bebé, a través de vacunas, alimentos y vitaminas, para que rechace la agresión del medio ambiente en el que vive? Pues, valga el caso, eso es lo que estamos haciendo con nuestra sociedad, toda vez que una política comunicacional de la Seguridad Nacional (2), no existe. Esta es la principal causa de la inseguridad/indefensión que padecemos, pues en las guerras en acto -de 7ma G-, la orientación de la opinión pública es esencial.
Hemos dividido nuestra exposición en tres partes:
LA SEGURIDAD DE LA CIUDADANÍA ¿ESTÁ EN LAS PIEDRAS DE LAS MURALLAS O EN LOS HOMBRES QUE VIVEN DENTRO DE ELLAS?.
¿QUÉ DEBERÍAN SABER NUESTROS CONCIUDADANOS, AQUELLOS QUE VIVEN DENTRO DE LAS MURALLAS, ACERCA DE LA PRIMERA RESPONSABILIDAD DEL ESTADO-NACIÓN: LA SEGURIDAD NACIONAL?
EN CONCLUSIÓN:
LA SEGURIDAD DE LA CIUDADANÍA ¿ESTÁ EN LAS PIEDRAS DE LAS MURALLAS O EN LOS HOMBRES QUE VIVEN DENTRO DE ELLAS?
En la presente etapa de la “civilización del conocimiento”, la Seguridad Pública se unificó con la Seguridad Estratégica pero, en éste extremo occidente-sur, ello no ha sido difundido. La Argentina -ideológicamente encapsulada- (3) se evadió de su circunstancia y envuelta en falacias -el relato- se dirigió inconscientemente al “Estado fallido” (4) a través de la auto-destrucción de su núcleo duro: las FFAA y el sistema Judicial Penal Federal, que fue y es empleado para la destrucción de las primeras.
Simultáneamente, mientras esa narrativa falaz ocultaba al latrocinio más grande de nuestra historia, nuestra clase media era llevada al castro-comunismo, sin que se enterara.
Podríamos realizar un sinnúmero de interrogantes, relacionados con las citadas “claves”, para demostrar el desconocimiento generalizado de las causas de la inseguridad, pero por razones de disponibilidad de tiempo vamos a plantear solo siete y así intentar comprender cuál es la profundidad sustantiva de la rampante Inseguridad Nacional y abandonar el superficial anecdotario al que ya nos han acostumbrado (5).
¿QUÉ DEBERÍAN SABER NUESTROS CONCIUDADANOS, AQUELLOS QUE VIVEN DENTRO DE LAS MURALLAS, ACERCA DE LA PRIMERA RESPONSABILIDAD DEL ESTADO-NACIÓN: LA SEGURIDAD NACIONAL?
¿Se tiene hoy presente -en los diversos análisis y/o propuestas dirigenciales- que somos un país en doble posguerra, una convencional y otra no convencional y que esas guerras permanecen aún abiertas, dentro de la categoría de “estado de guerra”?
No, no se las considera cuando se analiza nuestra prolongada crisis-decadencia pero, además, la guerra no convencional -la contra-terrorista-revolucionaria 1974/1988- es negada como tal, aun hoy por Jueces y Fiscales Federales legos de los TTOOFF, quienes ignoran el “abc” de las guerras “asimétricas”, “muy limitadas”, “de baja intensidad”, “irrestrictas” o “híbridas”, que tienen sobre sus estrados desde 1984.
Debemos reconocer que las organizaciones de derechos humanos -DDHH- los controlan cercanamente, a través de las querellas -verdaderas vestales revolucionarias de posguerra- que les impiden a los tribunales reconocer la existencia de nuestra larga, malparida y dramática guerra civil contrarrevolucionaria. Pero ello no los exime de ser prevaricadores y me consta que son conscientes de ello (6).
Han pasado treinta y cinco años desde el cese de los combates y aun la sociedad no ha asumido a sus guerras. No las asimilamos. Nuestros TTOOFF legos aceptan lo que las querellas -representantes del agresor de ayer- dictan ante los estrados: “no hubo una guerra”. Si la Justicia y las querellas reconocieran que la hubo, nuestros soldados deberían estar frente a los tribunales del Fuero Militar. Los jurisconsultos del más alto nivel estatal borraron el Art. 18 de la CN y la psico-política hizo el resto. “Una política de estado”, de hecho, ha podido reformar la Constitución Nacional, al Tratado de Roma, a la Justicia Militar y a los Tribunales de Honor de las FFAA (7).
La guerra limitada convencional del Atlántico Sur -en 1982-, detonada a través de un “incidente provocado” por el RU, tampoco fue asimilada por nuestra dirigencia. “No aprendimos a no aprender”. Aun se sigue repitiendo que fuimos los agresores, pero -por lo menos-, ya quedó en el olvido que fue “un carro atmosférico”.
Ninguna reforma se ha iniciado en el Estado Nacional para poder conducir -en el futuro- una negociación diplomática con una prueba de fuerza simultánea y controlada. Ese es el concepto de guerra limitada. Es la que peleamos en el Atlántico Sur en 1982, con un objetivo muy claro por parte de EEUU y el RU y una gran sorpresa para el “cuasi-Estado” argentino, que nunca entendió ni conoció la especie de guerra que le ocurría. Todo se improvisó.
A la “invasión cubana” -1959/1960- (8) se le dio tratamiento de seguridad pública durante quince años -1959/1974-. El Poder Político decidió en 1974 -por decreto- movilizar a las FFAA y abrir operaciones militares en el marco interno, “mañana mismo”, sin planificación estratégica, sin inteligencia estratégica, sin adaptación orgánica, bajo comandos específicos -no conjuntos-, sin emitir la ley necesaria, ni la DENAC, ni la consecuente DEMIL y, más grave aún, dirigiendo el Decreto a los EEMMGG con responsabilidades administrativas, en vez de hacerlo al EMC, con responsabilidades estratégicas.
Por todo ello a esta guerra la he llamado malparida. Habían pasado quince años sin que la dirigencia reconociera que en el 59/60 se había presentado un hecho estratégico. No se entendió o no se quiso entender “la naturaleza del desafío que representaba la invasión revolucionaria”. Tardíamente, en 1974 se reaccionó y todo se improvisó.
Estamos en curso de volver repetir nuevas improvisaciones homólogas, a pesar de la experiencia acumulada y no asimilada. A ello debemos agregar que ahora lo haríamos con mucho menos poder.
El Decreto que ordenó “el aniquilamiento del accionar subversivo” no fue al Congreso para transformarse en Ley Nacional -como lo hicieron Avellaneda-Roca en 1878, antes de atacar al malón-. El PEN tampoco dictó la Directiva Estratégica Nacional -DENAC- con la base ética-jurídica para el empleo de las Fuerzas en el marco interno. Esa base –de absoluta y exclusiva responsabilidad política– debió llegar a las tropas con forma de “reglas de empeñamiento”. Pero estas nunca llegaron. Son los “procedimientos” que los legos TTOOFF les reclaman hoy a oficiales subalternos, suboficiales y aun a soldados, para encuadrarlos en el Código Penal, como vulgares asesinos.
Tampoco se dictó la Directiva Estratégica Militar -la DEMIL-, responsabilidad del EMC, que quedó marginado de la guerra. Toda la apertura de esta guerra asimétrica, civil, contrarrevolucionaria, interna, no convencional, fue un mamarracho que hoy están pagando con su libertad quienes nos defendieron.
A fines de 1983, con asesoramiento británico y en colusión con las derrotadas organizaciones terroristas, el gobierno logró “trastocar” la derrota táctica del enemigo revolucionario, en una victoria estratégica y política, que aun retiene. Se judicializó el hecho socio-político “guerra” y las FFAA fueron llevadas ilegalmente a los estrados penales federales -es decir, al Código Penal ordinario- como criminales comunes responsables del tardío “mamarracho” -su errónea apertura- y al escarnio social del “relato”, difundido por todos los medios de comunicación del Estado, durante años.
Fue el momento crucial en que la Política de DDHH reemplazó a la Política de Seguridad Nacional. Las bajas de inocentes, provocadas por este desatino ideologizado, es la infamia que hoy se pretende ocultar, pero ello se hace cada vez más difícil (9).
Simultáneamente el RU confirmó -nuevamente- que no cumpliría con la Resolución de la AG-ONU que lo obliga a abrir negociaciones diplomáticas con la Argentina por la soberanía de las Islas del Atlántico Sur e inició el refuerzo de la “Fortaleza del Atlántico”. De esta manera, en términos estratégicos, el RU retuvo el “estado de guerra en el Atlántico Sur”, mientras sectores políticos, sociales y periodísticos internos, activaron desde entonces y hasta hoy, la actitud hostil del agresor revolucionario y en consecuencia el “estado de guerra interno”.
Esta interrelación colusiva entre los dos enemigos que agredieron a la Argentina con las armas en la segunda mitad del siglo XX, está objetivamente representada en la trágica figura del “perro”, Horacio Verbistky, agente de inteligencia británico y de la organización armada ilegal Montoneros.
La reciente y fracasada operación conducida por él, con un “desaparecido” en el Río Chubut, lo expuso ante la opinión pública nuevamente. Durante más de cincuenta días mantuvo al simbólico término en las primeras páginas del periodismo nacional y ello demostró el alcance y continuidad del “estado de beligerancia interno” (10). Pero, “segundas partes, nunca buenas”.
Comprobada la total falsedad de esta nueva “falacia”, no hubo retractaciones ni disculpas de sus numerosos voceros. Ello da una idea de la fortaleza psico-política remanente de la “pseudo-revolución” -aparentemente vencida y en retirada- y de sus camaleónicos partidarios conscientes o inconscientes, infiltrados dentro y fuera del Estado.
¿Es consciente -nuestra dirigencia- que nos abarca una nueva guerra mundial desde el año 2001 –“la Contraterrorista Global”- y que ella está totalmente interrelacionada con los dos “estados de guerra” que retenemos desde 1982 y 1988, respectivamente?
La Guerra Mundial en acto cursa su décimo séptimo año y, hasta hoy, no ha merecido el mínimo tratamiento público por parte de quienes tienen la responsabilidad de hacerlo. A este enemigo “no estatal” que enfrentan los Estados “responsables” del orbe, se lo cita -genéricamente- como “el enemigo sin rostro” (11).
Su composición es compleja y desigual, según el área en que actúe. La complejidad se manifiesta a través de la presencia de diversos actores: fundamentalismos, crimen organizado internacional y, en Iberoamérica, la particularidad del narcoterrorismo: elementos terroristas domésticos, remanentes de la guerra fría, interrelacionados con los carteles de la droga en alianza con el “terrorismo global”, a través de acuerdos estratégicos firmados en el pasado por Caracas y recientemente por las FARC (10).
En nuestra región continúa la consolidación del narcoterrorismo con elementos revolucionarios neo marxistas reciclados y los gobiernos adscriptos al “Socialismo Siglo XXI”. Ésta pseudo-revolución actualmente en retirada en gran parte del Cono Sur y en plena recomposición orgánica en la Orinoquia y el Caribe luego de la muerte de Fidel, la prisión de Lula, los graves problemas internos de los sandinistas en Nicaragua y el reciente posicionamiento político de las FARC -principal cartel regional- en Colombia.
La conducción estratégica revolucionaria subcontinental -desde 1959- continúa en manos del PC de Cuba, que ha cambiado sucesivamente de mecenas, acompañando a los grandes sucesos internacionales. Por esa razón, cuando la URSS se encaminaba a su implosión, Fidel se apoya en Lula para crear -en 1990- dos organizaciones neo-marxistas que asocian a las antiguas bandas estalinistas iberoamericanas con la social-democracia gramsciana: el Foro de San Pablo y el Foro de Porto Alegre.
El primero cubre las nuevas responsabilidades políticas y estratégicas luego de la caída del paradigma moscovita y el segundo la conducción social y comunicacional de apoyo a la nueva etapa de movilización continental, en la que aparecen las “organizaciones sociales” y los “grupos de choque”, que en la CABA se despliegan diariamente como “piqueteros”.
En aquel momento -1991- se sumó a la doctrina estalinista de origen, la social-democracia de reciente desembarco en la región, impulsando innovadores modos de acción, fundados en las doctrinas gramscianas. El gatopardismo revolucionario gana así en flexibilidad, pero aumenta el conflicto interno en su alta conducción. El mecenazgo de ésta etapa fue cubierto por el petróleo venezolano y el poder vicario de la alta conducción le es otorgada -por esa razón- a Caracas.
Cuando a partir del 2002 cae el precio del barril de petróleo y muere el Cte. Chávez, se inicia la negociación cubana con Obama y el ala izquierda del Partido Demócrata de EEUU para darle oxígeno a la Isla, incapaz de sostenerse por sí sola. Con la llegada de Trump, EEUU regresa a una política de aislamiento de la Isla. Ello activó la firma -en La Habana- del Tratado de Paz entre el gobierno de Santos y las FARC -el cartel multi-billonario regional- y esta organización armada se constituye así en partido político y nuevo sostén económico-financiero de La Habana y de la revolución comunista subcontinental.
El resultado de las elecciones presidenciales en Colombia el 17 Jun 18, contrario a los intereses de las FARC, inicia una nueva etapa revolucionaria subcontinental.
Seguramente se va a acelerar una nueva ola de violencia en ese país. Además, los resultados de las próximas elecciones en Méjico y Brasil serán definitorios para articular los próximos pasos a dar por los “encuentros” de los Foros de San Pablo y de Porto Alegre y condicionarán el ritmo/oportunidad de la contraofensiva revolucionaria en el Cono Sur, ya prometida en el Encuentro de Managua. Los ejercicios preliminares de esta maniobra están en superficie en El Comahue, Buenos Aires, La Plata, Córdoba, Rosario y Mendoza.
Uno de los actores centrales de la guerra mundial “Contraterrorista Global” -el ISIS-, ha realizado acuerdos básicos con las FARC, nuevo pivote del proceso revolucionario regional (10). La mesa de la negociación fue tendida por el PIE -Partido de la Izquierda Europea- en Berlín, en el año 2017. A su vez, las FARC -que han simulado su desarme- han desplegado en el Cono Sur sus avanzadas, en particular en el sur chileno y argentino con araucanos adiestrados por ellos en los años pasados, por pedido del PC chileno.
La dirigencia argentina vuelve a darle tratamiento de “seguridad pública” a estos acontecimientos estratégicos, como los ocurridos recientemente en El Chubut y Río Negro y la Defensa Nacional -frente a la nueva agresión estratégica revolucionaria- está en manos de jóvenes fiscales de “Justicia Legítima”.
Decía Gastón Bouthoul hace unos setenta años: “Si quieres la Paz, conoce a la guerra”. Tenemos la impresión de que Bouthoul ni Séneca -siglo I d C- aun no han sido leídos ni entendidos por los responsables de tantas muertes de inocentes en nuestro suelo. Decía el hispano-romano: “Peor que la guerra, es tenerle miedo a la guerra”. Luego de escuchar al Ministro Garavano sostener la necesidad de preservar el espíritu y la letra de la legislación de Seguridad Nacional vigente, tenemos la certeza que, como estratega civil, el ministro carece de la más mínima información de la situación política-estratégica en que vivimos, a pesar de que está presente en el puente de mando.
¿Ha comprendido -nuestra dirigencia- que la presente guerra mundial “Contraterrorista Global” es de naturaleza totalmente distinta a las dos anteriores -la GMII 1939/1945 y la Guerra Fría 1947/1991- y que -además- la actual no reconoce disuasión alguna?
Conocer la “naturaleza de las cosas” es imprescindible para abarcar a los temas estratégicos. Lo superficial y operativo, explican a la acción táctica. Sirve a la crónica de los hechos, al anecdotario, a la visión cortoplacista. Lo esencial-sustantivo está en la profundidad conceptual del hecho socio-político -fuera del alcance de los sentidos- y en su proyección en el tiempo, en el largo plazo.
La GMII fue total, convencional y “clásica”, localizada en teatros de operaciones militares. Fue la última guerra mundial de la civilización industrial. Cuando finalizaba -1945- se lanzaron dos bombas nucleares en Japón. Con ellas nació la Estrategia Contemporánea e ingresábamos -con la computadora- a la etapa de la civilización posindustrial, la “del conocimiento”. Einstein vaticinó que regresaríamos a las guerras primitivas, las de la honda, el arco y las flechas. Con la computadora cambió el ritmo de los acontecimientos y el número de las oportunidades. Se aceleró la Historia.
La pos-GMII fue muy breve: 1945/1947. En 1947 se inició la Guerra Fría, la primera guerra mundial en ambiente QBN. Ingresábamos a la estrategia de la disuasión, que funcionó en el hemisferio N. Se vivió allí la “Pax del terror nuclear”. En el hemisferio Sur -desnuclearizado- no hubo Paz. Hubo guerras no convencionales, asimétricas, terroristas-revolucionarias, totalmente sorpresivas para países mayoritariamente subdesarrollados y en crisis recurrentes.
En 1989 cayó del muro de Berlín y en 1991 implosionó la URRS. Finalizó la guerra fría. Fueron los primeros cuarenta y cuatro años de Paz en Europa y, durante ese período se elaboraron en sus Universidades las teorías filosóficas que “marchitaron su alma”. Europa relativizó su identidad y se hizo “contractiva”, desde entonces “se odia a sí misma”. Ello afectó a los argentinos, culturalmente europeizados. El “progresismo ideológico europeo” cruzó transversalmente a todo el arco socio-político argentino y una demostración de ello la hemos visto hace unos días, en el tratamiento del aborto en las calles y en el recinto de Diputados.
La posguerra fría -1991/2001- se caracterizó por la “confusión” de los intelectuales occidentales que intentaban predecir cómo evolucionaría el mundo y las guerras, luego de la prolongada estratificación de la bipolaridad de las Repúblicas Imperiales. Aparecieron teorías “idealistas”, “realistas”, “nihilistas” y muy pocas se acercaron a los acontecimientos que se precipitaron luego del 11Sep01, con el ataque del “terrorismo global” a la “fortaleza americana”.
Esa fecha es considerada por los estrategas teóricos como el hito que señala la iniciación de una nueva guerra mundial, que nos regresó a la estrategia de la acción. La “nueva” guerra mundial ya no se desarrolla en teatros de operaciones militares, sino en y sobre las sociedades. Las bajas -en su mayoría- son de civiles inocentes. El enemigo “sin rostro” carece de responsabilidad y de límites. Se inmola para hacer entender a Occidente que la vida no le interesa. Es la segunda guerra mundial en ambiente QBN, pero esta no reconoce a la disuasión, como la anterior.
De las guerras de tercera/cuarta generación, en acto en el 2001, llegamos al año 2018 con las guerras de séptima generación, que los chinos llaman “irrestrictas” y la OTAN “híbridas”, mientras la dirigencia argentina vive aun estratificada en la guerra fría (12).
Las sesenta guerras activas -en el mundo de hoy- todas son internas: “guerras civiles”. A éstas, nuestros visionarios legisladores las “prohibieron” por Ley y ésta doctrina es la que sostienen las querellas y fiscales de los TTOOFF: “en los ´70 no hubo guerra, aquello fue un genocidio”. ¿Será una casualidad?.
Kirchner y Garré quisieron asegurar el extrañamiento de las FFAA que las leyes de “inseguridad” impusieron al Estado Nacional. Reglamentaron la Ley de Defensa y determinaron que las únicas guerras posibles para la Argentina son las convencionales, con las FFAA de nuestros vecinos, con quienes -a la vez- ¡¡queremos integrarnos¡¡. El objetivo fue mantener las FFAA argentinas sin misiones a cumplir. Transformar a las Instituciones Armadas en burocracias inútiles.
El espacio interno se trasformó en “zona liberada” para la pseudo-revolución narco-terrorista, “nacional y popular”, que operó como una gran cortina de humo a través de la política de DDHH, con la que se encubrieron niveles de corrupción inéditos.
¿Qué porcentaje -de nuestros dirigentes- ha entendido que la clásica separación entre Seguridad Estratégica y Seguridad Pública ha desaparecido?
La metamorfosis de la guerra se ha acelerado (13) pues se ha acelerado el proceso civilizatorio que la contiene. La investigación y desarrollo han encontrado en la electrónica y en las comunicaciones los medios para acortar los tiempos en la generación de medios. Como lo adelantáramos, el ritmo de la acción ha cambiado. La adaptación de gran parte de la dirigencia argentina al ritmo de la nueva etapa, no existe. A ello se suma el salto cualitativo de la civilización: el ingreso a la “etapa del conocimiento”. Hay una nueva forma de producir y una nueva forma de hacer la guerra (14).
La mayoría de los pocos que entre nosotros “cambiaron” el ritmo, confundieron civilización con cultura. La civilización es la que aceleró su ritmo de evolución, entregándonos nuevos medios en cortos lapsos. La cultura es nuestra identidad. No evoluciona y si lo hace, nos corrompemos, pues se relativizan los valores y principios que la constituyen. Perdemos moral, ética, confiabilidad y credibilidad. Perdemos el crédito. Y eso es lo que ha ocurrido y continúa ocurriendo.
La civilización es “modernizable”, pero no lo es la cultura que la sostiene (14). “La cultura es lo que importa, es la que da forma al progreso”, como lo sostiene el Profesor S. Huntington, en el título de su último libro.
La manifestación más clara de la metamorfosis de la guerra a partir de la posguerra fría, es la “naturaleza” de la agresión de los actores “no estatales” -el complejo narco/terrorismo/revolucionario en nuestra Región- y, consecuentemente, de la imprescindible exigencia de reorganización del Estado y de la Seguridad Nacional, para evitarlos o eliminarlos.
Si esta agresión afecta a la población en su conjunto y al Estado Institucional -en todos sus niveles-, estamos en presencia de una agresión de naturaleza estratégica, pero ello no quiere decir que sea estratégica-militar.
Los nuevos actores agresores del Estado y de la sociedad, mayoritariamente no son estatales, constituyen una compleja asociación de milicianos, mafias, ONG, sectas fundamentalistas, etc. Y su modo de operar es, en la mayoría de los casos, a través del delito común, pero con consecuencias estratégicas.
Quienes hablan de sacar a los militares a las calles para combatir a la nueva amenaza, o son totalmente ignorantes del fenómeno belígero en el siglo XXI o bien quieren continuar en la actual situación y hacer del espacio argentino una gran “zona liberada” para nuestro enemigo sin rostro.
En consecuencia la Seguridad Nacional que reconocía hasta fines de la guerra fría su división en Seguridad Estratégica y Seguridad Pública, encaminadas orgánicamente por andariveles paralelos y alternativos, hoy ya no existe, pues operativamente se han incardinado, excepto en nuestro país, que llama “seguridad interior” a ambas y “defensa nacional” a la guerra clásica internacional, por Ley del Congreso; inédita ocurrencia que nos hace una reiterada excepción en el mundo.
La necesaria reorganización de la Seguridad Nacional debe considerar la “naturaleza” y la evolución del fenómeno socio-político “guerra”. La reciente creación del Ministerio de Seguridad por parte del gobierno K, nos da una clara idea de la ausencia de idoneidad y comprensión de la situación político-estratégica mundial, regional y propia, por parte de sus mentores. Cuando el mundo entero unifica a la Seguridad, la Argentina la divide, orgánica y geográficamente.
Cuando la Seguridad Nacional -en el orbe- unificaba o centralizaba sus componentes, el gobierno argentino las separaba, asegurando dejar a las FFAA sin sus funciones constitucionales. Es una prueba más de que los K, hipócritamente, siempre operaron dentro del Socialismo Siglo XXI, aunque no lo exhibieran públicamente como Bolivia, Ecuador o Nicaragua.
Desde 1988 la nueva agresión estratégica -internacionalizada en toda América- en el marco interno quedó en manos policiales y judiciales, absolutamente legos en la materia. Es lo que -sin duda- la “revolución” necesitaba y es lo que se ha logrado desde los años ´88/91 con las leyes perversas que hemos llamado “vacas sagradas”.
Bajo la excusa de lograr el “control civil” de los militares, la mayoría política dejó al país en absoluta inseguridad nacional.
Aun hoy, escuchamos por boca de las más altas autoridades del área, citar a una “seguridad interna” y “una seguridad externa”. ¿Alguien puede creer que un límite político puede detener una agresión estratégica? El criterio seguido por el legislador, fue cuanto menos absurdo. Es una prueba más que el fin perseguido por esta legislación ha sido la desaparición de las FFAA, del mismo modo en que se pretende la abolición del derecho penal.
Hemos propuesto -hace mucho tiempo- la unificación de la Seguridad Nacional en un solo Ministerio -el de Seguridad Nacional- con dos Secretarías: Defensa Nacional y Seguridad Pública. Ello nos permitiría facilitar la conducción de una Gran Estrategia Conjunta-Combinada, con economía de esfuerzos, unidad de objetivos, interoperabilidad, controles cruzados, etc.
Deberíamos iniciar -cuanto antes- la negociación de un Acuerdo de Seguridad Colectiva y Defensa Común con países “amigos” de la región y, obtenido éste, subrogar la vigente legislación perversa que nos lleva, sin dudas, a un permanente agravamiento de la situación de Seguridad Nacional y regional.
El Congreso Nacional, que con sus leyes y reformas nos ha llevado a la situación de grave inseguridad en que vivimos, no podría dejar de votar éste Acuerdo para llevarlo a categoría de Tratado que subrogue los desatinos jurídicos vigentes, frutos de nuestras guerras recientes. No votarlo demostraría mantener compromisos con nuestros enemigos de hoy; que son los de ayer, reciclados (15).
El Tratado recuperaría también un aspecto central e imprescindible para enfrentar a las guerras “híbridas”: su sostén agonal, actualmente destrozado por la supresión del Fuero Militar y de los Tribunales de Honor Sanmartinianos (16).
¿Es consciente -nuestra dirigencia- que el tipo de legislación de Seguridad Nacional vigente en nuestro país desde 1988 y 1991, es única en el mundo e intrínsecamente perversa?
Cuando se promulgó la actual Ley de Defensa Nacional, el “Cronista Comercial” nos publicó un artículo titulado “Se promulgó hoy la Ley de Indefensión Nacional”. No nos equivocamos. Tres años después -1991- en Santiago del Estero se incendiaba la Casa de Gobierno, la Legislatura y el edificio del Supremo Tribunal de Justicia, además de varios domicilios de legisladores. El gobierno nacional no pudo actuar para contener el “caos”. La Ley de Defensa se lo impedía.
Pocos días después de este hecho anárquico, uno de los artículos de la Ley de Defensa se transformaba en Ley de Seguridad Interior. En ésta, se mantenían los lineamientos de la “Ley de Indefensión” y se profundizaban sus desconceptos. Quedaba explícito que se cercenaban potestades que la Constitución le otorga al Cte J FFAA. Quince años después Kirchner-Garré reglamentaron la Ley de Defensa, para evitar que se la interprete de modo inconveniente a la pseudo revolución “chavista”, que empezaba a hacer agua.
El extrañamiento de las FFAA argentinas de su propio Estado quedaba asegurado y “el esfuerzo nacional de policía” recibía la responsabilidad de hacerse cargo de los desafíos estratégicos internos, es decir, de la Defensa Interior frente a las nuevas amenazas. Como el exabrupto hacía inviable a la reglamentación, la Ministro Garré afirmó al diario la Nación: “las nuevas amenazas no existen. Son una creación del Imperio para controlar a los países subdesarrollados”. Un paso más dentro de las falacias del “relato”.
Desde 1991 -con esta nueva legislación- la jerarquía institucional se invirtió, los presupuestos se invirtieron y los haberes de un Comisario, desde entonces, superan en un 30% al de un Oficial Superior de las FFAA. Éstas quedaron sin objetivos, sin cumplir las misiones centrales que la Constitución les impone. No fueron pocos los políticos que entonces se preguntaban: “¿para qué sirven las FFAA?”, mientras tanto nuestros vecinos duplicaban los presupuestos de Defensa, las reorganizaban y adquirían tecnologías de última generación.
Como era de prever, contemporáneamente las policías -totalmente ajenas a esta maniobra- fueron desbordadas por el delito común y corrompidas por el crimen organizado. Como correctivo, se nombraron ex jueces y fiscales como expertos polemólogos y estrategas civiles para “transformar y democratizar” -desde los Ministerios de Seguridad- a las “viejas policías de la dictadura”.
El fracaso de estas gestiones fue total, a un costo varias veces millonario y con miles de víctimas de la ignorancia, de la estupidez o del compromiso ideológico. Por último, se apeló al número. Con cursillos semestrales se incorporaron miles de nuevos agentes. Pero la inseguridad y la indefensión siguieron y siguen agravándose, día a día, a pesar de más patrulleros, más chalecos, más radios.
Los funcionarios bien intencionados, con mera visión táctica-operativa, siguen buscando “salvadores”: audaces legos que se animan a lo que no conocen. Los mal intencionados cosechaban lo que han sembrado y “cuando peor, mejor”, aunque los muertos inocentes aumentaban día a día y lo siguen haciendo.
La carencia de conceptualización y visión estratégica, más la no comprensión de que ya estamos en la “era posindustrial”, nos lleva a tropezar -reiteradamente- con la misma piedra, desde 1984 hasta la actualidad.
La próxima reunión del G 20 en la Argentina y los acontecimientos internacionales en curso, están obligando al gobierno a entender que se transita por un camino equivocado, que debe racionalizar la Seguridad Nacional y entender “la naturaleza de las cosas”. Pero, en la coalición gobernante están presentes los creadores de las “vacas sagradas”, son quienes reemplazaron la Política de Seguridad Nacional por la Política de DDHH (17).
¿Qué se hará entonces? ¿Prevalecerá la ideología o se impondrá la realidad de la situación política-estratégica, que hasta ahora se declaró inexistente? Con la sola eliminación de la Reglamentación de la Ley de Defensa no alcanza. Esta fue un mero reaseguro que buscaban los pseudo-revolucionarios en retirada. (18)
Si la Seguridad Nacional es la primera responsabilidad del Estado Nacional ¿no sería oportuno que la dirigencia argentina tome conocimiento de los desatinos ideologizados de los diletantes que nos ha traído a la situación presente y que, de una vez por todas, se inicie la normalización racional de la Seguridad Nacional? ¿Cuántos conciudadanos más deben morir para que como sociedad reaccionemos? El enroque de mandar las FFAA a las fronteras -con las manos atadas- y las FFSS a la grandes ciudades, es hacerle el juego al “enemigo sin rostro”, además de demostrar falta de idoneidad, ausencia de ideas, de audacia y de la energía que exige la circunstancia en que vivimos.
Ha llegado el momento de imitar a Demóstenes, cuando se dirigía a los atenienses “para convencerlos a obrar correctamente”. Son los fines los que indican qué medios necesitamos para la reconstrucción. Y las “leyes de inseguridad” prohíben el planeamiento de las verdaderas amenazas.
Desde el Estado -en años pasados y en nuestra presencia- se ha tratado de “vender” a nuestros vecinos el modelo de legislación de Seguridad Nacional argentino, pero nadie lo “compró”. Hemos sentido vergüenza ajena por las respuestas que recibieron nuestros empinados “vendedores”.
Está presente la oportunidad para entender la “naturaleza del fenómeno socio político” que enfrentamos, que es estratégico, pero no estratégico militar. Su solución exige una Gran Estrategia conjunta-combinada y fuertes controles cruzados.
Ese es el rol militar en esta nueva guerra asimétrica de séptima generación y no subordinar las FFAA a las policías, como seguridad fronteriza desarmada.
Hay que restablecer los roles constitucionales de la instituciones. Solo la miopía del lego puede repetir los fracasos conocidos del empleo táctico de las FFAA, cualquiera fueren sus formas, para combatir al narcoterrorismo. Ésta opción ya ha fracasado en Iberoamérica. Regresemos a la Constitución Nacional y entendamos la circunstancia política-estratégica “líquida” que nos rodea, en el siglo XXI.
El FMI nos ha entregado un crédito superior al que solicitamos -el 25% de su encaje-. Hasta hoy no se ha escuchado un solo comentario que interrelacione la situación política-estratégica del subcontinente, con la crisis cambiaria y el nuevo crédito argentino. ¿Es porque no se entiende la naturaleza de la nueva guerra mundial en Iberoamérica, o porque no existe una visión global de la situación regional, o porque la ciudadanía debe ignorarla, para beneficio de unos pocos?
El presidente dijo que “ya no hay más lugar para la locura en la Argentina”, dirigiéndose al peronismo. Me pregunto si el oficialismo y la oposición han entendido los mensajes con que el G7 dio sus instrucciones a Lagarde. Si no las entienden, la “locura” que avizoramos seguirá adelante. Será nuestra disgregación territorial.
Una “Gran Nación”, en el siglo XXI, no soporta la conducción de “pequeños políticos”. Una visión geopolítica y estratégica del mundo globalizado es indispensable dado los movimientos tectónicos posguerra fría.
¿Confunde -nuestra dirigencia- el concepto de “populismo” con el de “revolución”, o es una confusión a designio como parte del “relato” o de la “narrativa de la memoria”?
El temor reverencial que la izquierda revolucionaria ha logrado imponer a gran parte de nuestra dirigencia y particularmente a algunos medios de comunicación, ha logrado que -públicamente- el empleo de ciertas palabras esté sumamente restringido. Las enseñanzas del “Grupo de Frankfurt” han sido sumamente eficaces.
Tal es el caso del término “revolución”. Se lo ha reemplazado por el de “populismo”, pues éste último “huele a oveja”, se acerca a “pueblo” o a lo “popular” y ello es bueno para la modalidad gramsciana de hacer la “revolución”. No se habla de “guerra contrarrevolucionaria” sino de “genocidio”, no porque se ignore el desconcepto, sino porque no se podría continuar con el “circo jurídico de los juicios de lesa humanidad”, si se aceptara que hubo una guerra no convencional, como la hubo.
Si las palabras exponen el contenido de las ideas o de un mapa de ellas -el concepto-, podemos cambiar el sentido de las ideas o conceptos, reemplazando las palabras e invirtiendo el proceso mental-discursivo. Afectar las ideas o conceptos, desde el reiterado mal empleo de las palabras.
Pongamos atención en los informativos televisivos o radiales o en los titulares de los medios escritos y encontraremos a éste ejercicio -altamente eficaz-, repetido una y mil veces a lo largo del tiempo. En los medios se llama “represor” a un soldado, pero los soldados combaten, no reprimen como lo hacen Jueces y sus auxiliares, según reza el código penal. Pero “represor” tiene un efecto mucho más eficaz al fin perseguido por el revolucionario o el periodista consciente o inconsciente que los sirve.
Al “terrorista” se lo cita como “disidente político”, al “agresor” como “víctima de una persecución ilegal”, a los “centros de reunión de prisioneros” como “lugares clandestinos de detención ilegales” y así podríamos continuar citando un lenguaje que se origina en las usinas revolucionarias de propaganda, pero que es totalmente tomado por el periodismo y aun por la justicia penal federal.
El resultado es paradójico. Gran parte de la sociedad ayer agredida, hoy habla, piensa y alienta a su antiguo agresor. Nuestros DDHH, que fuimos a defender, quedaron en manos de los agresores revolucionarios comunistas que no respetan un solo derecho humano en donde gobiernan. Pero ello no es percibido por la gran mayoría. Ello nos da una idea de la idoneidad de quienes conducen estas operaciones especializadas sobre la opinión pública.
¿Conoce -nuestra dirigencia- cuál es el principal riesgo estratégico y cuál es la principal amenaza estratégica de la Argentina actual?
Hay un importante sector dirigencial que entiende que la ciencia y arte de la Estrategia, es de exclusiva responsabilidad militar, probablemente porque así eran designados los comandantes -estrategas- de las fuerzas griegas, en la antigüedad. La Estrategia, en nuestro tiempo, como dependencia de la Política, es su expresión activa. La Gran Política determina los Objetivos Políticos generacionales y la dosificación del poder para alcanzarlos. La Gran Estrategia maniobra para lograrlos, resolviendo los conflictos que encuentra en el camino.
La formación como estratega de quien decide ingresar a la Gran Política, es indispensable y también lo es para quienes asumen responsabilidades estratégicas sectoriales, en el alto nivel político. La exigencia constitucional de idoneidad no se está cumpliendo en el área de la Seguridad Nacional. Hay quienes creen que la guerra es responsabilidad de los militares. No es así. La guerra es un hecho socio-político. Se abre y se cierra en el plano político. Los militares se ocupan de la batalla -en el nivel estratégico militar- y de los combates -en el nivel operacional y táctico-. A la guerra la deciden y orientan los responsables del plano político, en el más alto nivel del poder nacional.
Por todo lo expresado, el conocimiento de los “riesgos y amenazas estratégicas” por parte de “quienes viven dentro de las murallas”, es de exclusiva y excluyente responsabilidad política, con asesoramiento del alto comando militar. Si esa responsabilidad era ya importante en tiempos históricos, hoy, en tiempo de las guerras asimétricas, civiles y que tienen como espacio de desarrollo a la sociedad misma, ese conocimiento es central (18).
El 70/80 % del esfuerzo de las guerras de séptima generación se desarrolla para lograr el “manejo de la opinión pública interna y externa”, sin lo cual estas guerras están perdidas de antemano.
La Argentina de hoy, ante exigencias situacionales que obligan a volver la mirada sobre las olvidadas y humilladas FFAA, ¿en qué estadio nos encontramos para “recuperarlas en tiempo”, con una ex – guerrillera en la presidencia de la Comisión de Defensa en la Cámara de Diputados y con los redactores de las leyes de inseguridad en la conducción del área de defensa y en la supervisión de la formación y perfeccionamiento de los cuadros militares?
¿Cómo podemos recuperar una sana Política de Seguridad Nacional, reemplazada hace décadas por la Política de DDHH, si su principal operador-querellante ante los TTOOFF y apoyo financiero de las organizaciones de DDHH dependientes del Foro de Porto Alegre, es el propio Estado Nacional a través de su Ministerio de Justicia y de la Secretaría de DDHH?
Desde 1984 el “riesgo estratégico principal” de nuestra Patria, es la pérdida del Estado Institucional, que ha sido ferozmente atacado en su núcleo duro –las FFAA-, empleando para ello a la prensa adicta, al presupuesto nacional y a la Justicia Penal Federal que a la vez se auto-destruye corporativamente al prevaricar en conjunto y conscientemente.
Dichos ataques han sido inducidos por nuestros enemigos en las guerras de fines del siglo XX, actuando de consuno y la ejecución ha sido instrumentada por los sucesivos gobiernos, desde 1984, con breves intervalos en los que se persiguió la “pacificación”. De esa manera, cuando llegamos a diciembre de 2015 estábamos a un paso del “Estado Fallido” (19).
Pensábamos que en los primeros cien días del nuevo gobierno habría un giro copernicano que recuperaría a las Instituciones, para que ellas condujeran “el regreso a la normalidad”. No fue así. Algunos componentes de la coalición de gobierno lo impidieron y muy probablemente seguirán haciéndolo. El sincericidio de Artaza, cuando dice por TV “no sé qué hace mi partido en éste gobierno”, nos releva de mayores aclaraciones. El “Estado Fallido” continúa siendo nuestro “riesgo estratégico principal”, siguiendo ahora el ritmo del nuevo “gradualismo pos-turbulencia cambiaria”.
Desde 1984 la “amenaza estratégica principal” de nuestro país es el narco-terrorismo–revolucionario, en continua evolución y fortalecimiento en el transcurso de las últimas décadas. Los rumores, trascendidos y discursos oficiales recientes, referidos a la “reconversión” de las FFAA sin el reemplazo de las “vacas sagradas”, la hacen absolutamente inviable. Esas leyes han hecho del espacio argentino una enorme “zona liberada” para la agresión del narco-terrorismo-revolucionario y el delito común, en la continuidad histórica del proceso estalinista iniciado en 1959/60.
EN CONCLUSIÓN:
La naturaleza de las guerras en acto exigen que la ciudadanía conozca y participe en la Seguridad Nacional, frente a la grave situación estratégica que nos afecta. Nuestra población, al respecto, permanece absolutamente desinformada.
Somos un país en doble posguerra y convivimos con un “doble estado de guerra” pues ambas permanecen abiertas dentro de esa categoría. La mayoría de nuestra dirigencia lo ignora.
Nos abarca una guerra mundial en su decimoséptimo año de discontinuo desarrollo. Es la segunda en ambiente QBN, pero esta no reconoce disuasión y por ello una sorpresa violenta es inevitable en cualquier lugar del mundo. Tampoco es conocida, pues se entiende que nos es ajena.
La Seguridad Pública y la Seguridad Estratégica se han incardinado durante la posguerra fría. El mundo reorganiza al Estado Nación para asumir y resolver a los nuevos desafíos estratégicos. Mientras tanto la Argentina continúa desorganizada, ignorando la naturaleza de los riesgos y amenazas presentes y piensa con criterios ideologizados o con ideas del siglo XIX (20).
Nuestra inseguridad nacional no es casual. Es consecuencia de la inédita y perversa legislación vigente inducida por nuestros enemigos, que extrañó a las FFAA del Estado y entregó las responsabilidades estratégicas internas a las policías. El precio en vidas inocentes que estamos pagando, es enorme.
Existe una evidente actitud política y periodística -de algunos sectores- que tiende a ocultar la agresión terrorista revolucionaria de los años ´60, ´70 y ´80 y sostienen una constante apelación al “terrorismo de Estado”, con la finalidad de tergiversar la historia y mantener una narrativa favorable a un proceso revolucionario neo-marxista, derrotado en el terreno y en las urnas, pero aun presente.
El “entrismo de izquierda” en los partidos políticos tradicionales desde los ´80 y el “progresismo europeo”, transversal a todo el espectro político partidario, ha quebrado a nuestra identidad cultural, nos ha llevado a una sociedad “light”, “pos heroica” y “contractiva”, que en la búsqueda del “bien-estar” ha perdido el “bien-vivir”, ha aceptado el progresivo vaciamiento institucional del Estado y no es consciente del trastocamiento de la victoria táctica argentina contra el agresor revolucionario, en una derrota político-estratégica que nos lleva al “Estado Fallido” y a un probable regreso a una situación revolucionaria que creíamos superada (21).
La “política de DDHH” ha reemplazado a la “política de seguridad nacional” desde 1984 y ello no ha cambiado el 10 de Diciembre de 2015. Permanecemos en inseguridad pública e indefensión estratégica y las innovaciones prometidas profundizan los desconceptos originales, retenemos el “riego estratégico” y la “amenaza estratégica” se expande desde la faceta “narco-terrorista” hacia una aproximación preliminar de la etapa final “revolucionaria”. El IEEBA ha planteado, en las últimas décadas, una propuesta para resolver estos desafíos, pero no hubo respuestas por parte de los responsables estatales.
La Argentina vive una situación que no da lugar a seguir ocultando la verdad. TODA LA VERDAD. El agravamiento de la inseguridad tiene, en la muy probable recesión económica del segundo semestre, un peligroso catalizador.
Por lo dicho, hago mías las palabras del Ex Cte Supremo del Pacífico:
BIBLIOGRAFÍA:
(1). G. Cabanellas de Torres. “Diccionario Militar”. Tomo I. Bibliográfica Omeba. 1961.
(2). E. de Vergara. “Las diferencias conceptuales entre Seguridad y Defensa”. Febrero de 2009. www.ieeba.org
(3). H. J. Auel. “La Argentina Encapsulada”. Julio de 2010. www.ieeba.org
(4). H. J. Auel. “El Estado Nación regional frente a las amenazas estratégicas globalizadas”. Junio de 1998. www.ieeba.org
(5). H. J. Auel. “La dirigencia argentina frente a los desafíos de la Seguridad Nacional en el siglo XXI”. Agosto de 2015. www.ieeba.org
(6). H. J. Auel. “Escándalo judicial en Tucumán”. 25 de Mayo de 2016. www.ieeba.org
(7). H. J. Auel. “El narco-terrorismo, el Estado Nacional, la democracia y las FFAA”. 26 de Abril de 2014. www.ieeba.org
(8). J. B. Jofre. “Fue Cuba”. E. Sudamericana. 2014.
(9). H. J. Auel. “Relaciones cívico-militares, la necesaria reconstrucción del Estado y de la imprescindible Seguridad Nacional, Regional y Continental”. 2013. www.ieeba.org
(10). H. J. Auel. “Las Farc-EP, actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano”. 05 de Septiembre de 2017. www.ieeba.org
(11). H. J. Auel. “La guerra mundial contraterrorista global, ¿híbrida…con derivación QBN”. Abril de 2015. www.ieba.org
(12). La ilegitimidad e ilegalidad de la actual legislación de Seguridad Nacional queda demostrada por los sucesivos presidentes que la incumplieron, o intentaron hacerlo. El primero de ellos fue el mismo presidente que la promulgara, el Dr. Alfonsín, que empleó ilegalmente tropas militares para recuperar al RIMec 3 -tomado por Gorriarán Merlo con terroristas contratados- a través de una “orden verbal”. El presidente de la Rúa, intentó emplear ilegalmente fuerzas militares ante el caos desatado en Plaza de Mayo, con numerosos muertos, a través de “una sugerencia”. Recientemente, la presidente Kirchner empleó ilegalmente elementos de las FFAA en el “Escudo Norte”, con “una resolución administrativa” y una doble simulación: debían simular la ejecución de ejercicios militares ante la Justicia, mientras simulaban que “contralaban” las fronteras, ante la prensa, pero en los hechos tenían prohibición de hacerlo, -un detalle más del falaz “relato”-.
(13). H. J. Auel. “El pensamiento estratégico militar en el siglo XXI”. Octubre/Noviembre de 2017. www.ieeba.org
(14). H. J. Auel. “Cultura y Civilización – La Guerra: continuidad y cambio”. Diciembre de 2001”. www.ieeba.org
(15). J. Corrado. “Las Guerras de la Tercera Especie en las Américas, en el ámbito de la Guerra Mundial Antiterrorista”. Octubre de 2002. www.ieeba.org
(16). H. J. Auel. “La política de DDHH, el muro más alto a superar por el actual gobierno”. 22 de Junio de 2016. www.ieeba.org
(17). H. J. Auel. “Política de DDHH Vs. Política de Seguridad Nacional”. 01 de Agosto de 2017. www.ieeba.org
18). J. Corrado. “Las Guerras de la Tercera Especie en las Américas, en el ámbito de la Guerra Mundial Antiterrorista”. Octubre de 2002. www.ieeba.org
(19). H. J. Auel. “Arena… ¿o pan rallado?”. Diciembre de 2017. www.ieeba.org
(19). H. J. Auel. “¿Habrá reformulación de la Seguridad Nacional?”. 01 de Agosto de 2017. www.ieeba.org
(20). H. J. Auel. “Terrorismo Global y terrorismo doméstico en el siglo XXI”. Octubre/Noviembre de 2017. www.ieeba.org
(21) F. G. Auel. Tesis de la Licenciatura de Estrategia: “La Argentina y su probabilidad de llegar a la situación de Estado Fallido, como riesgo estratégico en el mediano plazo”. Agosto de 2011. www.ieeba.org
PrisioneroEnArgentina.com
Julio 4, 2018
SERÁ VENGANZA. El documental
La producción del Centro de Estudios de Historia, Politica y Derechos Humanos de Salta presenta el documental dirigido por Andrés Edmundo Paternostro, que fuera prohibido en la Feria del Libro en Argentina.
English Version
A Centre for the Studies of History, Politics and Human Rights of Salta presents: An Andres Edmundo Paternostro documentary
FOR THE SAKE OF REVENGE
[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end]
versão portuguesa
Centro de Esttudos em Historia, Politica e Direitos Humanos Salta apresenta: Un documental de Andres Edmundo Paternostro
SERÁ VINGANçA
[/ezcol_1half_end]
PRISIONEROenARGENTINA.com
Mayo 5, 2018
¿HABRÁ ´REFORMULACIÓN´ DE LA SEGURIDAD NACIONAL?
Por
Grl Heriberto Justo Auel
Abril de 2018
LA GRAVE INSEGURIDAD NACIONAL, TIENE BASE LEGAL/ILEGAL.
¿HABRÁ ´REFORMULACIÓN´ DE LA SEGURIDAD NACIONAL?
LA GRAVE INSEGURIDAD NACIONAL, TIENE BASE LEGAL/ILEGAL.
El día 20 de Marzo pasado, en el ámbito de la Academia Argentina de Asuntos Nacionales e Internacionales, desarrollamos muy brevemente -en una conferencia- el tema del epígrafe. Hoy nos disponemos llevarlo al papel a solicitud de Profesores Patagónicos asociados a nuestro Instituto, ostensiblemente preocupados por los acontecimientos terroristas provocados por la RAM -en los últimos años- en el Comahue y las graves promesas formuladas por su jefe ante el juez que hace unas semanas lo extraditó a Chile.
Puede llamar la atención de nuestros lectores que el título se presente como un interrogante. Ello se debe a que la información fragmentada que hemos recogido hasta hoy, acerca del esencial problema de la “reformulación”, nos trae serias dudas en cuanto a su viabilidad, por cuanto existe un condicionante-determinante: “solo se removerá la Reglamentación de la Ley de Defensa” -2006-, obra de la ministro Garré dieciocho años después de la promulgación de la Ley de Defensa -1988- y catorce años después de la promulgación de la Ley de Seguridad Interior -1992-.
Humildemente, pensamos que ello impedirá alcanzar la “reformulación” de la Seguridad Nacional (1). A lo sumo se reducirá el presupuesto y el número de personal, se venderán propiedades y se modificará el despliegue de los elementos. Operaciones cosméticas que encubrirán que “todo sigue como era entonces”: la inseguridad pública y la indefensión estratégica SE AGRAVARÁN. Su base legal seguirá siendo ilegal (2).
La ley de Seguridad Interior fue la ampliación de un artículo de la Ley de Defensa y la tardía Reglamentación de ésta última modificó -en el 2006- su espíritu y su letra, convirtiéndola de hecho en una nueva Ley de Defensa ¡dictada a través de un decreto del PEN!.
Esta grave irregularidad jurídica se sumaba a otras, aun más graves. La Ley de Defensa -de 1988- y la de Seguridad Interior -de 1992- cercenaron los derechos que la Constitución Nacional le otorga a los Cte (s) J FFAA a pesar que -irresponsablemente- hayan sido dos de ellos quienes las promulgaron. Habían pasado incólumes por las Comisiones de Asuntos Constitucionales de ambas Cámaras y ambas Cámaras las aprobaron ¡por unanimidad! (3)
Estos múltiples desatinos anticonstitucionales son una clara demostración de los vientos que soplaban en esos años de nuestras posguerras y de nuestras derrotas estratégicas.
“En estos momentos no podemos hacer otra cosa”, me decían los políticos de las más diversas extracciones, cuando se les señalaba la irracionalidad de la legislación de “inseguridad” que habían elaborado. Eran conscientes de su extravío, excepto aquellos que sí sabían lo que hacían: las FFAA eran extrañadas -como instituciones- del Estado Nacional, por ley. No tendrían verdaderos objetivos a cumplir y por lo tanto, tampoco entregarían valor agregado alguno a la nación, a la que se debían. No habría en adelante reconocimiento social hacia las FFAA.
Eran los autores de estas leyes quienes preguntaban y aun preguntan públicamente: “¿para qué sirven las FFAA”?. Lo que no les fue posible en los combates de los ´60/´70, lo lograron desde 1984 en el Congreso Nacional: las FFAA “residuales”, bajo control civil “subjetivo” (4), ya no serían un obstáculo para el proceso revolucionario iniciado en 1959 y que aun continúa, sin plazos y por otros andariveles.
Así las cosas, el diario La Nación del 06 Mar 17, en su editorial preguntaba: ¿Cómo deberíamos considerar al EI (5), un ente nacido a fines de 2013 y con presencia destructiva hoy en al menos 18 países?. Y responde -sin ser un especialista en el tema el responsable del editorial-: “Deben actualizarse las normas y optimizarse la estructura operativa y el despliegue estratégico de las Fuerzas Armadas para potenciar su capacidad disuasiva mediante equipamiento moderno y organización para respuestas inmediatas y eficaces ante situaciones de amenazas internas y externas”.
Un año después del Editorial de marras, nuestra absoluta inseguridad y total indefensión continúan, como lo demuestran las periódicas mediciones de opinión y la situación que nos aflige. Son -en las últimas décadas- preocupaciones centrales de nuestra población. Sepamos que ambas se originan en la legislación perversa e inédita que nos han dejado los continuadores, admiradores o sumisos representantes de las derrotadas organizaciones armadas de los ´60, ´70 y ´80, desde 1988 hasta hoy, luego de “trastocar” su derrota táctica en victoria estratégica, a fines de 1983.
El martes 13 de Junio de 2006, “Página 12” celebró con júbilo el éxito alcanzado con la firma del presidente de la Rca. de la Reglamentación de la Ley de Defensa, en presencia de los cuatro Jefes de los EEMMFFAA, impávidos, ingenuos y complacientes. Sin duda que era un importante paso para el “socialismo siglo XXI” -nombre adoptado por el castro-comunismo en ese momento-, que lograba, en la ruta para alcanzar el “estado fallido” (6), inmovilizar aun más a las FFAA. Decía el diario oficialista K, Página 12, aquel 13 de Junio de 2006:
“A contramano de los deseos de los Estados Unidos, que insisten con la necesidad de borrar la frontera entre defensa y seguridad interior, Garré destacó que el decreto describe con “absoluta precisión cuál es la responsabilidad primaria de las Fuerzas Armadas, dejando afuera claramente cuestiones que tienen que ver con la seguridad interior”. Aclaró que “las denominadas nuevas amenazas (terrorismo, narcotráfico y crimen organizado) no son materia de responsabilidad de las Fuerzas Armadas”, cuyo trabajo –indicó– “debe orientarse estructural y organizativamente hacia la conjuración de situaciones de agresión externa perpetradas por fuerzas armadas de otro Estado”.
En ese contexto, la ministro puso el acento en la posibilidad de “proyectar con los otros países de la región un Sistema de Defensa Subregional, interdependiente, interoperable, con medidas de confianza mutua y condiciones políticas suficientes para generar un proceso muy especial en esta región, que es una región de paz”. Los considerandos del decreto estipulan en forma taxativa que “se rechazan enfáticamente todas aquellas concepciones que procuran extender y/o ampliar la utilización del instrumento militar en funciones ajenas a la defensa y a cargo de otras agencias del Estado, usualmente conocidas bajo la denominación de nuevas amenazas”. (Las negritas y subrayados son nuestros).
Habían transcurrido solo ocho años desde último asalto del ERP al RIMec 3, en la Tablada y por Decreto la Ministro de Defensa expresaba -en presencia de los altos mandos militares- que no habría riesgo o amenaza estratégica alguna dentro de los límites del país. Debían orientarse -las FFAA- “estructural y organizativamente hacia la conjuración de situaciones de agresión externa, perpetradas por FFAA de otro Estado”.
Alguien debería avisarle a la ex-ministro de defensa -¡hoy presidente de la comisión de defensa de la Cámara de Diputados!- que transcurridos doce años de su “brillante” reglamentación, las sesenta guerras activas en el mundo SON TODAS INTERIORES. GUERRAS CIVILES, SRA (7). Si la ex–ministro tuviese un mínimo resto de vergüenza o “discernimiento”, debería renunciar a su actual cargo en la Comisión de Defensa. Como polemóloga nos da vergüenza ajena. Como ex-guerrillera, debería estar entre rejas.
EEUU había recibido dentro de su “fortaleza bioceánica” el ataque del 11S01 y días después ese espacio ya era una nueva área estratégica. No era Washington “que insistía con la necesidad de borrar la frontera entre defensa y seguridad interior”, era la dura realidad posguerra fría que el relato oficial K ocultaba, provocando innumerables víctimas inocentes en el país, para llevar adelante la pseudo-revolución y una sistemática corrupción, que terminará desplazándolo del poder el 10 Dic 15.
Sin dudas que el objetivo de la extemporánea reglamentación era reasegurar jurídicamente lo que ya se había establecido en las Leyes de “Inseguridad”. La revolución siglo XXI empezaba a hacer agua, a pesar de que “había llegado para quedarse” o “que iban por todo”. Era necesario avanzar un poco más en la maniobra del “control civil de los militares”, a pesar de haber logrado su desarme por vía presupuestaria, su división entre retirados y activos por vía de sus haberes y, principalmente, continuaban llevándonos masivamente a los legos TTOOFF y para juzgarlos ilegalmente, como criminales comunes, buscando su aplastamiento moral.
El propio presidente de la CSJ -factor clave de esta última maniobra- aun hoy intenta, periódicamente, legitimar sus gravísimas arbitrariedades escudándose en que cumple con una “política de estado”. Como ex-montonero no puede ignorar el Dr. Lorenzetti que, lograda la eliminación de la capacidad operacional de las Fuerzas, a él se le ha encomendado la eliminación de la autoestima de los soldados argentinos por vía judicial. PERO, hay muchos “Larraboures” y muchos “Lunas” en las FFAA argentinas, que cantan el Himno mientras los torturan física y moralmente. Saben que la verdad llegará y están preparados -desde sus cunas- para esperarla, aunque ya sean ancianos. Es el testimonio que hoy la Patria nos exige a los de edad provecta, ante las nuevas generaciones.
EL RIESGO ESTRATÉGICO CENTRAL QUE PADECE NUESTRA ARGENTINA.
Hace décadas que el riesgo estratégico central de nuestra querida Patria es la pérdida progresiva y constante del Estado Institucional, en todos sus niveles. Probablemente por ser éste un concepto abstracto nuestra dirigencia no lo asume, pues no lo ve. El nivel de degradación alcanzado por las Instituciones Constitucionales exigirá un esfuerzo muy lúcido y prolongado para recuperarlas, si llegáramos en algún momento a comprenderlo y decidirlo.
En lo que hace a la “reformulación” de la Seguridad Nacional, específicamente, la recuperación de la Institución FFAA es una condición previa e imprescindible a la existencia de un status de Seguridad y Desarrollo. Las FFAA constituyen el núcleo duro del Estado Nacional. Junto a la Institución Judicial otorgan a la sociedad la Pax y la credibilidad necesarias para alcanzar nuestra pretendida recuperación socio-económica.
Ésta no va a llegar si no se recupera previamente la confianza en el país y ésta es solo posible si tenemos Seguridad y Justicia, obligaciones primarias del Estado-Nación y su razón de ser.
Si quienes conducen el país no comprenden esta exigencia y no establecen prioridades para el restablecimiento del Estado Institucional -como instrumento jurídico indispensable al logro de los objetivos establecidos- no habrá inversiones ni salida del estancamiento. Lo que habrá es desconfianza, “resistencia” conducida, desarticulación de las coaliciones electoralistas, desorden social e inconformismo violento y creciente. El gobierno busca “ganar tiempo” para llegar al “mundial” y luego al segundo semestre, pero en realidad está perdiendo un tiempo que no volverá, mientras la revolución agazapada se recupera y desgasta.
Estamos saltando de un trapecio muy elevado a otro, sin red de seguridad y sin pacificación. Pretender salir del sigiloso proceso revolucionario argentino a la “normalidad”, citando a aquel como mero “populismo” y priorizando a la economía en detrimento de la Seguridad y la Justicia, es absurdo. Es cobardía frente a los actuales espantapájaros de la izquierda revolucionaria y un fracaso anticipado. Es no entender la naturaleza de las cosas y no haber aprendido nada en los últimos tiempos, a pesar de los dramas ya vividos (8).
No desconocemos que hacerlo es difícil. Muy difícil. Décadas de trabajo psicopolítico sobre el electorado han creado falsos mitos, un relato falaz y hasta un nuevo lenguaje. Cuando más se demore en retomar el camino de la Verdad y de la Justicia, las probabilidades de un regreso “revolucionario” serán aún mayores. Es lo que ya insinúa su presencia callejera bajo la consigna de la “resistencia” y que percibe cualquier observador independiente, con sensores bien formados en Ciencias Sociales.
Si no se asume que ambas instituciones -FFAA y sistema judicial- han sido desarticuladas por nuestros enemigos del siglo XX (9) a través de la colusión -tan evidente como desconocida- de la inteligencia británica y del neoterrorismo revolucionario, el restablecimiento institucional del Estado Nacional será imposible. El oportuno empleo de una maniobra estratégica de aproximación indirecta en los ‘80 nos ha inducido la auto-destrucción del Estado Nacional (10) y frente a ello solo se observan escasas reacciones intuitivas. Las dirigencias no están a la altura de los desafíos actuales y la sociedad se siente huérfana. Que mil “intelectuales progresistas” rechacen el encausamiento de Luis Mattini en el caso Larraboure, da una idea del alcance y penetración de la “narrativa revolucionaria” (11).
Nuestra Justicia Penal Federal está destruyendo a las FFAA -al Ser Militar- y al hacerlo se suicida, arrasando con la Constitución, con los principios del derecho penal y con la credibilidad de todo el sistema judicial, puesto hoy en la picota, como nunca antes en nuestra Historia Institucional (12).
Con lo expresado, queda dicho que no habrá “reformulación” de la Seguridad Nacional si no se inicia primero la recuperación del núcleo duro del Estado-Nación: las FFAA y el Sistema Judicial. A partir de allí -y recién entonces- habrá que encarar con realismo a las “verdaderas amenazas estratégicas” que el concierto internacional ha reconocido hace años y las ha asumido rápidamente, terminada la posguerra fría (13). En la Argentina encapsulada de los K (14) se pretendió ignorar la actual circunstancia mundial, dinámica y conflictiva, reemplazándola con un “amañado relato” aun subsistente en gran parte de la comunicación social y de la sociedad.
Si se recuperara la posibilidad de reiniciar el planeamiento estratégico, la inteligencia estratégica, la reorganización de la Defensa, de las FFAA y de los sistemas de armas, se asegurarían los objetivos de largo plazo. Habría credibilidad creciente. Son los fines los que indican qué medios (15). Por el momento esta metodología está invertida. Hay propuestas anunciadas de nuevas organizaciones y nuevas adquisiciones, sin que se hayan establecido con anterioridad qué tipos de guerra se prevén, en qué ámbitos geográficos, en qué oportunidad, etc. Las “vacas sagradas” –la legislación vigente- que nos dejaron los simpatizantes de la pseudo-revolución, lo impide (16).
En el ámbito de la Seguridad Nacional el “gradualismo del cambio”, aun no ha llegado. Se han tomado algunas decisiones positivas en áreas administrativas secundarias, pero no se lo ha hecho en sus áreas centrales, de naturaleza estratégica. Desde 1991 la perversa “política de derechos humanos” -como instrumento eje de la maniobra neo-marxista en Iberoamérica- sigue ocupando el espacio de una imprescindible y sabia “Política de Defensa”, frente a los “estados de guerra” heredados y frente a los múltiples, nuevos e inéditos conflictos que nos abarcan, en el siglo XXI.
LAS AMENAZAS ESTRATÉGICAS SURGIDAS EN LA POSGUERRA FRÍA.
Contrariamente a lo expresado por la ministro Garré y su diario preferido Página 12, el narcoterrorismo y el crimen organizado -las mafias- constituyen actualmente los pilares de sostén del proceso pseudo-revolucionario que conduce el Foro de San Pablo -FSP-: son las principales amenazas estratégicas de Iberoamérica en las primeras décadas del siglo XXI. En Argentina estas amenazas estratégicas están en manos policiales, como meros hechos de seguridad pública. Es por ello que a la vigente legislación de Seguridad Nacional la calificamos de “perversa”.
La razón de negar la existencia de dichas amenazas y además sostener una legislación de altísimo costo en vidas de inocentes, es que el neo-marxismo se sostiene financieramente con estas ONG, con las que ha firmado “acuerdos estratégicos” (17). Eliminar o controlar la Seguridad Nacional y sus medios les permite a estas organizaciones territorialidad -santuarios-. Se han constituido en los nuevos enemigos de Occidente y han obligado repensar las “guerras asimétricas”. La mayoría de la dirigencia política argentina, niega estos hechos objetivos.
Reconocer la existencia de las “nuevas amenazas estratégicas” no quiere decir que estas sean de carácter “estratégico militar”. La agresión la producen civiles, terroristas, milicianos, delincuentes de guantes blancos o negros, religiosos extraviados y ONG (s) de variadas especies -desde derechos humanos, feministas, verdes, indigenistas radicales y hasta entidades de beneficencia-. Quienes no conceptualizan al nuevo fenómeno belígero, imaginan a las tropas militares desplegadas en las calles para enfrentar al nuevo enemigo no estatal. GRAVE ERROR. No ven lo sustantivo, sino solamente lo verbal: la acción operacional. Son mentalidades tácticas que nos pueden llevar a un nuevo gran fracaso.
Hemos repetido hasta el cansancio que la violencia en las guerras de la civilización pos-industrial ya no se desarrolla en los teatros de operaciones militares, sino sobre las sociedades. Las bajas son mayoritariamente civiles inocentes. En consecuencia, darle a una agresión de éste tipo una respuesta militar-operacional, es no entender la naturaleza del desafío a superar. Lo que exige esta sorpresiva innovación socio-política, es una Gran Estrategia, elaborada en el alto nivel conjunto-combinado. Es allí donde aparece el rol de las FFAA y luego, en una función necesariamente combinada, la supervisión cruzada del Plan Regional Estratégico General. Ante una agresión “internacionalizada”, una respuesta “internacionalizada”.
El eventual próximo resultado electoral en Brasil y el destino de Lula en un calabozo, constituyen hechos definitorios para la pseudo revolución Iberoamericana. No olvidemos que Lula es el Nro 2 en la cúpula del FSP, hoy prácticamente acéfalo. El PT, sin Lula, difícilmente retenga la Secretaría ejecutiva del Foro, que pasaría de una influencia moderada estilo social-demócrata, a la rústica presencia estalinista-castrista de las FARC, la nueva conducción del PC de La Habana y el natural ascenso del sandinismo nicaragüense y del chavismo de las Islas caribeñas. Habrá una conducción más violenta de la pseudo-revolución en el Cono Sud, proporcional a su desalojo del poder político, por vía electoral.
Éste relevo en la conducción del órgano supranacional FSP se hará sentir en la Región en el año 2019, en particular en la Patagonia argentina y chilena, la zona del Lago Titicaca y en la frontera brasileña-paraguaya, en donde existen desde hace tiempo pre-despliegues de sus avanzadas orgánicas.
Durante las horas en que Lula desarrollaba su último acto pre-electoral, demorando su ingreso a prisión, en la CABA, frente a la Embajada de Brasil se presentó, para “resistir”, el elenco de superficie de nuestros revolucionarios “piqueteros”, pero días antes el tema del aborto mostró la transversalidad del otro elenco, más variado y peligroso, compuesto por anarquistas de origen marxista y otros, de origen libertario. Son los extremos que se tocan.
Estos son los sectores sociales fundadores de la profunda “grieta” argentina, que se caracterizan por resentimientos adquiridos por herencia o por la pedagogía del “relato”. Impiden la unidad nacional, la reconstitución institucional del Estado y la Paz de los argentinos. “No disciernen ni entienden lo que los otros disciernen”, diría Maquiavelo. “Son inútiles”. Y para nosotros, nos son inútiles.
¿HABRÁ ´REFORMULACIÓN´ DE LA SEGURIDAD NACIONAL?
Creemos que existen, en las esferas de decisión gubernamental, quienes “entienden lo que los otros disciernen” y eso “es bueno”, PERO, no se animan con las “vacas sagradas”: las leyes que rigen a la Seguridad Nacional. Apenas se animan con su reglamentación y eso no solo es insuficiente, sino que es un agravante de la situación que padecemos para quienes deban operar en el terreno.
Si existieren objetivos firmes, no habría miedo para lograrlos. Habría coraje. Cuando los objetivos no existen o son débiles, el miedo supera al coraje.
Hay una solución para no pasar por las “horcas caudinas” del Congreso: el urgente Acuerdo de Seguridad Colectiva y Defensa Común que permitiría subrogar la inédita y perversa legislación custodiada por un vago “progresismo”, comodín que encubre y mimetiza a esa minoría que, consciente o inconscientemente, se alinea y forma parte de la extraña mixtura de “inútiles” que oscurece nuestro futuro como Nación. Ayer, sus antecesores por lo menos jugaban sus propias vidas, como “imberbes” irresponsables. Hoy son un pelotón de adultos espiritualmente corrompidos, que no solo forman parte de la oposición, sino que también están en la coalición gobernante (18).
CITAS:
(1). E. de Vergara. “Las diferencias conceptuales entre Seguridad y Defensa”. Feb 09. www.ieeba.org
(2). H. J. Auel. “El estado-nación regional frente a las amenazas estratégicas globalizadas”. Jun 98. www.ieeba.org
(3). H. J. Auel. “Ponencia en Santiago de Chile: Nuevo entorno de Seguridad. Nuevas alternativas de la Defensa. Respondiendo a los desafíos de la IX CMDA”. Jul 11. www.ieeba.org
(4). H. J. Auel. “Relaciones cívico-militares, la necesaria reconstrucción del Estado y de la imprescindible Seguridad Nacional, Regional y Continental”. Nov 13. www.ieeba.org
(5). EI: Estado Islámico de Irak y el Levante o EIIL, oficialmente Califato Islámico, conocido también como Estado Islámico, ISIS, Dáesh o Daish, es un grupo terrorista insurgente de naturaleza fundamentalista yihadista wahabita, formado por radicales fieles a Abu Bakr al-Baghdadi, que en junio de 2014 autoproclamó el califatodesde la ciudad iraquí de Mosul, pidiendo lealtad a todos los musulmanes.
(6). H. J. Auel. “La dirigencia argentina frente a los desafíos de la Seguridad Nacional en el siglo XXI”. Ago 15. www.ieeba.org
(7). H. J. Auel. “El pensamiento estratégico militar en el siglo XXI”. 12 Oct 14. www.ieeba.org
(8). H. J. Auel. “Política de Derechos Humanos Vs. Política de Defensa”. 01 Ago 17. www.ieeba.org
(9). H. J. Auel. “El narcoterrorismo, el Estado Nacional, la democracia y las FFAA”. 26 Abr 14. www.ieeba.org
(10). H. J. Auel. “La larga guerra civil argentina y el actual estado de guerra civil-revolucionario”. 09 Jul 13. www.ieeba.org
(11). L. Di Marco. “Un caso que quema y reabre heridas de los 70”. La Nación. 06 Abr 18.
(12). Es indispensable la lectura del lapidario ensayo de la Dra. Silvia Marcotullio: “Breves apuntes sobre una inquietud: continúa la comisión de delitos de lesa humanidad por parte de los poderes Ejecutivo y Legislativo”. www.ieeba.org
(13). H. J. Auel. “La guerra mundial contraterrorista global, ¿híbrida con derivación nuclear?”. Abr 15. www.ieeba.org
(14). H. J. Auel. “La Argentina encapsulada”. Jul 10. www.ieeba.org
(15). H. J. Auel. “Arena… ¿o pan rallado?”. Dic 17. www.ieeba.org
(16). H. J. Auel. “Sr. CJFFAA: llegó la hora de pintar la carta”. Feb 17. www.ieeba.org
(17). H. J. Auel. “Las FARC-EP, actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano”. 05 Sep 17. www.ieeba.org
(18). eldiario24com. “Alfonsín exigió que la UCR se pronuncie sobre la situación de Brasil”. 08 Abr 18.
PrisioneroEnArgentina.com
Abril 9, 2018
Breves reflexiones sobre una inquietud: Continúa la comisión de delitos de lesa humanidad por parte de los poderes Ejecutivo y Legislativo.
Escribe Silvia E. Marcotullio.
Download [304.76 KB]
La Dra. Silvia Marcotullio es ex jueza de la Cámara del Crimen de Río Cuarto, Córdoba y autora de “Juicios de Lesa Humanidad”.
Envío y colaboración: General HERIBERTO JUSTO AUEL.
PrisioneroEnArgentina.com
Abril 6,2018
¿QUÉ ES LA POLEMOLOGÍA? (III)
Grl. Heriberto Justo Auel
La evolución y el desarrollo internacional de la Polemología.
Quiénes y cómo desarrollaron internacionalmente a la Polemología.
La evolución y el desarrollo internacional de la Polemología.
En este tercer y último artículo de la serie dedicado a “¿Qué es la Polemología?”, continuaremos con la sabia compañía del extinto Grl. Alonso Baquer que, como testigo del nacimiento y expansión de la Polemología nos ha dejado una descripción clara y precisa de los primeros pasos de la nueva ciencia y de los diferentes enfoques nacionales del fenómeno socio-político guerra (1).
Fue un hecho sumamente positivo -desde el punto de vista científico- el obligado encuentro de quienes teorizaban en forma abstracta sobre el fenómeno guerra, con Oficiales franceses, todos ellos prisioneros de los alemanes en el Campo de Elsterhost entre 1940 y 1945. Las figuras más destacadas del grupo eran las de Jean Guitton, Gastón Bouthoul y el Grl René Carrerre.
Según Guitton, ante el prolongado tiempo de su internamiento “…para llenar las horas de este tiempo de forzosa inactividad, los oficiales allí reunidos decidieron organizar una escuela clandestina que contribuyera a hacer útil el tiempo, que corría el riesgo de ser perdido”. Eligieron como único tema de reflexión al “fenómeno guerra, en el devenir del tiempo histórico”. Allí se concebía, en suelo alemán y por franceses prisioneros de guerra, al futuro “Instituto Francés de Polemología”. Hombres de pensamiento y de acción iniciaban una tarea interdisciplinaria que aun continúa y que ha creado otras instituciones homólogas al IFP en el mundo entero.
Bouthoul sostenía como origen de las guerras -a lo largo de la Historia- a los excedentes demográficos. Carrere, le incorporaba dos variables:
la geográfica, localizada sobre las fronteras culturales donde chocan mentalidades y
la técnica, el progreso tecnológico, que pone en manos de un poder político una mayor capacidad de medios que los de sus vecinos.
Sobre el despliegue multidisciplinario de Bouthoul, Carrere edificó dos conclusiones:
la que localiza “los riesgos en el espacio” y
la que “mide las intensidades en el tiempo” y concluía que los conflictos se encaminarían hacia alguno de estos cuatro puntos de aplicación:
en espacios marginales, con guerras limitadas,
por competencias económicas o reemplazos culturales, sin intervención militar,
por incompatibilidades sectoriales, con lucha de clases en el interior de la nación en crisis,
por desestabilización, con el objetivo de obtener cansancio/desarme moral de la comunidad política.
El “IFP” no pretendió ni pretende hacer futurología ni predecir conflictos, sino lograr aproximaciones válidas que orientaran la caracterización estratégica más adecuada a la naturaleza de los futuros problemas socio-políticos con empleo de fuerza.
Quiénes y cómo desarrollaron internacionalmente a la Polemología.
En Italia, a partir de los esfuerzos de la Cátedra de Estrategia Global de la Escuela de Guerra “Alere Flammam”, 1945/1977, bajo la dirección de Franco Alberto Casadio y del Cnl Giuliano Giovanelli, se produjo una evidente aproximación metodológica con los esfuerzos del Profesor Wolf Dieter Eberwein en Alemania, en el Instituto Internacional de Investigación Comparada -IIIC-, de Berlín.
Estos tres Centros de Investigación -que comparten un sistema metodológico habitual en los estudios sociológicos- tienen una organización totalmente diferente. El alemán es un comité de expertos civiles, el italiano una escuela de altos estudios militares y el francés una comisión mixta, cívico-militar. Los tres ordenaron y clasificaron los conflictos y enunciaron las tendencias resultantes de una extrapolación estadística. Las conclusiones referidas a los frentes de agresividad y niveles de violencia alcanzaron una amplia similitud, lo que demuestra que ésta comunidad científica había roto las fronteras nacionales.
Los italianos establecieron que la conflictología es un área de estudios multidisciplinarios, no una mera disfuncionalidad de un sistema social de convivencia, sino un dato natural de la dinámica social. Valorizaron el método inductivo de investigación.
Los alemanes, en el Informe Nro 74 del IIIC, firmado por el Dr. Eberwein -en 1981- que abarca tres volúmenes: conflictos internos, acumulación de armamentos y conflictos internacionales. Hace un empleo intenso de modelos matemáticos. Su proceso de escalada del conflicto es más sencillo que el de Hermann Khan -el de los treinta escalones-. Diferencia tres niveles de tensión: “negociaciones conflictivas”, “intervenciones militares” y “guerra”.
En EEUU quienes se han ocupado de resumir la creación de un conjunto de disciplinas abarcadas por la Polemología, fueron Morris Janowitz y Roger W. Little -en 1964-. El mejor trabajo en la materia “Las Fuerzas Armadas y la Sociedad”, más reciente, es fruto de la colaboración de un inglés -Gwyn Harries-Jenkins- y de Charles Moskos, estadounidense. La universidad de Chicago fue pionera en éste frente de investigación.
En España las Instituciones que se han ocupado centralmente de nuestro tema han sido: el Instituto Español de Estudios Estratégicos y el Centro Superior de Estudios para la Defensa Nacional, que se mantienen en permanente contacto con sus pares europeos y de EEUU. Nuestro IEEBA ha convenido trabajar en colaboración con el IEEE, en el pasado mes de Abr 16.
En el RU se fundó el Royal United Services Institute -RUSI- en 1831, el más veterano centro de estudios coordinados de diplomacia y estrategia militar. Mantiene actualmente una publicación trimestral y anualmente edita un libro sobre temas polemológicos. El ex-Imperio acumula una experiencia belígera de siglos, que se refleja en el número de publicaciones especializadas tales como: The Military Balance, Strategie Survey, Adelphi Papers y Conflicts Studies. El King’s College de la Universidad de Londres, sigue siendo el centro tradicional de estudio de los conflictos internacionales.
La situación internacional “líquida”, como ha sido calificada la que ha emergido de la posguerra fría -a partir del 2001- y la particular situación conflictiva en el interior de los Estados de la región iberoamericana, como consecuencia de la dificultosa retirada de la pseudo-revolución del “Socialismo Siglo XXI”, indica que éste es un momento insoslayable en el que los argentinos debemos ocuparnos, intensamente, de la promoción de una Polemología hoy inexistente en el conocimiento de nuestra dirigencia, cuando ya avizoramos -en toda la región- eventuales frentes de conflictos diversos y complejos, contemporáneamente con una gran oportunidad para recuperar un rumbo de Paz y prosperidad para el sub-continente.
CITAS:
PrisioneroEnArgentina.com
Marzo 22, 2018
¿QUÉ ES LA POLEMOLOGÍA? (II)
Grl. Heriberto Justo Auel
¿Cuál es el estado actual de la Polemología?
El “Instituto Francés de Polemología”.
¿Cuál es el estado actual de la Polemología?
De la mano de quien fuera mi distinguido huésped en Madrid, hace unos años, en mi visita al Instituto Cap. Grl. Gutiérrez Mellado, Grl. Dr. D. Miguel Alonso Baquer (1), en éste segundo artículo acerca de lo “¿Qué es la Polemología?”, vamos a describir sucintamente cómo se ha desarrollado la disciplina y en qué estado se encuentra hoy, en el mundo y en nuestro país.
Bouthoul reiteradamente -en sus exposiciones y escritos- ha corregido al adagio romano de Flavius Vegeetius, expresando: “Si quieres la Paz, conoce a la guerra” y para ello creó la disciplina polemológica y escribió su erudito “Tratado de Polemología”, entre otras obras. En el Tratado se puede admirar la claridad de sus conceptos y la ordenada exposición de la reiteración cíclica del fenómeno socio-político bélico, en la Historia de la Humanidad.
Éste pretendido mayor conocimiento de la guerra ¿ha favorecido al mantenimiento de la Paz mundial? En la respuesta deberíamos considerar lo que hubiese ocurrido en las últimas décadas, si no existiera actualmente el conocimiento polemológico, fruto de dicho Tratado, en los niveles de decisión política de los principales actores internacionales.
Desde los años ’50 venimos hablando de la “Tercera Guerra Mundial”, incluyendo el “holocausto nuclear”, que nunca ha llegado. Pero llegaron otras guerras, imprevistas e imponderables, muy probablemente como consecuencia del esfuerzo de dirigentes que han logrado localizar a la guerra, limitando sus medios y los tiempos de sus fases más calientes. Desde 1945 han habido guerras, pero no declaradas y es evidente el esfuerzo de los líderes para reducir el avance de los conflictos, en la medida en que los medios de destrucción van aumentando exponencialmente sus capacidades.
No está demás, consecuentemente, realizar una síntesis actualizada de los avances polemológicos, cuando la gravedad de los riesgos estratégicos aumentan en los años 2000 y cuando retener la Paz no puede quedar solo en manos de la buena voluntad de las gentes, sino en el logro colectivo de una situación de concordia interna o internacional, encarnada por la inteligente comunicación política. La capacitación de los dirigentes sociales, el profundo conocimiento del origen del belicismo y de los síntomas de la inseguridad nacional e internacional, nos llevará a la resolución pacífica de los conflictos. Es éste el camino que permitirá superar las utopías idealistas, creadoras de los mitos o al determinismo de los fundamentalismos extremos.
Es cierto que los Organismos Internacionales no han sido totalmente capaces para retener la Paz, desde su creación hasta la fecha. Pero es indiscutible que han sido un espacio de diálogo que, cuando hubo buena fe, se demostraron eficaces. En el ámbito regional estas organizaciones proliferaron últimamente por razones ideológicas, al impulso de una pseudo-revolución que malversó a las pre-existentes. Ha llegado la hora -en el año 2016- de desmontar lo artificioso y re impulsar a los organismos genuinos, totalmente debilitados por la duplicidad de funciones, con fines inconfesables.
El “Instituto Francés de Polemología” -IFP-.
Éste Instituto, creado por G. Bouthoul en 1945, tenía por misión “proceder al estudio científico de las guerras, de las paces y de los conflictos intermedios” y a través de los años, hasta la actualidad, la misión fue cumplida. El Instituto lleva la impronta de su creador, hombre de amplios conocimientos pluridisciplinares -psicología, economía, demografía, historia y sociología política- que impuso un estilo y una metodología multi e interdisciplinaria para el análisis de las impulsiones belígeras.
La mencionada metodología es esencialmente cuantificadora. Se orienta por los grandes números y las series de datos. Bouthoul fue un discípulo de Durkheim, Bergson y Braudel. Investiga a los grandes ciclos y a las coyunturas críticas conflictivas.
El Instituto produjo en 1976 “Le Défi de la Guerre” -El Desafío de la Guerra- en colaboración con el Grl René Carrere y en 1980 “Guerres et Civilizations” -Guerras y Civilizaciones- que sumó a los dos autores del anterior libro, al sociólogo Jean-Louis Annequin, con un prefacio de nuestro conocido Jean Guitton. En ambos se sostiene una paradoja: en el S. XIX se identifica a la guerra con “la barbarie” y a la Paz con un “avance de la civilización”.
El Instituto publica una revista: “Etudes Polemologiques”, en la que se sostiene también dicha paradoja, señalando que las explosiones más violentas se originaron en las naciones más cultas. Con ello se daba por tierra la hipótesis citada, proveniente del positivismo, que establecía la sustitución del “espíritu guerrero” por el “industrial”, en el mundo del progreso. Se llega a la conclusión -con Ortega y Gasset- de la “exquisita mixtura” de ambas cosas, como ha ocurrido con las naciones más avanzadas para resolver sus conflictos en la modernidad.
En los dos libros citados y en la colección completa de la revista del Instituto, se tiende a la verificación de los principios que sostiene el IFP. Estas publicaciones son complementarias. El “Desafio…” de orientación histórica, describe a las guerras entre 1740 a 1974, pretendiendo demostrar la “depuración y transformación” de las sociedades modernas. En “Guerras y…” hay mayor ambición: partiendo desde la prehistoria alcanza los albores del empleo nuclear y pone de relieve la permanente interacción del fenómeno guerra con la evolución de la civilización, donde el conflicto se genera. No hay pasaje de una etapa de la civilización a la subsiguiente, sin su condigna guerra mundial. Vivimos hoy, en la globalización planetaria desde 1991, el pasaje de la etapa de la civilización industrial a la posindustrial -la del conocimiento-, cabalgada por la guerra mundial contraterrorista global (2) y (3).
CITAS:
PrisioneroEnArgentina.com
Marzo 20, 2018
¿QUÉ ES LA POLEMOLOGÍA? (I)
Grl. Heriberto Justo Auel
El surgimiento de la Polemología.
¿Qué propone la Polemología?
El surgimiento de la Polemología.
Es éste el primero de una serie de breves artículos a publicar en nuestra Página Web (1), que estarán referidos a una -relativamente- nueva disciplina, la Polemología, que cumple sesenta y cinco años de evolución acelerada e importancia constante, pero que en nuestra querida Patria no es conocida por la dirigencia política. Tampoco tienen tratamiento -entre nosotros- las diversas razones que provocan ésta gravísima ausencia curricular universitaria -que más adelante trataremos-.
Calificamos de gravísimo a este vacío conceptual en los conductores políticos, pues la Argentina -en crisis/decadencia- soporta y somatiza actualmente dos “estados de guerra” -heredados de las que peleamos en la segunda mitad del siglo XX- y está hoy riesgosamente involucrada -como el resto del orbe- en la “guerra mundial contraterrorista global”, en continuo agravamiento (2). A pesar de ello no hay un solo indicio -hoy- que indique que saldremos de la total indefensión e inseguridad rampante, que preocupa seriamente a la mayoría de los argentinos (3).
Nuestro objetivo es el de impulsar -desde el IEEBA- la creación -en la UCALP/Bernal- una “Diplomatura en Introducción a la Polemología” -como ya lo hiciéramos con la Licenciatura en Estrategia, hace más de una década, en la Universidad Maimónides- y más tarde ¿2018?, una “Maestría en Polemología” para todos aquellos egresados universitarios que hayan cumplido con la diplomatura de Introducción a la Polemología.
El neologismo “Polemología” surge de la elaboración intelectual de Gastón Bouthoul -1896/1980- que, como sociólogo -sumergido en las grandes guerras civiles europeas 14/18 y 39/45- perseguía la búsqueda de la Paz. De la Paz posible entre los hombres y entre las naciones.
Para entender aun mejor los fines perseguidos por éste francés-tunecino, deseamos agregar tempranamente que, si “la guerra es un inexorable fenómeno socio-político”, la Paz también lo es. Guerra y Paz, consecuentemente, son dos grandes temas de la Ciencia Política que necesariamente -a nivel posgrado- debería desdoblarse en dos ramas de conocimientos alternativos: las Relaciones Internacionales, que por vía de la diplomacia retienen la Paz a través de la Comunicación Política -la negociación y el diálogo- ó, cuando la comunicación no es viable y los objetivos en juego son vitales, necesariamente se recurre a una prueba de fuerza: a la guerra, como mal necesario para alcanzar una nueva Paz -que hemos citado como la Paz posible- Se ingresa así al campo de la Polemología.
Si la incomunicación es absoluta, estamos en presencia de las guerras totales, como fue el caso de la Guerra de la Triple Alianza. Si en cambio se mantiene alguna de las variables de comunicación, mientras se combate, se trata de una guerra limitada, tal el caso de la Guerra del Atlántico Sur de 1982 y, cuando el agresor simula que no recurre a la violencia y hasta niega haber provocado a la guerra, a través de su narrativa pos-bellum, arrogándose un ideal de redención social, estamos en presencia de una guerra muy limitada ó sublimitada, como se dio en el caso de la Guerra Civil Contrarrevolucionaria Argentina, en la etapa 1974/1988.
A estas tres opciones polemológicas los argentinos las hemos sufrido en diversos períodos de nuestra corta Historia. Pero nada aprendimos de esos graves dramas socio-políticos (4). Las dos sentencias inscriptas en el acápite de éste artículo pertenecen a europeos, uno hispano-romano y el otro francés, distanciados en el tiempo por casi veinte siglos. La UE pareciera que tampoco ha entendido a sus pensadores protopolemólogos y es ello lo que oportunamente motivó a Bouthoul. Actualmente la Unión está incursa en ambas sentencias: en 1991/1995 no pudo contener la matanza de Los Balcanes y actualmente medra temerosa ante los desafíos y amenazas del ISIS.
Argentinos y europeos padecemos una fuerte crisis cultural -por relativización de nuestros valores- que nos han llevado a la anomia social, a la contracción económica y a la extrema debilidad del Estado Institucional. Los presupuestos de Defensa se desplazaron al bienestar y así perdimos el bien-vivir. En España y en la Argentina hubo intelectuales que incorporaron tempranamente a “Las Guerras” (5) a sus bibliotecas, traducido al castellano, pero allí quedó la obra innovadora de Bouthoul, limitada a unos pocos lectores, sin incorporarse a las currículas especializadas.
La “Intervención Humanitaria” -como doctrina Occidental de los ’90- restringió el concepto de soberanía, pero con el “nuevo orden” emergente en el Asia, en los 2000, se está revirtiendo dando lugar al empleo cada vez más osado del poder militar (6). En el nuevo mapa político que se está desarrollando en Iberoamérica a partir de fines del 2015, esta tendencia internacional podría -muy probablemente- reemplazar a la “Política de Derechos Humanos” iniciada en 1983. Las Políticas de Defensa Regionales, que fueran reemplazadas en la toda la región por aquella, con el impulso de pseudas revoluciones neo-marxistas extemporáneas, están hoy en acelerada y peligrosa retirada.
En nuestras universidades se dicta la Licenciatura de Relaciones Internacionales -que en nuestra opinión debería ser un posgrado de la Licenciatura de Ciencia Política –pero se ignora a la Polemología– que en breve propondremos como maestría-.
Cuando la propia experiencia -la más cara y tardía- se desecha por razones ideológicas y la experiencia ajena no se aprehende ni registra para superar nuestros repetidos fracasos, estamos condenados a reiterarlos y, en éste caso a continuar perdiendo guerras que no prevemos -aunque obtengamos victorias en combate-. Nos colocamos -en la escala animal- por debajo de las nobles mulas, que “no tropiezan dos veces en la misma piedra”.
¿Qué propone la Polemología?
No han faltado críticos al libro de Bouthoul que se han preguntado ¿para qué ha servido la Polemología si las guerras continuaron después de la publicación en 1951 de “Les Guerres” (5)? Sin duda estos críticos no habían leído al “Tratado” del creador -en el año 1945- del “Instituto Francés de Polemología”. Simplemente conocieron alguna frase feliz del libro -como lo hacen quienes citan a Aristóteles, Sartre o Borges- y con ese breve y corto conocimiento sacan conclusiones.
Gastón Bouthoul, profundo conocedor de la naturaleza humana, no intentó hacer desaparecer las guerras. La violencia es inherente a la naturaleza humana y por eso es que hubo, hay y habrá guerras y también períodos de Paz.
En el “Prólogo del Traductor” de la edición argentina (5) encontramos ésta reflexión: “¿Aspira Bouthoul, con su hipótesis, llegar a construir -valgamos la comparación- una bola de cristal de precisión que posibilite ‘adivinar’ la próxima guerra, su oportunidad, sus causas, su intensidad…? No hay tal cosa…” (5).
El “Tratado de Polemología” editado por Ediciones Ejército del Reino de España (5) recientemente, también fue prologado por su traductor, el Grl. Enrique Jarnés Bergua. En él, dice: …el “Tratado de Polemología” es la obra fundamental de una escuela ya extendida por todo el mundo. No una teoría, no una doctrina, sino una tesis y un propósito”…“El propósito de Bouthoul, a través de un enorme esfuerzo científico, es encontrar las instituciones socio-políticas que cumplan, sin guerras, las funciones sociológicas que cumple el fenómeno guerra”.
Así es cómo éste “pacifista científico” ha dado origen en las últimas décadas a un sinnúmero de ONG y Organismos Internacionales que velan por la Paz Internacional. En ese sentido Gastón Bouthoul y los militares bien formados comparten una misión vocacional: disuadir al agresor y retener un equilibrio estratégico regional aceptable.
Los argentinos hemos sufrido la ignorancia de quienes han creído que hay guerras porque hay militares, ignorando que las guerras existieron antes de que estos aparecieran con los excedentes económicos. Las soluciones planteadas por Bouthoul son una incógnita que develará el futuro y serán materia de nuestros prometidos artículos, a continuación del presente. Ningún esfuerzo es inútil cuando se persigue retener la Paz de la Humanidad.
CITAS:
(1). www.ieeba.com.ar
(2). H. J. Auel. “La Guerra Mundial Contraterrorista Global. ¿Híbrida con derivación nuclear?”. Abr 2015. www.ieeba.org.ar
(3). H. J. Auel. “La Dirigencia Argentina frente a los desafíos de la Seguridad Nacional en el Siglo XXI”. Ago 15. www.ieeba.org.ar
(4). H. J. Auel. “El Narcoterrorismo, el Estado Nacional, la Democracia y las FFAA”. Abr 14. www.ieeba.org.ar
(5). G. Bouthoul. “Les Guerres”. Ed Payot. París. 1951. Ésta obra fue traducida al castellano en España y en la Argentina en 1956 por la Biblioteca del Oficial del Círculo Militar. El traductor fue el Tcnl D. Manrique M. Mom, en dos Volúmenes: Nros. 456 y 457. En 1971 el original, con algunos agregados del el autor, es nuevamente editado con el título “Tratado de Polemología” por el Servicio de Publicaciones del EME del Reino de España.
(6) M Leonard. “Las nuevas intervenciones militares”. Clarín. 16 Abr 16.
PrisioneroEnArgentina.com
Marzo18, 2018
CARTAS DE LECTORES
CARTAS DEL LECTOR
Junio 2018
Muertes por goteo
Junio 29, 2018
Desde 2003 el Estado, violando la Constitución, comenzó a poner presos a quienes lucharon contra el terrorismo, y haciendo de esto un gran curro de los derechos humanos tenemos en la Argentina 489 muertos por abandono de persona desde diciembre de 2015. El domingo pasado sumamos uno más. Los casos aberrantes pueden corroborarse en los expedientes e informes forenses de los fallecidos. Algunos de estos presos mal llamados de lesa humanidad han muerto engangrenados, cortados a pedazos cada vez que se presentaba este cuadro. Otros, de cáncer generalizado por falta de tratamientos adecuados, de enfermedades cardíacas, muerte súbita o ataques de presión. Otros fueron hallados muertos en sus celdas o sufrieron un ACV que causó el fallecimiento, o sufren de Parkinson, depresión o Alzheimer por falta de atención médica. Todo esto provocado y agravado por la injusta situación que padecen. Es una muerte por goteo a la que son sentenciados sin pruebas y con testigos falsos. Hombres que promedian los 73 años y cuyo “pecado” parece haber sido impedir que la Argentina sea hoy otra Cuba.
Ana Magi
GENEROSIDAD PRESIDENCIAL
Me parece que aquello de ‘medidas sustitutivas’ se convierte en una alcahuetería de quienes ejercen la ley. Aquí en nuestro país debe haber mano dura para todos quienes la transgreden, lo mismo sucede con el famoso y absurdo ‘grillete’ del mismo que se ríen los ladrones, asesinos y demás, que con todo cinismo se la quitan, vuelven a cometer la infracción y luego se la ponen como que nada ocurrió. Otro absurdo es taparles la cara. ¡Qué desfachatez! Dejen el rostro al aire para conocerlos y para crearles más vergüenza por el mal accionar de estos delincuentes.
Otro caso es el ‘arresto domiciliario’. Salen cuando les da la gana, la policía ni se entera o se hace la no enterada, y luego vuelven con cara de “yo no fui” hasta con pelo, los que entraron pelados. La Cárcel 4, otra burla. Tenemos los ecuatorianos que pagarles un hotel casi de lujo, cuando merecen una de esas cárceles a la antigua.
Leyeron los años de cárcel que pusieron en España a los ladrones pertenecientes a un partido político, eso es ley, aquí con 3 o 5 años y sin que devuelvan lo robado creen que es suficiente. Qué lindo actuar así. Y luego salen, millonarios, a disfrutar, viajando con la familia por todo el mundo. Mi Ecuador, país de Ripley.
M. Rodríguez
CULTURA Y GOL ES GOL
Junio 5, 2018
No estoy en contra del futbol. Me gusta el futbol, pero hay queponer unlimite.
Los profesores de antaño tenían por costumbre llevarnos a museos y otros lugares históricos donde nos daban explicaciones y al regresar a clases presentábamos escritos que eran calificados. Existen países donde es obligación llevar a los estudiantes a estos lugares, da mucha satisfacción en Atenas, Grecia, ver a alumnos y maestros ascender 156 metros hasta llegar a la Acrópolis para desarrollar las clases de historia.
Ahora parece que la obligación es mirar los partidospor TV del mundial.
Gustavo Corradi
[/ezcol_1half_end]
Inseguridad en Lima (Perú)
Junio 1, 2018
La lucha contra la inseguridad ciudadana debe de ser tomada más en serio y con medidas eficientes y radicales, predominando el trabajo de inteligencia antes que los operativos policiales para poder capturar a los delincuentes y criminales.
La situación en Lima norte es preocupante; en Carabayllo, en la zona de Las Lomas de Carabayllo, han asaltado 15 veces un grifo, robado múltiples veces a los vecinos y esta situación persiste; pese a eso, no se observa un trabajo efectivo de los agentes del orden. También en la zona de Enace, muy próxima a la urbanización Edwin Vásquez se han incrementado los robos a punta de armas de fuego.
Mediante esta carta quiero pedir y exigir al jefe de la Región Policial Lima y a la División Territorial Norte 2 que tengan muy en cuenta esta denuncia y procedan a poner orden y sancionar, para empezar con aquellos malos agentes que no cumplen su trabajo, pues no realizan los patrullajes que se han dispuesto. ¡Como ciudadanos debemos exigir cambios radicales!
Enrique Rojas L.
erojasl1980@gmail.com
[ezcol_1half_end]
Cadena de venganza
En un enfrentamiento armado, el 19 de enero de 1977, en la ciudad de Santa Fe, fueron abatidos cuatro dirigentes del Ejército Montonero. Rolando Martínez, mi papá, era entonces chofer y agente del Comando Radioeléctrico de la policía provincial, el rango más bajo del escalafón. Hoy, 41 años después del tiroteo, mi padre que tiene 77, está sometido a prisión preventiva domiciliaria, la que lleva más de dos años, por el “asesinato” de los cuatro guerrilleros, no obstante no haber participado en los hechos por los que se lo acusa, ya que tomó servicio a las 19.45 y el enfrentamiento terminó horas antes, según consta en el expediente judicial. Así, mi papá ha pasado a integrar la larga lista de los acusados como “violadores de los derechos humanos”, “delincuentes de lesa humanidad”, “genocidas” y “represores”. Mi padre es un hombre bueno que hace más de 45 años vive en el mismo lugar, tiene tres hijas y siete nietos, cobra una jubilación mínima y aquel mismo año, 1977, dejó de trabajar en la policía provincial por una enfermedad que aún hoy padece.
¿Alguien podría explicarme cómo un ser humano que no participó jamás en ningún enfrentamiento armado y empezó a trabajar horas más tarde de los sucesos de la causa en la que está acusado puede estar preso y calificado de esa manera? ¿Cómo puede ser que un agente chofer, sin un mínimo poder de decisión para ordenar un ataque, matanza, secuestro o tortura hoy esté pasando sus últimos días de vida en cautiverio, acusado de cuatro “asesinatos” que no cometió? Como mi papá, hay muchos verdaderos “presos políticos” a los que “alguien” nombró o se acordó de las caras, imágenes, voces, olores, sensaciones, o su nombre apareció en un libro tomando servicio después de más de 40 años, que terminaron acusados en alguno de los cientos de juicios por “delitos de lesa humanidad”, pasando a ser nuevos eslabones, en su caso uno muy débil, en la cadena de una venganza, y para ellos no hay derechos humanos.
Quizás definir legalmente si mi papá es un ser humano sería una respuesta a mis preguntas, porque ha sido tratado como si no lo fuera.
Gabriela Martínez
[/ezcol_1half_end] [ezcol_1half]INADMISIBLE !!!!
Pelicula Sera Venganza
Quiero apoyar desde aqui la presentacion de la documental Sera Venganza que se presenta hoy
Es un gran documento audiovisual de sumo inetres para que se conozca la verdadera historia que han sepyutado los Kirchenrs por mucho tiempo y en este momento es muy importante que se conozca la historia completa.
Gracias.
Daniel Vacca
[/ezcol_1half_end] [ezcol_1half]Respetar
En estos días, pero viene pasando desde largo tiempo, la política está exacerbando los ánimos y se apela a cualquier argumento para defenderse y de paso ofender. Deja de ser el arte discursivo para ser un engendro del odio. La política es una circunstancia social que no nos puede llevar a maltrechar la amistad.
Hay ideologías que se basan en las costumbres, en teorías, ideas, en conceptos, y eso es comprensible, y de ahí se parte al discurso que cada quien pretende ofrecer, pero lo que no es valido es que nos dejemos llevar por la emociones negativas y entremos en el universo del odio y sus intríngulis.
Cada quien es libre de argumentar su pensamiento político sin rebasar los límites de la ética social, la que es inherente al arte de la política en el escenario público, pues mientras esta última es argumentativa, la otra fija los límites entre lo decente y lo indecente. No olvidemos de acompañarnos siquiera de un mínimo de ética social cuando entremos en el mundo de la política partidista, para argumentar el discurso bajo el prisma de los valores deontológicos y axiológicos y no desbordarnos al mundo vulgar de la ofensa, que en cambio de sumar, resta.
Nunca olvidemos que mis derechos van hasta donde empiezan los derechos ajenos y más tratándose del respeto. Las ideas son valederas por la fuerza de sus argumentos, no por la cantidad de vulgaridades o de vejámenes con que se les pretende estólidamente reforzar.
Nos convertimos en salvajes… y puede terminar peor, si es que termina.
Juan Pablo Onzari
CABA
[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end]LA UNICA VERDAD ES LA REALIDAD EN UN GAZA EXPLOSIVO
[ezcol_1half]
Estimada Diputada – Dra Elisa Carrio
Maestra jubilada
Como maestra primaria en la Ciudad de Buenos Aires, me jubilé con el 82% móvil. Es decir que mis ajustes de haber se relacionan a los aumentos de los maestros de mi antigüedad y categoría en la Ciudad según paritarias docentes.
Ocurre que los sistemas informáticos de la ANSeS y de la CABA no están interconectados y los maestros en mi condición debemos conseguir la información en la CABA, hacerlo validar, y presentarlo a la ANSeS cada vez que ocurre un ajuste salarial de activos. Gracias a la buena voluntad de funcionarios de la CABA y de la ANSeS, este trámite se me agiliza algo, pero de todas formas es una incomodidad pesada para personas de nuestra edad.
Por suerte, aún estoy en condiciones de hacerlo, pero indudablemente hay otros que no lo están, y yo no sé por cuánto tiempo. No veo ninguna razón técnica para que la la CABA no pueda informar por una interconexión entre sistemas en forma directa los cambios de las remuneraciones a la ANSeS y así evitar este disparate. Es sólo cuestión de buena voluntad y de compromiso social de las más altas autoridades, digamos Basavilbaso y Rodríguez Larreta. Les pido aquí, por favor, que se muevan y ayuden a los adultos mayores.
Martha Devincenzi
marthadevin@hotmail.com
Hospitales sin vacunas
El viernes 11 de abril acompañé a una vecina (78) a darse las vacunas al Hospital Houssay, con tan mala suerte que no tenían la vacuna contra la gripe, por lo cual le solicitaban que concurriera al día siguiente a las 7 a hacer la cola, ya que sólo repartían 30 números. Nos acercamos a una farmacia y pudo aplicársela. ¿Hasta cuándo los pobres jubilados tenemos que soportar los malos tratos en dicho hospital? ¿Cómo pretenden que gente tan mayor tenga que ir a las 7 de la mañana a hacer una cola para que le den un número para aplicarse la vacuna que le corresponde por ser afiliada al PAMI y que es a la vez su obra social?
No hace falta tanta propaganda si las cosas funcionarían como corresponde, ni hablar de los turnos. El poco respeto a los mayores hace pensar que algunos empleados gozan de dar ese tipo de instrucciones. El descuento que hace el PAMI es bastante importante en algunos casos. Señores, espero que tomen cartas en el asunto y de una vez por todas den lo que corresponde a los jubilados, no todos tienen familia a su disposición para que realicen los trámites por ellos ni para ayudarlos económicamente. Espero tomen debida nota y exijan a los empleados una mejor atención.
Alejandra Zabala
alezaba@gmail.com
[/ezcol_1half_end]Documental vedado
5-11-18
El Día de la Libertad de Prensa, el Consejo de Administración de la Feria del Libro censuró la exhibición del documental Será venganza, sobre la violencia atroz de los años 70 y los actuales juicios que derivaron de aquella. El primer consejero titular de ese organismo es el exterrorista montonero Jorge Luis Bernetti, que ahora, con lobby y el dinero de la gente que visita la Feria, pretende impedir que se conozcan los asesinatos, secuestros y bombas que antes cometió. En la obra de otros dos exguerrilleros, Eduardo Anguita y Martín Caparrós, La voluntad, se cuenta cómo su propia “organización político-militar Montoneros” condenó a muerte al ahora temeroso censurador, junto a los terroristas de los que él era jefe en esa célula guerrillera: Nicolás Casullo, Silvia Rudni, Lilia Ferreyra y Carlos Ábalo. Allí está bien explicado todo. Como ahora se puede ver el video en YouTube, cualquiera puede constatar que no tiene nada agraviante salvo denunciar el enorme curro de los derechos humanos, que pagamos incluso a aquellos a quienes asesinaron a nuestros padres, como es el caso de mi padre, Carlos Alberto Sacheri. Es importante que se sepa que los asesinos de entonces se acomodaron a la “no violencia” y ahora usan su poder y la fuerza para censurar un sencillo, veraz y respetuoso documental que descubre sus modernos procedimientos.
¡Viva la libertad de prensa!
José María Sacheri
Asociación de Víctimas del Terrorismo de Argentina
[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end]MEDICINA
11-5-18
Nuestro país posee médicos y profesionales de la salud sin vocación de servicio, terminan la consulta con el paciente rápidamente porque tienen que completar los cupos de atención que deben hacer diario, para que al término de su trabajo se dirijan a trabajar a otro hospital o consultorio privado.
Hoy la carrera de medicina es mercantilista y muchos profesionales trabajan por compromiso. Hoy se forman muchos médicos sin criterio, sin ninguna exigencia y ya vemos cuáles son los resultados.
Espero que esta nota le sirva de reflexión a toda la ciudadanía, que las autoridades permitan que solo profesionales con entrega desarrollen tan honorable labor, en donde el paciente reciba el trato y el beneficio de estar en manos de excelentes profesionales de la salud.
Manuel Davila
[/ezcol_1half_end][ezcol_1half]
EL HILO SIEMPRE SE CORTA EN LO MAS DELGADO
10-5-18
Cuidar la democracia es importante, pero tambien es importante no echar kerosene al fuego , afectando las cuestiones sociales elementales.
Es ya conocido a nivel Mundial, que el FMI para prestar o ayudar financieramente, pone condiciones que agrava los beneficios jubilatorios con recortes, el achique del gasto publico, y el control del deficit fiscal, y otros controles.
Que pueden esperar si prospera el prestamo del FMI, los jubilados que perciben menos de $ 8.000?, que pueden esperar el resto de los jubilados? y que pasa con aquellos que aun esperan percibir los montos de sentencias judiciales por parte de ANSES?
En FMI se ocupara de controlar los precios en las gondolas? NUNCA JAMAS!!!
Pregunto, como sera que hemos llegado a esto, cuando el Ministro Dujovne, decia hace 12 anos: AL FONDO NUNCA MAS?????
El hilo se corta siempre pero siempre por lo mas delgado y en ese ovillo no hay ningun Ministro o Legislador incluido,
solo con mirar a Grecia ya tenemos uno de los tantos ejemplos.
Beni Cotler
proyectostierrasanta@gmail.com
[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end]
¿Y LA JUSTICIA QUE MERECEMOS?
Por Mónica Roldán
10-5-18
Es tan grande y tan malo lo que está sucediendo con la justicia en Argentina que casi no me lo puedo creer. Voy a fijarme en los últimos acontecimientos, aunque en la memoria de todos los lectores habrá muchos mas casos, porque por desgracia en estos últimos años esto está sucediendo y con bastante frecuencia.
Lo que me ataña es el caso de militares y policias que actuaron en la decada del setenta bajo ordenes democráticas y hoy en dia dan con sus huesos en las carceles de nuestro país sin pruebas o con pruebas inventadas.
Lo más curioso que nuestro presidente, ese que hablaba de “cambios” y “curros” parece haber sido acallado por grupos de derechos humanos que se ponen a favor de jueces que dejan libres a asesinos (como el caso Micaela) sin importarles los derechos que pudiera haber tenido esa chica.
Pero, lo mas importante es la parte económica para que la gente este contenta de cara a la re elección.
Vote a Macri.
Ya no votaré a Macri
Mónica Roldán
[/ezcol_1half_end] [ezcol_1half]SERÁ VENGANZA EN TUCUMÁN
9-5-18
Amigos tucumanos:
necesitamos mostrar una sala llena. Demostrar que en Tucumán hay libertad de expresión y que estamos avidos de justicia y verdad. Que es necesario terminar con esta grieta horrible y dar a todos nuestros mayores y ancianos, que han defendido a la Patria, en su mayoría cumpliendo órdenes, un digno reconocimiento y la posibilidad de terminar sus vidas en paz y junto a los suyos. En Argentina se viene juzgando y condenando a militares, gendarmes, policías, jueces, sacerdotes, abogados, y en Tucumán, ahora van por los industriales azucareros.
Es hora de construir la paz, de educar en el respeto, en el amor y no en el resentimiento y el odio. Acompañemos al Centro Estudios de Salta y estemos PRESENTES el Martes 15, a las 19.30 , en el Hotel Carlos V. LA PATRIA NOS LO RECLAMA. Los invitamos a asistir y les pedimos, ” no nos dejen solos”. Podrán escuchar testimonios directos y ver la película que la semana pasada fue vergonzosamente censurada en La Feria del Libro de Buenos Aires. Los esperamos!!!!
Yethel, Elvirita, Martita, Ana
[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end].[/ezcol_1half_end]LA ÉTICA PROFESIONAL MILITAR
Por el Grl HERIBERTO JUSTO AUEL.
LA CIRCUNSTANCIA ACTUAL INVITA A REFLEXIONAR SOBRE ÉSTE TEMA.
LA NATURALEZA DE LAS COSAS.
¿PORQUÉ NECESITAMOS DETENERNOS HOY EN LA ÉTICA PROFESIONAL MILITAR?
LA CIRCUNSTANCIA ACTUAL INVITA A REFLEXIONAR SOBRE ÉSTE TEMA.
Preliminarmente pretendo plantear la importancia de dar tratamiento al tema enunciado. Es importante pues la crisis de arrastre que nos ha llevado a la actual decadencia, como Nación y Estado, es de origen cultural y político y la circunstancia es oportuna, toda vez que estamos -según promesas oficiales- en las acciones preliminares de la recuperación del núcleo duro del Estado Nación: las FFAA. (1)
A las generaciones de Oficiales de las FFAA argentinas que egresamos en la década 1950/1960 nos tocó vivir, mientras revistábamos en actividad, las crisis socio-políticas más graves del siglo XX que culminaron con las guerras posnucleares -limitada y muy limitada- que hoy, en sus posguerras, retienen a nuestra querida Patria Argentina -mientras nos empeñamos en un nuevo y arduo intento de resurgimiento- en doble “estado de guerra”(2) (3) y en plena inseguridad pública y estratégica, que somatizamos diariamente a través de una fuerte ansiedad colectiva frente al futuro, aun en el de corto plazo.
Las guerras -en la Historia Universal- son anteriores a la existencia de los ejércitos, que recién llegaron cuando lo permitieron los excedentes financieros de las comunidades organizadas. Estos -los ejércitos- siempre fueron medios disuasivos/defensivos frente al agresor eventual o bien, ante una situación crítica interior que conllevara un riesgo existencial y legitimara el empleo de la vía institucional, para retener la sobrevivencia identitaria de la nación.
En manos del conquistador o del revolucionario, las FFAA fueron también empleadas para la perversidad en las relaciones políticas, internacionales o internas. Cuando se agota la comunicación política negociadora entre actores internacionales o internos, la alternativa es siempre la violencia organizada, impulsada por un agresor. En este caso estamos en presencia de una guerra ofensiva, ya fuere internacional o guerra civil -interna-. Ésta última es la peor especie de las guerras, pues su instrumento central es el odio social.
Expresadas estas generalidades conceptuales, volvamos a nuestra situación. Desde 1945, después de la Segunda Guerra Mundial -que finaliza con lanzamientos nucleares en Japón- se inicia la apertura de una nueva rama de la Ciencia Política: la Polemología y una nueva etapa de la Estrategia, la Contemporánea. Reaparecen -desde 1947- “actores agresores no estatales” en el marco interno y externo y la más primitiva modalidad de la acción violenta: el terrorismo. El espectro del conflicto se amplía así, bruscamente, es sus extremos: desde la hecatombe nuclear -en uno de ellos- a las primitivas guerras muy limitadas -en el opuesto- (4).
Al finalizar la Guerra Fría -1989/caída del muro de Berlín – 1991/implosión de la URSS- la disuasión se hace abstracta por carencia de responsabilidad política de los nuevos actores-agresores. Surgen las nuevas amenazas y riesgos estratégicos que la Argentina -aun hoy- legalmente no reconoce, como lo demuestra la legislación de Seguridad Nacional vigente.
La Carta de la ONU y en particular la eficiencia del Consejo de Seguridad para preservar la Paz, ingresan progresivamente en un cono de sombras. El conflicto violento se difumina y generaliza en el orbe, abandona los teatros de operaciones militares y se posa sobre las sociedades, con un número cada vez mayor de “víctimas civiles inocentes” y también de dirigentes políticos y militares “confundidos” (4).
Así llegamos al siglo XXI y a la situación que nos abarca. De las actuales sesenta guerras activas en el mundo, la totalidad de ellas son internas, es decir, guerras civiles que se caracterizan por su tipificación “asimétrica”,“híbrida” o de “séptima generación” como bien lo expresa el artículo de La Nación -“Sin fronteras entre la defensa y la Seguridad”– del 14 Feb 18.
Son las guerras que la Argentina no puede planificar -prever- para evitarlas, por imposición de la vigente legislación de Seguridad Nacional. Esta irracionalidad no es casual, sino consecuencia de las derrotas estratégicas que sufrimos en el siglo XX, aun no asumidas.
Constituye la tremenda paradoja de estas horas: quienes fuimos los primeros en enfrentar a este desconocido tipo de agresión asimétrica sorpresiva -a partir de los años ’60- nos encaminamos ahora a repetir los mismos errores, medio siglo después, como si no nos hubiese ocurrido nada.
El “relato” ha superado a la verdad. La “narrativa” se impuso a través de los medios y de la escuela (5). El pre-juicio domina a la realidad presente y la cobardía permanece ante la pseudo-revolución en retirada, herida pero no vencida.
La mayoría de nuestros vecinos ha reaccionado positivamente ante la evolución acelerada -al ingresar al siglo XXI- del fenómeno “socio-político” guerra. Nuestro país -su dirigencia-, contrariamente, permanece paralizado, confundido y en altísimo riesgo estratégico, frente a una situación que carece de tratamiento público e idóneo por los medios y en particular por parte de los responsables de la comunicación social referida a la Seguridad Nacional. “De eso no se habla”.
Mientras en el mundo desarrollado se vive una constante transformación doctrinaria y orgánica, acompañada por la multiplicación de los presupuestos de Seguridad Nacional, la Argentina permanece de espaldas a esa realidad y a necesidades indiscutibles que la condenan, irremediablemente, a nuevos fracasos (6), si no se recupera el Estado Institucional.
LA NATURALEZA DE LAS COSAS.
Los cambios sorpresivos de la naturaleza del fenómeno guerra, que han llegado con el avance del alto ritmo de evolución de la civilización humana y la creciente crisis cultural de Occidente, no han podido superar -entre nosotros- la explotación estratégica colusiva que nuestros enemigos triunfantes -en el plano político-estratégico- nos han impuesto -a través del Estado- de un elaborado “relato”. Es la homologación de la “purga” que los bolcheviques impusieron a los Oficiales del Zar en 1921, impulsada aquí por el Decreto 158/83, que continúa llevando a centenares de soldados y civiles argentinos a ser condenados ilegalmente con el Código Penal Ordinario, por haber combatido y triunfado en los combates de la guerra contrarrevolucionaria -1974/1989-.
Ambas maniobras -la jurídica y la comunicacional- han “trastocado” la victoria -en combate- de los argentinos e impidieron la creación de una nueva Política de Seguridad Nacional, fruto de la durísima experiencia reciente. Esta ha sido reemplazada por una perversa y falaz política de derechos humanos, unidireccionados.
Prueba de ésta paradójica situación -en las presentes circunstancias- es que a los Cadetes de los Institutos de Formación de nuestras FFAA, no se les puede citar la agresión terrorista-revolucionaria -1959/1989-, sino solamente al “terrorismo de Estado” -1976/1983- bajo supervisión de la UNDEF y por parte de profesores provenientes de “Franja Morada”. Y esto mientras en Azul el JEMGE, al rendir homenaje a los muertos en el ataque al cuartel, expresó todo lo contrario. ¿Puede edificarse sobre la ciénaga del “relato” la personalidad de los futuros oficiales de las FFAA argentinas? ¿Puede existir tanta incoherencia dentro de las Instituciones, en un momento en que se dice que se las recuperará?.
Las guerras en acto -en el mundo entero- siguen siendo fenómenos “lúdicos y agonales” (7) (8)-como en el pasado- pero su naturaleza ha variado. Son de otra “especie”, diría Clausewitz y ellos -los noveles oficiales-inevitablemente -si el Estado no cambia el rumbo- deberán enfrentarlas a su egreso y a lo largo de muchos años, pues no las prevemos y por eso, llegan. Estas nuevas guerras no tienen fácil ni rápida resolución. Nuestra juventud militar ¿será lanzada a combatir -nuevamente- sin previsiones estratégicas y “formados” en las falacias de la política de los derechos humanos?
¿PORQUÉ NECESITAMOS DETENERNOS HOY EN LA ÉTICA PROFESIONAL MILITAR?
Nuestros enemigos -hoy en colusión- en las guerras que peleamos recientemente encontraron -en las posguerras- una “debilidad” en nuestra apertura de la guerra contrarrevolucionaria. El PEN lo hizo por Decreto -que no envió al Congreso- y en él no dictó el concepto “ético – jurídico” que correspondía al empleo de las Fuerzas en el marco interno -la DENAC- (9) y la DEMIL (10). La Convención de Ginebra regula las guerras internacionales y en su Protocolo II, trata la forma de encarar los conflictos armados internos.
Estas normas debieron ser homologadas en el Derecho Nacional, pero no se lo hizo. Esa fue la razón por la cual cada Cte. de Zona tuvo que reemplazar aquel vacío conceptual –de neta responsabilidad política– en la polvareda del combate y establecer sus propias reglas de empeñamiento táctico. Todos ellos se hicieron responsables, pública y oportunamente, de lo que ordenaron durante las operaciones. Éste aspecto ético-jurídico, que es central, ha sido desarrollado detalladamente por el Grl Jorge Apa Ferraro, en su libro “Al gran fraude argentino ¡Salud!” (11)
Aquella “debilidad”, convertida en “vulnerabilidad” por la aguda experiencia coludida de nuestros enemigos, fue explotada a través de una maniobra de pinzas, jurídica y comunicacional, que aun sigue en curso. Tuvo un punto de partida en el Decreto 158/83, complementado por la demonización de las FFAA a través de los medios de comunicación del Estado; desde el mismo Estado que abrió operaciones militares de “aniquilamiento” de modo “defectuoso”, desde el máximo nivel político.
Así las cosas y como consecuencia de éste “trastocamiento” de la victoria táctica frente al terrorismo-revolucionario, en derrota política y estratégica de los argentinos, el país ingresó en una acelerada decadencia que se encamina aun al “Estado fallido”. Sus graves consecuencias están a la vista y en lo que hace a las FFAA, además de su objetivo desarme unilateral y extrañamiento constitucional, se les quitó el fuero militar. Quedaron sin Código de Justicia Militar y de su correspondiente Reglamentación, como principal sustento de la disciplina y del mando militar. Sepamos que somos el único país de la región que sufre semejante despropósito, agravado por los dos “estados de guerra”, como fruto del trastocamiento.
El Jus in Bello -en la Argentina- ha quedado en manos absolutamente legas, como lo están demostrando, hasta el ridículo, los jueces y fiscales de los TTOOFF, en todo el país. Si se entrara en operaciones ¿qué actitud tomarán los futuros mandos operacionales? En sus cuarteles generales ¿estarán los jueces federales y fiscales que acompañen a las tropas de primera línea, para autorizar la apertura del fuego? Tengamos presente que estarán operando según el articulado del Código Penal ordinario y según los principios de la “legítima defensa”. Estos despropósitos, únicos en el mundo, no son solo ignorancia.
En realidad se los ha sancionado -para lograr el “control civil de los militares”- un Jus ad Bellum que, en línea con la legislación de Seguridad Nacional vigentes, niegan por ley la probabilidad de una guerra híbrida, interna. En consecuencia, es muy probable que esa guerra llegue y nuestra derrota está así asegurada, porque está prohibido preverla, por Ley. Como lo expresara Séneca: “Peor que la guerra, es tenerle miedo a la guerra” (13).
No terminan allí las consecuencias del “trastocamiento”. A las FFAA también se les ha quitado el Código de Honor Sanmartiniano y los Tribunales de Honor. Es decir, no solo se han destruido a las FFAA como Instituciones Constitucionales, sino que se ha destruido al SER militar, aquel al que se lo identificaba por su “Honor y su Valor”, y esto también está directamente relacionado con el objetivo de eliminar a las FFAA.
Se está hablando de “re-estructuración”, “reconversión”, “reconstrucción” de las FFAA. Hasta hoy no escuchamos una sola palabra dirigida a lo esencial: la recuperación de la autoestima militar, del espíritu militar, de las Instituciones Militares fundadas en su “Ética Profesional”. Napoleón lo decía en términos sencillos: “Una Fuerza no vale por el número de sus bayonetas, sino por el temple de sus corazones”. Y las burocracias carecen de corazones. ¿Hay alguna “idoneidad” polemológica o estratégica en el ámbito de las decisiones políticas pertinentes? Yo no la observo. Debes ser mis sensores de dinosaurio.
El prostibulario Zaffaroni y la Cte Hebe no están buscando solo la ingobernabilidad. Están anunciando que la pseudo-revolución está activa y que pronto “puede haber un accidente violento”. ¿Así le llama ahora el garantismo-“un accidente”- a un asalto revolucionario violento, que probablemente prevén junto a las mafias de la corrupción, como aliados ocasionales? Y qué hacen nuestros demócratas de cartón. Por lo menos deberían rasgarse las vestiduras, una vez más.
CITAS:
(1) Auel H. J. “¿Cómo salimos de la actual emergencia político-estratégica?. FFAA y Estado Nacional”. Ago 14. www.ieeba.org
(2) Auel H. J. “La larga guerra civil argentina y el actual estado de guerra civil revolucionaria”. Jul 13. www.ieeba.org
(3) Auel H. J. “La Política de Derechos Humanos”. Jun 16. www.ieeba.org
(4) Auel H. J. “La dirigencia argentina frente a los desafíos de la Seguridad Nacional en el Siglo XXI”. Ago 15. www.ieeba.org
(5) Auel H. J. “El narcoterrorismo, el Estado Nacional, la democracia y las FFAA”. Abr 14. www.ieeba.org
(6) Auel H. J. “El pensamiento estratégico militar en el siglo XXI”. Oct 14. www.ieeba.org
(7) Lúdico: Azaroso. Impredecible, pues será consecuencia del choque de voluntades inteligentes.
(8) Agonal: “Perteneciente a lo relativo a los certámenes, luchas y juegos públicos, así corporales como de ingenio”. Diccionario Enciclopédico Salvat. T. I. 8va, Ed. 1957. Aplicado al concepto guerra, el término indica que la Política -responsable de la apertura y el cierre de una guerra- es la que debe dictar a las FFAA “lo relativo” a las normas -éticas- a las que deben ajustarse. Estas, a su vez, emergen de la cultura de la Nación. De estos conceptos se derivarán las “reglas de empeñamiento” a nivel táctico inferior.
(9) DENAC: Directiva Estratégica Nacional.
(10) DEMIL: Directiva Estratégica Militar.
(11) J. Apa Ferraro. “Al gran fraude argentino ¡Salud!”. Ed. Edivérn SRL. May 17.
(12) Estado de Guerra: (O “estado de beligerancia”). “Situación que se plantea a una nación como eventual ruptura de hostilidades a través de un conflicto armado con otra nación o internamente, en el supuesto de una eventual guerra civil”. Diccionario Militar. T. II. Cabanellas de Torres y Alcalá Zamora. Bs. As. 1962. Argentina cumple con ambas situaciones: frente al RU, en razón de su permanente negativa de negociar la soberanía de las Is. del Atlántico Sur y frente al terrorismo revolucionario, pues éste retiene aun su actitud hostil, ratificada permanentemente por sus organizaciones y representantes actuales, con palabras y hechos.
(13) H. J. Auel. “Relaciones Cívico Militares, la necesaria reconstrucción del Estado y de imprescindible Seguridad Nacional, Regional y Continental”. May 13. www.ieeba.org
PrisioneroEnArgentina.com
Febrero 14, 2018
La verdadera historia en doce minutos: SERÁ VENGANZA
El documental de Andrés Edmundo Paternostro, exhibe en doce minutos el cruel manejo que le ha dado el gobierno kirchnerista (Y por qué no el actual?) al espinozo tema de los presos políticos o prisioneros ilegalmente arrestados que participaron o no en la lucha contra la subversión, décadas atras.
[ezcol_1third]Gral. Heriberto J. Auel
[/ezcol_1third] [ezcol_1third]Ricardo Sain Jean
[/ezcol_1third] [ezcol_1third_end]Adolfo Vázquez
[/ezcol_1third_end]Con testimonios personales, de familiares como Guadalupe Jones y las palabras autorizadas de -entre otros- el General Heriberto J. Auel o el ex Juez Adolfo Vázquez, este reporte ataca las trasgresiones que se cometieron para llevar adelante uno de los tantos y exitosos negocios de corrupción con el encarcelamiento indiscriminado de mujeres y agentes del Estado.
PrisioneroEnArgentina.com
Enero 26, 2018
ARENA…, ¿O PAN RALLADO?
Por el General HERIBERTO JUSTO AUEL.
La “confusión” de los pensadores y dirigentes.
La violencia organizada.
¿Cuál es el horizonte de nuestras FFAA?
La “confusión” de los pensadores y dirigentes.
Nuestra querida Patria Argentina aun somatiza, en el 2017 sus posguerras, que corresponden a las guerras que vivimos en la segunda mitad del siglo XX, ambas hijas -por su tipología aun no asumida por los argentinos- de la presencia en el mundo de los arsenales QBN, desde 1947.
¿Por qué los efectos psico-sociales de esas guerras -vividas como verdaderos y sorpresivos dramas- se prolongan hasta hoy, durante tan largo tiempo, a pesar de los acelerados procesos de cambios que caracterizan a la presente etapa de la civilización humana? (1) (2) y (3).
Es probable que una de las razones que explica al fenómeno esté en aquella conocida frase del Grl Mac Arthur, que encabeza a éste trabajo: “En la guerra no hay sustituto para la victoria”. Podríamos concluir, consecuentemente, que lo que realmente somatizamos son las derrotas estratégicas sufridas, ambas actualmente incardinadas y en plena explotación por nuestros enemigos de ayer, hoy aliados -a través de sus vicarios-, en una nueva circunstancia histórica (4).
La “confusión” de nuestros pensadores y dirigentes, que aun continúa y se prolonga -sin indicios de un final- se explicada por la segunda frase del quien fuera el Supremo Comandante del Pacífico Sur: “Uno no puede librar una guerra en la actualidad -1943– sin el apoyo de la opinión pública, que es tremendamente moldeada por la prensa y otras formas de propaganda”. Esa ha sido y es la razón del eje del “relato”, que nos impidió comprender y superar nuestras crisis de posguerra y que nos puso al borde del abismo, hasta el 10 Dic 15(1).
¿Arena…, o pan rallado?. No existe en la Historia Militar Universal un solo caso que nos muestre la ausencia de una reacción social positiva, frente a una derrota en la guerra. Allí están a la mano los ejemplos de Alemania y Japón, después de la IIGM. ¿Qué nos ha ocurrido para volver a ser -otra vez- una excepción en el mundo?. Nada de lo aprendido en los dramas de esas guerras fue políticamente asimilado y aplicado. Nada. Estamos repitiendo todos los errores del pasado. ¿Hubo mera “confusión” o hubo “traidores a la Patria”, desde 1983? (2) (3) (4) y (5).
En los días que corren la Justicia descubre a estos últimos, luego del asesinato de un fiscal que investigaba un hecho de terrorismo, de un “desaparecido” en el Río Chubut, de la pérdida de un submerino y de una víctima de la “represión del Estado” en Villa Mascardi. La sentencia de Cicerón vuelve a recordarse, luego de un paréntesis de treinta y cuatro largos y penosos años: “Cuando la Patria está en peligro, Dios es invocado y el soldado convocado; cuando el peligro cesa, Dios es olvidado y el soldado juzgado” (6) y (7).
Algunos periodistas y políticos, conmovidos por los acontecimientos citados, caen en la cuenta que la Argentina está en plena indefensión, sin presupuesto y con sus FFAA humilladas y…como “la Patria está en peligro” (8) (9) y (10), ¿¡no habría que volver a pensar en la necesidad de tener FFAA?!.
Decíamos en Feb 14, en un ensayo titulado “Confusión, ignorancia o propósitos ocultos” (11): “La guerra evoluciona con la civilización humana -que en las últimas décadas ha acelerado notablemente su ritmo- sin perder por ello su esencia. Se inscriben en ella todas las formas de la violencia organizada. Es un hecho político y es la Política la que señala su “para qué”. Lo que dijera Mao ha tomado -a lo largo de éste tiempo- cada vez mayor entidad: ´la guerra es política con derramamiento de sangre y la política es guerra sin derramamiento de sangre´. La guerra es gestión política a través de alguna variante de fuerza. Cuando se la analiza sin considerar esta cualidad, el análisis es por lo menos incompleto”.
La violencia organizada.
Ha reaparecido la “violencia organizada” en el Comahue y en las grandes ciudades. El discurso de los agresores centrales, es el de los ’70 pero, llamativamente, hasta ahora no ha habido quien los relacione. Seguimos viendo lo superficial y no las esencias. Seguimos mirando la punta del botín y no la cancha entera. Algunos actores cambiaron, los modos son distintos, los procedimientos también (8), (12) y (13). Sin embargo, el núcleo y los objetivos son los mismos. Sería imprescindible que los responsables del área de la Seguridad Nacional fijaran su atención en la metamorfosis en curso en la zona de la Orinoquia (12), antes de adentrarse en los detalles de las orillas del Río Chubut o la cantidad de colectivos que trajeron la barbarie a la Plaza de los Dos Congresos.
En estos días algunas voces preguntan ¿para qué sirven las FFAA?. Las muertes en el Comahue, la pérdida de un submarino o el riesgo de desabastecimiento de las Bases Antárticas hacen pensar que algún atraso hay en el sistema de Seguridad Nacional y por lo tanto es necesario “re-estructurar el sistema defensivo”.
Ello nos lleva -como institución- a la obligación perentoria de encender las alarmas rojas. Por ello ya le hemos solicitado una audiencia al Sr Ministro de Defensa Nacional. ¿Cómo vamos a “re-estructurar” la Defensa Nacional sin planeamiento estratégico? La legislación actual prohíbe prever los riesgos y amenazas estratégicas reales -dentro de nuestros límites- que ensombrecen nuestro futuro inmediato. ¿Alguien está pensando que con la eliminación del Decreto reglamentario de la Ley de Defensa ese obstáculo está salvado? Craso error.
Sería conveniente que relean las leyes vigentes y recuerden que la guerra, las actuales, siguen siendo “lúdicas y agonales”, a pesar de su acelerada transformación. ¿O hay quienes quieren enfrentar la nueva amenaza volviendo a improvisar? Entonces sepamos que acunamos, ingenuamente, una nueva derrota estratégica, a pesar de las durísimo experiencias recientes.
Restablecer una legislación de Seguridad Nacional relacionada con la real situación que atravesamos, exige dos cosas: 1. Decirnos la verdad y, 2. Reemplazar la Política de Derechos Humanos por una Política de Defensa realista, innovadora y posible. Es decir: volver a la racionalidad, pero esta vez con eficiencia.
¿Cuál es el horizonte de nuestras FFAA?
Las experiencias recientes permitirían a las FFAA argentinas ponerse nuevamente los “pantalones largos”. Debemos pensar y obrar pisando nuestro suelo. La mochila está cargada de experiencias propias, durísimas y recientes. El código a seguir está en la doctrina a adoptar y la doctrina está en el plan estratégico a concebir, desde una total ausencia de alistamientos. Tendríamos que realizar un salto de garrocha responsable, si despertamos en tiempo.
Las teorías estratégicas en acto en el 2017 son de conocimiento universal y nos facilitarán concebir -si existiere una decisión política- las organizaciones, los instrumentos y el personal adiestrado para la acción. Para lograrlo, nuestra situación actual nos indica aspectos desfavorables y otros favorables, sabiendo de antemano que siempre habrá oposición a la innovación.
Sin planificación estratégica no habrá noción de actitud -ofensiva o defensiva- ni prioridad para las aptitudes. Cuando más se aproxime la doctrina a la clave de nuestra propia situación, mayor será la adaptación de las FFAA para atender y entender a los objetivos y misiones a cumplir.
Las FFAA del orbe que están actuando permanentemente son las que más aprenden. Acumulan experiencias y evolucionan. Cuando hay lucidez, mientras combaten ya se están preparando para la próxima guerra. Ese conocimiento será de gran apoyo para nuestro singular planeamiento estratégico. No hay lugar para la “copia”. Deberíamos considerar a nuestra exclusiva realidad iberoamericana, en evolución, a las limitaciones presupuestarias del país, al tiempo de incorporación de los soldados para adquirir destrezas o el nivel de bajas que acepta una fuerza “profesional”. El tono moral de nuestra sociedad sería un aspecto importantísimo a considerar.
Tengamos en cuenta que en Occidente, desde la Guerra de Corea -1950/53-, no han existido mayores enfrentamientos entre Estados que permitan determinar capacidades militares. Las experiencias bélicas han sido muy variadas en los últimos tiempos y han ocurrido en lapsos muy cortos. Las capacidades para el combate de alta intensidad, están en descenso. Occidente se especializó en operaciones de estabilización de países del tercer mundo, como lo hicimos nosotros por imitación, con total descuido de nuestra propia situación interna.
Los efectos de nuestras derrotas estratégicas se reflejan muy bien en el éxito de nuestros enemigos -internos y externos-, que lograron el desarme unilateral y la ausencia del planeamiento estratégico frente a los verdaderos riesgos y amenazas que padecemos desde 1985. Y ello cuando la totalidad de las guerras en acto, en el mundo, SON INTERNAS.
Hubo un acuerdo político, producto del “entrismo de izquierda” en los partidos tradicionales, para eliminar a las Instituciones Militares del escenario nacional. Se judicializaron las guerras recientes, se privó de presupuesto a la Seguridad Nacional y se humilló a las FFAA, de Seguridad y Policiales a través de la comunicación del propio Estado. Más de treinta años de acción psicológica negativa y de enseñanzas escolares “progresistas”, ¿cómo se remueven hoy, ante las necesidades que exige la proximidad de las presentes amenazas?
Por el momento, la “ocupación” de amplias extensiones de nuestro territorio por elementos “extraños”, más de setenta ataques “revolucionarios” -en breve lapso- con tácticas “terroristas” para “despejar” aun más los vacíos espacios patagónicos -en tres provincias- del Comahue, tienen tratamiento de seguridad pública, a pesar de la declaratoria del “ocupante” -agresor violento- que reclama soberanía y opera bajo conducción externa, como lo ha comprobado el Fiscal General de Neuquén, José Gerez, que acusó a la RAM de tener vínculos con las FARC (12), por contar con los documentos probatorios (14).
El Estado está cumpliendo con la legislación vigente, que pone el caso en manos policiales y judiciales y le niega jurisdicción al planeamiento estratégico, con una lógica perversa, propia del resentimiento ideológico del terrorismo setentista que diseñó y aprobó estas leyes. Pero, allí sigue firme la “Política de Derechos Humanos”, como Política de Estado.
Estamos en presencia, nuevamente, de la actitud que asumió el Estado Nacional desde 1959 hasta 1974. Luego improvisó, histéricamente, con las consecuencias que aun soportamos. ¿A rena…¿o pan rallado?. ¿De qué naturaleza es la situación en desarrollo en la Patagonia argentina y chilena?. Si existe una agresión violenta y apátrida, que reclama soberanía sobre parte del propio territorio, que lo ocupa sin reconocer al Estado Argentino y se impone ante la Justicia y la policía, paralizándolos, deberíamos preguntarnos: ¿qué más necesitamos para entender que estamos en presencia de una agresión estratégica-revolucionaria?.
Si las pancartas y estribillos de algunos grupos izquierdistas que irrumpen diariamente en la CABA reclaman por la libertad del jefe de la RAM, o para que aparezca el desaparecido que no desapareció ¿no podríamos concluir que enfrentamos a una organización bajo comando único externo y con un objetivo común, actuando en todo el país? ¿O estamos creyendo que un fiscal o un juez de una remota localidad patagónica o de la CABA solucionarán una “agresión revolucionaria” modelo 2017?
La respuesta es clara: el Estado retiene vigente la política de derechos humanos -como lo demuestra la reciente presentación del Plan Avruj-, no existe política de seguridad nacional y gran parte de la dirigencia política carece del coraje y los conocimientos necesarios para enfrentar esta cruda realidad estratégica presente.
La guerra sigue siendo un hecho socio-político de naturaleza violenta, interactiva y cambiante, cabalgando sobre la evolución acelerada de la civilización, influida por la legalidad internacional y nacional, las diferencias culturales y sus derivaciones políticas, militares y sociales. Ya nos hemos alejado del modelo napoleónico-industrial y el ingreso a la etapa posindustrial nos muestra tendencias disruptivas. Los argentinos ya lo hemos vivido y sufrido -desde sus comienzos- y parece imposible no haberlo comprendido aun, repitiendo errores.
La legislación actual prevé solo la guerra con otros Estados y con sus fuerzas regulares, pero hace muchas décadas que la agresión proviene desde organizaciones no estatales. El proceso revolucionario iberoamericano -que hipócritamente se oculta- ha mutado de forma, pero sigue siendo el mismo. Su núcleo impulsor, también.
La maniobra ofensiva principal pareciera desplazarse -en la actualidad- a una de las variadas ramas inauguradas por el proceso revolucionario en los ’90: el indigenismo radical, que encontró en el Quinto Centenario del Descubrimiento de América un punto de partida y legitimación, con apoyo de intelectuales y clérigos neo marxistas. La localización periférica de su organización y ejercitación, se mantuvo fuera de la atención pública en la Argentina, hasta el momento en que ejecutan la operación pre-electoral del “desaparecido”. Es cuando nos enteramos por la prensa que llevaban años de acción y ejercitación en ambos lados de la Cordillera (12), con la sigilosa protección de Justicia Legitima en nuestro país.
Las tribus urbanas, desde lesbianas a piqueteros, constituyen las maniobras subsidiarias, con un objetivo en el corto plazo: la “resistencia” en todos los frentes. Desgastar al poder e impedir la gobernabilidad (13) y (14).
Las teorías estratégicas mundiales que pueden ayudarnos al momento de pensar en la propia doctrina –si nos decidiéramos salir del actual vacío conceptual- origen de la actual indefensión e inseguridad, serán enumeradas muy sintéticamente, limitándonos a las principales. Son las siguientes:
Guerras de Tercera y Cuarta Generación: El término se originó en 1989 cuando William Lind y cuatro oficiales del Ejército y del Cuerpo de Infantería de Marina de los Estados Unidos, titularon a un ensayo “El rostro cambiante de la guerra: hacia la cuarta generación”. Ese año, el documento se publicó simultáneamente en la edición de octubre de Military Review y de la Marine Corps Gazette. La propuesta está relacionada con la guerra asimétrica y la guerra contraterrorista.
Guerras de Cuarta Generación: La formularon Van Creveld y Thomas Hammes en 1994, planteando los modos no convencionales de la guerra. Identifican principalmente la acción psicológica y la infiltración en las retaguardias enemigas (15). A esa altura, la Argentina llevaba décadas de agresión de éste tipo.
Guerras de Quinta Generación: Ray Alderman las define por su alcance y su desarrollo sin contacto y silenciosamente, en el 2017 (16).
Guerras de Sexta y Séptima Generación: Niño González las conceptualiza en el 2017, dándole a las guerras en curso en el mundo una dimensión de degradación de las violencias multifacéticas, a las que el Estado Occidental responde tardía y erráticamente ante las nuevas amenazas y riesgos a la Seguridad Nacional e Internacional. Concluye que el terrorismo exige un reordenamiento de la Seguridad (17).
Las Guerras Irrestrictas: Concepto revolucionario concebido por dos Coroneles del Ejército Popular Chino -Quiao Liang y Wang Xiangsui- en 1999, en su libro “Unrestricted Warfare”. En esta obra los autores señalan que ante la disminución de la violencia militar, aumenta la violencia política, económica y tecnológica. Señalan la importancia que alcanzan la desinformación -el relato- y el control de áreas sensibles del poder bajo influencia de la globalización y de la dependencia tecnológica. Vale la pena reproducir cómo conciben los “ataques integrados”:
“Guerra cultural, controlando o influenciando los puntos de vista culturales de la nación adversaria. Guerra de las drogas, invadiendo a la nación adversaria con drogas ilegales. Guerra económica, empleando la dependencia de la ayuda financiera para controlar al adversario. Guerra ambiental, destruyendo los recursos ambientales a la nación adversaria. Guerra financiera, subvirtiendo o dominando el sistema bancario del adversario y su mercado de valores. Guerra de leyes internacionales, subvirtiendo o dominando las políticas de las Organizaciones Internacionales o multinacionales. Guerra mediática, manipulando los medios de prensa extranjeros. Guerra de Internet, mediante el dominio o destrucción de sistemas informáticos transnacionales. Guerra psicológica, dominando la percepción de las capacidades de la nación adversaria. Guerra de recursos, controlando el acceso a los escasos recursos naturales o manipulando su valor en el mercado. Guerra de contrabando, invadiendo el mercado del adversario con productos ilegales. Guerra tecnológica, ganando ventaja en el control de tecnologías civiles y militares. Terrorismo” (1).
La Teoría Gerasimov: Es muy probable que la teoría más difundida e influyente en los últimos años, provenga del Jefe del Estado Mayor para la Defensa de Rusia, Grl Valery Gerasimov (18). Señala los casos de la intervención en Libia del 2011, las revueltas árabes o la Revolución de Colores o la invasión de Iraq del 2003 como muestras de la forma de operar de Occidente. Señala a las capacidades no militares como principales para la obtención del objetivo, en una relación de 4 a 1. Destaca la creciente tendencia al empleo de sistemas de armas con control remoto y a la robotización del campo de combate. Sin duda, la caracterización principal que destaca es la de ganar la supremacía en el campo de la información y en la comunicación estratégica. Subraya el carácter híbrido de las acciones de guerra, lo que dificulta la identificación de una agresión. La frontera entre la guerra y la paz están difuminadas. Rusia ha logrado en Georgia, Ucrania o en Siria, sincronizar las operaciones militares con las acciones de la comunicación, llegando a socavar la soberanía de un país, sin ocupar su territorio.
Las “observaciones” de McMaster. El actual Consejero de Seguridad Nacional de EEUU citaba en el The New York Times (19) tres normas para evitar una comprensión errónea de la naturaleza de las guerras en acto: 1. Su carácter político, que debe ser coordinado con las restantes acciones del Estado para alcanzar el objetivo impuesto. 2. Considerar su dimensión humana, pues se sigue persiguiendo “la honra, el temor y el provecho”. 3. La conjunción de las dos anteriores: su carácter lúdico, pues se trata de voluntades inteligentes en oposición, que la hace impredecible. Concluye que no debe confundirse al éxito de las tecnologías en el combate, con la existencia de una estrategia en la batalla.
Por último, no queremos cerrar estas síntesis que nos sirven de antecedentes y apoyos a nuestro pensar, sin citar a Eugeny Messner -1891-1974-, Cnl ruso blanco, que falleció en Buenos Aires y anticipó, en sus estudios teóricos durante la guerra fría, muchos conceptos que hoy encontramos en los estrategas teóricos más recientes y que hemos citado más arriba.
El acceso a las nuevas tecnologías por parte de actores no estatales, con el condimento de los fundamentalismos radicales de tipo social, político o religioso, están mostrando los fracasos de la disuasión en la posguerra fría. Las guerras asimétricas tienen la capacidad de lograr efectos estratégicos con acciones tácticas de baja escala, como lo estamos comprobando algunos argentinos en el 2017, a pesar de que lo sabíamos desde los ’80. Pensar en términos de Paz o Guerra, ya no tiene mayor sentido. Ha surgido la “zona gris”, pues se ha diluido la dicotomía entre ambos estados. Surge la idea de lo híbrido. Desde el punto de vista jurídico ello retiene su importancia, pues muestra una gran debilidad/vulnerabilidad de los Estados, pero ha perdido importancia con respecto de los resultados estratégicos, pues los objetivos pueden ser alcanzados a través de otros instrumentos y sus respectivas tácticas. Es lo que nos está sucediendo.
Ha desaparecido el “teatro de operaciones militares”. La totalidad del territorio nacional es el campo de batalla, pero específicamente lo es la población civil. Del dominio físico de la geografía, el resultado estratégico se ha desplazado al dominio psicológico de la sociedad. Ello es lo que da una enorme importancia a la comunicación social. Lo hemos visto en los días en que el Congreso Nacional votaba una nueva norma previsional. El opinólogo televisivo de turno comentaba acerca del “cerco que ejercía la Gendarmería sobre los legisladores”, cuando el cerco lo realizaban los revolucionarios anarquistas, que enfrentaban las empalizadas que defendía la Gendarmería. Para el elemental periodista, el agresor era la Gendarmería. Quizás provoca más daño al país, que el piquetero.
Por lo tanto, estos nuevos conflictos no se resuelven exclusivamente con el dominio de los espacios llaves del territorio, sino con la conquista del espíritu de la ciudadanía. Éstos “periodistas” ¿están confundidos?, ¿se equivocan? O, ¿para quién juegan?. ¿Son infiltrados? ¿Tienen conciencia que el motivo del caos no es la reforma de una ley?. Hemos dicho con anterioridad y reiteradamente, que la “pseudo-revolución en retirada” actuaría como una “bestia herida” (11) y (13). Es muy probable que los responsables de la seguridad tengan una lectura totalmente distinta de los hechos de violencia creciente. Sabemos que no hay “doctrina estratégica” y estamos tomando conciencia -a través de sus acciones- que los responsables de la Seguridad Nacional carecen de las nociones polemológicas más elementales.
La Argentina vive diariamente graves hechos de Inseguridad Nacional. Nuestra dirigencia confunde “seguridad pública” con “seguridad estratégica”. En todo el orbe se trabaja intensamente para actualizar doctrinas, organizaciones, sistemas de armas y actitudes sociales, mientras aquí se sacrifica a los uniformados, desarmados frente a la locura revolucionaria, bajo cualquier excusa. Las víctimas siguen siendo los agresores, no los agredidos.
Entre nosotros, la actualización será muy difícil. Los hechos cada vez más graves están impulsando la necesidad de una transformación estructural de la Seguridad Nacional. Pero no es igual en el ámbito de las convicciones ni de los conocimientos específicos, que no aparecen. Hay trascendidos, rumores y algunas declaraciones desde el gobierno, que “se está trabajando en ello”. Sin embargo, todo nos lleva a pensar que la motivación del “cambio” es solo originado por exigencias presupuestarias.
Nuestro Instituto de Estudios Estratégicos de Buenos Aires desde su creación, luego de la Guerra del Atlántico Sur, viene bregando y proponiendo superar la angustiosa situación de la Seguridad Nacional. Entendemos que ya no podemos demorar un solo minuto más, sin correr el riesgo de graves problemas violentos que nos llevarán a la disgregación. Nuestra propuesta está desarrollada como plan esquemático básico y éste se actualiza, periódicamente. Además de considerar las teorías internacionales, hemos diseñado una doctrina estratégica, nuevas organizaciones, nuevos sistemas y despliegues. Estamos soportando conflictos internacionalizados y complejos y necesitamos audacia e idoneidad para superarlos con éxito.
El punto de partida para conducir esta operación exige eliminar dos ministerios y crear uno nuevo, el de la Seguridad Nacional, con dos Secretarias, la de Defensa Nacional y la de Seguridad Pública, mientras se negocia el Tratado de Seguridad Colectiva y Defensa Común con el vecindario afín a la posición que adoptó la Argentina el 10 Dic 15, como vanguardia contra-revolucionaria. Brasil, Chile y Perú deberían ser los primeros invitados por Buenos Aires para desarrollar una alianza eminentemente política, como lo es la que corresponde a la Seguridad Regional, frente al neo-marxismo del Foro de San Pablo.
CITAS:
(1) H. J. Auel. “Política de Defensa o Estado de Indefensión Legal”. Investigación. Jul 01. www.ieeba.com.ar
(2) H. J. Auel. “La Guerra en la Civilización del Conocimiento”. Investigación. Ene 02. www.ieeba.com.ar
(3) H. J. Auel. “La Guerra en el Siglo XXI”. Jul 02. Investigación. www.ieeba.com.ar
(4) H. J. Auel. “El Nuevo Ordenamiento Internacional Posterior a la Intervención de EE.UU. y sus Aliados en Irak” – Conferencia en la AAAI. 21 May 03. www.ieeba.com.ar
(5) E. de Vergara. “Los Conflictos en Ibero América”. Investigación. Feb 06. www.ieeba.com.ar
(6) H. Dieterich. “Cumbre Sudamericana: nace vanguardia criolla y crece subversión oligárquica”. 10 Dic 06. www.rebelion.org
(7) H. J. Auel. “La Argentina Encapsulada”. 28 Mar 03. Investigación. www.ieeba.com.ar
(8) H. J. Auel. “Sr. Cte J FFAA: llegó la hora de pintar la carta”. Feb 17. www.ieeba.com.ar
(9) H. J. Auel. “Política de Derechos Humanos Vs. Política de Seguridad Nacional”. 01 Ago 17. www.ieeba.com.ar
(10) H. J. Auel. “Terrorismo global y terrorismo doméstico en el siglo XXI”. Oct/Nov 17. www.ieeba.com.ar
(11) H. J. Auel. “Confusión, ignorancia o propósitos ocultos”. Feb 14. www.ieeba.com.ar
(12) H. J. Auel. “Las FARC-EP, actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano”. 05 Sep 17. www.ieeba.com.ar
(13) H. J. Auel. “Terrorismo Global y Terrorismo Doméstico en el siglo XXI”. Oct-Nov 17. www.ieeba.com.ar
(14) Infobae. “Hallaron documentación que vincula al RAM con grupos guerrilleros de otros países sudamericanos”. 22 Nov 17. www.infobae.com
(15) M. Van Creveld. “La transformación de la guerra”. 1994. www.bibliotecapleyades.com
(16) C. A. Niño González. “La Séptima Generación de la Guerra”. 2017. Ed. USTA. Bogotá. Colombia.
(17) Q. Liang y W Xiangsui. “Unrestricted Warfare”. 1999. PLA Literature and Arts Publishing House.
(18) S. Morales Morales. “El futuro de la naturaleza de los conflictos armados”. 23 Nov 17. www.ieee.es
(19) H. R. Mc Master. “The Pipe Dream of Easy War”. The New York Times. Jul 13.
BALANCE ANUAL: Reportajes a Andrea Palomas Alarcón, Ana Barreiro, Heriberto J. Auel y Marcelo Carlos Romero
El General Auel, el Fiscal Romero, la doctora Andrea Palomas Alarcón y la conductora radial Ana Barreiro se sometieron a una especie de cuestionario de “memoria y balance” antes de arribar al año 2018, dejando sus pareceres con respecto al período a punto de cesar.
Andrea Palomas Alarcón
Nos encontramos a dos años de gestión del ingeniero Mauricio Macri como presidente. ¿Cuáles son los principales cambios -si los ha habido- que se observan en el ámbito de la Justicia Argentina con respecto a la administración Kirchner?
La Justicia no ha cambiado en lo absoluto. Sigue siendo la corporación inoperante, corrupta, oportunista, carroñera, soberbia e hipócrita que fue siempre. Siguen protegiéndose unos a otros. Siguen buscando el macho alfa que les diga cómo tienen que ser los fallos, qué tan fuertes o flojitos, de cuántas palabras. Quieren un jefe que les diga qué necesita y que les deje seguir haciendo sus buenos negocios sin molestar. Sólo que no lo han encontrado.
El gobierno se niega a intervenir.
En mi opinión es un exceso de “purismo” afirmar que no se va a intervenir cuando los jueces lacayos del kirchnerismo son los mismos y no van a volver sobre sus pasos
en los casos de “lesa” porque eso sería admitir el prevaricato.
El gobierno tiene una guerra contra las “orgas” de DDHH y contra la CIDH que les compromete todo el prestigio que están preparados a ceder en estos temas relacionados con la guerra de los 70, que no les gusta. El asunto de los militares y policías presos no les importa en lo más mínimo, es más, lo utilizan para demostrar que no influencian sobre la Justicia.
Es digno de felicitación que un gobierno quiera respetar la República y no interferir con otro Poder del Estado, pero en los hechos, como están dadas las cosas hoy en Argentina, no interferir es interferir, es dejar que los juicios de “lesa” sigan a control remoto destruyendo la vida de la gente y el prestigio de la República.
Tampoco es totalmente cierto que no intervenga el gobierno, dice una cosa y hace otra. La Secretaría de DDHH se presenta como querellante en los juicios de “lesa” lo que indica que el Poder Ejecutivo toma partido y que los imputados son expulsados de la raza humana, ya que no tienen derechos humanos.
Es que al gobierno el asunto de los militares y policías le sale gratis cuando “acusa” y caro cuando “defiende”. La cuenta es muy sencilla. Por lo que se ve hasta ahora, pretenden “solucionar” este asunto de una manera bastante hipócrita, enviando a los “invisibles” a domiciliaria y ensañándose con los emblemáticos que tendrán que pagar los platos rotos.
¿Puede nombrar situaciones jurídicas que imperativamente deberían ser revisadas?
Lo que imperativamente debe ser revisado es el concepto de soberanía jurídica. Si Argentina quiere ser una colonia jurídica que reciba órdenes de algunas organizaciones internacionales (internacionalistas) de dudosa representatividad en lugar de ser un país soberano que atiende sus propios intereses como hacen los países que protestan, cada vez que nuestro país se sale del redil.
A menudo se dice que las elecciones se pierden, nunca se ganan. El mejor candidato es el menos peor ¿Se debe obligar a los ciudadanos a tomar algún tipo de prueba de inteligencia o conocimiento general antes de poder votar?
Es posible, pero desconozco si existe el test del sentido común. La inteligencia no es garantía de sentido común.
Son archiconocidos los casos de personas inteligentísimas que pueden resolver abstracciones con maestría, pero en la vida diaria son estúpidas y toman decisiones estúpidas.
Lo que sí creo es que se debe educar (e informar) al ciudadano, que muchas veces desconoce qué es lo que pasa y cuál es la prosapia de quienes lo gobiernan.
Existe un enorme apagón informativo en toda una generación que alcanzó la adultez desde la guerra de Malvinas. Si uno le explica que su periodista preferido, Leuco, es un terrorista que formó parte del movimiento que atacó La Tablada en democracia, la gente se enfurece pensando que es una injuria. Así con todo. El periodismo tradicional es parte de la maquinaria desinformativa que se utiliza para manipular al ciudadano. Afortunadamente están las redes.
No soy partidaria de excluir del voto a nadie porque eso genera caos y terminaría en violencia. Los activistas de siempre se arrogarán el derecho a votar excluyendo a los demás.
¿Qué considera que es la actual falencia, el mayor problema, la gran preocupación que sufre y respira el país en este momento?
Nuestro país, como de costumbre, vive preocupado por las cosas menos importantes. Le preocupa el fútbol, el mundial, el precio del transporte, de la nafta, la economía a corto plazo. El día a día. Parte de la falencia informativa es que desconoce graves problemas que aquejan a toda la Nación y, lo que es peor, el ciudadano piensa que no es importante informarse porque entiende que no puede cambiar nada. Sólo ante un gobierno abusivo e irritante como el de los Kirchner terminó reaccionando con manifestaciones callejeras y con el voto.
Por otra parte, tengo la impresión de que el argentino es pasivo, pero va sumando agravios de sus gobernantes y cuando llega a su límite se cobra todo junto, con intereses. Lo estamos viendo.
De realizar un repaso a su participación como servidor público o como ciudadano en este año que ya tropieza con su final. ¿Qué podría mencionar como un logro personal en su actividad, en sus objetivos?
Mis logros personales son haber intermediado entre los funcionarios burócratas y la situación desesperante de algún detenido preso político, que incluso llegó a estar al borde de la muerte sin que a los funcionarios se les mueva un pelo.
Sólo en un caso un funcionario accedió a comportarse como un ser humano y se involucró personalmente en casos humanitarios de extrema gravedad, donde estaba comprometida la vida. El resto fue cuesta arriba.
Siento como logro haber roto, en parte, ese cerco mediático en el que están encerrados algunos temas e influido en que se tomen algunas medidas en favor de la Justicia. Hace mucho elegí la tarea de esclarecer e informar, al menos, a los más próximos a mí para que entre todos podamos hacer un país mejor.
HERIBERTO JUSTO AUEL
Nos encontramos a dos años de gestión del ingeniero Mauricio Macri como presidente. ¿Cuáles son los principales cambios -si los ha habido- que se observan en el ámbito de la Justicia Argentina con respecto a la administración Kirchner?
Mis respuestas a este cuestionario las daré en función de mi condición de militar retirado y analista de los problemas estratégicos que enfrentamos.
El actual gobierno es resultado de una coalición que surge de reales necesidades electorales -no políticas-. Recién en Oct 17 logra mejorar su posición en las Cámaras del Congreso para iniciar reformas imprescindibles para atender la gobernabilidad de una Argentina que está saltando de un trapecio a otro, sin red de salvataje. El salto es cualitativo: de una hipócrita situación adherida al socialismo S. XXI, debe posicionarse en un mundo geopolíticamente “licuado” y así recuperar un mínimo de confianza para lograr inversiones. En los dos primeros años de gobierno los cambios en el ámbito de la Justicia Argentina han sido mínimos, pues el presidente de la Corte es un obstáculo tan importante, como el de la Procuradora General. A partir de enero deberá comenzar la remoción de ambos obstáculos. El “circo” montado en las causas de “lesa-humanidad” han mostrado débiles pero necesarios indicios de un giro en el 2018 (Causa Catamarca y Santiago del Estero)
¿Puede nombrar situaciones jurídicas que imperativamente deberían ser revisadas?
Los juicios de “lesa-humanidad”, absolutamente ilegales. La Unión de Promociones y el Foro de Generales han solicitado auditar todo lo realizado por los TTOOFF, ante el Consejo de la Magistratura. La respuesta fue negativa, PERO se hace INEVITABLE. La situación estratégica iberoamericana o exige.
[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end]A menudo se dice que las elecciones se pierden, nunca se ganan. El mejor candidato es el menos peor ¿Se debe obligar a los ciudadanos a tomar algún tipo de prueba de inteligencia o conocimiento general antes de poder votar?
La Constitución exige idoneidad -moral e intelectual-. Hasta ahora no se ha cumplido éste mandato. No creo que el actual Congreso pueda regular dicha condición.
¿Qué considera que es la actual falencia, el mayor problema, la gran preocupación que sufre y respira el país en este momento?
La Inseguridad Nacional, estratégica y pública. Ha legislado el enemigo en los 80 y 90 y las dos leyes que rigen aun en el área SON INTOCABLES, por la acción psico-política de las últimas tres décadas.
De realizar un repaso a su participación como servidor público o como ciudadano en este año que ya tropieza con su final. ¿Qué podría mencionar como un logro personal en su actividad, en sus objetivos?
He logrado mayor libertad para desarrollar mis tareas académicas. En los años anteriores he sufrido dos denuncias penales del gobierno por “apología del delito”.
Ana Barreiro
Nos encontramos a dos años de gestión del ingeniero Mauricio Macri como presidente. ¿Cuáles son los principales cambios -si los ha habido- que se observan en el ámbito de la Justicia Argentina con respecto a la administración Kirchner?
Los jueces han comenzado a actuar y ajustarse a derecho reactivando las causas de corrupción, poniendo presos a los ex funcionarios responsables, investigando la muerte del fiscal Nisman y tema Amia
¿Puede nombrar situaciones jurídicas que imperativamente deberían ser revisadas?
Si bien hay una mayor apertura (coraje) en el tratamiento de los llamados juicios de Lesa Humanidad, aun no se resuelve la situación del tema Se sigue condenando sin pruebas en juicios nulos etc. y el Estado sigue cometiendo GERONTICIDIO.
¿Qué considera que es la actual falencia, el mayor problema, la gran preocupación que sufre y respira el país en este momento?
Tema inseguridad y económico sigue siendo preocupante para el común de los ciudadanos
De realizar un repaso a su participación como servidor público o como ciudadano en este año que ya tropieza con su final. ¿Qué podría mencionar como un logro personal en su actividad, en sus objetivos?
Acercamiento y receptividad positiva con la mayoría de los funcionarios del gobierno El mayor logro de quienes como en mi caso sufrimos esta grave situación de discriminación judicial es haber logrado tener más presencia en los medios
Marcelo Carlos Romero
Nos encontramos a dos años de gestión del ingeniero Mauricio Macri como presidente. ¿Cuáles son los principales cambios -si los ha habido- que se observan en el ámbito de la Justicia Argentina con respecto a la administración Kirchner?
El principal cambio es el final del intervencionismo del Ejecutivo en las decisiones judiciales. Se respira un aire diferente en los despachos judiciales. De todas maneras, esto no es excusa para justificar la larga siesta que tuvieron ciertos tribunales -en especial los ubicados en la Avda. Comodoro Py de la CABA- , sobre todo en las causas por corrupción.
¿Puede nombrar situaciones jurídicas que imperativamente deberían ser revisadas?
Sin ninguna duda, deben revisarse los criterios de excarcelación y morigeración de las medidas de coerción. La doctrina abolicionista ha concebido magistrados agnósticos de la pena, cuyo fallos causan un daño irreparable a la comunidad jurídicamente organizada.
También debería revisarse -a nivel códigos procesales- la multiplicidad de instancias para llegar a una sentencia defintiva. Es absurdo tener entre 6 y 8 instancias, más las que puedan operar en los tribunales internacionales.
A menudo se dice que las elecciones se pierden, nunca se ganan. El mejor candidato es el menos peor ¿Se debe obligar a los ciudadanos a tomar algún tipo de prueba de inteligencia o conocimiento general antes de poder votar?
Definitivamente, no. Debemos insistir en la educación general y en inculcar valores desde el hogar. Es una tarea titánica en un país cuya estructura educacional ha sido derruída, pero es el único camino.
¿Qué considera que es la actual falencia, el mayor problema, la gran preocupación que sufre y respira el país en este momento?
Sin dudas, la corrupción. Activa y pasiva. Estatal y privada. Pero lo más grave, es la falta de un agravio total y absoluto por parte de la ciudadanía frente a los hechos de corrupción.
De realizar un repaso a su participación como servidor público o como ciudadano en este año que ya tropieza con su final. ¿Qué podría mencionar como un logro personal en su actividad, en sus objetivos?
Como fiscal del Ministerio Público, representante de los derechos de la ciudadanía en los procesos penales, siento que cumplí con mi deber de denunciar -en todo ámbito que pude- los desastrosos efectos de la teoría abolicionista del Derecho Penal, cuyo máximo abanderado local es Eugenio Zaffaroni.
[/ezcol_1half_end]
La Dra. Andrea Palomas Alarcón nació en Buenos Aires el 15 de mayo de 1965 en el seno de una familia de clase media. Padre policía (se retiró como comisario de la Policía Federal en 1967) y madre empresaria, tenía un negocio de ropa y su propio taller de confecciones.
Fue a una escuela religiosa en donde perdió la fe en la Iglesia, no en Dios ni en Cristo, sólo en la Iglesia.
Estudió equivocadamente agronomía, por creer que esos veranos en el campo de unos amigos en La Pampa eran la forma en que quería vivir el resto de su vida. Nunca se desvinculó totalmente de ese sueño pero siguió otros…como pelear contra la injusticia.
Estudió derecho y conoció la justicia desde ambos lados del mostrador, estuvo algún tiempo en un juzgado civil como meritoria y luego pasó por varios estudios jurídicos como procuradora, abogada junior y socia. Hoy tiene su propio estudio y perseguir el sueño de pelear por un país más justo, más ajustado a las leyes es como se ve terminando sus días.
Tuvo unas tímidas participaciones en política, en los años de la UCeDe, como afiliada y militante y como dirigente de UPAU cuando seguía la carrera de agronomía.
Se considera a sí misma liberal de derecha “si es que eso existe” dice.
CONTINUE LEYENDO
[/ezcol_1quarter] [ezcol_1quarter]El Gral. Heriberto Justo Auel tuvo el honor de iniciar sus estudios secundarios en el Liceo Militar “Gral. Belgrano”, en calidad de cadete de la promoción fundadora y abanderado de ese Instituto. La Provincia de Santa Fe le concedió una “Beca al Mérito”, que mantuvo luego al ingresar al Colegio Militar de la Nación. A su egreso, como Subteniente del arma de Infantería, se incorporó a una unidad de elite e inmediatamente, dos años después, pasó a ejercer la docencia en Institutos del Ejército.(Liceo y Colegio Militar).
Ello amplió su tiempo, en particular para participar en el planeamiento y auditoria de los planes de capacitación en el nivel de la enseñanza media y superior, mientras ejercía la docencia y cursaba sucesivas carreras universitarias, afines con su vocación original.
Con el grado de Capitán y como especialista en tropas aerotransportadas, fue destinado como Observador Militar de la ONU en la Línea del Cese del Fuego del Canal de Suez, luego de la Guerra de los Seis Días. Profesionalmente esa etapa de casi dos años enriqueció su experiencia militar, dada la constante actividad de combate que se desarrollaba en la llamada “Línea de Cese del Fuego”. Pero, además, pudo estar en permanente contacto con todos los niveles sociales de las partes en conflicto y, como Licenciado en Ciencias Políticas, inició sus publicaciones en Revistas especializadas sobre temas relacionados con el conflicto de Medio Oriente, aun subsistente.
CONTINUE LEYENDO
[/ezcol_1quarter] [ezcol_1quarter]Ana Barreiro conduce el programa radial DE ESO NO SE HABLA y es una preocupada activista por los derechos de los Presos Políticos argentinos ilegalmente encarcelados debido a su participación o no en la lucha contra el terrorismo.
Barreiro también fue una perseguida por las organizaciones tristemente autoproclamadas de derechos humanos, hostigando a su persona y a sus hijas.
[/ezcol_1quarter] [ezcol_1quarter_end]El Fiscal Marcelo Carlos Romero represento al Ministerio Público. Subraya no pertenecer a la generación de abogados “progres” de Argentina. Enfatiza que por esta razón no utiliza eufemismos para hablar y/o escribir sobre Delincuentes, Crimenes, Penas, Cárcel, etc.
Ha dejado claro que no le encandilan las falsas luces del abolicionismo penal, pregonado -entre otros tantos- por Eugenio Zaffaroni y sus discípulos. Sin tapujos declara no ser lector tardío de Michel Foucault y sin ruborizarse, ni ser pretencioso afirma jamás haber entendido a dicho autor.
Encontramos en su inmaculada trayectoria en la Institución Judicial:
28 de noviembre del año1988 ingresa al Poder Judicial de la Provincia de Buenos Aires, en el Fuero Penal, como auxiliar administrativo.
Recibió una promoción en diciembre de1994 a los cuadros Profesionales del Poder Judicial de la Provincia de Buenos Aires (Fuero Penal) esta vez como Auxiliar Letrado.
CONTINUE LEYENDO
[/ezcol_1quarter_end]PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 18, 2017
ESTAR BIEN CON DIOS Y CON EL DIABLO*
Escribe Claudio Kussman.
MAURICIO MACRI ES UN GENIO?
[ezcol_1third]
Si bien en el 2015 con mi familia nos dejamos engañar con el difuso eslogan del “fin del curro de los DDHH” y lo votamos a MAURICIO MACRI, luego nunca más… fin. Creo que es igual o peor que CRISTINA KIRCHNER, con otra metodología y obediente a su extranjero asesor de imagen, llamado DURÁN BARBA. No obstante el rechazo que siento por sus hipócritas falacias, nada que no sea normal en todo político, por momentos creo que es un genio, mucho más vivo y despierto que la “arquitecta egipcia”. En el caso de ella, a dos años de haber dejado el
[/ezcol_1third]
[ezcol_2third_end][/ezcol_2third_end]
trono real, todavía se le sigue echando en cara lo que estamos viviendo los adultos mayores imputados a como dé lugar, por los mal llamados delitos de lesa humanidad. Pareciera que la continuidad de su política de estado no fuera responsabilidad del actual gobierno.
[ezcol_1half][/ezcol_1half] [ezcol_1half_end][/ezcol_1half_end]Que las 89 muertes en cautiverio ocurridas a partir del 10 de diciembre de 2015, fueran diferentes y casi benignas, en comparación a las anteriores. A un promedio de casi 50 anuales, muerte más muerte menos, MACRI luego de su segundo mandato, habrá superado ampliamente a las 340 que llevan la marca Kirchner. Eso sí, sin ufanarse de ello y solo porque “la justicia es independiente”, lo cual lo hace casi simpático, vio? Para entonces se la seguirá responsabilizando a la Cristina?
PARA QUE NO QUEDEN DUDAS, EL GRAN PLAN NACIONAL
MACRI, recientemente presentó el “PRIMER PLAN NACIONAL DE ACCIÓN EN DERECHOS HUMANOS” de su gobierno. Una referente en el tema, Graciela Fernández Meijide, estuvo en el programa de TV “Mesa de Mujeres” y expresó loas al respecto. “Nadie esperaba de Macri que se ocupara del tema Derechos Humanos”, manifestó Meijide.
En esa línea, criticó que la oposición lo presentaba “como que iba a liberar a todos los militares y que iba a terminar con la ayuda social”. Simultáneamente de este lado, el de los que no tenemos derecho alguno, salvo pocas excepciones como en el caso del veraz Juan Manuel Otero (1), en general se responsabilizó al Secretario de DDHH CLAUDIO AVRUJ, quien como bien sabemos solo es un peón del Ministerio de Justicia y del ejecutivo. Macri casi indemne. Destacable es que en las recientes elecciones, tanto él, como EUGENIA VIDAL y otros, masivamente recibieron nuevamente el voto de prisioneros adultos mayores y familiares. Esta vez ayudados por el rechazo a Cristina, actual miembro del poder legislativo, cargo que ocupa gracias a la “bondad” de MACRI, sin que nadie pareciera reparar en ello. Como así tampoco que él fue el artífice, junto al resto de su equipo, de una verdadera táctica ajedrecística.
FUERA DE TODO PLAN DE VIDA
Mientras se dejaron de lado a dignos candidatos como AUEL, GIULIANO, LARRABURE, LUNA (Jovina), SACHERI, VERCESI, etc. no se vio que nosotros no estamos en los planes de vida de ningún político, llámese Kirchner, Massa, Carrió, Vidal, Macri o quien sea.
[ezcol_1half][/ezcol_1half] [ezcol_1half_end][/ezcol_1half_end]Si saltamos de nuestro asfixiante mundo paralelo en el cual estamos destinados a morir y vamos al real, podemos ver como un Ministro de Defensa, OSCAR AGUAD, descarga su incapacidad ministerial entre jefes de la Armada, tan incapaces como él, para anticiparse o manejar una tragedia como la del ARA San Juan. En este caso es el destinatario de las antipatías de familiares de las víctimas y gran parte de la sociedad. Quien pasa desapercibido y queda bastante bien parado? Nada menos que el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas (desarmadas) o sea MAURICIO MACRI, que justamente lo designara a Aguad en el cargo. Pero cuidado, este presidente tan afecto a los feriados y días de descanso, frente a sí tiene a muy peligrosos enemigos. Estos no descansan, un día fueron por nosotros y porque van por todo, ahora también van por él.
Claudio Kussman
Claudio@PrisioneroEnArgentina.com
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 17, 2017
*DICHO POPULAR DE LA LENGUA ESPAÑOLA – Describe, a la par que condena, la actitud de algunas personas que hacen un doble juego, que no evidencian una postura clara, que apuestan en varios lados para asegurarse una victoria. Mayormente, alude a las veces en que alguien, en una contienda, especula estando a favor de los dos oponentes. La frase retoma las figuras de Dios y el Diablo, tradicionales rivales y emblemas del bien y del mal en el ideario popular.
PrisioneroEnArgentina.com
Diciembre 17, 2017
EL MITO DEL SAPO, LA SERPIENTE Y LA CÁRCEL IMAGINARIA.
Por Andrea Palomas Alarcón.
Un antiguo mito, que México reclama para sus indios chocholtecos, habla de una lucha ancestral entre el sapo y la serpiente. Existen distintas versiones y lecturas de esta historia: el sapo, animal torpe, lento e inerme se ve amenazado por la serpiente, ágil y peligrosa. El sapo no tiene aguijones ni dientes, en cambio, la serpiente cuenta con grandes colmillos de los que emana veneno.
La serpiente se duerme y el sapo traza a su alrededor un círculo de baba, asquerosa pero inocua. La serpiente despierta y se encuentra encerrada por una cárcel imaginaria, absurda, tan repugnante como inofensiva. Cada vez que pretende traspasar los límites impuestos por el sapo, éste le vomita una creciente dosis de baba pegajosa hasta que la víbora sin entender los motivos pero sin atreverse a enfrentar tal kafkiano destino, muere dentro del círculo. Algunas versiones afirman que se suicida inyectándose su propio veneno, otras que fallece de hambre en los límites impuestos por su exótico carcelero.
[ezcol_2third]No voy a presumir de haber sido yo la que aplicó a la estrategia militar esta fábula. Lejos de ello quiero citar y reconocer en el General Heriberto Auel, militar, profesor universitario de estrategia ser el primero al que le oí esta alegoría aplicada a la política de “Derechos Humanos” como guerra subversiva por otros medios.
La sociedad argentina se encuentra circunscripta a su círculo de baba que le han impuesto los grupos autodenominados “defensores de los Derechos Humanos” los que no son otra cosa que el resabio de los grupos terroristas que quisieron tomar la Nación por las armas.
La domesticación que sufre nuestra sociedad frente a la “política de Derechos Humanos” es producto de un largo proceso en el que ha intervenido la prensa, los medios culturales en general, la educación y, particularmente, la indolencia de quienes han preferido dejar hacer porque era más sencillo que recibir un baño de baba asquerosa.
[/ezcol_2third] [ezcol_1third_end]General H.J. Auel
[/ezcol_1third_end]¿Cómo explicar, sino, que se imponga por ley la mentira de los 30.000 desaparecidos? ¿Cómo explicar la morbosa exageración del caso Maldonado? ¿Cómo entender que el gobierno, que ha recibido un espaldarazo electoral como ningún otro en décadas siga postrándose ante hippies con carteles? ¿Cómo admitir que un organismo internacional que ya no debería existir, como la CIDH, le ordene liberar delincuentes y encarcelar inocentes?
La sociedad argentina vive presa en una cárcel ficticia que han venido construyendo pacientemente desde que perdieron por las armas las “orgas” que hoy se llaman “organismos”. Han venido doblegando a la sociedad con un miedo real a amenazas virtuales que se aplican de a uno, sobre uno a la vez como ejemplo para disciplinar a los demás. Una maestra que pretendió dar a sus alumnos una clase de lo que fue el ataque al Regimiento de Infantería Mecanizada R29 de Formosa, otra maestra que mostró a sus alumnos un video sobre el terrorismo de los 70s, un veterano de Malvinas, hoy funcionario que habló de 22.000 mentiras, un profesor universitario que quiso poner en contexto la guerra antisubversiva describiendo los ataques terroristas; y así hasta el infinito. Todos salpicados de baba como ejemplo para que los demás se autocensuren, temerosos de emitir la verdad que perciben por sus sentidos y con su inteligencia. Temerosos de quién sabe qué. Nadie atina a explicar concretamente las consecuencias de liberarse de la mentira.
Las antiguas “orgas” hoy “organismos defensores de los Derechos Humanos” pueden estar complacidos, han perdido la guerra de las armas pero aprendieron el método de imponer su voluntad con armas de utilería, amenazando con enchastrar de baba a todo aquel que se salga del círculo que arbitrariamente marcaron. Crearon algo de la nada, sin nada, una “verdad” mítica admitida a fuerza de repetir sistemáticamente mentiras.
Esta no es una guerra que ellos hayan ganado sino que hemos perdido nosotros, por dejarnos dominar de a uno, por no tomar en cuenta nuestra fuerza y no jugarnos por la verdad y la justicia. Es una guerra perdida por comodidad antes que por diferencia de fuerzas.
La ciudadanía empieza a darse cuenta de que mientras dormía construyeron a su alrededor una prisión hipotética, ilusoria de la que no se sale sin mancharse la ropa.
Ya no podemos seguir rodeados por delincuentes con armas de juguete. Tenemos colmillos poderosos que debemos usar porque en esta insólita guerra, como la serpiente de la fábula, nos jugamos la vida.
* La Dra. Andrea Palomas Alarcón es miembro de la Asociación Civil Abogados por la Justicia y la Concordia.
Nota extraida del portal de Justicia y Concordia https://justiciayconcordia.org/
PrisioneroEnArgentina.com
Octubre 29, 2017
¿CONFUSIÓN, IGNORANCIA O PROPÓSITOS OCULTOS…?
Por Grl Heriberto Justo Auel – Pte IEEBA
Quousque tandem…Argentina.
Entendiendo a Darwin.
La violencia en el Siglo XXI.
¿Cómo “adaptarnos” para sobrevivir en Paz?
El fenómeno socio-político guerra.
El actual estado de guerra civil revolucionario y las nuevas guerras.
Conclusiones
(1). Quousque tandem…Argentina.
Desde la publicación efectuada por el Episcopado Argentino hace unas semanas, referido a la grave situación de la Seguridad Nacional frente al narcotráfico, hemos conocido la total aprobación de la mayoría de los dirigentes políticos que coincidían con el grave diagnóstico de nuestros Obispos. El gobierno reaccionó nombrando a un sacerdote en el Sedronar, Secretaría que permanecía vacante desde hacía meses y que prácticamente no contaba -ni cuenta- con presupuesto para cumplir con su cometido.
Como nuestro Instituto -IEEBA- realiza un constante seguimiento de la situación estratégica regional y propia, dicho nombramiento nos llamó la atención. ¿Qué idoneidad podría tener un pastor religioso para ocupar el cargo que le hacía responsable, en el Estado, de la más importante amenaza estratégica continental? ¿Era Molina un cura dedicado a la Polemología o a la Estrategia Contemporánea?
Del resultado de nuestra investigación surgió que se siguió, en éste caso, con lo que ha sido norma en las últimas décadas: nombrar en el área de la Seguridad Nacional a simpatizantes del gobierno, aunque carecieran de la más mínima idoneidad exigida para ejercer la función. En éste caso, además, se le respondía indirectamente a los Obispos nombrando a un hombre de ellos, para solucionar el más grave desafío a la Seguridad Nacional reclamado en el documento del Episcopado. Era una forma de decirles: ¿Qué quieren hacer? Pues, entonces, háganlo.
Debemos conjeturar -pues no lo sabemos- que alguna reacción tuvieron los Obispos frente a esta respuesta -tan descomedida cuanto extraña- pues acaba de dictarse un decreto limitando la actividad del Sedronar a la lucha contra la “drogadicción”, un tema médico y social que podría estar en manos de un sacerdote. La responsabilidad de la lucha contra el “narcoterrorismo” fue transferido -por el mencionado decreto- al Ministerio de Seguridad.
Es decir, se le entrega al “esfuerzo nacional de policía” la principal amenaza y el central riesgo estratégico del continente, que queda así en manos de un médico y de una especialista en estragos naturales o antrópicos. Sutil gatopardismo que se incluye en el largo y denso “relato”. En términos políticos es una nueva “falacia”, aunque la sociedad -en un 80%- ya no las digiere.
Algunos dirigentes políticos -aun no cooptados totalmente por el “progresismo de izquierda”-, ante el campanazo de la Iglesia lanzaron la propuesta de “comprometer a las FFAA en la lucha contra narcotráfico”, recibiendo la inmediata admonición del gobierno y de los pseudo-opositores “neomarxistas”, encubiertos como “progresistas”, dando lugar a una discusión absurda, con justificaciones ridículas que avergüenzan u ofenden a la razón de quienes despuntan el “abc” académico del real desafío de marras (1).
Mientras la Argentina avanza deliberada y decididamente hacia el “Estado fallido” y los ciudadanos de a pie percibimos una progresiva tensión y ansiedad social, ante un anunciado y reiterado desastre económico -acompañado esta vez por caos social cuyo preanuncio se ha dado en el barómetro socio-político argentino, la ciudad de Córdoba-, nuestros dirigentes políticos continúan “debatiendo”, como meros espectadores inconscientes e irresponsables.
En gran parte la percibida tensión y ansiedad social se retroalimenta naturalmente con los vacíos discursos y porfías de quienes se postulan a la presidencia de la República, careciendo de una propuesta de Gran Política y una clara conceptualización de la naturaleza de los problemas que enfrentamos en la actual etapa, que ha llegado con las propias posguerras y que nos llevan a reflexionar, obligadamente, según lo expresado en el título que hemos dado a éste trabajo.
Nuestra dirigencia ¿está confundida y por ello se equivoca, es ignorante por graves carencias de formación o tiene propósitos que oculta con total hipocresía? La solución al desafío que plantea la “violencia en el Siglo XXI” la trataremos más adelante, pero desde ya, adelantamos que no está en el mero empleo operativo de las FFAA.
En relación con la Seguridad Nacional, –que es la razón de ser del Estado Nacional y su responsabilidad primaria, exclusiva y excluyente-, ¿pueden nuestros dirigentes políticos continuar con el nivel de confusión, ignorancia o propósitos ocultos que ostentan, frente a la gravísima situación que ha denunciado el Episcopado Argentino, reconocida por casi todos, pero ante la que no se actúa sino con “simulaciones”, en los últimos treinta años?
Entendemos que alcanzamos una circunstancia de crisis generalizada que exige tomar decisiones razonables y abandonar los dogmas ideológicos -totalmente extemporáneos- que orientan a los gobiernos y a gran parte de la pseudo-oposición “progresista”. Para que el vaso desborde faltan solo unas gotas…y aun no vislumbramos quién podría sacarnos del presente rumbo de disolución nacional.
(2). Entendiendo a Darwin.
En el acápite citamos a Charles Darwin, que hace ya largo tiempo señaló que en el mundo “no sobrevive el más fuerte, sino el más apto”. Sin embargo, entre nosotros pareciera que éste concepto aun no se asimiló. Ante el clamor generalizado por el grave nivel de inseguridad alcanzado, nuestros dirigentes prometen aumentar el número de policías o bien, conocido el fracaso del sistema educativo, responden elevando el presupuesto del área. Con ello nuestros representantes entienden que han satisfecho el reclamo de sus representados. Es evidente que no han entendido a Charles Darwin. ¿O no lo quieren entender?
Si captamos la idea del inglés, antes de actuar deberíamos reparar en la naturaleza y categoría del desafío a resolver: conceptualizarlo y luego adoptar el modo de acción más apto, factible y aceptable. No es solo una sencilla respuesta de cuantificación. Es necesario ingresar en la compleja comprensión del nuevo fenómeno, provocado por la aceleración de la innovación producida por la investigación y el desarrollo científico-tecnológico. Gran parte de nuestra ideologizada y aculturizada dirigencia está estratificada en el tiempo de la primera revolución industrial y en el ámbito de la finalizada guerra fría.
En 1984 los argentinos acumulábamos las experiencias directas de dos recientes guerras, hijas de la presencia de los arsenales QBN en el hemisferio Norte, desde 1947 (2). En el EMCFFAA el Tte Grl Fernández Torres resolvió aprovechar ese conocimiento, adquirido a altísimo precio. El Ministro Borrás apoyó la iniciativa y se avanzó rápidamente en el planeamiento de transformaciones estructurales en el área de la Seguridad Nacional.
Desgraciadamente, a partir de la muerte de Ministro a fines del ´84, no solo se retrogradó y anuló todo lo hecho, sino que en el Congreso Nacional los “entrismos” (del ERP, en la representación radical –la coordinadora– y de Montoneros, en el peronismo renovador –la cafieradora-) lograron, entre 1988 y 1991 la aprobación de la legislación de Seguridad Nacional, vigente actualmente. Allí está la clave de la actual y total indefensión e inseguridad argentinas.
Es en esos años críticos cuando la Renovación Peronista pierde las elecciones primarias en su bastión bonaerense y la UCR ingresa a la Internacional Socialista. El partido de Alem, Irigoyen y Alvear transmuta a la social-democracia y el Justicialismo se “desperoniza”. El “relato” profundiza su intensidad, permeando a las masas, pero especialmente está dirigido a las clases medias, para llevarla a una transculturación gramsciana: “deben ser socialistas -marxistas- sin saberlo ni quererlo”.
Las leyes de Defensa Nacional -1988- y de Seguridad Interior -1991- se construyeron desde la ideología revolucionaria derrotada en combate en los ´60, ´70 y ´80. Fueron promulgadas en el momento histórico en que terminaba la guerra fría y emergían “nuevas amenazas y riesgos estratégicos”. Pero el legislador, cooptado ideológicamente, no consideró la naturaleza y tipología de los nuevos conflictos, para evitarlos, a través de la reorganización institucional de la Seguridad Nacional. Su objetivo fue otro. Se dictaron estas leyes para anular a las FFAA en el cumplimiento de sus roles constitucionales y para proscribirlas dentro del propio Estado. Con ello abrieron la Caja de Pandora que aún permanece abierta. Miles de muertos, desde entonces, lo atestiguan.
Este despropósito legal complicó las funciones establecidas para las Fuerzas de Seguridad y Policiales, que debieron salir de sus andariveles naturales asumiendo responsabilidades estratégicas, que les eran ajenas, sufriendo sucesivas sangrías y el castigo de un desprestigio permanente. Progresivamente el crimen organizado y el delito común crecieron exponencialmente a lo largo de las tres últimas décadas.
Nuestros estrategas civiles no consideraron construir lo más “apto para sobrevivir” sino lo más conveniente para alcanzar, por ésta vía, la “pseudo-revolución marxista” que había fracasado con las armas. Para ello se creó el “relato”, que aun hoy mantiene como eje a la “política de derechos humanos”, vaca sagrada intocable, a pesar de los graves delitos cometidos por sus principales abanderadas. Así se anestesió al electorado, principalmente urbano y de clase media.
Las consecuencias de esta perversidad están a la vista y ello obliga al estalinismo y a la socialdemocracia -bolcheviques y mencheviques- encubiertos como “progresistas” -hoy mayoría en el Congreso Nacional- a retener al “relato”. El complejo “progresismo” encubierto como opositor, vota toda la legislación propuesta por el Ejecutivo, ayudando a profundizar con hipocresía las falacias de “el modelo”, como necesaria condición de continuidad y alternancia en el poder de los “aliados”.
El eje y común denominador de ésta disimulada “alianza revolucionaria” seguirá siendo la “política de derechos humanos y el igualitarismo”, con futuras consecuencias políticas ya programadas e inevitables:
a) la reforma constitucional sobre el modelo cubano,
b) el total control político de las FFAA (3), de la Justicia y de los medios y
c) la consolidación de una “pseudo-democracia” de partido único.
El relevo o alternancia en el poder dentro de la “alianza revolucionaria” entre bolcheviques estalinistas y mencheviques gramscianos, en los comienzos del presente año 2014 está en plena preparación, con vistas a las elecciones del 2015.
(3). La violencia en el Siglo XXI. (4)
Podríamos decir que el Siglo XXI comenzó tempranamente, con la caída del muro de Berlín y la implosión del Imperio Soviético -1989 / 1991-. Cesa en esos años la Guerra Fría -aunque gran número de nuestros dirigentes continúan en ella- y se inicia un consecuente proceso de globalización, con la particularidad de ser el primero de alcance planetario y de permanecer aun incompleto. El efecto más inmediato de este proceso fue la aceleración del encuentro de las culturas que, como sabemos, siempre emergen de una religión. No es casual, entonces, la importancia que éstas han cobrado hoy en las Relaciones Internacionales.
Su otra consecuencia ha sido la pérdida precisa de los límites entre Paz y Guerra, como efecto de que hoy “todos somos vecinos” y en consecuencia los conflictos se multiplican y mutan, pues simultáneamente hemos ingresado -aceleradamente- a la civilización posindustrial. A un cambio estructural. Es en estas circunstancias internacionales cuando la Argentina se “encapsula” (5) y se hace “antiglobalizadora”, -como si pudiese contener el avance de la “civilización del conocimiento”-.
Para concentrarnos en el tema que nos convoca debemos señalar, tempranamente, que el progresismo debe, además de sostener el “relato falaz” -a través de su masiva publicidad- consolidar el “control civil subjetivo” de las FFAA (2) -a través del mantenimiento de la legislación de “inseguridad e indefensión”- mientras se “democratiza” al sistema judicial y a los medios de comunicación. Esa es la razón por la que llamamos “vacas sagradas” a las leyes perversas.
Otra de las consecuencias de la citada perversidad de la legislación de “inseguridad nacional”, es que ha obligado a los sucesivos ministros del área a negar la existencia de las sorpresivas y flagrantes amenazas y riegos estratégicos actuales, aceptados universalmente, que produjeron sucesivamente -en los Estados desarrollados y en la región- la “revolución de los asuntos militares” –RAM- y la inmediata y posterior “reforma integral” -RI- a fines del Siglo XX.
Contrariamente, la Argentina que tiene impedido por Ley el planeamiento estratégico de los reales desafíos que enfrenta, desarrolla -en el EMCFFAA- “un plan de capacidades”. Se ignora con qué objetivos. Se anuncian compras de armas y equipos, es decir medios, pero se ignora para qué fines. La irracionalidad es total, pero no conmueve a la dirigencia “pacifista, progresista y garantista”. Mientras esto ocurre, decenas de legos opinólogos tratan en los medios el tema de la inseguridad, sin encontrar sus verdaderas causas.
Los candidatos que en los períodos preelectorales tratan éste tema, jamás tocan a la “vaca sagrada”, la legislación causante de la absoluta y comprobada “inseguridad nacional”. Legislación única en la región y en el mundo (6). Sin embargo, llegada la aristotélica situación de que “la única verdad es la realidad”, por vía del “control subjetivo hungtintoniano” (3) el “relato” acaba de incorporar a él a las FFAA, que actualmente están actuando ilegalmente -por necesidades políticas- en el marco interno –como tropas de “vigilancia y control de fronteras”- pero simulando que se encuentran en esa zona en plenas “ejercitaciones finales”. La pseudo-oposición progresista, mira hacia otro costado.
El encubierto rumbo “neomarxista-revolucionario” que orienta a la conducción política de nuestro país -desde 1983, excepto un breve período-, exige que la “política de derechos humanos” -que tuvo su iniciación con el Decreto 158/83- continúe. Ésta es la razón por la que la legislación de Seguridad Nacional -lograda en tiempos de la guerra fría- es intocable en el 2014, a pesar del drama de la inseguridad generalizada y creciente. La guerra fría terminó en 1989/1991, iniciándose diez años de posguerra fría signados en Iberoamérica por la confusión, en particular en los ámbitos intelectuales marxistas.
En el 2001 si inicia una nueva mundial, “contra el terrorismo global”. Llevamos en ella trece años. Sin embargo nuestros dirigentes y en particular el Estado Nacional, no reaccionan, no han tomado conocimiento de su existencia. Mientras la metástasis provocada por los nuevos riegos estratégicos avanza, dejando una estela de sangre -particularmente en las grandes ciudades- los irresponsables que conducen la Seguridad Nacional, reparten aspirinas.
(4) ¿Cómo “adaptarnos” para sobrevivir en Paz?
Si reconocemos que vivimos una nueva etapa de la civilización, la posindustrial, -que ha sido llamada “de las comunicaciones”, “de la cibernética”, “de la tecnotrónica” o más recientemente “la del conocimiento”- y que ésta se superpone -en el tiempo- a la situación emergente del final inesperado de la estratificada guerra fría, dando lugar a un mundo que procesa un nuevo mapa político-estratégico y a “una nueva forma de producir y de hacer la guerra”, nuestra rápida adaptación sería viable, pero no lo será si continuamos negando a la realidad que nos abarca.
Aznar Fernández-Montesinos (4) cita cuatro claves para despejar la incertidumbre que produce la complejidad de la situación en nuevo tablero internacional. Vamos a describirlas e interpretarlas, brevemente:
La sombra de la Guerra Fría: cuatro décadas de congelamiento de las relaciones internacionales se licuaron, pero no dejan de proyectar “su sombra” hacia el futuro. Se inicia una transición en la que el comunismo no desapareció totalmente, sino que camaleónicamente mutó hacia populismos diversos, en Iberoamérica.
La presente globalización como fenómeno incompleto: no es ésta la primera globalización. Siempre acompañaron al final de las guerras mundiales, en sus inmediatas posguerras. La que correspondió a la posguerra fría ha maximizado ciertos beneficios y ha traído novedades que es necesario asumir, para no llevarlas por delante. Ya no hay compartimentos estancos entre comunidades y ello incrementa sus vulnerabilidades. Aumenta la interdependencia y un tropiezo de uno, afecta al conjunto. Entran en relación actores premodernos con posmodernos, sin intermediarios y entran en riesgo las culturas débiles. Las relaciones directas pueden ser beneficiosas o bien pueden ser fuente de variados conflictos. Exigen mayor gobernabilidad, mayor capacidad para acordar y mayor racionalidad ante la confrontación de pareceres. Aumenta la fragmentación y con ella la pluralidad.
La aceleración en el encuentro de las culturas: en éste ítem vamos a detenernos con mayor extensión pues la grave crisis que padecemos tiene, en su causa más profunda, una severa transculturación acelerada por las guerras que peleamos en la segunda mitad del siglo XX. Ya hemos dicho que toda cultura-identidad tiene como cimiento a una religión. En ésta están los dogmas -mandamientos y preceptos- que son inconmovibles y que se trasladan a la cultura como valores y principios, más flexibles, que nos identifican, consagrando una ética política en la organización institucional de la sociedad. Pues bien, en la etapa que hemos descripto, en la que se aceleró el encuentro de las culturas que exigía, para relacionarnos con solvencia expansiva, la afirmación de nuestros valores, los extraviados dirigentes políticos argentinos orientados por el “progresismo revolucionario gramsciano”, hicieron exactamente lo contrario. A través de las mayorías en las Cámaras del Congreso Nacional dictaron leyes “contraculturales” que, acompañadas por la acción de alguna prensa, lograron una sociedad desorientada, contractiva y corrupta, que proyecta su creciente irresponsabilidad “al otro”. La Argentina se “encapsuló” (5), multiplicó sus conflictivos, se empobreció, ingresó en la decadencia y el nivel de su crisis de identidad, es inédita. El Cardenal Bergoglio lo señalaba con energía desde la Catedral de Buenos Aires y era ignorado. Cuando llega a Roma como Papa Francisco, es visitado –con total hipocresía- por quienes le habían dado la espalda en su país, durante años. Es en éste ámbito, de fuerte crisis cultural y política, donde cunde la más rampante inseguridad nacional, producto de la perversa legislación de los transculturizadores. Y es la oportunidad en que la Iglesia Católica, a través de su jerarquía, produce la grave denuncia que hemos citado al comienzo de éste trabajo.
La visión del mundo en clave religiosa: El 11S01 fue un fogonazo que obligó a quienes se orientaban en las relaciones humanas o internacionales solo por los intereses e ideologías, a reconsiderar sus visiones. Súbitamente se produjo un retorno de la sacralidad de la religión y se empezó a revalorizar a Huntington (7) y su teoría que titulaba en su último libro: “La cultura es lo que importa”. Por su repercusión internacional “el fenómeno Francisco” también puede explicarse desde esta perspectiva, que para los argentinos ya es muy importante hoy y lo será aun más mañana, al enfrentar la transición hacia el 2015, si consideramos la naturaleza de nuestra crisis y el abismo que tenemos por delante.
Las claves aquí comentadas, si fueran asumidas y resueltas, nos permitirían procurar una vía para sobrevivir en Paz, entendiendo la naturaleza de la nueva situación, adaptando a la sociedad y a las instituciones a la nueva etapa de la civilización del conocimiento, reconstruyendo la fortaleza de nuestra identidad cultural y asumiendo los desafíos que nos presentan las nuevas amenazas y riesgos estratégicos, en el ámbito iberoamericano de la presente guerra mundial “contraterrorista global”.
(5). El fenómeno socio-político guerra.
La guerra evoluciona con la civilización humana -que en las últimas décadas ha acelerado notablemente su ritmo- sin perder por ello su esencia. Se inscriben en ella todas las formas de la violencia organizada. Es un hecho político y es la Política la que señala su “para qué”. Lo que dijera Mao ha tomado -a lo largo de éste tiempo- cada vez mayor entidad: “la guerra es política con derramamiento de sangre y la política es guerra sin derramamiento de sangre”. La guerra es gestión política a través de alguna variante de fuerza. Cuando se la analiza sin considerar esta cualidad, el análisis es por lo menos incompleto.
Las “grandes guerras” han ido en disminución mientras avanzó la civilización, pero en ellas aumentó notablemente la mortandad. Tilly (8) apunta 27 guerras en el S. XVI, 17 en el XVII, 10 en el XVIII, 5 en el XIX y 5 en el XX. La mortandad en cambio, por mil habitantes fue: 5 en el S. XVIII, 6 en el XIX y 46 en el XX con tendencia a aumentar en el S. XXI, por cuanto se han multiplicado los conflictos y el terrorismo está operando con medios tecnológicos de punta.
El actual encuentro entre culturas nos ha traído a las “guerras asimétricas”. Es un diálogo que incorpora un suplemento de violencia y cuando el diálogo es menor, o no existe, la ecuación se resuelve solo con mayor violencia o exclusivamente con fuerza. Gluksmann lo expresa así (7): “…por su realidad, la guerra es una prueba de fuerza, por su necesidad una prueba de sentido. Opone físicamente…fuerzas que no son jamás estrictamente físicas y materiales”. “…se comunica mediante actos, más que mediante palabras o mediante actos que se añaden a las palabras y la acción se convierte en una forma de comunicación”.
Todos estos conceptos básicos no han estado presentes en los discursos de los recintos parlamentarios, cuando se trataron las vigentes leyes de Seguridad Nacional. ¿Confusión, ignorancia o compromisos? ¿O las tres cosas a la vez? Lo cierto es que el cuerpo social argentino, en la extrema debilidad generalizada a que nos han llevado los desgobiernos, necesita recuperar -cuanto antes- sus anticuerpos: su Seguridad Nacional. Estamos en total inseguridad e indefensión nacional.
El Informe Anual del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos de Londres -HSS- acaba de publicar sus balance militar 2013, revelando que “el crimen organizado y las insurgencias armadas son aun la mayor amenaza estratégica para América Latina” (10). Sin embargo nuestra dirigencia considera al crimen organizado y a la insurgencia como un tema “meramente policial”. Es decir, una agresión que no afecta al Estado ni a la sociedad en su conjunto, sino solo a algunas o varias personas. Es el criterio que se sostiene en los TTOOFF actualmente: “…en la Argentina no hubo una guerra civil revolucionaria”, “hubo una dictadura genocida”,…… “¿porqué no intervino un fiscal junto a las tropas…?”.
Oposición y gobierno ignoran en sus discursos a los presentes y evidentes riesgos estratégicos. Estos no existen, pues la colusión “progresista” los ha prohibido por ley, hace un cuarto de siglo. Sin duda el nexo más fuerte de la alianza de estalinistas y socialdemócratas es su política de derechos humanos. Con ella han extrañado a las FFAA del Estado Nacional, nos están llevando al “Estado fallido” y a la disolución nacional.
A dicha política se la complementa con otra “vaca sagrada”, la intocable legislación de Seguridad Nacional.
Nuestro propósito es dejar planteada esta grave falacia de raíz ideológica y proponer esquemáticamente la salida de esta senda que nos está llevando -eventualmente- a un próximo caos sangriento. Para ello debemos ingresar a la taxonomía de la guerra, estableciendo sus rasgos y mutaciones al término de la posguerra fría -en el 2001-. Este breve proceso, de poco más que una década, reconoce tres condiciones esenciales:
nuevas tecnologías,
nuevos procedimientos y
un cambio generacional del fenómeno.
Es lo que nos llevó a afirmar, más arriba, que “hay una nueva forma de hacer la guerra”. El matrimonio Toffler (11) estableció en 1989 tres “olas guerreras”, identificándolas con las etapas de la azada, la cinta de montaje y la computadora. Lind (12) luego de las experiencias de Irak y Afganistán, propone una clasificación de las guerras según el siguiente esquema:
Primera Generación: surgen en el Renacimiento junto al concepto de Estado Nación. Son guerras limitadas con objetivos definidos y tropas profesionales. Interesa lo cuantitativo. La batalla se trata de evitar. Son dinásticas. Paradigmas: Carlos V y Francisco I.
Segunda Generación: se asumen como compromisos sociales con una causa, tal el caso de la revolución francesa y de las revoluciones industriales y de los transportes. Aparece la guerra de masas, la artillería, las comunicaciones, la organización, la evolución táctica. Interesa el poder de fuego. Son guerras nacionales. Paradigma: Napoleón y San Martín.
Tercera Generación: se correlacionan con la motorización. Se privilegia a los medios tecnológicos en confrontación. Se combate por ideas y el componente social inercial activado tiende al aniquilamiento. La guerra se hace ilimitada, total. Interesa la maniobra. G.M. II. Paradigmas: Rommel y Montgomery.
Cuarta Generación: aparecen con la globalización posguerra fría, a partir del 2001. El hombre pasa a ser su eje. La “imagen” comunicacional es central para el dominio de la opinión pública. Se apela a lo emocional, no a lo racional. En nuestro mundo iberoamericano se caracterizan por su informalidad (2), su asimetría, su acción corruptora, y por la licuación de las fronteras físicas y conceptuales. Se desarrollan en nuestro mundo periférico, tales los casos de Irak, Afganistán o Iberoamérica. Son guerras que se han retirado de los teatros de operaciones militares y se han posado sobre las sociedades. Kal Holsti (13), respondiendo a un interrogante de Adam Jones acerca de la caracterización de las nuevas guerras en Iberoamérica, dio una respuesta sumamente ilustrativa -en el año 2001- para los dirigentes argentinos de hoy: “Si Ud. desea conocer la situación estratégica de un país o una región sudamericana, observe el estado del Estado”. El Grl David Petraeus, que comandó las operaciones contra insurreccionales en el Gran Medio Oriente, es el teórico de las Guerras de Cuarta Generación más reconocido.
El ya citado William Lind continuó estudiando la evolución de las nuevas guerras y ha perfilado a las de “Quinta Generación” como: “…la lucha del Estado para mantener su monopolio sobre la fuerza y la organización social, de cara a los desafíos de las guerras de Cuarta Generación. El siglo XXI será cada vez más marcado por las guerras de Quinta Generación y su raíz tecnocibernética en todos los ámbitos de las telecomunicaciones. La confrontación en Beirut, entre a guerrilla chiíta Hezbola y sus derrotados contrincantes sunitas, podría ser muy bien definida como una guerra de las telecomunicaciones”.
Entiendo que en los párrafos precedentes queda claramente demostrada la acelerada transformación de la guerra, en la última década. A pesar de ello, la Argentina “encapsulada”, sumida en la profundidad de una inseguridad generalizada, con un inédito número de víctimas inocentes que aplasta a la sociedad, no ha logrado que la dirigencia política se ocupe de la más alta preocupación de la sociedad y principal responsabilidad del Estado. La Seguridad Nacional sigue siendo un tema tabú. “De eso no se habla”. Es el reaseguro de la continuidad del “actual estado de guerra civil revolucionario”.
(6). El actual estado de guerra civil revolucionario y las nuevas guerras (2).
En las nuevas guerras que describimos en el punto 5., el plano militar no es – necesariamente- el más relevante. Esa es la razón por la que a lo largo de estas páginas citamos permanentemente a la Seguridad Nacional y no a la Defensa Nacional. Para abarcar a estos conceptos hay que diferenciar a lo que consideramos sustantivo-esencial, de lo meramente verbal-operativo. Éste equívoco es el que señalábamos en el punto 1. entre quienes proponen operar con las FFAA contra el narcoterrorismo y quienes se oponen. Ambos están equivocados. No entienden la naturaleza de las guerras de Cuarta Generación. ¿Están confundidos, son ignorantes o están comprometidos con el “enemigo sin rostro”? Quienes adscriben al Foro de San Pablo, cubren -sin duda- las tres probabilidades.
La primera condición para superar la demoledora acción mafiosa del narcoterrorismo -que es la forma más importante del crimen organizado en nuestro continente- es la recuperación institucional de Estado, mientras ello sea viable (14). De lo contrario habrá intervención externa. Las instituciones estatales constituyen el objetivo principal a ocupar por éste enemigo. El objetivo subsiguiente es el control de la población. Estas son “guerras civiles”, “internas”, que nuestra legislación prohíbe planificar, es decir, prever, desde 1988. Consecuentemente están en pleno desarrollo -como estado de guerra civil revolucionario– (2) ante una conducción nacional irresponsable y comprometida, un pueblo inconsciente y un cuasi-Estado institucional. Si a estas guerras no se las comprende, no hay posibilidad alguna de contenerlas, reducirlas o eliminarlas.
Hasta la fecha no existe ningún indicio de comprensión, en el oficialismo ni en la oposición. Por el contrario, abundan indicios de colusión con el agresor, en ambos sectores. Carecemos -en el débil y anticuado Estado Nacional- del órgano que desarrolle una Gran Estrategia -que debiera corresponder a una Gran Política que tampoco existe-, indispensable para enfrentar a estos desafíos provocados por enemigos “no estatales”.
La Ley de Defensa Nacional 23.554 fue promulgada durante la guerra fría, en 1988. Hemos afirmado y lo reiteramos, podríamos llamarla sin temor a equivocarnos Ley de Indefensión Nacional. El 12 de Junio de 2006, dieciocho años después, a cinco años de iniciada la nueva guerra mundial “Contraterrorista Global” y en pleno desarrollo de las guerras de Cuarta Generación, la ministro de Defensa Garré la reglamenta, profundizado los desconceptos de la Ley al punto que, afirmamos: la reemplaza con un decreto. Para demostrar la perversidad de la Ley y su decreto reglamentario 727/06, transcribo un párrafo del Art. 1° de éste último: “Se entenderá como “agresión de origen externo” el uso de la fuerza armada por un Estado contra la soberanía, la integridad territorial o la independencia política de nuestro país, o en cualquier otra forma que sea incompatible con la Carta de las Naciones Unidas”.
Éste párrafo va mucho más allá de lo que la Ley 23.554 prescribía y es el que abre su reemplazo, aproximándola a la Ley de Seguridad Interior. En un momento histórico en que -en el mundo- el 99,5% de las guerras en acto son “interiores”, la Argentina organiza al Estado para pelear guerras internacionales –exclusivamente-, “contra FFAA de países vecinos”, con los que -se dice- estamos en proceso de integración. Estos despropósitos no conmovieron ni conmueven a nuestra dirigencia, pero nos consta que sí preocupan a las de los vecinos.
Pero hay más. En sus considerandos, el Decreto muestra las “patas de la sota”: “Que por ello deben rechazarse enfáticamente todas aquellas concepciones que procuran extender y/o ampliar la utilización del instrumento militar hacia funciones totalmente ajenas a la defensa, usualmente conocidas bajo la denominación “nuevas amenazas”, responsabilidad de otras agencias del Estado organizadas y preparadas a tal efecto; toda vez que la intervención regular sobre tales actividades supondría poner en severa e inexorable crisis la doctrina, la organización y el funcionamiento de una herramienta funcionalmente preparada para asumir otras responsabilidades distintas de las típicamente policiales”.
Sería muy conveniente que la ministro -y sus asesores estrategas civiles- se dieran por enterados del cambio de naturaleza de las guerras presentes. La seguridad pública y la seguridad estratégica, que se desplazaban -hace años- por caminos paralelos, hoy actúan incardinados y obligan -necesariamente- a contar con una Gran Estrategia. ¿Cuáles son las “otras agencias del Estado organizadas y preparadas a tal efecto? La respuesta es: no existen. No hay planeamiento, no hay previsiones. Solo hay improvisación reactiva.
Este expreso rechazo a “las nuevas amenazas” nos deja en soledad en la región, en el continente y en el mundo. Además, nos avergüenza como argentinos cuando participamos de encuentros internacionales (6). ¿Confusión, ignorancia o compromiso con el nuevo agresor? No olvidemos quienes fueron los proponentes de esta legislación, según lo describimos en el punto 2. Concretamente: a fines de la guerra fría, simpatizantes del terrorismo ideológico nos impusieron la actual legislación de Inseguridad Nacional.
El desafío a la Seguridad que tiene todo el continente Iberoamericano, es común, es internacional. Por esa razón es imprescindible darle una respuesta también internacional a través de un Tratado de Seguridad Colectiva y Defensa Común, como nuestro Instituto lo viene proponiendo desde 1985.
Los efectos dramáticos e indiscutibles de los vigentes despropósitos “legales”, están evidenciados en la realidad de todos los días. Se debate acerca de lo anecdótico y se evita, en las entrevistas televisivas o radiales, la presencia de un solo polemólogo o estratega para intentar explicitar el drama, con alguna profesionalidad. Se encuentran allí innumerables causales a la rampante inseguridad, menos las sustantivas. Como ya lo señaláramos, así como la caída de la educación no se resolvió aumentando los presupuestos, la inseguridad nacional no se logrará aumentando el número de los agentes de policía o llamando a un abogado “progre” para que remedie al “gatillo fácil”.
La Constitución establece idoneidad para ocupar cargos en el Estado y en el área de la Seguridad Nacional hace décadas hay solo diletantes y algún aprendiz de brujo. Mientras tanto, avanzamos inconscientemente hacia el “Estado fallido” y diariamente “las nuevas amenazas” cobran vidas en las calles del país, en progresión geométrica.
(7) Conclusiones.
En extrema síntesis, llegamos a las siguientes conclusiones:
Gran parte de nuestra dirigencia es extemporánea, permanece ideológicamente en el estadio de la guerra fría y se ha resistido a ingresar -decididamente- a la presente etapa de la civilización posindustrial.
Hay “una nueva forma de producir y de hacer la guerra” y la Argentina, transculturizada y “encapsulada” carece, en su conducción, del coraje y la audacia necesarios para lanzarse al futuro. La parálisis política nos llevó a la pobreza, a la corrupción, a la inseguridad creciente y a una eventual disolución.
El actual “estado de guerra civil revolucionaria” es muy probable que ingrese -en el 2014- a una situación de caos social -cuyos indicios ya se han dado en Córdoba y Tucumán- bajo la conducción internacional del “Foro de San Pablo”.
La inseguridad nacional imperante es ilegítima, pero absolutamente legal, impuesta colusivamente por los simpatizantes del estalinismo y de la socialdemocracia desde el Congreso Nacional, en 1988 y 1891.
El presente año se inicia con una fuerte crisis económica-financiera que cataliza a la tensión y ansiedad social, frente a un incierto futuro. No existen indicios de cambio de rumbo, toda vez que el “progresismo” controla a los partidos de la pseudo-oposición, siendo la política de derechos humanos el nexo de la oculta alianza “revolucionaria” de bolcheviques y mencheviques.
La legislación de Seguridad Nacional –“vaca sagrada” de dicha alianza- lleva progresivamente a la Argentina a la situación de “Estado fallido”, al santuario de tráficos ilegales -consecuentemente espacio de intervención externa- y a una eventual disolución nacional.
Ante la caída del petrodólar venezolano, el proceso “pseudo-revolucionario” se apoya hoy financieramente en el narcodólar. Ello explica que el espacio nacional es -de hecho- “zona liberada” para los carteles de la droga y de los tráficos ilegales.
El “relato”, sostenido en las últimas tres décadas con éxito, impide que una gran mayoría de los ciudadanos realice una lectura correcta de su circunstancia. Mira, pero no ve, mientras el gobierno actúa sobre un espejismo opuesto a la realidad que oculta.
¿Confusión, ignorancia o compromiso de una dirigencia extraviada?
Citas:
PrisioneroEnArgentina.com
Octubre 9, 2017
LAS FARC-EP*, ACTUAL PIVOTE DEL ANTIGUO PROCESO REVOLUCIORIO IBEROAMERICANO
Por Grl Heriberto Justo Auel
“Definitivamente las FARC no se han desarmado y no parece claro que estén dispuestas a hacerlo…”
A. González Martín** – 30 Ago 17 (1).
Un “desaparecido” en el desierto patagónico.
Las FARC-EP ¿están desarmadas?, y… ¿están aquí?
Más allá del eventual “desaparecido”.
Un “desaparecido” en el desierto patagónico.
En estos primeros días de Sep 17, mientras los argentinos esperamos una nueva primavera y las elecciones legislativas de Octubre, el antiguo proceso revolucionario setentista se ha reactivado con indudables fines electorales. En el desierto patagónico hubo -al parecer misteriosamente- un “desaparecido”.
Las “organizaciones de DDHH” en los últimos treinta y cinco años desarrollaron una intensa “comunicación psico-política” (2) como directas continuadoras de las operaciones revolucionarias iniciadas en 1959 por la “guerrilla armada”. Construyeron -desde 1983- un “relato”, según el manual de Antonio Gramsci, tras la derrota de las bandas armadas en los singulares combates -1974/1988- de la “guerra asimétrica” contra-insurgente, o contra-terrorista, según el nivel en que se la considere.
Es esa intensa y masiva narrativa épica la que permite hoy una aviesa y planificada maniobra política, como única bandera electoral disponible por parte de la “pseudo-revolución, en manos de la hipocresía KK.
En aquel elaborado relato surgieron términos-símbolos. Entre ellos, uno insignia: “desaparecido”. Esta palabra es llave en la sibilina maniobra, en plena ejecución pre-electoral, exista o no el desaparecido. “Desaparecido” ha sido y es la palabra de mayor empleo en la comunicación tansculturizadora, a lo largo de las últimas décadas. Pero no deja de llamar nuestra atención que, después del 10 Dic 15 y habiendo pasado ya más de un año y medio desde aquella fecha, aun haya seguidores ingenuos o inocentes del perverso “relato”. Que el núcleo duro K lo sostenga, es comprensible, pero que exista una majada neutra y mansa que los siga, debería preocuparnos como sociedad.
La profesora Lic. Analía L. Pastran (3) del IEEBA, -especializada en comunicación política-, a través de una cita nos explica así al fenómeno socio-comunicacional:
Por comunicación podemos entender -según José Luis Sánchis- “… aquellos procedimientos por medio de los cuales una mente afecta a otras (…). La comunicación busca siempre un feetback, una respuesta del receptor desde la cual puede aprender y desarrollarse; así se habla de comunicación perfecta cuando el mensaje ha sido bien recibido y se produce la reacción deseada en el receptor. La comunicación tiene un ingrediente de cultura, de inter-subjetividad y de inter-relación”.
Podríamos agregar aquí que esa comunicación puede ser empleada apuntando al bien común o a la creación de una engañosa “falacia” política, encubridora de propósitos inconfesables, como lo ha sido el caso argentino reciente, que nos puso al borde de un drama similar al que padece Venezuela.
La marcha convocada por las Organizaciones de DDHH en la CABA el día viernes 01 Sep 17, ha sido una comprobación concreta del fenómeno citado. Otra, que lo ratifica, fue la del 2×1. Conocedores del fruto de la “reacción deseada en el receptor”, los revolucionarios de cartón explotan electoralmente el “ingrediente de cultura, de inter-subjetividad y de inter-relación”.
Sobre ese cultivo se encuentran las únicas banderas disponibles para el nuevo neo-marxismo pseudo-revolucionario. No es Macri quien “ya tiene su desaparecido” como lo dice “el perro” Verbitzky en Página 12; sino Cristina, que lo necesita imperiosamente. ¿Qué otra bandera tiene para alcanzar los fueros parlamentarios, sino explotar lo sembrado en la últimas décadas? Ayer ingresaron por las quebradas del NO, con armas y hoy lo hacen con el “indigenismo radical”, por los portillos del SO, con un “desaparecido” y…¿con armas?…
Las FARC-EP ¿están desarmadas?, y… ¿están aquí?
Pero, detrás del dudoso y eventual “desaparecido” hay una compleja trama que parcialmente hemos citado en un artículo del 01 Ago 17 (4), en el que decíamos:
“El XXIII Encuentro del Foro de San Pablo -FSP- acaba de desarrollarse en Managua -Nicaragua- entre el 15/19 Jul 17, bajo dirección del sandinismo por ausencia de su fallecido presidente/fundador -Fidel Castro- y de su vice-presidente -Lula-, sentenciado a nueve años de prisión, por corrupción. El informe final del Encuentro expresa claramente”:
“Las fuerzas de izquierda y progresistas perdieron el control del Poder Ejecutivo en Honduras, Paraguay, Argentina y Brasil y resisten en Venezuela, Bolivia, Ecuador, Uruguay, Nicaragua y El Salvador”. Por estas razones la directiva establece como nuevo objetivo: “buscar la unidad de las izquierdas revolucionarias y organizar la resistencia, hasta que se inicie la contraofensiva”.
Las FARC retienen un peso específico central en la dirección del FSP y están presentes en nuestro Cono Sur. Veamos lo que expresa una prestigiosa institución española, el Instituto Español de Estudios Estratégicos -IEEE-, a través de su investigador Andrés González Martín, que nos da una categórica respuesta -el 30 Ago 17- a una de las preguntas de nuestro subtítulo: “las Farc no están desarmadas”, “no han entregado todo su arsenal”.
¿Es de interés para los argentinos esta información? Nuestro Instituto -IEEBA- entiende que es de enorme importancia. Las FARC son -sin duda- el actual pivote del antiguo proceso revolucionario iberoamericano. Constituyen el eje de poder del FSP -órgano director político/estratégico de la revolución iberoamericana- y sabemos que están presentes en Bolivia y Paraguay desde hace muchos años y que también lo hacen en la “Araucania” chilena. ¿Estarán en la pretendida área de la Patagonia argentina ocupada por los “noveles mapuches” o antiguos araucanos chilenos, en donde se han cometido últimamente un sinnúmero de crímenes con el sello de las FARC?
En Bolivia, el ex Ministro de Defensa Sr. Kieffer, aseguró la presencia de las FARC, desde 1998. En Paraguay, el Fiscal Alejo Vera confirmó tener pruebas de la histórica relación del Ejército del Pueblo Paraguayo -EPP- con las FARC, desde 2008. En Chile la relación del PC chileno con las FARC quedó evidenciada en las computadoras encontradas en el cuartel general de Tiro Fijo, en Ecuador, luego de que la Fuerza Aérea Colombiana lo bombardeara.
En esos documentos se encontró el acuerdo para que las RAM se capacitaran con las FARC en Colombia. Se trata de los cursos de entrenamiento especial recibidos por Facundo Jones Huala y su grupo, que en los últimos meses produjo un centenar de graves hechos terroristas en ambos lados de la cordillera, con fines políticos. Chile le ha solicitado la extradición, acusándolo de terrorista. Ésta fue denegada por un Juez Federal argentino y aun sigue irresuelta. A su vez el Gobernador del Chubut ha pedido el juicio político al mencionado Juez y no conocemos en que laberinto se atascó.
Llama la atención que frente al mencionado cuadro de situación, Jones Huala se haya presentado espontáneamente a un control de rutas de la Gendarmería Argentina, sabiendo que es buscado por Interpol. Allí comienza el drama o ¿la farsa? del “desaparecido” Maldonado, que hemos calificado como muy probable “maniobra planificada”. Si así fuere, el FSP-FARC tendría el total control de la operación pre-electoral.
Respondida una parte de la pregunta formulada en el subtítulo y con la seguridad que las FARC están presentes en nuestra región desde hace tiempo, tenemos la intima convicción que, alcanzado el tortuoso y dudoso acuerdo de Paz con el presidente Santos, su alta conducción ha desplazado hacia la Araucania hombres y armas, por imperiosas necesidades logísticas de su cartel de la cocaína, que es la fuente de su poder y que está fuera del alcance del Tratado de Paz.
El enorme espacio vacío de nuestra Patagonia les ofrece la posibilidad de ocultar allí grandes depósitos de drogas y armas. Por ello están desplazando por el terror a los puesteros de inmensas estancias, con las RAM, que ellos adiestraron con anterioridad. La comprobación de este supuesto la tendremos cuando se conozcan las cargas de cocaína que se decomisarían en los puertos patagónicos del Atlántico, en un futuro cercano. Los indicios ya existen.
Con referencia a la otra pregunta que nos formuláramos: ¿las FARC, están desarmadas?, la respuesta es que no lo están y en eso coincidimos con González Martín (1) cuando expresa que después del Tratado de Paz “podrían convertirse en un partido político armado” y agregamos, “con un creciente poder económico” compuesto por miles de millones de narco dólares, que les aseguraría llegar a la presidencia de Colombia en el mediano plazo. Es lo que el presidente Santos -premio Nobel de la Paz al estilo de nuestro Pérez Esquivel- ha logrado, y lo que el ex presidente Uribe predijo antes de la consulta para la aprobación del “acuerdo de Paz”.
El 26 Jun pasado, la misión de la ONU en Colombia anunció que las FARC habían entregado 6803 guerrilleros y 7132 armas -fusiles y armas de puño-; pero ello no significa que se hayan desarmado totalmente. Gran parte de la prensa mundial interpretó mal ese hecho, manifestando que la organización se había desarmado. 1200 ex guerrilleros pasaron a formar parte de la Unidad Nacional de Protección -UNP-, escoltas de los nuevos políticos y ex jefes provenientes de las FARC. Otros han formado empresas de seguridad privada, al servicio de otras empresas de ex componentes de la organización armada.
Medio millar de disidentes de las FARC decidieron no ingresar al Tratado. Continúan en rebeldía y con las armas en sus manos. A ello debemos sumar aproximadamente mil quinientos guerrilleros desplegados en Venezuela que continúan en ese país. Lo más trascendente es que existen aun más de novecientos almacenes secretos. Las FARC han manifestado que no tienen inventarios de material de guerra -por lo menos para la ONU y el gobierno-. No hay certeza de lo que aun no se ha entregado, pero es muy probable que lo hecho no llegue al 50% de lo existente.
Un dato preocupante, que no aparece, es el de los misiles portátiles tierra aire y los misiles antitanques. Se calcula que suman varios centenares. A este arsenal disperso se suman las minas antipersonales. Los campos de coca de las FARC están protegidos por campos minados. Hubo once mil bajas producidas por minas en los últimos años y solo las FARC tienen los planos de los campos que han sembrado. El efecto psicológico de su sola existencia, sobre la población, limita seriamente el desplazamiento en las zonas rurales.
A fines del mes de Jun 17 se habían intervenido setenta y siete depósitos, de un total declarado de novecientos cuarenta y nueve. En esos depósitos, además de armamento, materiales, munición y vestuarios, hay mucho dinero. Hay un gran número de civiles que compiten con los guerrilleros disidentes para apropiarse de los depósitos enterrados. Al no poder bancarizar sus ingresos negros, la organización ha tenido que recurrir a lo que se conoce como “El Dorado de las FARC”, en la selva.
La minería es otro de los grandes ingresos de las FARC y gran parte de ella está trabajando legalmente, administrada por testaferros. El Procurador General de Colombia ha declarado que la mayor fortuna del país es la de las FARC. El Ministerio de Hacienda la calcula en 39 billones de dólares. El Procurador ha declarado que “el Tratado de Paz puede terminar siendo la mayor operación de la Historia de lavado de dinero”.
Más allá del eventual “desaparecido”.
La antigua revolución estalinista que afectó a toda Iberoamérica desde 1959, evoluciona a un neo-marxismo progresista, altamente violento y corrompido. Mientras está en retirada en algunos países de la región, cuenta hoy con Las FARC -en Colombia– como un nuevo partido armado y financieramente poderoso -con base en un país importante- que ha extendido ya sus tentáculos armados hacia el Sur, en las preliminares de una contraofensiva revolucionaria.
El poder vicario depositado por Cuba en Venezuela se desplaza inexorablemente a Colombia y Cuba, sin Fidel, deberá encontrar un nuevo socio, entregando probablemente -para sobrevivir- el petróleo y los puertos venezolanos a China y Rusia. Brasil -en crisis- estaría maduro para negociar a través de sus sectores de izquierda con las FARC, en Bogotá, y no sabemos qué futuro le aguardan a Chile-Perú y Argentina, con regímenes no consolidados.
Nuestra querida Patria, carente de una Política de Defensa y de su correspondiente planeamiento estratégico que active al subsistema de inteligencia estratégica, ha perdido la iniciativa estratégica y -consecuentemente- su libertad de acción, como lo evidencia la maniobra política con eje en un “sorpresivo desaparecido”. La Argentina está hoy en un doble riesgo: en el corto plazo puede perder el rumbo tomado el 10 Dic 15, para regresar caóticamente a la etapa anterior, en el 2019. En el mediano plazo podría escalar desde el actual “estado de guerra civil”, a una situación belígera asumida sin planeamiento estratégico, improvisadamente, como lo hicimos en los ´70 y en el ´82. En esta oportunidad la consecuencia más probable sería su desintegración social y geográfica.
Sobre la conciencia -si la hubiere- de los legisladores que nos dejaron desde el ´88 en total inseguridad estratégica y pública, pesan ya miles de muertes, que diariamente siguen acumulándose. Se le ha entregado legalmente al “esfuerzo nacional de policía” la responsabilidad de prever los riesgos y amenazas estratégicas posguerra fría, para extrañar a las FFAA del Estado Nacional. Lo han logrado, con absoluta inconsciencia, ignorancia e irresponsabilidad. Las Policías actúan reactivamente. La actitud proactiva exige planeamiento estratégico y éste es ajeno a las policías, aquí o en la China.
A esta “venganza” irracional de nuestros revolucionarios y sus simpatizantes hipócritas, debemos sumar el arrasamiento institucional del politizado sistema judicial. Podríamos llegar, en breve, a la paradoja de continuar con los “juicios de lesa humanidad” mientras el mismo Estado Nacional está siendo agredido y lucha nuevamente con los continuadores de los que lo hicieron en los ´70 y que lo explotan -políticamente- desde el ´83. Son las paradojas de la inmadurez, la ideologización de la Política y de la debilidad cultural -corrupción- de un pueblo.
Más allá del “desaparecido” hay una dramática historia que hemos aceptado reemplazar por una narrativa o relato, impuesto por un enemigo derrotado en combate. Una profunda “grieta” divide a una mayoría social pasiva, escasamente comprometida, que no ha encontrado un liderazgo a la medida de su crisis; de una minoría activa, híper-ideologizada, rentada, bajo una conducción revolucionaria internacional, lúcida y experimentada para operar las guerras de séptima generación. Mientras tanto nuestra dirigencia discute el sexo de los ángeles.
CITAS:
*Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército Popular.
(1) A. González Martín. “Las FARC no están desarmadas”. 30 Ago 17. www.ieee.com.es
(2) En particular el CELS de Horacio Verbitzky y el diario Página 12.
(3) A. L. Pastran. “La Comunicación como Estrategia”. Ago 17. www.ieeba.com.ar
(4) H. J. Auel. “Política de DDHH Vs. Política de Seguridad Nacional”. 01 Ago 17. www.ieeba.com.ar
Heriberto Justo Auel
Septiembre 9, 2017
PrisioneroEnArgentina.com
“CAMARADAS” GRACIAS POR NADA
El voto militar, la familia militar y las poco apoyadas listas 262 y 298.
LOS AMORFOS*
Luego de leer la noticia que por supuesto todos ya sabíamos, sobre el voto militar, vuelvo a escribir sobre el tema dirigiéndome a mis “camaradas”. Si bien la nota periodística solo habla del voto de los militares, todas las instituciones de uniformados a las cuales unos y otros pertenecimos hizo exactamente lo mismo. Dejando de lado las listas 262 y 298 con honorables candidatos militares y civiles víctimas del terrorismo y olvidando a quienes sufrimos y morimos en ilegal prisión, prefirieron la falacia del “fin del curro de los derechos humanos”.
Cuando leo sobre San Martín y me los imagino a ustedes haciendo lo propio, o cantando el Himno Nacional Argentino, me da nauseas. Lamentablemente tienen una mente y un espíritu amorfo y no son dignos de confianza. Yo nos le compraría un auto usado ni en broma. Muchos menos si tuviera la posibilidad de un enfrentamiento armado los quisiera de mi lado, prefiero la soledad. Sé que me abandonarían a la primera de cambio como hicieron y hacen ahora. Esto ocurre desde las más altas a las más bajas jerarquías. El uniforme que llevan les queda muy grande ya que carecen de honor. Lo lamento por ustedes.
*Sin forma regular o bien determinada. Que carece de personalidad y carácter propio”
Claudio Kussman
PrisioneroEnArgentina.com
Claudio@PrisioneroEnArgentina.com
@PrisioneroA
Agosto 21, 2017
Cambiemos se impuso entre el voto militar y ganó ampliamente en la Antártida
Ganó en las mesas cercanas a las unidades de El Palomar, Campo de Mayo, Regimiento de Patricios, entre otros.
Así como Cristina Kirchner se impuso ampliamente en las cárceles de la provincia de Buenos Aires, Cambiemos ganó en la mayoría de las mesas ubicadas en las zonas cercanas a los cuarteles militares.
Por ejemplo en la Antártida, lugar de referencia histórica para medir el voto militar, Cambiemos sacó el 83,2%, unos 114 votos sobre un total de 137.
Aunque el triunfo fue más acotado en la zona de Campo de Mayo, en el Gran Buenos Aires, con un 37,5%; ganó con el 60% en las mesas de Palermo cercanas al Regimiento de Infantería Patricios, obtuvo un 54% en Villa Martelli, 51% en Puerto Belgrano y el 40% en El Palomar, entre otros resultados favorables al macrismo.
Los datos fueron publicados esta mañana por el diario La Nación, que tuvo acceso a un relevamiento sobre el voto castrense.
Por su parte, la candidata a senadora de Unidad Ciudadana se impuso en localidades bonaerenses como Moreno, con un 39,7% en cercanías a la sede de la Brigada Aérea VII de la Fuerza Aérea; en Merlo con 46,6% y Quilmes con 35,4%, donde se encuentra Aérea tiene la Dirección de Vigilancia y Control Aeroespacial y el Área Material Quilmes, dedicada al mantenimiento de aeronaves de la Fuerza Aérea.
Otros resultados favorables a los candidatos de Cambiemos se dieron también en las mesas cercanas a la Base Naval de Mar del Plata (42,2%), la VI Brigada Aérea de Tandil (44,4%,) el Apostadero Naval de Río Santiago (41%), el Grupo de Artillería Blindada de Azul (43,2%) y la Base Aeronaval de Punta Indio (46,6%).
En la provincia de Córdoba, donde en las generales el macrismo obtuvo una victoria arrasante, también sacó un 46% de votos en las cercanías del Comando de la División de Ejército II, el Batallón de Comunicaciones 141 y el Área Logística Córdoba, entre otras unidades.
Fuente: https://www.clarin.com/politica/cambiemos-impuso-voto-militar-gano-ampliamente-antartida_0_SJsRwIuuW.html
Colaboración: Dra. Andrea Palomas Alarcón
[/ezcol_1half_end]PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 21, 2017
ETERNO AGRADECIMIENTO
Estimados Heriberto Justo Auel y miembros de El Movimiento Lista 262 y Arturo Cirilo Larrabure, José María Sacheri y miembros de Todos por Buenos Aires, Lista 298.
Juntamente con mi familia, les queremos hacer llegar a todos y a sus respectivos seres queridos, nuestro eterno agradecimiento por todo el esfuerzo puesto para, casi sin tiempo, prepararse y llegar a la votación de las PASO 2017.
Imagino que dado el magro resultado obtenido, en gran parte por el poco apoyo brindado por la familia militar, de fuerzas de seguridad, policiales y penitenciarias estarán deliberando sobre el curso de acción a seguir. Desde ya hago votos para que la determinación que cada uno tome, sea lo más acertado y beneficioso a ustedes y sus honorables sentimientos.
[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end][/ezcol_1half_end]
Todos sabemos que uno de sus tantos objetivos es luchar por el reconocimiento de las víctimas del terrorismo, como así también abogar por verdad y justicia para quienes hoy estamos en ilegal prisión. En este caso por haber o inclusive no haber combatido a los sanguinarios asesinos de los años 70, que enlutaron esta nación. Al respecto tengan en cuenta el factor tiempo. Nosotros por edad, ya casi no lo tenemos y la labor emprendida es a largo plazo. De allí que es muy importante que cuenten con gente joven, como el resto de los partidos políticos y en particular los de ideologías más radicalizadas. Sabemos que la tarea es verdaderamente titánica y por ello lo que resuelvan será lo acertado.
Reiterando una vez más nuestros buenos deseos y agradecimiento, los saludamos con gran afecto.
CLAUDIO KUSSMAN Y FAMILIA
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 19, 2017
POLÍTICA DE DERECHOS HUMANOS Vs. POLÍTICA DE SEGURIDAD NACIONAL.
POLÍTICA DE DERECHOS HUMANOS
Vs.
POLÍTICA DE SEGURIDAD NACIONAL.
Grl. Heriberto Justo Auel
01 Ago 17
“El mundo contemporáneo se enfrenta a dinámicas que ponen
en aprietos a los operadores clásicos de la Seguridad”.
César Augusto Niño González*.
El “Encuentro” de Managua.
Entre “relatos” y falacias.
La Política de Seguridad Nacional.
El “Encuentro” de Managua.
La publicación del informe final del “XXIII Encuentro del Foro de San Pablo-FSP-” confirma -definitivamente- las afirmaciones que nuestro IEEBA viene realizando hace mucho tiempo… “el gobierno argentino de los K -hipócritamente- simuló no adscribirse al Socialismo Siglo XXI” (1).
Se dijo peronista y gran parte del peronismo suicida lo aceptó y lo sigue aceptando cuando rechaza el desafuero del “honorable” De Vido. Los K se adscribieron a la “pseudo-revolución” y la ex presidente lo confirma actualmente con la ideología de quienes la acompañan en su candidatura al Senado Nacional, en las elecciones de Octubre de éste año.
El Socialismo Siglo XXI -o Chavismo- no es otra cosa que la continuidad del proceso revolucionario conducido por La Habana desde 1959 -hasta hoy- y en la presente etapa post-implosión soviética -1991- conducido por el FSP, en el que revistan estalinistas y social-demócratas, estos últimos citados normalmente como “progresistas” (2).
El “XXIII Encuentro” acaba de desarrollarse en Managua -Nicaragua- entre el 15 y el 19 de Julio de 2017, bajo dirección del sandinismo, por ausencia de su fallecido presidente/fundador -Fidel Castro- y de su vice-presidente -Lula-, sentenciado a nueve años de prisión, por corrupción.
El informe final del Encuentro expresa claramente: “Las fuerzas de izquierda y progresistas perdieron el control del Poder Ejecutivo en Honduras, Paraguay, Argentina y Brasil y resisten en Venezuela, Bolivia, Ecuador, Uruguay, Nicaragua y El Salvador”. Por estas razones la nueva directiva establece como nuevo objetivo “buscar la unidad de las izquierdas revolucionarias y organizar la resistencia, hasta que se inicie la contraofensiva”.
Entre “relatos” y falacias.
Llama la atención que el periodismo y los partidos políticos, en nuestro medio, no se hace eco de estos hechos políticos y estratégicos, centrales para el futuro de nuestra región iberoamericana. La “resistencia” está hoy en nuestras caóticas avenidas y autopistas, en las vaciadas instituciones, en la comunicación, en las aulas, en los sindicatos, en los transportes. Sin embargo, cuando se la describe en sus detalles, no se la cita como tal. Se habla del actor: “el piquete”. Pero no de su acción: “la resistencia revolucionaria”.
Tampoco lo hace el Gobierno. No se cita a la “revolución”, pero se afirma que no debemos regresar al pasado violento y ese mismo pasado está presente, con otras formas y en otra circunstancia. Se mira y no se ve. Se habla con el lenguaje simbólico del enemigo, con expresiones derivadas de una masiva comunicación psico-social de nuestro viejo enemigo, trasladadas a un nuevo “relato” que es determinante para las conductas fanáticas y condicionantes para los actores dubitativos o confundidos.
Lo que en verdad ha ocurrido es que el terrorismo revolucionario de los ’60 y ´70 ha mutado desde sus formulaciones estalinistas a las gramscianas, creando “falacias” encubridoras para que las mayorías de clase media “llegaran al comunismo, sin saberlo”. Hasta ahora el cambio de vía ha tenido un relativo éxito. Prueba reciente: la elección del nuevo presidente. Pero a su vez éste mismo presidente, que en la última reunión del Mercosur reclamó a Caracas por “los presos políticos en Venezuela”, tiene casi dos mil en su propia casa que aumentan constantemente -defunciones y nuevas incorporaciones de por medio- y no actúa.
Continúa -con absoluta vigencia en el 2017- la “política de derechos humanos -DDHH-”, conducida ahora por el Ministro Garavano y su Secretario Avruj, ambos bajo control y supervisión de los llamados “organismos de Derechos Humanos”, constituidos por simpatizantes de la “pseudo-revolución”, defensores de Maduro, de su dictadura y francos opositores -si no enemigos- del gobierno Macri. ¿Cómo se explica semejante paradoja? ¿Cómo se entiende semejante contrasentido?.
Hay quienes -aun estando presos- todavía esperan que las elecciones de Octubre “normalicen” su situación pues, después de ellas -dicen-, todo cambiará. Se terminará con “el curro de los DDHH”. Otros, más realistas, descreen de dicha probabilidad, pues la coalición gobernante tiene en su seno “progresistas de izquierda” y “progresistas liberales”, que en lo que tiene relación con la “política de derechos humanos” actúan tomados de la mano.
Hemos sostenido -desde el final de la guerra fría en 1991- que hay mucha confusión en variados dirigentes ideologizados, con bajísimo nivel de conocimientos políticos y estratégicos. No es lo mismo “derechos humanos” que “política de derechos humanos”. Los derechos humanos están en nuestra Constitución Nacional. Los defendió la Nación Argentina cuando el terrorismo revolucionario nos agredió -desde 1959-, con el objetivo de imponernos el partido único y una constitución comunista.
Estos objetivos revolucionarios aun se mantienen -como lo acaba de afirmar el XXIII Encuentro de FSP-, pero el procedimiento que hoy emplea para lograrlos ya no es a través de las “organizaciones armadas”. Estas han sido reemplazadas por “la política de DDHH”, conducida por los “organismos de DDHH” que emplean a parte del Estado Argentino como instrumento para alcanzar sus fines: al PEN -Ministerio de Justicia y DDHH, Secretaría de DDHH -querellante en todos los casos- y al Poder Judicial -la Justicia Penal Federal, consciente prevaricadora- que ha arrasado con la jurisprudencia penal argentina.
A su vez, la “política de DDHH” desplazó a la Política de Seguridad Nacional, mediante la colusión -en la posguerra- de nuestros enemigos de la segunda mitad del siglo XX: los británicos y los personeros actuales de la revolución neo marxista (3).
Esta maniobra colusiva, originada con el Decreto 158/83, a puesto a la Argentina en los umbrales del “estado fallido” y ha retenido el “estado de guerra civil revolucionario” hasta nuestros días.
No es solo Cristina ni el “populismo” lo que espanta a las inversiones o impide darle un mayor ritmo a la recuperación de la crisis generalizada que nos envuelve.
Cristina es solo el rostro, la imagen de superficie que oculta al proceso revolucionario que afecta a toda Iberoamérica, en la profundidad de los acontecimientos. El término “populismo” es solo el encubrimiento discursivo que evita llamar a las cosas por su nombre. Al pan, pan y al vino, vino.
En la Argentina aparentemente no existen los comunistas, pero la pseudo-revolución neo-marxista sigue su curso y sus actores, en superficie, son todos “democráticos”, pero aclaremos: son demócratas del partido único. Son quienes no hablan de la situación venezolana. ¡Qué esperan las cámaras del Congreso Nacional para expresar su repudio al criminal gobierno castrista de Caracas!
El complemento de la citada maniobra judicial originada por el Decreto 158/83 -que nos ha dejado sin FFAA y en total desamparo en lo que hace a la seguridad pública- ha sido la masiva acción psico-social desarrollada desde los años ´80, en tiempos en que los medios de comunicación eran estatales.
Hoy ese discurso continúa, bien disimilado por el escándalo de la corrupción de los gobiernos adscriptos al “chavismo”, aun en el caso argentino en el que la “revolución” fue contenida -en Diciembre de 2015- por elecciones libres, pero con un nuevo gobierno que carece del poder suficiente, dentro de su coalición, para enfrentar a las “vacas sagradas” creadas -en los últimos treinta y cinco años- por la “política de DDHH” que le imponen las “respetadísimas” comandantes de “abuelas” y “madres” y las leyes que originaron la actual inseguridad e indefensión -las de Defensa y Seguridad Interior- intrínsecamente perversas (4).
La Política de Seguridad Nacional.
Como ya lo expresáramos más arriba, la Política de Seguridad Nacional no existe. Ha sido reemplazada por la “política de DDHH” (5). Es suficiente -para comprobarlo- un análisis comparado de los Libros Blancos de la región, o bien observar la situación de inseguridad progresiva y generalizada, que ha pasado a ser la principal preocupación social.
Nuestra dirigencia política, frente a éste tema central -principal responsabilidad del Estado- y de cara a su electorado, ha defeccionado. El muro psico-político construido durante los últimos treinta y cinco años la ha paralizado. Es “políticamente incorrecto” tratar la actualización conceptual y orgánica de la Seguridad Nacional. La legislación que la rige fue desarrollada por los simpatizantes y herederos de las organizaciones terroristas-revolucionarias domésticas, en tiempo de la guerra fría. Con ellas lograron extrañar a las FFAA de sus misiones constitucionales y así pudieron avanzar contra nuestra cultura, nuestra educación, nuestra economía y alcanzaron la actual “grieta” social -la lucha de clases-, a un precio escandaloso de inseguridad, indefensión, muertes diarias de inocentes, corrupción institucional y conflicto social. Nos han llevado al borde del “Estado fallido”.
Mientras tanto, el mundo siguió andando. Contrariamente a nuestra parálisis socio-política y económica, nuestros vecinos y el mundo desarrollado dinamizó los cambios de estructuras, de conceptos y organizaciones de seguridad. Mientras está en debate la “séptima generación de la guerra” en el ámbito de los estrategas teóricos *, la anquilosada dirigencia política argentina y los responsables legos de nuestra Seguridad Nacional, continúan sordos, ciegos y mudos, mientras los riesgos y amenazas posguerra fría se agravan día a día y en las calles y avenidas los vecinos gritan por SEGURIDAD Y JUSTICIA. En nuestra querida Patria Argentina el “motor del reordenamiento de la Seguridad”* está fuera de servicio desde 1984, hace treinta y cinco años.
Por los motivos expuestos, quien suscribe los invita a acompañarnos con su voto en Agosto y en Octubre, para alcanzar a ocupar una banca en la Cámara de Diputados de la Nación, apoyando al partido “El Movimiento” – Lista 262- “Orden y Justicia”.
* César A. Niño González. “Séptima generación de la guerra: el terrorismo como motor del reordenamiento de la Seguridad”. 21 Jul 17. http://www.ieee.es/
(1). Heriberto J. Auel. “La larga guerra civil argentina y el actual estado de guerra civil-revolucionario”. 09 Jul 13. www.ieeba.com.ar
(2) Heriberto J. Auel. “El narcoterrorismo, el estado nación, la democracia y las FFAA”. 26 Abr 14. www.ieeba.com.ar
(3) Heriberto J. Auel. “Estamos en Guerra “por partes”. 05 Ago 16. www.ieeba.com.ar
(4) Heriberto J. Auel. “Democracia, FFAA, Seguridad y Sociedad”. Ponencia en Santiago de Chile. 21 Jul 11. www.ieeba.com.ar
(5) Mario Cadena Madariaga. “Los partidos políticos, las FFAA y la Defensa Nacional”. Mar 10. www.ieeba.com.ar
PrisioneroEnArgentina.com
Agosto 3, 2017